Nosotras somos Shippuden.

¡Buenas! Creo que es mi primer fic en buen estado, por así decirlo. Con eso me refiero a que es el más elaborado, aunque sólo he hecho dos y uno de ellos con ayuda de amigas... xD
En fin, no sé ciertamente si está muy bien, pero lo he revisado ya al menos 200 veces y lo he mejorado otras tantas, así que espero que esté bien, o al menos aceptable y me digáis los fallos, quiero ser buena escritora. :)
No esperéis gran cosa... (Necesito más confianza en mí misma '-' )
Tenía otro título, pero la gente se me adelanta, así que finalmente decidí usar este.

Antes resumo un poquito, por si no os interesa la historia, nadie obliga a leerla. xD

Trata de la vida de Temari, Tenten, Ino y Sakura cuando forman un grupo musical llamado Shippuden, y de cómo van apareciendo los otros personajes en sus vidas.
Creo que no soy muy buena resumiendo ^^''
Por cierto, se lo dedico a mi querida amiga Dedelde, que a la pobre la obligo a leer mis fics y a que me dé su opinión.
Y sin más preámbulos, aquí os dejo el primer capítulo. ¡Espero que os guste!

CAPÍTULO 1: Colaborando con Naruto.

Era una mañana de domingo. Se escuchaba a los pájaros cantar en el jardín y comenzaba el día. Día soleado, alegre. En momentos como aquel, Tenten se daba cuenta de lo rápido que pasa el tiempo y cómo cambian las cosas. Recordaba cuando aún tenía 15 años, y, con sus amigas, quería formar un grupo musical. Eran unas niñas persiguiendo un sueño... Ahora que ella tenía 19, lo había conseguido. Poca gente era tan afortunada como ella. Habían triunfado, no a nivel mundial, mas si en dos o tres países, como el grupo Shippuden, formado por Temari, Ino, Sakura y Tenten. Pero aún quedaban bastantes cosas por hacer. Seguía soñando despierta cuando algo la sacó de sus pensamientos.

—¡Tenten! Te están llamando por teléfono. —Avisó Temari. —¡Pero corre!

—¡Voy, voy, voy! —se acercó al teléfono. —Eres agobiante, Temari.

La llamada de teléfono era de alguien que decía ser el agente de un nuevo cantante, que ciertamente, prometía ganar mucha fama. Era un tal Naruto Uzumaki, y quería grabar una canción con una integrante del grupo Shippuden, en este caso, con Tenten. Alegre, la chica aceptó, y se limitó a dejar el trabajo al agente de su propio grupo, el hermano de Temari, Kankuro.
Había mucho trabajo, tenían que hacer más canciones para el disco y preparar los conciertos. Esa vida era una tensión diaria. Ino y Sakura intentaban crear nuevas canciones, y mientras, Temari acompañó a Tenten a conocer a Naruto.

—¡Holaaaaaaaa! —saludó un rubio, casi dando saltos. — Soy Naruto Uzumaki. —se presentó, con una gran sonrisa.

—Temari y Tenten, —Temari señaló a su amiga, y a sí misma. —ya nos conocerás, ¿no?

—Sí, no creo que haga falta que os presentéis. Bueno, Itachi, que es mi agente y representante, ya ha planificado la canción y el videoclip. Os contaré todo...

—¡Eh, eh, eh! —paró Tenten al chico. —Venid a nuestro estudio y allí me explicas todo, ¿vale?

—Vamos. —dijo, como muestra de aprobación, Itachi.

Llegaron y allí encontraron a Sakura y a Ino, quienes se acercaron corriendo a los recién llegados.

—¡Bueenas tardes! —dijo Sakura con voz aguda, mirando a Itachi y sonriendo. —¿Cómo te llamas?

Tras unos incómodos segundos de silencio, en los que parecía que el tiempo se había parado, el chico respondió.

—Soy Itachi Uchiha.

—¡Ino Yamanaka y Sakura Haruno, encantadas! —presentó Ino, al igual que había hecho antes Temari.

—¡A ver si nos centramos en lo importante! ¡Necesitamos que venga Kankuro! —gritó Tenten.

