~ . En mi vientre, el hijo de un vampiro . ~[Espero que lean : )]

Re: ~ . En mi vientre, el hijo de un vampiro . ~[Espero que lean : )]

En mi vientre, el HIJO de un VAMPIRO
Capítulo IV

Hacia ya unas dos horas que habiamos llegado a ese sitio tan... extraño. Era 'el nido de los vampiros' como InuTaisho lo mencionaba. Yo estaba confundida y algo triste, muchísimas dudas corrian en mi mente.¿Porque pedí ir con ellos? Echaba de menos a mamá, y Kikyo ya habría dado la orden de buscarme.
Me encontraba en un cuarto muy grande, no os lo podreeis creer, pero éste cuarto es un reflejo de los de los castillos y palacios en la edad Media. Habían ordenado a Seshomaru vigilarme mientras se hacía la hora de la cena.
-Oye, ¿porque no puedo salir de aquí?-Yo no pedí venir hasta aquí para ser de nuevo una prisionera... El no me contestó.
-¿Porque eres tan frio?-De nuevo no obtuve respuesta alguna. Me estaba aburriendo muchísimo. Me lebanté de esa gran cama, y ví como esos ojos dorados se posaban enmí siguiendome a todos los recobijos donde yo iba de la habitación. Me puse a investigar y mirar cajones y armarios. Abrí un armario, ¡wooow! había un arpa gigantesta dentro de éste. La saqué.
-¡Mira!-Le sonreí a ese vampiro tan pálido y frio.-Cuando era pequeña yo tocaba este instrumento. Nosé si me saldrá ahora- Pasé mis dedos por esas finas cuerdas, y sonaron.
Cuando yo era pequeña tocaba ese instrumento porque mamá decía que emitía un sonido tan mágico que cada vez que lo hacia sonar obtenía más y más poderes mágicos. Yo me tragaba esas historias como el agua. La verdad esque éste intrumento si tiene un sonido mágico, es bonito, al cabo de un rato tocandolo observé que el vampiro que había estado todo el rato observandome se había quedado dormido. ¡Esa era mi oportunidad! Sabia que si salia de excursión por todo este sitio sería como dar una visita rápida a la edad Media y eso me emocionaba.
Mi materia favorita era Historia sin duda.
Salí con cuidado de la habitación, aunque antes tapé a Seshomaru con una mantita, me daba lástima dejarlo allí solo durmiendo. Lo que estaba viendo no podria creerlo, habían señoritas vestidas con larguisimos vestidos voluminosos de colores muy bonitos y sus peinados recogidos en moños y estilos así. Sin duda, era la viva imagen de la edad Media como ya había estado comentando. Además cuando me cruzaba con ellas me hacian una reberencia, ¡que educación! me encantaba el nivel de ese sitio. Estaba disfrutando plenamente, en la cocina me habían dado pastelitos y comidas muy ricas, me trataban como si fuera una princesa. Y cuando me veían sus expresiones eran de sorpresa y luego se inclinaban.
-¿Que haces paseandote por aquí?-Escuché una voz que me era familiar. Sonreí y me giré.
-Si salí de ese sitio era para no ser una prisionera, aquí no me vais a dar más de lo mismo-Le dije a ese chico, era Inuyasha. Se le veía tan hermoso, vestía con un traje precioso.
-Serás zoquete-Me insultó, yo no entendí.
-Ven te explicaré-Me dijo agarrandome de la mano, caminemos por los pasillos, fueramos donde fueramos la gente me miraba muy bien y me saludaba, y lleguemos a su habitación al parecer. Me dejó entrar y nos sentemos juntos en un pequeño balcón que tenía propio.
