Hoshi no tama

Tema en 'Historias Abandonadas Originales' iniciado por fuyuhime, 28 Diciembre 2008.

  1.  
    fuyuhime

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    Re: Hoshi no tama

    weno, weno, ¿porque nadie, bueno, nadie no, porque tan poca gente posteo esta vez??? me quieren matar de la angustia existencial???

    ush, como siempre, exagero...

    Gracias a:

    Florentina: que bueno que te haya gustado, espero poder cumplir tus expectativas XP
    Alex Love: ps, no creo que se haya dado cuenta sólo cuando su padre se lo dijo... El ya se había dado cuenta de que había roto otra tradicion japonesa al principio del capitulo...

    Bueno, eso estuvo corto...
    (espero que no siga así)
    ........................................

    Aunque mi padre no tenía el mismo carácter de mi madre, y eso era un alivio, el era muy estricto, y, mientras dejaba a Shinobu en mi cuarto, empecé a pensar en lo raro que había resultado todo; él no había dicho nada más, y, aunque era probable que no hubiera llamado al refugio porque claramente ella siempre había estado en compañía humana, mi padre no era del concepto de tener animales, que normalmente se encuentran en estado salvaje, en casa.

    Tal vez, seguía esperando alguna clase de reacción cuando nos dispusimos a comer los soba que mi madre había pedido, y que yo, pese al tiempo que ya llevábamos en el Japón, no supe identificar.

    - Katsuo – empezó mi padre a mitad de la cena.

    - ¿si? – sentí que palidecía bajo la seriedad con la que me miraba.

    - Cálmate, es sólo una pregunta – dijo con tono tranquilizador - ¿Cómo la vas a llamar? Supongo que si se va a quedar aquí…

    A veces me parece increíble el parecido entre las acciones de Kouki y mi padre, así como el parecido entre Atsuko y mi madre, y también, a veces, me pongo a pensar que soy adoptado, porque, para ser sinceros, en la familia, no me parezco a nadie.

    Pensándolo bien, ni siquiera tengo alguna clase de parecido en lo físico; mientras que yo alcancé con facilidad el metro ochenta, tengo el pelo y los ojos muy oscuros y la piel un tanto pálida, la familia, incluso los familiares muy lejanos, son todos parecidos: metro setenta, como promedio máximo, ojos y pelo castaños, y vale mencionar que todos parecen tener el mismo grado de mestizaje, o, por lo menos, pasan la misma cantidad extra de horas frente al sol.

    - Si, ya habíamos pensado en eso – dije saliendo de mis cavilaciones, e intentando encontrar apoyo entre mis hermanas, pero las dos estaban muy ocupadas tratando de no atragantarse a punta de fideos. – si, pensamos llamarla Shinobu.

    - ¡Es perfecto! – mi madre, que hasta ese momento había permanecido en un silencio sepulcral, se pronunció al fin, dándonos a entender así que hasta ese instante le había durado el mal genio – pero, musuko – dijo al mirarme - ¿no crees que fue mala idea dejarla sola en tu habitación?

    - No, no te preocupes, no va a hacer nada – por lo menos eso sí podía afirmarlo con seguridad, pero, al recordarla, me dio un gran cargo de conciencia; seguramente ella no había comido nada en todo el día – me retiro, gracias por la comida.

    - Pero si no has comido nada.

    - Tranquila jaja, comeré más tarde, ahora no tengo hambre.

    - Musuko – Esta vez fue la calmada voz de mi padre la que me llamó –hay un poco de carne en el refrigerado, llévasela a Shinobu, por favor.

    - Gracias chichi, buenas noches.

    - Buenas noches – repitió el resto de la familia cuando me levanté para irme.

    Me dirigí a la cocina, tomé el plato que mi padre me había indicado, que estaba lleno a rebosar de carne cruda, y puse mi cena en su lugar. Realmente dudaba de que a Shinobu le gustara la carne cruda, pero, si quería que el resto de la familia siguiera creyendo que ella era un zorro, no tenía de otra.

    Cuando llegué a mi habitación, vi a Shinobu, todavía transformada en zorro, y completamente tensa, pero, al observar mi expresión, se calmó un poco, y para cuando cerré la puerta, ya era la pelinegra quien me miraba con todavía un poco de preocupación en su semblante.

    - ¿Qué dijeron?

    - Nada que ya no hubieras oído – recordé el plato y se lo pasé – por cierto, ellos te mandan esto.

    - Esto… gracias… supongo – dijo tomando con gesto de asco el plato – nunca he sido muy exigente, pero no me gusta mucho la comida cruda.

    - Definitivamente, no eres ni siquiera del campo, ¿naciste aquí en Tokio?

    - Sí, hasta dentro de los kitsune hay quienes son de ciudad y de campo – dijo encogiéndose de hombros.

    Ahí fue donde comprendí varias cosas de las que habían sucedido, y también el porque del que los desastres que Shinobu había provocado, no fueran precisamente algo grave; si el libro de mitología japonesa que había abandonado en mi armario después de la tarea no me fallaba, ella era una zenko, era de esa clase de Kitsune que tenía el nivel de maldad por los suelos, y los que, a diferencia de sus primos rurales, los yako, no disfrutaban de hacer bromas pesadas a los seres humanos.

    - Es bueno saber eso, Shinobu – dije con seriedad y ella me miró sin comprender – que habría sido de mí si fueras una yako.

    Ella ahogó una risa para evitar que alguien más en la casa la oyera, pero se cayó por completo por el rugido de su estomago y me miró con enojo, y un gran sonrojo, cuando fui yo quien se rió.

    - Sabes, te guardé algo de la cena.

    - Y yo que te causé tantos problemas…

    - ¡no te disculpes tanto!, ya está perdonado, ¡lo juro!

    - Igual, muchas gracias, hace mucho que nadie se preocupaba así por mí – dijo todavía muy sonrojada.

    - Más tarde iré por la cena, no creo que mis padres se molesten si voy por ella y la traigo – yo también me sonrojé con aquella confesión.

    - Cambiando de tema – dijo ella haciendo esfuerzos por dejar de parecer un tomate – Creo que sus padres, mejor dicho, su padre, sospecha algo.

    - No, no lo creo, suele ser bastante despistado.

    Eso la relajó un poco, seguramente, por lo sincero que soné, y es que lo estaba siendo, en parte. Mi padre solía ser bastante despistado, pero, cuando quería, y ponía atención, podía ser terriblemente perceptivo.

    Controlé el reloj, y vi que ya eran las diez de la noche. Algo bueno de la familia era que todos se acostaban muy rápido, todos, menos yo.

    - Espérame un momento.

    Salí de la forma más sigilosa que fui capaz, pase por enfrente de la habitación de mis hermanas, atravesé el corredor, y llegué a la cocina con el pulso acelerado.

    Que tonto, estaba actuando como si fuera un ladrón.

    Abrí el refrigerador, tomé la cena, y la puse a calentar, no tomaría mucho tiempo, pero era el suficiente como para poder pensar bien las cosas.

    ¿Y si Shinobu tenía razón?, ¿y si mi padre se había dado cuenta?

    No, no podía ser; si ya se hubiera dado cuenta, no hubiera dudado en entrar a mi habitación, con cualquier excusa, para averiguar la verdad. En cualquier caso, no le había dado razones para que él creyera que le estaba ocultando algo, y así era como debía mantener las cosas.

    La olla en la que había puesto el caldo empezó a hervir, menos mal que lo que puse a calentar no fueron los fideos, o sino a Shinobu le hubiera tocado tomar el caldo con la carne cruda.

    Con más calma de la que tenía antes de llegar, tomé una bandeja donde puse todo, y me regresé a mi cuarto, intentando no regar nada.

    Apenas hube cerrado la puerta suspire aliviado, le entregué la bandeja a shinobu y me senté a su derecha.

    Ella miró con los ojos muy abiertos la cena, y se la comió bastante rápido, con su tradicional alegría, pero con la emoción de quien no había comido su platillo favorito en mucho tiempo.

    - ¡Como me gusta el kitsune soba! – dijo apenas terminó, y a mi me pareció un poco irónico el nombre - ¿Qué?, así se llaman – dijo ella colocando la bandeja sobre mi escritorio.

