de Inuyasha - Mi triste y cruel vida (san x mir)

Tema en 'Inuyasha, Ranma y Rinne' iniciado por frambuesitha, 14 Noviembre 2009.

  1.  
    frambuesitha

    frambuesitha Entusiasta

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    Mi triste y cruel vida (san x mir)
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    Mi triste y cruel vida (san x mir)

    Lo siento de verdad, pues me he ausentado por un largo tiempo.
    Bueno he aquí mi última obra.
    Mi triste y cruel vida (san x mir) UA

    Capítulo uno:

    Era un mal día, si, definitivamente lo era. La lluvia la tenía completamente mojada y estaba más que estresada. Caminaba sin caminar, sin empleo, siendo menor de edad y con un hermano al que mantener sin importar como. Al fin llega a su casa y abre la puerta.
    • Llegué - dice Sango -.
    • Buenas tardes hermana – saluda Kohaku -.
    • ¿Cómo te ha ido en la escuela? - Pregunta Sango -.
    • Me saqué una f – Responde sin escrúpulos su hermano -.
    • ¡¿De nuevo!? , Kohaku ésta es la tercera vez, deberías responsabilizarte más por tus estudios -.Replica Sango enojada -.
    • Pues lo haría si tuviera un solo cuaderno – Dice Kohaku -.
    • Bien pues veremos que hacer, ahora ve a tu cuarto, porque mañana tienes clases -. Dice Sango evitándose una pelea.
    Kohaku sube las escaleras y suena el teléfono por lo que Sango corre a contestarlo.

    - Buenas tardes, Soy el dueño... - dice un señor -.
    • ¡ Deme más tiempo, por favor! – Dice Sango interrumpiéndolo, ya que sabía que era lo que iba a decir -.
    • Lo siento, pero ya tiene seis meses de atraso y no puedo esperar más -. Responde el arrendatario -.
    • Pero... – Dice Sango -.
    • O me paga mañana o se va, decida.- Dice el arrendatario y corta inmediatamente.-
    Sango queda atónita en el teléfono. Empieza a llorar, y triste, se va a su habitación.
    Ella empieza a pensar en que hacer, y mas que nada en sus padres. Su vida había sido tan desastrosa desde aquel día......

    Al día siguiente se puso su mejor ropa, embaló todo lo necesario, agarró a su hermano y se fue para no volver.....
    • ¿Adónde vamos, aneue? – Pregunta Kohaku -.
    • A algún lugar -. Responde Sango fría, para evitar llorar -.
    • Pero...
    • ¡Hazme caso de una maldita vez! – Grita Sango -.
    Kohaku no respondió y empezó a temblar. Sango lo llevó debajo de un puente y salió a buscar un trabajo. Y encontró, pero no uno de los mejores, en el centro de la ciudad.

    • ¿Cuánto pagan? – Pregunta Sango -.
    • 200 yens. – Responde una mujer -.
    • ¿En serio?, Lo tomo , aunque no se de qué se trata... – Replica Sango -.
    • Solamente entretén a los hombres y listo -.
    De ahí que empieza su desgracia.....
    Fin capítulo uno.
    Lo siento si lo hice muy corto, pero este capítulo es solo una pequeña introducción, a si que el próximo será más largo -.
    Gracias por leerme.
    Frambuesitha.
     
  2.  
    sanguitolove

    sanguitolove Entusiasta

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    Re: Mi triste y cruel vida (san x mir)

    Olas al parecer soy la primera... ¡Que emoción!
    Me gustó mucho la idea, además de que hacia mucho tiempo que no veía un Sango y Miroku en este foro y eso me desanima un poco, es por eso que ahora no entro mucho... claro además de que no tengo internet en casa y el colegio no me deja mucho tiempo pero bueno...
    Tú idea me gusta mucho, pero podrías hacer los capitulos un poco más largo, o tal vez este fue corto para que nos vayamos adentrando en la historia, espero que sea lo segundo.
    También podrías narrar un poco más las cosas... La ortografía esta bien y te felicito por eso.
    ¿Que mas decirte? Pues, espero que lo continues pronto y que a Sango no le pase nada malo.
    Por cierto tengo una duda ¿Que le paso a sus padres? espero me respondas.
    Atentamente tu primera lectora
    Sanguitolove
     
  3.  
    frambuesitha

    frambuesitha Entusiasta

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    Re: Mi triste y cruel vida (san x mir)

    jejejej Lo he hecho por lo segundo señorita en cuanto a tu pregunta...pues espera que lo sabras!!! Ya he dicho que es una pequeña introduccion.
    Y gracias por leer mi historia.
    Tambien dejare en claro que habra inuxkag en esta historia.
     
