Pokemón nuevo reto

Capitulo 1 “La Nueva Aventura Comienza”


Era un hermoso día en la fantástica región Kanto, se podían ver lo exuberantes paisajes y claro tasmbien se podían apreciar diversos tipos de Pokemón. Nuestra historia comienza con un joven de un 15 o 16 años de edad llamado Ash Ketchum de tez morena, ojos color chocolate, cabello alborotado y una singular gorra roja; junto a él iba cierto roedor amarillo con cola en forma de rayo.

-Mira Pikachu nos acercamos al puerto de ciudad Carmín, muy pronto llegaremos a casa- decía el joven de gorra roja quien estaba entusiasmado por volver a casa, pero en su interior se libraba una batalla. “No lo puedo creer, me esforcé tanto para lograr ganar la conferencia Vertress. Pense que le podría ganar a Cameron pero al final perdí.”

-¿Pika pi?- Pikachu el roedor amarillo y compañero de ash desde que este le fue entregado por el profesor Oak hace casi 5 años sentía tristeza en su entrenador.

-Lo siento amigo, es que me duele tanto haber perdido y de nuevo quedar entre los ocho mejores cuando en Sinnoh quede entre los primeros cuatro- se notaba cierta decepción en nuestro héroe.

-Pika- fue todo lo que dijo el roedor.

-Pikachu, crees que esto de ser el mejor maestro Pokemón del mundo sea una estupidez.- decía el entrenador a su amigo –Creo que lo mejor será abandonaaargh…- fue todo lo que dijo pues su compañero y amigo le lanzo un potente rayo a su entrenador.

-Pi pika pi, pi pi pi pika pi, pi pika chu- (Traducción gracias google: “Mi mejor amigo jamás diría eso, el jamás se rendiría”)

Estas palabras animaron un poco al azabache, pues recordó todo lo que había logrado en estos últimos años, puesto a que es uno de los pocos retadores que consigue ganar Batalla de la Frontera en poco tiempo y además de ofrecerle de un puesto, además recordó cuando gano la liga Naranja y como conoció a todos sus amigos. Las innumerables batallas que vivieron, los viajes que hizo por Kanto, las Islas Naranjas, Johto, Hoenn, Sinnoh y Unova. Los grandes aventuras que vivió en tan solo cinco años.

-Sabes amigo creo que ya sé que voy a hacer- pikachu se alegro al ver que la sonrisa de su entrenador volvió y se subió a su hombro. –Pikachu llego la hora de conquistar Kanto-

-¡Pika Pi!-

-Pasajeros en 5 minutos arribaremos en el puerto de ciudad Carmín, por favor estense preparados para desabordar- decía un marino.

-Bueno creo que llego la hora, sabes que sería increíble que Gary volviera a participar el liga añil, no lo crees amigo- pikachu le sonrió a su entrenador.


5 MINUTOS DESPUÉS

-Perfecto, ya llegamos- decía el azabache con felicidad. –Creo que es hora de dirigirnos al centro pokemón no lo crees amigo- Ash voltea a ver a Pikachu, pero se da cuenta que el ya se durmió. –Descansa amigo te lo mereces- esto último en voz baja.

Ash recorre la ciudad viendo todo, a decir verdad le encantaba estar en ciudad Carmín aunque sea poco tiempo, pero lo que más le encantaba era la comida y como había muchos puestos de comida sus ojos brillaron como cuando un niño ve un juguete y se fue corriendo a todos los puestos.

(Descanse en paz el señor del puesto de tacos. Don Pepe 2012-2013L)

Una vez que casi acaba con los puestos de comida nuestro héroe se dirige al CP (nota: abreviare centro pokemón). Al momento de llegar un chico lo reto a una batalla 1 vs 1 a lo cuál nuestro querido héroe acepto.

-Parece que eres nuevo, así que pelearemos de una manera distinta- decía el retador.

-¿eh?

-Si pelearemos inicial contra inicial, para ver que tan bueno eres.- decía el chico, quien no repasaba los 10 años.-Sal charmander y demuéstrale a este idiota de lo que somos capaces de hacer- lanzando una pokebola de cual salió un lagarto naranja con una llama en la cola.

-Char- dijo el pokemón del retador.

-Genial tu pokemón inicial es un charmander, eso es fabuloso- decía Ash.-Bien creo que me toca a mí, estás listo Pikachu- el roedor salto del hombro de su compañero y se posiciono en el campo de batalla.

-¡Hey te dije que solo iniciales, pikachu no es un inicial!- grito le retador. –Los iniciales son charmander, squirtle o bulbasaur, pikachu no lo es.- Replico el entrenador.

-Hay un pequeño detalle, mi inicial no fueron ninguno de ellos- dijo el azabache

-¿A qué te refieres?-

-Mi primer Pokemón fue Pikachu.-

-Ya veo, de todas formas eres una basura así que… ¡CHARMANDER LANZALLAMAS!- grito el chico con todas sus fuerzas.

-Pikachu, esquiva y usa impactrueno ya- le dijo el azabache a su pokemon el cual esquivo el ataque y lanzo el ataque a Charmander el cual lo esquivo sin ninguna orden.


-Vaya, parece que no eres una basura-


-¡POR SUPUESTO QUE NO LO SOY!-grito el azabache.


-Bien, charmander arañazo y luego lanzallamas- decia el retador.


-¡Char!-grito la lagartija naranja para arañar a pickachu y lanzarle un poderoso lanzallamas el cual por desgracia impacto en él.


-!Pikachu resiste! grito el joven entrenador y cuando noto que pikachu estaba vien le dijo -es hora !TACLEADA DE VOLTIOS YA!


El roedor comenzo a correr muy rapido y su cuerpo se cubrio de electricidad iba corriendo a una enorme velocidad.


-¿QUÉ?- se asombro el retador -Para que pikachu pueda aprender ese ataque se reuiere mucho entrenamiento y estar de un nivel 50, eso quiere decir que... eso quiere decir que... !ESO QUIERE DECIR QUE TU ERES ASH KETCHUM!- grito el joven entrnador.


-CHAAAAAAAR- grito el charmander al caer al suelo quedando completamente noquedo por el ataque de pikachu.


-Charmander regresa- dijo el retador- ¡ESO FUE ÍNCREIBLE!-


-De nada, pero cómo sabes mi nombre- le cuestiono Ash al joven entrenador.

-Es fácil tu eres famoso en todo Kanto, por ser uno de los mejores en cada liga a la que asistes. Además eres campeon de la liga naranja y gandaor de batalla de la frontera.- dijo el jóven con mucho entusiasmo la razón Ash es su héroe.

Esta historia continuara.

Cualquier comentario es bien recibido, como soy nuevo no se mucho sobre esto pero solo espero que le den una oportunidad.

 

Bueno este es el segundo capitulo de mi fic y espero que les agrade
Capitulo 2: "Más sorpresas y viejos conocidos"

-Es fácil tu eres famoso en todo Kanto, por ser uno de los mejores en cada liga a la que asistes. Además eres campeon de la liga naranja y gandaor de batalla de la frontera.- dijo el joven con mucho entusiasmo la razón Ash es su héroe.

-¿Soy famoso?- preguntaba algo incrédulo nuestro héroe.

-Si es más tu eres uno de los mejores entrenadores de todos los tiempos, esto se debe a tu fenomenales participaciones en cada liga o torneo al que asistes en cada región siempre quedando entre los 8 mejores. Eres tan famoso que apareciste en un top 7 de los mejores entrenadores del mundo según Dross.- decía entusiasmado nuestro nuevo amigo al saber que Ash no tenía la menor idea de que era famoso.

Ash no podía creer lo que estaba escuchando que era famoso, bueno tal vez eso explicaría el por qué no le cobraron en los puestos de comida hace rato y por qué unas personas se le quedaban mirando sorprendidas.

-Eso explica mucho, no lo crees pikachu- dijo volteando a ver a su pokemón el cual solo asintió. –Oye pero no creo ser uno de los mejores entrenadores del mundo, acaso no viste mi participación en la liga Unova- esto último lo dijo un poco triste al recordar como fracaso frente a Cameron y su recién evolucionado Lucario.

-La verdad es que eres uno de los mejores, ya que ningún otro entrenador ha podido derrotar a los ases de la batalla de la frontera, es más nadie ha podido llegar a enfrentar a Brandon. Desde que un novato de gorra roja y un pikachu en el hombro los venció se dice que se pusieron a entrenar muy duro y por eso muy pocos llegan a conseguir los símbolos.- decía nuestro nuevo amigo quien nos recordaba un poco ha cierto entrenador de vestimentas rojas del videojuego.

-Vaya yo no sabía eso- decía Ash al sorprenderse que él fue el último entrenador que venció a Brandon, incluso Pikachu parecía sorprendido.

-Eso no es todo- decía el joven quien también tenía una gorra roja.

-¿Ah no?- decía incrédulo el azabache

-No, cuando venciste a Drake y te convertiste en campeón de la liga Naranja, los líderes de gimnasio en las islas entrenaron y están al par de la Elite Four. De hecho tú eres el último campeón de la liga naranja pues paso a convertirse en la actual Conferencia de Batalla Naranja. De hecho la campeona de Sinnoh no pudo vencer a Drake y se le complico mucho para conseguir las medallas.- decía el joven entrenador de vestimentas rojas y pelo negro.

-la campeona de sinnoh… ¡¡¡ME ESTAS DICIENDO QUE CYNTHIA UNA DE LAS MEJORES ENTRENADORAS NO PUDO VENCER A DRAKE!!!- decía impresionado al escuchar que un campeón no pudo con Drake, por lo que se preguntaba que esas competencias ya estaban a otro nivel.

-Así es, la Conferencia de Batalla es muy dura y es una de las razones por la que hay tan solo cuatro medallas y aparte tienes que cumplir los retos de los líderes de gimnasio para luchar contra ellos y así obtenerlas.- afirmándole a nuestro héroe y haciéndole recordar lo duro que fue conseguirlas durante su viaje con Misty y Tracey.

-Vaya, como ha cambiado todo mucho en los último años no lo crees Pikachu- le preguntaba Ash a su mejor amigo quien estaba en su hombro derecho.

-Pika pi- afirmo el roedor.

Mientras tanto una persona de pelos castaños alborotados vestido con una chaqueta verde debajo de ella una playera negra y unos pantalones de mezclilla corría a toda velocidad, al parecer estaba buscando algo o a alguien y se acercaba a toda velocidad donde se encontraban nuestro héroe y su nuevo amigo.

-Maldición ¿a donde se fue?- se preguntaba mientras corría –Si no lo encuentro ella va a llorar y me va a culpar a mí y no quiero recibir otro ataque eléctrico de “chuchu”. Maldita sea ese pichu si me dejo noqueado esa vez- pensaba el castaño mientras maldecía la suerte que tenía.

Después de correr unos cuantos metros más llego a donde estaba nuestro héroe y su nuevo amigo que vestía de rojo. El castaño freno de golpe al parecer se quedo impresionado con lo que estaba viendo. –No puede ser… pero… pero si es… es Ash- pensaba el de pelo castaño al observar a cierto entrenador de gorra roja y zetas en las mejillas que junto a él estaba un pikachu y a lado el entrenador del charmander, quien al parecer se había asustado al verlo. -¡¡¡MALDITA SEA RED, DONDE RAYOS TE HABÍAS METIDO, LLEVAS MÁS DE 5 HORAS PERDIDO!!!- gritaba el castaño enojado viendo al entrenador del charmander quien al parecer responde al nombre de Red.

-Gr… Green… puedo explicarlo- decía Red con cierto temor al chico de cabellos quien al parecer se llamaba Green.

-Haber, dame una buena explicación para que no te mate en este mismo instante- decía Green muy tranquilamente lo que ocasiona más temor al entrenador del charmander y dejo un poco confuso al entrenador de Pikachu. –Bien me vas a decir que estuviste haciendo 5 horas afuera, no espera 6 horas y no me avísate a donde ibas- decía Green con una mirada acusadora a quien parece ser su amigo.

-Lo lamento- se disculpaba el entrenador de vestimentas rojas pasándose su mano detrás de la cabeza –lo que pasa es que me encontré con Ash el último ganador de Battle Frontier y lo rete a una batalla, bueno yo no sabía que era Ash, hasta que su pikachu uso tacleada voltios contra charmander dejaba fuera de combate- decía Red tratando de convencer a Green de que no lo mate o torture.

-Ok, está bien… pero igual vas a morir- decía Green a punto de sacar una pokebola.

-Pero porque Green si aquí esta Ash como prueba de ello- señalando al entrenador de su Pikachu quien seguía un poco confundido –Además dudo que le hagas daño a Ash- decía Red quien parecía muy confiado.

-Obvio a él no le voy a hacer nada, a él ya lo conozco desde antes Red, el es mi amigo y de mi primo Gary- decía Green señalando a Ash y dejando a un Red sorprendido. –La razón por la que te voy a asesinar es por haberte ido sin decirle nada a la enfermera Joy. Además de que fui amenazado por Yellow, quien estaba llorando pensando que te había pasado algo malo y me amenazo con usa a “chuchu” si no te traía de regreso- aclaraba el castaño.

-Espera Red, no hagas algo de lo que te puedas arrepentir- Red cierra sus ojos esperando que Arceus se apiade de su alma pero lo que no sabe es que Arceus anda de fiesta con el trío Dragón y no puede hacer nada para salvarlo de la furia de Green.

-Pi Pika pi pi pika pi, pi pikachu pika pi, ¿Pika pi pika chuchu? (Traducción gracias a Google: Espera no creo que dabas hacerle nada, espera ¿Dijiste Yellow y chuchu?)- decía pikachu volteando a ver a su entrenador.

-Green, espera de casualidad no es una niña rubia que usa un traje amarillo y tiene un pichu-

-Si por, espera ¿conoces a Yellow?- preguntaba Green arqueando una ceja mientras agarra a Red de la camisa poruqe se estaba alejando.

Esta historia continuara

Que les parecio el Fic bueno o malo sean honestos aspto tarjeta de credito

 

Bueno aquí esta la conti recién salida del Horno.
El fic incluira a los personajes del Manga, y tambien otros personajes. Si preguntasn si Ash tendra una acompañante nueva es sí y no puesto a que no es una acompañante si no varias, dos ya las vimos en la serie y no no habra contenido sexual, esto definira un poco mejor mi historia. que la disfrute y coman frutas y verduras.

Capitulo 3: "Llegada al Centro Pokemón y más sorpresas"

-¡¡Suéltame Green soy muy joven para morir!! Decía sollozando mientras era sujetado de la camisa por un Green que ni le estaba poniendo atención.

-Así es, conozco a su amiga- decía Ash asintiendo mientras cierto roedor lo imitaba.

-Ahora soy el único que no conocía a Ash hasta el día de hoy, mi vida apesta- decía cierto entrenador todavía sujetado de su camisa con la cabeza baja.

-Que bien así podrás reparar el error de este tonto- decía Green mientras ponía a Red enfrente de Ash.

-Para mi defensa, soy un entrenador que le encantan las batallas y… ¡suéltame Green te he dicho que me sueltes! No quiero morir todavía ni tengo mi primera medalla ni siquiera he capturado otro pokemón.- decía Red sollozando mientras le suplicaba a Green que lo dejara vivir por lo menos hasta que comience la liga Añil.

-Bueno Green, me podrías llevar al centro Pokemón sería bueno pasar a ver a Yellow y a chuchu- le decía a Green el cual solo asintió y le perdono la vida a su amigo/rival Red.

-Bien entonces vamos al centro pokemón- decía Red saliendo corriendo de ahí en dirección al Centro Pokemón pero…

-¡¡RED EL CENTRO POKEMÓN ESTA EN SENTIDO CONTRARIO!!- le gritaba Green a su amigo.

-Ya lo sabía Green- esta vez salió corriendo en la dirección correcta.

Ash, Pikachu y Green iban de tras de él para que no perdiese en las batallas y poder llegar a donde Yellow lo más pronto posible. Mientras tanto en el centro Pokemón de Cd. Carmín se encontraba la Oficial Jenny y la enfermera Joy ah lado de una niña que parecía tener ocho años pero la verdad ya tenía once. En su hombro se encontraba un Pichu quien parecía preocupado por su entrenadora ya que esta estaba muy triste.

-Así que tu amigo se llama Red y no ha parecido en seis horas- apuntaba cierta oficial de cabello azul y uniforme azul.

-Sí así es, me da miedo que se pierda o peor aún que se lastime o lo asalten- al decir esto último unas lagrimas salieron de sus ojos.

-Descuida con lo que me contaste sobre él seguro que anda teniendo unas batallas por ahí- decía una enfermera de cabello rosado.

-Sí igual notificare a todos los oficiales en servicio por si lo ven- tras decir esto la oficial agarra su radio apunto de llamar cuando cierto entrenador de vestimenta roja entro corriendo muy rápido al centro pokemón chocando en la recepción de este.

-¡¡¡AYY, MI CABEZA, AAAHHHH!!!- decía nuestro nuevo amigo con unas lagrimas muy cómicas en los ojos.

-¡¡¡RED!!!- grito la niña corriendo a abrazar a su amigo quien estaba tirado en el suelo sobándose la cabeza.

-Hola Yellow- decía Red mientras era abrazado por Yellow quien parecía estar feliz y menos preocupada por él.

-Red no vuelvas a asustarme así, no quiero pensar que te haya pasado algo malo- mientras lo abraza más fuerte. –Por cierto Red ¿Dónde está Green?- preguntaba la entrenadora viendo a Red.

-Bueno creo que todo esto ya se soluciono- decía la oficial Jenny

-Sí eso parece- le decía Joy a Jenny al ver como Red era abrazado por Yellow.

Mientras tanto, dos personas entraban al centro Pokemon uno tenía in pikachu en su hombro una gorra roja con una pokebola y una atuendo azul con blanco, en cambio el otro sujeto parecía tener 11 o 12 años era de pelo castaño y recordaba en cierta manera al rival nuestro héroe.

-Al fin ya llegamos al Centro Pokemón- decía el azabache –Vaya ha pasado tiempo desde la última vez que estuve aquí.

-Vaya que eres viejo Ash- decía Green con un tono de burla y respeto, el cual solo pudo notar Pikachu.

Antes de que Ash pudiera decir algo Pikachu salto de sus hombros y fue corriendo a donde estaba Red.

-Oye Joy, ese no será el Pikachu de…-

-Así es Jenny, ese es el Pikachu de Ash, eso quiere decir que…-

-Pikachu vuelve aquí- de repente el azabache se paró de golpe a ver a la Oficial Jenny y a la enfermera Joy enfrente de él.

-Ash es bueno volver a verte- decía la E. Joy

-Es genial que este de regreso en Kanto- decía la oficial Jenny. –Solo espero que tu amigo Brock no me intente conquistar de nuevo- lo último lo dijo con un poco de risa

-Espero que no, pobrecito, espero que algún día halle el amor- decía la enfermera Joy con un poco de lastima.

-Ya saben como es con las chicas, solo espero que algún día de estos no resulte lastimado por ser como es- decía el azabache a la O. Jenny y a la E. Joy.

- ¡¡¡PIKACHU!!!- se escucho un fuerte grito de alegría y sorpresa como de una niña. En efecto cierta niña de vestimentas amarillas estaba abrazando al roedor con alegría y curiosidad y se olvido completamente de su amigo quien se libero de su abrazo y se paro. –Oye pikachu, si tu esta aquí, eso quiere decir que…-

-… así es estoy aquí- decía Ash con una sonrisa a la niña rubia quien sostenía entre sus brazos a Pikachu.

-¡Hermanito!- corría la niña a abrazar a Ash soltando a Pikachu para que se reencuentre con Pichu. –Ash te extrañe mucho… gracias por el regalo- decía llorando la niña mientras abrazaba fuertemente a Ash y este la cargaba.

La oficial Jenny, como la enfermera Joy, Green y Red esta conmovedor escena y se preguntaban todos ¿cómo qué Ash tiene un hermana? Pero Green y Red se preguntaban ¿cómo es que Yellow es hermana de Ash?, ya que no tenían enterado que Ash tuviera una hermanita menor.

-Y ¿te gusto?- pregunto el azabache bajando a su “hermanita”.

-Sí- afirmando con mucha alegría la "hermanita" de Ash.

----------------------------------------------------Flashback-------------------------------------------------------------------------------------

-Bien así que ustedes desean tener ya su primer pokemon- decía un hombre mayor por su cabello estaba canoso y llevaba una bata de laboratorio. –Deben saber que tener un Pokemon es una gran responsabilidad y deben cuidarlo y entrenarlo- concluyo la charla a los tres jóvenes quienes son nada más ni nada menos que Red, Green y Yellow.

-Si sería genial, poder batallar contra ti Green-

-Lo mismo digo red, bueno creo que ya sé que pokemón escogerás.-

Entonces Red y Green agarran las dos Pokebolas que había y las lanzan liberando sus dos nuevos compañeros.

-Char/Squirtle- dijeron los dos pequeños corriendo a donde sus amos estaban, squirtle fue con Green y charmander con Red. Yellow quien vio a los dos nuevos pokemon estaba ansiosa por que le entregaran el suyo. Pero fue todo lo contrario, el señor grande ya había dado la pokebola de bulbasaur a una viajera que ya había pasado antes que ellos.