    - Que bueno que te haya gustado

    - Si, estaba delicioso, muchas gracias, hace mucho que no comía algo así.

    - ¿Qué comías entonces?

    - Pues – dijo ella algo avergonzada – a veces voy al templo de Inari-sama, el monje pone ofrendas para los kitsune.

    - ah – me sentía muy incómodo con esta nueva revelación, no esperaba que ella hubiera tenido que pasar por eso.

    - bueno… - se detuvo a pensar un rato – pero creo que ya es un poco tarde, ya deberías de dormir un poco.

    - me das escalofríos, hablaste justo como mi madre.

    - lo siento – dijo haciéndome un gracioso gesto para que me tranquilizara – es que recordé que los seres humanos deben dormir diariamente.

    - Gracias – dije con sorna.

    - si, unas ocho horas, o seis, si son más grandes, o algo así – dijo como quien no quiere la cosa, e intentando ocultar una sonrisa que se le escapaba.

    - De nuevo, gracias.

    - Bueno, ya entendí, y creo que ya me tengo que ir.

    - ¿irte?

    - Si, tengo que deshacerme de eso – y señaló con asco el plato de carne.

    - Bueno – la miré con severidad y agregué – pero no puedes olvidar que me debes dar algunas explicaciones.

    - Y las voy a dar, te debo mucho por sólo haberme devuelto mi hoshi no tama – abrió la ventana y colocó el plato fuera de ella – y debo devolver el plato…

    - más te va… - sus transformaciones no dejaban de dejarme mudo.

    De nuevo, el pequeño y negro zorro de cinco colas saltó por la ventana, y, como había oído en tantas otras noches, sus pasos ligeros sonaron por el tejado, desapareciendo lentamente conforme avanzaban.

    Cuando me acerqué a la ventana, intenté, inútilmente, ubicarla, pero la noche era muy oscura, así que me resigné a simplemente cerrar la ventana y tomar el consejo de Shinobu de dormir un poco.


    ...................................................



    Emm... pues si, existe el kitsune soba... más exactamente en un mito que me encontré por ahí
    Espero que les haya gustado




     
  2.  
    fuyuhime

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    Re: Hoshi no tama

    weno, weno, ¿porque nadie, bueno, nadie no, porque tan poca gente posteo esta vez??? me quieren matar de la angustia existencial???

    ush, como siempre, exagero...

    Gracias a:

    Florentina: que bueno que te haya gustado, espero poder cumplir tus expectativas XP
    Alex Love: ps, no creo que se haya dado cuenta sólo cuando su padre se lo dijo... El ya se había dado cuenta de que había roto otra tradicion japonesa al principio del capitulo...

    Bueno, eso estuvo corto...
    (espero que no siga así)
    ........................................

    Aunque mi padre no tenía el mismo carácter de mi madre, y eso era un alivio, el era muy estricto, y, mientras dejaba a Shinobu en mi cuarto, empecé a pensar en lo raro que había resultado todo; él no había dicho nada más, y, aunque era probable que no hubiera llamado al refugio porque claramente ella siempre había estado en compañía humana, mi padre no era del concepto de tener animales, que normalmente se encuentran en estado salvaje, en casa.

    Tal vez, seguía esperando alguna clase de reacción cuando nos dispusimos a comer los soba que mi madre había pedido, y que yo, pese al tiempo que ya llevábamos en el Japón, no supe identificar.

    - Katsuo – empezó mi padre a mitad de la cena.

    - ¿si? – sentí que palidecía bajo la seriedad con la que me miraba.

    - Cálmate, es sólo una pregunta – dijo con tono tranquilizador - ¿Cómo la vas a llamar? Supongo que si se va a quedar aquí…

    A veces me parece increíble el parecido entre las acciones de Kouki y mi padre, así como el parecido entre Atsuko y mi madre, y también, a veces, me pongo a pensar que soy adoptado, porque, para ser sinceros, en la familia, no me parezco a nadie.

    Pensándolo bien, ni siquiera tengo alguna clase de parecido en lo físico; mientras que yo alcancé con facilidad el metro ochenta, tengo el pelo y los ojos muy oscuros y la piel un tanto pálida, la familia, incluso los familiares muy lejanos, son todos parecidos: metro setenta, como promedio máximo, ojos y pelo castaños, y vale mencionar que todos parecen tener el mismo grado de mestizaje, o, por lo menos, pasan la misma cantidad extra de horas frente al sol.

    - Si, ya habíamos pensado en eso – dije saliendo de mis cavilaciones, e intentando encontrar apoyo entre mis hermanas, pero las dos estaban muy ocupadas tratando de no atragantarse a punta de fideos. – si, pensamos llamarla Shinobu.

    - ¡Es perfecto! – mi madre, que hasta ese momento había permanecido en un silencio sepulcral, se pronunció al fin, dándonos a entender así que hasta ese instante le había durado el mal genio – pero, musuko – dijo al mirarme - ¿no crees que fue mala idea dejarla sola en tu habitación?

    - No, no te preocupes, no va a hacer nada – por lo menos eso sí podía afirmarlo con seguridad, pero, al recordarla, me dio un gran cargo de conciencia; seguramente ella no había comido nada en todo el día – me retiro, gracias por la comida.

    - Pero si no has comido nada.

    - Tranquila jaja, comeré más tarde, ahora no tengo hambre.

    - Musuko – Esta vez fue la calmada voz de mi padre la que me llamó –hay un poco de carne en el refrigerado, llévasela a Shinobu, por favor.

    - Gracias chichi, buenas noches.

    - Buenas noches – repitió el resto de la familia cuando me levanté para irme.

    Me dirigí a la cocina, tomé el plato que mi padre me había indicado, que estaba lleno a rebosar de carne cruda, y puse mi cena en su lugar. Realmente dudaba de que a Shinobu le gustara la carne cruda, pero, si quería que el resto de la familia siguiera creyendo que ella era un zorro, no tenía de otra.

    Cuando llegué a mi habitación, vi a Shinobu, todavía transformada en zorro, y completamente tensa, pero, al observar mi expresión, se calmó un poco, y para cuando cerré la puerta, ya era la pelinegra quien me miraba con todavía un poco de preocupación en su semblante.

    - ¿Qué dijeron?

    - Nada que ya no hubieras oído – recordé el plato y se lo pasé – por cierto, ellos te mandan esto.

    - Esto… gracias… supongo – dijo tomando con gesto de asco el plato – nunca he sido muy exigente, pero no me gusta mucho la comida cruda.

    - Definitivamente, no eres ni siquiera del campo, ¿naciste aquí en Tokio?

    - Sí, hasta dentro de los kitsune hay quienes son de ciudad y de campo – dijo encogiéndose de hombros.

    Ahí fue donde comprendí varias cosas de las que habían sucedido, y también el porque del que los desastres que Shinobu había provocado, no fueran precisamente algo grave; si el libro de mitología japonesa que había abandonado en mi armario después de la tarea no me fallaba, ella era una zenko, era de esa clase de Kitsune que tenía el nivel de maldad por los suelos, y los que, a diferencia de sus primos rurales, los yako, no disfrutaban de hacer bromas pesadas a los seres humanos.

    - Es bueno saber eso, Shinobu – dije con seriedad y ella me miró sin comprender – que habría sido de mí si fueras una yako.

    Ella ahogó una risa para evitar que alguien más en la casa la oyera, pero se cayó por completo por el rugido de su estomago y me miró con enojo, y un gran sonrojo, cuando fui yo quien se rió.

    - Sabes, te guardé algo de la cena.

    - Y yo que te causé tantos problemas…

    - ¡no te disculpes tanto!, ya está perdonado, ¡lo juro!

    - Igual, muchas gracias, hace mucho que nadie se preocupaba así por mí – dijo todavía muy sonrojada.

    - Más tarde iré por la cena, no creo que mis padres se molesten si voy por ella y la traigo – yo también me sonrojé con aquella confesión.

    - Cambiando de tema – dijo ella haciendo esfuerzos por dejar de parecer un tomate – Creo que sus padres, mejor dicho, su padre, sospecha algo.

    - No, no lo creo, suele ser bastante despistado.

    Eso la relajó un poco, seguramente, por lo sincero que soné, y es que lo estaba siendo, en parte. Mi padre solía ser bastante despistado, pero, cuando quería, y ponía atención, podía ser terriblemente perceptivo.

