Bueno, este lo hice para la actividad "Amor vs Desamor", ojalá les guste. Advertencia: Lenguaje fuerte. Buena jugada. Cerró con aire cansado su ordenador, un objeto viejo y poco funcional del siglo pasado, o eso suponía. Se levantó de su asiento acojinado y forrado en cuero, viendo a través de la ventana la poca luz amarillenta y titilante del alumbrado público; no era como si le interesase algo tan simple y monótono como eso, pero ¿qué más daba? Su vida estaba hecha de eso, de pura monotonía. Se acercó hacia el escritorio que se encontraba a unos metros del suyo, aquel que había pertenecido alguna vez a esa secretaria llamada Claris, de sonrisa simpática, cabello castaño y ojos negros expresivos. Bufó al si quiera recordarla, era cierto que le alegraba el día con verla sentada allí, un poco encorvada, con el cuello gacho y un par de lentes que se iluminaban con la luz que irradiaba la pantalla de la computadora, provista de la misma taza de café humeante de Nueva York –cortesía de algún viaje de familia--, y una coleta alta con ciertos mechones rebeldes sobre su cara; siempre atenta a su llegada y ofreciéndole una enorme curva en sus labios, acompañada de un “buenos días” bastante alegre, quizá demasiado para él. Recogió unos cuantos papeles de aquel escritorio, cuidando no mover nada de su sitio, de su espacio simbólico; aunque a decir verdad, siempre le había desagradado hacerlo, porque de ella no quedaba ni la sombra, de esa mujer ya ni su esencia permanecía; después de todo, se había llevado sus cosas, y lo que quedaba allí, podría denominarse básico. —Al diablo con esa perra —escupió con fastidio, lanzando una mirada furtiva hacia el sitio donde se sentaba. Ella, esa mujerzuela, únicamente había intentado utilizarlo, ¡y gracias al cielo que se dio cuenta a tiempo! Sino, juraría que iba a terminar acabando con la empresa, con su imperio, el imperio de uno de los más grandes empresarios del país. Esa era una escurridiza, de seguro su esposo le habría abandonado por ello, por ramera. Se giró sobre sus talones de regreso a su escritorio; guardó los papeles en su portafolio y arregló su corbata, acercándose hacia la puerta de salida. Tomó el pomo y se giró hacia ella con una sonrisa. —Hasta mañana Claris —dijo con tono burlón, desapareciendo de la oficina. Claris Torres, una mujer usurpadora, una ladrona, una loca; ella se había atrevido a jugar sucio con su corazón, un corazón rígido y fuerte. Había sabido jugar sus cartas, siendo paciente y meticulosa, pero no, no le había alcanzado su impecable acto de amor deshonesto, porque él era un magnate, y por ende un mejor usurpador; jugó con ella hasta vengarse y dejarla hecha trizas, destrozada. Él había sabido enamorarla de verdad, tanto, que la maldita cayó en su propia trampa.
Paso a comentar rápido porque estoy enfadado, malhumorado y son las cuatro de la mañana. Me llama la atención que sea la secretaria de un magnate de la que se haya enamorado. Suele ser raro eso, porque a los magnates lo que menos les interesa es el amor, sacrifican eso por el dinero, y si acaso sólo les atrae físicamente una persona, pero quién sabe, habría excepciones. No entiendo cómo un rico va a tener una computadora del siglo pasado. Pero igual me gustó la ironía de decir "del siglo pasado", cuando realmente fue de la última década del mismo. Es algo así como sarcástico, no sé, así lo noté. No sé qué decir, no me enteré de la actividad, no sé de qué iba, pero en fin, no interesa, sólo vine a leer el fic, me gustó, me pareció agradable, ameno, y eso es lo que importa. Gracias a las circunstancias que rodean el relato, no sé, no me supe identificar con el terrible sentimiento del protagonista. No estoy enterado si esta actividad te exigía un máximo de palabras, pero si no es así, en verdad te quedaste corta. Faltaron descripciones, faltaron emociones, sólo hubo buena narrativa, buen léxico y despliegue de palabras, buena ortografía pero hasta ahí, le faltó el corazón a la historia, no viví el dolor del protagonista ni el odio hacia la que fue su secretaria. No me caló cuando salió y le dijo "hasta mañana" a una inexistente Claris. Y se supone que esa frase final debía impactar cual látigo hiriente en el lector que más se pudo haber inmiscuido en la historia. Faltó crudeza en las palabras que se supone que describían el sentimiento. Eso. Y pues es todo. Me extendí. Saludos.
Hola!! Que lindo ¿Quién iba a pensar que él había tomado una gran venganza contra ella? De cierta manera no me lo esperé, pensé que iba a ser la historia de "me abandono y ahora odio mi vida" no sé, como que esperaba que se hundiera en la tristeza...sin embargo eso no fue cierto y me gusto que el también haya tomado venganza, aunque le doliera pero así tanto él como "su secretaria" sufrieron. Tu narración fue linda, si sentí ese odio, rencor y un poquitito de dolor. Sigue así
¡Hola! Pues primero que nada dejame decirte que estoy de acuerdo con el primer comentario, como que te quedaste muy corta pero la narración en sí es buena, aunque al menos el odio y el dolor de él se vio pero sí le faltó sentimiento, más descripición de emociones. Pero al menos se dio cuenta a tiempo y se vengó hehehe Te felicito por tu trabajo :3
Ciertamente concuerdo con Cygnus. Tu narración es impecable, pero también le faltó ese sentimiento de ira, desengaño y rencor que promete el protagonista. Él está enfurecido con el engaño de su secretaria, posiblemente con el orgullo algo herido. Hubiera sido fantástico que detallaras más sus sentimientos al final, porque él ganó. "Como el Ave Fénix, derrotado, el coraje renace de las cenizas"; si hubieras explayado esa frase, sería magnífico. El escrito fue bueno dentro de todo. Supiste captar cierta esencia del desamor que había olvidado. Sigue esforzándote, sé que puedes hacer más :).