-Hey, y mi pokemon, ya tengo 10 años, así que ya puedo iniciar mi viaje- decía Yellow enojada mientras inflaba sus mejillas.

-Descuida Yellow, el Profesor Oak de seguro te va a traerte un charmander- decía Red quien se había parado a lado de ella y había regresado a charmander a su pokebola. –Además Profesor no tiene más Pokemón haya atrás, por lo que vi, yo creo que sí- decía Red intentando convencer al Profesor Oak, pues este tenía un bulbasaur.

-Si lo dices por el bulbasaur de haya atrás, no lo puedo entregar pues le pertenece a un entrenador de Pueblo Paleta.- decía el profesor a Red ya Yellow pues el bulbasaur es uno de los pokemón de Ash, pero este par no lo sabía, por lo que Yellow bajo la cabeza en señal de tristeza, tanto Red como Green estaban pensando en una solución pero de pronto el Profesor Oak dijo algo que los sorprendería a todos. –Pero cierto amigo tuyo me dio un regalo esperando a que cumplieras 10 años para poder dártelo y creo que lo conoces muy bien.-

-¿Un regalo para mí?- pregunto algo incrédula pues sabía que es día no cumplía años. Red y Green se voltearon a ver.

-Sí, cierto entrenador de este pueblo me dejo un regalo. Ten tómala- dijo el profesor Oak sacando de su bata una pokebola con un rayo en ella y entregándosela a Yellow

-Gracias pero ¿quién me la dio y por qué solo a mí?-

-Esto se debe a que te considera una hermana menor y como no llegaría el día de hoy me dijo que te la entregara-

-No me diga que él-

-Así es Yellow- dijo el profesor finalizando, el noto la alegría de Yellow en el rostro.

----------------------------------------------Fin del Flashback-----------------------------------------------------------------------------------

-Bueno solo espero que cuides muy bien a Pichu- le decía a Yellow quien otra vez le abrazo aun con más fuerza y diciéndole.

-Sí, pero se llama “chuchu”- le respondía la rubia quien aun tenía lagrimas en los ojos.

-Ok, entonces cuida a “chuchu”- le decía a Yellow y así finalizando el abrazo.

Bien este es el cpitulo que hoy podre subir. Espero poder seguir teniendo más ideas bien hasta pronto.

 

Bueno este es el siguiente capitulo, quise adelantar un poco más a los personajes. Bien aquí ya vemos la entrada de la nueva compañera de Ash. Espero que les guste.

Capitulo 4 "Lágrimas y felicidad"



-Oye Ash, no sabía que tenías una hermanita menor y que esta fuera Yellow.- decía Green impactado por la noticia que recibió puesto a que sabía que Ash era hijo único pues él y Gary fueron amigos hasta el inicio de su viaje.

-Si Yellow, cuando me ibas a decir que eras hermana del mejor entrenador del mundo- decía Red con cierto enojo pues es un gran fan de Ash y aparte de ser el mejor amigo de Yellow.

-Si Ash, jamás nos contaste que tuvieras una hermanita- decía la oficial Jenny pues ella tenía registro de todas las personas originarias de Kanto y sabía bien que Ash no tiene hermana por lo que se quedo muy sorprendida ante tal revelación.

-De hecho Ash y yo no somos hermanos- decía Yellow terminando con la duda. –Les contare la historia les parece-

----------------------------------------------------------Flashback------------------------------------------------------------------------

Era un día oscuro y lluvioso, se podía apreciar a cierta niña con un sombrero de paja e impermeable corriendo muy rápido por el bosque, parecía perdida, tal vez tenía 5 o 6 años. Al ver como la tormenta se volvía más fuerte intento buscar refugio en un árbol el cual tenía un agujero un hueco muy grande.

-Papá tenía razón no debí de haber ido al bosque a ver a los pokemón salvajes- de lamentaba esa niña llorando mientras se abrazaba sus rodillas. De pronto escucho que algo se movía en los arbustos -¿¿¿Quién… quién… quien anda ahí???- decía Yellow entre lagrimas y asustada pues la fuerte tormenta se intensificaba cada vez más.

-Pika Pi- gritaba un pikachu y se metía al hueco del árbol donde estaba Yellow.

-Voy para allá Pikachu, no te muevas- se alcanzo a oír a lo lejos la voz de un joven tal vez de unos 10 u 11 años de edad.

-¿Pika?- se cuestino el roedor amarillo al ver como la niña estaba asustada.

-No me hagas daño- decía la niña cerrando sus ojos y temblando por el frío que además hacía. Yellow se sorprendió al ver que el Pikachu se acurruco en ella haciendo que Yellow lo abrase.

-Cha- respondía pikachu demostrando que confiaba en aquella niña la cual no conocía pero le daba seguridad a ella para que no llorara.

-Pikachu, ¿estás aquí?- pregunto un entrenador de gorra roja y chaleco azul con blanco, pero se quedo sorprendido al ver una niña pequeña que al parecer estaba asustada abrazando a su compañero y temerosa por ver a esa persona.

-Por favor no me hagas daño- decía la niña entre lagrimas aun abrazada del roedor amarillo.

El joven se sentó frente a Yellow y le dijo con una cálida sonrisa –Descuida no voy a hacerte daño. Veo que estás sola y asustada, toma ten- decía el joven entrenador dándole su chaqueta al notar que Yellow estaba mojada y temblando de frío. –Mi nombre es Ash Ketchum, al parecer ya conociste a mi amigo Pikachu- decía presentándose, de alguna manera Yellow ya no estaba llorando, de hecho ya no había porque llorar ese joven llamado Ash le daba mucha seguridad a Yellow, era como si tuviera… un hermano mayor.

Como la noche y la tormenta iban a ser largas Ash se acomodo muy bien pero noto que cierta personita le estaba abrazando junto con un roedor amarillo.

-Ash te puedo pedir… te puedo pedir… un favor…- decía Yellow un tanto tímida.

-Sí ¿Cuál es?-

-Serías mi hermanito mayor- esto último lo dijo muy rápido y cerró los ojos esperando un no como negación pero en vez de eso, Yellow recibió una caricia en su cabeza y volteo a ver a Ash.

-Yellow… te prometo que siempre seremos hermanos- tras decir esto Ash abraza a Yellow como cuando un hermano abraza a su hermanito o hermanita.

-----------------------------------------------------Fin del Flashback--------------------------------------------------------------------------

-Y así es como Ash se convirtió en mi hermanito, fin- Yellow cerró los ojos en señal de orgullo y no se percato de lo que sucedía alrededor.

-Ah… hermanita, creo que tienes que ver esto-

Yellow abrió los ojos y para su sorpresa noto que todos en el centro Pokemón estaban llorando incluidos sus amigos Green y Red, así como la Oficial Jenny y la Enfermera Joy.

-Red Hermano, te quiero, lamento haberte humillado todos estos años- decía Green llorando y abrazando de manera cómica a Red quien hacía lo mismo.

-Yo también te quiero hermano-

-Jenny, dime que siempre seremos amigas- le decía la enfermera Joy abrazando a la oficial Jenny como lo hacían Red y Green y todas las personas que escucharon la historia que ere más o menos… todo el centro Pokemon.

-Si Joy, pero, mejor seamos hermanas aunque yo tenga que ser la mayor- decía la Oficial Jenny llorando.

Toda esta escena provoco que nuestros “hermanitos” le provocaran una gota de sudor. Tuvo que pasar una hora para que el centro pokemon se tranquilizara, cuestor héroe decide salir a caminar dejando a sus pokemon al cuidado de la enfermera Joy y a Pikachu con Yellow quien también Ash le entrega su gorra, en cambio Red y Green salen pero ellos deciden retar entrenadores. Regresando con Ash quien al parecer había llegado a un parque no muy lejos del centro Pokemón.

-Vaya, con todo lo que paso, aun no sé si decidirme continuar siendo entrenador, o volverme coordinador como May y Dawn. Sé que ellas son muy buenas, pero, no he sabido nada de ellas en los últimos meses, sobre todo de May. Si decido convertirme en investigador, podría usar los datos que guardo en la Pokedex y las experiencias que he tenido a lo largo de los años, pero eso no es lo mío. Creo que lo consultare con Gary y el Profesor Oak una vez que llegue a Pueblo Paleta.- pensaba Ash para decidir qué hacer en el futuro.

Mientras tanto en la dirección contraria a la de Ash, una chica como de 15 años corría en dirección contraria al del entrenador, de cabello azul cielo y graciosas coletas, vestida de una sudadera blanca, y un una playera rosa debajo de esta. Al parecer la chica estaba llorando pues tenía los ojos cerrados, y de él caían lágrimas por lo que no noto a nuestro joven entrenador, por lo que choca contra él cayendo ambos al suelo.

-Lo lamento mucho, no me fije por donde iba y…- nuestro entrenador noto que la chica estaba llorando pues cuando voltio a verla muchas lagrimas caían de su rostro. –Oye, no llores por favor… no fu mi intención…- decía Ash intentando hacer que parara de llorar. –“ahora que hago… ya sé”.

El entrenador se para del piso y sin que ella supiera también la levanta, pero ella no quería ver a la cara a nuestro héroe. –Por favor mírame a la cara- decía el entrenador tomando de los hombros a la chica de pelo azul. Ella de alguna manera volteo a ver a la cara al entrenador algunas lagrimas salían de sus ojos, lo cual Ash noto, aparte que sus ojos eran como dos esmeraldas. –Lamento haberte tirado al suelo y si es por eso qué lloras, me puedes disculpar. No fue mi intención, pero no creo que una chica bonita como tú deba de llorar por algo como esto- decía Ash, quien al pasar los años había madurado un poco en el ámbito de cómo tratar a las chicas y que la Profesora Juniper como Iris le tuvieran que enseñar a hacerlo.

De alguna manera la chica de cabellos azul cielo y coletas graciosas, paró de llorar, su ojos no paraban de ver esos ojos color chocolate. –Gracias- fue todo lo que dijo, pero apenas y Ash lo alcanzo a oír y vio como la chica se le abalanzo encima, abrazándolo y llorando sobre su pecho.

Ash no tenía que ser analítico para saber que la chica que lo estaba abrazando había sufrido, pues con los pocos segundos que pudo verla a los ojos noto, que, dentro del corazón ella se encontraba destrozado, había sufrido. Al momento de notar que lo estaban abrazando, él la abraza y le dice –Te voy a cuidar- esto último y que Ash le acaricio su cabeza ruborizo a la chica quien poco a poco paraba de llorar.

-Ah, por cierto se me olvido presentarme, mi nombre es Ash Ketchum, del Pueblo Paleta y…-

-Marina-

-¿Ehh?-

-Marina, mi nombre es Marina- la chica se presento, y volteo a ver de nuevo a Ash, y aunque sus ojos estaban vidriosos le mostro una sonrisa al entrenador.

-Marina, ¿Quieres ir por un helado?- preguntaba el azabache, con una sonrisa en su rostro.

-Pero no tengo, dinero y apenas te conozco y vas a gastar dinero en mi y…-

-No importa, mientras tanto te parezca la idea te comprare un helado-, el entrenador dijo esto en un intento de darle confianza a su nueva amiga.

-Sí, gracias- fue todo lo que pudo decir, pues ya no estaba triste, estaba feliz y por algún motivo sintió una gran confianza, algo que había en él, sentía que… lo quería.

-Bueno, pues vamos- al decir esto último Marina la chica de ojos esmeralda se fue con el joven que cabellos alborotados fueron a buscar ese sabroso postre.

Bien esta es la continuación y gracias por leer este fic, se que no es muy bueno pero conforme avance la historia se ira haciendo un poco más oscura. Gracias y hasta la próxima.

 

Muy bien aquí les traigo el nuevo capitulo, creo que es el más largo hasta ahora. Bien mientras pasa la historia más oscura se va a volver. Aquí sabremos un poco más sobre Marina, pero no todo. Sería genial traer a viejos rivales, creo que traere a Ritchie del exilio.

Ritchie: Gracias aniber, al menos tu no te olvidaste de mi

aniberadrián: No, pero no saldras hasta la segunda temporada, y finales de la primera.

Ritchie: Pero yo quería pelear con Ash.

Bueno mientras encierro a Ritchi les traigo el capitulo:

Capitulo 5: "El pasado puede ser doloroso"

Pasaron unos minutos, tanto Ash como Marina llegaron a una heladería muy cerca del parque. Marina al parecer estaba feliz, tal vez sea por comer un delicioso postre o porque, cierto joven le ofreció su amistad. De repente sin previo aviso se escucho un ruido, como un rugir.

-Ah, ¿Qué fue eso?- pregunto Ash, y nuevamente se volvió a oír, se volteo a ver de dónde provenía el ruido y para su sorpresa venía del estomago de Marina. –Marina- esto último lo dijo de una forma tierna al ver como la chica baja la cabeza en señal de vergüenza.

-Lo siento- lo dijo con un tono de miedo, miedo porque el chico pensara mal de ella.

Ash puso su mano en el hombro derecho de marina y le dijo con una cálida sonrisa –Esta bien, no te preocupes. Se lo que se siente tener hambre- esto último al parecer hizo que la chica de pelo azul cielo se ruborizara.

Ash y Marina fueron al mostrador a escoger que helado comprarían. Ash noto que marina se quedo viendo el banana Split, por lo que le pidió al heladero un banana Split para ella y para él un cono sencillo. Marina escucho a Ash y le dijo que no debía hacerlo. Mientras el heladero preparaba el banana Split noto a la peli-azul y espero en prepararla.

-Ash yo no podría comer mucho helado, además…- Marina no pudo terminar, puesto a que su estomago decía todo lo contrario.

Ash sonrió y dijo –Bueno… y que tal si lo compartimos, puesto si no te molesta claro está.-

Marina solo asintió, y el heladero les entrego un hermoso Banana Split, junto con dos cucharas. Al parecer Marina había quedado fascinada por el hecho de que se veía muy rico. Se fueron a sentar a una mesa. Ash solo podía ver como Marina comía el helado muy rápido y como se le congelaba el cerebro lo que causo risas entre ellos.

Mientras tanto con nuestros amigos Green y Red, quienes iban a retar a algunos entrenadores divisaron a lo lejos un campo de batalla donde se estaba haciendo como una mini liga.

-Vaya, sería bueno ganarle a estos perdedores.- decía Green –Para luego demostrarte quien es el mejor, otra vez.-

El último comentario enojo un poco a Red, pero este deseaba competir contra todos ellos sin importar el costo. –Muy bien Green, es hora de combatir-

-Sí- afirmo Green

-Oye Green, le pediste a la Enferemera Joy las pokebolas-

-No, pensé que tú lo hiciste-

-No, ahora solo seremos espectadores y yo que quería luchar-

-Mira, ese entrenador no es Chano y su Rattata-

-Al parecer sí, y parece que se va a enfrentar a un squirtle-

-Eso parece, pero no creo que pueda. Tan solo míralo tiene una gorra como tú, en actitud son iguales, pero el pelea con un rattata.- dijo Green molestando mucho a Red.

-Voy a pasar eso por alto- Dijo Red un tanto molesto, mientras Green reía.

En la arena de batalla un entrenador de playera amarilla, pelo castaño y gorra azul, se va aenfrentar a un squirtle con su rattata.

-Estás listo amigo- decía Chano a su fiel compañero.

Muy bien esta batalla será una pelea de 1 vs 1. El entrenador Chano con su rattata contra Kevin el entrenador de squirtle.

-Bien Squirtle enseñémosle a este fanfarrón que su rattata no es el mejor pokemón de todos.- decía Kevin quien vestía con sudadera blanca y pantalones rojos. Su cabello era rubio y se parecía un poco a Kalm el personaje de Pokemón XY.

-Bien Rattata usa velocidad- el rattata desapareció de la vista de todos, nadie lo podía creer. Las caras de asombreo en Red y Green aparecieron, pues ellos sabían que el pokemon más fuerte de Chano es su wartotle. De la nada apareció rattata a un lado de squirtle.

-Bien mordida, ahora.- dijo Chano lo que provoco que mordiera a squirtle.

-Squiertle, usa rayo burbuja en Rattata-

-Squiro- dijo el pokemon de Kevin, mientras lanzaba muchas burbujas que impactaron en el rattata, pero no lo dejaron fuera de combate.

-Bien amigo, es hora de finalizar. ¡¡¡Rattata usa velocidad y finaliza con cola de hierro!!!- dejo Chano, mientras la gente veía asombrada como el rattata seguía las ordenes al pie de la letra.

-Squirtle chorro de agua- dijo Kevin, pero era demasiado tarde Rattata ya había golpeado a Squirtle dejándolo fuera de combate.

Mientras tanto toda la gente veía sorprendidos al ver como un rattata podía sincronizarse de esa manera. Green y Red se impresionaron, ya que ellos sabían que rattata solo conocía velocidad.

-Vaya, Chano es mejor que tu Red.- dijo Green

-Callate, soy mejor que él. Pero de todas formas avanzo muy rápido en tan pocas semanas. Green creo que tenemos cuidarnos. Creo que es momento de entrenar si no queremos que nos derrote.- finalizo Red la conversación pues se quedaron mirando a Chano quien le daba la mano a Kevin en señal de respeto.

Mientras tanto, en cierta heladería que se encontraba cerca del parque de ciudad Carmín. Una chica de sudadera blanca con playera rosa de cabello azul cielo, estaba platicando con un entrenador de playera negra, chamarra azul y de cabellos alborotados, estaban degustando de un delicioso helado hasta que…

-¿Por qué lo haces?- pregunta chica de cabellos azulados.

-¿Hacer qué?- pregunto el chico de chamarra azul y ojos color caramelo.

Dejando su cuchara a un lado, Marina se quedo mirando al entrenador. -¿Por qué me… me…? , la chica no pudo articular una palabra pues se empezó a sentir extraña.

-Si quieres saber, porque dije eso hace rato…- decía Ash mirando fijamente a la chica de ojos esmeralda, -lo dije porque era lo correcto.- dicho esto procedía a comer un poco más de ese manjar frío que tenía enfrente.

Marina se quedo impresionada al escuchar las palabras de Ash. Ella no lo notaba, pero un viejo sentimiento estaba resurgiendo en su interior. Ese sentimiento que al parecer resurgía desde un herido corazón, estaba dándole una felicidad a Marina. Nuestra amiga se llevo sus manos al corazón esperando saber qué pasaba.

Ash noto que muchas lágrimas caían del rostro de su nueva amiga, el pensó que la había lastimado. De repente se sintió muy mal, el no era de esos hombres que hacían llorar a una mujer. –Por favor, perdóname- dijo el entrenador de chamarra azul. –No era mi intención lastimarte.-

-¿Lastimarme?- dijo Marina extrañada por lo que decía aquel chico, en ese momento noto que aquel chico de ojos caramelo tenía la cabeza baja. –Ash… tú no me lastimaste.- enseguida noto que el azabache subió la cabeza con duda y asombro –Mejor dicho… tú me ayudaste…- esto último entre lágrimas.

-Marina-

-Tú me diste tu amistad, no te importo nada el hecho de que no me conocías. Sé que… se que… solo soy un estorbo para ti y…- ella no pudo terminar puesto a que el azabache le interrumpió.

-Marina, se que has sufrido mucho. Por eso quiero ayudarte, reparar el daño que todos hicieron.- dijo finalizando con una sonrisa nuestro entrenador. Levantnadose de su silla se dirigió a Marina y la tomo de la mano, la levanto y la abrazo. –Te voy a cuidar y jamás dejare que te hagan daño de nuevo-. Marina abrazo de manera más fuerte a su nuevo amigo, lagrimas salían de ella, pero de felicidad.

Después de terminar su helado, ambos jóvenes salieron al parque a caminar. Ash iba pensando en lo que iba a ser de él, puesto a que haber perdido en Unova lo destrozo por completo. Pero algo pasaba en el interior de la chica de cabello azul y ojos esmeraldas.

-Tal vez deba de decirle lo que me paso. El ha sido muy bueno, pero solo lo conozco un rato. Creo que lo mejor será que le diga lo que me paso. Por favor Arceus ayúdame, no quiero que Ash me lastime cuando se entere de lo que hice- decía en su mente Marina quien al parecer decidió confesarle a Ash parte de su pasado.

De repente Ash paro de golpe y volteo a ver para atrás, encontrándose con Marina parada de manera fija.

-Marina, ¿te sucede algo? – preguntaba el azabache con cierto tono de preocupación por su amiga.

Marina apretaba fuertemente los puños y cerraba sus ojos, parecía que le iba a confesar algo doloroso a Ash. –La razón por la que me viste corriendo llorando fue…-

------------------------------------------------------------------Flashback--------------------------------------------------------------------------

Un chico de sudadera roja, cabello azul con un fleco que sobresalía su gorra amarilla, se encontraba llorando en el suelo a lado de un Typhlosion quien estaba bañado en un charco de sangre. A lado de él había otro chico de sudadera azul y cabellera castaña. Se podía presenciar un panorama destruido, se sentía el dolor y la frustración que emanaba de aquel chico, pero más aún rabia.

-Jimmy, lo lamento mucho, pero él…- el chico de cabellos castaños no podía articular ninguna palabra.

-Por favor, Vincent no lo digas- el chico de cabello azul oscuro dijo esto entre rabia y tristeza.

