Vaya con la muchacha, qué genio se traía. No parecía tener mucha capacidad de autocrítica en cualquier caso, pero poco me importaba en ese momento, porque justo Empoleon había recibido un golpe de martillo brutal. —¡E-Empoleon...! ¡Usa termoadaptación, necesitas algo de descanso! Empoleon: Termoadaptación EMPOLEON: Agua/Hielo Lvl. 9 Rasgo: >> En batalla: si usa "Tridente de hielo" en combate, creará un tridente de hielo con el que se podrá cubrir del siguiente golpe que reciba, aumentando su defensa en +5. El golpe que reciba rompe el tridente, pero puede generar otro para protegerse de nuevo si vuelve a usar "Tridente de hielo" >> Fuera de batalla: como todo pokémon de agua, puede producir agua semipotable para el consumo pokémon y humano. No es lo ideal, pero puede servir... Estadísticas: >> Vida: 15/43 >> Ataque: 18 >> Defensa: 16 >> Velocidad: 14 Movimientos: >> Pistola agua [Control] (5+2 Potencia, Agua, golpea hasta a dos rivales) (5/5) >> Coletazo helado [Destrucción] (10+2 Potencia, Hielo) (3/5) >> Pájaro Osado [Asesino] (18 Potencia, Volador, perderás 1/4 de la vida que quites con este movimiento) (2/3) >> Termoadaptación [Tanque] (cura tu propia vida en 1d12) (1/2) >> Tridente de hielo [Asesino] (16+2 Potencia, Hielo) (1/2)
Fue pensarlo y que Zuki blandiera su martillo con fuerza, logrando conectarle un violento golpe al pobre Empoleon. Mi gesto se contrajo, en silencio, y solté el aire por la nariz. Diamond le indicó a su compañero que se enfocara en recuperar parte de las fuerzas perdidas y yo eché un vistazo disimulado sobre mi hombro, hacia la cubierta del barco, en busca de rastros o señales de los robots. Al regresar los ojos conecté con la mirada de Zuki y asentí. La pequeña comprendió la orden y reafirmó el agarre en su martillo, preparándose para un nuevo ataque. >>Zuki: Golpe metálico [-16 PS] TINKATON: Hada/Acero Lvl. 8 Rasgo: >> En batalla: su martillo gigante le otorga ventaja al atacar con movimientos destructores y asesinos (+5 de ataque), pero se rompe si lo usa demasiado (6 usos). Puede decidir atacar con o sin martillo, salvo para usar "Martillo Colosal", que requiere del martillo. >> Fuera de batalla: puede buscar y encontrar metales y materiales similares. Si encuentra suficientes, ella misma los puede usar para reparar su martillo o crear uno nuevo. También puede acertar a objetivos con gran precisión bateando objetos pequeños con su martillo. Estadísticas: >> Vida: 29/40 >> Ataque: 11 (+5) >> Defensa: 15 >> Velocidad: 17 Martillo: 3/6 Movimientos: >> Golpe metálico [Destrucción] (10+2 Potencia, Acero) (3/5) >> Viento feérico [Control] (5+2 Potencia, Hada, golpea a todos los enemigos) (4/4) >> Martillo Hielo [Destrucción] (10 Potencia, Hielo) (5/5) >> Atizar [Destrucción] (10 Potencia, Normal) (5/5) >> Martillo Colosal [Asesino] (20+2 Potencia, Acero; requiere usar el martillo) (1/2)
Contenido oculto Lucha y Dragón son neutros contra Ferrosoldado; sabiendo que es tipo Lucha, el otro tipo de Ferrosoldado NO es: - Roca - Acero - Fantasma - Psíquico - Hada - Siniestro - Normal - Bicho - Hielo - Volador - Veneno - Dragón Por tanto, su segundo tipo está entre: - Fuego - Planta - Agua - Tierra - Eléctrico De un tajo, con ayuda del Ferrosable pudiste aniquilar rápidamente a un Ferrosoldado, cortando su cabeza metálica de una sentada. El único que quedaba en pie se puso en guardia entonces, acorralado, mientras que Drakloak trataba de golpearle con sus ataques, siempre sibilino y ágil, atento para esquivar cualquier cosa en caso de necesitarlo. Pese a estar acorralado, sin embargo, el Ferrosoldado empezó a cargar su arma como siempre, preparándose para golpear con fuerza. Ferrosoldado B: Carga de energía (Pasiva) Drakloak: Garra dragón (-2 PS) FERROSOLDADO: ???/Lucha Lvl. 3 Rasgo: >> Puede invertir un turno propio en cargar la energía de su espada. Eso hará que en su siguiente ataque, la tirada de ofensiva que sea de x1,5 caras en el dado. Estadísticas: Vida: 24/26 Ataque: 10 Defensa: 11 Velocidad: 8 +30 experiencia *** DRAKLOAK: Fantasma/Dragón Lvl. 4 Rasgo: >> Si su vida se reduce por debajo de la mitad tras un ataque, se hace invisible hasta que vuelva a atacar e ignorará cualquier daño, incluso si es de área. Estadísticas: Vida: 23/23 Ataque: 13 Defensa: 7 Velocidad: 16 Movimientos: - Impresionar [Asesino] (9+2 Potencia, Fantasma. Garantiza un mínimo de 3 puntos de daño, siempre que la suma de ataque + potencia sea superior a la defensa base del rival, independientemente de la tirada de dados) (3/3) - Acoso [Control] (3 Potencia, Bicho; si hace daño al rival, sufrirá 1d2 por cada turno del usuario por lo que quede de batalla) (3/3) - Garra dragón [Destrucción] (10+2 Potencia, Dragón) (2/4) - Bola sombra [Destrucción] (10+2 Potencia, Fantasma) (4/4) Turnos: - Drakloak - Alpha - Ferrosoldado A - Ferrosoldado B
Incluso entre ambos, esa cosa sabía defenderse. Rechazó con apenas un par de rasguños las zarpas del Pokémon cargadas en esa energía arcana propia de su tipo. Éste, por alguna razón, se veía más duro que los otros dos guardias, y mucho peor cuando su hoja aumentó de grosor preparando el próximo tajo. Pero, de nuevo, eso le dejaba la guardia baja. Era fácil presa para un siniestro tajo que buscó abrirle el cuello. Alpha Skywalker: Tajo Umbrío (21 daño - 3 por efectividad: 18 de daño) FERROSABLE: ???/Fantasma Lvl. --- Rasgo: >> Fuera de combate: Ferrosable funciona como una espada, teniendo todas las propiedades de esta. Sin embargo, hay que matizar que la hoja de energía de Ferrosable atraviesa casi cualquier superficie, pero no corta como tal salvo que el objeto sea cortable por una espada normal, simplemente lo atraviesa. >> En combate: las estadísticas que tenga en combate se suman a las estadísticas físicas del portador. Los usos de su movimiento dependen de la mente del portador. >> Cuerpo: 40/33 >> Mente: 20/20 >> Ataque: 16 >> Defensa: 13 >> Velocidad: 10 Movimientos: >> Tajo certero [Asesinato] (16 Potencia, Normal) (Usos: 1/2) >> Tajo umbrío [Destrucción] (10 Potencia, Siniestro) (Usos: 1/4) >> Espada lamento [Destrucción] (10 Potencia, Fuego, recuperas 1/2 del daño que causas) (Usos: 2/2) >> Espadasanta [Destruccción] (10 Potencia, Lucha) (Usos: 2/4) Contenido oculto A lo mejor me equivoqué en lo de la efectividad, pero entiendo que es +/-3 según debilidad/resistencia (?)