    Controlé el reloj, y vi que ya eran las diez de la noche. Algo bueno de la familia era que todos se acostaban muy rápido, todos, menos yo.

    - Espérame un momento.

    Salí de la forma más sigilosa que fui capaz, pase por enfrente de la habitación de mis hermanas, atravesé el corredor, y llegué a la cocina con el pulso acelerado.

    Que tonto, estaba actuando como si fuera un ladrón.

    Abrí el refrigerador, tomé la cena, y la puse a calentar, no tomaría mucho tiempo, pero era el suficiente como para poder pensar bien las cosas.

    ¿Y si Shinobu tenía razón?, ¿y si mi padre se había dado cuenta?

    No, no podía ser; si ya se hubiera dado cuenta, no hubiera dudado en entrar a mi habitación, con cualquier excusa, para averiguar la verdad. En cualquier caso, no le había dado razones para que él creyera que le estaba ocultando algo, y así era como debía mantener las cosas.

    La olla en la que había puesto el caldo empezó a hervir, menos mal que lo que puse a calentar no fueron los fideos, o sino a Shinobu le hubiera tocado tomar el caldo con la carne cruda.

    Con más calma de la que tenía antes de llegar, tomé una bandeja donde puse todo, y me regresé a mi cuarto, intentando no regar nada.

    Apenas hube cerrado la puerta suspire aliviado, le entregué la bandeja a shinobu y me senté a su derecha.

    Ella miró con los ojos muy abiertos la cena, y se la comió bastante rápido, con su tradicional alegría, pero con la emoción de quien no había comido su platillo favorito en mucho tiempo.

    - ¡Como me gusta el kitsune soba! – dijo apenas terminó, y a mi me pareció un poco irónico el nombre - ¿Qué?, así se llaman – dijo ella colocando la bandeja sobre mi escritorio.

    - Que bueno que te haya gustado

    - Si, estaba delicioso, muchas gracias, hace mucho que no comía algo así.

    - ¿Qué comías entonces?

    - Pues – dijo ella algo avergonzada – a veces voy al templo de Inari-sama, el monje pone ofrendas para los kitsune.

    - ah – me sentía muy incómodo con esta nueva revelación, no esperaba que ella hubiera tenido que pasar por eso.

    - bueno… - se detuvo a pensar un rato – pero creo que ya es un poco tarde, ya deberías de dormir un poco.

    - me das escalofríos, hablaste justo como mi madre.

    - lo siento – dijo haciéndome un gracioso gesto para que me tranquilizara – es que recordé que los seres humanos deben dormir diariamente.

    - Gracias – dije con sorna.

    - si, unas ocho horas, o seis, si son más grandes, o algo así – dijo como quien no quiere la cosa, e intentando ocultar una sonrisa que se le escapaba.

    - De nuevo, gracias.

    - Bueno, ya entendí, y creo que ya me tengo que ir.

    - ¿irte?

    - Si, tengo que deshacerme de eso – y señaló con asco el plato de carne.

    - Bueno – la miré con severidad y agregué – pero no puedes olvidar que me debes dar algunas explicaciones.

    - Y las voy a dar, te debo mucho por sólo haberme devuelto mi hoshi no tama – abrió la ventana y colocó el plato fuera de ella – y debo devolver el plato…

    - más te va… - sus transformaciones no dejaban de dejarme mudo.

    De nuevo, el pequeño y negro zorro de cinco colas saltó por la ventana, y, como había oído en tantas otras noches, sus pasos ligeros sonaron por el tejado, desapareciendo lentamente conforme avanzaban.

    Cuando me acerqué a la ventana, intenté, inútilmente, ubicarla, pero la noche era muy oscura, así que me resigné a simplemente cerrar la ventana y tomar el consejo de Shinobu de dormir un poco.


    ...................................................



    Emm... pues si, existe el kitsune soba... más exactamente en un mito que me encontré por ahí
    Espero que les haya gustado




     
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    Vintage Bomb

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    Re: Hoshi no tama

    Me ha gustado, aunque me dejaste con ganas de más. Realmente me da la impresión de que hay algo oculto que esta por pasar... pero me pregunto qué.

    ¿Tendrá en eso importancia de nuevo la Hoshi no Tama? ¿Aparecerán más Kitsunes, tal vez, Yakos? ¿Algùn otro ser mitológico? ¿Tendrá algo de importancia el hecho de que Katsuo-kun no sea parecido a su familia?

    Por otro lado, estoy casi segura de que los padres saben algo :/

    Me dejaste muchas dudas, ¡quiero seguir leyendo! T.T
     
  4.  
    fuyuhime

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    Re: Hoshi no tama

    aay señor... mejor dicho... aaay Selene, has hecho toooodas las preguntas cuyas respuestas tenía (tengo) reservadas para el final... weno... no puedo revelar nada, pero muchas gracias por seguir leyendo.

    creo, no sé, que voy a empezar a publicar cada quince días. Eso depende de que tan bien me vaya con este capitulo, asi que me toca esperar

    Weno, aqui va el capitulo, espero que guste XP

    ........................................

    Me desperté de una noche, que, como era habitual en mí, había sido corta y sin sueños.

    No, esta vez si había tenido uno.

    Había soñado con una hermosa pelinegra, que además de ser una yōkai, era quien causaba los continuos desastres en la casa, y quien había prometido ayudarme, y, por como iba mi sueño, había logrado quitarme de encima los problemas que ya tenía.

    Sin duda debía ser un sueño, era muy bueno todo lo que había sucedido en él, y, también, muy poco lógico.

    Llevaba ya como cinco minutos reflexionando sobre el sueño antes de que sonara el despertador, y mi costumbre de dejarlo fuera de mi alcance por las mañanas me obligara a levantarme de la cama.

    Atravesé la habitación, con la vista todavía nublada por el sueño y agradeciendo que hubiera recordado no dejarlo sobre el nochero. Para cuando llegué al escritorio ya estaba bastante despierto, y no pude pasar por alto la bandeja que no había sacado la noche anterior.

    Tomé el despertador, y lo tiré sobre mi cama, abrí la ventana, casi con desespero, y sacando la cabeza por ella, susurré el nombre de la pelinegra de mi sueño.

    - ¿Shinobu? – un pequeño zorro saltó, desde no se donde, y pasó por debajo de mis brazos, y antes de que pudiera reaccionar y voltearme, su voz me llegó tras mi espalda.

    - ¡Buenos días!

    - Buenos días – estaba a punto de abrazarla y darle las gracias por no ser sólo un invento de mi imaginación.

    - A los gatos les gustó mucho la carne, gracias – dijo con felicidad mientras me tendía el plato vacío.

    - De nada, deberías agradecerle a mi padre… ¿Cuáles gatos?

    - Hay muchos gatos por aquí cerca - explicó con tranquilidad

    - Si, bueno – recordé la conversación del día anterior – me prometiste que hoy me ibas a explicar todo.

    - Claro, pero Natsumi-sama y sus hermanas van a sospechar si lo ven hablando conmigo, digo, con un zorro.

    - Algo se me ocurrirá – pensé un rato, y encontré la solución perfecta – debo hacer unas compras hoy; mi padre cumplirá años este viernes, y le voy a comprar algo… ¿Qué dices si me acompañas y me explicas en el camino?

    - ¡Claro! – Estaba más emocionada de lo que se había mostrado hasta ese momento, y empezó a dar saltitos – te espero en el parque en… en ¿una hora?, ¡hace mucho que no voy al centro de la ciudad!

    - se nota – la emoción le salía por los poros – pero, no te irás a ir así ¿no? – le dije señalando el kimono azul.

    - De eso me encargo yo – dijo todavía muy emocionada – una hora – me recordó antes de salir, esta vez por la puerta, en su forma de zorro y con un mucho más convincente cojeo.

    Apenas ella desapareció, tomé la ropa que me pondría ese día, que fue lo primero limpio que encontré, y salí corriendo hacia el baño.

    Cuando entré en la ducha, abrí la llave del agua fría, pues era la única manera, aunque no me gustara para nada, de que en realidad me afanara, y tenía razón; el baño duró menos de quince minutos, el único problema que encontraba a mi sistema era que ya no sentía los dedos.

