Mi seductor e irresistible chofer [Inu&Kag]

Re: Mi seductor e irresistible chofer [Inu&Kag]

··· Mi seductor e irresistible chofer ···​

Capítulo V

-Claro tontín-Se escuchó una risa-¡quién más podría ser!-Se volvió a escuchar.
-¿¡Miroku!?-Exclamó con sorpresa InuYasha.
-¡Vaya creí que no me reconocerías!-Confesó Miroku con una sonrisa-¡Cómo está mi don Juan ¿he?-Preguntó con picardía en su voz
-No me llames así-Susurró este con enojo-Como siempre y…¡un momento!, ¿cómo sabes de este número?-Preguntó enojado al ya saber la respuesta.
-Minutos antes llamé a tu casa allá en España y tu madre me dijo que estabas en Tokio trabajando de chofer-Respondió con temor ya al saber el carácter de su amigo.
-¿y?-Preguntó mientras trataba de calmarse. Su madre algunas veces era una entrometida.
-Y bueno me dio el teléfono en donde trabajas y la dirección-Dijo a la vez que rogaba que su amigo no lo matara. InuYasha nunca le ha gustado que lo llamaran mientras trabaja.
-Hay por Kami-Exclamó seguido de un suspiro-¿Es que mi madre nunca cambiará?-Preguntó más para él que para Miroku
-Nunca se sabe-Respondió a la vez que trataba de contener la risa
-¿Y ahora donde estás?-Preguntó más calmado-¿Miroku?-Lo llamó al no tener respuesta, lo llamó por segunda vez ya enojado y al no escuchar respuesta colgó molesto el teléfono y segundo después sonó el timbre de la casa, con fastidio se dirigió a la puerta y al instante escuchó una feliz voz varonil.
-¡Aquí!-Gritó la voz varonil seguido de una alegre sonrisa.
-¡Miroku!-Exclamó sorprendido-Pero cómo…si tú estabas-Decía confundido y a la vez apuntaba a Miroku y al teléfono tras suyo.
-Simple, te estaba llamando desde el taxi-Explicó.
-¿Y ya te vas?-Preguntó amenazante.
-Jajaja buena broma-Decía mientras entraba a la casa y dejaba ambas maletas en el suelo-¡Vaya que hermosa casa!-Dijo asombrado caminando por el corredor.
-¡¿Miroku quién te dijo que entraras así no más a la casa?!-Decía acercándose a paso rápido donde su amigo-Me alegro mucho volverte a ver, pero este no es el momento ni el lugar de un encuentro-Decía colocándose tras de él y empujándolo hacia la puerta.
-¡Oye no trates así a un prestigioso sacerdote como yo!-Gritó demostrando un falso enfado.
-Bueno algunas veces demuestras lo contrario a un sacerdote-Dijo InuYasha con burla-Bueno buenas noches y hasta mañana-Dijo ya cerrando la puerta y dando un suspiro.
-¿InuYasha quién era?-Preguntó Kagome bajando por las escaleras con su pijama de dos piezas color verde.
-…..-

Este no decía nada, sólo me observaba de pies a cabeza de una forma muy seductora y penetrante cosa que me puso nerviosa. ¿Qué acaso no dirá nada? me preguntaba temerosa, esa mirada ambarina me hacia sentir débil ante él. Una voz varonil que venía desde la puerta principal me sacó de mis pensamientos.

-¡Pero que hermosa flor he encontrado!-Decía este acercándose corriendo hacia mí, me tomó de ambas manos y con voz seductora preguntó-Hermosa florecita, ¿le gustaría tener un hermoso hijo conmigo?.
-¡¿Qué?!-Gritamos InuYasha y yo a la vez.
-¡Miroku recuerda que eres sacerdote!-Gritó enfadado InuYasha seguido por un golpe en la cabeza.
-¡Auch!-Se quejó sobándose la cabeza-InuYasha no seas agresivo, ya entendí que esta señorita es tuya-Dijo con un puchero y con lágrimas en los ojos azulados.
-¡Un sacerdote!-Grité asombrada, ¡quién podría creer que un hombre cómo él fuera un cura!-y ¿quién es usted?-Pregunté ya más calmada pero seguía asombrada por su profesión.
-Disculpe mi mala educación-Se disculpó y tomando la postura normal dijo-Soy el sacerdote Miyamoto Miroku, amigo de InuYasha para servirle señorita-Dijo dándole un cálido beso en la mano.

