Mascaras, Dejan CicatriCes

Re: Mascaras, Dejan CicatriCes

Ya había pasado más de una semana y Kikyou aun no me hablaba, era muy extraño. Los días eran tediosos y en ocasiones hasta llegaba a preocuparme pero ese sentimiento desaparecía al recordar las palabras de Kikyou, ella me había prometido una oportunidad. Eso estaba marcado a mi favor, si había algo que definiera a Kikyou era fidelidad. Ella siempre cumplía sus promesas y esta no seria la excepción. Sin embargo eso no me quitaba la idea de que mi misión ya se había retrasado bastante. Si Kikyou no me hablaba, tendría que hacerlo yo, solo que lo malo de que yo fuera a buscarla era que nunca sabía como me recibiría, era por eso que casi siempre esperaba su llamada.
Esta vez esperé más de tres meses, no podía esperar ni un día más. Solo rogaba que esta visita, no terminara como las ultimas dos.

Antes de llegar al edificio, me detuve en un puesto de revistas, agarré algo que en lo personal, me pareció familiar, en la portada de cierto periódico venia escrito el nombre de mi hermana, Sango, pero eso no era lo más raro, lo extraño era el nombre de la periodista, Kagome Higurashi. Vaya y yo pensé que por lo menos sabia una cuarta parte de ella, creo que jamás dejas de conocer a una persona. Miré a las jovencitas de aproximadamente quince años que preferían comprar el periódico a una revista, me causo gracia, el periódico en donde trabajaba esa chica les resultaba mas interesante que una revista de chismes y esas cosas. Fui de regreso a mi auto, me apoye en el cofre y me dediqué a leer el articulo de la chica esa.
Cinco minutos después ya estaba a escasos kilómetros del edificio, debía admitir que esa reportera era excelente, demasiado para su edad. Podría discutir esto con Kikyou, por lo menos ya tenía un tema de conversación.

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No había nada en la televisión que captara mi atención. Había tenido días aburridos, pero esta semana no se comparaba a ninguna otra. Apagué el televisor y gire mi cabeza hacia la derecha donde se encontraba Kirara recostada, parecía tan aburrida como yo. Tomé a mi compañera en brazos, la única, mi gatita. Era mejor compañera que nadie más, no causaba problemas y solo me pedía algo de atención y algo de comida y me daba a cambio su compañía, para mi, un trato muy razonable.
Aceptaba la vida que llevaba, aceptaba que al momento de elegir esta vida, había abandonado todo, amigos, familia, incluso la persona que más llegué a amar y yo misma, tuve que asesinar.
Solté a kirara, dio un salto fuera de la cama y salió corriendo lejos de mí. Me quedé como cinco segundo mirando al vació, sin pensar en nada, cuando volví en mi, lo primero que se me vino a la mente fue una foto, la representación de un viejo y doloroso recuerdo.
Me levanté con una sensación en la boca del estomago indescriptible, seguí los pasos de Kirara, y como si ella hubiera predicho lo que iba a suceder, me esperaba en el tocador de la sala. La miré un rato y ella volteo la cabeza como si no entendiera, deje de observarla y me centré en lo que hacia, abrí el cajón de abajo, ahí habían un montan de papeles sin aparente importancia, los saqué todos, hasta dejar el cajón vació, después acerqué ambas manos al fondo del cajón y retire la parte de debajo de este, ahí escondido estaba lo que buscaba. Volví a mi habitación esta vez con un pequeño cofre cubierto de polvo en las manos.
Me senté en el suelo alfombrado, recargada en el borde de la cama, abrí el cofre, lo primero que era visible era un collar el cual era una cadena delgada, de oro blanco, y de este colgaba una media luna de zafiro, valía mucho, demasiado para mi, peor no por su valor material sino, por lo que representaba, el collar que mi madre me dio antes de morir, aun recordaba aquel día. Y es que preguntó, ¿como olvidar tu cumpleaños numero diez si te dan como regalo un bello collar y la muerte de tu madre?
Miré el collar un largo rato, ninguna lagrima salio de mis ojos, el recuerdo de mi madre no era triste, las cosas que conviví con ella, fueron las que me ayudaron a superar su muerte, amarré el collar alrededor de mi cuello. No me gustaba sumergirme en los recuerdos por mucho tiempo, así que seguí buscando. Varias cosas salieron de ese cofre, una carta, la foto vieja de mi madre y otra de un joven.