Por más que Empoleon lo intentó, no pudo hacer nada. Aquel pokémon, que comprendía que era de tipo acero, tenía clara ventaja sobre el mío, y sus ataques eran extremadamente poderosos. N-no podía hacer nada más... y después de todo el trayecto, de forzar las celdas y de pelear con el robot, era imposible que Empoleon continuase sin poner en riesgo su integridad física. —Empoleon... —murmuré, cuando el pokémon retrocedió por el golpe del martillo. Si no fuera porque la preocupación era superior, la rabia me habría invadido en aquel momento. Sentí impotencia al ver cómo la chica ganaba la razón a base de fuerza. Así era como se las gastaban los dictadores... El imperio en general. Sus palabras eran instrucciones, o si no, arrasaban con todo en su camino. Cómo acababan de hacer conmigo. Había sido demasiado ingenuo probablemente viniendo aquí. Pensé en opciones. Tratar de buscar apoyo en Kyllian... no tendría ningún resultado. Incluso podía probar a huir hacia atrás y encerrarme en la sala a buscar una salida, pero Empoleon no podía correr y yo no podía dejarlo tirado. Y recurrir a la ayuda de los pokémon de la sala no parecía pertinente, estando todos tan heridos. Así que... No tenía salida, ¿no?
Conservé la posición en lo alto de las escaleras durante algunos segundos, de brazos cruzados, observando la escena y analizando las posibilidades. O, más bien, luchando mentalmente conmigo misma. Si me apoyaba en la teoría de que los robots no tenían forma de saber lo que ocurría aquí dentro, que no había cámaras ni micrófonos, mis preocupaciones se reducían al doc verde. ¿Quién era? ¿Cuán fiel era al Imperio? ¿Lo habrían arrastrado a este barco como a todos los pacificadores o gozaría de una posición privilegiada? Conocía el curso sencillo de acción, claro, el que me evitaba los problemas. Pero ¿cómo había acabado aquí? ¿Y en Nieves de la Corona? Si sintiera remordimiento, tal vez, las cosas cambiarían; pero no lo reconocía en ninguna parte. Ni en mi satisfacción, ni en mi ira, ni en el aroma de la pólvora humeante. No me arrepentía de nada. Y este infeliz, aunque molesto y cabeza dura, seguía sin parecer una mala persona. Golpeteé el dedo índice contra mi brazo opuesto y le eché un vistazo a la seta en mi hombro, como si el pequeño manojo de nervios tuviera una respuesta que darme. Y sus ojitos, irónicamente, me ayudaron a comprender un poco. Lo había encontrado temblando, solo y asustado en un cubículo de baño, rodeado de amenazas y con un simio mononeuronal demandando su cabeza. Diamond... era bastante menos adorable, pero su situación se parecía bastante. Hay muchísimas formas de resistirse, y no todas son evidentes. ¿Estaba en mis manos? ¿Podía cambiar algo? Es poco, Anna, pero es una forma de poder. Intentarlo, al menos. Será un camino arduo, pero eres una niña muy fuerte, mi pequeña. Podrás hacerlo. Dejé de darle vueltas. Destrabé las articulaciones, bajé los peldaños a velocidad y me fui encima de Lucas, agarrándolo de la chaqueta (o lo que fueran aquellas prendas) para atraerlo hacia mí de una sacudida. Quizá no lograra evitar que el otro tipo me escuchara, pero era lo mejor que tenía a la mano. De esta manera, si los robots aparecían, podría estirar el show y alcanzar a Diamond antes que ellos. —¿Vas a escucharme ahora? No tenemos tiempo —siseé contra su rostro, viéndolo a los ojos, y giré el rostro brevemente—. Zuki, avísame si viene alguien. Zuki obedeció y, mientras subía las escaleras, devolví mi mirada a Lucas, sin elevar el volumen de mi voz. —¿No ves que intento estirar esta porquería como un chicle masticado? ¿Por qué te piensas que es? Coopera conmigo. Probablemente no lo sepas, pero piénsalo e intenta deducirlo. El Imperio te quiere con vida, ¿por qué puede ser? ¿Quién eres tú? ¿Quién es tu amigo?