Miroku Miyamoto, tiene 22 años y viene desde España para venir a ver a su mejor amigo desde la infancia InuYasha, él aunque todavía no lo crea, es un famoso sacerdote allá en Europa desde hace 2 años, digo famoso ya que ha salvado millones de vida en los pueblos más olvidados de por allá. Miroku es un joven de cabello negro amarrado de una pequeña colita, expresivos ojos azules, en su oreja izquierda tiene 3 pequeños aros de oro, cuerpo bien formado y alta estatura.
El sólo vive junto con su abuelo ya de edad, sus padres murieron por un asalto que sucedió en su hogar, él sólo era un recién nacido y fue alvado por su abuelo.

-Mucho gusto joven Miyamoto-Dije ruborizada-Mi nombre es Higurashi Kagome-Me presenté dándole una cálida sonrisa.
-Que bella sonrisa tiene señorita Kagome-me halagó con picardía.
-Jejeje gracias joven-Agradecí complacida-Pero por favor no me diga señorita, sólo dígame Kagome ¿si?-Reproché con humor.
-Estoy de acuerdo si tú no me dices cura, joven ni Miyamoto ¿vale?-Me dijo siguiéndome la corriente.
-Trato hecho-Dije moviendo mi mano con la de él de arriba abajo.
-¡Ya muchas presentaciones por hoy!-Gritó InuYasha colocándose al medio de Miroku y yo-¿Miroku no es hora de que te vayas ya?-Preguntó observando intimidante a Miroku
-Bueno-Dijo rascándose la nuca nervioso-Eso es a lo que venía a preguntarle.
-¿Qué pasa?-Preguntó ya impaciente InuYasha.
-Me preguntaba si…-Decía nervioso-¿Me puedo quedar aquí hasta que encuentre un lugar donde estar?
-¡¿Estás loco Miroku?!-Gritó exaltado moviendo los brazos de arriba abajo
-Claro Miroku te puedes quedar el tiempo que quieras-Dije con naturalidad
-¡Gracias Kagome!-Me dijo dándome un tierno abrazo
-¡Kagome estás loca!-Decía InuYasha sorprendido y celoso
-¡InuYasha no te metas!-Le dije enojada-Miroku puedes quedarte en la habitación de invitados que está frente a la de InuYasha-Le expliqué-InuYasha por favor tu que ya conoces la casa de memoria-Decía acercándome a él que estaba en un rincón-¿puedes guiarlo al segundo piso?-Le pedí cariñosamente
-¡¿Qué?!-Dijo ya enojado-¿y por qué no vas tú ya que son muy amigos?-Dijo recalcando la última palabra. ¿Estará celoso? ¡No puede ser!-Pensé confiada- Nunca sucedería y no sucederá!
-¡Por favor!-Suplicaba con unas lágrimas de cocodrilo-Tú sabes que yo soy débil y más si ahora no he dormido-Dije juntando mis manos en forma de rezo
-Ah-Suspiró-Esta bien-Dijo con fastidio y cruzándose de brazos
-¡Gracias! Bueno Miroku siéntase cómo en su casa y cualquier cosa llama a InuYasha
-¿Y por qué yo?-Dijo apuntándose
-¡Buenas noches!-Dije corriendo hacía las escaleras y encerrándome en mi habitación
-Es muy linda ¿no?-Confesó Miroku después de un rato
-Miroku recuerda que eres sacerdote-Dijo InuYasha subiendo las escaleras
-Pero eso no significa que no pueda mirar a las mujeres-Dijo defendiéndose
-Cómo sea-Dijo InuYasha rolando los ojos-Bien esta es tu habitación, buenas noches-Dijo entrando a su habitación y cerrando la puerta
-Buenas noches-Respondió y con una sonrisa entro a su nueva habitación

A la mañana siguiente desperté antes que InuYasha entrara a mi habitación, no dejaría que me mojase de nuevo y menos que me besara, pensé con un rubor en mis mejillas. Me dirigí al baño y me di una rápida ducha, luego me vestí y me cepillé el cabello y bajé las escaleras hasta la cocina, hay me encontré ya con el desayuno listo y con InuYasha y Miroku sentados.