-Hoyo- susurré acompañado de un profundo suspiro
Me llevé la foto al pecho, siempre que veía esa foto hacia lo mismo, me la llevaba al pecho, jamás me perdonaría por lo que hice. Mi orgullo me obligo a alejar la foto, me levanté y fui a la cocina, saqué un cerillo, lo encendí y queme la foto sobre la mesa, jamás me perdonaría por haber hecho lo que hice pero nunca me arrepentiría de la decisión que tome al jalar de aquel gatillo.

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Al principio había pensado que era una buena idea pero ahora, podía jurar que si giraba la perilla todo terminaría en caos de nuevo. Solté el aire de golpe, entonces me dije “Bueno… ya estoy aquí”, esperaba que mi imprudencia de visitarla sin avisar no le molestara. Si había algo que me gustaba más que estar encerrado en la oficina de Kikyou con ella gritándome, eso era estar realizando mi trabajo, a lo que dediqué mi vida. Abrí lentamente la puerta y la encontré hablando por teléfono, me vio desde que asomé mi rostro por la puerta, mi miro extrañada, más aun así serena. Con un gesto me invitó a sentarme frente a ella, yo agradecí al cielo que no me hubiera arrojado la lámpara por mi visita. Por su modo de invitarme dentro de su oficina y por el tono que usaba en el teléfono deduje que tenia tan pocas ganas como yo de discutir, talvez me predispuse al pensar que querría matarme, me relajé al pensar esto.
Terminó su llamada y me miro sin decir nada, hubo un silencio y me decidí a hablar.

-¿Qué ocurre?- pregunté.

-Yo no te he llamado, eres tu el que ah venido.

Cerré los ojos y sonreí.

-Tardaste demasiado en contactarme.

-Te prometí que te permitiría realizar esta misión a tu modo, vamos Inuyasha, pareciera que no me conoces.

-No me malinterpretes, pensé lo mismo.

-Entonces, ¿a qué has venido?

No respondí, y no porque no quisiera, sino porque ni siquiera yo sabía el porque de la verdadera razón de mi visita. Ella espero un buen rato a mi respuesta y al ver que no tenia intensiones de contestar, siguió hablando.

-Hablaba con Koga, o para que mejor me entiendas el jefe de tu “protegida”- dijo con una sonrisa rara en sus labios, no entendía el porqué de ese gesto, pero decidí no preguntar.

-¿Y? ¿Qué te ah dicho?- pregunté esta vez mas ansioso al ver próxima mi misión.

-Lo persuadí y al parecer esta de acuerdo en que nuestra empresa le otorgué un guardaespaldas, el mejor que tenemos en la compañía.

Me entregó unas cuantas tarjetas de presentación con mi verdadero nombre escrito en ellos, si la situación fuera diferente y no hubiera conocido a la chica, seguramente me habrían inventado algún nombre, pero este no era el caso.

-Debes encontrarte con Koga y Kagome a las 3:40, si no llegas a esa hora, da la misión por pérdida.

-¿Qué hora es?- dije con cierto tono de preocupación.
-3:30- contestó de una manera que poco me agrado.

Salí casi corriendo. Si había algo malo en Kikyou era que quisieras o no, siempre se salía con la suya. Ni siquiera pude mostrarle el periódico, pero bueno, ya tendría tiempo para eso, rogaba a todos los dioses existentes que el tráfico no me traicionara.

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Llegué a la oficina de Koga dos minutos antes de la hora que me ordenó estar ahí, si no hubiera contestado el celular, no habría logrado bañarme y arreglarme en menos de diez minutos, lo que me preguntaba era, ¿qué era la cosa importante que koga iba a proponerme?, lo pensé un momento y sentí una sensación de emoción en mi estomago.

-Esta vez tardaste más Naraku, pero bien, mejor tarde que nunca- pensé.

Entré después de haber golpeado suavemente la puerta repetidas veces, ahí me esperaba un entusiasmado Koga que miraba impaciente su reloj.

-Kagome, me alegra que hayas llegado- dijo con su singular sonrisa, respondí el gesto de la misma manera. –Kagome, eh visto tus artículos y en verdad son muy interesantes, es mas, mantienen al tanto a la comunidad pero, estas olvidando algo muy importante.

-¿Algo muy importante?- actué el papel de la desentendida, resultó convencer a Koga, como siempre.

-Tu seguridad- respondió- Es por eso, que he contratado…

Algo o mejor dicho, alguien interrumpió a Koga la presencia del hermano de Sango me aturdió y su llegada desprevenida hizo que me sorprendiera, su simple presencia me irritaba.

-¡Oh!, mira justo a tiempo, Kagome el es…- de nuevo fue interrumpido, esta vez por mi

-¿¡Que haces tu aquí!?

-Un gusto volver a verte- dijo con su cínica sonrisa en el rostro, lo mire como miraba a mis victimas antes de asesinarlas, lo hice inconscientemente pero me di cuenta al ver el rostro que el me dirigió. Algo ocultaba ese chico, lo presentía y en aquellos momentos lo aseguraba más que yo. Decidí volver a mi misma posición serena de antes y con esto tuve la claridad de pensar, si Koga lo esperaba a el, eso significaba que el hermano de Sango era mi enemigo. Me di cuenta que mi misión era matar a Inuyasha, el hermano de una vieja amiga. De nuevo el destino me ponía otra prueba, no tan dura como la anterior, pero esta vez estaba en riesgo de que si el conocía mi verdadera identidad, le diría a Sango, seria mi fin. No dudaría en jalar el gatillo eso lo juraba.

ok eso fue todo... denuevo me retrase demaciado ToT pero esque entre tareas y eso no pude seguirle antes y ahora menos que ya voy a empezar exámenes wow ahora hubo mas post *0* y yo que los amo!!!
los lei como unas 4 veces cada uno xD

Yazi: amigaaaaaaaaaa lupe se reporta *-*!!! jajaja sabes que tu tambien eres mi amiga del alma! xD encerio te gustan las escenas de peleas *-*???? bueno eso es un poco de lo que te espera, si te gustan las peleas de kikyou con inuyasha m.... te fasinara lo que vendra despues >w<

PrincesHoshi: Hijita *-*! te ausentaste pero volviste :3!!! oo espero y esta conti te guste mas que la anterior ^_^

Zéfira: *-* siiiii gracias a tu comentario espero seguir mejorando en mis frases que no sean ni tan largas ni tan cortas u,u jajaja si antes te dio miedo Kagome, ¿que piensas ahora?

kagome-jen: jajajaja ya sabras algun dia de estos *-* sigue leyendo y lo sabras jiji ^w^

Akari: amiga!!! despues de mil años mira aqui esta lo cumplidito :3 gracias por tus post que me animan ToT

Kazuhiko: que lindoooo tus comentarios siempre me alagan x3!!!!! espero y este capitulo tambien te agrade jeje

Kei: hijita!!! mi hijita tierna :3!!!!!! gracias por venir y animarme *-*!!!!! ya sabes que pienso que eres un amor de niña! te agradesco tu apoyo, no sabes cuanto ^_^

Pami: ok gracias a ti perdi el miedo por los criticos y ahora los veo de esta manera, personas que me ayudan a mejorar mi estilo de escritura, espero y esta vez haya mejorado mi ortografía aunque sea un poco jeje, y gracias por la aclaracion de los nombres!, si ves algun otro error porfavor hasmelo saber =D!

*@iko_n@t* : awww gracias!!!!!!!!! que bueno que ya mas gente entro a mi fic, me da muchisima felicidad! :3 y que bueno que te gustooo y se te haga interesante mi fic espero y seguir leyendo post tuyos!
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muchas gracias por todos sus post y su apoyo, cuando no tengo inspiracion leo sus post y me animan a seguir jajaja espero y hayan disfrutado el capitulo e intentare poner la siguiente conti mas seguido
cuidense chau :D
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Re: Mascaras, Dejan CicatriCes

aaa gracias por tu post *-*!!! jajaj no te preocupes conforme avanze la historia sabras un poco mas :3
pero creo que asi no se escribe el nombre ToT
creo que es Houyo o no se ._.
alguien que me ilumine?