Cierta chica estaba levantándose del suelo, y camino hacía su mejor amigo y se horrorizo por lo que vio. La chica de cabello azul cielo y sudadera blanca rasgada, presenciaba con una mirada de horror a aquel pokemon que llacía en el suelo sin vida.-Jimmy, lo lamento- dijo entre lágrimas aquella chica.

-No, yo lo lamento… - dijo el entrenador de gorra amarilla con tranquilidad.

-Jimmy, amigo- dijo Vincent, él sabía lo que iba a suceder. El joven castaño supuso lo que pasaría y miro a la chica algo enojado.

-lamento haberme dejado seducir por tus palabras… lamento el día en que me volví tu novio…-

La chica se sorprendió por las frías palabras que dijo su “novio”. Muchas lágrimas salieron de sus ojos, ella deseaba que todo fuera una horrible pesadilla, pero no lo era. El entrenador de sudadera roja se levanto de golpe y fue hacía la chica y grito entre lagrimas. –¡¡¡PERO LO QUE MÁS LAMENTO, FUE EL DÍA EN QUE TE CONOCÍ MARINA!!!- Jimmy le dio una bofetada tumbándola al suelo, se podía ver la rabia que emanaba de sus ser, apretó sus puños y lo dirigió a Marina. Vincent no podía ver lo que pasaba y se quedo congelado al ver a su amigo de esa manera.

------------------------------------------------------------Fin del Flashback-------------------------------------------------------------------------

-Lo último que recordé es que estaba en un hospital. Desperté y el doctor me dijo que había estado dormida tres días. Pensé que todo fue una pesadilla.- decía Marina quien le empezaron a escurrir lagrimas y sus ojos se tornaba vidriosos –Me había golpeado, me encontraron tirada en el suelo, lastimada unos oficiales. Le pregunte al doctor que les pasó a mis pokemon y me dijo que todos habían fallecido y...- Marina no pudo terminar de contarle el relato a Ash pues cayó de rodillas al suelo llorando, pensando que Ash la abandonaría como hicieron Vincent y Jimmy. Ella sabía que si eso pasaba no lo soportaría. Pero en cambio Ash la levanto del suelo y la abrazo, acariciándole la cabeza, mientras ella lloraba.

-Jamás te abandonare, te protegeré, te cuidare siempre.- esas palabras salieron de la boca de aquel entrenador quien solo trataba de reparar ese corazón dañado por el sufrimiento. Solo requirió decir eso, pues noto que Marina volteo a verle a los ojos.

-Ash- fue todo lo que dijo pues abrazo más fuerte a su amigo.

-Te cuidare, yo jamás te pegare, ni te pondré un dedo encima. Te cuidare de todas las personas que te quieran hacer daño.- Ash dijo esto, pues odiaba ver a su amiga así, y a pesar de ser alguien que no conoce mucho del tema del amor sabe bien que a una chica hay que tratarla bien siempre.

-Lo… lo dices… lo dices de verdad-preguntaba Marina con mucha duda en su rostro y asombro por lo que le había dicho el entrenador de cabellos desordenados y ojos caramelo.

-Sí. Te estoy diciendo la verdad. Yo no te lastimare, te cuidare siempre.- Ash dijo esto de una manera dulce pues sabía que en esos momentos Marina estaba muy lastimada al recordar todo lo que había pasado.

-Gracias- fue todo lo que dijo Marina dejando de llorar, volteando a ver a su nuevo amigo, aquella persona que le entrego su amistad. Ella se quedo viendo esos ojos chocolates y las lágrimas no salían. Pero algo inesperado sucedió, se escucho un rugido muy familiar, era igual que el de hace rato. Marina agacho de volada la cabeza y oculto su rostro en el pecho del entrenador.

-Marina, vamos a comer- dijo el azabache y sin previo aviso, puso a Marina en su espalda. –Sujetate bien- fue todo lo que le dijo, pues se agarro a correr.

-Ash, ve más despacio- decía Marina con una sonrisa en su cara, mientras reía.

-Parece que te estás divirtiendo, no es así. Pues más rápido iré para sacarte más sonrisas- así el entrenador de Pikachu aumento la velocidad mientras Marina se aferraba más a su nuevo amigo.

Bueno hasta aquí el quinto capitulo. Huele a que Ash va a vivir con muchas chicas si sigue los consejos de Iris y la profesora Juniper. Por favor si les gusto el capitulo dale me gusta y compartelo con tus amigo. Te ha hablado Dross y te deseo buenas noches (Demanda de derechos de autor)

 

Nuevo capitulo, perdon por no subirlo ayer, es que me dolia la cabeza. Bien con este capitulo termino la introducción de Marina a la historia. Voy a dar un resumen de lo que sera el siguinete arco argumental ATENCIÓN SINO QUIENREN SABER EL TRAMA NO LO LEAN.



La trama puede cambiar un poco pero es exactamaente lo mismo.

capitulo 6: "Gracias"

-Ash, ya basta- decía cierta peli-azul entre risas mientras era cargada por un entrenador de chamarra azul. –No puedo creer, que el haga todo esto para verme feliz.- pensaba nuestra nueva amiga, mientras su rostro se sonrojaba. –Ash vez más despacio- dijo otra vez la peli-azul pero se dio cuenta que Ash se paro.

-Ya llegamos- dijo el entrenador bajando a Marina de su espalda. –Bien ya estamos en el centro Pokemón- dijo el entrenador cuando de la nada salió una niña de unos diez años de vestimentas amarillas quien fue directo a abrazar al entrenador.

-Ya regresaste- decía alegre la rubia, mientras era cargada por su querido hermanito mayor.

-Sí, y ¿cómo esta Pikachu, no hizo travesuras?- pregunto el azabache a Yellow.

-No, él y Chuchu se la pasaron jugando todo el día y ahora están en la habitación descansando.- respondió Yellow y de repente poso su mirada en la chica de ojos esmeraldas. -¿quién es ella? Pregunto de manera curiosa Yellow.

-Soy Marina, la amiga de tu hermano- respondió Marina.

-Yo pensé que era tu novia, pues está muy bonita.- respondió Yellow lo que sonrojo a Marina pero que en Ash solo fue un momento más de vergüenza. Después de esto Ash la bajo, y le pregunto si quería ir a comer a lo que Yellow dijo que sí.

-Marina ¿quieres acompañarnos?- pregunto el azabache a su nueva amiga, pues sabía que el helado no llena casi nada, pero de repente volvió a escucharse ese sonido. Ash vio que su amiga agacho la cabeza mientras ponía sus manos en su estomago. –Bueno no hace falta decir que sí- mientras reía.

-¡ASH!- grito Marina, roja por la situación mientras Yellow y Ash estaban en el piso riendo.

-Ya cálmate, es que fue divertido- respondió Ash con unas lágrimas por la risa.

-Lo fue para ti, pero para mí- decía Marina reclamándole, aunque no se veía tan molesta.

Ash se levantaba del suelo, y también levanto a Yellow, quien parecía un tomate. Después de sacudirse ambos la ropa, dijeron al unisonó. –Si lo fue-. Ante esto Marina se volteo con un enojo, pues pensaba que Ash era caballeroso. Ash y Yellow se voltearon a ver, Ash al parecer le dijo algo a Yellow en el oído. Marina volteo a ver que decían, pero Yellow salió corriendo rápido. Al ver que Ash la estaba mirando se volteo rápidamente aun con su “enojo”.

-Bien, vamos a comer.-dijo Ash, intentando tomar la mano de Marina, pero esta la quito.

-No, ya no tengo hambre- dijo Marina, -Además creo que…-no pudo terminar pues nuevamente se escucho aquel ruido proveniente del estomago de la muchacha. Sin previo aviso la tomo de la mano y dirigieron a donde se fue Yellow hace unos minutos. En ese momento salió Yellow del comedor y fue a hablar con su hermanito.

-Ash, ya esta lo que me pediste- decía Yellow.

-Bien, pues vamos a comer- decía Ash mientras Marina estaba al lado de él, pues no sabía que le había dicho Ash a Yellow. –Bien entremos- pero antes de abrir la puerta le vino a la mente dos personas –Oye, Yellow y ¿Red y Green?-

Mientras tanto al otro lado de la ciudad, se podía observar a dos jóvenes de no más de once años caminando de una manera muy peculiar. Estos jóvenes se la habían pasado casi todo el día viendo batallas pues ni uno de ellos llevaba a su pokemon.

-Tengo mucha hambre- dijo un muchacho de cabello negro y ojos carmesí.

-Ya cállate, fue tu culpa olvidar a nuestros pokemons y nuestro dinero.- reclamo el otro joven cabellos castaños y ojos verdes.

-Ya no me regañes – dijo el joven quien estaba a punto de desfallecer.

De repente ambos jóvenes escucharon un sonido muy peculiar, era el celular de uno de ellos.El celular del castaño estaba sonando y vio un mensaje.

“Red, Green vengan ya está la comida en el Centro Pokemon. Atte. Ash”

-Comida- gritaron los dos al unisonó mientras solo se veía un rastro de polvo levantado por aquellos dos chicos.

Mientras tanto en el centro pokemon estaban un chico de pelos alborotados de color negro, una chica de pelo azul y ojos esmeraldas y una niña de unos 10 años de pelo rubio estaban sentados en una de las mesas del comedor.

-Bien, creo que llegaran en unos 10 minutos a lo mucho- decía Ash guardando su celular.

-Sí, pero conociendo la rivalidad de Red y Green, harán una pelea.- decía Yellow un poco avergonzada, pues ella sabe como comen ellos cuando no hay nada en sus estómagos.

Ash voltea y nota a Marina, y esta al ver que Ash la mira, voltea la cabeza como si estuviera enojada. Ash solo pudo sonreír, pues sabía que Marina si estaba molesta, pero, las clases de Iris y la Profesora Juniper, le servirían. Entonces un camarero salió con un carrito de comida y se dirigió al lugar de la joven Yellow. El camarero puso unas hamburguesas, ensalada y unos refrescos. Pero antes de partir, Ash se levanto y se fue con él dejando un poco triste a su nueva amiga.

-Creo, que Ash está molesto. No debí de haberme comportado así. El me trato de buena manera y yo…- sus pensamientos fueron interrumpidos por un joven de chamarra azul quien traía un hermoso pastel de fresas que decía perdóname. –Ash, tú… tú… me lo trajiste a mí-.

-Si, como vi que estabas molesta decide que la mejor forma de disculparnos fue un pastel y le pedí a Yellow que trajera el más bonito y sabroso.- decía Ash con su mirada de siempre.

Las lágrimas salían de Marina, puesto a que ella pensaba que Ash la odiaba, pero al ver ese hermoso detalle de parte de Ash y Yellow, los abrazo a ambos llorando.

-Gracias, gracias por todo- decía Marina llorando, pero abrazada por Ash y Yellow.

-Ya no llores, Ash jamás se enojaría por eso. El solo se enoja si le decimos que es muy malo en las batallas- decía Yellow tratando de consolar a Marina, pero vio que Ash estaba molesto. –Ya, hermano no fue para tanto-

De repente Ash cargo a Yellow por los aires y le dijo –Sabes que jamás me enojaría contigo, pero sabes que me molesta- dijo como un tono de hermano mayor y padre a la vez. Ash volteo a ver a su amiga, bajando a Yellow quien estaba feliz por como la cargo su hermanito mayor; Ash va y abraza a Marina y le dice que ya no llore, pues el jamás se enojaría con ella, además a provecho para decirle algo.

-En verdad- decía Marina parando de llorar.

-Si Marina, como falta mucho para que comience la liga, me preguntaba si querrías acompañarnos a Red, Green, Yellow y a mí a Pueblo Paleta.- decía el entrenador y vio como los ojos de su amiga se iluminaron.

-Sí, pero no te molesta, ya sabes tener que cargar conmigo y…-

-No me molesta, además no creo que a mi mamá le moleste. Si lo vez de esta manera son unas vacaciones, unas tranquilas vacaciones.- dicho esto Marina sonrió alegremente al igual que Yellow.

En eso dos chicos entraron corriendo a la cafetería, parecía como si fueran por el puesto de campeón de la liga Añil. Se sentaron en la mesa donde estaba Ash, Marina y Yellow, pero ignorándoles y solo se sentaron a comer. Pero cuando estaban comiendo Yellow les pego a ambos.

-¿Por qué hiciste eso?- cuestiono el chico de gorra roja.

-Sí, que te pasa Yellow, no vez que estamos comiendo- decía el castaño con un poco de comida en la boca.

-Son unos animales, no ven que tenemos una invitada- decía Yellow con una vena en la frente y roja, pues sus amigos la avergüenzan frente a Ash y su nueva amiga Marina. –Saluden por lo menos- decía Yellow quien parecía en ese momento la madre de ambos.

-Hola- dijeron Green y Red al unisonó con comida en la boca.

Marina solo se rio por la actitud de Red y Green al igual que Ash, pero Yellow estaba muy enojada y solo se fue a sentar a lado de su hermanito. Una vez que terminaron todos de comer y pedir disculpas a Yellow, se fueron a sus habitaciones menos Marina.

-Oye, ¿por qué no subes a tu cuarto?- pregunto Ash al ver que Marina se acostaba en el mueble de la recepción.

-No, pedí cuarto y ahora todos estaban ocupados- diciendo eso tarto de acomodarse lo mejor posible en ese incomodo sofá.

-Bien, mira y si duermes en mi cuarto- dijo Ash.

Marina volteo a ver a Ash quien parecía un poco cansado -¿Pero y tu donde dormirás?- pregunto, al pensar que dormiría con Ash, pues eso la puso un poco incomoda.

-En el suelo- respondió tranquilamente Ash.

-Pero…-

-Tranquila, necesitas descansar, pues el viaje a Pueblo Paleta es largo y necesitaras muchas energías- dicho esto y sin previo aviso levanto a Marina del sofá. Cuando la cargo noto que lentamente cerraba sus ojos, al parecer le Marina le tenía confianza a Ash y se dirigió a la habitación, con una Marina dormida entre sus brazos.

Fin, me gusto mucho escribirlo. Pronto hare un One Shot de Ash y cierta castaña (no es May).

 

Este capitulo es más diverison que drama.

Capitulo 7 "Desayuno"

Ya era de día en la hermosa ciudad Carmín. Las personas salían a trabajar y a hacer sus deberes diarios. Algunos entrenadores madrugaban para entrenar a sus pokemon. Pero en un centro Pokemon cierto joven se estaba levantando después de haber dormido en el frío y duro suelo.

-Vaya, creo que debí de haberme ido a dormir con Red y Green- decía cierto joven pelinegro aun dormido. –Bueno, creo que es hora de levantarlos- decía mientras se paraba, se fijo que cierta peli-azul estaba dormida en su cama. – Al menos durmió bien-.

Ash se fue puso su chamarra azul y sus tenis, debido a que no dormiría en bóxer como siempre lo ha hecho. Se preparo para irse pero antes de abrir la puerta, la peli-azul se había despertado.

-Hola- dijo Marina con algo de sueño y se levanto de la cama para ponerse sus tenis.

-Vaya, así que ya te despertaste- dijo Ash de una manera dulce, pero a la vez juguetona.

-Sí, ya estoy despierta.- dijo Marina levantándose y frotándose los ojos. – ¿Vamos a ir a desayunar?- pregunto, mientras se dirigía a la puerta.

-Sí pero antes, hay que despertar a Yellow y a los demás, además tengo que ir a recoger a Pikachu.- dicho esto se le vino a la mente un impactrueno por parte de él por abandonarlo todo el día. –Solo espero que no esté molesto- fue todo lo que dijo antes de salir.

Ya afuera en el pasillo, Marina y Ash tomaron rumbo a la habitación donde estaban dormidos sus amigos. Cuando llegaron notaron que no estaba nadie más que Red quien al parecer estaba dormido.

-----------------------------------------------------sueño de Red------------------------------------------------------------------------------

-Aquí tenemos al campeón de la liga añil, y mejor entrenador del año Red- decía un hombre con gafas que recordaba a cierto presentador de artes marciales de otra serie.

-RED, RED, RED, RED- decían todos los espectadores mientras le entregaban la copa de la liga añil.

-Si ahora soy el campeón, este es el mejor día de mí vida- decía Red mientras miraba el estadio donde lucho contra Green en la final que fue una batalla muy intensa.

-Felicidades Red- decía Green dándole la mano.

-Gracias Green- estrechándola.

-Genial, Red ya ganaste la liga añil, y mira que tienes muchos Fans- dijo Yellow quien al parecer era cargada por su hermano mayor.

-Bien, Red es hora de nuestra batalla- decía una figura, el cual era el héroe de Red, esa persona era Ash Ketchum quien venía a retarlo –Solo te voy a decir… despierta Red, vamos a desayunar-

-¿qué?-

-Te dije que vamos a desayunar- dijo Ash, mientras este desparecía frente a los ojos de Red.

Después de eso todo el estadio se desvanecía. Su trofeo desapareció al igual que sus amigos.

-----------------------------------------------Fin del Sueño de Red---------------------------------------------------------------------------------

Se levanto de golpe viendo a un confundido Ash y a su amiga. Volviéndose a acostar. –Déjenme dormir cinco minutos más y disfrutar mi victoria.- dijo Red cerrando sus ojos y tapándose con la sabana.

Ash y Marina solo suspiraron y se retiraron de la habitación. Ellos iban platicando muy a gusto sobre todo por saber a dónde se dirigirán. Marina al parecer estaba ansiosa, pero a la vez tenía miedo, pues ella desde aquel incidente no había vuelto a tener un Pokemon. Ash noto esto y le dio ánimos, pues sabía que ella aun estaba frágil.

-Pero Ash, no creo que…-

-Ya te dije, vamos a ir a Pueblo Paleta y no creo que mi mamá se moleste porque vallan- al parecer él seguía caminando tranquilamente, pero en su mente reinaba el temor de que un rayo le pegara cuando bajara las escaleras. Pero toda su mente se extraño porque cierta persona le estaba abrazando, cierta niña de cabellos rubios le abrazaba fuertemente.

-Buenos días hermanito- dijo la niña quien iba acompañada de un entrenador de cabellos castaños y playera negra.

-Buenos días Yellow, Green- dijo Ash quien acaricio la cabeza de Yellow y miro a Green.

-Veo que no lo pudiste levantar.-

-Tenías razón Green, es como yo-

Mientras platicaban sobre Red, se escucho un sonido particular que provenía del estomago de cierta jovencita. Todos voltearon a ver a Marina quien bajo su cara en señal de vergüenza, solo para notar que Ash le pone una mano en el hombro sonriéndole y cargándola cosa que sonrojo a la chica. Una vez que llegaron al comedor Ash bajo a Marina quien estaba sonrojada por lo que Ash hizo. Él se dirigió que con Green para pedir el desayuno mientras Marina y Yellow escogían una mesa

-Bien creo que voy a…-

Ash no pudo terminar pues un impactrueno le dio de lleno. Yellow solo sonrió de vergüenza, pero Marina se preocupo por su amigo. Green solo se río, y ayudo a levantar a Ash. Cuando se reincorporo noto a cierto roedor amarillo molesto. El joven de cabellos desordenados se disculpo con aquel pokemon, su pokemon quien era nada menos que pikachu quien estaba en compañía de pichu.

-Bien creo que voy a pedir una botella de cátsup para pikachu y “chuchu”.- dijo el entrenador de pueblo paleta, pues sabía que tanto pikachu como “chuchu” amaban la cátsup. –Bien, quiero una orden de waffles, no que sean tres órdenes de waffles y jugo de naranja, ¿y tu Green?

-Lo mismo-

-Muy bien entonces será el paquete de Waffles familiar, estará listo en 10 minutos.- dijo el camarero.

Ash, Green, Marina y Yellow estaban comiendo muy a gusto, cuando de repente alguien entra de golpe. Red, quien se había levantado, olio el aroma de waffles recién hecho y salió corriendo de su habitación.

-¿Aun quedan Waffles?- pregunto Red con algo de temor.

-Acaso no vez que aún quedan-

-Gracias Green, como siempre eres muy buena persona-

-Ya lo sé, por eso tengo un club de admiradores-

Red y Green platicaban sobre sus experiencias y lo difícil que fue conseguir que sus pokemon subieran de nivel, más para Red, quien era casi igual que Ash, pero el ya sabía cómo luchar cuando inicio su viaje a decir verdad Red estudio los errores de Gary y Ash para no cometer tantos errores, y estaba preparado. Ahí estaban todos comiendo, mientras se preparaban para su viaje a Pueblo Paleta, sin saber lo que le esperaba a Ash.

Bueno, esto es rápido, esoy en clases y todo eso. Espero que lo disfruten.

 

Bien este es el nuevo capitulo.

capitulo 8 "Viaje de Regreso"

Nuestros amigos habían terminado de desayunar y se preparaban para ir a Pueblo Paleta, hogar de Ash, Red y Green. Marina, la nueva amiga de Ash se estaba alistando en el cuarto, al parecer ella estaba feliz, pues a pesar de todo lo que ella ha sufrido, encontró a alguien especial para ella. Mientras Marina se ponía su chamarra blanca alguien toca a la puerta.

-Ya voy- dijo Marina, mientras se ponía su gorro.

Al abrir la puerta Marina se sorprendió al ver a Yellow. -¿Puedo pasar?- Pregunto la pequeña rubia, quien era “hermanita” de Ash.

-Si claro- dijo Marina -¿Yellow, qué haces a aquí, pensé que estarías con Ash?- pregunto la peli-azul algo confundida, pues sabía que Yellow estaba con Ash.

