Long-fic Los Ricos y Populares de New York (SanxMir) (InuxKag)

Re: Los Ricos y Populares de New York (SanxMir) (InuxKag)

Los Ricos y Populares de New York.
Cap. 12: Navidad... fatal.​

Ya varios adolescentes estaban en la “after party” de Pride High School, la hacia un alumno diferente cada año, y esta, después del Baile de Nieve, era la fiesta del año.​

Por otro lado, Koharu y Rio habían decidido retomar lo que hace años habían dejado, sabían que a pesar de todo seguían amándose y no tenían nada que perder. Esto tuvo cierto efecto positivo en la chica, pues su nivel de “travesuras” había bajado considerablemente...​

Sango y Miroku se encontraban en una extraña situación: desde la llegada de Rin y el beso de la castaña con Sesshumaru el ambiente entre ellos que había tornado tenso, tanto así que no hablaban como antes. ​

Mientras que Inuyasha y Kagome eran todo lo contrario: si bien no pasaban de la “barrera de amistad” ambos permanecían muy unidos a raíz la situación con Kikyo. Ambos sabían que querían mas que eso, pero por los momentos, se les hacia agradable su situación.​

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::​

24 de diciembre, 9:00 de la noche En la Fiesta.
Rio se encontraba apoyado en un árbol cercano a la piscina, Áyame, al verlo completamente solo, “que el plan comience” – pensó-

- Pareces aburrido – le dijo ella de improvisto-

- No, para nada – respondió Rio amablemente-

- ¿En serio? Por que de verdad lo pareces…

- Me descubriste

- Soy Áyame – dijo estirando su mano- estoy aquí en Nueva York por unos pocos días, ¿Y tu...?

- Rio, mucho gusto.

- Rio... – dijo pensativamente- ¿sabes que me parece haber oído tu nombre por algún lado? – hizo una pequeña pausa- ¡Ya se! Koharu estaba hablando con algunas chicas sobre ti.

- ¿Si? – cuestionó el-

- Aja… ¡ya recuerdo! Tu fuiste el que encontraste a tu mama con su jefe… bueno, ya sabes, haciendo cosas indecentes – termino de decir Áyame con cierta risa maliciosa… no se arrepentía para nada-

Rio no podía estar mas indignado. Aquella experiencia no fue nada agradable y se la confió a Koharu ya que le tenía confianza. Craso error…

- No sabes – siguió Áyame- como ella se reía de eso, me pareció muy feo por que… ¿ella es tu novia, no?

- No – respondió seriamente- ella no es mi novia.

- Eres muy lindo ¿sabes? – le insinuó mientras se acercaba cada vez mas a el- y tu y yo podemos hacer que esta sea mucho… mucho mas divertida.

- ¿Tú crees? – pregunto el muy interesado en lo que proponía la pelirroja-

- Aja – asintió ella mientras que tomaba la mano de Rio y lo guiaba al interior de la casa-

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::​

La cena de los Taisho con los Higurashi transcurría normal, amena. Sin embargo tanto como Inuyasha como Kagome les extrañaba la situación, Sesshomaru parecía tener la mente en otra parte. Hasta que llego ese momento de la reunión en donde se supo la verdadera razón del encuentro.​

- ¿Recuerdan esa vez hace años – se le ocurrió decir a Sota, solo para molestar a su hermana- cuando Kagome fue al campamentos de gorditos y cuando se quiso escapar la atraparon?

- No me quería escapar – se defendió Kagome, no podía estar mas ruborizada, sobretodo por que Inuyasha la veía con cierta “risita”- había… una ardilla estacada en la reja y solo quise salvarla.

- De seguro y querías comértela – continuo diciendo Sota-

- No molestes a tu hermana, Sota – intercedió la Sra. Higurashi-

- Oh, gracias mama, que oportuna – dijo Kagome sarcásticamente-

Inu no y Eri se miraron el uno al otro. Era la hora.
- Dado que estamos todos reunidos en estos momentos – dijo el Sr. Taisho- Eri y yo quisiéramos decirles algo.
Kagome, Inuyasha y Sesshomaru se miraron los unos a los otros. Y se quedaron aun más sorprendidas al ver que sus padres tenias sus manos juntas en la mesa. A ese punto ya sabían lo que pasaba, ¿Qué más podía ser? Solo esperaban la “confirmación”.

I
nu no y yo hemos estado saliendo durante los últimos meses – termino por decir la Sra. Higurashi-

Ayer estuvimos platicando al respecto – dio el Sr.Taisho- y hemos decidimos casarnos.


Hubo un silencio sepulcral en toda la casa. Ambos padres esperaban las reacciones de sus hijos.

Sesshomaru y Sota no tenían problema alguno, por otro lado. Inuyasha y Kagome… ¿ahora resultarían ser hermano? Era lo que faltaba.


- Cuando dicen que se van a casar – pregunto Kagome completamente ida- es decir, ósea… que… ya saben, ¿serán como marido y mujer?

- Pues… si – respondió Eri extrañada por la pregunta de Kagome-

- Y se van a casar – siguió la pelinegra- ¿así como lo hace todo el mundo… en una iglesia o civil y todo eso?

- Exacto – respondió nuevamente la Sra.Higurashi-

- Y además – continuo Kagome, ya todos la estaban mirando raro- van a… ya sabes, vivir juntos así como pareja ¿no?

- Si, Kagome.

- Y de seguro todos nosotros también viviremos juntos, ¿cierto?

- Exacto…

- Interesante – termino por decir Kagome-

- ¿Sesshomaru, Inuyasha? – pregunto el Inu buscando una respuesta de sus hijos-

- Yo… - dijo Sesshomaru- me alegro por ti, te lo mereces.

- Si… yo - respondió Inuyasha- pienso lo mismo.

Sin embargo, la situación no le agradaba para nada.

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::​

La pelirroja acomodaba su cabello en el espejo que se encontraba al lado de la habitación. Lo que acababa de hacer no decía lo mejor de ella… y no se arrepentía de ello. Sonrió maliciosamente al pensar lo que haría a continuación.

Bajo a la fiesta y sigilosamente cogió una de los abrigos que encontraba en el perchero. Subió a la habitación y si que el se diera cuenta tiro el abrigo a una esquina de la cama. Rio estaba sentado al borde la cama, pensaba, que tal vez lo que acaba de hacer con Áyame estuvo mal. “Pero ella se lo merece”- pensó-

- Ya me tengo que ir – le dijo Áyame, mientras que sentaba sobre el- pero…. ¿este no será nuestro ultimo encuentro, cierto...? Yo te llamare.

- Eso espero…

Áyame salió rápidamente de la habitación, no le convenía que nadie la viera y en segundos ya se encontraba fuera de la casa.

Rio procedió a levantarse de la cama y vestirse por completo. Justo cuando se ponía los pantalones pareció haber odio a Koharu, y era la misma.

Te oí – dijo Koharu alegremente mientras entraba a la habitación- ¿Qué haces aquí solo...? mejor ven...

Calló al ver que su novio se encontraba semidesnudo y poniéndose sus pantalones. Era obvio pensar que…

- ¿Qué…? –pregunto la chica con su voz quebradiza - ¿que hiciste?

- ¿Qué no es obvio? – le respondió el descaradamente, con desprecio-

Koharu permaneció unos segundos en silencio, en lo que no puedo evitar romper en llanto. Solo se digno a preguntarle algo.

- ¿Quién es ella?

- No es nadie Koharu, además, ya se fue. Y si me disculpas, yo también.

Ya cuando estaba completamente vestido le paso por un lado chocando con el hombro de Koharu y se fue de la fiesta. Lo hizo a propósito.

Ella se quedo allí, parada, sin saber que hacer. Y fue cuando reconoció el abrigo que se encontraba en el piso. Sabia de quien era, y al pensarlo bien, todo tenia sentido.

Abi – se dijo a si misma mientras apretaba el abrigo con todas sus fuerzas-

Bajo rápidamente a la fiesta y casualmente se la encontró, estaba sola aparentemente mandando un mensaje de texto.

- Eres la más grande zorra que haya conocido ¿sabias? – le dijo a Abi, de repente, la pelinegra no puedo evitar sorprenderse y a la vez ofenderse por el insulto, sin embargo mantuvo la calma.

