::::::::pasion despiadada:::::::: BUENO AQUI LES TRAIGO MI SEGUNDO FIC......YA QUE SERA UN FIC ALGO LARGO Y CON UNAS DE LAS PAREJAS QUE MAS ME GUSTAN.....;), HABRA LEMON ( CLARO QUE SE ENCONTRARA EN ;)MI BLOK;)) Y ESPERO QUE LES GUSTE YA QUE DEDIQUE DEMASIADO TIEMPO PARA PERFECCIONARLO...... .............................................PROLOGO........................................................................ Sesshomaru espero en el vesticulo del hotel hasta que Hakudoshi y la señora Higurashi salieron de su cita con el abogado. Le disgustaba ocultarse, pero lo que tenía que decirle a kagome era demasiado importante como para arriesgarse a que lo interrumpieran; sobre todo a que lo interrumpiera su madre o su prometido. Mientras llamaba con los nudillos a la puerta de la suite, noto distraído que tenía el pulso acelerado. Y cuando oyó el << ya va>> de aquella voz baja y sensual, sintió como si una bomba de voracidad masculina le hubiese explotado en las entrañas. La puerta se abrió. Los ojos cafés de kagome se agrandaron, un ligero rubor cubrió su exquisita pie. Apretó con los dedos el velo que se estaba probando: corto y fantasioso, como correspondía a una novia de dieciocho años. -Se… Sesshomaru- balbuceo ella- que sorpresa. -¿Puedo pasar? Kagome vacilo. Luego dio un paso atrás. -Hakudoshi acaba de marcharse. Ha estado aquí con mi madre. -No he venido a verlos a ellos- dijo él mientras entraba en la suite que Hakudoshi había reservado para la chica con la que se asaria al día siguiente; en el mejor hotel de Tokio, como correspondía a la novia de uno de los más prestigiosos publicistas de todo Japón. La impersonal opulencia de la pieza debería haber eclipsado a una mujer tan pequeña; pero, a pesar de su juventud y fragilidad, kagome permanecía firme, con aquel absurdo velo sobre su cabello negro azulado y, aunque Sesshomaru intuía lo contrario, parecía tranquila. -¿Qué quieres?- pregunto con suavidad. Sesshomaru había tenido sueños eróticos con ese cabello, con aquel cuerpo esbelto, esa boca jugosa, todavía inocente a pesar del compromiso con su amigo. Hakudoshi estaba siendo muy cuidadoso con ella y daba la impresión de estar dispuesto a esperar a la noche de bodas para consumar su relación. Respiro un amargo aguijonazo de celos que lo sorprendió e irrito al mismo tiempo y pregunto sin rodeos: -¿Has pensado en lo que implica en casarse con Hakudoshi? - puede que solo tenga dieciocho años- contesto Kagome con una fría dignidad que le resulto tan desquiciante como provocativa-, pero no soy estúpida. Si, se lo que implica este matrimonio. Veo la televisión, los periódicos, las revistas y libros, voy al cine, hablo con la gente…Y mis padres estuvieron casados- añadió con un delicado sarcasmo. ¿Sabía que lo de él no? Era posible. Quizá se lo hubiera contado Hakudoshi. -¿Con que gente has hablado?, ¿Con las compañeras del internado en el que terminaste el instituto el año pasado? ¿Qué saben ellas? -¡¡ Tanto como cualquier chica que crezca en las calles!! Una cosa es que tú vengas de un estrato socioeconómico distinto y otra que no nos afecten los mismos problemas- replico irritada-. Lo… lo siento. No pretendía… - No importa- interrumpió el -. Si, es verdad que crecí en la calle; pero te estoy hablando de lo vas a ser plato de segunda mesa. -¡¡ Eso no es verdad!!-exclamo encendida Kagome- seria así si estuviera ocupando el lugar de una antigua esposa. Hakudoshi no ha dejado a ninguna mujer por mí. Sesshomaru contuvo su primera y letal respuesta. No tenía sentido hablar de la tragedia de Kanna. Además, técnicamente, Kagome tenía razón. Hakudoshi no había llegado a pedirle a la mujer que había sido su novia durante los anteriores cinco años que se casara con él. -Hakudoshi querrá que dirijas su casa, que organices cenas y fiestas, que conozcas a sus clientes y seas la perfecta anfitriona. ¿Serás capaz? -Puedo intentarlo- respondió la pelinegra sin total seguridad-.Mi madre me ayudara. -Tu madre no está bien. Una sombra oscureció sus facciones. ¿Hasta qué punto, habría presionado la encantadora señora Higurashi a su hija?, se pregunto. No habría sido algo descarado, pero después de enviudar y perder la pensión del difunto marido, la buena mujer habría visto a Hakudoshi como la respuesta a todas sus suplicas. -Esta… mejorando- contesto Kagome por fin-. Y yo aprendo rápidamente- añadió en tono desafiante. Estaba decidida a llegar hasta el final. Solo le había ocurrido una vez más hasta entonces, Sesshomaru sintió como si un ataque de pánico amenazase con descontrolar su cerebro, tan frio e incisivo por lo general. -¿Por qué te casa con él, kagome?- le pregunto con maldad cuando se había calmado-. Si es por dinero… -¡¡ No es por dinero en absoluto!!