de Inuyasha - Odias a los humanos, sin embargo te enamoraste de uno de ellos

Odias a los humanos, sin embargo te enamoraste de uno de ellos

Sesshoumaru hijo de un poderoso youkai que vivia en la región del oeste en china. Medio hermano de honyou Inuyasha. Que más podriamos decir de él además de que es hermoso, frío y serio. Además de que odia a los humanos, sin embargo hay una razón de ello y sucedio mucho antes de que él conociera a Jaken.


Capítulo 1. Las dudas se Sesshoumaru.

Era un hermoso día, Sesshoumaru y sus acompañantes estaban a la orilla de un río, como siempre Lin y Jaken trataban de pescar pero como siempre se tardaban mucho en hacerlo. Sesshoumaru estaba bajo la sombra de un árbol cuando comenzó a mirar a la pequeña Lin, le era tan familiar su rostro, la forma de ser, incluso de sonreir.

-"Ahora que la veo bien, Lin se parece a..."-Pensaba Sesshoumaru.-"No son tonterias ella no es quien yo creo"

Sesshoumaru se levantó y comenzó a alejarse de su grupo. Jaken miraba como se alejaba, siempre respetaba sus decisiones, pero ahora cuestionaba el ¿Por qué una niña humana los acompañaba?, sin embargo jaken no debía manifestar su inconformidad ya que podría costarle la vida.

Mientrás que Jaken pensaba, Sesshoumaru estaba bastante lejos de ellos, caminaba sin rumbo y observaba el paisaje, cuando una de las partes del río en la que había rocas, se dio paso la imagen de una joven parecida a Lin, con un ropas ligeras y lavaba dos espadas. Sesshoumaru quedó abrumado con la imagen tanto que tuvo que sentarse y cubrio la mitad de su rostro con la mano.

-Esa mujer.-Dijo Sesshoumaru.

Por otra parte Naraku estaba en las tumbas de las mujeres que fueron muertas años atras, algunas de ellas eran exterminadoras y mercenarias. Él escogio una la con un fragmento de la perla dio vida al cuerpo de aquella mujer. Cuando se levanto naraku la cubrió con la piel de mandril y se la llevo a su palacio.... Una vez estando ahí. Ella se vestía, mientras naraku le hablaba.

-Tú eras una de las exterminadoras más fuertes de tu tiempo.-Decía Naraku.-Ahora te dare un encargo.

Cuando ella amarro la cinta de su cintura, puso la funda de su espada , en silencio la saco y le corto el cuello a Naraku, para la no sorpresa de ella era una marionate.

-A mi nadie me da ordenes.-Dijo, para luego retirarse.

Naraku observaba todo desde otro lugar totalmente seguro, con el espejo de Kanna.

-Esa mujer se encargara de destruir a uno de mis enemigos.-Dijo al aire Naraku.

Regresando con Sesshoumaru, él estaba de vuelta con su grupo.

-Lin, has sido una buena niña?.-Preguntó a Lin.

-Si, señor.-Dijo Lin con su acostumbrada sonrisa.

Por el bosque aquella mujer caminaba, iba haciendo maneobras con las espadas, ellas giraban y pasaban junto a su cuerpo. Luego como si estuviera danzando giraba y movia las espadas. Dio un salto y cayo al suelo, se puso de pie.

-Parece ser que ese tipo aumento mi fuerza y habilidad.-decía mientrás guardaba las espadas en su funda.

Sesshoumaru y su grupo caminaban por ese mismo bosque hasta que se pusieron frente a frente.

-pero si eres..-Exclamo la mujer sorprendida.

-"Hinako"-Pensó sorprendido Sesshoumaru.

-Maldito youkai!.-Gritó enojada.-Te matare.Te matare!-Ella desenvaino las espadas y corrió hacie Sesshoumaru.

-Jaken, llevate a Lin lejos de aqui!.-Dijo Sesshoumaru desenvainando a Tokijin.

-Si amo.-Contestó Jaken quien monto a Ah-Un para salir volando.

-TENGA CUIDAD SEÑOR SESSHOURMARU.-Gritó la pequeña Lin mientras se alejaban.

La mujer miró a Lin algo sorprendida.

-!"Esa niña se parece....se parece a mí".-Pensaba para luego atakar a Sesshoumaru quien bloqueo su atake.


-Tu no deberias estar aqui.-Le dijo Sesshoumaru.

-Eso seguramente es lo que deseas, que este muerta!.-Le dijo la mujer.

Ambos se separaron.

-No sabes cuanto te odio.-Dijo Sesshoumaru apuntandole con la espada.

-Me odias? Yo deberia odiarte, después de todo no se puede confiar en una bestia.-Dijo ella poniendo las espadas a los costados.