- ¿Disculpa? – pregunto Abi-

- ¡Te acostaste con mi novio! – grito Koharu-

Al oír esto Abi se sentía muchos mas confundida. Y para colmo, todos en la fiesta oyeron el “anuncio” y en segundos ya ambas tenían una multitud alrededor.

- ¿De que rayos hablas, Koharu? - pregunto la pelinegra, a este punto a ya se encontraba del mismo “animo” que Koharu- apenas si los salude hoy

- No seas descarada – le tiro el abrigo a Abi, la pelinegra lo recogió puesto que sabia que era de ella- encontré tu abrigo en la habitación, Abi, además no te faltan motivos para hacerlo, mosquita muerta.

- ¡Ya me canse de ti, Koharu! – le grito a su ex -amiga, ya había perdido los estribos- ¿te crees la muy cool haciéndole la vida imposible a todo el mundo? ¡pues no! ¿y sabes por que? Por que todos te ven como una estúpida resentida, que tiene una vida tan vacía que…

Una cachetada por parte de Koharu fue suficiente para callar a Abi. Todos a su alrededor rieron por eso. Abi no podía sentirse peor.
- Fuera de mi casa – le dijo Koharu calmadamente-

- ¿Qué acaso...?

- ¡Fuera de mi casa! – le grito nuevamente Koharu-

¡Hey, Abi! – la llamo una chica que se encontraba atrás de ella, al voltearse, una rubia “vacio” su vaso de refresco en la cara de Abi, nuevamente, todos se rieron de la pelinegra. En ese momento no pudo más.

¡Vete al demonio, Koharu! – Grito con todas sus fuerzas mientras salía por la puerta de la casa- ¡Váyanse todos al demonio!

Se sentía tan desesperada, humillada, que solo opto por tomar su Porshe e ir a donde primero se le ocurriera. No quería ver a nadie, así que pensó salir de la ciudad, y así lo hizo. De un momento a otro se encontró en una carretera en donde solo veía arboles a su alrededor. No tenia ni idea en donde estaba.

Vio venir un gran vehículo de carga pesada y ni siquiera lo pensó. Piso a fondo el acelerador y se le atravesó a este. El pequeño carro impacto con el gran vehículo y en segundos el Porshe ya se volcaba por la carretera y en un punto cayo por un extenso barranco. En el proceso la chica no pudo haberse golpeado más y cuando el vehículo cayo finalmente el cuerpo de Abi impacto contra el parabrisas. Se desangraba, tenia graves heridas y estando sin ninguna ayuda… sucumbió en poco tiempo.

Continuara…

^^^^^^^^^^^^^^^^^^^​

Tiempo sin leerlas! bueno, despues de años decidi continuar el fic xd, y ps espero esta si llegar al final. como se habran dado cuenta este capitulo no tuvo mucho que ver con los personajes principales si ni con romance, en el proximo si me ocupare de la situacion de cada parejas y ps... de como seran las despues de que todo lo que paso en el cap. Espero dejen sus comentarios.​

Miley,jb ::rosa::​

 

Re: Los Ricos y Populares de New York (SanxMir) (InuxKag)

Los Ricos y Populares de New York.
Cap. 13: Cuestiones de amor.​

************************​

Tomaba y tiraba su teléfono a su cama a cada momento, pensando en si llamarlo o no, el le dijo que la llamara ese día si se encontraba sola, ¿pero no parecería desesperado? “Llamare solo para desearle Feliz Navidad” - dijo Sango-

- ¿Sango? – respondió el – estaba a punto de llamarte.

- ¿Si?

- Ve por tu ventana…

Ella lo hizo y, para su sorpresa, el susodicho se encontraba al frente de la mansión.

- ¡Miroku! – le grito ella desde su ventana, ciertamente estaba feliz- ¿desde hace cuanto estas ahí?

- Justo acabo de llegar – le respondió el- ¿quieres salir?

- ¿A donde...?

- No lo se… ya veremos.

- Acepto, entonces – le respondió Sango sonriente-

Después de dejarlo entrar a la casa, y cambiarse ella, pudieron hablar.

- ¿No ibas estar con tus padres hoy...? – le pregunto Sango a el chico-

- Pues si, pero – dijo el riéndose- las charlas de mis padres no son lo mejor del mundo y pues, quería venir a verte hoy.

- Tenemos varios días sin hablar, ¿no?, supongo que Rin y Sesshomaru nos han robado tiempo.

- ¿Rin? – respondió- si te digo la verdad nunca me cayo tan bien…

- ¿Y no era tu novia?

- Supongo que estaba mas pequeño – dijo el en broma- no sabia lo que hacia. Sango – dijo de improvisto- ¿quisieras ir a mi casa… un momento?

- Pues claro -respondió ella enseguida- ¿hay algún motivo en particular?

- Ya lo veras – fue lo único que dijo Miroku-

**********************​

- ¿Desde cuando las cosas empezaron a cambiar de esta manera? - se “dijo” Kagome a ella misma-

Estaba en el gran jardín de la Mansión Taisho sola, era tal vez el ambiente tan tenso lo que la hizo querer estar “despejada” un momento.

- ¿Pudiste haberlo disimulado un poco mejor, no crees? – le pregunto en broma Eri a su hija, al tiempo que ponía su mano en el hombro de esta-

- Creo que si – respondió Kagome- se que bien que no reaccione como debería, es solo que… estoy es muy raro para mi.

- Lo entiendo – dijo Eri compresivamente- sobre todo por lo que tu padre...

- Mama – intercedió Kagome- tu bien sabes lo mucho que te quiero, y solo quiero verte feliz, yo fui testigo de cuando sufriste por la muerte de papa…. Y – añadió Kagome- si el estar con el Señor Higurashi te hace bien, entonces a mí también.

- Gracias – le dijo a su hija mientras acariciaba su cabello- ¿No quieres ir adentro? Mira que estamos pasándola muy bien-

- Si, claro… en un momento voy.

- Muy bien-

Inuyasha estaba por las cercanías y no puedo evitar oír la conversación, el también tenia cosas que hablar con Kagome, así fue a donde ella en cuento se encontró sola.
- De seguro tú tampoco te lo esperabas, ¿cierto? – le dijo a Kagome-

- No, para nada-

La chica tenía su cabeza baja, tratando de ocultar que estaba prácticamente a punto de llorar.
- Kagome – pregunto Inuyasha preocupado- ¿Qué te pasa?

- No es nada, es solo que…. – mientras hablaba limpiaba las pocas lagrimas que había en su rostro- me han pasado tantas cosas últimamente, ¡Kikyo es mi hermana! – exclamo ella con cierto altero- y se si decirlo o mas bien a quien decírselo, y ahora… resulta que serás mi hermanastro ahora.

- Es cierto… y no te preocupes – le dijo a la pelinegra mientras tomaba su mano- ya no intentare nada contigo, se que…

- Es eso precisamente lo que me molesta mas – interrumpió Kagome-

- ¿A que te refieres…? – pregunto Inuyasha confundido-

- Me refiero a que – explico ella- tú y yo rompíamos y volvíamos a cada rato, sin embargo nunca me sentí preocupada por que sabía que tarde o temprano estaríamos juntos de nuevo. Pero ahora…

- Entiendo – dijo el- yo te quiero Kagome, nunca he dejado de hacerlo, pero tienes razón. Supongo…

Un beso por parte de Kagome callo a Inuyasha al instante. Si, se le hizo extraño al momento que ella lo hiciera, pero no pudo evitar corresponderle. Ambos revivieron en ese momento el tiempo en los que eran… felices.

- Que este – dijo Kagome mientras acariciaba con sus manos las mejilla de Inuyasha- sea nuestro ultimo beso, ¿si?-

El no dijo nada, simplemente se separo de ella y volvió al interior de la casa. Mientras que Kagome veía a este irse, lagrimas corrían por sus mejillas.

*********************​

Miroku había llevado a Sango a su mansión. La castaña saludo a los padres del pelinegro y estos parecían totalmente cómodos con la presencia de Sango allí. Después de un rato de platico Miroku la llevo a Sango a la Azotea de la Mansión. Esta parecía el loft de un lujoso hotel. Esta completamente cercada y en ella se encontraba una piscina de tamaño mediano y un bar. También había varios bancos en ella, uno en el cual Miroku invito a sentarse a su amiga.

- Esto es muy lindo aquí – decía Sango-

- Si – respondió Miroku- aunque si soy sincero al principio me asustaba venir aquí...