-¡Que bonito se ve el paisaje desde aquí!-Dije mirando, la verdad esque me alucinaba, se podía ver el mar, y ya había oscurecido, el cielo negro, con una luna medio borrada arriba del todo. Miré a Inuyasha que me miraba dulcemente.
-¿Que haces?-Le pregunté.
-¿Que hago?-Me dijo extrañado.
-No me mires-Me tapé la cara, avergonzada. Éste me quitó las manos de la cara.
-Nosotros te emos traido aquí pero necesitamos una excusa para que puedas quedarte. No pretendíamos que te sintieras atrapada allí, pero esque en la hora de la cena se anunciará tu llegada, y diremos que eres la hija de un rey vampiro que vive a kilometros de aquí-Me explicó.
-¡¿Como?!-Le grité.
-¡Pero eso me convierte amí en una princesa, y no solo eso, en vampiresa también!-La verdad esque me puse istérica. Por eso me miraba así todo el mundo, y me daban también toda clase de caprichos.
-Tranquila no tendrás que beber sangre-Me jaló del brazo hasta llegar a abrazarme.
-Yo cuidaré de tí. No te pasará nada. Además mi padre lo tiene todo controlado-Me sentía tan bien junto a el, pero también tan triste... me separé de el en seguida que pude.
-¿Que te pasa?-Me preguntó.
-Nada-Le contesté. Aún recordaba lo que había pasado en el lugar de los cazavampiros, y no lo iba a olvidar solo porque me fueran a tratar como una princesa en éste...
-Aquí tienes-Dijo abriendo su armario, me mostró un vestido muy bonito.
-Tienes que ponertelo para la cena-Yo alucinaba, ¡que bonito!.
-Es precioso-Le dije cogiendolo, me desnudé, y sí. Delante de el, no me importaba el que me viera si ahora en adelante ibamos a vivir juntos. Además algo me decía que había una especie de confianza entre los dos. Bueno, tampoco me saqué el sujetador y las bragas... solo la ropa. Me coloqué el vestido. Inuyasha me lo ató por detrás mientras nos veíamos en un espejo gigantesco.
-Te queda muy bien-Me dijo. Yo le miré con cara de inseguridad, yo nunca había actuado como una princesa... ni siquiera en ninguna obra del colegio... ese papel siempre le tocaba a Tomoko ¬¬.
-Ya es hora de que bajemos,Kagome-Me dijo ofreciendome su mano. Yo la acepté. Juntos bajemos hacia un grandísimo salón donde había una mesa tan larga que no os podéis imaginar cuantos metros tenía. Pues toda la gente que vivía en este sitio estaba sentada en ella. Un vampiro de cabellos largos y negros anunció mi llegada. Inuyasha en un murmuro me dijo que se llamaba Naraku.
-Señores, Señoras. Aquí llega junto a Inuyasha, la Princesa Kagome, hija del Rey Miroku-Todos los presentes se lebantaron de la mesa para inclinarse hacia amí. Ese tal Miroku si que debía ser importante... El padre de Inuyasha vino en seguida a sonreirme y a guiñarme el ojo. Luego sentí como le daba las gracias a Inuyasha por contarte el plan. Ví que Seshomaru también estaba ahí. ¡Que miedo! y antes yo le había echo eso y me había escapado del cuarto además... me miró muy serio y además fruioso. Inuyasha retiró una silla ofreciendomela para que me sentara y así lo hice.