    - ¿Ya está mejor Shinobu? – me preguntó mi madre apenas me vio llegar corriendo al comedor. Me había tomado un buen tiempo el que mis dedos volvieran a tomar su color normal, y ya me había retrasado bastante – tus hermanas la sacaron al jardín, me dijeron que le haría falta aire fresco.

    “Pobre Shinobu” pensé “la van a torturar”

    - Sí, ya está mejor, aunque todavía parece que le duele un poco la pata

    - Pobre – murmuró ella, y me miró con sorpresa, como si no se hubiera fijado bien en mí antes - ¿ya estás listo?, ¿estás bien?

    - Jaja, te recuerdo que chichi cumple años la próxima semana, nunca está de más darle algo…

    - Claro, claro, lo que tú digas – dijo ella antes de regresarse para la cocina, desde donde siguió hablándome – pero me parece muy extraño, tú nunca estás listo a estas horas, ¿Qué tramas?

    - Nada – intenté sonar ofendido – sólo quiero ir a ver una tienda antes de que esté muy llena.

    Era obvio que no me había creído, por lo que decidí que era mejor comer el desayuno rápido, antes de que ella me viera con la boca vacía, y empezara a hacer más preguntas, en cualquier caso, ya se me estaba haciendo tarde. Sólo esperaba que Shinobu pudiera deshacerse de mis hermanas o sino, todo sería una perdida de tiempo.
     
  5.  
    Vintage Bomb

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    Re: Hoshi no tama

    Ya me esperaba que no dijeras nada, eran más preguntas al aire para ver si más o menos adivinaba algo
    Y mejor dicho, gracias a ti por seguir escribiendo :3

    EKKK
    Nooooooo!!!!!!!!!111one
    Mira que empiezo con las amenazas de suicidio :( [/Emo]
    Ok, no; pero la idea no me gusta... mi ama las contis semanales y las espera con ansias :(

    Bueeeno, pasando al último capítulo: Amé el comienzo, como él cree que fue todo un sueño, me pareció divertido. Y no sé si te lo dije antes, pero me gusta mucho como relatas a través de Katsuo, es muy dinámico y entretenido.
    Por último... se vienen las respuestas!!! wii! Espero con ansias un poco más de información, cuanto más, mejor :3

    Nos leemos!
     
  6.  
    Alex Love

    Alex Love Guest

    Re: Hoshi no tama

    me gustaron mucho las 2 nuevas contis, perdon amiga la anterior no te la pude elogiar ya que mi compu murio...pero ya se arreglo ^^
    De la anterior ¿Que ofrenda le daban a Shinobu?
    Y de la de ahora...ME ENCANTO *u*...pero no sabia que los zorros y los gatos se llevaban. ¿No precisa dormir ella?

    Yo la apoyo, espero muy feliz los miercoles T-T, continualo semanalmente por nosotras ^^
    Besos
    Te kiero
     
  7.  
    fuyuhime

    fuyuhime Iniciado

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    Re: Hoshi no tama

    Hola a todos!!! hoy (por algun milagro de la vida) estoy en mi casa antes de las 6 asi que publico más temprano...

    Ya se que dije que estaba pensando que iba a empezar a publicar cada quince, y aunque eso todavia está en veremos, publicaré este capitulo porque no me aguanté las ganas XD

    Al fin voy a publicar información que me guardé desde casi el primer capitulo (muajajajaja)....

    Agradecimientos especiales a Selene Fowl y Alex Love (este capi es para ustedes dos!!) gracias por su apoyo, estaría guardado para la proxima semana si Selene no hubiera amenazado con suicidarse.

    Alex siento mucho lo de tu compu, entiendo tu dolor, el mío aun no se recupera por completo del virus que lo atacó hace dos semanas...

    Y, ahora si, el capitulo!!

    ....................................................................................................................................

    El parque aún tenía los árboles de cerezo en flor, y eso le daba un aspecto mágico a todo el lugar, incluyendo al caminito que lo atravesaba y las blancas bancas, e incluso, a la ciudad que estaba detrás.

    Ya me iba a sentar en una de las bancas cuando alcancé a mirar el oscuro cabello de Shinobu.

    Había conseguido un vestido de tirantes, que iba por encima de la rodilla, y del mismo color del kimono. Llevaba, además, unas sandalias con delgadas cintas plateadas y la perla colgada del cuello.

    Agitó alegremente su mano cuando me vio, llegó corriendo hasta donde yo estaba, y dio una vuelta sobre sí misma para que la admirara.

    - ¿Qué tal me veo?

    - muy… muy… muy bonita – tartamudeé, ella sonrió y yo miré para otro lado, en un intento, que yo sabía no funcionaría, de ocultar el sonrojo que me había provocado, menos mal, ella no dijo nada al respecto.

    - Gracias, ¿A dónde vamos?

    - A… no sé – en realidad no tenía nada planeado - ¿te parece bien si me explicas y luego decidimos a donde ir?

    - claro – aún sonreía, esta chica era la mata de la felicidad.

    - Esto… ¿ya me vas a explicar?

    - Sólo pregunta – dijo sentándose en la banca en la que yo no había decidido sentarme.

    - Bien – me senté a su lado en la banquita y tomé aire antes de decidir cual sería mi primera pregunta - ¿Qué es una hoshi no tama?, ¿para que sirve?

    - Es la perla donde está contenida mi alma – lo dijo como si fuera lo más normal del mundo, pero su tranquilidad no me llegó a contagiar.

    - ¡¿Qué?! – una pareja que pasó por nuestro lado me miró asustada, y yo empecé a susurrar - ¿y tú la dejas así de descuidada?, ¡¿Qué te propones?!

    - Cálmate – ella también me miraba un tanto asustada – ya te había dicho que no cualquier humano puede tomarla, sería muy riesgoso.

    - ¿Qué tan riesgoso? – mi tortuosa curiosidad le había ganado, una vez más, a cualquier otro pensamiento.

    - Dejémoslo en que, para el que lo tome, será bastante desagradable, además, sólo la he perdido en dos ocasiones.

    - ¿Dos?, ¿Cuándo fue la primera? – ahí fue cuando ella palideció bruscamente, y yo sospeché que algo no iba bien.

    - Hace bastante tiempo – dijo después de meditar la respuesta que me iba a dar, la verdadera respuesta, estaba seguro, no era particularmente una que me calmara.

    - ¿Cuando?

    - Casi a principios del siglo pasado – tal y como yo pensaba, su respuesta no apaciguó, para nada, los nervios que ya estaba sintiendo.

    - ¿Cuándo naciste? – mi voz estaba cargada de una falsa calma que ambos notamos.

    - En otoño – Estaba evitando la verdadera respuesta que los dos sabíamos que yo quería.

    - En serio Shinobu, ¿Cuándo naciste?

    - No es buena idea que lo sepas – tenía razón, pero el sólo saber que tenía más de cien años no me iba a dejar dormir tranquilo.

    - Dímelo, por favor.

    - Pues, nací, más o menos, a comienzos del período Heian – dijo como tanteando el terreno, pero notó enseguida que no tenía ni idea de lo que estaba hablando, por lo que tomó aire y continuó – como en el siglo octavo.

    Haciendo cálculos rápidos, llegué a la conclusión de que ella tenía poco más de mil trescientos años, pero, no sé porque, eso no me trajo una conmoción como la que yo esperaba.

    - Pareces muy joven - ella rió aliviada, mientras que yo, en lo más profundo de mi mente sepultaba las preguntas sobre la edad.

    - ¿algo más que quieras saber?

    - Si, ¿como haces eso de ocultar las otras colas?

    - Eso es una ilusión, se me dan muy bien ¿no lo crees?

    - Tu forma humana, ¿también es una ilusión?

    - No, para nada, eso es una transformación, este vestido es una ilusión, es el mismo kimono – dijo con una clara nota de descontento.

    - Y… – me daba una vergüenza terrible querer preguntarle sobre la validez de los mitos que había escuchado - ¿es cierto eso de que los kitsune pueden poseer a los seres humanos?, ¿y eso de que algunos pueden modificar el tiempo y el espacio?

