El amor llega, ¡Cuando menos te lo esperas!.

Tema en 'Fanfics Abandonados de Naruto' iniciado por LobitaUchiha, 27 Abril 2009.

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    El amor llega, ¡Cuando menos te lo esperas!.
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    Re: El amor llega, ¡Cuando menos te lo esperas!.

    Capitulo 10: ¿Tú? No puedo creerlo.



    -Itachi, levántate- movía Mikoto el cuerpo de su hijo.

    -¿Ya es tarde?- frotando sus ojos y al mismo tiempo bostezando.

    -No, pero ya sabes que me gusta desayunar, comer y cenar en familia- Mikoto sonreía divertida pero con dulzura. Se levanto de la cama para dirigirse hacia la puerta.

    -Que madre tan loca tengo- susurraba en voz baja para que Mikoto no lo escuchara.

    -Ya te oí Itachi- Abriendo la puerta de la habitación en forma de amenaza. Causándole un tremendo susto a Itachi.

    -No cabe duda que con madres como esta, uno no se puede expresar libremente- parándose para meterse al baño y ducharse- Con mamás como estas, pronto terminare con un cardiólogo.

    Afuera de la habitación de Itachi, se encontraba Mikoto ya lista para poder despertar a su hijo menor. Por mas fríos que fueran no lo serian con ella, no señor claro que no. Ella es su madre y por lo tanto en casa nada de frialdad y deberán comportarse como una familia normal.
    Al entrar soltó una pequeña sonrisa al ver que Sasuke tampoco estaba despierto y verlo tan tranquilo durmiendo le dieron ganas de no despertarlo. Pero si ya había hecho la maldad con Itachi, entonces él tampoco seria la excepción.

    La habitación de Sasuke era casi igual a la de Itachi solo que a diferencia el color cambiaba. Esta era completamente azul al igual que las sabanas de la cama.

    -Sasuke... ya- siendo interrumpida por Sasuke.

    -Ya es tarde...- hablaba mas dormido que despierto.

    -No, claro que no pero ya...

    -¿Ya me tengo que levantar?- escapando de las manos de Mikoto, cubriendo su cara con la almohada más cercana que alcanzo.

    -Así es, tú sabes que me gusta...- quitando la almohada de su cara.

    -Si comer en familia, siempre me lo dices- haciendo caras de fastidio, ya sabia como era Mikoto.

    -Bueno, entonces te espero abajo- besando su mejilla- te...

    -Si ya sé que me quieres- interrumpiendo de nuevo a su madre.

    -Mikoto ya enojada le da un pequeño golpe en el hombro- niño grosero.

    Sasuke se río, le gustaba hacer enojar a Mikoto. No para mal, si no que era divertido y a diferencia de su padre Fugaku, Mikoto era más tratable.

    Ambos hermanos se toparon en las escaleras, ya con el uniforme puesto.
    Entraron al comedor, donde ya Mikoto tenía todo listo y Fugaku a un lado de ella. El comedor no era muy grande, era donde solían comer pero cuando llegaban mas visitas se cambiaban a uno mas grande.
    Simplemente este era familiar y muy acogedor.

    -Bien comencemos con el desayuno- habló Mikoto quien servia en los platos unas tostadas y en otro cereal.
    -Itachi, tengo un aviso para ti- Fugaku le daba un sorbo a su café

    -Dime, ¿De que se trata?- arqueando una ceja.

    -¿Recuerdas la platica que tuvimos la otra vez?- al ver la afirmación que le dio Itachi, continuó- El día de ahora habrá una cena, y justamente es para presentarlos y anunciar su compromiso. Como sabes vendra con su madre y quiero que los dos esten bien presentados- dirigiendo su mirada a ambos hijos- mas tu Itachi ¿Quedo claro?.

    -¿A que hora?- Por mas que lo ocultara, estaba nervioso. ¿Ya tan rápido la conocería?, eso era lo que se preguntaba y si que su padre era rápido.

    -En la noche, así que llega temprano y tu Sasuke también.

    -Claro papá, ¿Puede venir Naruto?- suplicándole, no quería estar solo y menos con lo que iba a pasar esa noche.

    -Si, después de todo es como de la familia. Pero que se comporte como un adolescente normal- No es que ese chico sea raro pero es muy hiperactivo- Pensó.

    Tan rápido la conocería, si que seria grave y mas porque no se imagina de quien se trata y mucho menos ella que para su gran sorpresa nadie le ha contado nada. Y siempre tiene que haber alguien y quien mejor que su propia madre, que dejo a un lado por primera vez sus compromisos para esa ocasión. De ahora en adelante Sakura tendría que ocupar mas su ‘valioso tiempo'.

    Sakura bajaba las escaleras mientras frotaba sus ojos, y al abrirlos completamente y observar a su madre esperándola abajo. Casi causa un accidente, del susto y alegría a la vez, se tropezó con uno de los escalones pero por desgracia solo sufrió una pequeña herida.

    -Hija ten mas cuidado- regañaba su mamá mientras corría a ayudarla.

    -Lo siento madre, pero que emoción que estés aquí. ¿Dime porque no estas en tu viaje? ¿Paso algo malo?- era extraño que ella estuviera ahí y estaba preocupada. Lo demostraba en sus ojos- ¿Salió algo mal?.

    Hubo un pequeño silencio, algo incomodo- Mira ven traje el desayuno y en el transcurso te voy contando ¿Sale?- desviando un poco las preguntas tan cuestionadotas de Sakura.

    Fueron sacando la comida de los pequeños paquetes en los que se encontraba. Por primera vez se sentía feliz. Que alegría ver que tu madre te de una sorpresa así -¿A que se debería? -Se preguntaba Sakura.

    -Sabes mi amor, hoy quiero que cuando salgas de la escuela. Nos vayamos de compras tú y yo- adentrándose un pequeño bocado de comida.

    -¿Hablas enserio?- reflejando un lindo brillo en sus ojos y pataleando como una niña pequeña. -Tenemos tan tiempo que no salimos juntas, será maravilloso.

    -Claro, deseo que estemos juntas por un rato. ¿Te parece?- Tomando una de las manos de Sakura.

    Y pensar que muy pronto te casaras y yo que no he sabido disfrutar de ti. Por eso estaré mas tiempo contigo estos meses que te quedan de soltera. Se oye raro esa palabra y mas porque eres aún una niña que quizás apenas vaya a tener su primer novio y por el contrario tendrás que casarte. Ahora mi prioridad serás tú y solo tú. Gracias a que los negocios salieron bien podré compartir muchos momentos contigo.
    Y pensar que hace algunos años eras una niña y solo espero que tu padre haya tenido razón. -Pensaba la señora Haruno soltando unas pequeñas lágrimas de nostalgia.

    -¿Ocurre algo malo?- acariciando su mejilla y secándole algunas de las lágrimas que habían hecho acto de presencia.

    -No es solo que...ya no eres una niña Sakura. Pero para mí siempre lo serás- Soltando unas cuantas lagrimas más.

    -Mama, no te preocupes, yo siempre seré tu pequeña- uniéndose a su madre en un lindo y tierno abrazo.