—Hmm— Observé por unos segundos al Cinccino flotando en el aire, ignorando el griterío a mis espaldas. Me había preparado mentalmente para recibir otros ataques del pokémon, pero por fortuna el Hatterene pudo ser de ayuda. Así podría proceder más fácilmente. Con el dichoso herido flotando en el aire pero inmovilizado al fin, procedí a inspeccionar a conciencia la herida que tenía, y cerciorar que no tenga nada más fuera del daño superficial que ya era visible. También si esta era una sala para "arreglarles" podría haber un kit con herramientas que me puedan ayudar, Bramblin podría alcanzarlo mientras le revisaba, era más aerodinámico y podría esquivar el campo de batalla que se había convertido el lugar con más facilidad. Revisé la sala para confirmar si es que había algo que podría ser de utilidad , en caso de no encontrar nada un torniquete con un trozo de tela de lo que llevaba puesto iba a tener que bastar. Lo importante era detener el sangrado, ya ir más allá de eso en la situación actual eran lujos adicionales. Lo importante era salir ileso de esta sin ningún daño permanente. La batalla entre los otros dos parecía estar acabando, para mi sorpresa la pacificadora parecía haberle vencido. Quizás sobrestimé la fuerza que tenía el pokémon del polizón. Aunque el hecho de que no hubiesen enviado refuerzos seguía siendo extraño, o cómo aún después de vencerle parecía querer sacarle algo de información... ¿Se habría acercado a él para decirle algo sin que yo escuchara? Igual y esta chica sí que tenía algo de cerebro. La mayoría de los pacificadores eran... sólo músculo, así que encontrar a alguno prudente y que pensara de forma racional era equivalente a ganar la lotería. Pero si se estaba por hacer algún acuerdo con el tipo, el boleto de la lotería podrían significar muy malas noticias para mí, tenía que estar alerta. De todas maneras, mi mejor opción era clara: No meterme en sus asuntos, esperar que resolvieran las cosas por su cuenta y no me metan en sus movidas, cualquiera que sean. Suficiente tenía con hacer el papel de "doctor" sin licencia para lidiar con los daños de la explosión que el causó.
Por fortuna, ninguno de aquellos robots parecía estar cerca. Vince estuvo atento en todo el tiempo mientras cruzabais el pasillo caminando hasta el final, buscando, probablemente, a su compañero Drakloak por todas partes, o algún indicio de por dónde puede estar escondido. —¿Por dónde fuiste, pequeño...? Al llegar al final del camino, sin embargo, visteis algo curioso. Una puerta con un ventanuco redondeado revelaba una salida hacia la cubierta, donde visteis a un par de aquellos "Marowak" extraños, patrullando por la zona. Esa puerta estaba al final del pasillo, pero justo antes, a un lado, había un camino abierto, con... escaleras hacia abajo. ¿Por dónde iríais? *** La herida del Cinccino tampoco parecía ser demasiado grave, pero sí que era cierto que era mejor parar la hemorragia cuanto antes, solo por estar seguros. Así pues, te dirigiste de nuevo a tu sala en busca de algo que te pudiese servir para detener la hemorragia. Ciertamente, en la sala no había demasiadas cosas "médicas" como tal: tenías herramientas múltiples de diverso tipo, tenías al propio Ferrosoldado medio abierto sobre la mesa, y demás utilidades varias en la zona. No parecía que nada te fuese a servir... pero sí había otra opción. Tenías un baño, después de todo. Ahí tenías geles y champús, papel higiénico, acceso a agua y toallas, además del resto de cosas típicas de un baño. Quizá algo de ahí podía servirte, ¿no? *** El combate terminó, con la victoria para Zuki y para Anna. Con Empoleon debilitado, Lucas se rindió y quedó básicamente atrapado, sin poder defenderse ante la pacificadora. Esta, sin embargo, se acercó a Lucas y pareció mostrar más compasión de lo que este, quizá, pensaba. Mientras lo hacía, el Toedscool sobre el hombro de Anna extendió con curiosidad uno de sus tentáculos hacia Lucas, y dio un pequeño saltito, bajando de Anna. Caminó luego por la sala, acercándose a Empoleon y mirando luego a los pokémon heridos de la sala... y quedó mirando luego a Lucas desde abajo, curioso por este. Sin embargo, antes de que Lucas tuviese ocasión de responder, oísteis una voz, y Toedscool se sobresaltó nada más hacerlo, aferrándose a lo primero que vio de nuevo, esta vez, la pierna de Lucas. Lo que sonó fue una voz robótica, escalofriante, que Anna, e incluso Kyllian o Lucas, podían reconocer. Una voz que rfesonó en todas partes de la sala. La voz de aquel... Gardevoir o Gallade plateado y robótico. Del que Kyllian conocía como "Valiant". —AGENTE HIRADAIRA. PROCEDA DE INMEDIATO CON EL SUJETO APREHENDIDO A LA CUBIERTA Y SIGA LAS INSTRUCCIONES. El aire se volvió tenso de repente. ¿El propio jefe de todo aquel barco estaba dando la orden? ¿Para qué