- atajo indignada ella, alzando la barbilla-. Hakudoshi es un hombre atractivo, excitante, amable, considerado y divertido… - Y tiene veinte años mas que tu. -¿Y?- kagome alzo la barbilla un poco más-. Me gustan los hombres mayores. - Porque quieres encontrar un padre que reemplace al que acabas de perder- contesto con crudeza. Estaba llevando la situación fatal. Pero no sabía cómo reconducirla-. Pero Hakudoshi no ha cumplido aún los cuarenta, no es una figura paternal. Va querer acostarse contigo, kat… - ¡¡ No me llames así!! -¿Por qué no? Eres como una gata- dijo Sesshomaru, en alusión al significado de Kat *(aclaración pondré kat en vez de Cat, para que pueda ir con la historia)*-. Eres dulce y cariñosa cuando todo va bien, pero también veo la felina feroz que llevas dentro. Hakudoshi no lo ve…. El cree que eres dócil, obediente y juguetona. Es un hombre viril, experimentado. ¿Has pensado en lo que será hacer el amor con él? Kagome se quedo pálida. Bajo las pestañas y contesto enojada: -Voy a hacer todo lo posible por ser una buena esposa para él. -¿A pesar de que me deseas?- contesto Sesshomaru. La pelinegra bajo la cabeza. -¡¡ No!!- exclamo con fiereza- Yo quiero a Hakudoshi. -Pero me deseas- repitió el peli plateado al tiempo que posaba la mano bajo la barbilla de Kagome. Ella no pudo evitar mirarlo a los ojos voraces y desolados. -Cancela la boda- añadió el, luchando por contener la implacable pasión que lo instaba en levantarla en brazos, llevarla al dormitorio y reclamarla para sí sobre la cama del modo más primitivo y eficaz-. Kat, no puedes casarte con Haku… cancela la boda. Yo te ayudare. Será difícil, pero la haremos fuerte- dijo con voz firme, profunda y sensual, recurriendo a todas sus mañas para convencerla. Y estaba a punto de hacerlo. Noto su tensión, sus ganas de rendirse…pero luego cambio su expresión y contesto: -¿ Y luego que, sesshomaru? -Puedo ayudarte- repitió al tiempo que bajaba la mano junto a su propio costado. Y supo, nada mas decirlo, que la pelinegra no se conformaría con una promesa tan vaga. Lo cual lo irrito, pues no podía ofrecerle nada más. Quizá Hakudoshi estuviera dispuesto a aprovecharse de una chica recién salida del instituto, pero él sabía que Kat no estaba prepara para casarse con nadie…como no lo estaba él para la pasión que endurecía su cuerpo en cuanto la tocaba. Kagome cerró los ojos. Cuando abrió los parpados de nuevo, sus ojos cafés lo fulminaron con una suave y gélida mirada. -No sé qué pasa entre nosotros, pero no puede significar nada, porque no te conozco; hace solo tres días que nos conocemos. A Hakudoshi si que lo conozco y sé que, no solo lo quiero, sino que lo respeto. Nunca lo expondría a tan gran humillación pública por algo que no comprendo y en lo que no confió- Kat lo miro directamente a los ojos-, debería darte vergüenza sugerírmelo siquiera, siendo su mejor amigo y su protegido. Incapaz de aguantar la frustración que lo había mantenido en vela las anteriores tres noches, sesshomaru la beso por sorpresa, hasta hacerla abrir la boca. Se embriago de su esencia dulce y femenina, narcótica, y aunque intento bajar los brazos, separar la cabeza y echarse atrás, no acertó a moverse, desbordado aquel peligroso y feroz placer. Kagome no se resistió. Tras unos primeros segundos tensa, acabo cediendo, amoldándose al cuerpo de sesshomaru, invitándolo a que siguiera besándola. Así que aquello era el paraíso, pensó él a duras penas. Cuando noto que se puso tensa y que intentaba apartarse, la dejo marchar. Solo entonces advirtió que alguien estaba llamando a la puerta. Kat desvió avergonzada la mirada. Se llevo la mano a la boca y se la froto como para borrarse el beso. -vete- susurro- vete de aquí ahora mismo y no vuelvas nunca. No me casaría contigo aunque fueras el último hombre en la faz de la tierra. Sesshomaru se acerco a estirarle el arrugado velo de novia. Asombrosamente, se mantuvo sereno, a pesar que jamás en su vida había tenido tantas ganas de hacerlo todo trizas. -No recuerdo haberte ofrecido de que nos casáramos. Piensa en este beso cuando estas con Hakudoshi- contesto con agresividad. Luego se dio vuelta y se marcho sin mirar siquiera a la camarera del hotel que esperaba en la puerta. BUENO ESPERO SUS POST:), SE ACEPTAN COMENTARIOS PARA MEJORAR........
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: wow! Kagome se casara con Hakudoshi... Sesshomaru trato de impedirlo....@o@ que hara Kagome en este caso...cancelara?...se casara...? no puedo esperar a la siguiente actualizacion...xD
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: Ayyy!! me gustó mucho!! dios que kagome se case con hakudoshi ya es una cosa, pero que encima el tipo tenga 20 años mas ya es otra, y bien grande!!! jaja y sesshoumaru trato de impedirlo, mmm raro me cuesta creer que exprese lo que siente jeje me gustó mucho, espero conti pronto!