    Pasaron algunos minutos y ya era hora de alistarse. Al poco rato ya Sakura salio con su uniforme en orden y con su cabello suelto.
    Dispuesta a salir por la puerta fue detenida por su madre. La cuál le dijo que ella la llevaría al colegio, noticia que a Sakura le alegro demasiado.

    En el trayecto platicaban sobre los sucesos que la Señora Haruno paso cuando estaba fuera del país. Y por el contrario Sakura le contaba los horribles encuentros que la persona que en esos momentos mas odiaba.
    Si es que se podría decir que era odio.

    La increíble caída que había tenido días antes en los preparativos para la fiesta del colegio. Después el gran abandono que él le hizo en plena fiesta. Mas el cinismo que tubo con ella.
    Su mamá solo sonreía y a la vez se daba cuenta de lo mucho que no le ponía atención a Sakura. Sin duda tantos años perdidos. Las platicas que toda madre tiene con su hija, las experiencias, logros, los malos rato. De todo de eso se perdió.

    Llegaron y se despidieron con un lindo beso y un muy fuerte abrazo.

    Caminaba por los pasillos de la escuela muy sonriente y emanando felicidad. Nadie le arruinaría ese día y pensar que la noche anterior la paso muy mal.

    Al entrar al salón, salto de la emoción y dejo sus cosas rápido para darles un fuerte abrazo a las chicas.

    -¿Qué tienes? Te noto tan feliz- dijo Hinata.

    -Es que mi madre llego y se supone que le faltaba mucho para venir. Y no es todo se la pasara conmigo un muy buen tiempo, agarro vacaciones y las dedicara solamente a mí- respondía una muy feliz Sakura.

    -Me alegro mucho- abrazaba Karin.

    -Nosotras también- se juntaron todas.

    -¿Todos están listos para sus clases de educación física?, quiero que arda la llama de la juventud- hablaba su maestro de deportes Gai el cuál entraba al salón.
    Vistiendo una vestimenta deportiva de solamente un color y ese era el verde. Dejó sus cosas en el escritorio y comenzó a charlar con ellos y a escribir la rutina que ese día harían.

    -Si claro, como siempre será una tortura- se quejaba la rubia de ojos azules.

    -¡Claro que si Gai-sensei! La llama de la juventud arderá a flor de piel- Gritaba Lee, Gai era su mayor admiración.

    -Muy bien, todos afuera.

    -No quiero salir- Temari se arrastraba en el piso.

    -Vamos Temari-chan- jalaba Tenten.

    -Claro ¡Tu puedes!- animaba mas hinata.

    -Miren los chicos del equipo de fútbol están afuera platicando- señalaba Ino por la ventana.

    -¿Qué esperan? No se queden ahí paradas- Gritaba Temari desde la puerta del salón.

    Todas las chicas rieron al unísono- ¿Quién la entiende?-

    -Vamos Ino.

    -Si Sakura- apresurando el paso para no quedarse atrás.


    En otro salón un chico había salido de clases por culpa de su profesor Orochimaru el cual lo saco porque había contradicho una de sus teorías en la física. Si algo enojaba a Orochimaru era que un alumno lo contradijera y mas si éste tenia razón.

    Entro a una de las bodegas del colegio, no quería ver nadie y si lo encontraban afuera del salón tendría mas problemas de los que tubo con su profesor.
    Se adentro en la bodega y se recostó de uno de los extremos de una pequeña cama que al parecer era de la enfermería. Como era amigo ya del conserje pues le dio las llaves y como no quería luz, la dejo apagada. Así nadie sospecharía de que él estuviera adentro.

    Por otro lado Sakura para escaparse de la clase de Gai fue en busca de un lugar donde ocultarse. Camino un poco hasta que encontró una bodega que estaba abierta y al adentrarse y ver que estaba todo oscuro, cerro la puerta de inmediato al percatarse que unas personas se acercaban.

    -Debes cerrar bien las bodegas- Regaño la prefecta al conserje, al abrir una puerta y ver que estaba abierta. Sakura solo se mantuvo en silencio.

    -Claro señorita- el estaba nervioso, pues sabia quien estaba adentro mas no contaba que otra persona también estuviera allí.

    -Ya sabes que los alumnos hacen lo que sea para escaparse de sus clases- tomando una llave que ella tenia y cerrando la puerta. -Y no queremos problemas con la directora, eso seria grave.

    -Esta bien- caminando atrás de ella.

    Alejándose del lugar y dejando completamente solos y encerrados a dos personas que en su vida imaginaron estar en un mismo lugar a la vez y peor aún solos.

    -Genial y ahora me quedare aquí encerrada- estaba molesta por el encierro pero a la vez aliviada de no ser descubierta.

    -No estas sola ¿Sabias?- esa voz provenía de uno de los extremos del lugar. -Y eso te pasa por volarte las clases.

    Sakura de tanto miedo que le causo oír esa voz y más a oscuras. Prendió de inmediato la luz y al ver que alguien estaba ahí, dio un gran grito.

    -¡Cállate! Nos van a oír- regañaba el azabache.

    -Yo no tengo la culpa de que tu cara me asuste- se excusaba.

    -Y yo de tener que estar aquí contigo.

    -Hay no... ¡Ábranme!- tocaba la puerta como una loca desesperada.

    -Ya no creo que alguien te oiga- hablaba muy despreocupado.

    -¿Qué no ves que no quiero estar aquí sola y contigo?- gritaba histérica. -Es peor que estar en un cuarto lleno de tarántulas.

    -Hmp...aparte de torpe y molesta; histérica.

    -Genial ya sabía que no todo seria feliz ahora- tirándose en el suelo.

    Los dos se miraban, una con odio y el otro con indiferencia. El no quería decir que tenía las llaves porque quería ver que pasaría.
    Pasaron minutos, después una hora y ninguno cedía. No querían hablar, y a Sakura solo le quedaba resignarse. A él no le costaba nada con sacar las llaves y dárselas o simplemente abrirle la puerta. Pero no, le gustaba mas verla en ese estado y recostado a la vez.

    -Maldita sea y todavía faltan dos horas para el receso- se quejaba la pelirrosa.

    -Ya deja de quejarte- el azabache se ponía de pie frente a ella.

    -¡Tu no me das ordenes Itachi!- también parándose para quedar justo enfrente de el.

    -¿Y si yo quiero que?- se acercaba amenazadoramente contra Sakura, haciendo que esta retrocediera para quedar justo recargada a la pared.

    Estaba realmente sorprendida. Nunca había visto a Itachi en esa forma y el por otra parte también se sorprendía de él mismo. No quería hacer nada tonto, pero no podía detenerse.

    Ambos rostros estaban muy juntos y se podían oír sus respiraciones muy juntas, una de la otra.

    -Yo...yo- fue interrumpida por Itachi.

    Lentamente y solo dejándose llevar, se acerco poco a poco a los labios de la pelirrosa. No sabia exactamente lo que hacia, solo quería probar esos lindos y carnosos labios que le pedían a gritos ser besados.
    Sakura muy nerviosa al ver lo que Itachi estaba apunto de hacer, nació sobre ella esa sensación tan linda que toda mujer siente antes de dar su primer beso.