—Bueno, mi hermano ha salido con su novia... Pero no creo que tarde mucho.

Tras esperar unos cinco minutos, la puerta del estudio se abrió y entró Kankuro. Le seguía una chica, que, como pensó Temari, sería su novia. Naruto se quedó mirando a la chica, que rápidamente dirigió su mirada al suelo, pero no pudo evitar que Naruto notara su sonrojo. Por su parte, Ino intercambiaba miradas con Kankuro, pero tras algunas, ambos apartaron la vista del otro.

—¡Ya era hora de que me presentaras a tu novia! ¡Que soy tu hermana! Mírala, con lo guapa que es y ha tenido que acabar con mi hermano. —comentó Temari, y todos, excepto Itachi y Kankuro, comenzaron a reír.

—Mira quién va a hablar... —murmuró Kankuro molesto. Se sentó junto a Temari bajo la atenta mirada de los demás. Ya, nervioso, decidió hablar. —Bueno, os presento, ella es Hinata Hyuga.

Y más presentaciones, como siempre. Estuvieron hablando un rato de sus vidas, pero Itachi interrumpió, ofreciendo a los presentes que prestaran atención a lo importante: el trabajo. Las palabras de Itachi fueron escuchadas por los demás, que explicaron los problemas que tenían con su trabajo. Comenzó hablando Ino:

—Sakura y yo no tenemos más ideas. No podéis dejarnos a nosotras todo el trabajo de escribir canciones. Por cierto, a parte de eso, necesitamos músicos, especialmente un guitarrista, porque Sasori se va. —informó con rostro triste.

—Mi hermano. —pronunció Itachi, cosa que no entendieron muy bien los demás, y, como nadie habló, el chico lo explicó. —Digo, que mi hermano es guitarrista. Seguramente no sea tan bueno como ese Sasori, pero no se le da mal.

—¡Es verdad! —apoyó Naruto, dando un golpe a la mesa, un acto reflejo del que se arrepintió. Se llevó las manos a la cabeza, pidió perdón y continuó hablando. —¡No lo dice porque sea su hermano, es que él toca la guitarra desde hace bastante!

—Cálmate Naruto. —siguió Ino. —Vale, que venga el chico ese y, si es cierto, se quedará con nosotros. Bueno, pues ya está, ¿no?

—No, quedo yo. A ver, en el video que grabaré con Naruto, debo tocar el piano, ¿no es así?

—Sí, es verdad. —confirmó Itachi.

—¡Pues tenemos un problema! Necesito alguien que me enseñe. —Tenten se quedó callada con la esperanza de que alguno de los que estaban allí supiera. —¿Nadie sabe? —Hinata se quedo mirando a Tenten, e hizo un gesto queriendo hablar. —¿Qué? —invitó a hablar a la chica.

—Yo no sé tocar el piano, pe-pero conozco a alguien que te puede ayudar.

Hinata no sabía si había hecho bien al decir aquello. Tal vez la persona en la que estaba pensando, no quisiera ayudar a Tenten. No era precisamente muy simpático y hablador, y no aceptaría así porque sí. Lo pensó bien, la iba a costar bastante convencerle para que ayudara a la chica. Nada más acabar la charla, fue corriendo a su casa, en busca de su primo. Dio la casualidad de que estaba tocando el piano en esos momentos, y no le gustaba que le interrumpieran. Pero como Hinata parecía necesitar ayuda, hizo una excepción y puso atención en las palabras de su prima.
—Pu-pues es que... Neji, te he recomendado como profesor de piano para una chica...

—¿De verdad? Eso se pregunta antes. ¿Y si ahora digo que no, qué pasa?

—¿Eh? —la chica se sentía algo angustiada, y se formó un nudo en su estómago al pensar en la reacción de Tenten y Naruto. —¿Dirás que no? —apareció una expresión triste en su rostro.

—Pues... —Neji rió. Siempre le había hecho gracia aquella situación, ya que imaginaba por lo que estaba pasando Hinata. —Está bien... Y, ¿la conozco?