coño querían a Lucas con tanto ahínco...? *** Contenido oculto El tipo siniestro es neutral contra Ferrosable (perdona, calculé que era muy eficaz y luego me di cuenta de que no (?) Le quito 5 al daño final, 3 por la subida por la efectividad y otros 2 por el x1,5 del efecto). Por tanto, sumado a lo que ya sabías, hace que el segundo tipo de Ferrosable solo pueda ser uno de estos dos: >> Lucha >> Siniestro El Ferrosoldado que quedó te atacó con fuerza, su espada cargada de energía oscura; pero, aunque fue un poderoso golpe, no bastó para derribarte. Y en ese momento, el Drakloak apareció detrás de él y, con una última bola sombra, derribó al robot definitivamente, noqueándolo. Cuando terminó el combate, Drakloak te miró, esbozando algo parecido a... ¿una sonrisa? Y rápidamente, sin embargo, se deslizó por el aire hasta una de las cápsulas con líquido. Viste que era la que contenía a un Indeedee, y lo viste fruncir el ceño, como preocupado. Se giró hacia ti. —Kloak. Con sus pequeñas patas, apuntó al cristal. ¿Qué querría...? Nota: tu Tauros sube de nivel, puedes escoger un nuevo movimiento de entre los disponibles. Cuando lo hagas se modificarán sus stats. Contenido oculto Ferrosable: Tajo umbrío (-25 PS Alpha) Drakloak: Bola sombra (KO Ferrosable) FERROSOLDADO: ???/Lucha Lvl. 3 Rasgo: >> Puede invertir un turno propio en cargar la energía de su espada. Eso hará que en su siguiente ataque, la tirada de ofensiva que sea de x1,5 caras en el dado. Estadísticas: Vida: 3/26 Ataque: 10 Defensa: 11 Velocidad: 8 Movimientos: - Tajo umbrío [Destrucción] (10 Potencia, Siniestro) (Usos: 3/4) +30 experiencia *** DRAKLOAK: Fantasma/Dragón Lvl. 4 Rasgo: >> Si su vida se reduce por debajo de la mitad tras un ataque, se hace invisible hasta que vuelva a atacar e ignorará cualquier daño, incluso si es de área. Estadísticas: Vida: 23/23 Ataque: 13 Defensa: 7 Velocidad: 16 Movimientos: - Impresionar [Asesino] (9+2 Potencia, Fantasma. Garantiza un mínimo de 3 puntos de daño, siempre que la suma de ataque + potencia sea superior a la defensa base del rival, independientemente de la tirada de dados) (3/3) - Acoso [Control] (3 Potencia, Bicho; si hace daño al rival, sufrirá 1d2 por cada turno del usuario por lo que quede de batalla) (3/3) - Garra dragón [Destrucción] (10+2 Potencia, Dragón) (2/4) - Bola sombra [Destrucción] (10+2 Potencia, Fantasma) (3/4) Turnos: - Drakloak - Alpha - Ferrosoldado A - Ferrosoldado B
La impotencia en aquella situación me invadió, y cuando Kyllian salió de la sala me quedé allí a solas con la muchacha. ¿Cómo podía resistirme? Ni siquiera serviría ya huir a la habitación que allí había... Ella se acercó de manera violenta y tardé en reaccionar; era mucho más ágil de lo que esperaba. Pronto, me agarró de la chaqueta y tiró de mí. Me sentí algo incómodo, con mi espacio personal invadido. Estaba "estirando el chicle"... ¿Qué quería decir aquello? Era cierto que se había andado con muchos rodeos, cuando era mucho más fácil atacarme desde el principio y no lo había hecho. Tal vez empezaba a confundir la simpatía con la enemistad, pero no me había dado la impresión de que quisiera ayudarme de ningún modo (y por lo que fuera, atacarme no ayudaba en ese aspecto). Así que... ¿qué debía hacer? Podría intentar hacerle caso, sí, y tampoco es que tuviera más opciones, ¿pero qué quería que hiciera? —Ya te lo he dicho varias veces, chica; solo somos dos civiles, nada más —me volví a resignar—. En su momento, tuvimos algún encontronazo con Chance, hace mucho tiempo, cuando secuestró a un amigo y tuvimos que rescatarlo. Si nos guarda rencor por eso vuestro líder, pues qué sé yo. A él también le debió guardar rencor Joel en su momento, ¿sabes? Que pase página, como hemos hecho todos. Ahora mismo no tenemos nada que ver. Me soltó justo cuando escuchamos un ruido metálico y alguien más entró en la sala. Era el mismo robot que antes, pero ahora plateado; ese era Valiant, ¿verdad? Aquel de quien Kyllian había hablado. Y parecía ser el jefe, puesto que le pidió a la recluta que me apresara y me llevara a la cubierta. De nuevo, no mencionó nada sobre atacarme, así que era cierto que me querían con vida. Faltaría más, por otro lado, que quisieran matarme cuando no había tenido contacto con el imperio en años. —Valiant es tu nombre, ¿verdad? —me dirigí directamente al robot; debía aprovechar que tenía al líder delante—. ¿Qué es lo que quieres de mí? ¿Por qué me buscáis, me necesitáis para algo? Hace mucho que vivo al margen del imperio... Quizás pueda colaborar si estoy de acuerdo con vuestras decisiones, pero no puedo saberlo si no me explicas por qué me queréis. Pero estoy dispuesto a que lleguemos a un acuerdo. Si tenía suerte y era capaz de obtener una respuesta, igual y hasta le servía a la recluta que tanto me había insistido.