    El rozó sus labios, causándole un escalofrió. Y poco a poco posó sus labios en los de ella brindándole un torpe pero tierno beso. Al estar besándola se dio cuenta de que ha sido el primero en besarla, no porque besara mal si no por su nerviosismo.

    Ella dejándose llevar por el calido beso que él le proporcionaba. Rodeo con sus brazos el cuello de Itachi y con una de sus manos revolvió su cabello y con la otra su espalda.
    Itachi no se quedaba atrás la sujetaba cada vez mas atrayéndola hacia él, como si no la quisiera dejar ir.

    Bien dice el dicho ‘'Todo lo bueno tiene que terminar''. Y así fue se separaron por falta de aire y al cruzar sus ojos se mantenía una llama que pocas veces se ve en dos personas que se aman de verdad.

    -Lo siento, yo...yo no debí de hacerlo- separándose de Sakura, dando unos cuantos pasos hacia atrás.

    -¿Por qué juegas conmigo?, ¿No te basto con votarme en la fiesta?- dejando unas pequeñas lagrimas por su rostro caer.

    -...- no respondía, si ya de por si se sentía culpable por lo que había hecho. Todo su plan de no enamorarse se estaba cayendo.

    -Sabes y para la otra dime que tú tienes las llaves- observando que el pelinegro traía las llaves colgando por su bolso del pantalón, las agarro y abrió la puerta para luego tirar las llaves y salir corriendo.

    -¡Maldita sea! ¿Por qué no me pude contener?- dándole un fuerte golpe con su puño a la pared.

    En un salón se podía ver la figura de una mujer llorando, sin consuelo y sin razón. Desdichada y con un gran dolor.
    Todos ya habían salido menos ella y lo único que quería es estar sola. Burlarse de ella otra vez, nada podía ser más peor.

    En otro lugar, para ser más precisos en uno de los pasillos del colegio donde se encontraban los estantes. Caminaban un pelinegro y un rubio.

    -¿Vendrías ahora a mí casa?

    -¡Claro Sasuke! ¿Pero para que?- observaba detenidamente el rubio hiperactivo al azabache.

    -Ahora presentaran a la prometida de Itachi- Sin voltear a verlo.

    -¡OH! Itachi se nos casa- soltando una lagrima- ya es grande.

    -Apúrate dobe- golpeando su espalda.

    Pov Sakura.

    Creo que todavía no me siento muy bien, no le he contado a nadie lo sucedido y no pienso hacerlo. Fingí muy bien con mis amigas pero el único consuelo que me queda es que las clases ya terminaron y podré tener la tarde libre con mi mamá. Eso me distraerá y no pensare en lo sucedido en la bodega. O mejor dicho en todo lo malo que me ha ocurrido en todos estos días.
    Para mal o para bien creo que mi primer beso fue muy inesperado, quizás no lo que yo siempre esperé pero tampoco me desagrado.

    Afuera mi madre esperaba por mí. Corrí hacia ella y le di un abrazo y después nos subimos a su auto. Me explico que iríamos a comprar un vestido muy especial que tendría que ser usado esta misma noche y eso no lo tengo que decir verdad porque obvio que estoy sorprendida.

    Así fue nos adentramos a una tienda con muchos lindos vestidos, pero solo uno llamo mi atención.
    Era de color negro, la parte del busto como en forma de corazón y por la parte del estomago tenían como holanes cruzados en forma diagonal y de abajo casi igual pero ya mas separados. Llegaba un poco mas arriba de las rodillas y sin dudarlo le pedí a la muchacha de la tienda que si me lo podía medir.

    Ya con el vestido puesto Salí para recibir la aprobación de mi madre.
    Y me sorprendió porque me miro como nunca antes y aunque no dijera mucho por la impresión me agrado que me dijera ‘'Te ves hermosa''
    Sin pensarlo dos veces lo compramos y al salir me llevo a comer algo.

    -¿Te acuerdas que te tenia que contar algo?

    -¿Si que me vas a decir?- la curiosidad me mataba.

    -Bien, cuando tu padre murió me hizo jurar que debería cumplir una promesa- agachando un poco su cabeza- Esa promesa consistía en que tu Sakura deberías de casarte con la persona que tu padre escogió para ti.

    -¿Casarme? Madre pero eso debo de decidirlo yo ¿No?- cruce mis brazos.

    -Si, bueno ahora iremos a conocer a tu prometido y es por eso lo del vestido.

    Genial ahora me pasa esto. Ya que así fue la voluntad de papá y debo cumplirla por más que no quiera.

    -Bien, vamos a casa que tenemos que arreglarnos- tomando mi mano para irnos.

    A tan corta edad me tenía que casar y eso era tan frustrante para mi que no se si lo aguantaría o que tal si no es alguien de bien o ¿Si es amargado? OH peor aun que jamás pueda llegar a amarlo o sentir tan siquiera algo mínimo por ¿el? ¿Por qué todo en mi vida es complicado? . En fin, ya me duche y ahora a alistarme que hay que llegar puntuales.

    En ese mismo instante mi madre toco la puerta y según ella me ayudaría. Alasió mi cabello y sobre el me coloco un broche color negro con plateado y me presto uno de sus zapatos los cuales eran altos y de color negro. Una gran experiencia fue cuando me comenzó a maquillar y para mi sorpresa estaba quedando muy linda. Delineando mis ojos de negro y esto hacia que resaltaran mas y mas. Un labial muy suave en mis labios sabor a cerezos.

    Después me miro de nuevo y me regalo un collar de ella plateado que mi papá le había regalado el día de su compromiso. Me mire en el espejo para observar como había quedado y para mi sorpresa no me reconocía. Sin duda la ayuda de una madre es necesaria.

    Pov Itachi.

    ¿Por qué estoy nervioso? No enriendo y además ¿Por qué tengo que usar este traje?. Pronto llegara mi ‘'Prometida'' ¿Cómo será?,

    -¿Nervios hermano?- Me preguntaba Sasuke cuando entraba por la puerta con Naruto.

    -Eso crees pero no- respondí seguro aunque no fuera así.

    -Si yo fuera tu pediría que fuera muy hermosa, asi como mi Hinata-chan- Naruto parecía babear cada vez que nombraba a Hinata.

    -Por cierto ¿Todavía no es tu novia?- me parándome enfrente de el.

    -El muy tonto no le ha dicho nada- interrumpió Sasuke justo cuando Naruto iba a hablar.

    -¡Chicos ya deben bajar, no tardan en llegar nuestros invitados!- Grito mi madre desde la sala.

    Bajamos yo con las ganas de subir los escalones en lugar de bajarlos. Todos se acomodaron en los sillones y a mí me dejaron uno para mi solito, donde se supone que se sentaría mi prometida conmigo.

    Sonó el timbre y sentí un escalofrió correr por todo mi cuerpo, gire mi cabeza hacia la puerta. La que se paro a recibirlos fue mi madre.

    -Buenas noches- saludo cordialmente una señora y una muchacha pero no identifique muy bien la voz.

    -Pases están es su casa- retrocediendo para dejar pasar a las invitadas.

    Para mi sorpresa por esa puerta apareció la mujer que nunca imagine que estaría en ese lugar. No lo podía creer. Me impresiono verla aquí en mi casa y con esa vestimenta que la hacia lucir muy linda. Parecía toda una princesa pero... no puede ser ¿ella es mi prometida?.