—Ah, pues sí... Pero no la conoces. —quedó pensativa y escuchó la pregunta de Neji.

—¿Cómo que la conozco, pero no? Hinata, no me confundas.

—Sabes quién es, pero no la conoces. —finalmente encontró las palabras adecuadas para explicarlo. —Es Tenten, la que está en el grupo Shippuden.

—¿Me haces ser profesor de una famosita? —dijo, sin esperar respuesta, aunque la recibió.

—Sí... ¿Qué pasa?

—Pues que todos los famosos son iguales, sólo piensan en sí mismos, y creen que son el centro del mundo.

—No digas eso. No todos son así, y menos aún Tenten.

—Bueno, me da igual. Por cierto, tu padre quería hablar contigo de no sé qué cosa.

—Vale... —Hinata recordó algo. —¡No puedo! Tendrá que esperar a la noche, o a mañana. Voy, eh... al parque. Con Sakura y Tenten.

—Al final vas a terminar siendo como ellas... Pues nada. Adiós.

Temari, tras la larga reunión, salió a tomar el aire. Dio una vuelta por las calles de la ciudad y fue a visitar a Sakura. Pero su madre la pidió amablemente que se fuera a su casa, ya que su padre llegaría pronto de trabajar y no le sentaría demasiado bien tener visita. Cansada, pasó a un restaurante a comer algo. Ichiraku tenía muy buenos platos, así que decidió entrar allí. Se sentó en una mesa y miró alrededor. Había bastante gente, pero en especial una mesa le llamó la atención. Distinguía a Naruto, pero no podía ver quién estaba con él. No la gustaba entrometerse en la vida de los demás, pero la curiosidad pudo con ella. Se levantó, de modo que pareciera que iba a cualquier otro sitio, cuando la verdadera intención era conocer la identidad del acompañante de Naruto. Pudo ver su cara. ¿Hinata? ¿Qué hacía con Naruto la novia de su hermano? Intentó tranquilizarse, podían ser cosas de trabajo, ¿no?
Con esos pensamientos se cambió a una mesa más cercana, se soltó el pelo para que no la reconocieran y agudizó el oído.

—Creo que seremos buenos amigos. —dijo, en voz muy baja, Hinata. Cuando la chica hablaba, a Temari le costaba entender.

—¡Sí! —respondió él, enérgico como siempre. —Me caes muy bien, y además eres muy guapa... ¡Es una pena que ya tengas novio!

Temari ya estaba demasiado enfadada. Estaba exagerando demasiado, pero en esos momentos no era consciente. Se levantó así que no pudo oír el resto. Pagó lo poco que la dio tiempo a tomar, una bebida, y se fue a paso rápido con el propósito de avisar a su hermano.
Llegó a su casa, saludó y fue al cuarto de Kankuro. Pero no había nadie. ¿Donde estaría? Fue al salón y se lo preguntó a su madre.

—Pues me dijo que se iba con su novia a no sé dónde. ¿Por qué, pasa algo?

—No, nada mamá... ¿Pero no sabes a dónde fue?

—Al parque, creo. Tampoco me hagas mucho caso hija, no lo escuché bien.

Aquello podría haber esperado, podría habérselo dicho cuando volviera. Pero algo la preocupaba. ¿Por qué Kankuro había mentido, diciendo que estaba con Hinata? ¿Por qué no respondía a las llamadas ni suyas, ni de Gaara, ni de nadie? Solamente había algo que la chica tenía claro en aquellos momentos. Lo iba a descubrir en poco.

¡Ya está! Creo que fue algo corto e.e...
He aquí mis maravillosas preguntas.
¿Les ha gustado?
Si la respuesta es sí, ¿hay parte favorita?
¿Es muy corto el capítulo? ¿O tal vez largo (cosa que no creo que sea)?
¿Por qué creéis que hizo eso Kankuro?
¿Consejos para que mejore?

Bueno, mis queridos amigos, como ya no tengo qué decir, me despido.