-Bueno, eso se supone. Ash está entrenando con oshowatt y snivy junto con Pikachu, esos pokemons son tan adorables. - dijo Yellow recordando la primera vez que vio a oshowatt –Bueno, dejando de lado eso, Red y Green lo retaron a una batalla y como se que la actitud de Red y Green es muy competitiva, ellos dos se estarán peleando por ver quién lucha contra mi hermano mayor.- finalizo Yellow para sacar una pokebola de su bolsillo, la cual tenía un rayo.

-Al parecer tu hermano es alguien especial- dijo Marina, mientras se sentaba en la cama, cosa que la rubia le imito.

-Sí, no sé cómo decirlo, pero él tiene algo que lo hace diferente a los demás.- dijo Yellow, mientras sus ojos miraban aquella pokebola donde descansaba su inicial, ese pichu que le regalo su hermanito. –Eso explicaría por qué la exlíder del gimnasio de ciudad Azafrán se sonroja cada vez que lo nombra los otros líderes de gimnasio- explico Yellow mientras una ligera risa salía de su boca, pues recordaba como Sabrina se puso roja al saber que Ash vendría de regreso a Kanto.

-Bueno, pues tu hermano es agradable, es alegre… es lindo- esto último le causo un gran sonrojo a Marina quien volteo a ver a otro lado. Yellow lo noto y se le quedo mirando con un rostro de picardía.

-Te gusta Ash, verdad- dijo Yellow quien al parecer hizo sonrojar y asustar un poco a la nueva amiga de su hermano.

-Yellow, que… que… cosas dices.- decía Marina muy nerviosa

-Bueno, es cierto, pues Ash creo que tiene muchas chicas.-

-¿a qué te refieres con “muchas chicas”, acaso tiene más de una novia?- pregunto Marina, un tanto desconcertada por lo que dijo Yellow.

-Bueno, es que mi hermanito, ha viajado mucho, por lo tanto conoce a más de una mujer. Por lo que me han contado, algunas se han sentido atraídas por él, pero él jamás presto atención a ello.- comentó Yellow.

Marina se quedo sorprendida por lo que había dicho Yellow. Por alguna extraña razón le molestaba saber eso, pues acaso estaba sintiendo algo por él. Marina sabía que desde que lo conoció ella empezó a volver a ser feliz, pero para solo estar un día con él, ella sentía que podía contar con él en las buenas y en las malas.

-Bueno, dejemos eso de lado no crees.- dijo Marina para no hablar más de Ash

-Sí, bueno, ¿tienes listo todo?- pregunto Yellow al ver que Marina estaba acomodando las cosas en su mochila rosa.

La jovencita de ojos verdes veía detalladamente su mochila para evitar que algo le faltara en su viaje. –Creo que tengo lo necesario.-

Yellow miraba la mochila de Marina, después volteo y vio en una esquina la mochila de Ash. La pequeña rubia fue rápidamente a verla y noto que estaba abierta. Cuando la agarro, una sonrisa apareció en su rostro, unas lagrimas salían de sus ojos color miel. Marina noto que Yellow estaba llorando y se acerco a ella.

-¿Qué sucede Yellow?-

La rubia no respondió y solo le mostro una fotografía donde ella estaba al lado de Ash.

-Este es Ash, y tu estas siendo cargada por él no es así.-

-Sí, fue él día que partió. Ese día yo estaba muy triste pues él se iría, pero para recordarlo nos tomamos una foto- decía Yellow, mientras unas lágrimas salían de sus ojos y caían por su delicado rostro.

-Yellow, ya veo. Parece que a Ash le importas demasiado- dijo Marina devolviéndole aquella foto a Yellow. La chica de cabellos azules noto como la hermanita de Ash abrazaba fuertemente esa fotografía. -¿Qué te parece si vamos con Ash?- le pregunto Marina a Yellow, la cual solo asintió. Yellow guardo la foto de Ash en la mochila y se la puso en la espalda, mientras Marina cerraba la puerta para dirigirse hacia donde estaban los chicos.

-Bueno tal parece que nadie podrá luchar contra mí y mi snivy- dijo cierto entrenador de gorra roja quien se dirigía a un par de jóvenes.

-No es justo. Red tu ya luchaste contra él- exclamo Green devolviendo a squirtle a su pokebola.

-Sí, pero yo también perdí. ¡Por qué me odias Arceus!- dijo Red de rodillas en el piso, gritando mientras devolvía a charmander a su pokebola.

Ash solo se limito a reír, pues Green y Red se comportaban de una manera bastante inmadura, a pesar de que Green se comportaba como Gary en repetidas ocasiones.

-Bien, creo que luchare con ustedes hasta llegar a Pueblo Paleta- dijo Ash mientras se retiraba con Pikachu en su hombro al centro Pokemon acompañado de Red y Green.

Llegando al centro Pokemon, Ash entrego sus pokemons a la enfermera Joy, para así dirigirse a su habitación y checar si tenía todo listo para poder partir. Cuando entro a su habitación noto que Marina y Yellow estaban ahí. El iba a preguntarles la razón cuando su querida hermanita corrió y lo abrazo. Ash noto unas lagrimas en Yellow así como en Marina.

-Te quiero hermanito- dijo Yellow mientras abrazaba fuertemente a Ash.

-Yo también te quiero Yellow, ¿Pero por qué estas así?- le pregunto Ash a su hermanita.

Yellow, le mostro la fotografía donde aparecía con Ash.

-Ya veo, aun me acuerdo de ese día. Yellow, sabes, creo que de todas las cosas que me han pasado, convertirme en tu hermanito mayor fue lo mejor- dijo Ash con una sonrisa.

-Lo dices enserio.- dijo Yellow mirando tiernamente a Ash. Ella sin pensarlo dos veces abrazo a su hermanito.

-Y conocerte a ti Marina, también ha sido una de las mejore cosas que me ha pasado- dijo Ash observando a la peli-azul, quien sonrió mientras unas lagrimas bajaban de sus ojos color esmeralda.

-Deja de hacerme llorar.- dijo Marina, quien corrió a abrazar a Ash.

-Bien, es hora de irnos- dijo el entrenador de pueblo Paleta, terminado así con el abrazo.

Marina, Yellow y Ash bajaban rápidamente al lobby del CP donde se encontraron con Green y Red.

-Bien ya estamos listos- dijeron al unisonó Red y Green.

-Ok, entonces nuestro próximo destino es Pueblo Paleta.- dijo Ash, mientras recogía a Pikachu y a sus pokemon de Unova.

-Bueno, será divertido este viaje de regreso- dijo Yellow, recordando cuando Red se entero que la liga estaba suspendida y como muchas chicas miraban a Green con ojos de corazones.

-Solo espero que las chicas no me violen de regreso a casa- dijo Green de manera arrogante.

-No tientes a la suerte, capaz que una te convierte en su marido… y ya no podrás tener tu harem soñado.- dijo Red viendo como Green empezaba a sudar, puesto que él tenía miedo de casarse a la edad de 13 años con una lunática y no poder cumplir sus sueños.

-Mejor nos vamos ahora que es de día- dijo Green poniéndose un casco de guerra.

-Green creo que exageras- comento Yellow con una gota de sudor.

Ash y Marina solo reían, pues si algo Green heredo de Gary es el hecho de que ambos querían un harem y ver al rival de Red con miedo de casarse era muy gracioso.

-Muy bien ya nos vamos, muchas gracias por todo enfermera Joy- dijo Ash despidiéndose de la enfermera Joy.

-De nada Ash, fue un gusto volver a verte y conocer a tus amigos- dijo la E. Joy viendo partir a los jóvenes.

-Gracias enfermera-

-Gracias por todo y el hospedaje-

Ash, Marina, Green, Red y Yellow van rumbo a Pueblo Paleta, sin saber lo que les espera. Esta historia continuara.

Bien, esta historia contendra muchas novias para Ash, se me vino la idea por leer un maldito fic de un tal Grey Sunshine, maldito, pero le agrergare cierto humor, pero sera pasara algo inesperado. Los "amigos" de Ash lo traicionan, cómo, no lo se.

 

Bueno aquí les dejo otro capitulo de esta hermosa historia de master chief y cortana. Esperen, es de Ash y sus novias? pense que Ash no tenía novia. Bueno aquí esta el siguienta capitulo.

Cápitulo 9 "El inicio de lo emocionante"

Ash, Marina, Yellow, Red y Green estaban viajando rumbo a Pueblo Paleta. Ash conocía a Green y a Yellow desde hace mucho, hace poco conoció a Red el mejor amigo de Green y Yellow. Marina la chica de cabello azul celeste y ojos esmeralda la había conocido de una manera poco común. Para Marina, conocer a Ash fue lo mejor que le ha pasado.

-Ash ¿Cuánto falta para llegar a Pueblo Paleta?- pregunto Marina un poco cansada.

-Bueno supongo que, otros 45 minutos.- dijo Ash volteando a ver a todos. Yellow era cargada por Green y Red de vez en cuando aunque otras veces quería que su hermanito le cargara. Fijando su vista en Marina, Ash noto que estaba cansada, y se le acerco y le dijo –Si quieres te puedo cargar, aparte el pueblo no esta tan lejos.-

-Ash, no quiero molestarte- dijo Marina con un leve sonrojo.

-La verdad no me molestaría- dijo Ash, mientras pikachu se bajaba.

-Bueno… está bien- dijo Marina con gran nerviosismo mientras se subía a la espalda de Ash. Pikachu se subió a la cabeza de Marina haciéndola reír por las cosquillas que le provoco.

-Falta poco para ver al Profesor Oak. Solo espero que nos dé detalles de la Liga- decía Red ansioso por ir a competir en la liga añil de Kanto.

-Yo solo quiero comer- dijo Yellow quien se tocaba el estomago, mientras su pichu le imitaba.

-Vaya, ustedes dos sí que se parecen- decía Green mientras reía por la actitud de Yellow y Pichu. –Además no creo que falte mucho, ven- decía Green señalando un hermoso pueblo el cual era pequeño y la naturaleza contrastaba con el lugar.

-Vaya, no ha cambiado nada- decía Ash mientras seguía cargando a Marina en su espalda.

-Ash, ¿este es el pueblo en donde creciste verdad?- preguntaba Marina sin apartar los ojos de aquel hermoso lugar.

-Sí, aquí fue donde crecí. Aquí conocí a muchas personas. Mi gran rival y amigo Gary vivía aquí también.- decía Ash mientras recordaba su rivalidad con Gary. –Y también aquí vivía su hermana, Dalia.- mientras recordaba a aquella castaña quien era su mejor amiga.

-Ash ¿te acuerdas de mi prima verdad?- preguntaba Green.

-Sí- respondió el azabache mirando el cielo.

Marina por su lado se enojo un poco y pellizco a Ash en el hombro.

-Auch, ¿por qué hiciste eso?- exclamo Ash un poco molesto, pero no por eso bajaría a su amiga.

-Yo no hice nada- decía Marina quien inflo sus mejillas y volteo molesta mirando a otro lado.

-Bueno, Ash mi prima regresara a Pueblo Paleta en dos días y me pidió de favor, de súper favor que si ella podía dormir contigo.- decía Green con un miedo en sus ojos. De repente estaba de rodillas rogando –Di que no le dirás que no, si no lo haces mi existencia está en juego- más patético no podía estar Green.

-Bueno… yo… no se.- respondió Ash al estar asombrado por lo que Dalia le pidió a Green. Por su lado Marina estaba impresionada y se sentía molesta y triste a la vez, por lo que abrazo más fuerte a Ash.

-¿Qué pasa Green?- preguntaba Red mientras veía la patética escena de Green.

-Red, hermano, te acuerdas que Dalia, mi prima nos amenazo de que si no dormía con Ash no volveríamos la luz del día-

-Sí-

-Ash no sabe qué hacer- decía Green apuntando a Ash quien cargaba a la chica de pelo azul y coletas.

Miedo, el miedo había invadido a Red. Si algo podía causarle miedo era su madre o en este caso la prima de Green. Aquella vez que les marco por teléfono para informarles que si ella iba a regresar a Kanto y que quería vivir con Ash. Pero les amenazo que si Ash no aceptaba ellos no sabrían lo que sería tener novia. Red regreso al mundo real y de volada agarro a Ash de la camisa casi llorando.

-Ash, si en verdad eres bueno. Por favor haz que Dalia duerma contigo. Aun no he recibido el beso de una chica que no sea mi madre.- se podía ver el temor en sus ojo al saber que moriría sin terminar la liga y sin besar a una chica.

-Parece que ella les asusto. Yo ya lo sabía, pero le dije que bromeara con ustedes. Creo que se excedió un poco.- decía Ash mientras se rascaba la cabeza. Pero de repente noto el aura asesina de Green y Red y entro en pánico.

-Vas a morir- dijeron al unisonó los rivales/amigos

Ash sabía que moriría por eso. Pero de repente noto que Pikachu y “chuchu” salían corriendo a toda prisa hacía el pueblo. Si bien, tal vez olieron algo de comida y corrieron a buscarla, no eso no fue. De repente enfrente de Ash estaba Marina y Yellow con un aura asesina de “aléjense de él o los mato”. Tanto Green y Red como Ash tenían miedo.

-Corre-

-Quiero mi harem-

-Quiero ganar la liga-

Gritaban Red y Green mientras se dirigían a toda velocidad hacia el pueblo. Ash estaba algo desconcertado por lo que había pasado.

-Marina, Yellow ¿qué fue eso?- pregunto Ash a su amiga y su hermanita.

Los ojos de ambas chicas se abrieron y sus caras se pusieron muy rojas. No querían voltear pero algo hizo que lo hicieran. Miraron a aquel chico que al parecer estaba esperando una respuesta de ambas. Un abrazo, ambas le habían dado un abrazo a Ash.

-Ehh… ¿qué pasa?- decía con nerviosismo el entrenador de sudadera azul y gorra roja.

Tanto Yellow como Marina no dijeron nada y solo se limitaron a ocultar sus rostros rojos en el pecho de su querido “amigo” y “hermano”.

-Vamos a casa- dijo Ash notando que ambas chicas lo veían con cierta ternura.

En una casa con un molino encima de una colina se encontraba el laboratorio de uno de los científicos más reconocidos en el mundo de los pokemon. Aquel lugar es la casa del profesor Samuel Oak, el creador de la pokedex y la mente maestra detrás de los libros de poesías más reconocidos en la región.

-Quien diría que el profesor Oak y la mamá de Ash se ganaron un viaje por las islas decolara- decía cierta joven de pelo naranja con unos ojos iguales a los de Marina.

-Sí, también el hecho de que Ash no sabe dónde está su madre y que se quedara solo en la casa.- decía un chico de cabello negro y con una banda naranja en su frente.

-Ya lo sé Tracy, estoy preparada para grabar su rostro cuando se entere- decía la chica de cabello naranja y vestimentas amarillas quien sostenía una cámara.

-Sabes Misty, aunque seas mi novia me das un poquito de miedo.-

-¡¡¡¿¿¿Qué dijiste!!!???- grito la peli-naranja que respondía al nombre de Misty.

-Na… nada mi amor… yo no dije nada.- decía Tracy con un gran nerviosismo y miedo.

-Pikachu-

-Pichu-

-¿Ese era el pikachu de alguien y un pichu?- pregunto Misty, quien volteo a ver a Tracy.

-Ese es… el Pikachu de Ash y “chuchu”- decía Tracy el reconocer perfectamente la voz de ambos roedores eléctricos.

Bueno hasta aquí le dejo por ahora, tal parece que Marina se ha enamorado de Ash.

Marina: (sonrojada) No lo divulgues porfis
Ash: Divulgar qué?
Marina: Nada
Rosa: Ya quiero aparecer en el fic y besar a Ash. (muy roja)
Ash: Sí, espera ¿qué has dicho?
Rosa y Marina lo abrazan muy fuertemente.
Adrián: La juventud de ahora.
Hilda: (llorando) Yo tambien quiero estar con Ash.
Adrián: Sí, claro que tambien estaras con él.
Hilda: Gracias, ya ahora lo voy a abrazar.
Ash: (PENSANDO) Por Arceus, voy a morir.

 

Bien aquí esta el siguiente capitulo, creo que dos más y rosa como hilda apareceran. Bien parece ser que nuestra querida Marina ya tiene sentimientos por su querido amigo.

Capitulo 10: "La liga"

-Al parecer esos dos se fueron corriendo- decía Ash mientras miraba la dirección por la que se fueron sus amigos Red y Green. –Bueno que mas da- Ash se preparaba para caminar a su casa cuando noto cierta preocupación en la cara de su hermanita como la de su nueva amiga.

-“Me siento tan extraña, es como si quisiera estar con él. Pero esto también lo sentí con Jimmy, y si me lástima, si me hace daño. Un momento, en que estoy pensando”- La mente Marina le estaba jugando con viejos recuerdos dolorosos al mezclarse con el presente.

-Marina ¿estás bien?- pregunto Ash observando detenidamente a su amiga de cabellos que eran como el azul del cielo.

-Ash… yo… no, no estoy bien- dijo firmemente mientras cerraba los ojos.

Yellow quien estaba con ellos se paró de inmediato y se acerco a Marina y la tomo de la mano.

-Yellow- fue todo lo que dijo aquella chica de Johto para después mirar los ojos color chocolate del entrenador de Kanto. –Ash, aun me duele lo que sucedió con… con…- Marina no pudo terminar, pues rompió en llanto al recordar los momentos que paso con su viejo amigo y novio.

Yellow abrazo fuertemente a la chica de ojos esmeralda –Marina, no tienes porque llorar, mi hermanito te va a cuidar, eso lo sé-.

Marina, quien escucho aquellas palabras, recordó el momento en que conoció a Ash, como en unas horas se hicieron amigos y que gracias a él poco a poco la felicidad volvía hacía ella.

-Te aseguro que te cuidare. Nunca me perdonaría que algo malo te pasara- dijo Ash acercándose a la ex ídolo Pokemon. –Marina, sabes que te prometí desde que nos encontramos por primera vez que te cuidaría.-

----------------------------------------------Flashback----------------------------------------------------------

-Jamás te abandonare, te protegeré, te cuidare siempre.- esas palabras salieron de la boca de aquel entrenador quien solo trataba de reparar ese corazón dañado por el sufrimiento. Solo requirió decir eso, pues noto que Marina volteo a verle a los ojos.

-Ash- fue todo lo que dijo pues abrazo más fuerte a su amigo.

-Te cuidare, yo jamás te pegare, ni te pondré un dedo encima. Te cuidare de todas las personas que te quieran hacer daño.- Ash dijo esto, pues odiaba ver a su amiga así, y a pesar de ser alguien que no conoce mucho del tema del amor sabe bien que a una chica hay que tratarla bien siempre.

-Lo… lo dices… lo dices de verdad-preguntaba Marina con mucha duda en su rostro y asombro por lo que le había dicho el entrenador de cabellos desordenados y ojos caramelo.

-Sí. Te estoy diciendo la verdad. Yo no te lastimare, te cuidare siempre.- Ash dijo esto de una manera dulce pues sabía que en esos momentos Marina estaba muy lastimada al recordar todo lo que había pasado.

-Gracias- fue todo lo que dijo Marina dejando de llorar, volteando a ver a su nuevo amigo, aquella persona que le entrego su amistad. Ella se quedo viendo esos ojos chocolates y las lágrimas no salían. Pero algo inesperado sucedió, se escucho un rugido muy familiar, era igual que el de hace rato. Marina agacho de volada la cabeza y oculto su rostro en el pecho del entrenador.

-Marina, vamos a comer- dijo el azabache y sin previo aviso, puso a Marina en su espalda. –Sujetate bien- fue todo lo que le dijo, pues se agarro a correr.

---------------------------------------------------Fin del Flashback---------------------------------------------------------------

Marina no dijo ni una sola palabra, ella recordó aquel momento en el que Ash le había ofrecido su amistad, aquel momento en el que él y ella jugaron, y disfrutaron comiendo helado. Aquellos recuerdos hicieron que por impulso ella fuera a abrazar a su querido amigo.

-Te quiero-

Dijo la chica quien estaba llorando en el pecho del entrenador, mientras su cuerpo era abrazado por los brazos del entrenador.

-Marina, yo también te quiero- dijo Ash abrazando a su amiga.

De repente ambos eran abrazados por cierta personita que tenía el pelo color amarillo al igual que sus ojos. –Yo también te quiero- decía Yellow abrazando tiernamente a Marina y a su querido hermano mayor. –Hermanito también te quiero tener siempre a mi lado.- dijo finalizando ocultando su rostro.

Ash sonrió y cargo a Yellow dándole un beso en la mejilla, lo cual puso muy roja a la pequeña rubia. Marina por su lado no se aparto de Ash. –Bien, ya que todos estamos contentos… el último en llegar prepara la cena.- dijo Ash quien salió corriendo dejando una nube de polvo.

-¡¡¡Ash/hermano!!!- se alcanzo a escuchar en todo el pueblo. Marina y Yellow salieron corriendo en dirección a la residencia Ketchum.

Mientras tanto en el laboratorio del profesor Oak, Red y Green habían llegado y se quedaron platicando con Misty y Tracy. Red y Tracy fueron a preparar las habitaciones, mientras tanto Green y Misty estaban platicando en la sala mientas comían café y galletas. Además Pikachu y “Chuchu” dormían en el campo junto a los otros pokemon de Ash.