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La cena concluyó en tres horas por lo menos, habían servido platos de todos los colores y formas que hayan, aunque lo que tenía más bien era una sed increible. Mi boca estaba seca de probar tantos platos, y yo, como princesa no podía rechazar ninguno. Amí la sangre no me gusta, más que nada, ¡porque no soy una vampiresa!. Así se lo dije a Inuyasha cuando al terminar la cena, estabamos en un especie de patio lleno de llerva.
-¡Lo sé, lo sé!-Me contestaba. ¿Si tanto sabía porque en mi copa había sangre? Me daban hasta arcadas.
-Bebe de ahí-Me dijo señalando una fuente, caía una agua cristalina, y no me importaba si estaba fria o natural, o si caliente, necesitaba agua. Bebí, estaba muy fria y buena, me alivié por completo.
-Dios, gracias-Dije mirando al cielo.
-Exagerada...-Murmuró Inuyasha. No le dí ninguna importáncia.
-Oye, ¿y vosotros conocéis a Miroku?-Le pregunté.
-No digas Miroku como si no fuera nadie-Me gritó. ¿Y yo que sabía?.
-No me grites-Le dije.-Y no me escupas... ¬¬-
-Miroku es el vampiro más viejo de todos. Es decir, el que ha formado ésta gran família de vampiros. Aunque tiene la apariencia de un adolescente de 18 años-Me contó. Alomejor ese hombre era guapo y todo.
-¿Y no le importará que yo me haga pasar por su hija?-Le pregunté.
-El no lo sabe tonta, pero si lo llega a saber, seguro que tampoco le importa-Me dijo.
-¿Y eso porque?-Le pregunté interesada.
-Porque eres bonita, y el es un mujeriego-Me explicó. Me empezé a reir, y éste me miró de golpe. Me parecía tan gracioso ese personaje que me descrivía, ojalá lo llegara a conocer algún día.
-Pero no creo que jamás lo veamos por aquí-Dijo sonriendome mientras veía como me reía.
-¿Por que?-Me entristecí un poco.
-Pues porque es un hombre muy ocupado-Me dijo.
Nos pasemos horas charlando, incluso fuí a su habitación para seguir hablando, hasta que nos quedemos dormidos. Pareciamos dos crios agarrados, acabados de ser derrotados por el sueño.
Al día siguiente nos lebantemos cansados, Seshomaru había entrado y nos despertó de una forma muy brusca.
-¿Que pasa hermano?¿Porque nos despiertas de ésta forma?-Preguntó Inuyasha rascandose los ojos.
-Primero, ¿que haciais para dormir juntos?-Dijo perplejo.
-¡Oye! Que solo nos dormimos porque nos quedemos hablando hasta tarde-Dije yo, no me gusta que se piensen cosas raras.
-Bueno... lo más importante es lo que voy a decir ahora-Dijo, yo estaba muy intrigada.¿Que demonios queria?.
-Miroku está aquí-Dijo.
-¿De veras?-Pregunté.-Menos mal que nunca llegaria a verle, eh, Inuyasha ¬¬- Le dije recordando la conversación de anoche.
-¡No puede ser!¿Que vamos a hacer?-Preguntó Inuyasha.
-Padre está hablando con el, a ver si acepta el plan... nosé si entenderá que esta humana está aquí solo porque queriamos salvarte atí. Poca cosa...-Dijo Seshomaru.
-Serás...-Susurró Inuyasha.
-Oye ¿que pasa?¿A caso no es una buena persona ese Miroku?-Pregunté.
-No lo sabemos, nunca le habiamos visto. Era un mito para nosotros, por eso te tratan así toda la gente-Contestó Seshomaru.
Miroku estaba en el mismo sitio que yo, tarde o temprano nos veriamos las caras. Conocería a ese personaje que Inuyasha me descrivió la noche anterior. Y solo podían pasar dos cosas:
Delatarme y morir a manos de todos los vampiros junto a Inuyasha, Seshomaru e InuTaisho.
O que Miroku aceptara el plan y entablara algún tipo de realación con el.