-¡Buenos días!-Grité alegre
-Buenos días seño…digo Kagome-Me respondió Miroku con una sonrisa
-¿Miroku cómo durmió?-Pregunté ya desayunando
-¡Muy bien gracias!-Respondió
-¡Hey!-Dijo de repente InuYasha-¡¿y yo estoy pintado acaso?!-Preguntó enojado
-Discúlpame InuYasha-Me disculpé conteniendo la risa-¿Cómo…
-Señorita Kagome ya es hora de que se vaya a la escuela-Interrumpió Kaede que entraba a la habitación
-Gracias Kaede-Dije levantándome de la silla-¿InuYasha vamos?-Decía ya saliendo de la habitación
-¡Feh esta bien!-Dijo levantándose y acercándose a mí-oye mala aún no me has saludado como corresponde-Susurró a la vez que se acercaba a mis labios
-Disculpe Kagome-Dijo Miroku acercándose a nosotros-¿Podría ir con ustedes?-Preguntó sintiendo la fulminante mirada de su amigo
-Claro-Respondí agradecida de que Miroku interrumpiera-¿No te molesta verdad InuYasha?-Pregunté inocente
-Cómo sea-Dijo enojado dirigiéndose hacia la puerta

Nos subimos a la limosina y nos dirigimos hacia la casa de Sango, InuYasha ya se sabía la ruta de memoria asi que no era necesario decirle nada. Al llegar este tocó la bocina y enseguida salió Sango, nos saludamos con un beso en la mejilla y justo cuando íbamos a entrar a la limosina…

-Hola bella damisela-Saludó el muchacho dándole un beso en la mejilla.
-Ho..hola-Saludó también con un rubor en las mejillas.
-Mmm, que hermosa te vez asi-Confesó con picardía. Esta sólo se ruborizó más hasta que sintió una caricia no muy común.

.:Continuará:.

Bueno aquí esta la conti ^^
lamento la demora pero he tenido muchas cosas que hacer u.u
bueno gracias a todas por los post y...
¡bienvenidas las nuevas! ^^
jejeje ¡bueno nos vemos y cuidense mucho!
¡Bye!

 

Re: Mi seductor e irresistible chofer [Inu&Kag]

Mi seductor e irresistible chofer​

Capítulo VI
Primera Parte

-Hola bella damisela-Saludó el muchacho dándole un beso en la mejilla.
-Ho..hola-Saludó también con un rubor en las mejillas.
-Mmm, que hermosa te vez asi-Confesó con picardía. Esta sólo se ruborizó más hasta que sintió una caricia no muy común.
-¡Kia, hentai!-Gritó Sango dándole una fuerte cachetada en la mejilla izquierda
-Dios Miroku esta vez si que te pasaste-Dijo InuYasha cruzándose de brazos y esbozando una sonrisa burlona
-¡Miroku como se te ocurre hacer semejante acción si eres un sacerdote!-Grité enojada colocando mis ambas manos sobre mi cintura
-¡Y te haces llamar sacerdote!-Gritó enojada y sorprendida a la vez Sango
-Discúlpeme señorita-Decía Miroku sobándose la mejilla ya roja por el golpe-Es que mi mano está maldita, es decir, tiene vida propia-Explicó sujetándose la mano por la muñeca-¿podemos empezar desde el principio?, Buenos días, soy el sacerdote Miyamoto Miroku-Se presentó estirando su mano hacia la de Sango y esbozando una sonrisa
-Hola soy Fukuda Sango-Correspondió el saludo con un deje de desconfianza
-Bueno chicos ya es hora de irnos ¿no?-Dije empezando a caminar hacia la limosina

Después de subirnos a la limosina nos dirigimos hacia el instituto, Miroku no paraba de pedirle perdón a Sango por su anterior actitud y esta sólo lo ignoraba, InuYasha y yo sólo reíamos de la situación discretamente ya que de vez en cuando sentíamos la mirada fulminante de Sango.
Ya al llegar al instituto, nos despedimos de los muchachos y nos dirigimos hacia el aula, ya era casi la hora de las clases asi que apresuramos el paso.