-Así que la mamá de Ash y mi abuelo están en un crucero por las islas naranjas- decía Green mientras tomaba un sorbo de café.

-Así es. De hecho lo aprovecharon por el hecho de que la liga Kanto fue suspendida.- informaba Misty, quien también bebía esa bebida amarga pero que a la gente le encanta.

-Bueno, conociendo a mi abuelo de seguro ya está escribiendo poesía sobre lo bellos que es el mar-

-O sobre lo bella que es la señora Ketchum- dijo Misty interrumpiendo a Green.

-Eso sí, ella es muy hermosa.- dijo Green al saber cómo es la madre de Ash, a pesar de no haberla visto en mucho tiempo.

-Bien, parece que ya están listos los cuartos- dijo Tracy quien llegaba junto a Red.

-Sí, en cuanto a la liga sigue sin saberse si se reanudaran los servicios o sigue en punto muerto.- dijo Red mientras se sentaba en el sofá a lado de la líder de gimnasio de ciudad Cerulean.

-Hasta el momento no tengo ningún informe sobre la liga Kanto, excepto que ya no pueda entregar iniciales en un mes- dijo Tracy mientras le entregaba un papel a Green con el informe mandado desde las oficinas ejecutivas de la liga.

-Vaya esto es muy extraño- dijo Green mientras le entregaba la hoja a su amigo Red.

-Según esto, la entrega de pokemon inicial queda suspendida asi como la entrega de la pokedex de Kanto. Se informa que los gimnasios no pueden aceptar retos y entregar medallas en estos dos meses. Atte. Charles Goodshow. –Red estaba intentado saber el por qué la suspensión de la liga. –Esto es extraño, muy extraño-

-Lo mismo dijo el profesor Oak. Acaso planean cerrar la liga.- dijo Tracy como si fuera una locura.

-Cierto, bueno la liga últimamente ha visto reducida el número de entrenadores que desafían a los líderes de gimnasio. Se le prestan más atención a las otras ligas y…

-Y si planean cerrarla- interrumpió Red quien estaba mirando al techo como si fuera a caerse.

-¿Enserio lo crees?- pregunto Green con cierta confusión pero algo le decía que podía ser cierto.

-No lo sé la verdad. Pero si eso pasa, lo único que quedarían serían los concursos y eso no me llama la atención- decía Red mientras tomaba un sorbo de su café.

-Por cierto Green, Dalia llega en 1 semana, debido al trabajo su vuelo se retraso- dijo Misty quien de pronto noto como en los ojos de Red y Green se formaban llamas.

-¡¡¡ASH!!!- gritaron ambos mientras se paraban de golpe.

Mientras tanto en la entrada de la residencia Ketchum.

-¿Cómo llegaron primero?- decía Ash mientras apuntaba a su amiga y a su hermanita. El había corrido como loco esperando vencerlas.

-Sencillamente mi querido hermano… ni nosotras lo sabemos.- dijo Yellow al no saber cómo llegaron primero haciendo que Ash cayera de espaldas.

-Además Ash nos prometiste una cena y lo vas a cumplir- decía Marina con cierto enfado y de cierta manera estaba feliz.

-Está bien, aposte quien llegara al último haría la cena, pero antes voy a saludar a mi mamá y a presentarlas.- dijo Ash mientras sacaba una llave que tenía dentro de su bolsillo. Justo cuando abrió la puerta alcanzo a ver una nota…

Bien con esto finalizo el capitulo, solo espero poder llegar a los 50 capitulos.

Hilda: Ya porfis, ya quiero salir en el fic.
Rosa: Ya quiero que Ash cuide de nosotras.
Ash: Esperen, ¿Van a vivir conmigo?
Hilda: Por supuesto, además Marina tambien vive contigo por si lo recuerdas.
Ash: ¿Enserio?
Rosa: (con lágrimas) No quieres que estemos contigo. Esta bien nos vamos a ir.
Ash: No, no si quiero estar con ustedes al igual que Marina.
Marina: (Abrazando a Ash) Lo sabia, sabia que nos amabas.
Ash: (sonrojado) Nunca lo negue.
Adrián: ¡DEJEN DE SPOILEAR!

 

Hola, hace mucho que no nos vemos. Bueno aquí esta el siguiente capitulo de la serie. Como prometi Hilda y Rosa seran introducidas en este capitulo. Bien aquí se los dejo.

Capitulo 11 "Una Sorpresa"

-¿Qué es esto?- cuestiono el azabache al notar un papel sobre la mesa.

-¿Qué es qué?- pregunto Yellow entrando a la casa y viendo la nota que sostenía Ash. –Hermanito solo es una nota- dijo Yellow sin darle importancia.

-Vamos a ver que dice- dijo Ash mientras se preparaba para leer la nota –Por cierto Marina, esta es mi casa y puedes pasar y sentarte en el sofá- dijo Ash mientras invitaba a pasar a su querida amiga a la casa.

-Bueno… yo… está bien- fue todo lo que dijo mientras se sentó en el sofá.

-Bien vamos a ver…-

-“Querido Ash, si estás leyendo esto significa que no estoy en la casa. Por cierto tuviste una gran actuación en la liga Unova, lamento que no hayas podido ganarle a ese simpático chico y su lucario…-

De repente un aura de depresión apareció alrededor de Ash, al momento de recordar como perdió contra Cameron en los octavos de final.

-Ash ¿estás bien?- pregunto Marina al ver la repentina depresión de Ash.

-Si estoy bien, continuare leyendo la nota.- dijo Ash en un tono tan deprimente que pareciera que ya no quisiera vivir.

-“…, dejando de lado eso te aviso que me gane un viaje a las Islas Naranjas. Es el mismo lugar donde ganaste la Liga Naranja la cual creo que se llama ahora Conferencia de Batalla Naranja. Bueno, lo que te quiero decir es que no estaré por lo menos dos meses en casa…”-

-Así que mi mamá se fue a un crucero eso quiere decir que tengo la casa para mí solo.- dijo de manera triunfante, pero de repente recordó a Marina y a Yellow. –Lo que quise decir es que la tenemos para nosotros-

-Eso significa voy a dormir contigo hermanito- decía Yellow mientras sus ojos se iluminaban y aparecía cierto sonrojo en sus mejillas.

-Eso quise decir. Y tu Marina aceptas dormir en mi humilde casa.- dijo Ash preguntándole a su querida amiga de cabello azul cielo y coletas si deseaba dormir en su casa.

-La verdad yo no quiero ser una molestia…- antes de continuar fue interrumpida por la rubia.

-Marina vamos, no creo que tengas otro lugar a donde ir.- decía Yellow intentando hacer que Marina aceptara la oferta.

-Vamos será divertido- dijo Ash insistiendo que Marina se quedara.

-Bueno pues…- pero no logro terminar porque Yellow se le acerco al oído.

-Marina si te quedas a dormir ambas podríamos dormir con mi querido hermano.- finalizo Yellow.

No hizo falta más pues de repente la cara de Marina se puso roja por aquel comentario de Yellow. De repente se imagino a ella y Ash como Yellow abrazándose en la cama. Se imaginaba vivir con Ash y su hermanita, pero de repente regreso a la realidad.

-Sí, acepto dormir contigo Ash- ella no supo lo que dijo pues aun estaba un poco embobada por aquellos pensamientos.

-Ahm… ok- dijo Ash con cierta confusión en las palabras de Marina.

Yellow de repente sintió un ataque de celos, pero recordó que ella le había propuesto eso a Marina.

-¿Qué más dice la nota hermanito?- dijo Yellow con curiosidad saliendo de sus celos.

Antes de poder decir algo la leyó y de repente su cara se puso roja como un tomate. Marina se para de donde estaba sentada y con Yellow leyeron la nota y sus rostros se pusieron todavía más rojos y soltaron ambas una adorable risa, menos para Ash.

- ¡Ya dejen de reírse! - ordeno Ash siendo ignorado por las jovencitas.

-Peo hermanito… eso es tan… Jajajaja.- carcajeaba Yellow sin poder terminar la frase.

-Vamos Ash… no te… no te enojes- decía Marina mientras lloraba de la risa.

“…bueno eso es todo. Ah, por cierto no se te olvide cambiarte la ropa interior. Te quiere tu madre.”

-Mamá.- decía Ash un tanto avergonzado por lo que había escrito su madre en la nota. –Aun lejos en un crucero tenía que pasar por esto una vez más- finalizo con un gran sonrojo mientras veía a Marina y a Yellow rodando de un lugar a otro de la risa.

Después de que todo se normalizara Ash pasaría a mostrarles cada parte de la casa. Cuando termino de mostrarles los puntos principales de la casa como la cocina y el baño se dirigió a su cuarto.

-Bien este es mi cuarto, pero, hoy dormirán aquí.- dijo Ash mostrando su habitación. –Es un poco pequeña, pero sé que ustedes dos dormirán muy bien aquí- finalizo Ash mientras se dirigía a poner sus medallas de la región Unova.

Marina se dirigió a ver la colección de medallas y premios que estaban en un estante.

-Wow, Ash ¿estás medallas son tuyas? – pregunto Marina admirando la increíble colección de medallas que Ash tenía.

-Sí, desde que viaje por Kanto- dijo apuntando la colección de medallas que pertenecían a la liga Añil. –Fue el inicio de mi aventura, luego pase por Johto, Hoenn, Sinnoh y Unova.- relato al momento de recordar cada viaje que hizo.

-Vaya, pero, ¿por qué esta medalla está arriba de las demás?- pregunto Marina al observar cierta medalla de Kanto.

-Esa es la medalla Pantano, me la dio la líder de gimnasio de ciudad Azafrán, Sabrina la psíquica- dijo Ash al momento de recordar a la líder de gimnasio. –Tuve que pasar por muchos problemas para poder conseguirla, pero al final lo logre con ayuda de un Hunter. Después de eso no la volví a ver nunca más- Ash se noto un poco triste, pues le había llegado la noticia de que Sabrina estaba desaparecida desde hace un año y se le daría por muerta en unos días. El deseaba volver a pelear con ella, pero escuchar eso fue una de las muchas causas de su derrota en Unova.

-Vaya, pero ella no está…-

-Ella está viva lo sé.- interrumpió Ash mientras veía con detenimiento la medalla de Sabrina.

De repente Marina se sintió como una tonta, pues ella no debió de haber dicho eso. –Ash… ¿Sabrina es… es tu novia?- de repente esas palabras salieron de la boca de aquella chica que cerró los ojos esperando un sí.

-No-

Marina abrió los ojos y observo como Ash le estaba mirando algo confundido.

-¿sucede algo?- pregunto el azabache mientras se acercaba un poco a Marina.

-No nada- de repente la felicidad había invadido su ser de nuevo, pero sabía que Ash tenía ciertos sentimientos hacía la exlíder de gimnasio.

-Ash, este es el trofeo de la liga Naranja, ¿verdad?- pregunto Yellow mientras intentaba alcanzar el trofeo que Ash tenía hasta mero arriba.

Ash al ver a su tierna “hermanita”, termino cargándola para que ella pudiera bajar el trofeo, sin percatarse que un gran sonrojo había aparecido en las mejillas de ella.

-Gracias- dijo Yellow, mientras contemplaba aquel trofeo dorado que le pertenecía a su hermanito mayor.

Marina volteo a ver y también lo observo y se sorprendió al ver que él fue el último campeón de la liga Naranja, pero de repente su mirada se centro en cierto titulo y medallas que estaban ahí.

-Felicitaciones por haber alcanzado conquistar la batalla de la frontera. Este título se le otorga reconociéndolo como un As del Frente de Batalla al entrenador Ash Ketchum. También se le otorga el titulo de cerebro de batalla, siendo reconocido como un miembro oficial.- dijo Marina cuando de repente sus ojos se abrieron. -¡¡¡AHHH!!!- grito Marina y volteo para señalar a Ash – ¡Tu eres Ash Ketchum, el famoso entrenador de Kanto, conocido como el octavo miembro de la batalla de la frontera y uno de los mejores entrenadores del mundo!- grito aun sin poder creer que estaba con Ash Ketchum.

-Y yo que pensé que Red y Green estaban exagerando con eso- dijo mientras reías un poco por la actitud de su amiga. –Pues sí, soy el último campeón de la Liga Naranja, y Scott como los Cerebros de Frontera me llaman el octavo cerebro.-

-Marina, a mi hermano no le gusta mucho la fama. ¿O enserio te gusta hermanito?- pregunto Yellow volteando a ver a su hermano.

-No, no me encanta tanto la fama- recordando como estuvo por lo de su película en Unova.

-Es cierto, aparte hiciste una película en Unova- dijo Marina recordando cierta película que vio.

De repente Ash se le vinieron los líos que pasó y los golpes que recibió de Iris porque nunca podían salir de los centros pokemon.

- ¿Tienes una película donde tú eres el protagonista?- cuestionó Yellow mientras se imaginaba a Ash actuando en una película.

-Sí y se veía muy sexy, me acuerdo que a cada rato me lo imaginaba como mi novio y que los dos dormíamos…- de repente Marina recordó que estaba con Ash y estuvo a punto de decir algo que no debía –No es lo que te imaginas… yo solo decía… yo- Marina estaba roja de la cara y trataba de evitar que Ash pensara mal de ella. –No me veas- dijo mientras se tiraba a la cama y se cubría el rostro con la almohada.

-Wow, voy a ver esa película- dijo Yellow mientras se sentaba en la cama e intentaba hacer que Marina se sintiera mejor.

-Por favor no pienses mal de mí- dijo Marina mientras ocultaba su enrojecido rostro en la almohada de Ash.

Ash solo se río un poco por la actitud que tomo su amiga, pues también Dawn le había dicho lo mismo. De repente ciertos recuerdos llegaron a su mente unos alegres y otros dolorosos.

-Ash ¿sucede algo?- pregunto tanto Marina como Yellow, pues se preocupaban mucho aquel chico.

-No es nada estoy bien- dijo Ash mientras se rascaba la cabeza. –Por cierto y ¿Pikachu?- pregunto pues no sabía dónde se encontraba su pequeño amigo.

-Cierto, “chuchu” tampoco esta- dijo Yellow de repente, tanto hermano como hermana se quedaron pensando.

-El laboratorio del Profesor Oak- dijeron al unisonó.

-Bueno, iba a ir con el profesor Oak pero parece que ya se está haciendo un poco tarde.- decía Ash mientras veía como el sol se ocultaba tras las colinas del pueblo. –Bueno mañana iremos por Pikachu, ahora a preparar la cena- finalizo Ash mientras bajaba a preparar la cena.

A lo lejos se podía apreciar una tormenta, en cierto lugar había dos chicas, ambas de cabello castaño, una de ellas llevaba un chaleco negro debajo de el una playera blanca, con unos shorts de mezclilla, unas botas y una gorra con una pokebola rosa la otra tenía cierta gorra que no cubría la parte superior de la cabeza, su vestimenta era una blusa azul con blanco junto con una falda rosa con unas mallas negras y tenis amarillo con blanco.

-Descuida Rosa, te prometo que te aliviaras muy pronto- dijo la chica de chaleco negro a su amiga.

-Hilda, me duelo mucho la cabeza- dijo la otra chica que respondía al nombre de Rosa. –Me siento muy…- ella no pudo completar la frase pues de repente vomito un poco.

-Rosa…- dijo Hilda, mientras unas lágrimas se formaban en sus ojos de color azul. Hilda llevo a su amiga a un árbol el cual tenía un hueco. –Rosa… voy por ayuda. Por favor resiste- dijo Hilda mientras le ponía su chaleco a su amiga y se iba corriendo hacía rumbo desconocido.

Hilda: Wow, esta introducción es... ¡LA MEJOR!
Marina: El drama, todo y al fin me entero de más cosas de mi Ash.
Hilda: Tu Ash, querras decir mi Ash.
Marina (furiosa): No el es mío.
Adrián: Y si lo comparten, pero piensenlo rápido, pues Rosa esta con él.
Marina e Hilda: ¿¡QUÉ!?
Adrián: No lo notaron, Rosa lo invito al parque.
Marina e Hilda: Lo compartiremos, vamos al parque.
Se nota cierto polvo levantado en dirección al parque.
Ash: Gracias, me salvaste.
Adrián: Me la debes Ash, por cierto ¿y Rosa?
Rosa (abrazando por detras a Ash) Aquí estoy.
Ash: Bueno al menos no voy a morir con mi dulce Rosa.
Rosa: (sonrojada) te quiero.
Marina: Con que aquí estaban.
Hilda: Ya lo sabía, el perfume de Rosa es inconfundible.
Ash y Rosa: (asustados) auxilio.
Adrián: Yo ya me voy. Por cierto saludos especiales a Liza White y Durazno así como a Ash Ronaldo.

 

Se que no es el mejor capitulo de todos, pero a mí me gusto. Por favor dejen sus reviews, acepto galletass. Bueno aquí esta el capitulo, pues no creo poder hacer más capitulos por esta semana.

Capitulo 12: "Las cuidare siempre"

-Debo de pedir ayuda- decía una chica de cabello castaño mientras corría por un sendero sin rumbo fijo –Todo esto es mi culpa, si yo no la hubiera obligado a acompañarme de seguro… no, puedo darme por vencida-

Truenos y lluvia, era lo que cubría el paisaje de Pueblo Paleta. Mientras tanto en una casa en la cima de una colina estaba una chica de cabello color naranja y ojos color esmeralda, estaba limpiando lo que parecía ser una mesa. Misty la líder del gimnasio de agua en Kanto estaba ayudando a su novio Tracy a cuidar a los pokemon mientras el profesor Oak no está.

-Vaya, ni puedo creer que Green y Red compitan por todo.- dijo Misty mientras recogía la mesa y los llevaba a Tracy para ayudarlo a lavarlos.

-La verdad Gary me lo advirtió, dice que puede ser sereno en situaciones de peligro, pero, cuando se trata de chicas o una competencia… es parecido a Ash- dijo Tracy mientras se imaginaba a Green vestido con las ropas de Ash.

-Pues la verdad Red si se parece mucho a Ash.- dijo Misty mientras guardaba los vasos limpios. –Por cierto Tracy, ¿qué dijo Ash, por qué no vino?- cuestionó la líder de gimnasio.

-Me dijo que no iba a poder venir pues estaba arreglando la casa. Yellow se va a quedar a dormir con él, ¿te acuerdas de Yellow, verdad?-

De repente Misty recordó cierta tormenta parecida a la que se estaba dando. Yellow era la niña que Ash conoció y que había adoptado como hermanita menor, eso había sucedido hace casi cinco años. –Sí la recuerdo, ella era muy apegada a Ash mientras estuvimos ahí.- decía Misty mientras recordaba aquellos viajes con Ash y Brock –Bueno, eso me explica mucho el hecho de que haya un Pichu con Pikachu.-

-Bueno, Ash también me dijo que una amiga se quedara a dormir con él. Pero tal parece que a ambas no le gustan las tormentas- dijo Tracy mientras reía al saber cómo estaría Ash.

-¿Una amiga? Acaso es May, o es la niña de Sinnoh, ¿cómo se llamaba? Ah sí, Dawn- Dijo Misty intentando adivinar quién era la chica que estaba durmiendo con Ash y Yellow.

-No creo que sea ninguna de ellas- dijo Tracy seriamente.

-¿Por qué lo dices?- pregunto Misty algo confundida.

-Porque Ash tuvo problemas con May como con Dawn. Cuando ellas se empezaron a hacer famosas, siempre decían que ellas lo habían hecho solas. A Ash no le importo, pero cuando dijeron que Ash debía renunciar a sus sueños, este se enfado, pues siempre le había apoyado a cada una en sus sueños. Tanto Dawn como May se sintieron indignadas y lo llamaron egoísta, al parecer ellas no soportaron la idea de que Ash le hablara de una manera un tanto verdadera. Después rompieron comunicación y por respeto a Ash y todo lo que nos ha ayudado, nosotros también.- explico Tracy la razón por la que no podían ser May o Dawn.

-¡Cómo se atreven! Ash siempre estuvo ahí para May, recuerdo que siempre le ayudaba a entrenar para ser mejor y lograr sus sueños en el gran festival. Aunque no conozco a Dawn, creo que cometieron ambas un error, pues sin la ayuda de él ambas no son lo que serían hoy.- dijo Misty, enfadada por lo que había escuchado.

-Misty, Tracy ya termine de alimentar a los pokemon, y pikachu y “chuchu” están dormidos en el cuarto.- dijo Green mientras se sentaba. –Por cierto, ¿qué estaban discutiendo?- la mirada de Green era igual a la de Gary, demostraba determinación pura.

-Te lo voy a decir- dijo Tracy mientras se sentaba a lado de Misty.

De repente cierto roedor eléctrico salió corriendo y salto a los brazos de Misty.

-Chaa- bostezo el roedor para cerrar los ojos.

-Vaya, se me había olvidado que a Pikachu le gusta dormir con alguien- río mientras el roedor se dormía en sus piernas.

- Y bien, ¿me van a decir lo que estaban hablando?- dijo Green mientras dirigía su mirada a Tracy.

Mientras tanto en la residencia Ketchum, la tormenta había azotado. A pesar de que la casa podía resistir todo eso y más sin sufrir daños no podía silenciar el ruido de los relámpagos.