    -¿Tú?- fue lo único que ambos dijimos al vernos frente a frente.

    -No puedo creerlo- Cubriendo su boca con una de sus manos.

    Continuara.

    Notas finales del capítulo:
    Espero que les haya gustado y no me queda mas que decirles que me esforze mucho en el capi y bueno vendran muchos mas momentos como este y claro de aqui en adelante se comenzaran a revelar ya algunos secretos i otros q no se saben jeje soi mala

    en fin alguna duda, critica, recomendacion
    haganmela saber..!!
    muchas gracias a los que leen y dejen reviews..!!


     
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    LobitaUchiha

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    Re: El amor llega, ¡Cuando menos te lo esperas!.

    Capitulo 10: ¿Tú? No puedo creerlo.



    -Itachi, levántate- movía Mikoto el cuerpo de su hijo.

    -¿Ya es tarde?- frotando sus ojos y al mismo tiempo bostezando.

    -No, pero ya sabes que me gusta desayunar, comer y cenar en familia- Mikoto sonreía divertida pero con dulzura. Se levanto de la cama para dirigirse hacia la puerta.

    -Que madre tan loca tengo- susurraba en voz baja para que Mikoto no lo escuchara.

    -Ya te oí Itachi- Abriendo la puerta de la habitación en forma de amenaza. Causándole un tremendo susto a Itachi.

    -No cabe duda que con madres como esta, uno no se puede expresar libremente- parándose para meterse al baño y ducharse- Con mamás como estas, pronto terminare con un cardiólogo.

    Afuera de la habitación de Itachi, se encontraba Mikoto ya lista para poder despertar a su hijo menor. Por mas fríos que fueran no lo serian con ella, no señor claro que no. Ella es su madre y por lo tanto en casa nada de frialdad y deberán comportarse como una familia normal.
    Al entrar soltó una pequeña sonrisa al ver que Sasuke tampoco estaba despierto y verlo tan tranquilo durmiendo le dieron ganas de no despertarlo. Pero si ya había hecho la maldad con Itachi, entonces él tampoco seria la excepción.

    La habitación de Sasuke era casi igual a la de Itachi solo que a diferencia el color cambiaba. Esta era completamente azul al igual que las sabanas de la cama.

    -Sasuke... ya- siendo interrumpida por Sasuke.

    -Ya es tarde...- hablaba mas dormido que despierto.

    -No, claro que no pero ya...

    -¿Ya me tengo que levantar?- escapando de las manos de Mikoto, cubriendo su cara con la almohada más cercana que alcanzo.

    -Así es, tú sabes que me gusta...- quitando la almohada de su cara.

    -Si comer en familia, siempre me lo dices- haciendo caras de fastidio, ya sabia como era Mikoto.

    -Bueno, entonces te espero abajo- besando su mejilla- te...

    -Si ya sé que me quieres- interrumpiendo de nuevo a su madre.

    -Mikoto ya enojada le da un pequeño golpe en el hombro- niño grosero.

    Sasuke se río, le gustaba hacer enojar a Mikoto. No para mal, si no que era divertido y a diferencia de su padre Fugaku, Mikoto era más tratable.

    Ambos hermanos se toparon en las escaleras, ya con el uniforme puesto.
    Entraron al comedor, donde ya Mikoto tenía todo listo y Fugaku a un lado de ella. El comedor no era muy grande, era donde solían comer pero cuando llegaban mas visitas se cambiaban a uno mas grande.
    Simplemente este era familiar y muy acogedor.

    -Bien comencemos con el desayuno- habló Mikoto quien servia en los platos unas tostadas y en otro cereal.
    -Itachi, tengo un aviso para ti- Fugaku le daba un sorbo a su café

    -Dime, ¿De que se trata?- arqueando una ceja.

    -¿Recuerdas la platica que tuvimos la otra vez?- al ver la afirmación que le dio Itachi, continuó- El día de ahora habrá una cena, y justamente es para presentarlos y anunciar su compromiso. Como sabes vendra con su madre y quiero que los dos esten bien presentados- dirigiendo su mirada a ambos hijos- mas tu Itachi ¿Quedo claro?.

    -¿A que hora?- Por mas que lo ocultara, estaba nervioso. ¿Ya tan rápido la conocería?, eso era lo que se preguntaba y si que su padre era rápido.

    -En la noche, así que llega temprano y tu Sasuke también.

    -Claro papá, ¿Puede venir Naruto?- suplicándole, no quería estar solo y menos con lo que iba a pasar esa noche.

    -Si, después de todo es como de la familia. Pero que se comporte como un adolescente normal- No es que ese chico sea raro pero es muy hiperactivo- Pensó.

    Tan rápido la conocería, si que seria grave y mas porque no se imagina de quien se trata y mucho menos ella que para su gran sorpresa nadie le ha contado nada. Y siempre tiene que haber alguien y quien mejor que su propia madre, que dejo a un lado por primera vez sus compromisos para esa ocasión. De ahora en adelante Sakura tendría que ocupar mas su ‘valioso tiempo'.

    Sakura bajaba las escaleras mientras frotaba sus ojos, y al abrirlos completamente y observar a su madre esperándola abajo. Casi causa un accidente, del susto y alegría a la vez, se tropezó con uno de los escalones pero por desgracia solo sufrió una pequeña herida.

    -Hija ten mas cuidado- regañaba su mamá mientras corría a ayudarla.

    -Lo siento madre, pero que emoción que estés aquí. ¿Dime porque no estas en tu viaje? ¿Paso algo malo?- era extraño que ella estuviera ahí y estaba preocupada. Lo demostraba en sus ojos- ¿Salió algo mal?.

    Hubo un pequeño silencio, algo incomodo- Mira ven traje el desayuno y en el transcurso te voy contando ¿Sale?- desviando un poco las preguntas tan cuestionadotas de Sakura.

    Fueron sacando la comida de los pequeños paquetes en los que se encontraba. Por primera vez se sentía feliz. Que alegría ver que tu madre te de una sorpresa así -¿A que se debería? -Se preguntaba Sakura.

    -Sabes mi amor, hoy quiero que cuando salgas de la escuela. Nos vayamos de compras tú y yo- adentrándose un pequeño bocado de comida.

    -¿Hablas enserio?- reflejando un lindo brillo en sus ojos y pataleando como una niña pequeña. -Tenemos tan tiempo que no salimos juntas, será maravilloso.

    -Claro, deseo que estemos juntas por un rato. ¿Te parece?- Tomando una de las manos de Sakura.

    Y pensar que muy pronto te casaras y yo que no he sabido disfrutar de ti. Por eso estaré mas tiempo contigo estos meses que te quedan de soltera. Se oye raro esa palabra y mas porque eres aún una niña que quizás apenas vaya a tener su primer novio y por el contrario tendrás que casarte. Ahora mi prioridad serás tú y solo tú. Gracias a que los negocios salieron bien podré compartir muchos momentos contigo.
    Y pensar que hace algunos años eras una niña y solo espero que tu padre haya tenido razón. -Pensaba la señora Haruno soltando unas pequeñas lágrimas de nostalgia.