CONTINUARÁ...



Siento si he tardado en poner continuación, pero aquí lo tenéis!
Espero que os guste,
Besos a quien lo lea!

 

Re: ~ . En mi vientre, el hijo de un vampiro . ~[Espero que lean : )]

Bueno ya que me aburro pongo ya la CONTI. jajaja aquí tenéis y gracias por postear.

En mi vientre, el HIJO de un VAMPIRO

Capítulo V

Inuyasha y Seshomaru estaban muy tensos y nerviosos, me pegaban su estado, me estaba ennerviando. De repente la puerta del cuarto se abrió, dando paso al padre de los dos, y tras el, un hombre nuevo. Tenía los ojos azules, eran preciosos, su cabello negro, recogido en una pequeña cola y su cuerpo estaba bien formado.¿Quien sería?.
-Padre...-Dijeron Inuyasha y Seshomaru, al ver que entraba por la puerta acompañado de ese hombre.
-Hijos mios, Kagome...-Dijo mirando a sus hijos y luego amí.-Os presento a Miroku-Dijo éste, en seguida Seshomaru y Inuyasha se inclinaron ante el, pero yo me quedé igual que al principio.¿El, era Miroku? era bastante atractivo la verdad.
-¡Kagome...!-Me girtó InuTaisho, aseñalando que era de mala educación no hacer una reberencia.
-¡Oh!Lo siento, no estoy acostumbrada a ver a reyes...-Dije haciendo la reberencia.
-Me gusta ésta mujer-Dijo Miroku riendose a carcajadas, me calló muy bien la verdad. Me gustaban los hombres que se reían por poca cosa, que tenían buen humor.
-Anda, no tienes porque hacer eso si no quieres, Kagome. InuTaisho ya me ha informado de todo lo que pasa, pero no te preocupes. Tu serás mi hijita bonita-Me dijo acercandose amí y abrazandome por el hombro, aunque luego sentí que su mano descendía hasta posarse en mi trasero.
Por supuesto, le deí un bofetón que quedó una marca en su cara. InuTaisho y sus hijos me miraban temerosos por lo que pudiera decirme Miroku.
-¿Porque me mirais así?¿No lo véis?Miroku es una persona normal y corriente, ¡no os va a comer!-Dije animandolos a que entablaran amistad con el. Aunque se quedaron callados de todos modos.
Pasaron bastantes días, y yo seguia viviendo en aquel sitio. Miroku se quedó ahí, y los vampiros y vampiresas de ese lugar lo adoraban, al igual que amí, la Princesa, jajaja, la verdad esque me hace gracia. Llebava vestidos largos y preciosos, y era atendida como una princesa. Estaba feliz allí... aunque...¿Cuanto tardarian en saber que no soy una vampiresa?.
Me encontraba con Miroku en un puente, y me quedé pensativa.
-¡Kagome!-Me gritó.
-Sí, sí, yo también-Dije sin saber lo que decia.
-¿Tu también que?-Me preguntó extrañado.
-Perdoname, estoy algo distraida-Me disculpé.
-Ya lo he notado.¿Estás preocupada por algo?-Me preguntó dulcemente. Miroku era todo un caballero, podía ser un vampiro, seguro que arrebataba vidas... ¬¬ pero quizás algún día su negro corazón vaya a ser blanco.
-Esque añoro a mi madre, nosé que deberá estar haciendo, fuí una egoista... la abandoné-Dije con los ojos llorosos. La echaba tanto de menos, y pensar que por ella empezó todo...
-¿Dónde está ella?-Me preguntó.
-En el castillo de los cazavampiros...-Rompí en llanto, era tanta la presión. Además estaba hablando con un vampiro de que yo había sido aliada de ellos. Se quedó callado, me temí lo peor. Con lo bien que me había llegado a llebar con el, no quería que se estropeara.
-Podriamos ir a verla ¿que te parece?-Me preguntó secandome las lágrimas.
-¿Y como lo haremos?-Le pregunté yo.
-¡Bah...!Soy un rey. Podemos hacer lo que yo quiera-Me respondió. Rápidamente le abrazé, por la mala suerte Inuyasha pasaba por los lugares y nos vió. Sentí que se puso un poco celoso y lo abrazé todavía más para rabiarlo.
A la noche, cuando todos dormian, me vestí con un vestido negro, y me encapuché también de negro, al igual que Miroku. Me subí a su espalda y nos dirigimos volando hacia la mansión de los cazavampiros. Allí aterrizemos en el balcón donde salvaron a Inuyasha, y entremos por la ventana. Me dirigí hacia el cuarto de mamá, y cuando entré la ví allí, arrodillada en frente de su cama, con sus manos entrelazadas, rezando.
-Mamá-Susurré. Ella se giró, y se asustó muchísimo. Luego me quité la capucha y me dirigí a ella, Miroku también lo hizo. La abrazé.
-Pero hija...¿donde has estado este tiempo?-Me preguntó preocupada, abrazandome y besandome la cara.-¿Quien es?-Me preguntó mirando mal a Miroku.
-Se llama Miroku mamá. Tienes que escucharme-Le dije dirigiendo su cara hacia la mia con mis manos.-Kikyo ama a Inuyasha-Le conté. Ella se negaba a creerselo.
-Kikyo me ha cuidado y subido el animo cuanto tu desapareciste, en cambio... tu te has ido con éste hombre que no conocemos de nada-Dijo girandome la cara de mala manera. Mi corazón se estaba quedando hecho trizas.
-Mamá tienes que creerme. Los ví el otro día, besandose en su cuarto, por eso me fuí de aquí. Es una traidora, solo está enamorada de Inuyasha y lo quiere para ella, yo me fuí con InuTaisho y...-Mi madre me interrumpió istérica.
-¿¡InuTaisho!?¿¡Estás con InuTaisho!?¿Como puedes hacer eso?-La intenté tranquilizar pero no pude.
-Señora-Dijo Miroku, las dos lo miremos.-Lo mejor para Kagome es estar con nosotros. Y creo que usted también debería venir-Miroku... qu ebuena persona era... me acuerdo que se me iluminó la cara cuando dijo eso.
-Yo estoy bien aquí, con Kikyo. Lo siento. Si quieres ser uno de ellos adelante. Pero olvidate de que tienes una madre-Me dijo separandose de mí. Lo logró... me rompió el alma.
-Entonces vendré a verte en cuanto pueda-Le dije. Ella asintió. Al menos no me prohivia verla.