- ¡¡¡AHHH!!! – un grito muy fuerte que hubiera despertado al Snorlax de Ash.

Rápidamente un chico de cabello negro y ojos claros empezó a correr a toda velocidad a una habitación, abriendo la puerta de golpe.

-¿Qué paso, están bien…- pero antes de poder terminar la pregunta fue derribado por dos chicas. –Auch, eso dolió-

-No me agradan las tormentas, las odio, las odio y las odio.- dijo una chica de cabello azul y coletas quien estaba aferrada a la playera del chico –Ash, por favor no te vayas.- decía con dulzura.

-Hermanito, no quiero dormir sola.- de repente otro trueno se escucho y todo el cielo se ilumino de un color azul, a pesar de ser de noche. –No quiero que te vayas- decía Yellow mientras intentaba ocultarse, se podía apreciar unas lagrimas saliendo de los ojos de cada una.

-Yellow, Marina no pasa nada.- dijo Ash un poco sorprendido por la reacción de las chicas.

-Eso dices, pero igual no me gustan los truenos y tú lo sabes hermanito- decía Yellow intentando convencer a su querido hermano mayor.

-Lo sé- Ash al notar que ninguna se quedaría en paz no tuvo otra opción que resignarse y pasar la noche con ellas dos –Esta bien me voy a quedar dormido con ustedes, pero yo dormiré en el suelo. A parte no quiero que griten, si de por si me quedo dormido.- dijo Ash mientras sus dos acompañantes se quitaban de encima.

-Gracias, te prometo que…- de repente otro trueno y aun más fuerte resonó por todo el pueblo. Ash por su parte casi perdía la vida por los fuertes abrazos que le daban Marina y Yellow.

-Al parecer esas dos no mentían- Ash fijo su vista en Marina y Yellow, más por el hecho de que ambas estaban dormidas abrazándolo. –Parece que no voy a poder dormir-

-Ash…- dijo Marina quien abrazaba a Ash de su brazo derecho, al parecer hablaba dormida. –Te quiero- el azabache al oír esto solo le abrazo un poco más y noto como una sonrisa se formaba en su rostro.

-Parece que tendré unos dos meses o más muy agotadores- dijo sonriendo mientras veía al techo y de repente sus parpados fueron más pesados hasta que se cerraron

Parecía, que la tormenta se intensificaba cada vez más, de repente Ash y las chicas se despertaron al escuchar un ruido, para ser más precisos el de una ventana rompiéndose.

-¿Qué fue eso?- despertó Ash de golpe mientras Marina y Yellow le imitaban. –Marina, Yellow no salgan por nada- dijo Ash mientras se vestía de volada.

-Pero…-

-Dije que no, no quiero que les pase nada.- Ash rápidamente se cambio y estaba a punto de salir cuando de repente agarro unas pokeballs –Tengan, estas son las pokebolas de snivy y oshawott, son pokemon de Unova, aun no han evolucionado pero son fuertes.- dijo mientras les entregaba las pokebolas a Yellow y Marina.

-Pero hermanito tú…- Yellow no pudo decir nada pues fue interrumpido por Ash.

-No pienso arriesgarme, pero tengo dos pokemon que son muy fuertes.- dijo mientras agarraba una pokebola negra con un dibujo de una llama blanca y otra de color blanco con un rayo de color negra.

-Además tienen a Unfezant, Charizard y Boldore, y mi pokedex les dirá que movimientos tienen.- dijo mientras cerraba la puerta del cuarto.

Marina y Yellow tenían la mochila de Ash y la pokedex, ambas miraban la puerta donde Ash salió –Cuídate- dijeron ambas mientras se sentaban en la cama y se miraban con cierta preocupación.

Ash bajaba lo más rápido las escaleras dirigiéndose a la cocina lugar de donde provenía el ruido.

-Esto no es correcto, pero debo de encontrar medicina para Rosa.- decía una chica quien al parecer estaba mojada y sucia. –Parce que esto…-

-¿Quién eres?- pregunto Ash quien estaba viendo fijamente a la intruso, pero de repente noto que el intruso era una chica, el vio como estaba ella –Oye, espera ¿estás herida?- Ash se acercaba a la chica sin ningún temor, de repente por temor la chica se alejo pero cayó al suelo.

-Por… por favor… no, no me hagas daño- decía la de cabellos castaños y ojos azules, mientras retrocedía en el piso cubriéndose su cara con sus delgados brazos. –Por favor no…- de repente ella empezó a llorar.

-Yo no te hare daño- dijo Ash mientras se acerco a la chica, quien aun con lagrimas dirigió sus ojos a los suyos. –Pero dime ¿por qué entraste así a mi casa y tomaste estas medicinas?- le pregunto Ash a la castaña.

-Por mi culpa, mi amiga se está muriendo. Ella… ella está muy enferma tiene fiebre y…- de nuevo la chica empezó a llorar. Ash al notar esto recordó como estaba Marina y Yellow cuando se conocieron. Sin pensarlo dos veces Ash levanto a la castaña y la abrazo.

-No te preocupes, yo la cuidare a ella y a ti.- dijo mientras la abrazaba, después se despego un poco y vio de nuevo los ojos azules de ella –Tan solo dime dónde está ella, para traerla y cuidarla a ella como a ti- dijo mientras le limpiaba las lágrimas. Un rubor había aparecido en las mejillas de aquella chica quien solo tría un playera blanca, shorts de mezclilla y botas.

De repente Marina y Yellow por preocupación bajaron a ver cómo estaba Ash y se llevaron una sorpresa al encontrarse con una chica sentada con la gorra de Ash en su cabeza. Al parecer ella estaba feliz pero a la vez con una gran preocupación en su rostro. No solo llevaba puesta la gorra de Ash si no también su chamarra.

Marina entro y la miro para después decir unas palabras -¿Quién eres tú?- pregunto Marina con la pokebola de Snivy en la mano.

-¿Dónde está mi hermanito mayor?- la que hablo esta vez fue la hermanita menor de Ash, Yellow.

-El fue a buscar a una amiga, me dijo que me quedara y que no saliera para nada.- dijo la castaña mientras se paraba y dirigía a Marina quien se puso atenta. –Me dijo que si me podían ayudar a preparar una cama pare ella. Yo no quise hacer esto solo es que todo lo que a ella le paso fue mi culpa.- dijo la castaña con una gran tristeza.

Marina se percato de la manera en como lo dijo. Esas palabras sonaban como a las que ella le había dicho a Ash en Ciudad Carmín, esta tristeza que le había invadido era la misma que reflejaban los ojos de aquella chica quien tenía puestas ciertas vestimentas de Ash. La peli-azul bajo la pokebola y se la dio a Yellow quien estaba muy confundida.

-El te ayudo cuando más necesitabas ayuda. El no se molesto por lo que ibas a hacer, ¿verdad?- dijo Marina mientras se acercaba lentamente a la castaña.

-El me dijo que me cuidaría y que fuera a buscarlas- al parecer aun había tristeza en las palabras de aquella chica.

-No lo conozco tan bien, pero si él dijo eso te puedo decir que eres muy afortunada.- Marina se sentó en el sofá de la sala y Yellow le imito –Ash no le importa tu pasa, lo que hiciste o quién eres, el te va a dar su cariño y apoyo. No sé si a él le encanta conquistar chicas y esa es la razón de su comportamiento o sí él es así por naturaleza, pero si me ha dejado encantada y no quiero perderlo nunca.- dijo Marina con un sonrojo en sus mejillas.

Yellow estaba impresionada, había escuchado como su amiga dijo abiertamente sus sentimientos hacía su hermano mayor.

Ash estaba corriendo, no le importaba en lo más mínimo la tormenta. El estaba corriendo en dirección a un bosque, después del encuentro que tuvo en su casa con esa chica. El estaba en el bosque, pero con toda la oscuridad y la lluvia era difícil de ver.

-Hilda, espero que me hayas dado la dirección correcta.- decía mientras más y más agua impactaba contra su cuerpo. De repente llego a una parte del bosque, más precisamente, estaba frente a un árbol que tenía un gran hueco. –Rosa- fue todo lo que salió de su boca al ver a una chica castaña en muy mal estado.

-Hilda, ¿eres… eres tú?- dijo la castaña al escuchar su nombre, apenas pudiendo pronunciar las palabras.

-No, mi nombre es Ash y vivo en un pueblo cercano.- dijo Ash mientras se acercaba a Rosa, pero esta como podía intentaba alejarse pero no podía –No te voy a hacer daño, conozco a Hilda.-

Los ojos de Rosa se abrieron y pudieron notar a aquel azabache. -¿Conoces a Hilda?- Fue todo lo que dijo.

-Sí, le prometí que te encontraría y que te cuidaría a ti como la cuidaría a ella.- dijo Ash mientras sacaba una cobija de una mochila que traía consigo y se la ponía, procurando taparla muy bien –Rosa, te prometo que no te hare daño, y que a partir de este momento siempre serás importante para mí.- dijo mientras le daba una medicina a Rosa, quien sin dudarlo la bebió.

Ash sin notarlo, le produjo un sonrojo a Rosa, no solo eso, le dio algo que siempre quiso pero jamás lo encontró: amor, cariño, protección y más. De repente Ash abrazo a Rosa y mientras veía como las gotas de lluvia caían y al horizonte se veían los rayos. Ash y Rosa se quedaron dormidos, pero esta última pronunciaba dormida el nombre de su nuevo amigo que le estaba cuidando y posiblemente aquella persona que jamás le había hecho experimentar ese sentimiento que tanto anhelaba.

Rosa: Sí tuve más acercamiento con Ash que Hilda.
Hilda: (llorando) Lo sabía Adrián, tu me odias.
Adrián: Hilda yo no te odio.
Marina: Pues parece que sí.
Adrián: ¡Que no la odio!
De repente Ash aparece y le da un beso en la mejilla a Hilda.
Hilda: (Roja de la cara) Ash tu me... me besaste.
Ash: Sí ahora, le voy a dar un beso a Rosa y Marina.
Rosa/Marina: (sonrojadas) Ash nos dara un beso.
Ash: Pues eso dije.
Lyra: Y cuando aparezco yo?.
Ash: ¿Lyra?
Adrián: Bien ya no den SPOILERS!
Lyra: Pero yo quiero dormir con Ash.
De repente la mirada asesinas de Marina, Rosa e Hilda estaban fijas en Lyra.
Ash: No otra vez. Lyra correeee.
Ash se llevo a Lyra de la mano mientras eran perseguidos por tres chicas muy hermosas.

 

Pense que no lograría subir la continuación pero lo logre, la historia dara un giro inesperado a la que originalmete iba a ser, pero eso si la hermana de Gary aparecera en dos o tres capitulos más.

Capitulo 13: "El nacimiento de nuevos sentimientos"

Era una hermosa mañana, al parecer la tormenta que había azotado la noche anterior no hizo daños como se esperaba. En el hueco de un árbol, estaban dos personas abrazadas para ser más exactos. Una de ellas era Ash Ketchum un joven que aun no sabe lo que va a ser de su vida, y la otra es una jovencita de cabello castaño largo con dos coletas llamada Rosa. Al parecer estaban abrazados, sin que nada les importase en esos momentos.

-Uhh… ¿Ya es de día?- dijo el azabache, mientras intentaba abrir los ojos. Cuando abrió por completo los ojos se dio cuenta que estaba abrazado a Rosa, aunque esta lo abrazaba mucho más fuerte a él. –Rosa- dijo mientras con una mano tocaba la frente de la chica. –Rosa, estas ardiendo, lo mejor será despertarte para darte más medicina- pensó Ash mientras intentaba despertar a la castaña.

-Me duele la cabeza- dijo Rosa, mientras daba un bostezo y se tallaba sus ojos, se veía tan tierna.

-Lo sé, aun tienes un poco de temperatura pero al parecer ya estas mejor.- dijo Ash mientras buscaba el frasco de medicina –Bien, ahorita te toca otro poco- dijo Ash mientras abría el frasco para darle un poco de la medicina.

-Sí- fue todo lo que dijo mientras Ash le acercaba esa medicina que la aliviaría, al momento de beberla hizo unos gestos muy graciosos por el sabor que tenía ese medicamento. –Ash, ¿ese fue el mismo medicamento que me diste?- pregunto Rosa quien aun parecía tener esos gestos.

-Sí es el mismo, lo que pasa es que ayer como estabas enferma y desorientada, dudo mucho que hayas podido saborearlo- dijo Ash mientras preparaba las cosas y sacaba una galleta de su mochila. –Bien, es hora de desayunar al menos esto- dijo Ash mientras le daba la galleta.

-¿Tu no comerás?- pregunto Rosa con la galleta en la mano.

-La verdad no.- dijo Ash mientras guardaba la cobija en la mochila.

-Pues yo tampoco- dijo Rosa mientras trataba de devolverle la galleta cuando de repente sonó cierto sonido peculiar. –Hay mi pancita, bueno tal vez coma un poco- dijo la castaña mientras observaba como Ash se reía de ella. –No te burles- dijo inflando sus mejillas.

-Bueno, está bien- dijo intentando disculparse para después continuar con la preparación de las cosas. Pasaron unos minutos cuando por fin Rosa termino su desayuno.

-Bien ya termine, ¿ahora qué?- pregunto rosa mientras veía a Ash con cierta ternura.

-Vamos a ir a mi casa, pues deje sola a Hilda con mi hermanita y una amiga. La verdad espero que no hayan peleado- dijo mientras se imagina como puede estar su casa en esos momentos –Bueno confiare en Marina- dijo Ash mientras se levantaba.

-¿Marina?- se pregunto la castaña para sí misma. –Tal vez sea su hermanita o su amiga, pero si en vez de eso es su… no, no lo creo- lo dijo en su mente, pero al parecer su cuerpo detonaba cierta preocupación.

-¿Estás bien?- pregunto Ash mientras ponía una mano sobre la frente de su amiga. –Aun tienes un poco de calentura, pero no estas ardiendo, ¿te pasa algo?- al parecer Ash estaba muy preocupado por su amiga.

-¿Se está preocupando por mí? Si lo está haciendo- de repente un sonrojo aprecio en sus mejillas –Sí… si Ash… yo estoy bien- dijo con un ligero nerviosismo en sus palabras, tal vez por ese sentimiento que de repente estaba surgiendo de forma lenta en su corazón.

-Ok, sabes no quiero que te enfermes. Bueno creo que te cuidare otra noche.- dijo Ash mientras se levantaba y ayudaba a Rosa a levantarse, pero esta no se podía mantener de pie, así que antes de caer abrazo a Ash, quien a su vez la sostuvo con un abrazo.

-Lo siento, al parecer aun sigo débil para caminar por mi misma- dijo la castaña de ojos azules con un tono de arrepentimiento y vergüenza. De repente noto como su cuerpo fue movido y se encontraba cargada por Ash.

-Bueno, creo que tendré que apurarme, si no Hilda me va a matar- dijo Ash entre risas, intentando hacer que Rosa no se sintiera mal.

-Sí, puede que Hilda este como loca, pero ella solo se preocupa por mí, pero eso no le quita lo loca- dijo Rosa, mientras se imaginaba como estaría su amiga, y llegándose a imaginar si se entera que ella y Ash durmieron juntos. –Bueno, solo espero que este bien-

-Lo está, no creo que nada malo les pase a ti y a Hilda.- dijo Ash mientras iba caminando por el sendero por el que llego, se podía apreciar como el sol salía entre las montañas en el horizonte. Poco a poco la figura de ambos jóvenes se perdía con el horizonte.

Mientras tanto en la casa de Ash, tres hermosas jóvenes estaban durmiendo, bueno mejor dicho dos. Marina y Yellow estaban dormidas, al parecer estaban soñando con cierto entrenador. Hilda, la nueva inquilina de Ash en su casa estaba despierta, pero no quería levantarse de la cama.

-¿Por qué me siento extraña? Desde ayer me siento diferente, como si llevara años conociendo a Ash.- decía en su mente la castaña quien no se había quitado la chamarra de Ash en toda la noche. –Pero lo más extraño, fue que antes de salir, eran esas dos pokeballs de color negro y blanco-

Antes de irse, Ash había mostrado dos pokeballs a Yellow y a Marina, mismas que logro ver la castaña.

-Uhh… ¿ya amaneció?- dijo la pequeña rubia mientras se levantaba y se tallaba sus ojos. –Buenos días Hilda, ¿Cómo amaneciste?- pregunto la “hermanita” medio dormida a Hilda, la chica que estaba durmiendo a lado de ella.

-Bien, la verdad, dormí de maravilla- dijo Hilda mientras agarraba la gorra de Ash y la apretaba fuertemente al pecho. Una sonrisa se dibujo en su rostro –Ash, es una gran persona ¿verdad?- Hilda, seguía abrazando fuertemente esa gorra como si fuera un tediursa de felpa.

-Así es. Ash es muy diferente a cualquier persona. Aunque pueda ser muy infantil la mayoría de las veces, aunque últimamente eso no se ha presentado, el siempre cuida a las personas que aprecia.- dijo Yellow, mientras intentaba no despertar a la amiga de Ash, Marina, pero no lo consiguió.

-Se que Ash es un buena persona, y es increíble y todo eso, ¡pero déjenme dormir!- dijo la peli-azul intentando dormir nuevamente sin ningún éxito. –Bueno, ya que están hablando de él y estamos despiertas, no sería bueno preparar un buen desayuno para cuando llegue o un almuerzo- dijo Marina, mientras se ponía cierta playera que le quedaba un poco grande.

Hilda y Yellow se le quedaron mirando de cierta manera, sobre todo con una duda muy grande: ¿de quién era esa playera? No hacía falta decirlo, era de hombre, era del gusto de Ash y por si fuera poco el armario de Ash estaba algo desordenado. Yellow se acerco a Marina y la vio con unos ojos penetrantes.

-¿Por… por qué… me miran así?- pregunto Marina un tanto nerviosa, pues Hilda solo se reía con malicia y Yellow le miraba de una forma un poco acusadora.

-Parece que no soy la única que no tiene ropa de Ash para usarla- dijo Hilda mientras se levantaba de la cama. La manera en que lo dijo parecía solo para molestar a Marina. Pero de repente su rostro cambio a uno triste, el cual lo noto Yellow, quien dejo de acosar con su mirada a la “amiga” de su queridísimo hermano mayor.

-¿Estás bien, te sientes mal Hilda?- pregunto la pequeña rubia quien se acerco a la castaña.

-Vamos, no lo puedes decir, al fin y al cabo, no le diremos nada a nadie.- dijo Marina un poco más tranquila acercándose a la castaña.

-Ash es una gran persona, pero, se que él me dijo que nos cuidaría y todo eso pero, se que solo seremos una carga para él- de repente los ojos de Hilda se tornaron vidriosos –Lo que digo es que una vez que Rosa este mejor nos iremos.- de repente Hilda estaba siendo abrazada por Yellow.

-No tienes que irte, mi hermanito te va a cuidar y te va a dar cariño.- dijo Yellow intentando hacer que Hilda entrara en razón por así decirlo.

-Tú también has pasado por algo doloroso, y no es que creas que tu y Rosa puedan ser un carga para él, es que tú no quieres salir lastimada.- la seriedad y el tono de las palabras con las que hablo Marina daban a entender que ella sabía exactamente lo que sentía Hilda en esos momentos.

Hilda estaba con una cara que dejaba en claro que la peli-azul dio en el clavo. De repente una gota se venía deslizando por el suave rostro, de repente varios recuerdos pasaron por la mente de la castaña, sus ojos que parecían dos grandes zafiros se llenaron de lágrimas.

-Hilda- fue todo lo que dijo Marina antes de abrazar a la castaña. –Ash te va a querer y te va a cuidar, se que duele, es algo que una persona no quiere sentir. No puedo decir cómo pero el te va a dar ese sentimiento que te ha hecho sufrir, el te va a dar amor.-

Ash estaba caminando con Rosa en sus brazos, al parecer estaban platicando muy a gusto como si nada importara hasta que Rosa menciono algo.

-¿Ustedes dos vinieron a buscar al novio de Hilda?- pregunto Ash mientras veía a la castaña con una cara de duda.

-Sí- dijo moviendo la cabeza. –Vinimos a buscarlo, su nombre es Hilbert. Aun recuerdo cuando Hilda me convenció de venir aquí jeje, sigo sin saber como lo hizo. Bueno cuando supimos que iría a Kanto, ella se puso triste, por lo que nosotras dos iniciamos el viaje para acá hace cerca de un mes.-

-Por lo que me dices, ella podría hacer todo para encontrarlo y ser feliz con él- dijo Ash mientras intentaba pensar por qué Hilda se veía tan feliz cuando le dijo que la cuidaría.

-------------------------------------------------------Flashback-----------------------------------------------------------------

-Por… por favor… no, no me hagas daño- decía la de cabellos castaños y ojos azules, mientras retrocedía en el piso cubriéndose su cara con sus delgados brazos. –Por favor no…- de repente ella empezó a llorar.

-Yo no te hare daño- dijo Ash mientras se acerco a la chica, quien aun con lagrimas dirigió sus ojos a los suyos. –Pero dime ¿por qué entraste así a mi casa y tomaste estas medicinas?- le pregunto Ash a la castaña.

-Por mi culpa, mi amiga se está muriendo. Ella… ella está muy enferma tiene fiebre y…- de nuevo la chica empezó a llorar. Ash al notar esto recordó como estaba Marina y Yellow cuando se conocieron. Sin pensarlo dos veces Ash levanto a la castaña y la abrazo.