    -¿Ocurre algo malo?- acariciando su mejilla y secándole algunas de las lágrimas que habían hecho acto de presencia.

    -No es solo que...ya no eres una niña Sakura. Pero para mí siempre lo serás- Soltando unas cuantas lagrimas más.

    -Mama, no te preocupes, yo siempre seré tu pequeña- uniéndose a su madre en un lindo y tierno abrazo.

    Pasaron algunos minutos y ya era hora de alistarse. Al poco rato ya Sakura salio con su uniforme en orden y con su cabello suelto.
    Dispuesta a salir por la puerta fue detenida por su madre. La cuál le dijo que ella la llevaría al colegio, noticia que a Sakura le alegro demasiado.

    En el trayecto platicaban sobre los sucesos que la Señora Haruno paso cuando estaba fuera del país. Y por el contrario Sakura le contaba los horribles encuentros que la persona que en esos momentos mas odiaba.
    Si es que se podría decir que era odio.

    La increíble caída que había tenido días antes en los preparativos para la fiesta del colegio. Después el gran abandono que él le hizo en plena fiesta. Mas el cinismo que tubo con ella.
    Su mamá solo sonreía y a la vez se daba cuenta de lo mucho que no le ponía atención a Sakura. Sin duda tantos años perdidos. Las platicas que toda madre tiene con su hija, las experiencias, logros, los malos rato. De todo de eso se perdió.

    Llegaron y se despidieron con un lindo beso y un muy fuerte abrazo.

    Caminaba por los pasillos de la escuela muy sonriente y emanando felicidad. Nadie le arruinaría ese día y pensar que la noche anterior la paso muy mal.

    Al entrar al salón, salto de la emoción y dejo sus cosas rápido para darles un fuerte abrazo a las chicas.

    -¿Qué tienes? Te noto tan feliz- dijo Hinata.

    -Es que mi madre llego y se supone que le faltaba mucho para venir. Y no es todo se la pasara conmigo un muy buen tiempo, agarro vacaciones y las dedicara solamente a mí- respondía una muy feliz Sakura.

    -Me alegro mucho- abrazaba Karin.

    -Nosotras también- se juntaron todas.

    -¿Todos están listos para sus clases de educación física?, quiero que arda la llama de la juventud- hablaba su maestro de deportes Gai el cuál entraba al salón.
    Vistiendo una vestimenta deportiva de solamente un color y ese era el verde. Dejó sus cosas en el escritorio y comenzó a charlar con ellos y a escribir la rutina que ese día harían.

    -Si claro, como siempre será una tortura- se quejaba la rubia de ojos azules.

    -¡Claro que si Gai-sensei! La llama de la juventud arderá a flor de piel- Gritaba Lee, Gai era su mayor admiración.

    -Muy bien, todos afuera.

    -No quiero salir- Temari se arrastraba en el piso.

    -Vamos Temari-chan- jalaba Tenten.

    -Claro ¡Tu puedes!- animaba mas hinata.

    -Miren los chicos del equipo de fútbol están afuera platicando- señalaba Ino por la ventana.

    -¿Qué esperan? No se queden ahí paradas- Gritaba Temari desde la puerta del salón.

    Todas las chicas rieron al unísono- ¿Quién la entiende?-

    -Vamos Ino.

    -Si Sakura- apresurando el paso para no quedarse atrás.


    En otro salón un chico había salido de clases por culpa de su profesor Orochimaru el cual lo saco porque había contradicho una de sus teorías en la física. Si algo enojaba a Orochimaru era que un alumno lo contradijera y mas si éste tenia razón.

    Entro a una de las bodegas del colegio, no quería ver nadie y si lo encontraban afuera del salón tendría mas problemas de los que tubo con su profesor.
    Se adentro en la bodega y se recostó de uno de los extremos de una pequeña cama que al parecer era de la enfermería. Como era amigo ya del conserje pues le dio las llaves y como no quería luz, la dejo apagada. Así nadie sospecharía de que él estuviera adentro.

    Por otro lado Sakura para escaparse de la clase de Gai fue en busca de un lugar donde ocultarse. Camino un poco hasta que encontró una bodega que estaba abierta y al adentrarse y ver que estaba todo oscuro, cerro la puerta de inmediato al percatarse que unas personas se acercaban.

    -Debes cerrar bien las bodegas- Regaño la prefecta al conserje, al abrir una puerta y ver que estaba abierta. Sakura solo se mantuvo en silencio.

    -Claro señorita- el estaba nervioso, pues sabia quien estaba adentro mas no contaba que otra persona también estuviera allí.

    -Ya sabes que los alumnos hacen lo que sea para escaparse de sus clases- tomando una llave que ella tenia y cerrando la puerta. -Y no queremos problemas con la directora, eso seria grave.

    -Esta bien- caminando atrás de ella.

    Alejándose del lugar y dejando completamente solos y encerrados a dos personas que en su vida imaginaron estar en un mismo lugar a la vez y peor aún solos.

    -Genial y ahora me quedare aquí encerrada- estaba molesta por el encierro pero a la vez aliviada de no ser descubierta.

    -No estas sola ¿Sabias?- esa voz provenía de uno de los extremos del lugar. -Y eso te pasa por volarte las clases.

    Sakura de tanto miedo que le causo oír esa voz y más a oscuras. Prendió de inmediato la luz y al ver que alguien estaba ahí, dio un gran grito.

    -¡Cállate! Nos van a oír- regañaba el azabache.

    -Yo no tengo la culpa de que tu cara me asuste- se excusaba.

    -Y yo de tener que estar aquí contigo.

    -Hay no... ¡Ábranme!- tocaba la puerta como una loca desesperada.

    -Ya no creo que alguien te oiga- hablaba muy despreocupado.

    -¿Qué no ves que no quiero estar aquí sola y contigo?- gritaba histérica. -Es peor que estar en un cuarto lleno de tarántulas.

    -Hmp...aparte de torpe y molesta; histérica.

    -Genial ya sabía que no todo seria feliz ahora- tirándose en el suelo.

    Los dos se miraban, una con odio y el otro con indiferencia. El no quería decir que tenía las llaves porque quería ver que pasaría.
    Pasaron minutos, después una hora y ninguno cedía. No querían hablar, y a Sakura solo le quedaba resignarse. A él no le costaba nada con sacar las llaves y dárselas o simplemente abrirle la puerta. Pero no, le gustaba mas verla en ese estado y recostado a la vez.

    -Maldita sea y todavía faltan dos horas para el receso- se quejaba la pelirrosa.

    -Ya deja de quejarte- el azabache se ponía de pie frente a ella.

    -¡Tu no me das ordenes Itachi!- también parándose para quedar justo enfrente de el.

    -¿Y si yo quiero que?- se acercaba amenazadoramente contra Sakura, haciendo que esta retrocediera para quedar justo recargada a la pared.

    Estaba realmente sorprendida. Nunca había visto a Itachi en esa forma y el por otra parte también se sorprendía de él mismo. No quería hacer nada tonto, pero no podía detenerse.

    Ambos rostros estaban muy juntos y se podían oír sus respiraciones muy juntas, una de la otra.

    -Yo...yo- fue interrumpida por Itachi.