  4.  
    frambuesitha

    frambuesitha Entusiasta

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    Mi triste y cruel vida (san x mir)
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    Re: Mi triste y cruel vida (san x mir)

    Capítulo 2:
    No tenía ni idea de que rayos era eso de ‘’entretener’’ a los hombres ni mucho menos como hacerlo, así que le copio al resto. Era escalofriante la manera en que ellos le miraban y le perseguían con la mirada, como sonreían de una manera tan... maliciosa.
    Bailó toda la noche y al terminar el sudor frío recorría su cuerpo. Se fue a cambiar, en realidad era muy cansador, pero debía hacerlo si quería pagar los 600 yenes que debía al arrendatario; pues odiaría dormir bajo un puente el resto de su vida...
    - Hola – dijo una "mujer" de casi la misma edad que ella.
    • ¿Ah?, Hola... – responde Sango -.
    • ¿Cómo te llamas? – Dice ella -.
    • Sango Sumisawa – responde la castaña -.
    • Yo me llamo Kagome Higurashi – replica -.
    Ella era una niña de la misma edad de Sango. Tenía el pelo de un color azabache, y unos ojos de chocolate... tan llenos de tristeza. Se preguntaba porque ella estaba en ese lugar tan raro.
    • ¿Por qué estas aquí trabajando? – Pregunta muy curiosa la castaña -.
    • Pues... es una larga historia... –responde Kagome con un leve tono de tristeza -.
    • Lo siento si te ofendí... –dice Sango sintiéndose mal -.
    • No, para nada. Estoy aquí por que mi padre me obliga a traer dinero todas las noches a casa, o si no me reprende a golpes y la verdad no quiero eso... Ya tengo un enorme moretón en mi espalda que he tenido que tapar con un poco de base -. Dice ella -.
    • Oh... –dice Sango ya que sus padres no eran como el de ella -.
    • Bueno... y tú por qué estas en este lugar...
    • La verdad es que debo pagar el arriendo que le debo al arrendatario y no encontré trabajo en otro lugar. Ahora mismo me han echado y vivo debajo de un puente.
    • Ah... lo siento. – Dice Kagome -.
    • No, no es nada.
    Sango termina de vestirse, se despide y se va a pie. Tenía un largo trecho por recorrer.
    Al llegar a casa vió a Kohaku. Tenía un aspecto realmente extraño... él no había dormido, tenía los ojos muy rojos. Kohaku se paró a recibirla...
    • ¿ Kohaku?
    Suena un frenazo y se arrastran las ruedas de un auto. Sango grita de una manera desgarradora, porque su hermano estaba allí... sangrando en el suelo. No notó al conductor... este se había dado a la fuga.
    • ¡ Kohaku! – Gritaba Sango desesperada -.
    Mientras tanto, en un automóvil...
    El día ajetreado le cansó. En realidad necesitaba aire, los estudios lo tenían realmente estresado así que abrió la ventana. Vió a una hermosa mujer y ¡¿ a un niño sangrando en el suelo?!.
    Frenó en seco y bajó del auto; y se acerco a ella.
    • ¿Qué ocurre?, tenga cuidado, recuéstelo en el piso... –dice él -
    • Ayúdeme,por favor, alguien atropelló a mi hermano y no sé que hacer – dice la castaña muy nerviosa y entre sollozos -.
    • Tranquilizece y llame a la ambulancia, le practicaré una rcp. – Dice él -.
    • Sí, inmediatamente –dice ella -.
    Al llegar la ambulancia los lleva a los dos al hospital y el se va en su auto. Luego la castaña y él esperan en la sala de espera.
    • ¿Cómo te llamas? – Dice él -.
    • Sango Sumisawa – Responde aún en estado de Shock -.
    • Yo me llamo Miroku Tomoeda, es un gusto conocer a alguien tan bella... –
    • Gracias- responde ella -.
    Llega un señor y se dirige a Sango.
    - Perdone, señorita. ¿Me podría decir en donde vive usted?
    - Yo. yo... vivo debajo del puente... -
    - ¿Está usted bromeando conmigo?
    • No – responde un poco ofendida -.
    • Y.. ¿Cómo piensa usted pagar esto? -.
    • Ya basta, yo lo pagaré y punto. Nunca mas iremos de nuevo a este hospital. – Dice Miroku enfadado.-
    Al poco tiempo después una enfermera irrumpe en la habitación. Hubo un pequeño pero mortal silencio. Luego, al fin, ella dijo que Kohaku se encontraba fuera de peligro; pero que debía quedarse en el hospital por una o dos semanas.
    • ¿Ya se ha rehabilitado este niño?- dice la enfermera -.
    • ¿Por... porque? – dice Sango -.
    • ¿No sabía usted que consumía drogas?- pregunta la enfermera -.
    • ¡¿Que?! – Dice Sango desmayándose -.
    Miroku igual de sorprendido que Sango y más sorprendido aun por la mala suerte de ella la agarra y le asegura a la enfermera que estará bien y la lleva a su hogar.
     