    - La verdad, ninguna de esas cosas se me da muy bien, y si lo logro, es por muy poco tiempo – luego, como si me estuviera contando un terrible secreto añadió – y tampoco es que me interese mucho saber ese tipo de cosas, Otou-sama quería que yo las aprendiera, pero nunca les presté mucha atención.


    - ¿Entonces los mitos si son ciertos?

    - No, no todos, lo de que todos somos muy inteligentes no es general, yo tenía un primo que era bastante tonto, y tampoco los que refieren a la hoshi no tama, ustedes, los humanos, se llegaron a convencer de que cualquiera puede tomarla sin enfrentar ningún problema, pero ya sabes que no es así, además, los humanos que la pueden tomar, y la devuelven a su dueño, no se ganan un simple favor, se ganan la completa fidelidad del Kitsune.

    - ¿Si?, ¿en serio? – lo de “completa fidelidad” me sonaba a matrimonio, y ella también se dio cuenta del doble significado de sus palabras, porque se sonrojó y carraspeó

    - Creo que ya te he dicho bastante Katsuo – no pude estar más de acuerdo - ¿Qué le vas a comprar a Daichi-sama?
     
  8.  
    Vintage Bomb

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    Re: Hoshi no tama

    Una sola palabra: Información!
    Una sola reacción a esa palabra: Wiiii <3

    Jeje, esas amenazas siempre funcionan xD.
    Muchas gracias por dedicármelo, es la primera vez que alguien lo hace ^^

    Anyway, volviendo a lo escrito: lo único criticable es que el anteúltimo diálogo de la kitsune pudo tener una mejor puntuación; Es una sola oración para dos renglones y medio, hubiese quedado mejor si hubiesen sido más...

    Por otro lado, nos dejaste con alguna intrigua chiquita más... ¿qué habrá pasado la primera vez que alguien tomó la hoshi no tama?

    P.D:¿He dicho ya que la relación de Katsuo y Shinobu me resulta adorable? ¿No?

    Siendo eso ya todo, ¡nos leemos...! [La próxima semana, ojalá]
     
  9.  
    Alex Love

    Alex Love Guest

    Re: Hoshi no tama

    Me parecio genial este capitulo
    Katsuo y Shinobu son tan liiiiiiiiindos juntos...es verdad lo que dice Selene que paso la 1 ra vez que algien tomo la hoshi no tama...Me encanto todo ^^.
    Y tb gracias por dedicarme este capitulo...y si en verdad funciona yo tb me suicidare si no pones la conti ^^
    Besos
     
  10.  
    fuyuhime

    fuyuhime Iniciado

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    Re: Hoshi no tama

    awww!!! muchas gracias por los comments!!!

    Selene: no, no me lo habías dicho, muchas gracias por leer y por la crítica, no sabes como son de constructivas para mí...
    Tomoe: no se porque, pero tu comentario desaparecio (misteriosamente), igual muchas gracias por leer los capitulos...
    Alex Love: jajaja, que interesante ;P no pense que se vieran lindos juntos... (muajajaja, me acaba de asaltar una idea)

    weno, ahora si ya, ahi va el capi...

    ............................................................

    Esa tarde regresamos a casa con una agenda, una simple agenda, y eso que ella me llevó por todas y cada una de las vitrinas que encontraba a su paso.

    Kitsune o no, Shinobu tenía más de medio siglo de no alejarse demasiado de la casa y el camino que se dirigía al templo, y estaba en todo su derecho de mostrarse con una infinita felicidad, aún si eso conllevaba a que, al final del día, sintiera demasiado los pies.

    El “regresamos a casa” aplica teniendo en cuenta el que nos separamos en el parque y nos volvimos a encontrar en mi habitación, donde encontramos a la muy convincente ilusión que Shinobu había creado para distraer a mis hermanas, poco antes de que yo fuera a cenar con la familia.

    Y, en la cena, pasó lo inevitable.

    - ¿Quién era ella? – preguntó mi madre con la curiosidad chispeándole en los ojos.

    - ¿Quién? – pregunté yo a la vez, fingiendo, lo mejor que pude, mi cara de inocencia.

    - Ella – ya empezaba a saltársele el mal carácter, aunque no lo aparentase - la chica bonita con la que estabas, no me vayas a decir que no es cierto, ¡porque yo te vi!

    - Mamá, no puede ser… – interrumpió Atsuko.

    - ….una chica bonita no podría fijarse en Katsuo… - continuó Kouki.

    - ….no, a menos de que la pobre tenga algún problema de la vista – terminó Atsuko, y, como toque final, ambas me miraron muy serias a la espera de mi reacción, que, por cierto, no tardó en llegar.

    - Era una compañera de la escuela – dije con enojo, y pronto comprendí el malévolo plan de las gemelas…

    - Invítala a cenar el viernes – dijo ella con tranquilidad. Las dos ya sabían lo mucho que disfrutaba mi madre con las visitas.

    - ¿Qué? – mi padre, que parecía más preocupado en verificar si su cena estaba libre de cebolla, me apoyó con su desconcierto ante la repentina propuesta.

    - No tiene nada de malo – alegó ella mientras se recogía los platos antes de dirigirse a la cocina – nunca invitamos a nadie.

    - Musuko – me susurró mi padre cuando estuvo seguro de que ella no podía oírlo – haré lo que pueda, pero no te prometo nada, ya sabes como es de terca – ya desde antes sabía que no iba a poder lograr nada.

    Shinobu me recibió con una gran sonrisa, que se escurrió lentamente por su rostro cuando me miró.

    - ¿Qué pasó?

    - Algo terrible – me senté en uno de los tatami que recubría mi habitación - mi madre dice que quiere que vengas a cenar el viernes.

    - No es tan terrible – se quejó – ni que no fuera capaz de hacerme pasar por un ser humano.

    - Si tú lo dices…

    - Me tendrás que enseñar algunas cosas, claro…

    - Está bien, le diré a mi madre que estarás encantada de acompañarnos ese día.

    Ambas estaban más que felices con la pronta cena, y yo lo único que pude llegar a pensar era que resignarse era lo único que quedaba.

    El domingo me dediqué a actualizar a Shinobu en cuanto a tecnología, pero desistí cuando, a la hora, ella ya sabía más que yo sobre mi computador portátil.

    Los días siguientes pasaron con inusual tranquilidad y sin mayores novedades.

    Mis padres empezaron a darle a Shinobu la carne ya cocida, una idea bastante buena por parte de mi padre, aunque yo le seguía dando alguna otra cosa para que variara su dieta.

    También le daba informes bastante detallados, lo más detallados que me era posible, de los sucesos diarios en la escuela mientras realizaba la tarea, y ella lograba mantener su atención, y memorizaba todo lo que yo le contaba, aún cuando estaba con los audífonos pegados a los oídos.

    Pero, pasé por alto un pequeño detalle durante la instrucción.

    Ella debía tener un nombre completo

    - Yamamoto Shinobu – afirmó a la primera, y sin pensárselo mucho cuando le comuniqué lo que pensaba – Yamamoto era el apellido del antiguo dueño – Agregó contestando a una pregunta que no había hecho.

    - Ellos ya conocen a una Shinobu

    - Si te preguntan, diles que ya habías escuchado el nombre y que su significado te pareció perfecto para el zorro.

    - ¿puedo preguntar algo? – Ella me miró sonriente y afirmó con la cabeza - ¿Por qué Yamamoto? – La pregunta escapó casi sin querer de mis labios, impulsada por lo que reconocí como envidia.

    - Ichiro-sama, el antiguo dueño, siempre me trató como si fuera de su familia – dijo con una sonrisa que no lograba ocultar el dolor en sus ojos – aunque yo no pude hacer mucho para ayudar a su verdadera familia.

    - ¿Qué pasó?

    - Bombardeos – dijo con la voz quebrada, y yo, al unir las piezas de información que tenía, logré comprender lo que quería decirme – Ichiro-sama murió de pena.

    Me estuve regañando internamente durante el resto del día por haber llevado hasta ese punto la conversación.

    Shinobu casi se hecha a llorar, y yo no cabía de la vergüenza por haber sacado a colación, así fuera de manera intencional, ese tema. Todo por hacer caso a mi tonta envidia

    Y, aunque me estuve disculpando durante un largo rato, sabía de antemano que no serviría de mucho.