 

¡Buenaas! La verdad es que cuando se me ocurrió este fic, pensé que lo más probable era no publicarlo. Pero aún así, aquí está. Y aquí también está... ¡El segundo capítulo!! xD

CAPÍTULO 2: ¿Qué pasa con Kankuro?

Temari caminaba rápido. Tal vez su hermano estuviese metido en problemas y mentía con eso para que nadie se preocupara. O tal vez simplemente quería que su madre no le preguntase, e inventaba excusas. La chica olvidó sus suposiciones cuando vio a su hermano con Ino. ¿Qué hacía con ella? ¿Qué estaba pasando? Se acercó y gritó su nombre.

—¡Hey! ¡Kankuro! ¿Me explicas esto ya?

—¡Eh, pero niña! ¿Quién eres para meterte en mi vida, eh? —le reprochó a su hermana pequeña. Kankuro no estaba de humor.

—Le dijiste a mamá que ibas con tu novia, ¡has mentido! ¿Por qué?

—No, no he mentido a nadie. Es ella. —el chico suspiró. Ino miraba atenta la conversación.

—¿Entonces, Hinata qué es? ¿Eh? —Kankuro no respondió. Temari gritó. —¿¡Que qué pasa con Hinata!?

Allí estaban pasando cosas muy raras, Temari estaba confusa y necesitaba una explicación rápido, pues se preocupaba por su hermano, aunque él fuera el mayor.
Kankuro explicó todo: la verdadera era Ino. Pero no podía estar con ella porque sus padres, querían casarla con Gaara cuando cumplieran unos años más. No se podía enterar nadie. Llevaban mucho tiempo juntos, incluso antes de que Kankuro conociera a Hinata. Pero lo peor de aquello, era que Hinata no sabía nada. Ella creía que era la única chica para Kankuro. Temari contó lo que había visto en Ichiraku, y Kankuro se enfadó bastante, porque aunque le diera más o menos igual, no esperaba aquello. Tomó una decisión: Kankuro dejó a Hinata, ya le daba igual lo que dijera su madre sobre Ino. No quería más problemas. Pensó que sería lo mejor, al menos pensando en sí mismo. Temari no aprobó su decisión, aunque la comprendía.

Kankuro se sentía mal por todo lo sucedido. No era su culpa que su madre quisiera mandar en la vida de su hermano, y decidir con quien debía pasar su vida. Aunque admitió que no debería haber estado engañando a Hinata durante ese tiempo. Pensó en explicárselo todo, pero se acobardó. No sabía qué hacer. Decidió no decírselo. Para contárselo ya habría tiempo, pero si se lo explicaba en ese momento, se podía arrepentir, y ahí no habría vuelta atrás.

Hinata realmente había querido a Kankuro. Ella seguía sin saber nada de lo ocurrido con Ino, así que pensó que todo ocurrió por pasar la tarde con Naruto. Se prometió a sí misma no verle más. Era una promesa, y la cumpliría. Estaba claro que la iba a costar mucho. Ya que Kankuro la había dejado, tenía ganas de refugiarse en alguien, y su a su mente no se le ocurrió otra cosa persona que Naruto. Sacudió la cabeza, intentando sacar de allí esos pensamientos. Sentía unos terribles deseos de llorar, pero se contuvo. No sería más una niña débil.
Ino llamó al grupo, pero todas parecían demasiado ocupadas. Sólo apareció Temari.

—¿Qué pasa, Ino? —Temari miró al desconocido que estaba al lado de su amiga.

—Bueno, a nadie más parece interesarle. ¡Tachán! Te presento a Shikamaru y Akade Nara. Son hijos de un amigo de mi padre, y a la pequeña Akade le encanta nuestro grupo.

—A mí me obliga a cuidar de mi hermana mi madre. Qué mujer más problemática.

—¡Akade quiere quedarseee a vivir! —La niña, contenta, se acerco a Temari y sonrió. —¡Me quiero quedar con Temari!

—Pero, corazón, tu madre te echará de menos si te quedas aquí a vivir. —dijo con voz dulce Temari. —¿No crees?

—Para eso han venido. —Informó Ino. —Sus padres tienen un viaje de negocios y yo misma me ofrecí a cuidar de la niña por una semana.