Tch. Claramente iba a tener que improvisar algo, pese a que me asignaron los pokémon de esa celda no tenía ningún tipo de herramienta médica. Si fuera como el ferrosoldad que estaba abierto en la mesa todo sería más sencillo. En el baño cogí algunos de los geles, papel higienico y toallas . Servirían para limpiar la herida e improvisar gasas y un torniquete rudimentarios de momento. Sin distraerme más volví a las celdas en donde estaba el Cinccino para empezar a tratar su herida . Mientras volvía escuché la voz del Valiant. Estaba dando una órden directa para llevar al polizón a cubierta. Él parecía bastante confiado como para demandarle respuesta antes de acatar la directiva; si no hacía nada el peor escenario es que el Valiant tenga que venir directamente hasta aquí. Dejé mi intento de torniquete rudimentario por unos segundos y le hablé al polizón que estaba a manos de la pacificadora que estaba más interesada en tener una charla que apresarle — Si quieres respuestas tendrás que dirigirte a la cubierta. Y ya que van ahí traigan al Tauros de vuelta que se escapó por tu culpa. Que ahora hable significa que te estuvo observando desde el inicio, tch. A no ser que Valiant haya tenido ganas de dejarte pulular y mandar la menor cantidad de seguridad posible, estimo que algo más estará ocupando su atención... Si dices que tenías un amigo aquí y tiene tu misma definición de no causar problemas, apostaría que es su culpa —
Junto con Vince, cruzamos el pasillo rápidamente, no parecía que nos fuésemos a encontrar con bichos de metal, hasta que los divise al otro lado de la puerta que daba a cubierta. Me detuve en seco, aun estábamos cerca de la sala anterior y podía escuchar el amortiguado conflicto a través de las paredes. No había salido de una pelea para entrar a otra. La situación era clara, Vince no tenia Pokémon y Wooper no estaba en condiciones de combate ahora. Tendríamos que evitar el conflicto a toda costa. Escaneé el pasillo y vi unas escaleras hacia el piso de abajo. El entorno estaba oscuro y no podía distinguir a donde nos dirigía, pero no importaba, no quería quedarme quieto y darle oportunidad a los guardias de vernos. — Por acá — Le hice una señal a Vince con mas convicción de la que sentía. ¿Cómo podríamos escapar? ¿En bote? ¿Escondernos hasta que paren en tierra firme otra vez? Lo resolvería sobre la marcha, lo importante era sobrevivir.
Atiné de lleno. En su cuello ya veía como los cables se retorcían al ritmo de pequeños chispazos y creí que eso sería suficiente para acabar con esa cosa. Pero pronto me vi con mi guardia contra un espadazo cargado. Bastardo. Tenía mucha más vitalidad de la que creí, tanta que ni siquiera pude defenderme. Mi hoja despegó hacia atrás y arrastró mi brazo con ella dejándome sentir en la cercanía el crujido de mis huesos y el como mis músculos tiraban intentando mantener el hombro en su lugar. Pasó en un breve instante, y aún así se sintió como algo eterno. Ver como el guardia preparaba el segundo ataque me hizo saber que no fallaría. Apuntaba directo a mi cuello, irónico, y no había siquiera forma de defenderme. Ese era el fin... Y estaba bien. Lo siento por Marcoh. Es todo lo que puedo dar... Y entonces vi el amarillo de sus ojos asomarse desde atrás. Luego un ruido metálico y finalmente el cacharro cayó contra el piso, destruido. El Minipult me había... Salvado. Su sonrisa me volvió a contrariar. Desvié la mirada para concentrarme en mi brazo, en el dolor que ahora parecía inaguantable y que rápidamente me forzó a descubrirme para ver como el rojo se esparcía moteado en una gran mancha por toda la piel. Intenté mover el hombro en pequeñas ruedas y cada una dolía y crujía... Espera, ¿duele? No sentirlo en estas dos peleas me hizo ahora ser consciente de golpe. Miré a mis dedos y el ojo se había cerrado. El sable que llevaba ahora dormía, si se le puede llamar así, e incluso el agarre que me forzaba a tomar era más débil. Pronto pude ver como el filo desaparecía para solo quedar el mango. Seguía aferrado a mí, pero ya me dejó mover un poco los dedos y, de nuevo, más dolor. Lejos de la sensación de golpe en mi hombro, éste era un ardor frío y desagradable. Me miré los últimos dedos y vi como la carne pelada estaba al rojo vivo tras chocar con el primer Pseudo Marowak... Tsk, y ahora la misma sensación rellenaba mi pecho por el primer corte. —Agh. Solo emití un quejido. El cuerpo empezaba a volverse pesado, pero no estaba muerto aún y todavía tenía algo por hacer. Incluso el Pokémon me lo recalcó llamándome a acercarme y revisar al que estaba tirado en el frasco que rompí. —... Te debo una... Supongo. Así que activé mi arma una vez más. Con su filo corté los cristales de la cúpula para solo voltearlo como si fuera un barril. Pokémon y líquido fuera ya, me incliné sobre el mismo para que mi mano libre empezara a buscar vida en su cuello. Contenido oculto: Ficha Alpha Skywalker: FERROSABLE: ???/Fantasma Lvl. --- Rasgo: >> Fuera de combate: Ferrosable funciona como una espada, teniendo todas las propiedades de esta. Sin embargo, hay que matizar que la hoja de energía de Ferrosable atraviesa casi cualquier superficie, pero no corta como tal salvo que el objeto sea cortable por una espada normal, simplemente lo atraviesa. >> En combate: las estadísticas que tenga en combate se suman a las estadísticas físicas del portador. Los usos de su movimiento dependen de la mente del portador. >> Cuerpo: 15/33 >> Mente: 20/20 >> Ataque: 16 >> Defensa: 13 >> Velocidad: 10 Movimientos: >> Tajo certero [Asesinato] (16 Potencia, Normal) (Usos: 1/2) >> Tajo umbrío [Destrucción] (10 Potencia, Siniestro) (Usos: 1/4) >> Espada lamento [Destrucción] (10 Potencia, Fuego, recuperas 1/2 del daño que causas) (Usos: 2/2) >> Espadasanta [Destruccción] (10 Potencia, Lucha) (Usos: 2/4) Contenido oculto Voy a aprender el movimiento de Asesinato con Tauros.