Desde aquella noche, gracias a Miroku, empezé a verla todas las noches, y ella iba comprendiendo porque estaba con los vampiros y no con Kikyo. También me contó, que Koga preguntaba mucho pormí, y que ella le contaba cosas y el se las callaba. En realidad, siempre pensé que Koga sería una buena persona.
Inuyasha empezó a darse cuenta de nuestras ausencias por la noche, y un día nos pilló por banda...
-Inuyasha atí no te incumbe-Dijo serio Miroku, dejando mudo a Inuyasha.
-No digas eso-Le dije a Miroku, me acerqué a Inuyasha.-Por las noches, vamos a ver a mi madre-Le susurré para que nadie oyera.Puso cara de sorpresa, se esperaba todo menos eso, creo... seguro que se pensaba que estabamos teniendo una aventurilla o algo así. Por que como el me dijo, Miroku es muy mujeriego, no niego que alguna vez me haya puesto la mano donde no debe pero siempre se la aparté acompañado de una bofetada.
-¿Así que era eso?¿Sin más?-Preguntaba.
-Sí, sin más-Contestó Miroku.-¿Que te pensabas de mí eh?-Preguntó.
-Ah... nada nada, bueno yo me voy de aquí...-Dijo disimulando Inuyasha, yo me reí. Y Miroku me acompañaba. Sin duda, éste se había convertido en mi mejor amigo. ¡Le queria tanto!.

Cuantos vuelcos da la vida en un instante, el día de hayer estaba en el instituto con Hoyo y mis compañeras de clase, y ahora estoy aquí, riendome con un vampiro... llamado Miroku, que se ha convertido en mi mejor amigo, y siendo la más feliz al lado de gente que parece quererme y adorarme. Tengo miedo de que todo esto acabe.








CONTINUARÁ...

 

Re: ~ . En mi vientre, el hijo de un vampiro . ~[Espero que lean : )]

Gracias por postear gente! Aquí pongo la continuación y espero que os guste.
Por cierto, me cuesta mucho eso de separar los dialogos porque veo que me queda como soso y lo quito x) bueno aquí lo dejo:

En mi vientre, el HIJO de un VAMPIRO

Capítulo VI

Acababamos de salir del salón donde comiamos siempre, la gente todavía no se imaginaba de lo que yo no era. Nos encontrabamos Miroku y yo en el balcón.

-¡Ay!Como odio comer ahí dentro en ralidad. Con esa copa tan grande y llena de sangre. Menos mal que tu la bebes por mí Miroku-Le dije sonriendole.

-Por tí todo, Kagome-Dijo mientras posaba su mano cerrada en un puño en el corazón.

Nos acerquemos a la barandilla del balcón para contemplar el paisaje, ¡que hermoso! si supiera dibujar, haria un dibujo de el. Entonces ví que Naraku, un vampiro que Inuyasha me dijo que se llamaba así días antes, se iba.

-¿Hacia donde va ese vampiro?-Pregunté extrañada. Ya hacia días que lo veiamos irse.

-No lo sé. Quizás tenga una novia humana por ahí-Me dijo bromeando, yo le hice burla para reirnos un poco.

Entonces se acercó Seshomaru hacia nosotros, parecía que tenía algo que decirnos. ¿Porque Seshomaru estaba siempre tan serio? La verdad esque no me lo explicaba. Entendía que fuera un vampiro, pero solo había que mirar a Miroku o a Inuyasha para comprender que no deben comportarse así por obligación. Habría salido a su padre, que éste tampoco sonrie nunca de forma sincera...

-Ha benido alguien-Dijo éste dirigiendose a Miroku.

-¿Quien?-Preguntó éste sin importarle quien fuera en realidad...

-Pues es...-Pero una mujer entró en el balcón interrumpiendo a Seshomaru, era bellísima, tenía el cabello negro y recogido en una cola que le llegaba hasta la cintura, y eso que era alta, sus ojos eran marrones muy oscuros, y vestía un traje de cuero que le marcaba todas las curbas. Luego unas botas negras y altas y cargaba con armas gigantescas, daba miedo en realidad. Iba acompañada de una especie de leona.

-A ver, ¿que pasa aquí?¿dónde está Miroku?-Preguntaba la mujer.

-Aquí me tienes. Presentate-Ordenó Miroku, aunque la mujer lo miró de reojo.

-¿Que te crees importante?-Preguntó ella. Ví como Seshomaru sacaba su espada para colocarla ágilmente en el cuello de ésta en plan de amenaza.

-¿Quien eres?-Preguntó Miroku, sorprendido a tal comportamiento.

-Vaya ya no te acuerdas de mí ¿eh?-Apartó la espada de Seshomaru ignorandolo, y se acercó a Miroku para agarrarlo del cuello de su camisa.
-¡Menúdo!¡Eres tan mujeriego que te olvidas de todas las mujeres con las que has estado!¡Mentiroso!Te dije que pagarías-Decía la chica.

-Oye haz el fabor de comportarte un poco. Miroku es un gran rey y una plebeya como tu no tiene derecho a...-Quería defender a mi amigo, pero ella me cortó.

-Éste hombre no es un gran rey, es un mujeriego, y eso debería bajarle toda la reputación que tiene. No la mereces simplemente. Y mide tus palabras, Kagome, yo soy una princesa pero real. No como tú-Me quedé helada.¿Sabia todo el plan?. Miré la cara de Miroku, era asustada, seguro que debería estar pensando lo mismo que yo.

-¿Sango?-Murmuró Miroku. Ella lo miró de nuevo al escucharlo.

-¿Ahora te acuerdas de mi nombre?-Preguntó, al parecer, Sango.

-¡Sango!-Miroku la abrazó, ¿quien debería ser esa chica que la abrazó?. Me sentí algo celosa de ella, ya que Miroku solo me abrazaba amí. Es mi mejor amigo jooo... :( Ví que la chica lo correspondía. Pues si que se deberían de querer...

-Ay no me dés estos sustos-Dijo Sango.

-¿Como voy a olvidarme de mi Sanguito?-Preguntó Miroku.-¡Has cambiado tanto!¿Y que haces así vestida?¿Que quieres, que te miren todos los hombres?Por dios-Dijo algo enojado.

-No me digas eso. Voy así vestida porque si no lo recuerdas dejaste a una organización protectora de vampiros allá de donde bienes para vivir aquí. Vine a por tí-Le dijo Sango cogiendole de las manos, como queriendo que se retirara con ella.-¿Por que te has quedado aquí, por cierto?-Preguntó.

Yo sabía perfectamente que Miroku se había quedado para hacerme amí el fabor... sabia que me sentiría sola si se retiraba aunque dudaba mucho que se fuera a quedar conmigo, teniendo a esa mujer tan perfecta a su lado queriendoselo llebar. Y con lo pervertido que es...

-Pues te presento a Kagome, y me quedé para cubrirla-Dijo biniendo y agarrarme por el hombro.

-¿Estás loco?Es una humana. No puedes cubrirla.¿Que dirian de un rey vampiro, si se enteran que cubres a una humana?-Preguntó la mujer. Sin duda, me estaba callendo mal.

-Les he dicho que es mi hija. Y es una buena chica, deberías conocerla, en pocos días he llegado a quererla-Dijo besando mi mejilla. Yo me sonrojé. ¡Te quiero Miroku! Gracias por cuidarme así.

-Bueno, ¿y entonces no vas a volver por una humana?-Dijo colocando sus manos en la cintura.

-Exacto, que benga la organización aquí conmigo. Por algo soy el rey, ¿no?-Dijo éste sonriendo, pero yo noté como esa mujer posaba sus ojos furiosos sobre mí.

Pasaron unos días, esa tal Sango se trajo aquí toda la organización. Todos iban igual vestidos que ellas, las mujeres con las botas altas, y de cuero, y los hombres senzillamente con gabardinas de cuero, daban mucho miedo. Supongo que ellos peleaban contra cazavampiros. Alguien llamó a mi cuarto.

-¿Quien es?-Pregunté, yo estaba en mi cama leyendo.

-Sango-Respondió la voz de una mujer.

-Ah, puedes pasar-Le dije dandole acceso a mi cuarto. Pasó me miró, y vino hasta donde estaba yo. Se sentó en mi cama y me miró seriamente.-¿Que pasa?-Le pregunté.