Sango rio por el comentario

La vista era increíble. Desde esa altura se veía toda Nueva York, y los edificios, casas engalanados de Navidad. También desde hay se veía claramente el Empire State, los focos de este tintinaban en Rosa y Morado, “casualmente” estos eran los colores favoritos de Sango.

- Vaya – exclamo- son mis colores favoritos, te juro que nunca lo había visto de esos colores…

Miroku permaneció callado, pero con una sonrisa “conspiradora” en el.

- Sango… ¿puedo hacerte una pregunta?-

- Por supuesto-

- Se que tal vez no es de mi incumbencia – dijo Miroku- ¿pero algo entre tu y Sesshomaru...?

- No... – Sango se mostro algo feliz por la pregunta- ese beso fue algo de improvisto… y pues, ni significo nada. Y tu – añadió Sango- ¿tienes algo todavía con Rin?-

- Sabes que no – dijo Miroku- es mas, tus ya has de saber por que-

- No, la verdad – dijo Sango, sus mejilla estaban sonrosadas, no sabia por que- Y… - lo que iba decir fue interrumpido por un beso de Miroku-

Al principio sus labios se rozan con cierta timidez, ambos cierran los ojos pues quieren disfrutar de aquel beso, ella oprime un poco mas sus labios con los del joven, al poco rato él se separa de ella y vuelve a besarla pero con mas pasión, mientras que con sus manos toma su cintura. Por su parte Sango que tiene sus manos en el cuello del muchacho.

Ella se separa de él con la respiración acelerada y le dice: Miroku – le pregunto ahora mas sonrojada que nunca, sobre todo por que iba a preguntar- ¿Yo te gusto?

El tomo su mano, la miro de una manera picara y le respondió: “Me encantas”. Sango – siguió el- eres la niña mas hermosa que hay conocido y…

Ella puso uno de sus besos en los labios de el. Tu también me encantas – fue lo único que le dijo, después no puedo evitar besarlo de nuevo, prologando así el encuentro entre ellos-

*********************​

Días después​

El año escolar reiniciaba una vez mas, la noticia de la muerte de Abi había dejado en shock a todos en el instituto, unos sentían tristeza, otros culpa al recordar el trato que le habían dado el día en que falleció, y de esa manera. Áyame por su parte no sentía remordimiento alguno. “Que Koharu la trata así no fue mi culpa” – se decía a ella misma-

En la mañana, no estaba ni la mitad del alumnado en el colegio, Koharu se interno el baño, tratando de arreglar su maquillaje que se había corrido por las lágrimas. Desde que se entero de la muerte de su amiga no había parado de hacerlo, el estar allí le traía más recuerdos.

- ¿Qué paso, lloroncita? – le pregunto Áyame quien acababa de entrara al baño en ese momento-

- No te imaginas como me siento – dijo Koharu desolada, tenia sus ojos vidriosos- Abi murió y no pudo evitar pensar que es mi culpa-

- No tienes por que – respondió Áyame muy tranquilamente- esa alimaña se acostó con tu novio, ¿Por qué no ibas a decirle sus verdades?-

- No hables así de ella – le exclamo Koharu visiblemente enojada- Espera un segundo…. – añadió ella- ¿Cómo lo sabes…?

- Pues…. – la pelirroja hizo una pagina tratando de buscar una excusa- ¿Cómo no lo voy a saber? Todos andan diciendo por ahí el como la trataste, de cómo salió de tu casa, es mas , tienes razón, lo mas seguro es que todo lo que le paso haya sido tu culpa – le dijo a Koharu despiadadamente-

Koharu se sintió tan mal que ni siquiera le respondió. Así de mal estaba.

Áyame recibió un mensaje de texto. “Te espero en el cuarto de vestuario del teatro, no te imaginas que voy a hacer”. “Allá nos vemos, Kouga =)” – le respondió ella, una sonrisa placentera se vio asomo por sus labios-

- Oh, vamos Koharu – le dijo a la pelinegra- deja de matarte y vamos burlarnos de las perchas que algunas traen para acá, ¿si?

- Que mas…-

Una de tez palida, cabello rubio plantico y ropas de color pastel se encontraba en uno de los cubiculos del baño. "Ayame y Koharu conspirando" - se dijo a ella misma- "Esto les encantara a todos"

Saliendo del baño Koharu visualizo a la última persona que quería ver: Rio.

- ¡Rayos! – exclamo Koharu- con todo se me olvido que el estudiaría aquí.

Áyame palideció, de seguro Rio ya la hacia a varios kilómetros de Nueva York. El karma finalmente le había tocado…

Continuara​

 

Re: Los Ricos y Populares de New York (SanxMir) (InuxKag)

Los Ricos y Populares de New York.
Cap. 13: Nuevos problemas.

***********************​

- ¡Rayos! – Exclamo Koharu- con todo lo que paso se me olvido que el estudiaría aquí.

Áyame palideció, de seguro Rio ya la hacia a varios kilómetros de Nueva York. El karma finalmente le había tocado…

La pelirroja tomo a Koharu de la mano y se adentro de nuevo en el baño.

Obviamente, la pelinegra se extraño con el impulso.

- ¿Qué rayos que te pasa? – Pregunto Koharu-

- La humedad – fue lo único que respondió la pelirroja-

-¿La humedad?

- Si, Koharu… hay mucha humedad fuera y eso no le hace bien a mi cabello, ¿sabes? – fue lo único que se le ocurrió decir-

-Esta nevando, Ayame

- Bueno, ya que… será mejor dispersarnos, Sango y Kagome ya deben estar por llegar-

Koharu permaneció en silencio unos segundos, pensando algo. Tenía cierta incógnita desde hace tiempo y quería resolverla:

- Ayame, yo se bien que no soy las amigas de todas – pregunto la pelinegra con cierta nostalgia- y no puedo creer que defienda a esas dos, pero… tu si pareces serlo de Sango y Kagome, entonces, ¿Por qué les haces esto?

- ¿Sabes que? – Murmuro mientras ponía una mano en el hombro de Koharu- tienes toda la razón, no eres la mejor amiga de todas, así que no me vengas con sermones, ¿quedamos?

- Solo quiero saber por que actúas así, les has hecho mucho daño-

- ¡Y tu mataste a tu mejor amiga, Koharu! – la pelinegra ante el comentario se fragilizo mucho, no lo quería, pero sus ojos comenzaron a vidriarse- y ya deja de estar lloriqueando tanto – continuo Ayame- mira que los ojitos se te van a hinchar y así menos se fijaran en ti.

La pelirroja la miro de una manera burlona. Estaba siendo muy cruel, y lo sabia, pero el tener esa influencia en la gente la hacia sentir satisfecha. Simplemente no le importaban lo que otros sintieran.

Después de Ayame salir del baño, y dejando a Koharu sola, esta murmuro unas muy sentidas palabras. “Juro que me las vas a pagar”.

-Yo podría ayudarte – le dijo una chica rubia, que había oído toda la conversación-

******************************​

Como era de costumbre de costumbre Sango y Kagome llegaban juntas al colegio. Días anteriores ya había hablado de todas las “locuras” de su vida.

Sin embargo ese día seria diferente.

- Entonces – le decía Kagome a la castaña- ¿Se besan, se quieren, se aman, pero no son novios todavía?

-No por ahora – le respondió la castaña- solo queremos darnos un tiempo y hacernos la idea, pero créeme, no será por mucho…

- Me parece bien-

- Kagome – le pregunto Sango, cambiando de conversación- ¿Cómo ha seguido Kikyo?

-Igual – la pelinegra dio un suspiro- los médicos dicen que se encuentra bien, pero no saben con exactitud si despertara-

-No te preocupes, Kagome – le comento Sango mientras ponía una mano el hombro de su amiga- ¡Oh, mira!

Sango diviso a su antigua tutora en la entrada del colegio. Una mujer muy bella, tez blanca, cabellos negros al igual que sus ojos. Tenia una carpeta en sus brazos al igual que el croquis del colegio, lo miraba confusa, esta “perdida" en el colegio.

- Te presentare a la profesora Lilly – le comento Sango a la pelinegra-

-¿Lilly? – Pregunto - “Así se llama… ella” – pensó Kagome-

-Bueno, Lilian – corrigió Sango- es la mejor profesora de Lenguas que podrías conocer, ¿y te digo algo? Una de las cosas por la que la recuerdo es por que la encuentro parecida a ti.