—Ah, y no la puede cuidar su hermano, ¿o qué?

—Sí, sí puedo. Pero mi madre no se fía de mí. —Temari rió, y Shikamaru continuó. —Así que la niña se queda con vosotras. —Shikamaru le dio un beso a su hermana, y la dijo que se iba.

—¡Noo! ¡Shika, Shikaaa! ¡No te vayas! ¡Quiero que te quedeeees!

—Temari, ¿cómo llevas un peinado así de raro? —preguntó, intentando desviar el tema, para no responder a su hermana.

—¡Mira quién habla! ¿Tú te miras al espejo, o es demasiado cansado para ti?

—Sí... Bueno, ¿nos quedamos, o no?

Shikamaru miró a Temari, que movió la cabeza afirmando, lo que significaba que permitía a ambos quesarse en la casa. Aquello era algo aburrido, Ino ya se había ido y ellos no se conocían. Akade vio un tablero de shogi y pidió que la enseñaran a jugar. Shikamaru se negó al principio, diciendo que la niña era demasiado pequeña, pero Temari le convenció para que jugara contra ella.
Así, Shikamaru y Temari comenzaron a jugar, y mientras, Hinata llevó al nuevo profesor de piano de Tenten al estudio, donde estaba ella. Llamó a la puerta, y abrió lentamente, para comprobar que no molestaba.

—Ho-hola Tenten. —saludó con una pequeña sonrisa. —Te dije que conocía a alguien que tocaba el piano, aquí está. Te presento a mi primo Neji.

—Encantada. —Tenten sonrió, pero no obtuvo respuesta alguna de Neji. Se le quedó mirando. Pero no cambió la situación. —Maleducado.

—Eh... Esto... Yo me voy. —Hinata salió.

—¿No has pensado que la maleducada eres tú, al decirme eso nada más conocerme?

—Pasas de no hablar a soltar un mini sermón... Es que cuando se conoce a alguien, se saluda. Vamos, es por educación.

—No me gusta hablar de más. No te conozco. ¿O es que quieres que te de un abrazo?

La impresión que Tenten tuvo de Neji era extraña. Parecía no ser muy amable, es más, todo lo contrario, pero había algo que le llamaba la atención. Era una sensación extraña que sólo había sentido una vez con otra persona muy especial para ella. Tenten hizo un pequeño viaje a su mundo, algo que era muy habitual en ella. Era una persona muy soñadora, cosa que a Neji no le gustó demasiado.

—Oye, si no vas a hacer nada no haber pedido un profesor. —miró a Tenten, que dio un pequeño salto al oírlo.

—¡Lo sientooo! De todas maneras, tú no pareces tener muchas ganas de enseñarme...

—No. Lo hago porque le debía un favor a Hinata. Me da exactamente igual que aprendas o no.

—¿Eres así con todo el mundo o es que te he hecho algo malo? —el rostro de Tenten intentaba ser tranquilo, pero era imposible no notar algo de tristeza en la chica.

—Tú nada. No me caes bien. Pero tampoco me caes mal, así que me limito a tratarte de esta manera. —al contrario que Tenten, Neji presentaba una expresión imperturbable, parecía una estatua.

—Si no pones de tu parte, nunca te llevarás bien conmigo, Neji.

—No me interesa llevarme bien contigo. Mi objetivo es enseñarte, no ser tu amigo.

Neji comenzó a tocar una melodía y Tenten apenas puso atención. No le gustaba que la gente la tratara de esa manera. Aunque, como ya había dicho él, ni se conocían, así que decidió tratarle de la misma manera que él a ella, y centrarse en lo que realmente quería: tocar el piano. Cuando volvió al mundo real, Neji la estaba pidiendo que tocara las cinco primeras notas. Aquello, que parecía tan poco, era un reto. Si hubiera escuchado, sería más fácil. No hizo nada por unos segundos, y Neji insistió. Tenten tocó notas aleatorias: do re mi fa do mi.

—La última era otro do. Ha sido pura suerte, ¿verdad?