Contenido oculto Hello, ¡por fin termino de reabrir todas las tramas! Repito lo dicho en otras zonas: en este post os he hecho pequeñísimos resúmenes de lo acontecido hasta ahora (muy pequeñísimos) y he avanzado hacia delante la trama donde lo dejamos para que podáis seguir. Con vosotros pasa que sois, creo, el grupo que más en medio de cosas estaba cuando me marché, así que tampoco puedo hacer como en otros casos donde he dado un gran paso en los acontecimientos para seguir; más bien tengo que seguir dando pasitos como ya estábamos haciendo, no sé si se capta la metáfora (? En fin, como siempre, cualquier duda sobre mecánicas o lo que sea, aquí me tenéis. Lucas Diamond Gigi Blanche Bueno. Acabar montados en aquel barco fue, irónicamente, cosa del destino, al parecer. Ninguno de vosotros dos, ni Anna ni Lucas, conocía al otro. De hecho, ni siquiera veníais de mundos iguales, prácticamente. Uno Campeón de una región de la Coalición, la otra pacificadora de Valthyria. Pero, sea por destino o por lo que fuera, ahora os habíais enfrentado, y la batalla resultó en una victoria para Anna, que tenía además el apoyo (en buena teoría) de los robots. Aunque básicamente la hubiesen obligado a entrar allí. Lucas llegó con el objetivo de salvar a un viejo amigo, aun a sabiendas de que al que buscaban realmente era a él. Pero no tenía idea de qué era aquel barco o a dónde se dirigía. Por su parte, Anna no estaba en una situación muy parecida: pese a ser parte del cuerpo militar de la vieja Galeia, ahora parte del Imperio, no tenía ni idea de cuál era su misión ni la de los muchos compañeros que fueron "reclutados" allí. Solo obedecía órdenes, incluso quizá por mera supervivencia... y las últimas órdenes fueron detener a Lucas, el polizón. Y ahora, el robot jefe había hecho acto de presencia, hablándoles por aquella especie de megafonía, demandando que Anna llevase a Lucas a cubierta. ¿Por qué? No lo sabía nadie con exactitud. De nuevo, con aquellos "jefes" nada parecía evidente. Valiant se detuvo en su discurso ante tu pregunta. Por un instante, quedó callado, como si os hubiese dejado a vuestra suerte. Y, al final, habló, o más bien emitió sonidos robóticos. Pero estos sonidos tenían una cierta carga de personalidad, eso sí. Se notaban más... deliberados. —LUCAS DIAMOND. SERÁS INFORMADO DEL PROPÓSITO POR EL QUE TE NECESITA EL IMPERIO CUANDO LLEGUE EL MOMENTO... PERO EL MOMENTO NO ES ESTE. NOS ACOMPAÑARÁS. NO IMPORTA CUÁN DE ACUERDO ESTÉS CON NADA. NO DECIDES EN ESTA POSICIÓN. Hubo otro silencio. En ese momento, dos Ferropaladines más aparecieron por allí, como escoltas enviados a custodiar a sus rehenes. —... TU COMPAÑERO HERIDO NECESITA ATENCIÓN MÉDICA Y DESCANSO —siguió Valiant desde los altavoces, refiriéndose a Empoleon—. SE LA PODEMOS PROPORCIONAR. O PODEMOS PROPORCIONARLE EL DESCANSO ETERNO. TU ELECCIÓN. Luego, se dirigió a ti, Anna. Casi parecía que te escrutaba de arriba abajo incluso desde la distancia, y hubo un levísimo, ínfimo pitido que resonó en los altavoces. Cuando habló tras eso, lo hizo, de nuevo, con esa cadencia excesivamente robótica, programada, fría. Más fría aún de lo que per se ya era. —AGENTE HIRADAIRA. REITERAMOS ÓRDENES: ESCOLTE AL POLIZÓN A LA CUBIERTA. No hubo un anuncio directo ni velado de las consecuencias por no obedecer, claro. No como a Lucas. A él... le dejaron bastante claro cuáles serían las consecuencias por resistirse. *** Santygrass Mientras todo aquello sucedía entre Valiant, Anna y Lucas, tú habías permanecido con un perfil bajo, y esa era probablemente la mejor estrategia a seguir, dada la situación. Habías sido traído allí con un propósito que, si bien difuso, era bastante más claro que el que le habían dado a los pacificadores: te correspondía revisar el mantenimiento del barco y hacer ciertos arreglos a aquellos Ferrosoldados. En el proceso, claro, te diste cuenta de que estabas junto a jaulas llenas de pokémon, y una cosa llevó a la otra, y... los liberaste. Ahora, pese a haber sido agredido por un Cinccino herido por una explosión inesperada de un Ferropaladín, habías insistido en seguir tratando de ayudarle. Con todo un arsenal de toallas y utensilios varios del baño de tu habitáculo, decidiste tratar de curarle las heridas, y pareció que tuviste más éxito del esperado. El Cinccino al principio reaccionó con recelo, pero al final pareció dejarse hacer, y ahora te miraba desde lejos con confusión, como si no pudiese comprender aún qué debía pensar de ti. ¿Eras... bueno o malo? Sea como fuere, presenciaste la "conversación", más bien una ráfaga de órdenes, de Valiant y Lucas y Anna, y viste alejarse a estos sin mayores problemas, sin que nadie pareciese reparar en ti ni recriminarte una potencial colaboración con un enemigo. Parecías haber salido airoso. ... pero en ese momento, otro Ferropaladín se te acercó. Vaya, hombre. —KYLLIAN FAURE. NUEVA TAREA ASIGNADA: REPARAR INCIDENCIA EN MOTORES DEL BARCO. PROCEDIENDO A ESCOLTA. Se giró, esperando que le siguieses. ¿Reparar motores? ¿Una incidencia, ahora? Parecía que los problemas no habían hecho más que empezar. *** Kcalbdelaperdicion Si teníamos que hablar de mala suerte, coincidencias y destino, sin duda tú eras el más afectado. De alguna forma prácticamente inexplicable, piezas de dominó se habían alineado de tal forma que ahora estabas en aquel barco, llevando el traje de un pacificador que no te correspondía, fingiendo una identidad falsa y acompañado de un Wooper que parecía, eso sí, encantado contigo. Y lo peor es que tras eso vino una especie de conato de revuelta de los pacificadores, el cual fue instigado por ti y por Vince, el tipo fortachón que