-¿En serio? – Pregunto Kagome muy interesada-

-Aja – respondió la castaña- Ven – le dijo a su amiga mientras tomaba su mano, casi jalándola- vamos a saludarla…

Sango se acerco a la profesora y le dijo:

-¿Necesita ayuda con eso?-

-¡Sango! – Exclamo Lilian al ver de nuevo a su ex alumna- ¿Cómo te ha ido?

- Bastante bien – le respondió Sango- ¿Y usted?

Kagome solo oía la conversación de ambas. Y miraba a la maestra, era cierto, ambas tenían mucho parecido, y no sabia por que aquella mujer le producía tanta confianza, como si ya la conociera.

-No esperaba verla tan…. – comento Kagome-

-¿Perdida? – Interrumpió “graciosamente” Lilly-

-Iba a decir joven – dijo la pelinegra- Kagome Higurashi, mucho gusto-

-Lilian Kenji, bueno, puedes llamarme Lilly – Kagome palideció ante esta respuesta-

No podía ser… No, no puede ser – pensó Kagome- debe ser casualidad, una gran casualidad-

***********************

Como poder, recuperar tu amor, ¿como sacar la tristeza de mi corazón?
Mi mundo solo gira por ti, como sanar, este profundo dolor
Siento correr por mis venas tu respiración, estoy tan conectada a ti..​

Kagome decidió no entrar a la primera clase, se fue a uno de los bancos que había en el campus del colegio, aquel lugar siempre era el mas tranquilo, solo había césped y arboles...

Que hasta en mis sueños te veo, sin ti yo me muero​

No se supone que el primer amor deba ser asi– pensaba-

Y este corazón que te robaste cuando te marchaste
Te marchaste con mis besos, con mis besos y mis sueños​

En ese momento lágrimas corrieron por sus mejillas, y es que nada parecía estar bien en su vida: No podía estar con Inuyasha, su hermana estaba en coma y tenia que cargar con el peso de mantener ese gran secreto. Y ahora esa mujer… esa mujer le producía una sensación extraña, y había notado que lo mismo le ocurría a Lilian…

Y este corazón esta latiendo, cada vez mas lento
Estoy siento en mis adentros, como el fuego no se apago..​

-Una chica tan bella no debería estar llorando – le dijo a Kagome un chico que la había visto en su situación-

-Supongo que no - le respondió Kagome mientras limpiaba sus lagrimas, sus mejillas se tornaron color rosa- Y… gracias-

- Es la verdad – el pelinegro se sentó junto a Kagome, esta al verlo de cerca, se dio cuenta de cuan atractivo era-

- Debes ser nuevo aquí, no te había visto-

- Si, comienzo a estudiar aquí hoy – respondió el también pelinegro- que maleducado soy, me llamo Rio Li-

- Kagome Higurashi – le respondió la joven con una sonrisa- espera un segundo… creo que si te vi una vez, con…. Koharu-

- Eran viejos tiempos – comento el- ya no quiero saber de ella….

- El joven de ojos verde miraba a Kagome. “Es muy linda” – pensaba, le había gustado enseguida-

-Se que apenas nos conocemos pero…. ¿quisieras salir el fin de semana? – pregunto el-

Kagome se quedo pensativa un momento, no acostumbraba a hacer eso pero…. “Pero no puedo seguir así” – pensó-

- Encantada – respondió ella con una sonrisa-

*******************​

Midoriko sostenía la mano de su hija, mientras que esta yacía en coma todavía. La visitaba todos los días, le llevaba, sus favoritas, y se colocaba a su lado, esperando que, tal vez, ella despertara.

- Hace días vi a Lilly – le dijo Midoriko a Kaede, la nana de Kikyo, que se encontraba junto ella-

- ¿Lilly? – Pregunto la anciana-

- Lilian, la madre biología de Kikyo – su tono de voz sonaba preocupado, casi con miedo- estaba de compras y la reconocí enseguida, se mudo acá, y… dará clases en el Pride-

- Dios mío – exclamo Kaede- ¿y que piensas hacer?-

- No lo se, no lo se- comento la pelinegra muy preocupada- además, no le he dicho la verdad a Kikyo, ni tampoco que tiene una hermana, y que ninguno de nosotros sabes quien es…

- Tengo mucha fe en que mi niña despertara pronto– dijo dulcemente mientras que “peinaba” con sus dedos el flequillo de Kikyo- y cuando eso suceda tendrás que decirle todo, tu hermana lo hizo con Kagome, así que tú puedes.

Midoriko asintió ante el consejo, si, iba no iba a ser fácil, pero tampoco era justo para su hija el ocultarle tal cosa.

Oyó un gemido por parte de su hija, también sintió como esta apretaba su mano. Kaede llamo a una enfermera enseguida. La joven abria sus ojos lentamente, como si le doliera. "¿Mama"? - fue lo primero que pronuncio-

***************************​

Ese día había práctica para las chicas, todas las porristas estaban en los vestidores. Ayame, quien también formaba parte del equipo, noto algo raro.

- Juro que este uniforme no me quedaba tan ceñido – decía mientras se veía en un espejo -

-Todas ganamos peso en Navidad, Ayame – comento Kagome-

-Yo no – respondió la pelirroja- Y este retraso no es normal tampoco – pensó-

-Tal vez sea la maldad, ¿no crees?

Kanna, una chica de mediana estatura, tez pálida, y cabello rubio platino había entrado a los vestidores e hizo el “elocuente” comentario. Todas se le quedaron mirando.

-¿Disculpa? – Pregunto Sango-

-Y pensar que todos la vemos como la pelirroja estúpida – continuo la rubia- craso, craso error…

- ¿Estas delirando, niña? – le exclamo Ayame muy ofendida-

- La única delirante aquí eres tú, además de una vil, vil traidora…

Continuara​

Notas finales del capitulo: este capitulo si estuvo algo corto, pero el próximo si será más largo (y mucho mas controvertido). Si bn las parejas principales son Sango/Miroku, Inuyasha/Kagome, en los próximos capítulos…. Bueno =) solo les dijo que este fic será “todos con todos” y habran parejas que ni se imaginan. Publicare el próximo cap muy pronto, les aviso :D
​

pd: La cancion se llama "Este Corazon" de RBD, es una de esas corta venas riri

 

Re: Los Ricos y Populares de New York (SanxMir) (InuxKag)

Ola =) Les quiero decir a todas las lectoras que, por ciertas razones, le dare fin a la historia muy pronto con solo unos 5 caps mas (se suponia que seria un Long-Fic). Pondre la proxima continuacion a mas tardar el viernes. Miley Li :rosa:

 

Re: Los Ricos y Populares de New York (SanxMir) (InuxKag)

Hola, aquí les dejo el capitulo =). Este en particular no tiene nada que ver con las parejas principales, por que lo que algunos cuantos puede no gustarle Xd. Además, contiene lenguaje ofensivo, pero muy leve, solo se los digo para no llevarme regaños… Bueno, espero que les guste el capitulo, trabaje mucho en el

_____________________________________________________

Los Ricos y Populares de New York.
Cap. 14: Graves Errores.
_____________________________________________________
​

– ¿Disculpa? – Pregunto Sango-

– Y pensar que todos la vemos como la pelirroja estúpida – continuo la rubia- craso error…

– ¿Estas delirando, niña? – le exclamo Ayame muy ofendida-

- La única delirante aquí eres tú, además de una vil, vil traidora…

Ayame comenzó a preocuparse, aunque por otro lado, ¿Qué podía saber Kanna? En todo caso, la rubia solo podía saberlo por una persona… “Koharu” – pensó - “Esta si me la pagas”

– Dicen que el silencio otorga – continuo la rubia, su tono era desafiante, burlón- Y has de saber a lo que me refiero...

El ambiente era tenso, incomodo. Tanto como Sango y Kagome, como el resto de la porristas miraban interrogantes a Ayame, esperando que al menos dijera algo en su defensa.

– No mi miren así, chicas – exclamo Ayame, “en general”- no hay que fiarse mucho de las becadas, en los barrios de donde aprenden todo tipos de cosas…

Kanna se vio muy ofendida por el comentario. Sin embargo respiro profundo, miro alrededor deteniéndose justo en donde estaba Sango, y le pregunto:

– ¿Cómo crees que llego tu diario a manos de Koharu? ¿Por arte de magia? – Le pregunto la rubia- deberías ver bien en quien confías.