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: Bueno aqui esta la continuacion de mi fic espero que les guste como el capitulo me quedo un poco largo lo dividi en dos partes....y gracias por los post..asi que los dejo con la conti ..y esto dice asi....... ::::::::::::::::::::::::::::::: CAPITULO UNO: EL ENCUENTRO :::::::::::::::::::::::::::: Seis años después… KAT se paro en el transitado cruce y se quedo mirando el edificio de la otra acera. En la pasajera intimidad de una multitud, un hombre capto su mirada. - Impresiona, ¿verdad?- continuo con jovialidad, para centrar su atención acto seguido en la delicada y fina cara de Kat-. Ya ha ganado varios premios en Tokio, y un par más en el extranjero. Es de Sesshomaru Taisho…un hombre increíble. Empezó como publicista, se hizo oro, recibió premios y luego se pasó a la informática y fundó el mayor servidor de internet de Tokio. Según la prensa financiera, está en medio de un acuerdo con el que se va a llenar los bolsillos. ¡y todo con solo veinte y picos de años! Veinte y uno, para ser exactos. Kat trago saliva y asintió con la cabeza. El edificio de enfrente resplandecía, era majestuoso, nada parecido a las viejas oficinas del complejo industrial a las afueras de Tokio que había acogido el negocio de Sesshomaru al principio. En algún rincón de aquel nuevo edificio, quizás tras una de aquellas ventanas, estaría esperándola. El corazón le latía con fuerzas, las palmas le sudaban. Sin contar sus fotografías en periódicos, hacía dos años que no lo veía a Sesshomaru. ¿Habrá cambiado? ¡la encontraría a ella cambiada? -¿Has venido a hacer turismo?- le pregunto el desconocido. -No- se limito a contestar Kat, demasiado tenso para ser amable. -Ah- murmuro el desconocido, sintiéndose desairado-. Pues nada, que tengas un buen día -añadió antes de alejarse y desaparecer con el orgullo herido entre la creciente multitud. Kat se seco las palmas con un pañuelo. Echo un vistazo fugaz al reloj y vio que aun tenia cinco minutos. :::::::::::::: recuerdos de kagome:::::::::::::::: Al mes de su boda con Haku, Sesshomaru había renunciado a su trabajo en la agencia de publicidad de aquel, rechazando todo lo que su amigo había hecho por el. -¿Cómo se puede ser tan desgraciado?!- había rezongado Haku-. Lo saque de la calle, le di la mejor educación de Tokio y luego lo mande al extranjero a la universidad, lo converti en lo que es…. Lo he tratado como si fuera un maldito príncipe… y ahora me traiciona. Le resultaba imposible imaginarse a Sesshomaru, tan alto, guapo y elegante, embutido en siempre ropas caras, viviendo en la calle. Pero todo el mundo se sabia su historia. Sintiéndose aun culpable por como había reaccionado al beso de Sesshomaru, Kat había respondió: -¿Cómo lo conociste si vivía en la calle? -Bueno, tampoco vivía en la calle exactamente. Estaba en una casucha con una chica- había contestado Haku, encogiéndose de hombros-. Un dia me abordo al salir de la agencia y me pido trabajo. Cuando le pregunte que por que iba a darle un trabajo, me dijo que sabia que yo era el mejor y que tenía intención de ser mejor que yo algún dia. Solo tenía Catorce años, pero note que hablaba en serio. Esto me gusto, asi que lo mande a mi antiguo instituto. Kat, que sabía por experiencia lo crueles que podían ser los adolecentes de un internado caro, pregunto: -¿Cómo se las arreglo? -Con estilo y suficiencia- respondió indiferente Haku-. En menos de una semana tenia a todos comiendo de sus mano. Siempre tuvo una confianza desbordante en sus posibilidades, y me bastaron diez minutos para darme cuenta de que era brillante. Trabajo con ahínco y se graduó con honores. Tampoco tardo en destacar en la universidad. Y ahora lo va echar todo a perder por un estúpido proyecto en internet. Va a fracasar y se va a hundir con su empresa. :::::::::::::::::: Fin de los recuerdos:::::::::::::::::: Pero no se había hundido. Sesshomaru había hecho oídos sordos a las murmuraciones, a la advertencias de Haku, y había demostrado que, gracias a su esfuerza y su inteligencia, era capaz de triunfar por si solo. Y así, al cabo de unos pocos años, se había hecho multimillonario. Su negocio en el sector de las telecomunicaciones se expandía vertiginosamente y, tal como había escrito un periodista no hacía mucho, parecía dispuesto a conquistar el mundo. Haku había reconocido su éxito y había terminado readmitiéndolo con los brazos abiertos, para morir pocos meses después en un accidente de tráfico. Solo entonces había descubierto Kat que había encargado a Sesshomaru que se ocupara del seguro de vida en le que ella figuraba como la beneficiaria. Aturdida aun por la muerte de su marido, que había ido a añadirse a la de su madre, que había fallecido tan solo un mes antes, había sentido el gran alivio al ver a Sesshomaru como trataba con distante cortesía. Aunque su impertinente memoria se empeñaba en recordarle aquellos fogosos instantes tras el entierro, cuando lo que había empezado como un abrazo reconfortante había terminado desatando una pasión desesperada. Aquel ardiente beso la había hecho huir al extranjero y, desde entonces, solo había estado en contacto con Sesshomaru por medio de su representante. Cuando el semáforo se puso en verde para los peatones, Kat apretó los dientes y cruzo la carretera. Aunque no estuviera preparada, había llegado la hora de enfrentarse a Sesshomaru Taisho. Embutida en un vestido de seda pasado de moda, trago saliva e intento tranquilizarse; pero no pudo hacer nada por evitar el revuelo de mariposas de su estomago, las cuales aletearon con mas fuerza aun cuando entro en el majestuoso vestíbulo del edificio. Tensa, Kat se presento a