-Por qué?.-Preguntó Sesshoumaru.-Si tú fuiste quien me abandono para casarse con otro.

Él se dirigió hacía ella golpeando la espada contra las de ella que usaba como escudo.

-Yo nunca te traicione, tú te fuiste antes del tiempo acordado!.-Gritó ella.


*****************************************

¿Quién es Hinako?
¿De dónde conoce a Sesshoumanru?

si quieres saberlo no te pierdas el prox. capítulo.

 

Re: Odias a los humanos, sin embargo te enamoraste de uno de ellos

Hola! espero no haberme tardado en contestar, bien pués aqui esta el siguiente capítulo!


Capítulo 2. El día en que te empece a amar.


Sesshoumaru tenia su espada contra las de Hinako. Ella sonrió de manera burlona y empujo a Sesshoumaru lejos de ella, ella se separo igual.

-Sigues siendo muy fuerte.-Dijo Hinako.

-Y tú estas muy confiada como para darte cuenta que he rasgado tu hombro.-Dijo Sesshoumaru guardando su espada.

Hinao miró su hombro izquierdo y efectivamente estaba sangrando.

-Es cierto.-Dijo ella con una sonrisa.-Mi cuerpo no estan resistente como el tuyo.

Sesshoumaru la miraba con repudio, odio y muchos sentimientos más de rechazo. Pero sabia que en fondo quizas no era así.

Hinako se sento en el suelo y se bendó la herida.

-ME gustaría saber, ¿por qué te fuiste antes del tiempo?-Preguntó Hinako mientrás se bendaba.

-Yo no me fui.-Dijo con su típica seriedad Sesshoumaru.-Tú te casate con un humano dejandome ¿Por qué iba a esperar a alguien que se olvido de mí?

En eso ella se pusó de pie y se dirigió hacia Sesshoumaru.

-Tú sabes que mi intención era estar con tigo, tal y como te lo prometí.-Dijo Hinako.-Veo que la cinta que te regale te quedo bien. Me alegra saber que aun las usas.

-Después de todo te prometí que nunca la dejaría.-Respondió Sesshoumaru.

Ella sonreia.... Pero una nube gris daría paso a una tragedia peor.....

Hinako sintío la presión de Naraku en el fragmento de la perla que llevaba en el pecho.

-"Demonios que me pasa?"-Se preguntó a si misma Hinako para luego caer al suelo.

Ella se levantó del suelo y sacó las espadas de su funda y apuntó a Sesshoumaru.

-Hinako ¿Qué te ocurre?-Preguntó Sesshoumaru.

-No, no lo se.-Dijo Hinako sin ser dueña de sus movimientos.

Ella nuevamente arremetió contra Sesshoumaru pero en un intento desesperado por no dañarlo se arrojó contra el suelo.

-Sesshoumaru.-Dijo entre dientes.-Matame.

-¿Qué?-Preguntó algo abrumado.

-Lo que escuchaste, que me mates.-Dijo Hinako poniendose de pie.*-Por favor...

-Si tú me lo pides.-Dijo Sesshoumaru desenvainando a Tokijin.-No te lo negare.

Sesshoumaru clavó su espada en el pecho de Hinako para luego sacarla. Ella cayó de rodillas y sangraba de manera alarmante.

-Gracias.-Dijo ella mirando al suelo.-Antes de morir, quiero saber algo. ¿Cuál es el nombre de la niña que montaba a Ah-Un?

-El nombre de la niña?.-Se preguntó Sesshoumaru.-Su nombre es Lin.

-Con que Lin.-Dijo casi entre suspiros.-Ella se parece mucho a mi cuando tenía su edad.

Después de decir eso Hinako se desvanecio convirtiendose en polvo....

-Ahora que lo pienso, Hinako y Lin tienen la misma sonrisa.-Dijo Sesshoumaru alejandose del lugar donde las cenizas se fueron.

Sesshoumaru se fue recordando justo el día en que conoció a Hinako.

***Flash back***

Sesshoumaru iba por un bosque, él era más joven y se veia indefenso. Estaba solo hasta que se escucho una voz de una mujer.

-Detente ahí bestia.-Se oye la voz de la mujer acercandose.

-Mujer, ya te dije que no fui yo quien mato a las personas de esa aldea.-Dijo Sesshoumaru amenazante.

-Ya se que tú no lo hiciste.-Dijo la mujer.-Es solo que...

En eso una flecha pasó cerca de ella hiriendo a Sesshoumaru en la pierna..

-No!-Gritó la mujer.

En eso varias voces se aldeanos se escucharon.

Ella se dirigió a Sesshoumaru y le ayudo a levantarse.