– Explícate – exigió Sango, se veía que estaba enojada-

Ayame se sintió mareada. Todo le daba vueltas, y de un momento a otro cayó desmayada en el piso. Las chicas se encargaron de auxiliarla mientras que Kanna se esfumo por completo de la habitación.

La trasladaron a la enfermería en donde varios minutos después despertó. Kagome estaba allí con ella.

- No veo ninguna complicación – le decía la enfermera- ¿te has sentido mal últimamente?

- No, para nada – le respondió la pelirroja, su cabeza permanecía baja- he estado bajo estrés últimamente, ha de ser eso.

- De todas forma ve a tu especialista, para despejar dudas – continuo la enfermera- si quieres quédate descansando un rato, ¿te quedaras tu con ella? – le dijo a Kagome-

- Si, claro – respondió la pelinegra-

La enfermera dejo a Kagome y Ayame solas en la habitación. La pelirroja se mantenía con al cabeza baja sus manos juntas y con los ojos vidriosos. Kagome ya sabia que algo no estaba bien.

¿Le mentiste a la enfermera, cierto? – Le pregunto Kagome firmemente- ¿Qué pasa?

- Estoy muy mal, Kagome, y no se que hacer – le explico Ayame, quien estaba a punto de entrar en llanto-

- Pero, ¿Qué es lo que te pasa? – le pregunto Kagome compresivamente-

- Vomito mucho últimamente, me dan mareos… y tengo mas de una semana de retraso – Ayame se sintió apenada, ya Kagome debía saber a que se refería-

- Estas… -titubeaba la pelinegra- ¿estas embarazada? – Kagome no recibió respuesta de su amiga- Estas embarazada – afirmo la pelinegra-

- ¡No lo se! – exclamo Ayame, estaba claramente desesperada- no lo se, pero me temo que así es.

- ¿Y por que no te has hecho ninguna prueba?

- Por miedo, quizá... – la pelirroja dio un suspiro- no se que le diré a Koga.

- Te entiendo, ya de por si tener novio es algo estresante… - le dio la razón Kagome-

- ¿Koga y yo? La verdad que no tenemos una relación como tal, nosotros solo… - callo en ese momento, no iba a decirlo explícitamente- Ya sabes…

- Entiendo, de todas formas, si quieres hoy mismo yo te acompaño a hacerte una prueba al medico, ¿si?

- No, no hace falta – interrumpió Ayame- gracias de todas maneras.

_____________________________________________________​

Sango vio al ojiazul sentado en una de los banquillos del campus, se acerco por el “por detrás” y puso ambas manos en los ojos del joven:

- Adivina quien soy… - le dijo al joven, este ay sabía que era Sango, así que le siguió el juego-

- Déjame ver - comento el joven pensativo- voz aterciopelada, manos suaves… ¡Megan Fox!

- Si, claro – Rio Sango, quito sus manos de los ojos del joven y se coloco frente a el-

- O una hermosa porrista, iba a decir – añadió Miroku, en vista de que la castaña tenía puesto su traje de animadora- ¿A que se debe el honor de tu presencia…?

- Tu ya sabrás para que es – le comentaba mientras se sentaba en las piernas del pelinegro, y ponía sus brazos alrededor de su cuello-

- Creí que me habías prohibido los besuqueos – comento mientras se reía- ¿Cierto…?

- ¡No es eso, tonto! – Le aclaro, claro que sabia que era en broma- mis padres viajaran el fin de semana, ¿quisieras ir al Plaza un rato...?

- ¿El sábado? – Inquirió- de verdad quisiera, pero tengo un viaje a Boston…

- Tendré que decirle a Kagome o Ayame, entonces, ahh y… - Sango se acerco al chico y le dio un corto pero dulce beso, Miroku quedo alucinando- lo de las reglas era en broma.

El pelinegro sonrió complacido ante el comentario de su…. ¿novia?

Kagome, al salir del colegio, recibió una llamada de su madre contándoles “las buenas nuevas. No dudo en ir a su casa rápidamente, cambiarse, e irse rumbo a la clínica. Quería decirle la verdad a Kikyo, sin embargo no sabia como hacerlo todavía.

Al llegar ahí encontró a su tía en la sala de estar, y le comento que su prima se encontraba en perfectas condiciones. Tuvo una leve perdida de conocimiento al despertar, pero ya eso no era ningún problema. Kikyo había regresado y ahora mejor que nunca.

Al entra a la habitación de su, a decir verdad, hermana, no puedo evitarla darle un gran abrazo. Kikyo se estremeció ante la muestra de cariño y le correspondió enseguida.

- No sabes cuanto me alegra que este bien – le decía Kagome- ¿Cómo estas?

- Para haber estado más de un mes en coma – le respondió- diría que muy bien, a decir verdad siento como si lo estuviera estado por años, es como si me hubiera perdido tantas cosas…

- Muchísimas cosas la verdad, en poco tiempo vas a tener que llamarme Kagome Taisho, ¿sabias?

- ¿Qué? – Pregunto Kikyo muy confundida-

- Mi mama se casara con el Señor Taisho, así que…

- Lo siento, supongo que eso será un bache en tu relación con…

- No, no – interrumpió- Inuyasha y yo ya no somos nada, ya sabes, ya no siento nada por el y el nada por mí… así que no habrá problema alguno – Kagome noto una expresión de sorpresa y a la vez felicidad en el rostro de Kikyo- Mentira – pensó-

_____________________________________________________

La primera semana de clases había pasado muy rápido. Kagome iba a visitar a su prima todos los días, siempre había deseado una hermana, y ella la veía en Kikyo, que en realidad, lo era. Y procuraba no verse con Inuyasha en lo absoluto, le hacia daño el tenerlo cerca, y el también tenia esa sensación.
Kanna y Koharu pasaban cada vez más tiempo juntas, sin duda algo planeaban. Y todos iban a comprobarlo muy pronto.
_______________________________________​

The Plaza Hotel, 7:30 pm

Sango esperaba en la barra a Ayame, quien había acordado ir con ella a salir. Recibió una llamada de la pelirroja comentándole que no podía ir, sin embargo no le dio razón alguna.

- ¿Seguro que no puedes venir? – Le insistía Sango-

- Lo siento, pero es que tengo que hacer algo muy importante – le comento Ayame-

- Bueno, supongo que nos vemos el lunes.

Después de colgar la llamada miro alrededor, buscando que al menos hubiera alguien conocido cerca. Y así fue. Miroku y Rin estaban en una de las mesas del restaurante, solo hablaban, sin embargo a Sango se le hizo muy extraña la situación.

- ¿No se suponía que hoy debías estar en Boston? – Se decía a ella misma, estaba muy molesta, no tanto por que le había mentido, sino por que estaba Rin-

_______________________________________​

- ¡Pero es que no entiendo, cosito! – “cosito” era el nombre con el que “cariñosamente” llamaba Rin a Miroku, a el no le gustaba mucho el apodo- todo estaba bien allá en Boston, la distancia era nuestro único impedimento, pero ahora yo estoy aquí…

- Ya te explique todo Rin, y no me sigas llamando cosito, sabes muy bien que no me gusta… - le decía Miroku con cierto disgusto-

- ¿Además que puede tener Sango que no tenga yo...?

- Muchas cosas – le respondió el pelinegro- no creo que quieras saberlas
Rin le dio una mirada fulminante al ojiazul. Este solo le sonreirá, ella se retorcía por eso.

- Olvide mi teléfono, ¿me prestarías e tuyo? Le diré a mi primo que me venga a buscar.

- Yo también olvide mi celular – se adelanto a decir Miroku- además yo te traje aquí, deja que te lleve a tu casa.

- No, gracias, preferiría irme en un taxi.
Miroku se paro de su asiento, ya sabia que Rin iba a ceder.

- Estoy me recuerda a una escena muy especifica de Legalmente Rubia, ¿sabes? – Dijo la pelinegra, ciertamente enojada-
Miroku solo se le quedo mirando interrogante. Era cuestión de segundos para que…

- ¡Esta bien! – Se resigno la chica-

___________________________________________​

Sango vio como ambos se marchaban juntos, y si, le molesto mucho. No supo por que no quiso hacer nada, simplemente pidió un trago y respiro profundo.

- ¿Esperando a alguien?

Sango reconocía esa voz entre la multitud. Solo podía ser el.

- Sesshomaru… - le saludo ella- ¿Qué haces por estos lares?