la recepcionista, lo cual, tras mirar con discreción su anillo de casada, contesto: -El señor Taisho la está esperando, señora Takeda. Suba en el ascensor hasta la cuarta planta y allí la recibirá su ayudante personal. La ayudante personal resulto ser una mujer de aspecto intimidante. Tal como la había anunciado la recepcionista, ya estaba junto al ascensor cuando Kat alcanzo el piso indicado. -El señor Taisho la atenderá en seguida-dijo la mujer mientras la acompañaba a una amplia antesala-. ¿Puedo ofrecerle una taza de café mientras espera? -No, gracias- rehusó Kat. El café se cultivaba en las colinas de Romit, una isla grande al norte de Australia; un café delicioso y aromático, pero que Kat no podía beber sin recordar un país destrozado por una cruenta guerra civil que había dejado miles de muertos. Aunque Lin seguía con vida, y era por ella quien había ido allí. -Tome asiento- la invito la ayudante personal-. El señor Taisho no tardara- repitió. Kat se acomodo en una silla, agarro una revista y la hojeo sin registrar una sola palabra. Sesshomaru era su último recurso. Los bancos la habían rechazado una y otra vez, negándose a concederle el préstamo que solicitaba con tanta solemnidad como diplomacia…e insultante velocidad. Intuyo un movimiento que le erizo´ el vello de la nuca. Alzo´ la cabeza. Como una pantera, sigiloso e intimidante, todo elegancia, Sesshomaru entro en la antesala y la observo sin pestañar con aquellos ojos ambarinos. Miro después hacia el dedo sobre el que, impulsada por una oscura necesidad de sentirse protegida, se había puesto el anillo de casada por primera vez desde que se lo quitara hacia un año. Impedida por la necesidad de establecer cierto equilibrio físico, Kat se levanto. Durante un espantoso segundo, creyó que el suelo se movía bajo sus pies. Sesshomaru la sujeto cuando ella se agarraba al respaldo de la silla para mantenerse en pie. -Cuidado-dijo el, agarrándola con fuerza por una antebrazo. Kat se quedo helada. Los ojos de Sesshomaru se encendieron. Pero sus llamas apenas duraron un instante. Acto seguido, sus labios dibujaron una bonita sonrisa. ¡Dios!, pensó alarmada Kat. Llevaba el recuerdo de Sesshomaru grabado en el cerebro, sellado a fuego en el corazón. Nunca había olvidado su voz: esa voz profunda, cálida que, sin embargo, podía resultar gélida si Sesshomaru se lo proponía. Una voz que la había perseguido en sus sueños, atormentándola durante noches interminables. -Hola Kat- la saludo el con educada frialdad. No había cambiado mucho. En todo caso, estaba aun más atractivo. Con aquellos hombros anchos, su estrecha cintura, sus largas piernas, ese cuerpo varonil que irradiaba poder y autoridad...( wouw apoco no nos imaginamos así a sessho mmmmmmm dejemos volar la imaginación chicas XD) en definitiva, Sesshomaru Taisho seguía dominando cada habitación a la que entraba, absorbiendo todo su espacio y su aire, lo cual la obligaba a respirar entrecortadamente( jajaja con esa situación hasta a mi me pasa lo mismo jejeje ^///^) mientras el corazón resonaba en sus oídos. Y seguía mirándola con desprecio. Kat resistió el embate de un fugaz ataque de pánico. ¿Cuántas veces a lo largo de aquellos dos años había soñado con encontrarse con Sesshomaru de nuevo?, ¿Cuántas lo había imaginado con todo tipo de detalles durante aquellos segundos aletargados entre el sueño y la vigilia, cuando sus defensas estaban bajadas? BUENO CHICAS PODRE LO MAS PRONTO POSIBLE LA CONTI..ASI QUE NO LEEMOS LUEGO...
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: Hola, He leído tu MP y me he pasado al instante. He notado que tienes problemas con los acentos, dependiendo del tiempo en que estés hablando. Tus verbos los desarrollas en pasado, por eso éstos llevan acentos. Un ejemplo de ello sería: *Balbuceó. *Vaciló. *Preguntó. Otra cosa que noto es que cuando utilizas el ‘sólo’ para indicar cantidad, no le colocas el acento; al no hacerlo, parece que hablas de ‘solo’ de soledad. El ‘seria’ lleva acento cuando se refiere al verbo ser, ejemplo: tal vez ‘sería’ así. Cuando no se coloca acento, la palabra cambia y pareciese que hablases de ‘seria’, de seriedad. El ‘si’ también tiene sus inconvenientes respecto a los acentos, puesto que cuando se afirma, este va acentuado. Ejemplo: ‘Sí’, yo lo hice. Esto es más una opinión personal: Cuando quieras hacer una aclaración, coloca un número o algún signo (^, *, etc.), para que el lector al final de la historia pueda leerla. O al momento, si tiene tanta curiosidad, se dirija al índice del final. Son un tanto molestas las aclaraciones en mitad de la historia. La tuya me ha impresionado, porque no ha hecho que perdiera el hilo concentrándome en ella. El ‘tu’ va acentuado cuando no se utiliza como sujeto posesivo. Es decir, cuando dices, por ejemplo, ‘tu casa’, no va acentuado, porque demuestra la posesión sobre algo, pero cuando te refieres a una persona únicamente, por ejemplo, ‘tú eres’, va acentuado, porque no se está hablando del objeto, sino de la persona en sí. El espacio de recuerdos lo puedes llenar con el conocido ‘Flash Back’. El ‘aún’ va acentuado. Cuando en una conversación se cita el ‘¿Por qué?’ pero sin hacerlo pregunta, sino como referencia, se escribe ‘porqué’. Sinceramente, el primer capítulo me ha gustado mucho. Las frases contundentes y el mutismo de Sesshoumaru han sido geniales. La actitud autosuficiente de Kagome me ha sorprendido, y a la misma vez, de imaginarme a la Kagome de la serie en su lugar, imagino que, aunque hubiese sido más agresiva, ella hubiera reaccionado de manera similar Esperaré a la próxima continuación. Saludos, JacKiller. P. D: Por cierto, el título del FF es sexy.