  5.  
    frambuesitha

    frambuesitha Entusiasta

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    Mi triste y cruel vida (san x mir)
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    Re: Mi triste y cruel vida (san x mir)

    Capítulo 2:
    No tenía ni idea de que rayos era eso de ‘’entretener’’ a los hombres ni mucho menos como hacerlo, así que le copio al resto. Era escalofriante la manera en que ellos le miraban y le perseguían con la mirada, como sonreían de una manera tan... maliciosa.
    Bailó toda la noche y al terminar el sudor frío recorría su cuerpo. Se fue a cambiar, en realidad era muy cansador, pero debía hacerlo si quería pagar los 600 yenes que debía al arrendatario; pues odiaría dormir bajo un puente el resto de su vida...
    - Hola – dijo una "mujer" de casi la misma edad que ella.
    • ¿Ah?, Hola... – responde Sango -.
    • ¿Cómo te llamas? – Dice ella -.
    • Sango Sumisawa – responde la castaña -.
    • Yo me llamo Kagome Higurashi – replica -.
    Ella era una niña de la misma edad de Sango. Tenía el pelo de un color azabache, y unos ojos de chocolate... tan llenos de tristeza. Se preguntaba porque ella estaba en ese lugar tan raro.
    • ¿Por qué estas aquí trabajando? – Pregunta muy curiosa la castaña -.
    • Pues... es una larga historia... –responde Kagome con un leve tono de tristeza -.
    • Lo siento si te ofendí... –dice Sango sintiéndose mal -.
    • No, para nada. Estoy aquí por que mi padre me obliga a traer dinero todas las noches a casa, o si no me reprende a golpes y la verdad no quiero eso... Ya tengo un enorme moretón en mi espalda que he tenido que tapar con un poco de base -. Dice ella -.
    • Oh... –dice Sango ya que sus padres no eran como el de ella -.
    • Bueno... y tú por qué estas en este lugar...
    • La verdad es que debo pagar el arriendo que le debo al arrendatario y no encontré trabajo en otro lugar. Ahora mismo me han echado y vivo debajo de un puente.
    • Ah... lo siento. – Dice Kagome -.
    • No, no es nada.
    Sango termina de vestirse, se despide y se va a pie. Tenía un largo trecho por recorrer.
    Al llegar a casa vió a Kohaku. Tenía un aspecto realmente extraño... él no había dormido, tenía los ojos muy rojos. Kohaku se paró a recibirla...
    • ¿ Kohaku?
    Suena un frenazo y se arrastran las ruedas de un auto. Sango grita de una manera desgarradora, porque su hermano estaba allí... sangrando en el suelo. No notó al conductor... este se había dado a la fuga.
    • ¡ Kohaku! – Gritaba Sango desesperada -.
    Mientras tanto, en un automóvil...
    El día ajetreado le cansó. En realidad necesitaba aire, los estudios lo tenían realmente estresado así que abrió la ventana. Vió a una hermosa mujer y ¡¿ a un niño sangrando en el suelo?!.
    Frenó en seco y bajó del auto; y se acerco a ella.
    • ¿Qué ocurre?, tenga cuidado, recuéstelo en el piso... –dice él -
    • Ayúdeme,por favor, alguien atropelló a mi hermano y no sé que hacer – dice la castaña muy nerviosa y entre sollozos -.
    • Tranquilizece y llame a la ambulancia, le practicaré una rcp. – Dice él -.
    • Sí, inmediatamente –dice ella -.
    Al llegar la ambulancia los lleva a los dos al hospital y el se va en su auto. Luego la castaña y él esperan en la sala de espera.
    • ¿Cómo te llamas? – Dice él -.
    • Sango Sumisawa – Responde aún en estado de Shock -.
    • Yo me llamo Miroku Tomoeda, es un gusto conocer a alguien tan bella... –
    • Gracias- responde ella -.
    Llega un señor y se dirige a Sango.
    - Perdone, señorita. ¿Me podría decir en donde vive usted?
    - Yo. yo... vivo debajo del puente... -
    - ¿Está usted bromeando conmigo?
    • No – responde un poco ofendida -.
    • Y.. ¿Cómo piensa usted pagar esto? -.
    • Ya basta, yo lo pagaré y punto. Nunca mas iremos de nuevo a este hospital. – Dice Miroku enfadado.-
    Al poco tiempo después una enfermera irrumpe en la habitación. Hubo un pequeño pero mortal silencio. Luego, al fin, ella dijo que Kohaku se encontraba fuera de peligro; pero que debía quedarse en el hospital por una o dos semanas.
    • ¿Ya se ha rehabilitado este niño?- dice la enfermera -.
    • ¿Por... porque? – dice Sango -.
    • ¿No sabía usted que consumía drogas?- pregunta la enfermera -.
    • ¡¿Que?! – Dice Sango desmayándose -.
    Miroku igual de sorprendido que Sango y más sorprendido aun por la mala suerte de ella la agarra y le asegura a la enfermera que estará bien y la lleva a su hogar.
     
  6.  
    frambuesitha

    frambuesitha Entusiasta

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    Palabras:
    33
    Re: Mi triste y cruel vida (san x mir)

    Alli va mi continuacion, espero que les guste y no dejen de leer mi fic.
    Esperen y verán lo que viene...
    Frambuesitha
     

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