¿De verdad acabo de decir “lares”?- pensó Sango-

- Es mejor que estar en la casa, muchas cosas pasan en la ciudad además – el tono del chico era misterioso, intrigante, así como su mirada- ¿Y tu? Sango Evans no es el tipo de chica que esta sola en el bar.

- Me dejaron plantada – respondió la castaña con cierta gracia- pero ahora solo quiero hablar con alguien…

- No soy de muchas palabras, pero aquí estoy

Sango pensó muy bien sus palabras, y no podía creer lo que iba a hacer pero…

“No tengo nada que perder” – pensó-

-¿Quieres ir a mi casa? – le dice de repente a Sesshomaru, no puedo evitar sonrojarse- estar entre tanta gente me abruma…

- Con todo gusto – el joven sonrió- “Es solo cuestión de tiempo hasta que seas mía de nuevo” – pensó-

__________________________________________​

Ayame solo miraba el techo de su alcoba, mientras estaba recostada en su cama. Pensaba en perspectiva todo lo que había hecho y…. “No he sido la persona mas grata ultimadamente” pensaba-

Y es que se había convertido vuelto alguien irreconocible. Cuando hacia sentir a mal a la gente, se sentía satisfecha, vigorosa, y no sentía sin culpa alguna del daño que de verdad podía llegar a hacer. Después sentía un remordimiento terrible, su vida se hacia vuelto así, un circulo vicioso del que no lograba salir.

Respiro profundo. Al ver su reloj se percato de que ya habían pasado varios minutos desde que se realizo la prueba, esta se encontraba en el lavabo, y la pelirroja palideció al ver el resultado. En ella estaban marcadas dos “rayitas”.

Tiene que ser mentira – el artefacto callo de sus manos- tiene que ser mentira…

_____________________________________________________​

La “ex pareja” había pasado mucho tiempo juntos en al Mansión Evans. Ambos estaban en el bar y, estando allí, decidieron “poner intensas” un pocos las cosas. Entre trago y tragos ambos se contaron tantos las alegrías como las penas de su vida. Claro, como era de esperarse, las cosas no terminaron bien. Ambos jóvenes estaban delirantes.

- ¡Ósea, hello! ¿Quién cree ese niño bonito para mentirme así? – Decía Sango, sin razonamiento alguno- nadie por mas lindo que sea, le hace algo así a Sango Evans, ¡nadie!

- Sanguito, bien dicen que no hay que confiar de los bostonianos – Sesshomaru también había caído en la tentación, y para ese momento todo su carácter serio y reservado, se había ido al olvido- además tu ya sabes que me tienes a mi, ¿no?

- ¡Pues claro! – El timbre de la mansión llamaba y espabilo a la castaña- ¡Llego la pizza!

Salió corriendo a la puerta, y le abrió al repartidor a domicilio. Este se dio cuenta del estado de ebriedad de la chica y a decir verdad, se asusto un poco.

- Son 20,5 $ - le dijo a Sango al tiempo que le entregaba la encomienda-
La joven tomo la pizza, la puso en la mesa de al lado de la puerta y “le dio las gracias” al repartidor. Le dio un beso en la mejilla y le dijo:

- Usted señorito, hace un buen trabajo. Ahora váyase de aquí – y le cerró la puerta-

- Sango, ¿si le pagaste al señorito, no?

- Oh, no – exclamo la castaña- pues que importa, le pago mañana – la joven se le quedo mirando a Sesshomaru, como conspirando. Sesshy, ¿me llevarías a mi cuarto? Ya tengo sueño, ahh y – añadió- te llamare Sesshy por que ya ni me acuerdo de tu nombre completo...

- Esta bien, esta…. – no puedo terminar de decir la oración, ya que la chica se abrazo completamente a el, y le dio un muy inesperado beso-

El por supuesto se quedo aturdido por esto. La miraba interrogante.

- Me dieron ganas, ¿si? – Dijo mientras levantaba los hombros-

“Sesshy” llevo a la castaña a su habitación.

- Supongo que voy a mi casita – decía Sesshomaru-

- Ahh no, no Sesshy – la chica se acerco mucho a el y “lo empujo” a la cama, este quedo sentado en el pie de esta- además no quiero que te vayas solito, puedes hacerte daño...

- ¿Y que me propones…?

Sango se puso frente a el y se sentó en las piernas del chico. Hizo que este le agarrara la cintura y le propino un beso… uno apasionado. Justo en el momento en que ambos se separaron para tomar aire, la joven le dijo:

- Sesshy si… ¿si recuerdas esa vez que…? – Titubeaba Sango-

- como si fuera ayer – se adelanto a decir- Sanguito creo que ya se por donde vienes…

Ambos quedaron mirándose. Eran dos adolescentes ebrios en ese momento, y eso solo podría terminar de una sola manera…

- Tal vez tenga que darte un preview – le decía al chico mientras mordisqueaba suavemente el lóbulo de su oreja-

Lo que hizo después dejo perplejo a Sesshomaru. La castaña se paro y dejo caer su ligero vestido al suelo, quedando solamente en ropa interior. Roja, el color preferido de el. Solo pasaron pocos segundos antes que la atrajera a el y la acostara en la cama…

- Mañana no nos acordaremos de esto seguro – le dijo- pero vale la pena…
____________________________________________
La cita entre Rio y Kagome había sido muy placentera. Descubrieron que ambos tenían mucho en común y para ella fue un alivio la verdad, y hasta podría decir que le empezaba a gustar el chico. Al final de la noche la llevo a su casa, no sin antes despedirse…

- Eso fue muy divertido – decía Kagome, quien tenia un gran muñeco de felpa entre sus brazos- nunca había ganado una cosa de estas…

- Siempre hay una primera vez – se acerco a ella- de verdad Kagome, eres una chica muy especial…

El la miro con detenimiento por un momento. Se acerco mucho a ella, ya Kagome sabía lo que deseaba hacer. “Esto no es normal de mi parte, pero…”. La pelinegra se adelanto y le dio un corto beso a Rio. Se separaron por un momento, se miraron el uno al otro, y prosiguieron. Hasta que una voz muy conocida por la joven los detuvo…

- Buenas noches - Inuyasha había llego al acecho en ese momento, y se aproximo a la “pareja”-

- ¡Inuyasha! – exclamo Kagome, sonrojada por el hecho de que el la encontrara en esa situación- ¿Qué haces aquí…?

- Vine a preguntarte por Kikyo – el joven Taisho solo miraba a Rio con recelo - pero no hay problema, mañana mejor iré a verla yo mismo...

- Bien –miro en ese momento al joven pelinegro- Inuyasha, el es Rio Li, tal vez lo habrás visto en el colegio.

- Mucho gusto – extendió su mano, Inuyasha no lo correspondió, solo lo miro de arriba abajo- Bueno, supongo que nos veremos el lunes – comento amablemente-

- Nos vemos, Rio – le respondió Kagome sonriente-
Entonces se quedó solo, uno al frente del otro.

Continuara

 

Re: Los Ricos y Populares de New York (SanxMir) (InuxKag)

“Toda acción proterva que un ser haga, se convierte en un especie de boomerang, siempre volverá, y con creces….” ​

_________________________________​

Los Ricos y Populares de New York.​

Cap. 15: Momentos arduos.​

_________________________________​

- Sesshomaru, Sesshomaru…

Inuyasha ya hacia varios minutos que estaba vociferándole a su hermano, tratando de despertarlo, sin embargo este aunque se encontraba semi-despierto, no le hacia caso alguno. “¡Maldición, como me duele la cabeza!” – pensaba-.

- ¡Sesshomaru! – Exclamó Inuyasha- ¿Estas muerto o que?.

- ¿¡Que es lo que quieres?! – Le respondió finalmente a su hermano, estaba considerablemente enojado-
¿Y que haces en mi habitación?.

- No, eso esta en la planta de arriba – se rió - ¿Te acuerdas?.

Sesshomaru tuvo que mirar a su alrededor, para darse cuenta que en realidad estaba en la sala de estar y el, acostado en uno los sofás, “¿Qué rayos fue lo que hice anoche?” – pensó-. Inuyasha lo miró detenidamente por un rato, parecía dolerle mucho la cabeza y tener nauseas, aunque su hermano tratara de disimular que solo se encontraba soñoliento. No pudo evitar reírse y decirle la inevitable verdad:

- Vaya borrachera la que tuviste anoche – le comentó burlonamente Inuyasha- nunca hubiera pensado eso de ti…

- Ya deja de molestar y ve a hacer algo con tu vida, Inuyasha…

- Esta bien, esta bien, claro que- le dijo mientras fingía irse- eso no era lo que me decías anoche…

Sesshomaru lo miro de reojo, aquel comentario había despertado su curiosidad. Y es que a decir verdad, solo había recordado el estar con Sango en Plaza, de resto, estaba completamente en blanco.