-Está bien. ¿Que es lo que te traes entre manos?-Me preguntó totalmente desconfiada. Yo fruncí mi ceño.

-Completamente nada, no sé que te has pensado demí-Le contesté dejando a un lado mi libro.

-Amí no me mientas eh niña, que puedo delatarte en cualquier momento-En realidad le tenía miedo, era verdad que podía delatarme cuando ella quisiera...

-Yo no te miento, estoy aquí porque salvé a Inuyasha-Le dije.

-Así que es eso...-Me dijo.

-¿El que?-Pregunté extrañada. Me miraba con una cara que no sabía identificar.

-Te gusta Inuyasha. Es eso, por eso quieres estar aquí-Me explicó.

-Ah... para nada. Inuyasha y yo somos solo amigos y...-Ella me interrumpió.

-Vamos no te hagas de rogar, te gusta pero no quieres admitirlo. Amí, mientras no toques a Miroku me da igual-Me dijo asintiendo y con los ojos cerrados. ¿Se pensó que yo tenia algo con Miroku?.

-Mira, Miroku y yo solo somos buenos amigos. El me ayuda bastante, y nada más. La verdad esque no me imagino teniendo algo con el-Le expliqué, por momentos podia ver que se volvia más amable conmigo.

-Te ayudaré con Inuyasha si quieres-Me propuso, pero yo para nada queria que me ayudara con Inuyasha. ¡No me gustaba!.

-¡Que no me gusta!-Le dije, pero ella reía. Yo me reí con ella.-¿Se puede saber que es lo que tienes tu con Miroku?-Le pregunté interesada.

-Pues Miroku y yo antes salíamos. Hace un mes que lo dejemos o así en realidad-Se acarició su barriga.-Y estoy embarazada de el-Me dijo cogiendo mi mano y posandola en su vientre.

-¿El lo sabe?-Le pregunté.

-No, quiero que sea un secreto, porfabor-Me pidió. Yo por supuesto la iba a guardar ese secreo, ¿como se debería sentir una embarazada de un vampiro?.

-¿Y como se queda una embarazada de un vampiro?¿O es igual que los humanos?-Le pregunté.

-Creo que debería confesarte algo-Me dijo mirandome seria. No entendía porque me miraba así.-Yo, Kagome, soy una humana-Me explicó. Me quedé de piedra, y a la vez me alegré tanto.

-¿¡En serio!?-Me acerqué a ella, ya no me sentía tan sola.-¡Como me alegro!-Le grité abrazandola.-Espero que seamos muy buenas amigas-Le comenté. ¡Genial!.

-¡Quieta!¡Quieta!-Me dijo quitandome de encima suya.-No te pongas nerviosa, voy a contestar a tu pregunta.Pues entre vampiros si que se reproducen como los humanos pero...-Se paró.

-¿Pero que?-Pregunté.¿Entonces como se reproducía un vampiro con una humana?.

-Tu puedes quedarte embarazada si te muerde uno de ellos, por eso no te conviertes en vampiresa si te muerden. Solo te dejan embarazada para que un nuevo vampiro nazca-Me explicó. Llevé directa mi mano a mi cuello, pero, también me habían mordido en un lado del cuerpo.-¿Que ocurre?-Dijo observando lo que me tocaba.

-Inuyasha y Seshomaru me mordieron.¿Que quiere decir eso?-Le pregunté asustada. ¡Ellos no me habían mencionado nada los muy...!

-¿Que dices?... dejame ver-Dijo acercandose a mi cuello.-¿Has sentido algo ultimamente?-Me preguntó examinandome.

-No-Le contesté.

-Entonces quizás ninguno te haya dejado embarazada...¿sabes que? si ellos te mordieron no pretendian dejarte embarazada, solo beber sangre. Pero a vezes hay accidentes. Espero que tu no seas uno de ellos-Me dijo, me dejó muy preocupada.

-Si estubiera embarazada, ¿de quien sería mi hijo?-Pregunté extrañada.

-No lo sé, el caso esque solo puedes tener uno. Y ya se vería de quien de los dos sería-Me dijo.

Espero no estar embarazada de ninguno de los dos, pues no quiero tener hijos y menos a la edad de 15 años... es de locos.
De momento no sentí nada como para estar embarazada, pero por lo que me contó Sango, tengo mucho miedo.



CONTINUARÁ....