-¿Qué haces?-Preguntó alarmada Sesshoumaru.

-Salvarte la vida.-Dijo La mujer ayudando a levantarlo.-Si esas personas te alcanzan te mataran.

Sesshoumaru la miró algo extrañado, luego puso de su parte para levantarse y los dos se fueron de aquel lugar.

Más adelante había una cabaña abandonada. Estaban ahí Sesshoumaru y aquella mujer. Ella le limpiaba la herida a él.

-Esto puede doler.-Decía ella poniendo un paño con pigmentación verde en la pierna de Sesshoumaru.

-Eso huele horrible.-Dijo Sesshoumau tapandose la naríz.

-Si, yo se, pero es una buena medicina.-Dijo Ella haciendo presión.-Pero es una buena medicina.

Sesshoumaru la miraba con curiosidad.

-Cómo te llamas?-Preguntó él.

Ella sonrió.-Me llamo Hinako. Y tú?-

-Sesshoumaru.-Respondió él.-Gracias por cuararme....

continuara......

 

Re: Odias a los humanos, sin embargo te enamoraste de uno de ellos

Gracias por apoyar el FF y sus respues e inquietudes seran resueltas más adelante.


CAPÍTULO 3. Llevando una doble vida; la exterminadora de mosntruos Hinako

Hinako había curado a Sesshoumaru. Ella estaba paseando por el bosque, el viento soplaba de vez en cuando. Ella se sentó al pie de un gran árbo, estaba ahí sentada sin hacer nada, tenía junto a ella la funda de su espada miraba el cielo que era cubierto por las hojas de los grandes árboles. Era tranquilo hasta que.... Sesshoumaru se sentó a su lado.

-Hola.-Dijo él.

El viento solpló moviendo los cabellos de Hinako y Sesshouramu.

-Hola.-Respondió el saludo Hinako.-No pense que fueras a seguirme.

-Lo que pasa es que no me gustaba el olor a humano de la cabaña.-Dijo Sesshoumaru mirando a un lugar diferente.

-Dime.-Dijo Hinako acercandose un poco a él.-No será que no te gusta estar solo.

Sesshoumaru se puso de pie y comenzó a caminar lejos de ella.

-¿Qué pasa?-Preguntó la joven extrañada de su comportamiento además que no caminaba bien.-Deberías volver a la cabaña, tu pierna tardará en sanar unos dos días más.

-Tonterías.-Dijo Sesshoumaru.-Mi cuerpo no es como el tuyo, tardará menos.

-No, porque la flecha que resibiste tenía un veneno potente.-Explicó Hinako, mientrás se ponía de pie.-Además tienes que descansar.

Sesshoumaru la miró y cruzó los brazos.-Pués ya que. Volveré a la cabaña.

Sesshoumaru se fue y ella iba a avanzar cuando pisó algo.

-Pero qué.-Al mirar al suelo vio unas flores ella se inclinó y las tomó.-Será que Sesshoumaru me las dejo?

Al rato en la cabaña ella bendaba la pierna de Sesshoumaru. Él sintió un olor extraño que provenia de ella.

-Hueles a sangre.-Dijo Sesshoumaru.

-A sangre?-Preguntó Hinako.

-Si, hace unas horas no estabas.-Dijo Sesshoumaru.-Dónde estabas y qué hacias?

Ella termino de amarrar la benda y ...

-Me ire a dar un baño.-Dijo ella saliendo de la cabaña.

-Cerca de aqui hay un río.-Dijo Sesshoumaru cubriendo la pierna con el pantalón.-Puedo oler el agua.

-Gracias.-Dijo ella saliendo de la cabaña.

Al llegar al río se despojó completamente del Kimono que llevaba y se sumergió en las frías aguas del mismo. Después salió y estaba con la parte del cuello hacia abajo sumergida en el río.

-No puedo creer que se diera cuenta del olor a sangre.-Se dijo sí misma.-No pense en que su olfato estaba tan desarrollado.

Sesshoumaru la observaba desde una distancia prudente.

Al día siguiente, Hinako estaba en una aldea.

-Me llevare varias de estas frutas.-Le decía a un vendedor.

Cuando acabó de comprar salió de la aldea. Y un enorme cienpiés se acercó peligrosamente a la aldea. Hinako soltó la fruta y desenvainó la espada mostrando que era una espada doble, colocando una en cada mano. Ella juntó los mangos de la espada y la lanzó contra el cienpiés el cual cayó partido a la mitad. Ella se manchó con la sangre.

-Diablos.-Se quejó.

Los aldeanos se acercaron a ella y le dieron las gracias. A cambio de haber matado al cienpiés ella pidio que se le hechara agua de frutas en el cuerpo.