-¡Buenos días!-Grité con una sonrisa y me dirigí a mi pupitre, cuando estaba por sentarme sentí una mano sobre mi hombro, al voltear vi unos hermosos ojos azules de Houyo, nerviosa lo saludé con un beso en la mejilla
Al que él me correspondió con el mismo gesto.
-Y dime Kag-Dijo nervioso-¿Estás lista para nuestra cita de mañana?- Preguntó esbozando una sonrisa nerviosa
-Em…bueno..-¡mañana!¡Kia, que tonta lo olvidé por completo!,¿¡Ahora qué haré, que me pondré!?-Pensaba exaltada-Eee…si claro Houyo no pensarás que lo había olvidado ¿no? Jejeje-Reí nerviosa colocando mis manos tras mi espalda, ¡que respuesta más tonta!
-¿Kag estás bien?-Preguntó acercándose y observándome fijamente
-Cla..claro Houyo-Dije dando un paso atrás-No te preocupes-Afirmé
-Cómo digas-Respondió no muy convencido de mis palabras-¡Bueno nos vemos mañana!-Dijo empezando a caminar hacia su pupitre

Me tranquilicé al ver que Houyo se iba, en ocasiones suelo ser tan tonta pero este se gana el premio mayor, ¡cómo se me pudo olvidar la cita más importante de mi adolescencia con el chico de mis sueños!, desde ahora seré cómo las abuelitas y anotaré todas las citas que tenga, ¡hasta el más mínimo!. La clase de biología pasó para dar paso al receso en donde me junté con mis amigas Sango y Rin y nos dirigimos a nuestro hermoso árbol de cerezo

-Sango por qué no perdonas a Miroku-Dije con puchero fingido-¡Ya te ha pedido disculpas más de mil veces!-Expliqué sorprendida y elevando la voz
-¿Uh?, ¿quién es Miroku?-Preguntó ansiosa Rin-¿Y desde cuando lo conoces Sango?
-Un chico amigo de InuYasha-Expliqué cansada al no escuchar respuesta de su amiga-Lo conoció esta mañana
-¡Vaya que emoción!-Gritó Rin con las manos en su cara-Pero, ¿por qué lo tienes que perdonar he Sango?-Preguntó confundida mirando ahora a la castaña
-¡Por qué el muy estúpido se atrevió a tocarme el trasero!-Explotó Sango con la respiración entrecortada y furiosa
-Pero Sango eso es normal en algunos chicos-Explicó de lo más natural Rin levantando los hombros-No exageres amiga-Dijo tratando de contener una risa burlona
-¡En los chicos si pero en los sacerdotes no!-Gritó nuevamente Sango enojada
-¿¡Un sacerdote!?-Preguntó exaltada Rin levantándose de golpe-¿Y era guapo?-Preguntó ilusionada
-¡Rin cómo preguntas esas cosas en un momento asi!-Preguntó Sango elevando la voz
-Rin por favor no la enojes más de lo que está ¿si?-Le pedí a Rin con delicadeza. Cuando Sango se enoja es mejor no hablarle

Después de esa “agradable” conversación, nos dirigimos hacia el aula para la siguiente clase, Física, odiaba esa materia y más si me tocaba ¡tres horas!, lentamente recosté mi cabeza en la mesa y a los segundo después quedé dormida.

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-Kagome despierta-Me susurraba una voz varonil en mi oído-Kagome vamos dormilona es hora de irse-Decía nuevamente la voz

Yo estaba media despierta pero aún con los ojos cerrados y escuchaba perfectamente la voz pero no me inmutaba y seguía en la misma posición, en mi mente empecé a analizar esa voz que me era muy conocida, ¿quién será?, dejé de pensar cuando sentí en mi oreja un roce de unos labios y me decía seductoramente.

-Vamos pequeña despierta-Dijo rozando su nariz en mi oreja-¿o quieres que te despierta cómo esa mañana?-Preguntó

¡InuYasha! Pensé rápidamente y levanté rápido la cabeza para encontrarme con los ojos dorados de mi chofer que me observaban.

-¿¡Pero que haces aquí tan temprano!?-Pregunté exaltada-¿¡Pe…Pero donde están todos!?-Pregunté mirando hacia todos lados y notar que no había ninguna mochila ni nada
-Eso es lo que quería decirte-Dijo dando un suspiro-Tus compañeros se fueron hace 15 minutos ya que en la tarde habría una reunión de profesores-Respondió levantándose de asiento de adelante y colocándose a mi lado
-¿Y mis amigas?-Pregunté nerviosa. No me gusta que el se me acerque demasiado me pone tan…tan débil a sus pies
-Les dije que se fueran ya que eras difícil de despertar-Dijo en tono burlón-Estuvieron cómo 5 minutos tratando de despertarte, entré y les dije que se fueran que yo me encargaría de ti-Explicó con superioridad
-Gracias amigas-Pensé sarcástica-Bueno, ¿nos vamos?-Pregunté levantándome de la silla
-No tan rápido pequeña-Me dijo acorralándome entre su cuerpo y mi pupitre-aún me debes el saludo de esta mañana-Dijo acercándose hacia mi rostro.