—No. —mintió, pero con tono de voz firme. —¿Por qué lo dices?

—Te pedí cinco notas, tú has tocado seis. No creas que soy tonto. —Tenten reía por lo bajo. —¿De qué te ríes?

Tenten siempre tenía una respuesta, nunca perdía en una discusión, y era el centro de atención en todas las conversaciones. ¿Por qué ese chico la ponía tan nerviosa? Normalmente, al conocer a alguien, Tenten era todo lo contrario a esa vez. Casi siempre era habladora, se pasaba el día hablando. Pero con él, no sabía que decir. Es más, no sabía ni de qué se estaba riendo. Tal vez fuera simplemente una risa nerviosa. Sólo respondió pidiendo que la clase continuara, lo que sorprendió un poco a Neji, pero hizo caso.

En el jardín, Shikamaru y Temari ya habían terminado la partida. Temari no lo podía creer. Shikamaru la había ganado, a pesar de que ella llevaba jugando a eso desde pequeña y casi nunca perdía. Akade parecía contenta, y quiso jugar también, pero ni Temari ni su hermano la hicieron caso en aquel momento.

—¡Qué mal! —se quejó Temari poniéndose de pie. —La próxima vez te ganaré.

—No creo que haya ganas de jugar otra vez. —dijo Shikamaru, parecía satisfecho con su victoria, pero especialmente, por ver aquella expresión de Temari.

—De tu parte seguro que no, porque sabes que sólo ha sido mi mal día. —Temari rió.

—Oye, Temari. Ya ha llegado el hermano de Itachi. —avisó Kankuro. —Le he dicho que pasara al estudio.

—¿Pero en el estudio no estaban Tenten y el otro, esto... Neji? —Temari se dirigía al estudio junto a Akade. —Ven. No te vas a quedar ahí solo, ¿verdad? —Shikamaru la siguió desganado.

Se abrió la puerta. A Tenten no le gustaba que interrumpieran, y menos en momentos en los que debía estar concentrada como aquel. Hizo caso a la petición de Neji de ignorar el resto del mundo en ese momento excepto el piano. La chica lo cumplió, hasta que oyó una voz a su espalda que le provocó un escalofrío. No era miedo, ni nada por el estilo. Era una sensación extraña. Aquella voz que pronunció su nombre, continuó hablando.

—¿No me dirás nada, Tenten? —dio unos pasos para acercarse más a la chica, y sonrió con una sensación de superioridad.

Neji miró al chico con desprecio y Tenten habló nerviosa:

—¿Q-qué... haces aquí, Sasuke?

------------------
Ya está... Aunque lo intente, los capítulos se me quedan cortos xD En fin, espero que os haya gustado, y que me deis vuestra opinión.
¡Ah, se me olvidaban mis maravillosas preguntas!

¿Les gustó?
Si la respuesta es sí, ¿hay parte favorita?
¿Qué va a pasar con Akade?
¿De qué conoce Tenten a Sasuke?

Es que si hago preguntas de este tipo, parece una serie de televisión que te deja con la intriga. (?) No me hagáis mucho caso xD
¡Hasta el próximo capítulo! :)

 

¡Siguiente capítulo! No lo pude poner antes, pero hoy por fin ya lo traigo. Espero que os guste.
CAPÍTULO 3: Yo soy Matsuri.

Aquella voz que pronunció su nombre, continuó hablando.

—¿No me dirás nada, Tenten? —dio unos pasos para acercarse más a la chica, y sonrió con una sensación de superioridad.

Neji miró al chico con desprecio y Tenten habló nerviosa:

—¿Q-qué... haces aquí, Sasuke?

—¿Pasa algo con él? —preguntó Kankuro, entrando seguido de su hermana, Shikamaru, Ino Akade y Sakura.

—No, nada. —respondió segura.

Las mentiras de Tenten eran muy convincentes, sus amigas siempre decían que en vez de cantante tenía que ser actriz. Pero bajó la mirada por un segundo, y con eso a Neji le era suficiente para saber que mentía. Era un chico que, en poco tiempo, podía llegar a saber mucho de alguien. Tenten ya era transparente para él, una chica siempre alegre, pero que se quejaba demasiado, y no soportaba hacer las cosas mal.