Al regresar Sesshoumaru la recibio con una flor.

-Gracias.-Dijo Ella.-"Este youkai, me parece realmente hermoso"

-Esta humana, no es como los demás. Sobretodo porque no me parece repugnante"-Pensó Sesshoumaru.

*************************************

En las aldeas cercanas se habla de una exterminadora de mostruos que usa una espada doble, o dos espadas, ella es capaz de destruir a cualquier monstruo.

-Me llamo Hinako.-Dijo Hinako frente a un terrateniente.-Destruire al monstruo que vive en su palacio, pero a cambio quiero que me entregue ropa bonita y que me bañen con agua de frutas.

-No se preocupe exterminadora.-Dijo el terrateniente.-Lo que pida se le dará. Pero ¿Por qué quier ropas lindas y agua de frutas? Yo tengo muchas riquezas, puedo pagarle muy bien.

Hinako sonrío y desenvaino las espadas.

-Lo que pasa es que me quiero ver hermosa para alguien.-Dijo Hinako.

Mientrás esto pasaba en las tierras cercanas. Sesshoumaru buscaba flores con aromas diferentes.

-Me pregunto,.... Si a ella le gustaran.-Se decía a si mismo.-Sera el momento apropiado, para hablarle de lo que siento. Creo que esperare unos días más.

************************************

Unas horas más tarde, ellos dos estaban en la cabaña.

-Te traje algunas flores.-Dijo Sesshoumaru mirando a Hinako.

-Son hermosas. Gracias.-Dijo Hinako tomandolas.

-Desde hace días, hueles diferente.-Dijo Sesshoumaru.

-Bueno eso es porque, me he estado bañando con agua de frutas, el olor de los alrededores se inpregna de en la ropa y a tí no te gusta.-Dijo Hinako.-"Si supiera a que me dedico seguramente me odiaría. Porque quiero estar a su lado es porque no le he dicho nada."


Continuara.....

 

Re: Odias a los humanos, sin embargo te enamoraste de uno de ellos

Hola, bien, gracias por tu consejo Pan-Chan, ahora va mi aclaración si leiste el FF viste la parte que dice ***Flash Back*** No puse de cuanto tiempo porque creí que se entendería pero alver que no, pués me veo obligada a explicarlo.



Capítulo 4. Y así empezamos a estar juntos.

Sesshoumaru, caminaba junto a sus compañeros, Lin y Jaken. Sesshoumaru estaba pensativo y...

-"Es cierto".-Pensó Sesshoumaru.-"La conocí justo antés de enterarme que mi madre fue desvancada por una humana, aquella mujer de nombre Hinako fue la principal causante de mi odio hacia los humanos y el detonante fue la madre de Inuyasha".

-Amo Sesshoumaru se siente bien?-Preguntó Jaken, al observar lo pensativo que estaba su amo, pero como siempre no recibió respuesta de él.


****FLASH BACK ******

Hace tiempo, cuando Sesshoumaru era más joven y paseaba por los los bosques, en su completa soledad.... Conoció a una joven que portaba una funda de dos espadas. Ella se portó amable con él al no matarlo cuando tuvo la oportunidad de hacerlo.

En aquella cabaña, Sesshoumaru caminaba de un lugar a otro para que la cura de su pierna llegue más pronto. En eso Hinako entró con un Kimono con estampado floreado.

-Hola.-Dijo Hinako, mirando con dulzura a Sesshoumaru.

-Hola.-Respondió Sesshoumaru sentandose en el suelo.

Ella observó las ropas que Sesshoumrau traía en ese momento. Le parecierón muy elaborada pero ¿Cómo que le hacía falta algo?

-En qué piensas?-Le preguntó Sesshoumaru al notar que lo miraba de pies a cabeza.

-En que....-Decía algo insegura.-Es que te falta algo.

-Cómo?-Preguntó Sesshoumaru, sin entender a que se refería Hinako.

-Ah!-Exclamó la joven muy animosa. Ella se dasató la cinta que llevaba atada a la cintura, era de color blanco con estampado amarillo y la punta azul. Ella se dirigió a Sesshoumaru y pasó las manos alrededor de la cintura de Sesshoumaru haciendo que él se incomodara un poco, amarró la cinta a la cintura de Sesshoumaru.- Ya esta!-Dijo en un tono de satisfacción.

Sesshoumaru se pusó de pie y la cinta que lleva en la cintura hacia un contraste con el resto de su ropa, esa cinta aun la lleva en la cintura.

-Se te ve, muy bien.-Dijo ella algo apenada.

-Gracias.-Respondió con una sonrisa.