- ¿Y que se supone que fue lo que dije anoche? – pregunto, haciéndose el desinteresado-.

- Déjame darte un memorando: llegaste como a las dos y media de la mañana, fuiste a mi habitación a decirme cuanto me querías, ahh y – comentó confundido- me pediste que hoy te recordara de pagarle al señorito de la pizza.

- Tiene que ser… - intentó decir Sesshomaru-.

- Y me obligaste a ver contigo Dora La Exploradora – terminó de decir, echándose a reír nuevamente- y desde ese entonces estas aquí tirado en el sofá.

- Inuyasha…. –le dijo a su hermano amablemente-

- ¿Si?

- Lárgate de aquí.

___________________________________________________​

- Señorita Evans…

Una de las empleadas tocaba insistentemente la puerta de la habitación de Sango, haciéndola despertar. “La cabeza me da vueltas"– pensaba. Salió corriendo al baño al sentir nauseas, de un momento a otro se encontraba con la cara en el retrete.

-Supongo que así es como se siente tener una resaca– decía mientras se recostaba en la tina, e iba durmiéndose de nuevo poco a poco- .

Se despertó al sentir como tocaban a la puerta nuevamente. Con considerable esfuerzo, llegó hasta la puerta y le abrió a Gladys, la “casi” ama de cada de la mansión. Esta se vio pasmada ante el semblante de Sango, pues, la joven, así solo estuviera en pijamas siempre mantenía un aspecto impecable. Ni ella misma se había dado cuenta de su aspecto: su cabello despeinado, el rostro pálido y ojeroso, y la pequeña pijamas que vestía toda mal puesta.

- Solo venía a decirle que el desayuno está listo – le dijo la empleada- ¿quiere bajar a comer o se lo traigo acá?.

- ¿Le puedo pedir un favor? – Sango puso sus manos en los hombros de la Señora- Tráigame… un vaso de agua, y una pastilla para dolor de cabeza, por favor.

- ¿Se encuentra bien? – le preguntó la mujer algo preocupada-.

- Es que, aquí entre nos - le murmuró mientras se reía- ayer me paso un poquitín de tragos y ahora tengo una resaca espantosa, y sería mucho pedirle si… Ya sabe, ¿no les dice a mis padres nada de esto?.

Gladys dudo por un momento, pero termino cediendo.

Después de un rato, comenzó a especular sobre lo que había pasado la noche anterior. Al igual que Sesshomaru, no tenia recuerdo alguno de lo que había ocurrido allí mismo y eso la tenia un poco abrumada. Una cosa si recordaba, y muy bien

- Miroku me debe unas cuantas explicaciones – se dijo a si misma, al poco rato cayó de nuevo en cama, se había quedado dormida nuevamente-

___________________________________________________________​

La Señora Higurashi se encontraba en una floristería de la ciudad, planificando parte de la boda.

- ¿Cuáles eran las flores que quería Rufus…? – Se preguntaba- No lo recuerdo…

- ¿Tendrán petunias? – Le pregunto una joven a una de las señoras que atendían el lugar-.

- ¡Petunias, cierto! – Pensó Eri-.

Al voltear, se quedo absorta al ver a la mujer que había hecho el comentario anterior. Se acerco a ella, y se dio cuenta que se trataba de la misma persona…

- ¿Lilly? ¿Lillian Kenji? – preguntó, aun sorprendida-.

- ¡Eri!, no sabia que estuviera viviendo en Nueva York – Exclamó la pelinegra, y le dió un gran abrazo- Dios mío, tenia años sin verla.

- Mucho tiempo, ¿y como has estado?.

- Diría que muy bien…– Lilly permaneció en silencio por un momento, dudando sobre lo que iba a preguntar- ¿Cómo esta… ella?

- Kagome – le dijo Eri, dejando sin habla a Lilian- así se llama…

- Kagome… ¿Kagome Higurashi? – titubeaba-.

- Si, es una joven muy inteligente y bella ahora – le comentó Eri con añoranza- y esta en la mejor secundaria de la ciudad, el Pride High School.

- Fue un gusto verla de nuevo…nos veremos otro día– dijo y salió precipitadamente del establecimiento, dejando a Eri muy confundida-

____________________________________________________​

Lunes. A mediados de las diez de la mañana en el Pride High School.

- Pensaba que tal vez podríamos ir al parque de nuevo – le comentaba Kagome a Rio, mientras caminaban por uno de los pasillos- ya que no me dejaste montar en ese de las tazas gigantes…

- ¿Ese en que el das tantas vueltas que terminas vomitando? – le dijo el mientras se reía- créeme, puede llegar a ser una muy mala experiencia.

- Supongo que tienes razón – intuyó Kagome- ¿entonces?.

- Tal vez una cena… romántica – le propuso- Tal vez en Plaza o Gustavino`s, ¿te parece?.

- Me parece bien – le respondió ella con una sonrisa-.

El timbre del Instituto sonó en ese momento.

- Tengo que ir a clase – le dijo a Kagome- ¿nos vemos en un rato?.

“Claro” – le respondió Kagome-. Antes de irse, el joven le dio un beso en la mejilla. La pelinegra dio un suspiro y quedo mirando como se alejaba, después de un momento sacudió la cabeza. “¿Qué me esta pasando?” – pensaba-.

- Conozco bien esa cara – le dijo de improvisto Inuyasha, llegando a donde estaba ella-.

Kagome solo miro de reojo y le desvió la mirada.

- Es la cara universal de “no me hables” – le respondió Kagome, sin mirarlo aun –.

- En fin – dio un suspiro- Koga, Bankotsu y yo iremos al Country Club el sábado ¿quisieras ir?.

- ¿El… el sábado?, esto es incomodo... – pensaba- De hecho – le dijo- voy a salir con Rio el fin de semana.

Inuyasha fingió no haberse molestado por aquello, lo contrario, se mostro amable.

- No hay problema – le comentó amablemente- es mas ¿te digo que seria una buena idea? Si quieres el podría el venir, no nos vendría mal… familiarizarnos.

- ¿A que te refieres?.

- La verdad, Kagome – le explicó el- es que nuestros padres se casaran en un mes, y dado que tendremos que vivir juntos, voy a tener que acostumbrarme a ver a ese adoquín, ¿me explico?.

Kagome se sintió algo rara ante la “explicación”. Tal cual parecía que a Inuyasha le daba igual que ella estuviera saliendo con otro chico, y aquello la ponía triste.

- Además, yo también llevare una cita.

- ¿En serio? – Preguntó sorprendida- ¿Y no me puedes decir quién?.

- Ya lo verás…

El chico se fue alejando de allí sin decir nada, esto dejo a Kagome algo enojada. Y su único impulso en el momento fue…

- ¡Inuyasha! – Exclamó-..

- ¿Algo mas? – respondió el-.

¡Rayos! ¿Y ahora que digo? – pensó la pelinegra-.

- ¿Qué significa eso de adoquín? - fue lo único que se le ocurrió decir-.

- Mejor búscalo en un diccionario…

__________________________________________________​

3 días a la semana las porristas forjaban práctica, y lunes era uno de ellos. Tras terminar, como es de costumbre, todas van a los vestidores a volver a su atuendo normal.

- ¿Te sientes bien, Ayame? – le dijo Sango a la pelirroja-.

La chica tenía una mano tapando su boca y sus ojos manifestaban zozobra.

- Vengo en un momento – dijo Ayame, tras ir con prisa en dirección al baño-.

- Me pregunto cuando tiempo tendrá – comentó Shima, una de las animadoras- Sango, te digo que ya deberíamos ir buscándole un reemplazo.

- ¿A que te refieres? – pregunto la castaña, confundida-

- Es bastante obvio, solo vino un día la semana pasada, le dan nauseas cada cinco minutos– a la conversación se unió Layla, otra porrista- Solo digamos que dentro de poco tiempo, Ayame tendrá que ir cambiando las falditas por pantalones elásticos.