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: jajaja thanks jack..pero como lo comente al final el capitulo es algo largo y es de la cita el "por que?" vendra en el siguiente continuacion del capitulo uno y la falta se asentuacion es por la inservible coputadora de mi papa que me la presto, ya que la mia se descompuso T.T...asi que tendre un poco de dificultad a cuanto a eso. y el tiempo que utilizo se va estar entrelazando con el pasado y el presente de manera inesperada ( ya que quiero cmbiar un poco el concepto -.-) pero no es muy seguido eso y en cuention de kagome...tratare de que sorprendas en las proximas continuaciones... ha y pronto podre la continuacion.....;) asi que.... un adieu!!!
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: Hola! :rosa: Acabo de leer tu fic y debó de decirte que me gusto mucho, me encanto la primera parte en la que Sesshomaru le pide a Kagome que no se case con Hakudoshi y la manera en la que esta le responde, nunca me hubiera imaginado a Kagome casada con Hakudoshi y que este no sea malo... voy a estar esperando la continuación, seguiré tu fic de ahora en adelante. Nos vemos... :yeah:
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: hola a todos !!, perdon por no poder actualizar a tiempo pero me es dificil ya que mi computadora estubo dañada T-T un tiempo y hace poco me castigaron y me castigaron la compu..pero ya la tengo de regreso, tengo que volver a teclear la historia de mi cuaderno a la compu ya que se borro el documento donde lo tenia y otros trabajos importantes en donde tambien habia otras historias con las que queria compartir despues. bueno para no hacer mas largo todo ! mañana tendre algunos capitulos para vos¡¡..( creo que meha afectado ver peliculas en traduccion en castellano) jjajajajaja asi que nos veremos despues.... bessssos sesshogriss
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: Bueno ya estoy aqui!!!..jaja la verdad lo siento mucho, ya que me tarde mas de lo comun..la verdad fue que me lastime el brazo y mas la muñeca y los dedos, casi no puedo moverlos y me es dificil escribir..:(y espero que les guste la continuacion del mismo capitulo uno.. ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ anteriormente.... Kat resistió el embate de un fugaz ataque de pánico. ¿Cuántas veces a lo largo de aquellos dos años había soñado con encontrarse con Sesshomaru de nuevo?, ¿Cuántas lo había imaginado con todo tipo de detalles durante aquellos segundos aletargados entre el sueño y la vigilia, cuando sus defensas estaban bajadas?.... ** Cientos. Y cuando por fin sucedía, no pudo pensar ni hacer nada, salvo responder con la misma intensidad abrumadora. Todo seguía igual. -Hola sesshomaru- lo saludo con un hilillo de voz, consciente de que su ayudante personal los estaba escuchando. - Entra- contesto el antes de echarse un lado para que pudiese pasar a su despacho-. Sara, por favor, no quiero interrupciones. Se adentro en el despacho y miro a su alrededor. La pieza organizada, con estricta precisión, proclamaba en silencio el éxito de sesshomaru: una mesa enorme, un ordenador último modelo, una librería inmensa y unos asientos de piel negro, aparentemente cómodos; junto a una mesa baja. Unos ventanales que iban desde suelo al techo dan al centro de Tokio. -Bonita vista- comento Kat para romper el silencio. -Me alegra que te guste- repuso con sarcástica cortesía. Enrabietada consigo misma por darle dado ocasión de mostrarse mordaz, Kat desvió la vista hacia un cuadro. No se trataba del típico cuadro de decoración impersonal, que si no era un oleo original de una mujer desnuda que le daba la espalda al artista. De su rostro no podía verse más que la curva de la mejilla. Lo había pintado un genio que había impregnado aquella sencilla pose de un oscuro y amenazante misterio. Tenía que ser pura coincidencia el hecho de que el cabello que caía sobre los hombros y la espalda de la modelo tuviese el mismo tono de cabello negro azabache que el de ella. También ella lo había llevado así de largo tiempo atrás; pero se lo había cortado. Sesshomaru la miraba con expresión impenetrable. -Estas preciosa. Como siempre- comento al tiempo que enarcaba sus cejas-. Ese vestido de seda tan azul es perfecto para tus ojos. A pesar de lo escaso que era su vestuario, Kat había tardado una hora en elegir el vestido. Trato de controlar la violenta mezcla de emociones que la asaltaba antes de responder: -Y tu sigues siendo tan sutil como siempre, ¿ como estas? -Encantado de verte. -Ni tu te lo crees- contesto crispada Kat. La satisfizo apreciar que había desconcertado a Sesshomaru, pero el contraataque de este fue tan ágil como brutal: -¿Y tú?, ¿Has disfrutado de la tradicional terapia de viudedad?- pregunto, y Kat lo miro confundida-. Aunque supongo que la gran mayoría de las viudas les parecería un poco excesivo tirarse dos años viajando de lujo en lujo por todo el mundo-añadió con una sonrisa insolente. -¿Qué?!!-exclamo indignada Kat. -Ese vestido no te lo has comprado en Tokio, ¿no?- dijo el tras examinar el cuerpo de Kat de arriba abajo. -No…- reconoció esta. Se lo había comprado hakudoshi en parís. Pero antes de dar voz a su respuesta, sesshomaru se adelanto a ella. -¿Cuando has vuelto a Tokio? -En febrero. -¿Qué has estado haciendo desde entonces?- pregunto el sorprendido. -Terminar mis estudios de contabilidad. -¿De veras?