Ambos salieron de la cabaña, ella se ató la funda de la espada en la espalda. Sesshoumaru la notó y desidió preguntar acerca de esa funda.

-Por qué cargas con esa funda todo el tiempo?-Le preguntó Sesshoumaru.

-Ah, esta.-Respondió algo nerviosa.-Bien, pués verás....-Ella desenvaino las espadas, tenía una en cada mano.-Estas espadas fueron de mi padre, un yukai lo mato y prometí cuidar de ellas. Hasta ahora no he hecho mal uso de ellas.

-Ya veo.-Dijo Sesshoumaru.-"Solo espero que mi padre me herede sus espadas, al igual que esta mujer no haré mal uso de ellas".

Ella comenzó a caminar en dirección al sur.

-A dónde vas?-Preguntó Sesshoumaru.

-Iré, a donde el viento me lleve.-Dijo Hinako, en eso el viento sopló moviendo los cabellos y las ropas de ambos jovenes.

Hinako sonrió y nuevamente comenzó a caminar.

-Espera.-Dijo Sesshoumaru.

Ella lo miró.

-Es que, me gustaría acompañarte.-Dijo Sesshoumaru mirando a ver a otro lado.

Ella le sonrió, se acercó a él y le tomó la mano.

-Claro que puedes acompañarme.-Dijo Hinako sonriendole.

Unos días Después...

Sesshoumaru e Hinako estaban en un río. Ella estaba en la orilla. Ella tenía en las manos algunas flores y las estaba mojando.

-Ojala le gusten.-Dijo Hinako mirando las flores con pequeñas gotas de agua en ellas.-Son las más bonitas de esta región.

Ella salió del río y se dirigió donde Sesshoumaru estaba, él se encontraba bajo la sombra de un árbol y estaba dormido, quizas sólo con los ojos cerrados....

Ella se colocó cerca de él, de manera que lo que Sesshoumaru vió al abrir los ojos fue el dulce rostro de Hinako.

-Dormiste bien?-Preguntó ella con una cálida sonrisa.

-Más o menos.-Contestó Sesshoumaru incorporandose.-Te fuiste por algunas horas ¿A dónde?

-Eh?-Exclamó la joven.

-Siempre que te vas, cuando regresas hueles a frutas o flores.-Dijo Sesshoumaru.-Y también, vuelves con ropas cada vez más hermosas.Sé puede saber ¿Por qué?

Hinako se pusó nerviosa, que le podía decir? Por un momento ella pensó en no decir nada para no ser odiada por él.

-Sesshoumaru.-Dijo Hinako.-Yo, nunca te mentiría.... Pero es que yo... trabajo en algunas aldeas, con encomniendas de los aldeanos, me pagan bien y el olor a monstruos que tiene la región es tan penetrante que pido baños con agua de frutas y flores....

Ella tenía los ojos al borde de las lágrimas, en su corazón pedía a gritos que no preguntará en que tipo de trabajo estaba....

-Ah, bien.-Dijo Sesshoumaru.-Sólo quería saber, porque es raro que huelas a flores o frutas y que trajeras ropas nuevas siempre.

-Sólo eso querias saber?-Preguntó algo confundida Hinako.

-Si, sólo eso queria saber.-Sesshoumaru la tomó por la barbilla y con dulces y suaves palabras le dijo.-Nunca antés había sentido la necesidad de tener a una humana tan decerca.

Ella se sonrojo, estaba aún más nerviosa que hace unos momentos, Sesshoumaru acercó sus labios hacia los de ella, dandole un beso. Algo que quizas marcaría sus vidas para siempre.


Continuara.....

Capítulo 5. mi último deseo...

 

Re: Odias a los humanos, sin embargo te enamoraste de uno de ellos

Hola gracias por las alaraciones sobre las palabras es que en ocaciones las escribo tan rápido que no me doy cuenta n_n muchas gracias. Sobre lo de los personajes.... Pués, si te refieres a Inuyasha y su grupo quizas no porque es una historia de Sesshoumaru jeje (No me odien por eso) y pués sin más dudas que responder (La de que si Sesshoumaru no se ha enfadado no me quedo muy claro que digasmos, pero quizas lo explique en este capítulo).


Capítulo 5. Nuestro amor condenado a muerte.

Sesshoumaru e Hinako disfrutaban caminar a las orillas de los rios, era algo que dejaba un agradable ambiente, además que en aquellos días caluloros el estar al lado de un río era más que relajante. Pero en aquellos momentos Sesshoumaru estaba sentado, como siempre, a la sombra de un gran árbol, algo adormesido e Hinako, nuevamente se había ido.

En los territorios del señor feudal Kyonfu, Hinako debía hacer un trabajo de exterminación a un espíritu que causaba problemas a los campos de cultivo... En esos momentos, en la sala principal de terrateniente se discutían los terminos del pago de Hinako.