—Pues este es el nuevo músico. —informó Sakura. —¿A que es genial, Tenten?

—Buff, no he oído como suena, ¡pero seguro que fantástico, eh!

—¿Me puedo ir ya, o podré seguir con la clase? —Neji quería terminar cuanto antes, y todo esto no le dejaba.

—Venga, vete a tu casa, ¿no? —dijo Sasuke. —No parece que tengas ganas de seguir.

Neji prefirió no tener problemas, así que sin decir nada, se fue. Eso sí, con una mirada de odio hacia Sasuke. En algunas cosas se parecían, pero incluso nada más verle empezó a caerle mal. Poco a poco los demás fueron saliendo hasta que solamente quedaron Sasuke y Tenten.

—Nuevo guitarrista... El destino me tiene manía. —Tenten bajó la cabeza.

—Nunca fuiste afortunada. Lo único bueno que te ha pasado es conocerme. —Sasuke se sentó frente al piano, junto a la chica, en el sitio que anteriormente había ocupado Neji.

—Ja, ja, ja. ¡Qué gracioso! —comentó con tono molesto. —No, te diré algo: no tengo ganas de hablar contigo, así que vete.

—¿Por qué no te vas tú? Tu novio ya se ha ido, no tienes nada más que hacer aquí.

—¿Novio? ¿Quién? —Tenten pensó unos segundos, y se le vino a la mente la imagen de Neji. Se puso de pie y gritó. —¡No es nada mío, ¿vale?! Bueno sí, mi profesor de piano, y ya.

—Podía referirme a cualquier otro y has pensado en él. —Sasuke se levantó también y se acercó a la puerta. —No sé si te gusta él, aunque tal vez te siga gustando yo.

Sasuke se fue y cerró la puerta, haciendo algo de ruido. Tenten se quedó allí parada, como si algo estuviera impidiendo su movimiento. Comenzó a recordar todo lo que había vivido con Sasuke. Bien dice la gente que el primer amor no se olvida, y Tenten lo entendía a la perfección. Se planteó si de verdad seguía queriendo a Sasuke.

Mientras tanto, Ino y Sakura, que ya no tenían absolutamente nada que hacer, salieron a caminar un rato. Iban comentando lo ocurrido con Kankuro, Sakura como testigo, e Ino como una de las protagonistas.

—Estoy muy contenta con Kankuro. Es que su hermano, no sé, no me gusta su personalidad.

—Mira Ino... Ya que eres mi mejor amiga y me has contado todo... ¡Te diré quién me gusta! —ambas rieron y Sakura se acercó a Ino. —Sasuke. —susurró.

—¿De verdad? Pero apenas le conoces.

—Es que cuando llegó, le recibí yo y, no sé, tiene algo que me gusta. —En la cara de Sakura apareció una pequeña sonrisa, y su mirada se perdía en el suelo.

—¿Y sólo lo sé yo?

—Bueno... Tengo pensado decírselo a Tenten y a Temari. —respondió, pensativa.

—Hum...Tu mejor amiga soy yo y lo van a saber todas. —Ino lo decía porque estaba preocupada por su amiga, en realidad eso no la molestaba.

—Sí. Pero Tenten es muy buena amiga y estoy segura de que no pasará nada. Lo mismo digo de Temari.

—Sakura, cariño, eres demasiado confiada. —Ino se rindió antes de empezar. Sakura era muy confiada, pero también muy orgullosa, y nada la haría cambiar de opinión.

Sakura entrecerró los ojos para ver mejor de lejos, y pudo distinguir dos rostros conocidos. Agitó la mano y gritó el nombre de su antigua amiga, Matsuri.

—¡Sakuraaaa! —la chica saludó. —¡Cuánto tiempo!

—Sí. —sonrió cerrando los ojos. Alguien más pronunció su nombre.

—¡Sakura! Te dejaste el pelo largo de nuevo, eh. —Era Deidara, el hermano mayor de Matsuri.