    Lentamente y solo dejándose llevar, se acerco poco a poco a los labios de la pelirrosa. No sabia exactamente lo que hacia, solo quería probar esos lindos y carnosos labios que le pedían a gritos ser besados.
    Sakura muy nerviosa al ver lo que Itachi estaba apunto de hacer, nació sobre ella esa sensación tan linda que toda mujer siente antes de dar su primer beso.

    El rozó sus labios, causándole un escalofrió. Y poco a poco posó sus labios en los de ella brindándole un torpe pero tierno beso. Al estar besándola se dio cuenta de que ha sido el primero en besarla, no porque besara mal si no por su nerviosismo.

    Ella dejándose llevar por el calido beso que él le proporcionaba. Rodeo con sus brazos el cuello de Itachi y con una de sus manos revolvió su cabello y con la otra su espalda.
    Itachi no se quedaba atrás la sujetaba cada vez mas atrayéndola hacia él, como si no la quisiera dejar ir.

    Bien dice el dicho ‘'Todo lo bueno tiene que terminar''. Y así fue se separaron por falta de aire y al cruzar sus ojos se mantenía una llama que pocas veces se ve en dos personas que se aman de verdad.

    -Lo siento, yo...yo no debí de hacerlo- separándose de Sakura, dando unos cuantos pasos hacia atrás.

    -¿Por qué juegas conmigo?, ¿No te basto con votarme en la fiesta?- dejando unas pequeñas lagrimas por su rostro caer.

    -...- no respondía, si ya de por si se sentía culpable por lo que había hecho. Todo su plan de no enamorarse se estaba cayendo.

    -Sabes y para la otra dime que tú tienes las llaves- observando que el pelinegro traía las llaves colgando por su bolso del pantalón, las agarro y abrió la puerta para luego tirar las llaves y salir corriendo.

    -¡Maldita sea! ¿Por qué no me pude contener?- dándole un fuerte golpe con su puño a la pared.

    En un salón se podía ver la figura de una mujer llorando, sin consuelo y sin razón. Desdichada y con un gran dolor.
    Todos ya habían salido menos ella y lo único que quería es estar sola. Burlarse de ella otra vez, nada podía ser más peor.

    En otro lugar, para ser más precisos en uno de los pasillos del colegio donde se encontraban los estantes. Caminaban un pelinegro y un rubio.

    -¿Vendrías ahora a mí casa?

    -¡Claro Sasuke! ¿Pero para que?- observaba detenidamente el rubio hiperactivo al azabache.

    -Ahora presentaran a la prometida de Itachi- Sin voltear a verlo.

    -¡OH! Itachi se nos casa- soltando una lagrima- ya es grande.

    -Apúrate dobe- golpeando su espalda.

    Pov Sakura.

    Creo que todavía no me siento muy bien, no le he contado a nadie lo sucedido y no pienso hacerlo. Fingí muy bien con mis amigas pero el único consuelo que me queda es que las clases ya terminaron y podré tener la tarde libre con mi mamá. Eso me distraerá y no pensare en lo sucedido en la bodega. O mejor dicho en todo lo malo que me ha ocurrido en todos estos días.
    Para mal o para bien creo que mi primer beso fue muy inesperado, quizás no lo que yo siempre esperé pero tampoco me desagrado.

    Afuera mi madre esperaba por mí. Corrí hacia ella y le di un abrazo y después nos subimos a su auto. Me explico que iríamos a comprar un vestido muy especial que tendría que ser usado esta misma noche y eso no lo tengo que decir verdad porque obvio que estoy sorprendida.

    Así fue nos adentramos a una tienda con muchos lindos vestidos, pero solo uno llamo mi atención.
    Era de color negro, la parte del busto como en forma de corazón y por la parte del estomago tenían como holanes cruzados en forma diagonal y de abajo casi igual pero ya mas separados. Llegaba un poco mas arriba de las rodillas y sin dudarlo le pedí a la muchacha de la tienda que si me lo podía medir.

    Ya con el vestido puesto Salí para recibir la aprobación de mi madre.
    Y me sorprendió porque me miro como nunca antes y aunque no dijera mucho por la impresión me agrado que me dijera ‘'Te ves hermosa''
    Sin pensarlo dos veces lo compramos y al salir me llevo a comer algo.

    -¿Te acuerdas que te tenia que contar algo?

    -¿Si que me vas a decir?- la curiosidad me mataba.

    -Bien, cuando tu padre murió me hizo jurar que debería cumplir una promesa- agachando un poco su cabeza- Esa promesa consistía en que tu Sakura deberías de casarte con la persona que tu padre escogió para ti.

    -¿Casarme? Madre pero eso debo de decidirlo yo ¿No?- cruce mis brazos.

    -Si, bueno ahora iremos a conocer a tu prometido y es por eso lo del vestido.

    Genial ahora me pasa esto. Ya que así fue la voluntad de papá y debo cumplirla por más que no quiera.

    -Bien, vamos a casa que tenemos que arreglarnos- tomando mi mano para irnos.

    A tan corta edad me tenía que casar y eso era tan frustrante para mi que no se si lo aguantaría o que tal si no es alguien de bien o ¿Si es amargado? OH peor aun que jamás pueda llegar a amarlo o sentir tan siquiera algo mínimo por ¿el? ¿Por qué todo en mi vida es complicado? . En fin, ya me duche y ahora a alistarme que hay que llegar puntuales.

    En ese mismo instante mi madre toco la puerta y según ella me ayudaría. Alasió mi cabello y sobre el me coloco un broche color negro con plateado y me presto uno de sus zapatos los cuales eran altos y de color negro. Una gran experiencia fue cuando me comenzó a maquillar y para mi sorpresa estaba quedando muy linda. Delineando mis ojos de negro y esto hacia que resaltaran mas y mas. Un labial muy suave en mis labios sabor a cerezos.

    Después me miro de nuevo y me regalo un collar de ella plateado que mi papá le había regalado el día de su compromiso. Me mire en el espejo para observar como había quedado y para mi sorpresa no me reconocía. Sin duda la ayuda de una madre es necesaria.

    Pov Itachi.

    ¿Por qué estoy nervioso? No enriendo y además ¿Por qué tengo que usar este traje?. Pronto llegara mi ‘'Prometida'' ¿Cómo será?,

    -¿Nervios hermano?- Me preguntaba Sasuke cuando entraba por la puerta con Naruto.

    -Eso crees pero no- respondí seguro aunque no fuera así.

    -Si yo fuera tu pediría que fuera muy hermosa, asi como mi Hinata-chan- Naruto parecía babear cada vez que nombraba a Hinata.

    -Por cierto ¿Todavía no es tu novia?- me parándome enfrente de el.

    -El muy tonto no le ha dicho nada- interrumpió Sasuke justo cuando Naruto iba a hablar.

    -¡Chicos ya deben bajar, no tardan en llegar nuestros invitados!- Grito mi madre desde la sala.

    Bajamos yo con las ganas de subir los escalones en lugar de bajarlos. Todos se acomodaron en los sillones y a mí me dejaron uno para mi solito, donde se supone que se sentaría mi prometida conmigo.

    Sonó el timbre y sentí un escalofrió correr por todo mi cuerpo, gire mi cabeza hacia la puerta. La que se paro a recibirlos fue mi madre.

    -Buenas noches- saludo cordialmente una señora y una muchacha pero no identifique muy bien la voz.

    -Pases están es su casa- retrocediendo para dejar pasar a las invitadas.

    Para mi sorpresa por esa puerta apareció la mujer que nunca imagine que estaría en ese lugar. No lo podía creer. Me impresiono verla aquí en mi casa y con esa vestimenta que la hacia lucir muy linda. Parecía toda una princesa pero... no puede ser ¿ella es mi prometida?.

    -¿Tú?- fue lo único que ambos dijimos al vernos frente a frente.

    -No puedo creerlo- Cubriendo su boca con una de sus manos.

    Continuara.

    Notas finales del capítulo:
    Espero que les haya gustado y no me queda mas que decirles que me esforze mucho en el capi y bueno vendran muchos mas momentos como este y claro de aqui en adelante se comenzaran a revelar ya algunos secretos i otros q no se saben jeje soi mala

    en fin alguna duda, critica, recomendacion
    haganmela saber..!!
    muchas gracias a los que leen y dejen reviews..!!


     
  3.  
    luna uchiha

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    Re: El amor llega, ¡Cuando menos te lo esperas!.

    aaaah!!! ya se vieron!!! jaja, me muero x saber como seran de novios... si Sakura no lo soporta xD!!

    espero que las cosas entre ellos se arreglen, o aunquesea mejoren...

    espero el proximo cap!!!
     
  4.  
    LobitaUchiha

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    Re: El amor llega, ¡Cuando menos te lo esperas!.

    Bueno lamento la tardanza... trate de hacer lo mejor que pude, se que hay Ooc en algunos personajes pero espero que si este justificado bueno al parecer de ustedes jeje ya que aveces es dificil escribir sobre ellos, pero es un gran reto jeje. Aunque debo de admitir que muchas de las veces pienso en los dialogos que podria decir Itachi y mi mente se pone en blanco xD.
    bueno espero que les guste y acepto todo tipos de comentarios.

    A y Muchas gracias a PAMI por re-abrirlo.

    Capitulo 11: Comencemos de nuevo...el pasado hay que dejarlo atrás.

    Una intensa corriente eléctrica se hizo presente en mi cuerpo. No sabía cómo reaccionar, si bien o mal, o simplemente que hacer. Mi mamá pasó a Sakura y a su madre, aquélla señora me miraba de manera muy extraña. Sus ojos reflejaban esperanza, pero ¿desde cuándo me volví tan observador? Un momento este no soy yo… ¿porque estoy cambiando? Tengo que controlar mejor mis emociones y al fin y al cabo yo soy Itachi Uchiha.

    Las miradas de ambas madres se cruzaron, tal reacción por parte de ambos no fue muy buena pero tampoco algo mala. Lo que nadie aquí más que Fugaku sabía, era que estas dos señoras traían un plan entre manos para que todo marchara a la perfección.

    Mikoto las hizo pasar y los primeros en saludar a las recién llegadas fueron: Naruto, Fugaku e Sasuke. Este ultimo al ver que la prometida de su hermano era ella, casi se desmayaba -El mundo es tan pequeño- pensó en ese momento, quién lo diría la persona menos imaginada seria la causa de ese compromiso.

    -Si que esto no está bien. Está bien estoy comprometida pero ellos no saben que yo sé; o al menos eso creen. Pero… ahora la pregunta del millón ¿Con que hermano estoy comprometida? No es justo ambos son fríos, insensibles y calculadores. ¡Que suerte tengo! Sé que exagero, pero y si estoy comprometida con Sasuke todo es un desastre, pero si es con Itachi…- recuerdo momentáneo sobre aquel beso- estoy perdida, no sé qué pensar y mucho menos que decir enfrente de ellos. Lo mejor será tomar todo con calma y dejar que todo pase, dejare las cosas en las manos de mi madre y solo espero tener esa paciencia para poder llevar bien esta situación.

    Ya una vez sentados en la sala de modo del que se había planeado. Se dio inicio a una conversación quizás un tanto torpe por decir así, ambas madres no sabían sacar un tema preciso o quizás algo interesante con el que se diera inicio a tan tramado plan.

    -Y esta linda muchachita ¿Cuántos años tiene?- Preguntó Fugaku quien fue el primero en tratar de romper el hielo.

    - Tengo 15 años señor- respondió con asombro.

    - No me llames señor, me siento un poco viejo- sonrió.

    ¿Mi papá esta sonriendo? Dios esto sí que es de creer, ¿desde cuándo mi papá sonríe y habla tan al natural? Al menos de que…. Si mi madre lo ha de haber amenazado –haciendo algunas muecas.

    Mikoto siempre respetaba las decisiones de Fugaku, en cualquier situación. Pero cuando ella se proponía algo Fugaku también la respetaba y la apoyaba….aunque muy a la fuerza.

    -Sasuke ¡quita esa cara!- ordenó Mikoto.

    -Hmp- asintiendo.

    -Bueno creo que llegaron justo a tiempo, pasemos al comedor- Volvió a hablar Mikoto, ya que la situación se podría apreciar algo aburrida.

    Todos pasaron al comedor, el cuál estaba muy bien decorado con muchos adornos color plata y además era muy grande y lo bastante hermoso para impresionar a cualquiera.

    Fugaku quedó en la silla principal y a su izquierda su mujer y a la derecha la señora Haruno. Del lado de Mikoto se sentó Itachi y enfrente de él Sakura, y al lado de ella Sasuke y enfrente de este Naruto. Según Ambas madres el que estuvieran ambos prometidos frente a frente, sería una buena forma de que ambos tuvieran que estarse viendo mutuamente.

    Se sirvió la cena y otra vez la plática dio inicio.

    -Creo que debemos de estar muy orgullosos de los hijos que tenemos, ¿O no lo creen así?- Decía Mikoto mientras tomaba un sorbo de vino- los hemos visto crecer y convertirse en lo que son ahora, pero a mi parecer les falta todavía más porque aún son jóvenes- sonriendo- Si no me equivoco. Itachi, Sakura ustedes saben el motivo de esta cena y cuáles serán sus destinos y lo que será de ustedes de ahora en adelante

    Quien lo diría muchas de las personas al nacer, tienen un destino que les fue deparado. Y justamente a Sakura Haruno le tenía algo verdaderamente muy especial pero lamentablemente ya lo veía como la desgracia de su vida. Saber que uno de los dos hombres que estaban sentados frente a ella era su prometido con el que compartiría el resto de su vida.

    -Hija, ambas madres sabemos que aun son muy jóvenes y por eso hemos tomado la decisión de que ustedes deben de casarse cuando ambos cumplan la mayoría de edad en este caso tu Sakura eres la ultima en cumplirlos por eso si ustedes deciden casarse antes de tiempo tienen todo el derecho del mundo.

    -Genial, como si me quisiera casar antes de tiempo- pensó aquélla joven de cabellos rozados.
    Fugaku en ese momento no deseaba ni hablar puesto que a él no se le daban ese tipo de cosas y mucho menos el dialogar como una persona normal sin deja atrás esa personalidad tan fría y calculadora sin duda eso no era para él.
    La situación se estaba poniendo algo tensa y sin duda las cosas de cierto modo no estaban saliendo muy bien o no al menos a cómo se había planeado.