A medida que se acercaba, me colocaba más nerviosa y trataba de salir de ahí ha toda costa, él, al sentir mi nerviosismo me agarró con sus manos ambas muñeca y me las colocó en mi pupitre y se acercó entrecerrando sus ojos y rozando sus labios con los míos y este abriéndose al contacto, segundos después sentí la calidez de sus labios encima de los míos. Quedó unos momentos quieto sin hacer nada y entreabrió sus ojos para ver mi reacción, yo no respondía, estaba quieta y tensa por el shock que inundaba mi cuerpo, fui reaccionando del shock al sentir algo húmedo entrando lentamente a mi boca, ¡era la lengua de InuYasha!, este empezó a invadir todos los rincones de mi boca mientras este cerraba nuevamente sus ojos, inexperta de algo nuevo y desconociendo el calor que empecé a sentir en mi cuerpo, fui correspondiendo tímidamente el beso, InuYasha al darse cuenta de mi situación y esbozando una sonrisa durante el beso, empezó a soltar lentamente mis muñecas y guiaba sus manos hasta mi cintura acercándola más a su cuerpo, yo en cambio guié mis manos hasta su cuello y lo abrasé mientras profundizaba el beso.
Él era mi profesor y yo su alumna ensayándome el hermoso método de besar, mordió levemente mi labio inferior y yo lentamente introduje mi lengua en su boca, como si al morderme me ordenaba que lo hiciese, de apoco comencé a tomar su ritmo y de un beso tímido y dulce, llegó a uno apasionado y salvaje. InuYasha se separó de mis labios y empezó a bajar por mi cuello besándolo y lamiéndolo a medida que bajaba hasta mi hombro derecho, y al sentir un incontrolable calor di un bajo gemido a la vez que echaba la cabeza hacia atrás y comenzaba a acariciar su espalda y de vez en cuando a tirarle un poco su largo cabello plateado, cuando comencé a sentir las manos de este debajo de mi blusa con la intención de llegar a mis pechos, agitada y rojiza lo detuve de golpe empujándolo hacia tras y dándole una cachetada en la mejilla.

-¡¿Pero que diablos haces InuYasha?!-Grité sin pensar
-¡Tú sabes muy bien lo que pasó Kagome!-Gritó este con picardía-Y sentí perfectamente que te agradó. ¿O me equivoco?-Preguntó acercándose a mí
-No sé de que hablas InuYasha-Mentí esquivando su mirada hacia el suelo. Sabía perfectamente que si lo miraba directamente a los ojos sabría que miento-Ya es tarde-Dije mirando el reloj del aula-Es mejor irnos-Decía mientras caminaba hacia la puerta.

InuYasha sin decir más me siguió y ambos subimos a la limosina y partimos rumbo a casa. Nadie dijo nada durante el transcurso del viaje, InuYasha sentía el aire que estaba tenso asi que al divisar cerca una pizzería me preguntó.

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-¿Kagome quieres comer una pizza?-preguntó mirándome por el espejo retrovisor
-Si como quieras-Dije cansada sin mirarlo-¡¿Qué diablos fue ese beso?! , ¿Acaso significó algo para él? , y peor aún, ¿Significó algo para mi?, bueno debo de admitir que InuYasha es muy guapo e irresistible y… ¡O pero que estoy diciendo!-Me grité asombrada-¿Pero… y si para él fue algo serio?-Me pregunté confundida-El fue muy delicado por decirlo así, es decir, fue mi primer beso y él me enseñó sin pedírselo-Pensé con tristeza y avergonzada-¡Pero después todo se esfumó por culpa de su calentura al posar sus manotas bajo mi blusa!-Me dije furiosa-Claro que no es mi culpa lo del beso si no de InuYasha.. ¿No?-Me pregunté a mi misma con un deje de duda
-¡Kagome!-Gritó InuYasha desde la puerta trasera ya abierta
-¿A que que?-Pregunté confundida al ser sacada de mis pensamientos
-Kagome ya llegamos a la pizzería-Avisó-Ven vamos-Dijo apartándose de la puerta para que yo saliera