ahora te acompañaba, en busca de su perdido Drakloak. ¿Cómo habías acabado allí, y cómo había sucedido todo aquello? Era una muy buena pregunta, con una muy difícil respuesta. —Sí, bajemos —asintió Vince, siguiéndote de cerca. Habíais logrado escabulliros de los Ferrosoldados, y ahora os movíais céleres por los pasillos extraños de aquel barco. Al final, en una bifurcación, decidiste bajar varias escaleras, y tanto tú como Vince empezasteis el descenso. Uno que fue más largo y extenso de lo que esperabais, probablemente: las escaleras, que dieron un par de giros, eran largas y casi parecían interminables... pero terminaron llegando a su fin. —Buf... menos mal que acaban. Hemos debido descender hasta lo más bajo del barco. Sí que es grande, de fuera lo parecía, pero no sé si tanto —comentó Vince, hablando a gran velocidad, aún lleno de adrenalina. Solo cuando se hubo calmado un poco se permitió respirar y miró a su alrededor. Máquinas. Muchas máquinas. Algunas expulsaban vapor, otras temblaban, y otras tantas portaban pantallas y estaban colocadas por todas partes. Vince las miró, sorprendido, boca entreabierta, mientras empezaba a curiosear la sala. Parecía una extraña... ¿sala de motores, caldera? Algo así. Una sala de control. No podías estar seguro a simple vista, porque todo cuanto entendías de aquello es que eran muchos chismes de muchos tipos, pero poco más. No tenías conocimiento de ello. Y claramente, Vince menos aún. —Wow. Mira cuánto aparato. ¿Para qué servirán? ¿Crees que si pulsamos algo saltará una alarma o algo así? —dijo, y probablemente sería buena idea instarle a que no pulsase nada sin pensar. Parecía el tipo de persona que lo haría solo por un impulso. Al fondo de la sala, dos puertas de acero cerradas se alzaban, bien selladas. Parecía que había más salas más allá, ¿eh? Qué habría tras ellas, ya... era un misterio. *** Naiki Por tu parte, tú acabaste en el barco por decisión propia, pero fue más un impulso que una decisión. Suplantaste otra identidad, creyendo que habrías engañado a aquellos robots, para tratar de proteger con ello a un viejo conocido, o quizá simplemente lo hiciste porque te nació hacerlo, sin más. Importaba poco, realmente... como la mayoría de cosas últimamente. Pero, desde luego, ser apresado en aquel barco había sido toda una ruptura con la rutina. El robot jefe, llamado Valiant, parecía estar disfrutando poniéndote a prueba, amenazando con matar a un pobre inocente si no lo hacías, y... no podías quedarte quieto. Tu vida, quizá. ¿La de otros? Eso era un tema más delicado. Armado con algo que no sabías bien si era un pokémon, un robot sintiente o simplemente un arma, lograste derrotar a varios Ferrosoldado en tu camino, siempre ante la aparente mirada atenta de Valiant, que te iba hablando y reproduciendo audios de Chance por el camino, como si aquello fuese una particular tortura psicológica, una burla, de algún modo. Al final, encontraste una sala donde numerosos pokémon flotaban en distintos tubos llenos de extraños líquidos, y la pelea con algunos Ferrosoldados derivó en la ruptura de uno. Un pequeño aliado inesperado, un Drakloak que se movía en las sombras, te ayudó a derrotarlos... y ahora parecía estar pidiéndote que socorrieses de algún modo a aquel pokémon. Era un Indeedee, un pokémon que quizá no conocías, pero que tenía los ojos cerrados y parecía estar bastante débil. Eso sí, su corazón aún latía: estaba viva, y no parecía tener heridas superficiales. No, parecía bastante intacta, pero, a su vez... era como si la hubiesen drenado de energía. Drakloak observó con una expresión inalterable, pero se adivinaba incluso tras ella algo de preocupación. Esa Indeedee parecía ser lo que venía buscando, o al menos parte de ello, ¿no? Contenido oculto: Edit Se ha modificado un poco el párrafo de Lucas y Anna y una frase del de Kyllian, dado que indiqué que Valiant estaba allí presente cuando NO lo estaba, hablaba desde megafonía.
La actitud de Lucas se relajó bastante una vez me le fui encima, lo suficiente para aflojar lentamente mi propio agarre en su ropa. ¿Decía que había tenido un encontronazo personal con Chance? Mis ojos se abrieron, sorprendida. Lo decía como si no fuera nada, pero a mí me sonaba importante. ¿Qué clase de civil ordinario tendría un encontronazo con el jodido líder de un imperio? Tal vez no se tratara del viejo conflicto en sí, sino de que... este chico y su amigo hubiesen permanecido bajo su radar. Mi mano soltó su ropa finalmente y una voz robótica rebotó en el espacio, interrumpiendo mi tren de pensamiento y mi intención de respuesta. Alcé la vista en todas direcciones por mero instinto, sin alejarme de Lucas, y mi semblante se comprimió en una mezcla de tensión y fastidio. Justo cuando empezábamos a conversar como gente civilizada... Entonces sí nos habían vigilado, ¿eh? Se habrían comido la película entera con palomitas. Por suerte, no creía haber jalado demasiado de mis privilegios como pacificadora. Resoplé en voz baja, noté que la setita se había aferrado a la pierna del polizón y seguíamos sin tener noticia del doc verde. La orden fue breve y concisa, pero entonces Lucas abrió la boca y clavé la mirada en él, preocupada. No fue hasta comprender sus intenciones que relajé un poco los hombros y me tragué el comentario mordaz de turno. Míralo tú, tan bonito y bien comportado frente al mandamás. ¿Sirvió de algo? Por supuesto que no. Como mucho me valió para conectar miradas con Zuki e indicarle de un movimiento de cabeza que regresara junto a mí. A la negativa le siguió una evidente reiteración de la orden previa y volví a resoplar. Me ubiqué tras la espalda de Lucas y le