    -Lo único que queremos es que ustedes puedan ser muy felices- tomando la mamá de Sakura la mano de ella y la de Itachi para unirlas y fue cuando entonces ambos volvieron a sentir una conexión.

    -¡Dios, ahora si que estoy perdida!- se lamentó por lo mas dentro de su ser.

    Naruto era el más sorprendido pero este no podía hablar, porque si lo hacía estaría condenado a morir es por eso que nomas se quedaba como el chinito...nomas mirando. Sasuke por su lado estaba tan sorprendido como Naruto y ambos prometidos, no era justo que la prometida de su hermano fuera precisamente ella. Se sentía algo incomodo y el tenia la respuesta a eso tan raro que comenzaba a hacerse presente, algo a lo que él no quería sentir y mucho menos por la futura esposa de su hermano.

    -¿Qué les parece si salen a caminar un rato?- sugirió Mikoto.

    -si, además sirve que se conocen mejor-apoyo la señora Haruno.

    -está bien volvemos en un rato- dijo Itachi y después se dirigió hacia Sakura para tomar su mano.

    -si madre ahorita regresamos- tomando la mano de su futuro esposo.

    -¿Nosotros también nos podemos retirar?- preguntaron Sasuke y Fugaku al mismo tiempo sin querer. A lo cual asintió Mikoto.

    Y no paso ni un minuto para que Naruto, Sasuke y Fugaku salieran de allí. Así dejando solas a dos mujeres, que sin dudarlo iniciaron platicas muy interesantes. Una de ellas fue sobre el gran amor que había tenido Itachi.

    Por otro lado afuera se encontraba una joven pareja caminando por el parque, el mismo en el que Sakura días anteriores había estado llorando. Ninguno quería decir palabra alguna, no se llevaban bien desde un principio y menos ahora que sabían que tarde o temprano se casarían no eran lo que los dos esperaban. Cada uno estaba en su propio mundo analizando lo que acababa de pasar y de que sería de sus vidas de ahora en adelante. Y sin querer Sakura miro mas allá de donde se encontraban y por una vez más observo como una pareja jugueteaba y se daban unos cuantos besos, después observo un poco a Itachi y rio pues sería un tanto loco el creer que tal vez ambos se encontraran en una situación así.

    Itachi observo sin querer otra escena de dos jóvenes enamorados agarrados de la mano, le recordó por un momento una de tantas veces en las que salía a pasear con su antiguo amor. Algo en el surgió, muy pocas veces se había sentido así antes. Giro su cabeza y se encontró con Sakura y se pudo dar cuenta de que estaba mirando a una pareja la cual paseaban muy juntas agarrados de la mano, muy en el fondo se sintió culpable…después de todo ella no tiene la culpa de todo esto y mucho menos de su frialdad. Pero tampoco es difícil para el ser lindo o tierno y si lo llegara a ser, el se encargaría de que nadie lo estuviera viendo por que como él siempre lo ha dicho es un hombre orgulloso.

    -cuenta hasta tres…1, 2,3 – hablando para el mismo, acto seguido tomo la mano de Sakura rápidamente y ella lo único que hizo fue voltear para mirarlo con asombro, pero no cedió a lo que Itachi había hecho.

    Al caminar parecían lindos pero de alguna manera algo raro. Ninguno cedía al terrible silencio. No obstante a Itachi se le vino a la mente una conversación que días antes había tenido con su madre.

    -A la mujer se le deba de tratar delicadamente. Hijo cuando tu tengas a alguien trata de demostrarle lo que sientes o simplemente no seas tan frio, de cierta forma está mal lo que les ha enseñado su padre eso de ser tan fríos y calculadores- acariciando el cabello de Itachi- y a esto me refiero a aquella que será tu prometida.

    -pero madre eso es difícil para mí-dijo sin hacer gesto alguno.

    -Eso no debe de ser así, por favor te lo suplico que cuando estés con ella dejes toda tu frialdad a un lado o por lo menos inténtalo- suplico Mikoto.

    --
    -sabes me gustaría sentarme un rato- Sakura rompió ese muro de hielo que hace rato ambos habían construido.

    Itachi solo asintió.

    Encontraron una banca muy cercas y cuando Sakura se dirigía a sentarse, Itachi la jalo y dejo a esta en asombro.

    -Espera, aquí no- la llevo a sentarse debajo de un árbol.

    -Sabes aquí me paso algo muy raro, hace días yo vine aquí y hable con un hombre desconocido.

    -Entonces eres tu…-susurro Itachi pero Sakura no lo pudo escuchar bien.

    -¿Que?- volteo a mirarlo pero no tuvo ninguna respuesta. Solo observo como Itachi se paro y se puro enfrente de ella de rodillas.

    -Ese hombre era yo- hablo un poco relajado.

    -Entonces…-ella agacho la cabeza- bueno ya no importa.

    -Lo siento- dijo, haciendo que Sakura levantara la cabeza- no tengo ni la menor idea de cómo tratarte, ni mucho menos de dejar mi frialdad a un lado- acercándose un poco más a ella- así que perdona si soy un tonto.

    -Nadie dice que es fácil, pero tampoco difícil- rio- empecemos de nuevo y dejemos el pasado atrás.

    -Si, tienes razón- hizo una sonrisa de medio lado y lentamente se fue acercando a Sakura, haciendo que ella poco a poco se recostara en el pasto- Por un nuevo comienzo- el quedo arriba de Sakura y los dos no dejaban ser mirarse, cada uno podía ver en los ojos del otro que algo nuevo acababa de comenzar. Itachi volvió a acercarse cada vez mas hasta sentir la respiración de su futura esposa, regalándole un dulce pero tierno beso- ¿Quieres ser mi novia?- pregunto.

    Pero Sakura no respondió. Solo lo tomo del cabello y lo acerco hacia ella para darle otro beso. Pero primero rozaron sus labios jugueteando para después besarse con una gran intensidad. Sakura acariciaba el cabello de Itachi, el se acerco mucho mas a ella para poder profundizar ese dulce beso.

    Continuara.

    Espero que les haya gustado jeje bueno espero volver pronto claro que si ahora no tardare tanto *-* gracias a todos por leer.
    Sayonaraa ^^
     
  5.  
    luna uchiha

    luna uchiha Usuario común

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    Re: El amor llega, ¡Cuando menos te lo esperas!.

    kawaiiii!!!!!!!!!!!!! q lindo!!!! que bueno que decidieron dejar el pasado atras y comenzar de nuevo xq si no... se las hubieran visto feas...

    hey y q bueno que te re-abrieron el fic ^^

    espero la conti!!! quiero saber sa habra algo entre Sasuke-kun y Sakura..?
     
  6.  
    LobitaUchiha

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    Re: El amor llega, ¡Cuando menos te lo esperas!.

    Solo queria dar aviso de que continuare el fic, y ademas si me dan de aqui para mañana para subir la continuación y que no me cierren el fic...lo que pasa es que ya lo tenia hecho y se borro...
    pero pues les pido a los administradores que solo me den de aqui a mañana,,!!
     
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