- dijo sesshomaru en tono burlón-. ¿Debo felicitar a una recién titulada? -Si apruebo los exámenes finales. -Seguro que aprobaras. ¿Quién pondría tu inteligencia en duda?-contesto él con un insulto velado en sus palabras-. Siéntate Kat. Esta obedeció y sesshomaru rodeo la enorme mesa de trabajo para tomar asiento. -Se me hace raro que hayas elegido ser contable- prosiguió el antes de añadir con insolencia-. Aunque quizá no tanto. --me gustan los números-dijo Kat-. Te ayudan a saber donde estas. -Cierto: son mucho más orientativos que las entrometidas emociones- murmuro sesshomaru-. Y te vendrán de maravilla para seguir las pista a tus finanzas. La insinuación de que los arribistas necesitaban conocimientos contables la hizo elevar la barbilla. Se obligo a disimular que la había herido y deseo ser veinte centímetros más alta…como su ayudante personal. La estatura impresionaba a las personas que pensaban que las mujeres bajitas y delgadas eran muy femeninas y, por tanto, estúpidas y codiciosas. -Exacto. -Bueno,¿ Y a que debo el honor de tu visita?- pregunto Sesshomaru con un tono indiferente. No había una manera más fácil de decirlo, asi que opto por decirlo por soltarlo a bocajarro: -Necesito dinero. -Lógico- contesto él con agresividad. Luego se recorto sobre el respaldo del asiento, alejándose como todos los gestores financieros que ya la habían rechazado, pensó enojada Kat-. Como fideicomisario de los bienes de Hakudoshi, me asegure de que recibieras tu pensión anual de viudedad hace cuatro meses. No tienes derecho a mas hasta dentro de otros ocho meses. -Necesito un adelanto. -¿Cuánto, y por qué?- quiso saber Sesshomaru. -Veinte mil dólares. No sabía que había estado esperando:¿una reacción burlona, rabiosa, disgustada? Sea como fuera, el rostro de sesshomaru permaneció impávido. -¿Por qué necesitas veinte mil dólares?- pregunto este casi con suavidad. Kat abrió su bolso y saco una fotografía. Le tembló la mano mientras la colocaba encima de la mesa: -Necesita una operación- dijo, apuntando a la niña que aparecía en la foto. Sesshomaru miro asombrado. Pero por sorpresa quedo reemplazada por un oscuro brillo furioso instantes después: -¿ Es tu hija? -¡ No!- exclamo ella, respirando a duras penas. Sesshomaru examino la foto con detenimiento antes de volver a preguntar: -Entonces, ¿Quién es?, ¿Y qué tiene que ver que necesite veinte mil dólares? -Se llama Rin. Esta a mi cargo, y ya ves para que necesito dinero. Sesshomaru miro la foto una vez más. -Veo que necesitan que la operen; ¿Pero qué tiene eso que ver con que me pidas un adelanto de tu pensión?- dijo con tono neutro. -Tiene fisura palatina- concreto Kat-. Al principio, el médico pensó que bastaría con una operación para corregirle eso y el labio leporino; pero después de llevarla a Australia, comprendieron que iba necesitar más de una intervención. Fijaron la fecha de la operación para cuando tuviera dos años, pero ha crecido tanto, que ya esta lista. De hecho, para que todo salga bien, tiene que ingresarla en menos de dos meses. Y como es de Romit, que no es australiana, hay que pagarle todos los gastos. Sesshomaru se fijo en cómo se movían sus cejas, admiro el artístico temblor de su voz. Para darse tiempo a sofocar la ira que lo consumía, se puso de pie y se acerco a la librería. Así levantado, desde esa posición de autoridad, se quedo mirando a la mujer que tenia adelante. No solía molestarse en poner en práctica aquellas técnicas intimidatorias; no lo necesitaba. Pero con esa mujer si se veía obligado a usar todos los matices de su voz, a expresarse con cada musculo de su cuerpo. Debía de reconocer que tenia agallas. Después de dos años sin cruzar palabra, se presentaba en su despacho tan tranquila, como si estuviese media docena de argumentos validos para reclamarle ese dinero, y aun no se había echado atrás. Claro que no había motivo para que una mujer así no tuviese confianza en sí misma. No era lo que se podría entender por guapa. Kat Higurashi, pues había recuperado su apellido de soltera, se había convertido en una mujer intrigante, fascinante, deseable, capaz de doblegar su voluntad y vencer su conciencia…claro que, pensó burlonamente al recordar los pocos instantes en que se habían tocado, Kat siempre había tenido ese poder sobre él. Debía de estar relacionado con aquellos ojos chocolates, tan misteriosos como seductores, con esa piel tan suave como la seda, esa boca de labios voluptuosos…¡ y eso sin referirse a nada más que su cara!, Su cuerpo lo invitaba a olvidar que, bajo aquel envoltorio sensual y delicado, se escondía una mujer que se había vendido a su mejor mentor a cambio de seguridad. A su rico mentor, se corrigió con despecho. Cuatro años después de casarse, había observado el ataúd de Hakudoshi sin derramar una sola lagrima, en claro contraste con la pena y el dolor que había demostrado en el entierro de su madre… ***************************************************************** bueno espero que les guste, me has costa demasiado traspasarlo asi con el brazo malo pero lo hecho con mucho estusiasmo y cariño para ustedes:o..tratare de poner lo mas pronto posible la continuacion..bueno si es que no me da tanta lata mi brazo T-T. aclaraciones, sugerencia, o/y preguntas , me pueden mandar un Mp, si asi lo desean.. bessos. sesshogriss.