—Ah, sí. Creo que me queda mejor.

—¡Buenooo! —gritó Matsuri. —¿Dónde está Hinata? ¿Y Tenten? Tengo muchas coosas que decirles. —dijo entusiasmada.

—Pues Hinata en su casa, creo. Y Tenten estará con Temari o... bueno, no sé, la verdad.

—¡Valee! Si no te importa voy a verles, ¿vale? —abrazó a Sakura y después a Ino, y salió corriendo.

—Yo mejor me quedo con vosotras. —comentó Deidara.

Matsuri fue a visitar a Neji, ya que iba a la casa de Hinata. No le conocía demasiado, pero ella era una persona que al momento de conocerte te tomaba como un amigo más. Saludó al abuelo de Neji, quien en su momento se llevó muy bien con el abuelo de Matsuri, y con su permiso pasó a la sala principal.

—¡Hola, Neji!

—Em... Hola. —no conseguía recordar quién era esa chica. —¿Quién eres?

—Uuuh... No te acuerdas de mí, y yo de ti sí. Bueno, es normal. Soy Matsuri... —Neji seguía callado. —Fui vecina tuya.

—Ah, la hermana de Deidara.

—Sí... ¡Pero no me recuerdes sólo por eso! —la molestaba ser conocida sólo por su hermano, siempre decían lo mismo de ella. —Oí que eres el profesor de Tenten.

—¿La conoces? —Neji preguntaba por no quedar mal, realmente nada le interesaba.

—A parte de porque es famosa, fui su amiga. Si al final, conozco a todo el mundo, pero nadie se acuerda de mí. Y no lo digo por naadie... —se quedó mirando fijamente a Neji.

—Ironía.

—¡No me digas, qué listo! Sé que no te interesa nada de lo que yo te diga, es más, te estoy aburriendo, pero, ¿sabes lo que te digo? Me da igual. —Parecía que Matsuri hablaba sola, o con una pared. Aunque sabía que Neji la estaba prestando atención. —Bueno, ¿y qué me dices de Tenten? Descríbela, quiero saber si ha cambiado.

—Si quieres, ve a verla tú misma. Además, esa chica me da igual, habla de algo interesante.

—Se te da muy bien analizar a la gente, pero a mí se me da aún mejor, y gracias a eso que acabas de decir, sé que es muy especial para ti. ¿Me equivoco?

—Sí... —dijo Neji con ironía. Miró por la ventana. Tenía dudas sobre como pudiera entender Matsuri aquello, así que decidió aclararlo. —La conozco de hace tres semanas, qué va a ser especial.

—Hasta llevas la cuenta. Es una pena que esté aquí Sasuke, seguro que haríais buena pareja.

—¿Es que hay algún problema con que Sasuke esté aquí?

—Hombre, ten en cuenta que fue el primer amor de Tenten. Cosas así no se olvidan. Además, lo más posible es que Sasuke quiera estar de nuevo con ella.

—Oye Matsuri, hace más de siete años que no te veo y ya me estás agobiando.

—Vale, me estás echando de tu casa. No pasa nada. No te guardaré rencor. —Matsuri rió y corrió hacia la puerta. —Pero que sepas, que se lo voy a decir a Tenten.

—¿Decir el qué?

Matsuri se fue antes de que Neji pudiera tener una respuesta. Aunque él sabía perfectamente de lo que se trataba. Aquella conversación le dejó pensativo. Si había tenido novia alguna vez en su vida era por las apariencias, y para no ser el único solo. Pero, ¿le gustaba Tenten? Se respondió a sí mismo que no. Simplemente, aquella loca que decía ser Matsuri le había confundido, cosa que no volvería a pasar.


¡Bueno ya está! Mi fic no tiene tanto éxito como otros, pero aunque sólo lo leyera una persona y le gustara yo estaría feliz xD
Aquí mis preguntitas:
¿Sigue Tenten sintiendo algo por Sasuke? ¿Y Sasuke por Tenten?
¿Qué hará Neji?
¿Tendrá Matsuri un papel importante en todo esto?

Listo. Bueno pues eso es todo. Bye!