    Hay heridas que no cierran, incluso con el paso del tiempo.
     
  11.  
    fuyuhime

    fuyuhime Iniciado

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    Re: Hoshi no tama

    awww!!! muchas gracias por los comments!!!

    Selene: no, no me lo habías dicho, muchas gracias por leer y por la crítica, no sabes como son de constructivas para mí...
    Tomoe: no se porque, pero tu comentario desaparecio (misteriosamente), igual muchas gracias por leer los capitulos...
    Alex Love: jajaja, que interesante ;P no pense que se vieran lindos juntos... (muajajaja, me acaba de asaltar una idea)

    weno, ahora si ya, ahi va el capi...

    ............................................................

    Esa tarde regresamos a casa con una agenda, una simple agenda, y eso que ella me llevó por todas y cada una de las vitrinas que encontraba a su paso.

    Kitsune o no, Shinobu tenía más de medio siglo de no alejarse demasiado de la casa y el camino que se dirigía al templo, y estaba en todo su derecho de mostrarse con una infinita felicidad, aún si eso conllevaba a que, al final del día, sintiera demasiado los pies.

    El “regresamos a casa” aplica teniendo en cuenta el que nos separamos en el parque y nos volvimos a encontrar en mi habitación, donde encontramos a la muy convincente ilusión que Shinobu había creado para distraer a mis hermanas, poco antes de que yo fuera a cenar con la familia.

    Y, en la cena, pasó lo inevitable.

    - ¿Quién era ella? – preguntó mi madre con la curiosidad chispeándole en los ojos.

    - ¿Quién? – pregunté yo a la vez, fingiendo, lo mejor que pude, mi cara de inocencia.

    - Ella – ya empezaba a saltársele el mal carácter, aunque no lo aparentase - la chica bonita con la que estabas, no me vayas a decir que no es cierto, ¡porque yo te vi!

    - Mamá, no puede ser… – interrumpió Atsuko.

    - ….una chica bonita no podría fijarse en Katsuo… - continuó Kouki.

    - ….no, a menos de que la pobre tenga algún problema de la vista – terminó Atsuko, y, como toque final, ambas me miraron muy serias a la espera de mi reacción, que, por cierto, no tardó en llegar.

    - Era una compañera de la escuela – dije con enojo, y pronto comprendí el malévolo plan de las gemelas…

    - Invítala a cenar el viernes – dijo ella con tranquilidad. Las dos ya sabían lo mucho que disfrutaba mi madre con las visitas.

    - ¿Qué? – mi padre, que parecía más preocupado en verificar si su cena estaba libre de cebolla, me apoyó con su desconcierto ante la repentina propuesta.

    - No tiene nada de malo – alegó ella mientras se recogía los platos antes de dirigirse a la cocina – nunca invitamos a nadie.

    - Musuko – me susurró mi padre cuando estuvo seguro de que ella no podía oírlo – haré lo que pueda, pero no te prometo nada, ya sabes como es de terca – ya desde antes sabía que no iba a poder lograr nada.

    Shinobu me recibió con una gran sonrisa, que se escurrió lentamente por su rostro cuando me miró.

    - ¿Qué pasó?

    - Algo terrible – me senté en uno de los tatami que recubría mi habitación - mi madre dice que quiere que vengas a cenar el viernes.

    - No es tan terrible – se quejó – ni que no fuera capaz de hacerme pasar por un ser humano.

    - Si tú lo dices…

    - Me tendrás que enseñar algunas cosas, claro…

    - Está bien, le diré a mi madre que estarás encantada de acompañarnos ese día.

    Ambas estaban más que felices con la pronta cena, y yo lo único que pude llegar a pensar era que resignarse era lo único que quedaba.

    El domingo me dediqué a actualizar a Shinobu en cuanto a tecnología, pero desistí cuando, a la hora, ella ya sabía más que yo sobre mi computador portátil.

    Los días siguientes pasaron con inusual tranquilidad y sin mayores novedades.

    Mis padres empezaron a darle a Shinobu la carne ya cocida, una idea bastante buena por parte de mi padre, aunque yo le seguía dando alguna otra cosa para que variara su dieta.

    También le daba informes bastante detallados, lo más detallados que me era posible, de los sucesos diarios en la escuela mientras realizaba la tarea, y ella lograba mantener su atención, y memorizaba todo lo que yo le contaba, aún cuando estaba con los audífonos pegados a los oídos.

    Pero, pasé por alto un pequeño detalle durante la instrucción.

    Ella debía tener un nombre completo

    - Yamamoto Shinobu – afirmó a la primera, y sin pensárselo mucho cuando le comuniqué lo que pensaba – Yamamoto era el apellido del antiguo dueño – Agregó contestando a una pregunta que no había hecho.

    - Ellos ya conocen a una Shinobu

    - Si te preguntan, diles que ya habías escuchado el nombre y que su significado te pareció perfecto para el zorro.

    - ¿puedo preguntar algo? – Ella me miró sonriente y afirmó con la cabeza - ¿Por qué Yamamoto? – La pregunta escapó casi sin querer de mis labios, impulsada por lo que reconocí como envidia.

    - Ichiro-sama, el antiguo dueño, siempre me trató como si fuera de su familia – dijo con una sonrisa que no lograba ocultar el dolor en sus ojos – aunque yo no pude hacer mucho para ayudar a su verdadera familia.

    - ¿Qué pasó?

    - Bombardeos – dijo con la voz quebrada, y yo, al unir las piezas de información que tenía, logré comprender lo que quería decirme – Ichiro-sama murió de pena.

    Me estuve regañando internamente durante el resto del día por haber llevado hasta ese punto la conversación.

    Shinobu casi se hecha a llorar, y yo no cabía de la vergüenza por haber sacado a colación, así fuera de manera intencional, ese tema. Todo por hacer caso a mi tonta envidia

    Y, aunque me estuve disculpando durante un largo rato, sabía de antemano que no serviría de mucho.

    Hay heridas que no cierran, incluso con el paso del tiempo.
     
  12.  
    Vintage Bomb

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    Re: Hoshi no tama

    Contii ~
    Me pareció una buena continuación. Me gustaron las situaciones en general, tanto el comentario de las compras y la cena, como la última conversación deribada del apellido de la kitsune.
    Aún así, siento que falta que pase algo verdaderamente importante para la historia, que nos muestre un poco hacia donde va la trama... ¡Nos estás dejando con mucha intriga! :(


    El padre sabe algo, estoy segura. Ok, no segura segura, pero al menos subconcientemente esta al tanto de que Shinobu no es un zorro normal.


    xD!
    El papá es adorablemente desconcertado, definitivamente.

    Esta parte no me termina de cerrar: ¿No sorprendió en lo más minimo a la kitsune que le diga eso? ¿No le causó desconcierto, o intriga saber el porqué estaba invitada? ¿O sobre-entendió que los habían visto?
    No sé, creo que faltó un poco más de explicación por parte de Katsuo con respecto al porqué para que la situación tuviera sentido.

    Y ya que estamos, hay errores en el formato de guiones: La primera palabra debe ir pegada al guión, como también los guiones deben ir pegados a la aclaración (-Blah -dijo él- Blahblah) :3

    Siendo eso todo, se esperará con ansias la proxima conti =3

     
  13.  
    Alex Love

    Alex Love Guest

    Re: Hoshi no tama

    Me encanto la conti, a mi se me hace que a Shinobu no le molesto que la invitaran a comer porque ya era parte de la familia y por que le gusta Katsuo ^^
    Ya quiero la conti
    como se comportara Shinobu?
    cual fue la ilusion que uso para sus hermanas?
    el padre sabe mas de lo que aparenta?
    La intriga me va volver loca @w@
    Besos
     
  14.  
    tomoe asashi

    tomoe asashi Entusiasta

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    Re: Hoshi no tama

    hola fuyumine, no puedo creer que se me hayan pasado tantos capitulos y yo ni en cuenta, disculpame.Bueno tu historia me encanta tiene mucha imaginacion, que mala onda de Kouki y Atsuko, como que una chica bonita no puede fijarse en Katsuo, eso esta mal, no solo cuenta el fisico si no que tambien cuenta los sentimientos (bueno alo menos a mi parecer), me dio algo de risa cuan Katsuo, kiso enseñarle algo a Shinobu sobre tecnologia, y ella ya hasta sabia como utilizar su computador portatil, no aguanto a saber que pasara cuando Shinobu llege a la cena, actuara normal o no? no lo se la intriga me deja en suspenso y solo puedo decir una cosa:
    ¡espero con ansias el siguiente capitulo!
    bueno Sayonara desu ¡nipa!
     