-Seguramente sabras que hacer.-Dijo kyonfu.-Así que lo que necesites podrás pedirmelo sin titubear.

-Porsupuesto señor.-Respondió Hinako.

-Los terminos de tu pago.-Dijo el terrateniente algo dudoso.-Me es muy raro que un exterminador con tus talentos, sólo pida un baño de fragancia y ropa bonita, pero te pagaré de esa forma si así lo deseas.

-Le agradesco su comprensión.-Hinako se pusó de pie y llevó la mano derecha hacía la espada que estaba en su espalda, las saco y pusó una en cada mano.

-Si no le molesta, comenzaré mi trabajo de inmediato.-Dijo Hinako dando una reverencia, para después salir de la habitación.

-Esa mujer es sumanente comprometida con su trabajo.-Exclamó complacido el señor terrateniente para luego llevarse la taza de té a la boca.

Horas más tarde Hinako regresó tomando por la cola a una pequña rata.

-Tanto alboroto por un simple roedor.-Se quejó Hinako llegando a la sala del terrateniente.

-Ah! señorita.-Exclamó el terrateniente, féliz de verla.-Quiero que conoscas a mi hijo, Jintaro es m único hijo y mi sucesor.

Ella lo miró sin ningún interes.

-Es un placer conocerla señorita.-Dijo amablemente el joven.

-Igualmente, joven Jintaro.-Ella simplemente tomó asiento y de inemdiato le sirvieron té, ella lo bebió y se dirigió al terrateniente.-No se, aque viene la presentación de su único hijo, pero yo ya estoy con alguien. Así que, mi pago señor Kyongfu.

-Esto... Si señorita.-Dijo el terrateniente apenado por su acción.

En seguida varias jovenes mujeres pasaron a dejarle ropa de calidad elevada y el agua de las flores más bellas de la región.

Hinako se retiró, pero en el palacio, el joven Jintaro había quedado impresionado por la belleza de Hinako.

-Esa mujer deberá ser, mi futura esposa.-Exclamó el joven, estando en el estanque del palacio.

Apenas era la tarde, el sol estaba en su punto menos cálido de la tarde, pero era un poco pesada la atmosfera. Hinako estaba al lado de Sesshoumaru y él le tomó la mano con suavidad.

-Has estado callada.-Dijo Sesshoumaru.-Acaso no te dieron trabajo en la aldea a la que fuiste?

-Si, pero, no se si te guste la ropa que conseguí.-Respondió Hinako.

-Si no te la pones, ¿Cómo voy a saber que te vez bien?-Respondió Sesshoumaru cruzandose de brazos.

-Tienes razón.

Hinako se pusó de pie y se dirigió a unos arbustos y coquetamente le dirigió una seductora mirada a Sesshoumaru y con un tono de voz insitador...

-No vayas a mirarme, mientrás me cambio.

Sesshoumaru sólo miró hacia otro lado y se cruzó de brazos.

-Yo, jamás lo haría.

Ella rió, casí sin ser escuchada y fue a cambirase. Pero no imaginaron que un ninja los observaba a detalle. Éste se fue al palacio del joven Jintaro para informarle lo que había visto.

-Así que, un yukai.-Dijo el joven.-De acuero haremos lo siguiente, de esa manera esa mujer será mía.


Continuara.....

 

Re: Odias a los humanos, sin embargo te enamoraste de uno de ellos

Capítulo 6 Mi último deseo....

Habían pasado algunos días, los días se convirtieron en meses y los meses en años. Habían pasado 2 años desde que Sesshoumaru conoció a Hinako, dos años en los que eran felices y disfrutaban sus vidas. Sesshoumaru, se sentía pleno al estar con una joven a la que él hizo su mujer... Pero en una historia tan bella no faltan los villanos que tratan de entorpecer el amor y uno de esos es la madre de Sesshoumaru....

-Los humanos, son una raza inferior, que sólo causan desgracias a los monstruos como nosotros. -

Sesshoumaru simplemete pensó en aquellas palabras que su madre una vez le dijo.

-"Mi madre jamás aceptaría a Hinako como mi mujer".-Pensó Sesshoumaru.

En eso Hinako llegó sonriente con una cesca con fruta.

-Vamos a comer.-Dijo Hinako acentando la canasta.-Conseguí algo de fruta en el bosque.

Hinako hablaba de lo freca y dulce que estaba la fruta y Sesshoumaru la miraba algo nostalgico. Quizas las palabras de su madre eran ciertas, pero dudar de una mujer que no le mató cuando pudo y que le curó. Su madre quizas no tenía la misma perspectiva que él. Sesshoumaru en un momento, para disipar sus dudas Sesshoumaru tomó del rostro a Hinako y se dirigió a sus labios, los cuales le supieron más dulces que de costumbre. hinako tenía los ojos muy abiertos y un rostro totalmente sonrojado, algo que para ella era lgo que Sesshoumaru no hacía muy seguido.

Después de un rato así, se separaron sin desearlo.

-Qué pasa?-Pregubtó Sesshoumaru a Hinako al notar que se alejó solo un poco.

-No, nada.-Dijo la joven algo nerviosa.-Es qu, nunca haces eso y pués me tomaste por sorpresa.

Sesshoumaru la miro con ternura, estaba nerviosa, incluso secaba sus manos en su ropa. Sesshoumaru rió y se pusó de pie.

-Recuerda que ya eres mi mujer, ese tipo de cosas no pueden ponerte nerviosa.-Dijo Sesshoumaru.

-Si, bueno, es que.-Nuevamente los nervios se apoderaron de Hinako y no buscaba que hacer, derrepente ella se pusó de pie de una una manera implusiva se arrogó a los brazos de Sesshoumaru.- No quiero que mi torpeza arruine nuestra relación.

Sesshoumaru, sintió que su cuerpo se estremeció por la reacción impulsiva de Hinako.

Mientras que esto pasaba, en la región cercana en joven Jintaro, ya había esperado demasiado por aquella mujer.

-Hoy es el día, cuando la exterminadora aparesaca en el mercado, le diras que una plaga de cuervos ataca el palacio.-Explicaba Jintaro a uno de sus sirvientes.-Ella vendrá y te encargarás de decirle al yukai todo lo que ya te dije.

-Si señor.-Respondió un hombre que más bien parecía mujer.

Un días más tarde, Hinako había ido al mercado para ver si conseguía algún trabajo de exterminación.

-Vaya que esto de venir al mercado es horrible.-Se quejaba.-Además nadie necesita un exterminado en estos momentos.

En eso aquel hombre con atuendo de mujer aparecio, modificando su voz logró engañar a Hinako.

-Mi señor, me ha enviado por usted para que elimine a una plaga de cuervos que ha invadido el castillo.-Decía con mentiras.-Se le pagará lo que pida pero porfavor no se tarde.

Hinako regresó con Sesshoumaru....Y.


-Quieres que te espere aqui?-Preguntó extrañado Sesshoumaru.

-Si, por favor.-Respondió Hinako.-Sólo será esta vez.

-Sesshoumaru se recostó en el cesped.-Prometes volver en el tiempo en que quedamos?

-Claro.-Respondió Hinako, ella se acerco a Sesshoumaru y le dio un beso cerca de los labios, pero él no se conformaría sólo con eso, así que paso la mano por la nuca de la joven provocando un beso más largo y profundo.

Cayó la noche, una noche en la que la luna estaba teñida en rojo....Hinako se dirigió al palacio donde el la sala fue recibida por el joven Jintaro.

-No siento... la energía maligna de los cuervos, esto es muy raro.- Pensaba insegura Hinako.

-Ah que bueno es tenerla devuelta, señorita Hinako.-Se oyó la voz del joven Jintaro.-Esta vez no te iras de mi lado.

En eso Hinako sacó las espadas.

-No se aque viene eso, pero no me quedare.-

El joven Jinatro al oir las palabras de Hinako...

-Por qué?-Exclamó enojado.-Te daré todo lo que me pidas, incluso si esta en otra región.

Él desenvaino su espada...

-Ya veo, así que es...por ese yukai.-Dijo el joven apuntandole con la espada.

-Si, ese yukai como usted le llama es...-Hinako dudo un momento, era la mujer de un yukai, pero en ese momento ella levantó la mirada.-Ese yukai al que usted desprecia y aborrece, me hizo su mujer mucho tiempo atras!

Al oir eso el joven pensó dos cosas.

"Una humana y un yukai, que tontería, que repugnancia"

"seguramente ese maldito yukai la obligó a estra con él y como no la mató ella le siguió"

-Ese yukai, como le llama.-Dijo Hinako agitando su espada derecha.-Es a la persona que yo amo!

"Ama? amor? Acaso es verdad que los humanos y los demonios pueden amarse?"

-No digas estúpideses, mujer.-Conestó agresivamente.-Un yukai y un humano no pueden estar juntos, bajo ninguna sircunstancia.

Después de decir eso el joven Jintaro lazó contra Hinako su espada la cual le atravezó cerca del corazón.

Hinako cayó de rodillas al suelo, la sangre comenzaba a salir y manchaba las ropas de la joven.