-No te preocupes, yo la cuidare a ella y a ti.- dijo mientras la abrazaba, después se despego un poco y vio de nuevo los ojos azules de ella –Tan solo dime dónde está ella, para traerla y cuidarla a ella como a ti- dijo mientras le limpiaba las lágrimas. Un rubor había aparecido en las mejillas de aquella chica quien solo traía un playera blanca, shorts de mezclilla y botas.

-Ella está cerca del bosque al norte de aquí- dijo mientras veía como Ash se quitaba su chamarra y se la daba. -¿Por qué me das tu ropa? Pregunto Hilda mientras veía los ojos color chocolate de Ash.

-Porque me preocupas, no quiero que te enfermes, no tienes por qué sentir miedo.- dijo Ash mientras veía como las delicadas manos de Hilda agarraron la prenda y se la ponía. –Te ves graciosa- dijo Ash ya que a Hilda le quedaba un poco grande.

-Es muy calientita- dijo mientras sus mejillas se tornaban rojas. De repente, como si fuera por impulso o no ella abrazo a Ash mientras unas lágrimas bajaban de su rostro –Por favor cuídate y cuídala a ella-

-Tú también cuídate- dijo Ash mientras terminaba con ese corto pero cálido abrazo, mientras un rubor aparecía en sus mejillas. Antes de irse él le pone su gorra a Hilda y se va.

-Te quiero- dijo Hilda para sí misma pero fue escuchada por Ash mientras este cerraba la puerta de la entrada.

---------------------------------------------------------Fin del Flashback--------------------------------------------------

-Te equivocas Ash- dijo Rosa con cierta seriedad y enojo el cual noto el entrenador –Ash es un bastardo que solo jugó con los sentimientos de Hilda, una vez que ella lo encontró el ya andaba con otra.

Ash poco a poco sabía un poco más sobre la castaña que irrumpió en su casa. Si bien era seguro que detrás de cada una de ellas había una historia triste como la de Marina, el noto que había algo que tenían en común: él.

-Bueno, parece que tu también llegaste a sentir algo por alguien ¿verdad?- dijo Ash mientras divisaba su casa. Sin darse cuenta cierta tristeza invadió a la castaña.

-El falleció.- salió de su hermosa boca una palabra tan triste.

Ash de repente se sintió como un tonto, sabía que el pasado de cada una de ellas debías ser triste. El jamás había sufrido una perdida más allá de la de ganar un campeonato, pero no se comparaba con perder a aquella persona que era tan especial para él.

-Lo siento, yo no sabía que tú…-

-No importa- dijo la castaña mientras le daba una sonrisa a Ash –El jamás se preocupo por mí, el nunca me visitaba si me lastimaba, a él solo le importaba ganar la estúpida liga y así ser famoso… yo jamás le importe a nadie-

Ash noto con cada palabra que Rosa decía sentía como ella había sufrido mucho más con lo último que dijo. Unas gotas se deslizaban por las mejillas de Rosa, ella como Hilda habían sufrido mucho antes de encontrarse con él.

-Tú me importas mucho, así como me importa mi hermanita, Marina e Hilda.-Ash pudo notar como Rosa le miraba, esos ojos que detonaban, que pedían a gritos que alguien les cuidara, que las regañara y que les diera cariño. –Puede que no sea el mejor entrenador del mundo, puede que aun sea muy infantil en muchos aspectos como han dicho muchas personas… pero te prometo Rosa que a ti y a todas las cuidare siempre.- finalizo Ash mientras estaba a escasos pasos de la puerta de su casa.

Rosa miro los ojos del entrenador que no había logrado mucho en su vida, de repente sintió que algo en su pecho le ardía, su corazón palpitaba muy fuerte. Hilda y Rosa no lo sabían pero un sentimiento que Marina tenía hacía Ash les estaba floreciendo muy rápido en sus lastimados corazones.

-Te quiero- dijo Rosa mientras abrazaba con mucho cariño al azabache quien estaba a punto de abrir la puerta de su casa solo para ser recibido por tres chicas que lo derribarían al suelo, saliendo nada más el lastimado y viendo torchics que giraban alrededor de él.

Bueno este es la continuación que prepare, ya estoy iniciando el proximo capitulo y si no lo termino prometo subir un one-shot, tal vez esta vez sea AshxSabrina, no lo se la verdad porque aun tengo uno de Ash y Lyra.

Yellow: Me gusto mucho este capitulo, pero no puedo tener más contoacto con mi hermanito, porfis , di que si.
Marina: Yellow, aun eres muy chica para andar pensando en eso.
Yellow: Pero solo quiero que me lleve al parque y juegue conmigo como lo hacia antes.
Marina: (Roja) ¿Ash jugaba contigo?
Yellow: Sí.
Rosa: (Impactada y sonrojada) Espera Ash... ya sabes... ¿jugaba de esa manera contigo?
Yellow (Roja) !No me refiero a eso¡, oigan, dond estan Ash, Hilda y Lyra.
Ash: Bueno listas.
Lyra/Hilda: Sí.
Ash: ¡que empieza la guerra de helado!
Pikachu: "Cuando las demas vengan, se le va a armar a Ash"

 

Bien pense que no podría tener cápitulo, pero la saga va atener un giro inesperado. Lyra ya llego y por lo tanto hare cápitulos de relleno. Pero es hora de la parte más oscura de todas talvez sean 5 capitulo como máximo. Un saludo a Peete quien le dio un vistazo a este fic que no es mejor que el de él. Bien sin más que decir aquí esta el capitulo.

Capitulo 14: "El principio de una guerra, parte 1"

-Por favor, ya no lo hagas- se escuchaba entres sollozos la voz de una chica, el lugar es un cuarto oscuro. En medio del cuarto estaban tres figuras, las cuales dos se podían distinguir como unas chicas, una de ellas estaba tirada en el piso y la otra estaba de rodillas a su lado.

-Es… eso es todo… eso es todo lo que el gran Silver puede hacer- decía con una gran esfuerzo una de las chicas para hablar, al parecer se estaba dirigiendo a la persona que estaba de pie frente a ellas.

-Sabes, yo pensé que la gran psíquica Sabrina podía más, pero ahora me doy cuenta que solo eras una farsa- dijo un joven de cabello largo rojo con el uniforme del Equipo Rocket. Su cara mostraba frialdad pura, un odio tan grande que lo veía la una de las chicas. –Tú por lo tanto Lyra me serás de utilidad. Puede que Sabrina este débil, pero me será de utilidad, ahorita no pero pronto me servirá.

Cierta chica de graciosas coletas y pelo castaño cerraba los ojos mientras lágrimas y más lágrimas se deslizaban por sus mejillas. Sabrina tenía su cara con golpes, intentaba ponerse de pie, pero no podía. La exlíder de gimnasio que todos creían muerta estaba luchando por no estarlo.

-Lyra- dijo Sabrina en la mente de Lyra gracias a sus poderes psíquicos debido a que estaba muy lastimada como para hablar.

-Sabrina- dijo la castaña mientras abría un poco los ojos, vio como su amiga estaba de pie, la exlíder de gimnasio de ciudad Azafrán estaba en guardia dispuesta a pelear. - ¡No lo hagas Sabrina es muy peligroso no quiero que… ¡ -

-No voy a morir, no sin antes volver a verlo- dijo Sabrina mientras veía a Silver quien al parecer preparo a dos Mightyena para que atacaran a la chica de cabello violeta. –Silver… yo no voy a ayudarte jamás-

-Eso lo veremos… ¡Chicas acaben con Lyra!- dijo Silver a sus dos pokemons los cuales se lanzaron sobre Lyra. Sabrina al ver el peligro se intrpone entre el ataque de los pokemon, recibiendo mucho daño y escupiendo sangre y cayendo de rodillas frente a la castaña.

-¡NO!- gritaba la castaña quien no podía creer lo que veía. Lágrimas salían de sus ojos color avellana

-Lyra… corre y encuéntralo- dijo Sabrina quien al parecer ya no le quedaban fuerzas.

La castaña solo obedeció lo que dijo Sabrina sin siquiera pensarlo, le dolía dejar a su amiga ahí. Ella solo quería ganar una estúpida liga regional, ella solo quería ser una gran entrenadora… ella solo quería ser como Ash. Lyra abrió la puerta del cuarto la cual solo daba al tejado de un edificio en medio de una ciudad muy conocida. La ciudad Verde era el lugar donde estaban presas de su libertad.

Unas lágrimas se formaron en los ojos de la chica psíquica quien alguna vez fue tan mala como la persona con la que estaba luchando. Ella fue así hasta que lo conoció a él: Ash Ketchum. –Ash, perdóname te falle. Tu nunca te rendías ante nada y eso lo sé, tú me lo demostraste aquella vez en el gimnasio. Yo ya no puedo más solo espero que la muerta venga por mí y ya no pueda sufrir más, solo espero que un día de estos nos volvamos a ver. Ash te amo.- lentamente cerraba los ojos mientras veía uniformados del Equipo Rocket llegar a donde estaba ella.

-Es imposible escapar mi querida Kotone- dijo Silver quien ahora estaba con uniformados del Equipo Rocket y muchos pokemon rodeándole. –Vamos únete a mí o… muere. Sabes que es la única salida cierto-

Lyra sabía que sin importar cual opción tomara siempre sería el mismo camino. El tiempo pasaba muy lentamente y los recuerdos pasaban ante sus ojos. Lagrimas bajaban de por su hermoso rostro.

-Adiós- fue todo lo que dijo antes de lanzarse al vacío. –“Lo lamento Sabrina... lo lamento mucho. Solo fui una tonta, si no hubiera hablado con él yo… te extraño Ash. Gracias por todo.”- pensaba Lyra mientras caía y pensaba que pasaría después de la muerte, acaso ya no sufriría más. Ella jamás encontraría la respuesta, al menos no ese día. No, ese día ella no iba a morir.

-Te tengo- dijo una voz conocida para la castaña.

Lyra poco a poco abria los ojos solo para darse cuenta que estaba sujetada por él entre sus brazos. Unos ojos chocolates se encontraron con esos hermosos ojos color avellana. -¡ASH!- grito la castaña solo para abrazar más fuerte a Ash Ketchum su salvador.

-Tranquila ya paso- dijo Ash mientras trataba de calmar a la castaña quien estaba llorando y no se iba a separar del entrenador de Pueblo Paleta. Ambos estaban sobre el Charizard de Ash y Pikachu estaba encima de la cabeza del majestuoso pokemon.

-Así que hermano… acabas de salvar a otra damisela. Es bueno por fin conocerte, lástima que te tengo que matar- dijo Silver para sí mismo. Los ojos carmesí de él se encontraron con los ojos café claro de Ash.

De repente como un rayo impacto en el edificio. La gente alrededor de aquel edificio pudo verlo lo más extraño es que no estaba nublado ese día. Un gran dragón naranja con una llama en su cola surcaba los cielos rugiendo de manera majestuosa. En medio de donde había caído ese rayo ahí estaba él, Ash Ketchum estaba parado con pikachu en su hombro y dos pokebolas en las manos, dos de color negro y blanco.

-¡Charizard llévate a Lyra muy lejos de aquí!.- ordeno Ash a uno de sus más antiguos pokemon. –Por favor amigo cuídala bien- Ash solo recibió un rugido con el cual Charizard demostraba que la protegería a toda costa.

Charizard se alejaba lo más rápido posible de ahí. A pesar de la orden de Ash el sabía que los dos pokemon que aprecerían serían muy poderosos y por lo tanto tener a Lyra sería muy peligroso para ella e incluso para él.

-Cuidate Ash- dijo Lyra mientras Charizard se alejaba aun más de la zona.

-Ataquen- ordeno Silver mientras regresaba al interior del edificio.

Todos los agentes del equipo Rocket sacaron desde Mightyena hasta Salamance.

-Niño eres un tonto por enfrentarte al gran Equipo Rocket- dijo uno de los soldados mientras reía y sacaba una pistola y le apuntaba a Ash. –Le hare un favor al mundo, pero antes danos un poco de diversión. Ivysaur quiere jugar con esa apestosa rata-

-Mejor que eso… ¿conocen al pokemon Yin y al pokemon Yang?- de repente el cielo empezó a tornarse oscuro y rayos bajaban a enorme velocidad de él. Los soldados no comprendían lo que pasaba. A lo lejos en cierto parque de la ciudad Charizard llegaba justo donde debía de ir. Ahí estaban Red, Green, Yellow, Marina, Hilda y Rosa quienes estaban con médicos y policías.

-¡Ya llego!- grito Red mientras corría para ver si estaba bien Charizard. –Green ayudame- dijo Red mientras intentaban bajar a Lyra. Green y Red ayudaron a la castaña a bajar mientras unos médicos preparaban una camilla para atender sus heridas.

-Ya todo está bien Lyra, Ash va a traerla de regreso. El jamás se ha dado por vencido y no creo que se dé por vencido el día de hoy.- dijo Marina quien al parecer estaba tratando de hacer reconfortar a la pequeña castaña la cual solo termino abrazando a Marina. –Ya, ya todo está bien. Ellos no te pueden hacer daño- dijo la peli-azul mientras trataba de hacer sentir mejor a la castaña de graciosas coletas.

Hilda y Rosa se acercaron para hacer sentir mejor a Lyra, quien al parecer no quería estar sola en esos momentos. Mientras tanto Red y Green preparaban unos pokemon de Ash junto con la Oficial Jenny y varios policías para atacar lo que se cree es la sede del infame Equipo Rocket. Mientras tanto Charizard se acercaba a la pequeña rubia quien sostenía un pichu en sus brazos.

-Charizard- dijo Yellow mientras acariciaba la cabeza de uno de los más fieles pokemon de Ash. –Sé que mi hermanito estará bien, pero, que pasara si ella… no, no debo pensar en eso- dijo Yellow mientras veía como los oficiales y sus amigos Green y Red darían el primer asalto a uno de los cuarteles de la organización más poderosa de los últimos años. –Hermanito cuídate- dijo mientras una lagrima bajaba de sus ojos antes de mirar hacia donde se produciría el primer encuentro de lo que vendría siendo uno de los mayores sucesos de la historia.

-Vamos movilicen a todos, debemos de ayudar a Ash Ketchum- daba una orden a todos sus oficiales la oficial Jenny.

-Así que ese edificio es la sede del Equipo Rocket- dijo una señora mayor conocida por muchos como Agatha, la miembro de la elite four de Kanto.

La oficial Jenny volteo a ver a la actual líder de gimnasio de ciudad Verde, quien era el reemplazo de Giovanni -Señora Agatha, Red y Green van a ayudar en el asalto. Usted cree que él…-

-No- interrumpió la anciana –El no es tan tonto para dejarse atrapar así de fácil- finalizo para ir a donde estaban Red y Green.

-¡Salgan ya!- dijo Ash mientras dos dragones uno de color blanco y uno de color negro bajaban de los cielos después de salir de cada una de las dos pokebolas que Ash tenía en las manos. Por primera vez en la historia de Kanto dos legendarios de la región más lejana aparecieron en el oscuro cielo de la ciudad.

-¿Pero qué?- Silver logro ver la oleada de energía que prevenía del tejado.

Miedo, miedo era lo que cada miembro del Equipo Rocket sentía en esos momentos.

-Saluden a Reshiram y a Zekrom- dijo Ash mientras los dos dragones se posicionaban detrás de él. –Ahora díganme… ¡díganme donde esta ella!- grito Ash mientras su pikachu generaba una gran cantidad de energía. Por primera vez el Equipo Rocket conocería la furia de cierto entrenador que para muchos era más que un simple perdedor.

Bien este capitulo creo que ha dejado muchas intrigas. Es muy oscuro y tenemos a Lyra la cual va a vivir con Ash segun mi poder sobre este fic.

Lyra: wow... ¡ME ENCANTO! Tiene todo un drama, si que soy muy buena. Mi querido Ash me salva... me encanto.
Marina: No salgo casi nada.
Hilda y Rosa: Miranos a nosotras.
Lyra: Creo que se debe a que hay un salto temporal. Probablemente en el proximo capitulo veremos la retrospectiva de como Ashy dio con el edificio.
Ash: No se, siento que Leaf deberia estar.
Marina, Hilda, Rosa y Lyra: (ojos llorosos) Ya no nos quieres.
Ash: Soy un idiota. Claro que las amo, son mis princesas.
Rosa: No lo creo... snif... tu ya te aburriste de nosotras.
Hilda: Lo sabía solo eran mentiras.
Gary Oak: Metiste la pata hermano.
Ash: Lo sé. ¿Quieren ir de compras para perdonar a este idiota?
Todas: Amamos a nuestro idiota.
De repente Ash es derribado por todas la chicas y estaba siendo besado por cada una. Más por Rosa y Marina quein al parecen luchaban por él.
Gary: Bueno esto fue todo por hoy. Mientras el harem del idiota de mi hermano crece, su vida se vuelve más corta.
Flannery: Gary dijiste que salvarías a tu amigo.
Gary: Lo intente.

 

Hola amigos, bueno son mis amigos verdad?. Dejando de lado eso, aquí les traigo la continuación un lunes. Lo se soy muy Jarcor. Los capitulos oscuros se acercan ¿qué paso con Sabrina? Todo a su tiempo mis amigos, pronto veremos más y más cosas intrigantes en este fic.

Capitulo 15: "El principio de una guerra, parte 2"


-¡Ash!- gritaba una chica de cabello claro, se podía ver que estaba sufriendo. –Por favor, ayúdame-

Un joven de ojos cafés color chocolate y cabello negro corría a toda velocidad para dar con la chica la cual le estaba pidiendo a gritos ayuda. -¡¿Sabrina dónde estás?!- gritaba el entrenador sin recibir ninguna respuesta más que aquellas imágenes de la exlíder de gimnasio sufriendo. –Maldición, si tan solo pudiera saber donde esta.-

De repente el chico de cabellos negros y alborotados se encontró con un recuerdo, fue el día en que conoció a Sabrina. Aquella chica de cabello verde claro le había causado problemas para conseguir la medalla de su gimnasio, pero al final se dio cuenta que ella solo necesitaba ser feliz. Cuando su Haunter le hizo reír él se dio cuenta que tal vez ella no era feliz, era infeliz. Antes de irse de ciudad Azafrán, Sabrina lo llevo a un lugar donde ella iba para tranquilizarse y fue ahí donde ella se despidió de Ash con un abrazo.

-Ash prométeme una cosa- dijo la chica de cabello verde mientras veía al joven azabache.

-Sí-

Sabrina solo bajo la mirada mientras se mantenía abrazada al cuerpo de Ash. –Ash… yo… pro… promete que me visitaras de vez en cuando- dijo Sabrina mientras abrazaba al entrenador de Pueblo Paleta sin voltear a verlo. Ella sentía temor de cómo reaccionaría aquel joven que le mostro que a veces reír puede iluminar el más oscuro de los días.

-Sabrina, te prometo visitarte siempre, y que sin importar que pase siempre estaré contigo- dijo Ash mientras le daba un sonrisa cálida a aquella joven la cual solo quería tener un amigo, un poco de afecto.

De repente Ash apareció en medio de un cuarto, ahí podía ver claramente como Sabrina estaba toda maltratada. Ese oscuro lugar apestaba y provocaba nauseas a cualquiera que entrara ahí. Ash pudo ver como lo ojos de Sabrina entraron en contacto con los suyos.

-Prometiste visitarme- dijo aquella jovencita sin apartar los ojos de aquel joven al cual alguna vez intento lastimar. –Dijiste que irías a verme, te estuve esperando y jamás fuiste- dijo antes de empezar a desaparecer frente a los ojos del entrenador el cual solo cayó de rodillas ante ese hecho.

-Jamás volviste-

-Jamás volví… jamás volví… jamás volví… jamás… jamás dejare que te vuelvan a hacer daño- grito el joven mientras su realidad se empezaba destruir a su alrededor. -Sabrina, dime dónde estás- dijo mientras aparecía afuera de un tejado. De repente vio como una castaña de graciosas coletas salía corriendo de una puerta mientras era rodeada por agentes del equipo Rocket.

-¡Lyra!- grito Ash mientras intentaba sujetar su mano, para darse cuenta que no podía tocarla –Lyra por favor sal de aquí…-

-Es imposible escapar mi querida Kotone- dijo Silver quien ahora estaba con uniformados del Equipo Rocket y muchos pokemon rodeándole. –Vamos únete a mí o… muere. Sabes que es la única salida ¿cierto?-

-¡Lyra, no te unas a ellos!- grito Ash intentado llamar la atención de la castaña. La sorpresa de Ash fue muy grande –No- fue todo lo que salió de su boca solo para darse cuenta de que Lyra cometería un acto de suicidio.

-Adiós- fue todo lo que dijo antes de lanzarse al vacío aquella castaña la cual había sufrido mucho-

-¡¡NO!!- grito el joven azabache mientras veía como la joven desaparecía en medio de la oscuridad. – ¿Por qué?- dijo Ash mientras caía de rodillas al ver todas esas imágenes.

-Porque aun no han pasado, solo tú puedes evitar que pasen.- dijo una voz mientras poco a poco se iluminaba todo. Ash se paro solo para ver cómo jugaba con Rosa y Lyra mientras estaba en un día de campo con sus amigas y sus pokemon. –Ash, descendiente de Sir Aron, solo tú puedes evitar que se altere el orden natural de las cosas.- de repente las chicas notaron a Ash y fueron a tomarlo de la mano.