  15.  
    fuyuhime

    fuyuhime Iniciado

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    Re: Hoshi no tama

    ushh... voy a cometer sucidio, me voy a morir, este es el capitulo que estaba intentando evitar... ME ESTOY MURIENDO!!!

    Bueno (se positiva) tal vez les guste y no termine echada a pedradas... pero quien quita...

    Gracias a:

    Selene: Gracias por tu incondicional apoyo, que haría yo sin tus consejos, y lo siento si te deje ahí sin entender, pero me faltó agregar una parte ahí que dice: " ellas dos ya sabían como le encantaba a mi madre invitar a gente que no conocía... (se me borró esa parte, lo siento!!)

    Alex: espero que te guste este capitulo, ojala responda tus preguntas

    Tomoe: no, no te preocupes, y pues, lo de las queridas hermanitas de Katsuo, eso lo dicen tooodos los hermanos menores, yo no tengo uno, pero ya tengo bastante experiencia viendo a mis primos...

    Weno, eso es todo, muchas gracias a los que leen, aunque no comenten, espero que les guste este capitulo (voy a morir, voy a morir, voy a morir)...

    .................................................................................................

    Llegó el gran día, y pese a que confiaba mucho en las capacidades de Shinobu para aparentar tener dieciocho años, no podía sacarme de la cabeza el oscuro pensamiento de que algo iba a salir mal.

    Esa noche, cuando abrí la puerta para “recibir” a Shinobu, noté que había vuelto a modificar su kimono, y lo había convertido en una especie de abrigo azul, a juego con la falda negra y el top blanco que llevaba. La perla, como siempre, colgaba de su cuello en un collar.

    La presenté, con los nervios alborotados, a mis padres y a mis hermanas.

    Atsuko le dio un codazo a Kouki apenas Shinobu pronunció su nombre, ambas se miraron con complicidad, y supe que ellas irían a decirme algo, apenas ella se fuera, sobre la relación entre el zorro, que supuestamente estaba encerrado en mi cuarto, y la chica que les acababa de presentar.

    Mi madre estaba realmente efusiva con mi compañera de clases, y, a mí, con el mayor disimulo, y mientras Shinobu hablaba con mi padre, me advirtió de que esperaba que yo fuera caballeroso con ella, o que, por lo menos, no la tratara de la misma manera que a mis hermanas.

    Mi padre, por su parte, estaba muy feliz de que Shinobu pudiera entablarle una buena discusión sobre cambios sociales e históricos, cosa que nadie en casa había logrado hacer con éxito.

    La cena pasó, podría decirse que de una manera tranquila, y exceptuando el hecho de que mi madre decidió sacar la garrafa de sake para hacer un brindis, con el que recordé el pequeño daño que mis hermanas y yo habíamos provocado, y del cual mis padres nunca se habían dado cuenta, no sucedió nada extraño.

    En realidad, si me preocupó de que, tal vez, se tratara de la misma garrafa de sake que, no recuerdo bien quien, regó por el piso, la cual volvimos a llenar con algunas reservas del minibar de nuestros padres, y que terminó como una mezcla extraña de vodka, tequila y algo de sake.

    Tampoco recuerdo de quien fue la maravillosa idea de hacer la mezcla, pero, para ser una idea de un trío de niños, que no superaban los diez años, fue buena, y dio resultado; nunca nadie se dio cuenta, bueno, hasta ahora.

    Ahora bien, no conocía el efecto que el alcohol tenía sobre las criaturas mitológicas, pero el que Shinobu no pareciera haberse preocupado al respecto ya era algo; o no le haría nada, o ella se las arreglaría para evitarlo, pero si se me revolvió un poco el estomago cuando mis padres y Shinobu hicieron gestos de desagrado al probar el licor, mis padres no se darían cuenta, ellos ni siquiera tomaban vino en las reuniones que tenían, supongo que tomarían el sabor extraño del sake como algo normal, y yo, por mi parte, no me quise arriesgar y dejé el sake intacto.

    Finalmente, la tan temida visita había terminado. No había sucedido nada grave ni digno de mención, y ya estábamos despidiendo a Shinobu, y agradeciéndole por su compañía.

    Me decidí a ayudar a lavar los platos, y a organizar la cocina, antes de volver a mi cuarto. Creí que eso me ayudaría a olvidar un poco aquel extraño temor de que algo no marchaba como debía.

    Cuando dejé todo limpio, y en lo que yo consideré orden, me fui para mi cuarto, en el que no encontré a Shinobu. Algo definitivamente no iba bien, así que me asomé por la ventana que había dejado entreabierta.

    - ¿Shinobu?

    - ¿si? – su voz, normalmente muy animada, sonaba algo aletargada para cuando apareció por la ventana.

    - ¿estás bien?

    - Si – yo di unos cuantos pasos atrás para poder mirarla mejor, y me sorprendí al ver que ya habían echo aparición tres de sus colas.

    - No te ves bien.

    - Estoy perfectamente – alegó ella, y se acercó a mí con un andar bastante torpe.

    - En serio, no te ves bien – dije cruzándome de brazos.

    - Me siento bien – replicó, e intentó caminar, pero tropezó.

    Logré agarrarla antes de que se diera de cara contra el piso; no se veía en condiciones de mantener el equilibrio, y apenas la logré sostener, ella soltó una risita tonta y enganchó sus brazos alrededor de mi cuello.

    - No te voy a dejar tomar nunca más.

    - Claro, como quieras.

    - Creo que será mejor que te duermas – dije intentando soltar el agarre de sus brazos, cosa que no funcionó muy bien, porque ella no se demostraba dispuesta a soltarme, se limitó únicamente a acortar la distancia entre los dos y a tomar aire profundamente.

    - Sabes… - dijo sonrojándose – me gustas, Katsuo.

    - Estás borracha – aunque aparentaba estar serio, tenía las piernas como gelatina.

    - No tanto…

    Empezó a acercarse más y yo no tenía ni la más remota idea de que hacer; una parte de mi cerebro me indicaba que no me moviera y que dejara que las cosas pasaran, pero la otra parte, la que yo sabía era más racional, pero que no por eso sonaba más fuerte, me decía que la detuviera cuanto antes.

    Al final, me decidí a hacerle caso a la parte buena de mi cerebro y parar todo lo que estaba pasando… pero cuando iba a abrir la boca, la cercanía de su rostro al mío nubló todo pensamiento anterior.

    Ya podía sentir su aliento sobre mis labios, y mi corazón sobre mi garganta.

    Estaba ya demasiado cerca…



    ........................................................................................



    voy a morir, voy a morir, voy a morir... (no puedo con la angustia T.T)




     
  16.  
    Alex Love

    Alex Love Guest

    Re: Hoshi no tama

    Esta muy bueno este capi *u*, quiero ya la conti!!!!!!!!!!
    que va a pasar? Se besaran? Como reaccionara Shinobu? Que emocionante, tengo que esperar una semana NOOOOOOOOO! T-T
    bueno esperare.
    Me encanto ^-^
    Besos ^^
     
  17.  
    my_lady

    my_lady Usuario común

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    Re: Hoshi no tama

    Espero sepas perdonarme! Lo lamento mucho, de veras. Tuve que ausentarme un tiempito, y me perdí todas esas contis :( ToT Lamento no haberte dejado post, pero.. buneo no podía!!

    Lol! será sólo efecto de la borrachera, o será que lo piensa de verdad? También puede que lo piense y no lo quiera decir, pero por estar ebria se animó a decirlo xD. Ok, no le doy más vueltas al tema, y dejaré que lo aclares en el prox cap. o por lo menos que lo aclares en algún momento :P

    Que hermanas molestas, ¡Pobre Katsuo! Omm.. Cómo se llamaba el padre? Por qué le llama de una manera que no es Katsuo? (ahora no lo recuerdo, pero leí algo que no era el nombre del chico, exactamente :S O será que tengo sueño xD)

    Pobre Shinobu! Supongo que estuvo obligada, pero siempre puede decir que esas bebidas le caen mal. Y parecer una niña buena xD

    Estaré pendiente de la conti, así no me cuelgo =/


    Ea, muchos ánimos!!