-Ahora lo vez.-Dijo Jintaro.-El amor entre un yukai y una humana esta concenado a muerte.

El joven Jintaro se acercó demasiado a ella, en el momento en el que él le tomó la barbilla ella sacó una daga y le cortó la garganta. El joven cayó al suelo, desangrandose y ella con mucho valor y rápidez sacó la espada y salió del palacio.

Mientras que Sesshoumaru estaba esperandola.

-Ya se tardó. ¿Qué tanto estará haciendo?-Se preguntaba algo impaciente.

En eso un ninja apreció.

-Usted es el yukai que acompaña a la señorita Hinako, no es así?-Preguntó el ninja.

-Si así es.-Respondió con frialdad Sesshoumaru.

-Vengo a informarle que la señorita Hinako, le ha estado engañando.-Dijo el ninja.

-Cómo dice?-Sesshoumaru tomó una cara se asombro.-Eso es metira.

-La señorita que le acompaña, acaba de verse con mi amo, en estos momentos ya debió haberla hecho su mujer.-Decía el ninja sin percatarse que Sesshoumaru se le acercaba.-La señorita es.....

Antes de poder decir una palabra más, Sesshoumaru le había cortado la cabeza al ninja. Él miraba sus manos con odio e ira.

-Esa mujer.-Dijo Sesshoumaru con un grado de enojo.

-Los humanos son una raza inferior, que sólo causan desgracias a mosntruos como nosotros.-

Las palabras de su madre, recorrían cada rincón de su mente y su corazón. ¿Qué hacer?¿Cómo actuar? eran preguntas que no tenían respuesta en ese momento....

Sesshoumaru se fue de ese lugar... A dónde? Sólo él sabía a donde debía ir en ese momento. La ira, la rabía y el saber que habia sido engañado era algo que no le dejaba pensar con claridad en aquel momento....

****FIN FLASH BACK******


Ahora, en la misma región, Sesshoumaru y su grupo, nuevamente estaban descansando. Él se acomodó en el mismo árbol en que prometió esperarla.

-Qué habrá sido de aquella mujer?-Pensó Sesshoumaru.-"Después de enterarme de su traición, me enteré que mi padre, había tenido un querer con una humana haciendo quedar como una tonta a mi madre. Quizas fue eso lo que detonó este aborrecimiento hacía los humanos"

Lin y Jaken seguían en el agua tartando de pescar. El agua salpicó a Lin y por un momento la sonrisa de Lin se volvió la de Hinako... Dejando a Sesshoumaru con un grato recuerdo....

*************************************
Fash back. La misma noche del engaño, Hinako regresó al lugar donde ella y Sesshoumaru habían acordado. Se apoyó en el árbol para poder sentarse, la respiración se le acortaba y se le dificultaba.

-Sess...Sesshoumaru.-Agonisante repetía su nombre.-"Por qué te fuiste?¿por qué no me esperaste?"

Hinako sentía como en cada momento la vida se le iba. En eso una estrella fugaz cayó e Hinako la miró en ese preciso momento.

-Una estrella fugas.-Exclamó con el poco aire que tenía.-No se si es verdad lo que cuentan.-Las lágrimas comenzarón a brotar de sus ojos.-Pero, si es verdad, quiero pedir....quiero pedir una segunda oportunidad.... para estar con él....sin mentiras, sólo quiero poder estar a su lado, para caminar juntos en los bosques y poder....y poder amarlo por siempre...

Mi amado Sesshoumaru​

Fin flash back
*********************************

Lin estaba recogiendo unas flore.

-Me pregunto, si le gustaran?-Se preguntó Lin.-Seguramente, porque son las más bonitas de la región.

Lin se acercó a Sesshoumaru.

-Señor sesshoumaru?.-Dijo un poco temerosa Lin.

-Qué ocurre Lin?-

-Es...que...verá yo.-lin titubeaba.-Usted me recordará después de que muera.

Sesshoumaru la miró, luego desvió la mirada hacia el cielo.

-No digas tonterías.-Dijo Sesshoumaru.

Al oir eso, Lin le regaló una dulce sonrisa a Sesshoumaru, él la miró con seriedad más no con frialdad.

-Lin se le parece mucho a Hinako. Sin embargo ella no es como aquella mujer.-Pensó Sesshoumaru.-Vamonos.

Sesshoumaru comenzó a caminar.

-"Espero poder permanecer al lado del señor Sesshoumaru, por mucho tiempo más.-Pensó Lin antes de comenzar a caminar al lado de Sesshoumaru.-Después de todo nunca le volvería a mentir, además siento que lo conosco desde hace mucho. Quizas es por eso que me siento segura y protegida a su lado. Yo le amo... Señor Sesshoumaru"