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: Hola Sesshogriss! Acabo de terminar de leer tu Fic, la historia esta genial.. Pero se me hizo un poco de lio con las edades ^^ Kagome se casó a los 18..Sessh tenía 15 cuando fue a verla al hotel¿? Cuánto tiempo estuvo casada con Haku antes de que muriera¿? Cuándo fue la última vez que Sessh y Kag estuvieron juntos¿? Haha, eso nada más, te agradezco si me aclaras esas dudas ^^ Te felicito por tu fic, me encanta y espero lo continues pronto. Atte: Sessholove
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: hola !! de nuevo lo siento pero he tardado mucho en teclear el ff ya que como me disloque el hombro y tengo lastimada tambien la muñeca me cuesta trabajo escribir.pero aqui tarigo la continuacion... *°°°°°°°* - Necesito el dinero para ella- insistió Kat de pronto, al tiempo para hacerle frente-. No es para mí, Sesshomaru. ¡Y lo decía una mujer que jamás había sentido la menor inclinación hacia los niños! Con todo, deseaba creerla. Era una actriz tan buena que parecía estar siendo totalmente sincera. Por otra parte, lo enfurecía que usase a la niña de la fotografía en su propio provecho. - Siéntate, Kat- dijo Sesshomaru con calma- Y explícame que te une a esta niña. Después de un segundo de duda, Kat obedeció, se sentó de nuevo y alzo la barbilla y su naricita para decir, con una voz que lo hacía pensar en largas noches de sexo enloquecedor: - Me comprometí en cuidar de ella. El deseo amenazaba con hacerle perder el juicio. Enojado por la traicionera respuesta de su cuerpo, volvió detrás de la mesa para ocultarse. - ¿Por qué? - Nació el uno de noviembre del año pasado. - ¿Y?- Sesshomaru frunció el ceño. - Justo un año después de morir mi madre- añadió Kat, súbitamente pálida-. Estaba en Romit. Su madre murió en el parto. Yo… me hice cargo de ella. Era muy astuta eligiendo Romit como escenario de aquel drama inventado. Incapaz de detener la masacre, incapaz de ayudar a las víctimas, el mundo entero había visto en sus televisores la angustia de una salvaje guerra civil. Los rebeldes ya había sido derrotados y había un destacamento militar para garantizar la paz en el territorio, pero los habitantes de Romit seguían hallándose entre los pobres y desgraciados. - Entiendo. ¿Y qué agencia está detrás de esta adopción? - Ninguna. - ¡Vamos Kat! ¡hay que ser un idiota para tragarse una historia así! – exclamo Sesshomaru con desdén-. ¿Para que quieres el dinero en realidad? La luz de sus ojos se apago. Kat lo miro con frialdad e imprimió un tono duro, inflexible a su voz: - Sabía que no me creerías, así que he traído mi pasaporte y una carta de la monja que dirige la clínica donde están atendiendo a Rin. La hermana Kaede explica adonde ira a parar el dinero y porque lo necesito ahora. No sabia que, pero aquello si no se lo había esperado. Sesshomaru frunció el ceño mientras ella sacaba del bolso un sobre arrugado y su pasaporte. - Aquí están las fechas de cuando fui y Salí de Romit- dijo apuntando con un dedo una de las paginas. ¿Qué sentiría con aquellos dedos sobre su piel?, ¿Lo acariciarían con dulzura? Sesshomaru experimento una inflamable mezcla de deseo y culpa. Se forzó a fijarse en el pasaporte y se le helo la sangre. -¿Se puede saber que hacías en Romit en medio de una guerra civil? - Estaba trabajando en un Hospital… bueno, era una clínica privada mas bien. - ¿Por qué?- quiso saber Sesshomaru, con ojos clavados en los sellos de la aduana mientras recordaba las atrocidades que habían relatado los medios de comunicación. - Ya te lo he dicho: estaba trabajando- Repitió Kat, mirándolo como si se hubiera vuelto loco. -¿Tu?, ¿En un país de tercer mundo, en un hospital?-. Sesshomaru solto una risotada despectiva-. No me tomes el pelo, Kat. Esta se levanto como un resorte y le entrego el sobre. - Haz el favor de leer la carta- le ordeno prácticamente mientras el se ponía de pie también. - Estoy seguro de que dirá que es una monja de una clínica de aquella isla olvidada de la mano de Dios- afirmo el-. No es fácil de falsificar. Pero olvidas que estás hablando con migo, Kat. ¿Qué hacías en Romit? - Después de morir mi madre y haku, una amia me sugirió que fuera con ella a la isla… su padre trabajaba en una campamento de la ONU- Kat vacilo un segundo antes de continuar-. La clínica estaba pegada al campamento y tenía pocos medios. Cuando la lucha se extendió en el otro extremo de la isla, empezaron a llegar refugiados y el personal médico se vio desbordado, así que Penny y yo les echamos una mano. Cuando a su padre le encomendaron otro destino, este insistió en que Penny se fuese con el, pero yo me quede. - ¿Por qué?