    Kisses!!



    Pd.: Confía un poco más en lo que haces. Deja de esperarte zapatazos, tomatazos, o que a alguien no le gusta. Si a alguien no le gusta, simplemente dirá qué parte no le gustó, para ayudarte a mejorar. O dejará su punto de vista. Escribes muy bien y tu historia es muy buena, no tengas miedo cada que publicas un capi. Porque la mayoría que lee tu fic, lo hace porque le gusta. Dime si tú leerías algo que no te agrade? o algo obligada? No lo creo. ;)
     
  18.  
    Vintage Bomb

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    Re: Hoshi no tama

    Tranquiiila, Fu-chan, son tus personajes y puedes hacer lo que quieras con ellos. Nunca esperes dejar a todos contentos, porque es algo casi imposible...
    ... aunque parece que a todas nos gustó la situación xD

    Anyway, siento la tardanza; he estado poco comunicativa ùltimamente... y asdf.

    A ver, la combinación de "sake"... cuando leí tequila y demases casi me agarra un ataque cardíaco xD. Excelente idea, muy graciosa y bien llevada. Especialmente por sus concecuencias >:3

    Ahora, abusaste un poco de las comas, lo que complica un poco la lectura; trata de usar menos que ésta vez la próxima vez que escribas.

    Otro errorcillo con las comas (y según un beta con el que hablé) cuando enumeras nunca va coma antes de la "y/e/o". Ejemplo:


    Por último -y como mínimo recordatorio- ten cuidado con el formato de guiones :3

    Ahora...
    Contiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!!!!!!!!111111111111111111one
     
  19.  
    fuyuhime

    fuyuhime Iniciado

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    Re: Hoshi no tama

    Hola!!!! gracias a tooodas por leer, no saben lo feliz que me hacen!!!

    Alex: muajajaja, te dejé con la intriga!!!

    My_lady: jejeje, eran mis nervios los causantes de todo aquel ataque de miedo, ese y el primero fueron los capitulos que más me costó publicar... por cierto, el padre de Katsuo se llama Daichi, el le dice musuko que significa hijo, no era sueño.

    Selene: ps si, son mis personajes, pero también me da pena por ellos... lo de las comas; parece que cuando me da un ataque de nervios se me da por agregar más de las necesarias...

    En fin, muchas gracias a todos los que leen este fic...
    (este capitulo esta tantito corto, advierto)

    ....................................................................

    Nunca, en toda mi vida me había sentido así; el mar de confusión en mi cerebro se había calmado por completo, y lo único que podía sentir, además de… bueno, y a fin de cuentas: ¿Cómo describir un beso de una manera adecuada?

    Lo más sincero a lo que puedo llegar, incluso ahora, era que una calma y tranquilidad absoluta me habían invadido por completo y que incluso mis tormentosos pensamientos de alguna posible desgracia venidera habían menguado.

    No es que no hubiera besado a ninguna chica antes, pero sentía que era como si hubiera esperado por ese momento desde mucho tiempo atrás, incluso desde antes de que supiera que podría llegar a pasar.

    Pero mi burbuja se rompió con el no muy disimulado “Oh!” que mis hermanas soltaron al unísono cuando entraron precipitadamente a mi cuarto.

    Y he ahí que mi ya no tan tonto presentimiento se vio realizado.

    No pensé que todo esto se tornara tan rápidamente en una pesadilla: ¿Cómo iba a solucionar todo esto?

    Shinobu y yo nos separamos de inmediato, mientras que la inquieta mirada de Kouki nos examinaba con atención.

    Además del hecho de que se suponía que Shinobu ya se había ido, estaba el pequeño problema que significaba el que ella hubiera perdido parte de su concentración y que en ese momento luciera tres largas y negras colas de zorro.

    Había que ver como les explicaría todo el embrollo de las criaturas mágicas, y, de ahí a que me creyeran…

    - ¿Katsuo?... ¿Shinobu-san? – Atsuko no parecía decidirse por quien sería el que respondería su pregunta primero; no parecía comprender bien, y no la culpaba, el porque de que Shinobu permaneciera todavía en la casa si se suponía que ya se había ido, pero pronto se dio cuenta que la mirada de su gemela estaba fija, y no precisamente en nuestras caras.

    Era inevitable, algún día tenía que pasar…

    Pero no pensé que sería tan pronto…

    - ¿Qué es…? ¿Qué pasa? – El cerebro de Atsuko estaba tardando demasiado en reaccionar, y el mío estaba maquinando lo más rápido que podía una posible solución, pero la conmoción había cobrado su cuota en todos los que estábamos en el cuarto.

    - Yo les puedo explicar todo, si me dejan… - susurró suavemente Shinobu mirando a Kouki, que era la única que parecía estar pensando claramente.

    Ella asintió rápidamente, empezó a zarandear a Atsuko para despabilarla, y le hizo señas para salir del cuarto.

    Creí que Shinobu les explicaría todo al día siguiente, pero cuando Kouki salió casi arrastrando a Atsuko, ella las acompañó adoptando su forma de zorro, en realidad, no sé si alguna de las dos logró ver, o notar, la transformación, pero si lo hicieron, no parecieron inmutarse en lo más mínimo.

    Y yo seguía intentando pensar algo que todavía pudiera hacer.

    Estaba seguro que no podría dormir esa noche, casi tan seguro de que no vería a Shinobu durante el resto de la noche, ella les tendría que explicar muchas cosas a mis hermanas, y le costaría otro tanto convencerlas de que ella no era sólo una absurda ilusión o algo parecido.

    Me negaba a creer que mis hermanas pudieran llegar a delatarnos, en todo caso, si ellas llegaran a decir algo, cualquier cosa, yo lo negaría todo, y diría que ellas estaban inventando cosas, pero, para ser sincero, no me creía capaz de hacer eso…

    Además, ellas no eran tontas… lo menos que harían sería algo que las dejara como un par de locas. Seguramente, si quisieran que Shinobu se fuera, algo se inventarían.

    Otra vez, aquel viejo temor que tenía desde casi el comienzo del día me embargó y me cubrió por completo, la felicidad que aquel beso me había traído, y que ahora se me hacía lejano, había desaparecido por completo.

    El vacío que se había formado en mi pecho ante la perspectiva de su posible desaparición, si mis hermanas decían algo, no ayudaba mucho para consolarme.

    No sabía que hacer, tenía miedo de no volver a verla nunca más.

    Ya me había acostumbrado a su compañía, a sus explicaciones de cómo, cuando y porque sucedían las cosas entre las criaturas mitológicas, sus sonrojos, su eterna felicidad, incluso sus transformaciones se me antojaban cada vez más normales.

    Si se llegaba a ir, lo extrañaría todo…

    Bonita la hora en la que me había empezado a dar cuenta de que me había enamorado...

    Y no sabía que más hacer…

    Ni siquiera sabía que pensar…

    Sólo me quedaba esperar…
     
  20.  
    my_lady

    my_lady Usuario común

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    Escritor
    Re: Hoshi no tama

    OMG!!! OMG!!! Qué a las mocosas esas nunca les enseáron a tocar antes de entrar? ¬¬que fastidio!!!
    Pobre Shinobu... peor! pobre Katsuo, darse cuenta de que se enamora justo cuando la está por perder... debe de sentirse horrible...

    Que... criaturas endemoniadas... tanto como se les ocurra echar a Shinobu, espero les pase algo muy, muy feo... Muajajaja!!! xD No te puedo explicar cuan molesta me ponen esas chiquillas... Y la pena que me da Katsuo!! El pobre, parece un angel destinado a las malas ocurrencias y a la maléfica inteligencia/astucia de sus hermanas...

    Esto... Espero que se pueda solucionar, ¡¡¡más vale que se solucione!!!

    Estuvo corto, sí, pero no siempre se pueden hacer contis largas. Además lo compensa, te deja con esa maldita intriga...

    Mucha suerte, y ánimos para el prox capi!!

    Kisses..!
     

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