Todas las chicas alrededor rieron por el comentario, menos Sango y Kagome, obviamente. Esta última permanecía en silencio, solo observaba la escena.

- No deberían estar apresurándose a los hechos – dijo Sango- además, no es muy bueno que estén diciendo cosas como esas, aparentemente aquí todo se sabe rápido.

- Sango, faltan pocos meses para las nacionales, salimos en Fox Sports todos los años – dijo Shima- y con una preñadita en el equipo, los jueces no verán nuestras rutinas ni muchos menos , solo estarán pendientes haber si tanto movimiento hace que tenga el bebe antes de tiempo.

- No puedes…

Kagome tomó a Sango del brazo y le dijo: “Ven un momento”. Y la llevó hacia fuera.

- ¿Qué pasa? – le preguntó Sango, algo asustada-.

- No quisiera darles la razón – respondió la pelinegra- pero puede haber algo de cierto en lo que dicen…

- ¿Ayame…? – Titubeaba la castaña- ¿Ayame esta embarazada?.

- No lo se, la semana pasado me dijo que podría estarlo y que se haría una prueba, pero no me ha dicho nada… aun así – continuó Kagome- esos mareos no son algo normal en ella…

Ambas quedaron en silencio un momento, pensando en la situación de su amiga. Unos sollozos arrebataron la atención ambas, unos muy cerca de allí. Y las dos sabían de quien provenían. Al indagar por las cercanías, encontraron a la pelirroja sentada en el césped, envuelta en lágrimas.

- No puedo creer que haya arruinado mi vida de esta manera – les dijo Ayame, sollozando-.

- ¿Entonces es verdad? – Intuyó Kagome-

- Si… no pude haberme mas pruebas, y todas resultaron positivas, después mi doctor me lo confirmó…

Ambas se sentaron al lado de la pelirroja.

- ¿Y que piensas hacer? – Le preguntó Sango, mientras ponía su brazo alrededor de la espalda de Ayame-.

- No creo estar lista para ser madre – murmuro- pero… pero… - trataba de decir, pero el llanto la detenía- no seria capaz de… hacerle daño.

- Sea lo que se que decidas – le comentó Kagome- sabes muy bien que puedes contar con nosotras.
Ayame sonrió levemente, y asintió.

- Tal vez esto no sea importante ahora – le dijo Sango- Pero… ¿Koga es el padre, cierto?.

- Por supuesto… - dialogó Ayame, dudosa-.

Pero la realidad era otra. Lo que empezó como una simple “venganza” termino cambiándole la vida por completo. Koga ciertamente no era el padre de su hijo, y ella lo sabía.

- “Y si solo supieras en el aprieto que esta tu noviecito, Kagome” – pensó -.

___________________________________________________________​

- ¿Dónde esta Ayame? – Le preguntó Sango a Kagome-.

Después de acompañar a Ayame a la enfermería un momento, ambas fueron a la cafetería.

-Tiene una evaluación de Física– le respondió- yo de verdad no se que haría si estuviera en su situación…
Sango permanecía en silencio, pensando. De un momento parecía estar en otro planeta. Kagome vio entrar a Miroku a la cafetería, este se sentó solitario en una de las mesas. El pelinegro miró a Sango por un momento, después desvió su vista.

- Deberías ir a hablar con el – le dijo a Sango-.

- ¿Para que? Además me ha ignorado todo el día, ¿si te diste cuenta?.

- Por eso, es obvio que pasa algo raro.

Sango asintió, y tomó el consejo de Kagome. Fue hacia donde estaba el pelinegro, y se sentó frente a el. Este solo se dedico a saludarla, después permaneció en silencio.

- Tengo que hablar de algo contigo – le dijo Sango-.

- Yo también, supongo que me querrás explicar el mensaje, ¿cierto?.

- ¿El… mensaje? – preguntó confundida-.

- Si, aquel que el domingo en la madrugada que me mandaron tu y… Sesshy – dijo el, tratando de ocultar enojo-

Sango palideció en ese momento. ¿Qué rayos le habré dicho a Miroku? – pensó-
Miroku coloco su teléfono sobre la mesa y dejo que ella escuchara el “controvertido” mensaje, Sango quedo atónita y avergonzada ante lo que oyó:

Buenas… madrugadas mi amigo de besos, Miroku, solo te llame para decirte una cosita, muy pequeña, y es que puedes quedarte con esa niña escandalosa, latosa y fea, ¿Cómo es que se llama? ¡Ah, si! Rin. Por que yo, niño bonito, estoy más que feliz con mi bello, hermoso y precioso Sesshy con quien… ¡ups! Acabo de hacer algo muy, pero muy indecente, ¿si me comprendes, no? Y pues, ya te dejo por que la noche es larga y tenemos una mansión entera para los dos solitos…​

Tras sonar el pito del celular, que indica que este ha terminado, Sango persistió en silencio. Estaba sonrojada a mas no poder, y algo pasmada, ya que tenia mas o menos una idea de lo que había pasado con Sesshomaru el sábado por la noche.

- Supongo que no tengo excusa, pero...– murmuró Sango- si estuve con Sesshomaru ese día fue por que te vi con Rin en el Plaza, cuando se suponía que debías estar en Boston.

- Hay una gran diferencia en todo esto – le respondió Miroku- y es que solo hable con Rin, y solo para romper con ella definitivamente.

- ¿A que te refieres?.

- Ese día llegue temprano de Boston y decidí dejar todo en claro con Rin, lo hice por que… – el joven dio un suspiro en aquel momento- de verdad me gustabas y quería que fueras mi novia, ya sabes… formalmente.

Sango sintió que un barril lleno de agua fría caía sobre ella, se sentía triste, apenada. No sabia que decir.

- ¿Te… te gustaba? – le preguntó Sango, triste-.

- No voy a negar que me gustas – le dijo el, igualmente triste que la castaña- pero así como no quiero estar con Rin, tampoco quiero estar contigo.

- Pero… - intentó decir Sango-

- Nos vemos en clase – dijo, y se marcho de allí, dejando a la castaña completamente sola y, ciertamentente, angustiada-

____________________________________________​

- De verdad mi promedio ha bajado mucho… Koharu veía un pedazo del papel, que contenía sus calificaciones recientes. Estaba en el campus, sentada en uno de los bancos completamente sola-

- Tal vez deberías preocuparte más por tus estudios, y dejar de ser tan promiscua…

Koharu se estremeció al oír aquella vez, aquella que conocía muy bien y que no oía desde hace unas semanas otras. Al voltear la vio ahí, tras ella, con una sonrisa.

- Abi… – dijo temerosa-. No, no puede ser… – sacudió su cabeza y bajo la mirada- estas muerta…
-Puede ser– le respondió, haciendo sentir escalofríos en Koharu- pero creí que te vendría bien una ayudita…

Koharu temblaba, y de un momento vio a su amiga sentada su lado, mirándola fijamente. Como la veía, era la Abi de siempre: vestía un abrigo corto color pastel, falda tipo escocesa en matices marrones, botines color beige, blusa de igual color, su habitual boina…. En fin, el atuendo de una típica colegiala neoyorquina, elegante como siempre.

- Durante mis últimos días contigo no hiciste mas que hacerme la vida imposible – le dijo Abi- y al final, fuiste tu quien causó mi muerte y por un estúpido que esta con otra en este momento…

- No me hables, solo vete de aquí – Koharu tenia los ojos vidriosos, por el miedo, tristeza, quizá-

- Se bien que no tiene amigas, por lo que vendré a visitarte habitualmente, ahh y – continuó- ya veras que vas a pagar todo lo que has hecho, ya otra persona comenzara a sufrir por sus errores en este momento…

Koharu oyó varios teléfonos celulares sonar en el ambiente, incluyendo el suyo. Fue a sacarlo de su bolso y al ver el mensaje, miró al alrededor y se percató de que se encontraba sola de nuevo.
Al principio del mensaje, había una foto de Ayame, vestida de animadora.

“¡Oh,no! Parece que una de nuestras porristas estrellas no presto mucha a “esa" clase de Biología… y es que la pelirroja supuestamente inocente pelirroja esta… esperando, si esperando, ya ustedes sabrán que. Al parecer la chica es si tan tonta como todos creíamos y ahora la pregunta es, ¿la dejaran lucir ese trajecito de animadora, así tenga una pancita que no le combine para nada? Ya lo veremos…”​

Continuara​