- pregunto Sesshomaru con voz ronca. Estaba tan hermosa allí quieta, de pie, apretando los puños enrabietada. Afuera, una nube había tapado el sol. Sesshomaru tuvo que reprimir el impulso de dar tres zancadas y estrecharla entre sus brazos. - No se- contesto por fin en voz baja-. Son tan… abnegados. No tenían nada de nada, pero se reían y eran amables entre si y conmigo. Los niños se habían encariñado conmigo. Y yo no tenia a nadie. Si que era buena actriz, si. Sesshomaru pensó que debía considerarse afortunada, pues su frágil constitución hacia que cualquier hombre quisiera protegerla. - ¿ No podrías escapar?- pregunto entonces, enojado por su debilidad-. La Kat Takeda a la que yo conocí habría salido huyendo ante el menor peligro. - Higurashi- corrigió ella con firmeza-. ¡ Me llamo Kagome Higurashi! Y tú no me conoces… nunca has sabido como soy. Te basto mirarme para echarme en cara todos tus prejuicios, sin la menor razón lógica alguna. - Alguna razón si que tenia- repuso Sesshomaru con sarcasmo-.¿O acaso vas a decirme que estabas apasionadamente enamorara de Haku cuando te casaste con él?.¿que no se te paso por la cabeza que con su dinero podrías atender a tu madre enferma y asegurarte tu futuro? - Te lo dije antes y te lo vuelvo a repetir ahora: ¡Estaba enamorada de el!- espeto con agresividad. - ¿Y como es posible si cada vez que me mirabas me deseabas… casi tanto como yo te deseaba a ti? - ¿Nunca has hecho una estupidez?-replicó Kat. - Si. Hace seis años mire a la prometida de la mejor amigo y la deseé sexualmente- contesto con crudeza. se quedo pálida. Hizo un gesto brusco, luego se obligo a bajar los brazos a los costados. Recobro la compostura. Por su parte, a pesar de todo, Sesshomaru quería creerla. Le estaba costando horrores controlar aquel deseo reprimido, su rabia… y una enervante ansia de protegerla. - Es una buena historia, Kat- dijo al cabo de unos segundos-. Y te has documentado bien. Pero me temo que no logro creerme ni una sola palabra… ni la fotografía. Pero, por pura cabezonería, Kat se mantuvo impertérrita.no podía rendirse, nunca se lo perdonaría… ni perdonaría a Sesshomaru que su desconfianza en ella impidiese que Rin se operara. - ¿Por qué no te molestas por lo menos en averiguar si te estoy diciendo la verdad?- le pregunto ella con suavidad mientras agarraba su bolso-. Puedes descontarme el dinero de la pensión del año que viene. - ¿Veinte mil dólares?¿De que vivirías? A no ser de que estés pensando en casarte con otro hombre rico- contesto Sesshomaru, enarcando una ceja-. Pero, como fideicomisario, te recuerdo que entonces tendrías que renunciar a cualquier reclamación futura sobre los bienes de Haku. - Estoy pensando en encontrar trabajo- masculló Kat mientras se daba la vuelta y echaba a andar hacia la puerta. Sin molestarse en mirar atrás, salió del despacho y siguió caminando con paso decidido. Al cruzarse con el ayudante personal, la saludo con educación. Esta la acompaño al ascensor, visiblemente sorprendida... *°°°°°°* bueno aqui les dejo ya que me esta dando mucha lata mi mano .. y antes de retirarme un comentario y aclrasion. SESSHOLOVE: gracias por leer mi ff y te aclarare tus dudas. 1° kagome cuando se caso tenia 18 años , pero ahora ella tiene 24 años. 2° sesshomaru tiene 31 años, y perdon pero fue error de teclado cuando lo estaba escribiendo , por eso te has confundido, preo fue mi error, SORRY! 3° el matrimonio de kagome y hakudoshi duro sei años antes de que muriera. 4° y cuando sessho y kago estubieron juntos fue el dia del funeral de hakudoshi. mas adelante ventra una parte de lo que paso." y gracias a ti me agrada tenerte en el ff. como desia tratare de escribir lo mas pronto posible si es que mi brazo me lo permite pondre pronto la proxima continuacion.
Re: ::::::::pasion despiadada:::::::: Hola, Mentiría si no dijera que si fuese Sesshoumaru, lehubiese propuesto que fuese mi concubina a cambio de la financiación para Rin; hubiera sido la manera perfecta de vengarse. El resentimiento es más que obvio. Me sorprendió que la amiga de Kagome tubiera un nombre gringo xD. En fin, aquí pasé a cumplir. Saludos, Jack Killer. P. D.: No comento más a fondo, por corto de tiempo. P. D.: Respecto a tu mano, revisa mi comentario en tu Profile xD.