Ambos entramos al local y enseguida nos atendieron, pedimos una pizza familiar con nuestros ingredientes favoritos y cuando me disponía a pagar, InuYasha me detuvo y me dijo que el invitaba, yo con un poco de duda acepté y me senté en unos de las mesas del lugar y me relajé, pero mi tranquilidad no duró mucho ya que escuché desde no muy lejos unas risitas, al voltear para ver a los dueños de esas risitas inocentes vi a InuYasha conversando muy alegremente con la cajera, una mujer de cabello negro de ojos azules con un cuerpo muy esbelto que se podía ver claramente por el corto delantal que poseía.
Desde lejos se podía notar que ese tonto la estaba cortejando ya que de vez en cuando este le tomaba la mano y le decía algo en el oído al que esta respondía con un rubor en sus mejillas y una risita coqueta. Indignada volteé la cabeza hacia la ventana para evitar esas “escenitas”, por alguna razón me enojó mucho y decidí mejor levantarme y dirigirme a la limosina para asi esperar a que terminara de coquetear. Al levantarme observé de reojo que InuYasha me observaba asi que sin darle mucha importancia me dirigí hacia la puerta y me subí a la limosina, coloqué la radio y me puse a escuchar música romántica, al voltear mi mirada hacia dentro del local, vi a InuYasha dándole un beso a esa cajera al que ella correspondía gustosamente, volteé mi mirada furiosa y me puse a pensar.

-¡No, claro que ese beso que nos dimos no fue serio para él!-Pensé enojada-¡¿Cómo pude pensar que ese tonto estúpido?!… querría tener algo serio conmigo…-Me dije con tristeza lo último queriendo ganas de llorar-¡No ya no…ya no caeré más en sus redes! InuYasha es sólo mi chofer y nada más ¡no seré una más de sus conquistas nunca!-Me dije confiada. Al poco rato llegó InuYasha, puso la caja de pizza en el asiento del copiloto y dijo

-¿Kagome por qué te fuiste?-Me preguntó inocente
-¡Que te importa!-Dije furiosa-Anda chofer, vámonos a casa-Dije observando por la ventana
-¡¿Chofer?!-Se preguntó asombrado-¿Desde cuando me dice de esa forma? No será que ella…-Pensó a la vez que me miraba por el espejo retrovisor
-¿Qué esperas? Vámonos-Exigí mirándolo de reojo con los brazos cruzados

Resignado encendió el motor y condujo hasta la casa. Al llegar mi dirigí rápidamente hacia mi habitación, no quería que me pregunta por el estilo ya que ni yo sabía la respuesta. Me coloqué el pijama y me recosté en mi cama junto con un suspiro, cuando me iba a dormir, una lágrima traviesa resbaló por mi mejilla seguida de otras más, al poco tiempo estaba sollozando sin control, es cierto, lo que pasó en el local me afectó mucho sin razón alguna, lo que pasó en la escuela con InuYasha me dio a entender ilusión, un reflejo lo que él sentía hacia mí, pero esa ilusión se destruyó en mil pedazos por esas escenitas en el local, ahora me di cuenta de que InuYasha nunca cambiará y eso me pone muy triste.

-¿Por qué InuYasha?-Fui lo único que dije antes de caer en el sueño profundo y antes de escuchar la puerta cerrándose lentamente.

Continuará…

 

Re: Mi seductor e irresistible chofer [Inu&Kag]

¡Hola!
Bueno aquí está la continuación ^^.
Y bueno la dejé media larga ya que desde hoy Jueves hasta el Domingo no estaré en el cz ya que hoy como las 1:30pm llegarán mis primas y estas no me dejarán estar en el computador u.u, y el Viernes hasta el Domingo iré a un retiro de Confirmación asi que mañana tengo que tener todo listo y toda la cosa.
Bueno ojala que les haya gustado la conti,perdón si es media fome a algo así,pero ahora he estado un poco enferma y por eso no me dá mucha la imaginación u.u. Pondré la conti a más tardar el próximo Viernes asi que espero que estén atentas jejeje ^^
Ya cuídense mucho y nos vemos la próxima semana y ¡gracias por leer mi FF!^^
¡Bye!


·Aiko-Chan·