-Vaya Ash parece como si hubieras tenido un mal rato- dijo Hilda quien le deba un beso en la mejilla.

-¡Hilda eso no se vale, tramposa!- dijo Rosa mientras le hacía gestos a su mejor amiga por haber besado a su héroe. –Ash, Sabrina quiere verte- dijo Rosa mientras llevaba a Ash con Marina, Lyra y Sabrina las cuales estaban muy a gusto platicando.

-¡Ash!- grito Sabrina mientras se lanzaba a abrazar al joven entrenador. –Te extrañe tanto- dijo mientras unas lagrimas salían de sus ojos.

-Yo también te extrañe Sabrina.- dijo mientras levantaba la cara de Sabrina y le daba una cálida sonrisa –Lamento no haberte visitado ¿me perdonas?- dijo Ash mientras veía a la psíquica a la cual le tiene un gran aprecio.

-Tonto… sabes que sí- dijo mientras lo tomaba de la mano y se dirigía con el resto.

-Ash es tu deber. Mis hijos Reshiram y Zekrom te ayudaran en esta lucha que se va a librar.- dijo una voz mientras se iluminaba cierta parte del campo.

-Arceus, cuenta conmigo- dijo Ash mientras cerraba los ojos para solo despertar en su casa.

----------------------------------------------------------Presente----------------------------------------------------------------------

-Tal parece que los rumores son ciertos, Ash Ketchum regreso a Kanto.- dijo un hombre de traje naranja sentado en medio de una gran oficina con un persian en su regazo -Muchacho me tienes intrigado, eres totalmente diferente a tu estúpido padre. Siempre entrometiéndote en los planes de quien sea. - dijo mientras observaba unas imágenes de Ash con Marina y sus batallas en lo que va de su viaje.


-Tyranitar ¡Hiperrayo!- dijo uno de los soldados del equipo Rocket mientras intentaba atacar a Ash, aquel joven que se está enfrentando.


-¡Pikachu contra escudo ahora!- ordeno el muchacho a su compañero de batalla, quien con un potente rayo lo dividió en varios formando un escudo que lo protegió de aquel ataque.


-¡Zekrom usa cometa Draco contra Tyranitar, Reshiram usa doble equipo e hiperrayo ahora!- ordeno el joven a los dos legendarios que los acompañaban, los cuales obedecieron las ordenes.
-¡Maldita sea, disparen al muchacho!- ordeno uno de los soldados mientras otros disparaban contra Ash el cual esquivo las balas. -¿Quién… quién es… quién es este muchacho?-dijo atónito al momento de ver la velocidad de Ash.


La rabia de Ash iba en aumento cada segundo, de repente sus ojos empezaron a cambiar de ese cálido café a un carmesí lleno de furia. Pikachu, Reshiram y Zekrom se dieron cuanta e y empezaron a terminar las batallas contra los otros pokemon de manera rápida. Mientras tanto la oficial Jenny lideraba un ataque en la entrada del edificio junto a Gree, Red y la miembro de la elite Four de Kanto, Agatha.


-Muchacha necesitamos acabar con esos soldados de inmediato.- dijo mientras se protegían de los ataques de unos steelix y primeape -Gengar ayúdame por favor- dijo Agatha mientras liberaba a aquel pokemon fantasma el cual inmediatamente ataco a los que atacaban a su dueña.


-¡Sal Sceptile y ayúdanos a acabar con estas escorias!- dijo Green mientras liberaba a uno de los pokemon más poderosos de Ash. Un rayo ilumino en medio de la batalla mostrando al pokemon de hierba el cual sin dudarlo ataco con hojas navajas a un arcanine del equipo Rocket.


-Muchacho, tenemos que derribar esa defensa, ¿dónde está tu amigo Red?- dijo Agatha mientras se cubría de las explosiones y las balas.


-Sí Green, acaso tu amigo no va a ayudar- dijo la oficial Jenny mientras sacaba un Alakazam para hacerle frente a la barrera que hacían los soldados. –Me lleva un…- dijo mientras más explosiones resultaban.


-¡Staraptor ave brava sobre Steelix!- grito Red mientras volaba sobre el charizard de Ash, mientras que usaba lanzallamas sobre los primeape. Red luego saltaría de Charizard para iniciar una pelea a puño limpio con varios agentes. –Bien, hoy no me rendiré. Dare todo en estos momentos- dijo Red mientras le daba un puñetazo a uno de los agentes, siendo escudado por las brazas del fuego que Charizard había levantado.


El Staraptor de Ash logro noquear a Steelix. ¡Ahora muchachos ingresen!- ordeno la oficial Jenny a sus tropas las cuales ingresaron en el edificio. –Solo debemos aguantar un poco más, solo debemos aguantar para que Ash logre salir- pensó la oficial Jenny mientras veía los ataques que se producían en la cima de aquella torre.


-Debemos de capturar al comandante para que nos digan donde está Giovanni- dijo Agatha mientras veía como Gengar se encargaba de acabar con los pokemon del equipo Rocket. –Green haznos otro agujero- dicto la anciana al castaño el cual manejaba al Sceptile de Ash.


-Sera un placer Agatha- dijo mientras miraba como Red atacaba a puño limpio a algunos de los agentes de la organización más temida en Kanto y Johto. – ¡Sceptile doble, bala semillas ya!- dijo el castaño mientras corría a noquear algunos agentes –Esto va por Ash- dijo antes de darle un golpe a un agente.


-¡Alakazam ayuda a Red!- ordeno la oficial Jenny a su pokemon para que ayudara al chico de cabello negro


-Salamance acaba con esa apestosa rata amarilla- ordeno uno de los pocos soldados que quedaban en pie a uno de los pokemon tipo dragón que habían sacado para detener al muchacho. -¡Salamance ala de acero contra Pikachu ahora!- grito a aquel pokemon el cual se acercaba a una velocidad devastadora al pikachu de Ash el cual no se movía.


-¡Ahora!- grito Ash-


-Pi- dijo pikachu antes de empezar a correr hacía Salamce, mientras su cuerpo empezaba a emitir electricidad. –Pi, pi, pika- de repente toda esa energía se empezó a acumular en su cola. Salto hacía el dragón el cual iba directamente hacía el rugiendo.


-Es hora ¡Tormenta de Rayos!- grito Ash, ordenando lo que parecía ser aquel ataque de gran poder. –Zekrom tu también- dijo Ash antes de saltar a lomo de Reshiram


-¡CHUUUU!- grito el roedor para golpear al pokemon de color rojo y azul con su cola, de paso una serie de ataques eléctricos los cuales acababan con cada adversario. Una fuerte explosión sacudió al edificio. La explosión la vio cierta chica de cabello rubio en un parque.


-Hermanito- fue todo lo que dijo mientras unas lágrimas recorrían su rostro. Hilda la chica de Unova que se estaba quedando con Ash fue a abrazarla. -¡hermanito!- grito Yellow mientras era abrazada por Hilda.


-Ya Yellow… todo está bien. Ash está bien, el volverá sano y salvo.- dijo la castaña mientras unas lagrimas aparecían en sus ojos. –Ash… el volverá y…- ya no pudo más y termino en llanto, pero eso no haría que se despegara de la hermanita de Ash por nada del mundo. Dolor, le dolía no poder hacer nada para ayudar a aquel joven que poco a poco sano su corazón.


-Hilda- fue todo lo que dijo Rosa mientras estaba abrazando a Lyra. La castaña de graciosas coletas estaba pasando por momentos difíciles y no quería estar sola –Ya Lyra, Ash va a volver.- dijo al momento que la castaña rompió en llanto abrazando más fuerte a aquella chica que Ash había salvado.


-Ya Lyra.- dijo Marina mientras se sentaba a lado de Lyra y agarraba sus manos, solo para ponerle una gorra. La gorra que estaba en las manos de la castaña de ojos color avellana era la gorra de Ash –No llores, todo va a estar bien. Conociendolo el vendrá, no tienes por qué preocuparte. Tu no tuviste la culpa de nada y él lo sabe- dijo la peli-azul mientras abrazaba a la castaña la cual junto esa gorra a su pecho mientras unas lagrimas caían sobre ella.


El silencio inundaba todo el alrededor de Ash. Todo había acabado en ese momento, al menos por ahora. Ese drmatico silencio fue destruido por unos aplausos y unos pasos.


-Bravo, bravo.- dijo un peli-rojo mientras dos Mightyena lo escoltaban –Vaya parece ser que eres todo lo que dicen Ash Ketchum- dijo mientras veía a Ash con esa mirada fría y sádica. –Ahora demuéstrame lo que dicen es cierto y que no son más que basura… demuéstrame la razón por la que eres el elegido que calmo a los tres titanes… demuéstrame que todo el mundo recae en ti… Ceniza- dijo mientras miraba a los dos legendarios que acompañaban a Ash.

-Ahora sabrás quien soy- dijo Ash mientras sus ojos volvían a la tonalidad carmesí de antes.

Bien por ahora este es capitulo de esta semana, creo? Solo espero que le haya gustado.

Lyra: Solo falta que Ash me abraza y me de cariño.
Marina: Recuerda que tambien estamos nosotras.
Hilda: Sí Lyra, no se te olvide eso. (Con la ropa de Ash)
Lyra/Marina: ¡¿por qué tienes la ropa de Ash?!
Hilda: Solo me la puse.
Ash: Hilda regresame mi ropa. Esto no es gracioso (Ash aparece con la ropa de Hilda)
Rosa: Jeje Ash te ves gracioso. Te voy a abrazar (Rosa corrio y abrazo fuertemente a Ash)
Ash: Arceus me odias?
Todas: (ojos llorosos) ¡Ash nos odia!
Ash: No es cierto, pero me llego a cansar.
Todas: ¡eso significa que te aburrimos!
Ash: Bueno hare todo lo que quieran.
De repente todas se llevaran a Ah aun vestido de Hilda a un centro comercial, a ver zapatos, vestidos, etc.
Todas: Ash tu pagas.
Ash: Todo por verlas felices.

 

Muy bien he aquí el FINAL................................................................................ de temporada de Un Nuevo Comienzo. Aun me falta mucho camino para llegar al final, pero necesito tiempo, pues ahora estoy en examenes y toda la cosa. Reparando un corazón es el Fic al que le dare un poco más de segumimiento., me agrada la pareja Ash y Sabrina, y es raro verlos en un Shipping, de hecho ni hay Ash y Marina, creo que yo fui el primero en hacerlo.

Capitulo 16: "El poder del Aura prevalecera"

A lo lejos se podía presenciar una increíble batalla entre dos sujetos. Un pelirojo esquivaba cada golpe de un chico de cabello negro alborotado estaba peleando mano a mano con aquel joven. Los dos jóvenes peleaban sin medir las consecuencias. Reshiram y Zekrom los dos pokemon que Ash había usado en la batalla presenciaban la pelea entre Ash y Silver.

-Vaya parece que lo que dicen de ti es cierto.- dijo Silver en tono burlón mientras esquivaba uno de los golpes de Ash –Eres un imbécil- mientras le daba un golpe a Ash que lo mando al otro lado de la azotea.

Ash escupió sangre y miro los ojos carmesí de Silver, esos ojos demostraban que no había humanidad en él ni en su alma. De repente noto que él estaba cayendo en su juego, pero debía de aguantar hasta que la oficial Jenny aparecía con refuerzos.

-Dime… ¿Qué tienes tú?- pregunto Silver mientras se acercaba riendo a un lastimado Ash. –Vaya parece que lastime al muchachito Ash Ketchum… me pregunto, ¿si te mato ahora terminara todo esto?- dijo mientras veía a los dos legendarios los cuales descendían de los cielos posándose a lado del entrenador de pueblo Paleta. –O mato a tus amigas-

Aquella oración fue detonante de un viejo poder oculto en el interior de Ash. Como si de un viejo cuento de héroes se tratara, Silver vio como el aura de Ash despertaba. Un Aura de color rojo empezó a rodear a aquel chico, pero lo que sucedió después dejaría perplejo a Silver. Los legendarios de Unova también emitían esa Aura característica de Ash, y Pikachu lanzaba un potente rayo al cielo mientras esa misma energía de color carmesí le rodeaba.

-No puede ser- dijo en un tono alarmado un hombre de traje naranja mientras veía una pantalla con la pelea de Ash y Silver en ella – ¡Saquen a Silver de ahí es un orden!- grito aquel sujeto de cabello castaño a unos sujetos de trajes negros y con una gran R roja en el pecho. –Maldita sea Silver como se te ha ocurrido despertar el Aura de Ash en estos momentos. Tal parece que tu quieres vencer a tu hermano a toda costa, solo espero que no mueras antes de la operación Día Oscuro- pensó aquel sujeto mientras veía la contienda de Ash contra Silver.

-Señor estamos enviando unos refuerzos.- dijo uno de los agentes con algo de temor.

-Bien- dijo mientras entrelazaba los dedos de su mano sin dejar de perder cada detalle de la batalla que ocurria en unos de los edificios de su sede. -¿Hay algo más?-

-Sí, el Campeón Lance acaba de terminar los preparativos para nuestra llegada a Hoenn. Según los últimos informes los pocos soldados de equipo Magma fueron destruidos o huyeron de nuestras fuerzas- dijo el soldado mientras en una pantalla se mostraba a Lance el campeón de Johto y Kanto.

-Amo Giovanni- dijo Lance mientras hacía el típico saludo militar de la organización criminal.

-Lance mi buen amigo- dijo entre risas mientras veía al peli rojo –Dime ya acabaron con el equipo Magma, pero, ¿Archie aun sigue libre verdad?- esas palabras causaron una tensión en el ambiente.

-Sí mi señor, pero tenemos a alguien que nos puede ser de mucha utilidad.- dijo Lance mientras se apartaba un poco de la cámara para mostrar a una chica de cabello rojo y un cuerpo esplendido. –Mi señor esta es la hija de Maxie, Fannery le sucesora del mando de equipo Magma y líder de gimnasio.- dijo Lance mientras mostraba a la chica amarrada y vigilada por dos Garchomps .

-Déjenme en paz… por favor yo no tengo nada que ver con mi padre.- dijo la chica mientras lagrimas salían de sus ojos, esos ojos pedían misericordia. De repente noto la mirada de un sujeto que la penetro hasta lo más profundo de sus ser, ella estaba viendo al líder del equipo Rocket –No- esas palabras dejaron mostrar el miedo, mientras dos sujetos con electro varas se acercaban a ella.

Un grito fue escuchado por todo el cuartel, la pantalla se había puesto en negra para terminar la conversación con Lance. Cada miembro dentro de aquel cuartel desde los reclutas hasta los que tenían más experiencia sintieron lastima por aquella jovencita.

-Preparen la cacería de Archie, lo quiero vivo.- dijo mientras Giovanni se paraba de su silla y su persian le seguía con él a una puerta la cual ilumino su rostro a un color verde. –Platina y Sapphire- dijo mientras ingresaba a aquella habitación.

-Sal Raqyquaza- dijo el pelirojo en tono sereno pero en su mente reinaba la preocupación. En los cielos apareció un dragon de color verde con distintivos amarillos por su cuerpo rugiendo con majestuosidad. Zekrom ni Reshiram mostraron temor alguno por el legendario que tenían enfrente de ellos.

-Así que tienes a Rayquaza contigo… solo espero no hacerle tanto daño.- definitivamente aquellas palabras no eran del propio entrenador Ash Ketchum.

–Maldición que hice. Si no salgo de aquí pronto terminare muerto.- de repente noto como Zekrom le lanzaba un potente rayo el cual destruyo parte del tejado. – ¡Rayquaza hiper rayo ahora!- ordeno Silver al dragón de color verde el cual lanzo un potente rayo a los dos dragones de Ash.

-Esquívenlo y usen cometa Draco ambos- dijo Ash, pero de repente vio nublada su vista. Poco a poco perdía la vista de su objetivo el cual hablaba pero no era escuchado por Ash. -¿Pero qué?- de repente Ash estaba atrapado en una dimensión donde habitaba la oscuridad.

-Vaya parece que nos volvemos a encontrar- esa voz detono cierta preocupación en Ash. –Vamos Ash, no tengas miedo de lo que tenga que pasar.- de repente frente a Ash se encontraba él mismo, pero con la ropa de su viaje por Hoenn y Kanto. Había algo completamente distinto en la voz de ese Ash, sus ojos mostraban rabia y enojo.

-Tú-

-Sabes que tu y yo siempre hemos sido uno solo- esa voz sombría proveniente de un Ash que era la parte más oscura de sus ser estaba caminando poco a poco hacía Ash. –Vamos muéstrame lo que eres en verdad Maestro Pokemon- dijo en tono burlón.

-¡Cállate!- exclamo con furia Ash mientras veía a su otro Yo.

-Es cierto, tu no pudiste vencer a ese patético Lucario, a pesar de todo tú nunca logras lo que te propones.- dijo el Ash Oscuro mientras caminaba disfrutando del dolor que le causaba a su contraparte. –Mirate, el chico que salva damiselas en apuros, ¿Dónde están May o Dawn? Ah, es cierto creen que eres patético-

-No… te atrevas- dijo Ash quien iba a estallar en cólera en cualquier momento.

-Sí me das la oportunidad, podemos vengarnos de ellas como de Drew y Paul.- aquellos nombres alteraron al azabache –Se que deseas la venganza, se que deseas vengarte de Cynthia, May, Dawn, Drew, Paul, así como de Volkner y muchas otras personas como Alder, Brandon y…-

-¡Cállate!- grito con fuerza el azabache.

-Sabes bien que lo quieres y lo deseas más que nada en el mundo.- dijo su otro Yo mientras imágenes de sus amigos parecían en su mente. Imágenes de dolor y tristeza, un Aura roja se formo alrededor de nuestro héroe. El quería humillarlos y acabarlos, pero de repente recordó algo… su “familia” siempre estaría ahí para apoyarle. Si bien ahora unas lindas chicas vivían con él, el se empezó a dar cuenta que sentía algo por ellas. Marina, Hilda, Rosa, Lyra y… Sabrina; él se dio cuenta después de cinco años lo que significaba amar. Su padre murió, su herencia es la herencia de un gran héroe…

-No- dijo Ash mientras una sonrisa se formaba en su rostro al darse cuenta lo que pasaba. –Puede que tengas razón, puede que sea cierto lo que dices… pero sabes algo-

El otro Ash arqueo la ceja en señal de confusión para luego pasar a una mirada de terror. –No… no te atreverías-

-Ahora comprendo el porqué de Arceus por darme a Reshiram y Zekrom.- Dijo Ash mientras se acercaba a su contraparte malvada –Tú no eres mi parte malvada, simplemente eres mi dolor guardado. Tienes rtazón nos hirieron sus comentarios… pero sin ellos jamás nos hubiéramos dado cuenta lo que en verdad es importante para nosotros- dijo Ash para intentar darle la mano, mientras su miraba no demostraba temor alguno.

La mirada del Ash malvado cambio a una de intriga y el sabia el porqué. El elegido tendrá que enfrentar sus temores para poder sacar todos sus poderes. Ash tenía que hacer frente al temor de que sentía y dejar ir el odio. Ash malvado levanto su mano, bueno en realidad no era tan malvado.

-Sabes que no hay vuelta atrás-

-Lo sé-

Las dos manos se estrecharon para dar paso al aura Azul, mientras la contraparte de Ash desparecía y se combinaba con él. Pudo ver un recuerdo de Sir Aaron disfrutando la vida junto a Lucario, vio como su padre se sacrifico para salvar a su madre y a él… vio a su hermano sufriendo al ser adopatado por Giovanni.

-¿Pero qué…- expreso Silver al ver como el cuerpo de Ash se cubría en un Aura azul. –No es posible, no se pudo haber fusionado eso quiere decir que…-

-Así es hermano… soy Ash Ketchum- esas palabras denotaban confianza. Ash se acomodo su gorra para atrás mientras juntaba sus manos y creaba una esfera. –Mientras aun haya esperanza en el mundo y la gente de buen corazón nunca se rinda y persigan sus sueños sin temor… ¡el poder del Aura prevalecerá!-

Bien este es el final por Ahora, espero que les guste y...
Lyra: Y me quede con Ash.
Hilda: Hace tiempo que no aparecemos y... ¡¿Cómo esta eso Lyra!?
Lyra: Upss.
Rosa: Que dijimos sobre compartir.
Lyra: Ash nos ama a todas por igual... pero Hilda es plana y vieja.
Hilda: (vena en la frente y con una aura asesina) Vas a morir pequeña peste.
Rosa: (Agarrando a la fiera de Hilda) Hilda recuerda que Ash no le importa eso. Lyra no sabes lo que has hecho. Marina ayudame.
Marina: Lyra estas castigada, sube a tu habitación.
Lyra: Pero...
Marina: Ahora
Lyra: No se vale.
Hilda: Juro que la mato. No es mi culpa ser así.
Rosa: (gota en la cabeza) Ya Hilda calamate comete un Snicker.
Ash: Hola me perdi de algo?
Todas lo miran menos Hilday le dan la señal de que abrace a Hilda y al momento de hace esta al no saber que venía le pega donde no debe.
Todas: ¡ASH!
Ash: Por... por qué... me... (se desmaya)