di un fuerte empujón, lo suficiente para tener que cazarlo de la ropa antes de que se comiera el suelo. Al jalarlo de regreso lo pegué a mí con el pretexto del envión y rápidamente le colé un pequeño objeto en el primer hueco que encontré, fuera un bolsillo, sus pantalones o directamente dentro de los calzones: una de las pociones que me habían facilitado antes de venir aquí. —Coopera, campeón —susurré contra su oído, y luego alcé la voz conforme lo llevaba hacia las escaleras—. Vamos, andando. Tendría que seguir poniéndome creativa... en la cubierta. De momento no veía más... Espera, ¿la cubierta? —Sí se ocuparon del Tauros suelto, ¿verdad? —pregunté, deteniéndome junto a Lucas a mitad de las escaleras—. Preferiría no salir despedida al agua por culpa de un pokémon rabioso, la verdad. Contenido oculto si hay alguna cosa que hice y para la cual ve mejor que use dado me avisa, compadre
Con tres dedos toca la tráquea primero, ahí justo en medio del cuello, desliza levemente hacia el lado y presiona un poco. El latido debería sentirse con facilidad. Lo sabía, lo había practicado y hecho hace años, parecía más bien una eternidad. Entonces solo iba y lo hacía. No encontrarlo era señal para correr, llamar a la gente que auxiliara o directamente salir de la zona peligrosa en una guerra sin pausa. No había tiempo para el miedo que me invadía ahora. Temblaba antes de siquiera palpar, no quería no hallarlo. Irónicamente los latidos de mi corazón ocultaron cualquier cosa. No estaba. Por más que removiera entre su pelaje blanco, no estaba. Sudé frío, saqué mi mano con celeridad. Quería apartarme, no volver a saber de este Indeedee, pero la silenciosa figura flotando me detuvo. No necesitaba palabras, nada, solo ejercía presión para que me quedara ahí y pagase mis cuentas. Maldije mi suerte, el como las nauseas empezaban a traer de vuelta por mi garganta ese puré pastoso y como de a poco mi visión se nublaba en espera de un ruego inútil. ... ... ... ... ... ... ... Tum... Tum... Tum... No en el cuello, sino en el pecho. Muy suave, difícil de percibir, pero ahí estaban: Latidos. Solté un suspiro largo y pesado, descargo de todo. Me cayó transpiración por el rostro mientras sentía el aire volver a mi pecho. Suficiente, no quiero saber más de esto. —Vive.—Avisé, sin hacer contacto visual. No soy enfermera joy para hacer más por un Pokémon así. Ni siquiera sé qué es el líquido este, y mucho menos qué más ocurría en esta sala. Yo tenía mi propio "objetivo". Y necesitaba todos mis recursos para lograrlo, más con el continuo punzar de mi brazo derecho. Sostenía el sable por pura voluntad de la misma arma. De ahí que me volviera al primer Marowak caído, aquél de cuyo cadáver esperaba recuperar mi gema. No era dinero, sino munición. Si podía no perderla, mejor. De poco más me serviría aquí o en cualquier parte, en todo caso. Eso era todo aquí. Escalé los peldaños que daban a la puerta para continuar. Miré por última vez atrás, al Minipult. Si venía o no era cosa suya. Ni siquiera sé si es mi aliado, así que solo me limité a empujar. La abrí cauteloso, evitando hacer escándalo. Obvio que habría peligro. No había oído terminar este tonto juego.
Por supuesto, los ferropokémon no reaccionaron ante tu pregunta. De hecho, no hubo mención alguna del Tauros, ni del hecho de que los demás pokémon habían sido parcialmente liberados de aquellas jaulas. Era como si no les importase lo más mínimo, como si les diese igual. Probablemente, sucedía justo eso. Fuisteis guiados por aquel Ferropaladín hacia la cubierta, y pronto os indicó con un gesto que siguieseis caminando en una dirección determinada, pasando a colocarse detrás de vosotros. La mirada impertérrita del robot analizaba cada movimiento... El único guardia que había ahí, custodiándoos, era aquel robot. Técnicamente, nada os impedía desobedecerle, pero... sabiendo que Valiant podía estar vigilando todo, ¿qué tan buena idea sería esa? *** Fuiste capaz de recoger tu gema sin mucho problema, pero cuando intentaste marcharte y abrir la puerta por la que habías venido, algo te lo impidió. El Drakloak, de nuevo. Había aparecido entre ti y la puerta, y con un gesto, te indicó que le siguieses con la mirada. Se deslizó entonces, dirigiéndose al Indeedee, y con sus dos patitas intentó levantarle sin esfuerzo. No podía cargar con él: pesaba demasiado. Te señaló con un gesto de cabeza y luego señaló al pokémon. Parecía molesto ante la idea de que te marchases sin más. Huh...
Detenido de golpe por el dragón éste. —¿Qué? Pensamiento con tono de disgusto. El tiempo era finito, poco. No podía gastar más en algo que no me ayudase a progresar, y ahora su intromisión solo hacía eso. Por eso acabé siguiendo su indicación y quedándome con su imagen y un intento inútil de levantar al mojado tipo psíquico. Sus gestos y expresión lo dijeron todo. Incluso el gruñido cuando solo lo ignoré y acabé por girar el pomo. No me iba a dejar salir de aquí sin él. Tché. —Tú irás primero por la puerta. Cargar a esta cosa inconsciente me dejaría expuesto, más si lo cargaba al hombro como un saco. Mejor usé mi abrigo, porque las mañanas eran frías en Udan, para rodear su cuerpo con el verde ennegrecido por la mugre. Un canasto bajo su cuerpo que abrochaba las mangas por encima del corte en mis oscuros tirantes, así me permitía llevarlo a la espalda y sin estorbar mi visión y movilidad, fuera del peso extra que esto significaba. Subir escaleras hacía a mis rodillas sufrir. Al menos el bicho parecía contento. Bravo. Ahora déjame seguir. >>Te sigo. Contenido oculto No sé si quieres un d20 de constitución o algo (?) Pero estoy legalmente obligado a poner esto:
