[DIGIMON SANDBOX] Área residencial

ESCUELA PÚBLICA
[Hiori]

—Permiso concedido soldado, pero si no habla tanto con la boca llena— comentó el abuelo, sin evitar que se le escapara una sonrisa por la comisura, producto del gesto de la niña que en el fondo le causaba mucha gracia, pero tenía que hacerse el duro.

—También llévese dinero del cochinito, ahí coloqué su mesada diaria y lo que encontró ayer en el parque— agregó el viejo, haciendo mención a una alcancía que tenía la niña, donde guardaba sus ahorros personales. Se trataba de una con la forma de Hamm de Toy Story y era de las que tenían un corcho debajo para poder retirar dinero sin romperla.

Finalmente, después del desayuno, la niña y su Digimon estaban listos para su primer día de clase juntos. Su abuelo había llegado exactamente puntual a la escuela y dejó a la niña frente a la puerta tras despedirla con sus típicos ademanes militares.

En la puerta, los niños ingresaban ya a sus aulas, algunos iban alegres o apresurados, pero la mayoría avanzaba con sueño y desganados a la primera hora de clase. Biyomon seguía firme en su papel de muñeco de felpa.

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Ayeah tenés $225 en tu alcancía. Podés elegir cuánto te llevás en la mochila y cuánto dejás en casa.

 

Kaede

A la mañana siguiente había despertado para un nuevo día en la escuela, en cuanto al desayuno mamá ya lo tenía listo y allí me senté con ella, Shizune aún no llegaba, quizás estaba investigando alguna aparición ¿Tendría eso que ver con los Digimon que están apareciendo? No sería extraño pero ahora es mejor priorizar otros asuntos.

—Espero no se cansé demasiado, hace mucho no arreglo su cabello y no pruebo sus onigiris—opine mientras daba un bocado a mi desayuno y responder de nuevo— ah y en cuanto a eso tengo un nuevo peluche de Salamon que justo ves muy calmado ahí—hable del mismo que por alguna razón estaba en nuestro mundo— creo que me quedo algo bien.

Sigo comiendo en paz pues como se podía evidenciar Salamon es bueno fingiendo ser un peluche en el momento adecuado.

 

ESCUELA PRIVADA
[Kaede]

—¡Ah, pero si te quedó precioso!— le dijo su madre a Kaede, tras conocer a Salamon —Cada vez te salen más detallados, has superado a mamá— le dijo orgullosa.

Finalmente, el desayuno acabó y la niña volvió a su cuarto a prepararse para la escuela. Cuando salió, su hermana la esperaba para que fueran juntas, como solían hacerlo. Misato iba a la misma institución, sólo que ya estaba en secundaria. Con el uniforme puesto y un peinado más arreglado, Misato se veía más presentable y bonita.

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Sin embargo, la mayoría del tiempo llevaba su ropa de entrenamiento y el cabello hacia atrás, pues estaba pasando por una etapa donde el kendo se había convertido en su principal afición y aspiración. Incluso su carácter era cada vez más fuerte.

Tras llegar a la escuela, su hermana se despidió de Kaede y se dirigió al área de los de secundaria.

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Ikoma-kun
Tenés $200. Podés elegir depositar dinero u objetos en tu casa.
También podés decidir llevarte a Salamon a la escuela o que se quede en casa.

 

Hiori

Realizó un gesto de victoria con su puño cerrado ante el consentimiento del Comandante Abuelo y apuró el resto del desayuno para después correr a por Biyomon.

— ¡Tenemos permiso para que vengas conmigo a clase!— Anunció feliz.

Acto seguido tomó dos monedas de su cerdito, la grande para ella y una pequeña para Biyomon y las guardó en el bolsillo ultrasecreto de su mochila destinado para tal fin.

Canturreó durante todo el trayecto y, tras despedirse con idéntico saludo militar, salió corriendo rumbo a su aula. No podía esperar a enseñarle todo aquello a su digimon.

— Aquí es donde bebemos agua. — Señaló al pasar por las fuentes. — Y ahí se tropezó un niño de sexto y sangró a chorros por la rodilla.— Añadió, mostrándole un escalón con una sospechosa mancha oscura.

Siguió con su tour hasta llegar a su mesa y, una vez allí, depositó al ave con suavidad en el suelo.

— Ahora toca aprender.— Susurró. — Si prestas atención quizá podamos hacer juntas la tarea.

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Tomó $100 para ella y $25 para Biyomon xD

 

Ilana Rockefeller

Lo normal era despertar con olor a café, ¿no? Por eso me hizo algo de gracia que Coronamon preguntara qué era ese aroma, aunque estaba todavía adormilada y me enjuagué los ojos antes de contestarle. También tuve que cubrirme un bostezo.

—Es café —expliqué, tranquila—. A mí no me gusta mucho, pero el olor es muy rico.

En todo caso, tuve que volver a pedirle que se quedara en la habitación y que volvería en un momento para que nos fuéramos a la escuela, porque no pensaba dejarlo aquí solo. Al bajar las escaleras papá me ofreció una rosquilla y se me iluminó el rostro al estar a punto de aceptarla, pero mamá intervino diciendo que eso no era un desayuno muy sano y no pude evitar hacer un mohín, pero le hice caso pues a papá tampoco le quedó de otra.

Las tostadas con mermelada estaban ricas de todas formas y el té también, así que comí con gusto, aunque al levantarme miré la caja de rosquillas de nuevo. Dudé, pero busqué a papá con la vista y le puse ojos de cachorro mojado.

—¿Puedo llevarme una a la escuela? —le pregunté—. Por favor.

La verdad es que la rosquilla era para Coronamon, ¡pero eso nadie tenía que saberlo! Independientemente de la respuesta, volvería arriba y regresaría al digimon a su forma de Sunmon para que nos fuéramos a la escuela. Se me ocurrió pasar a buscar a Aiden, pero no supe si era demasiado, así que ya lo vería a él y a Kaede en la escuela o la salida.

 

Kaye

Seguía ahí. Un Digimon, pequeño como era en su forma bebé, envuelto entre mis brazos. Profundamente dormido.

Quería, deseaba, poder quedarme todo el tiempo que este día pudiera permitirnos para permanecer acostado. Relajado.

Pero, tal como era la situación, solo podía permitirme cinco minutos antes de decidir levantarme.

Rutina.

Ahora mismo me quedaba aferrarme a lo conocido, a la que conozco. Aferrarme a lo que me quede de la normalidad que sentia que desde ayer ha llegado a su fin...

Me asustaban las consecuencias. Temia los castigos. Responsabilidad escolar.Y mis mejores ideas eran esconder todo, fingir estar bien y seguir.

Dejando a Huckmon (Koromon) descansando, me fui cambiando la ropa lo más rápido y ordenadamente posible, en intento de recuperar los minutos perdido en mí capricho.

Tendiendo la cama, tapo a Huckmon con las sábanas. Demorando otros minutos en esconder su bollo bajo las sábanas junto al generado por la almohada.

Podra respirar ¿Verdad? ...

Me asegure de dejar la mochila arriba de la cama, para así tener excusa de ir a por ella luego... Salgo de mí cuarto para ir al bajo y seguir con el desayuno.

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Finalmente he vuelto de agarrarme a madrazos contra un kuribohmon(?)

 

ESCUELA PÚBLICA
[Hiori, Kaye]

Biyomon obedeció y se quedó quieta, observando a la maestra, pero le era muy difícil aprender algo de todo lo que se decía y se estaba aburriendo a horrores. Al parecer, en eso era igual que su Tamer.

Sin embargo, por suerte para ambas, algo más entretenido podía estar ocurriendo, pues en ese momento el Digivice de Hiori emitió un leve pitido para dar un aviso. Su pantalla ahora mostraba una brújula con una flecha azul que podía seguir...

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Aunque tendría que pedir permiso para ir al baño o algo así para salirse de clase. Si no, no le quedaba otra que esperar al recreo.

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Ayeah Podés lanzar CAR (Carisma) para ver si te dejan salir de clase.

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Tras sentarse a la mesa, a Kaye lo esperaban los típicos cereales con leche de todas las mañanas. Hoy, al menos, podía elegir entre los anillitos frutales de colores o los de chocolate. Su madre lo miraba, controlando que no se le fuera a ocurrir la locura de combinar los cereales. Papá ya se había marchado temprano al trabajo.

Tras volver a su cuarto para alistarse, Kaye debía decidir si llevaba al Koromon a la escuela o lo dejaba en casa. Si lo llevaba, podía hacerlo como un muñeco en sus brazos o también podía ponerlo en su mochila, pero dejándole una parte abierta para que pudiera respirar.

Una vez hecho todo esto, se despidió de su madre y se encaminó hacia la escuela. Sin embargo, apenas frenarse en la puerta, su Digivice emitió un pitido y otra vez se había convertido en una brújula. No obstante, ahora era diferente y mostraba una flecha azul que apuntaba directo al interior de su escuela.

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Kaye estaba a horario para entrar a su salón, pero la flecha llevaba hacia otro lugar de su escuela...

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Monpoke
1) Te llevas a Koromon? Supongo que sí...
2) Tenés $160. Podés elegir depositar dinero u objetos en tu casa.
3) Sigues la flecha o la ignoras y entras a clases?

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ESCUELA PRIVADA
[Kaede, Ilana]

—No vale que hagas la mirada, sabes que es el único soborno que acepto— exclamó, resignado, el padre de Ilana —Venga, ahora que tu madre no está mirando— acercó rápidamente la caja y luego disimuló, una vez que la chica hubiera tomado una rosquilla.

Finalmente, Ilana volvió a su cuarto a prepararse y se encaminó a la escuela. Al llegar, se encontró en los pasillos con Kaede. En ese momento, a ambas se les encendió el Digivice, indicándoles una brújula en la pantalla.

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La brújula apuntaba fuera de la escuela, pero todavía no habían entrado a sus salones, por lo que estaban a tiempo de irse si querían seguir esa flecha azul.

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Zireael Tenés $200. Podés elegir depositar dinero u objetos en tu casa.
También obtuviste una rosquilla. Se la podés dar a tu Digimon ahora pa que desayune, pero también la podés guardar para dársela después porque es un ítem que restaura 20PV.

Zireael Ikoma-kun Siguen la flecha o la ignoran y entran a clases?

Si la siguen, pueden encontrarse a Aiden por el camino para que se les sume, obviamente, no es que cuando llegue a la escuela luego de su post, ya no estarán. No se preocupen, ya tengo en cuenta que son el team wealthy school xd

 

Aiden


Al abrir los ojos lo primero que vi fue a Dorumon aún dormido, que seguía estando en su forma pequeña. Me cambié de ropa sin hacer mucho ruido, aunque teniendo en cuenta el ruido que hizo el despertador, parecia que el digimon tenía el sueño bastante profundo... ¿Acaso los digimon podrían soñar? Quizás se lo podría preguntar cuando despierte.

— Buenos días — Me senté en la mesa para desayunar con mamá , haciendo zapping entre la serie en la que salía papá y las noticias. Después de todo tenía curiosidad por si salía algo relacionado con los Digimon o algo extraño; y el capítulo era una retransmisión de la serie que seguro mamá ya había visto .

Se acercaba la hora de ir a la escuela, así que subi a despertar a Dorumon. Luego de agitarlo un poco pareció despertar. — Ya es de día, dentro de poco ya iré para la escuela. ¿Quieres quedarte aquí durmiendo? Yo volveré más tarde. Aunque con los que nos encontramos ayer van a la mismo lugar asi que podemos encontrarnos ahí, creo que puedes caber dentro de la mochila así vamos juntos, ¿Qué te parece? — Le propuse con un tono suave mientras se iba despertando. Estar con un peluche así en manos dentro de la escuela iba a llamar la atención y podía nl ser bueno, pero si se quedaba en casa se iba a aburrir. Ir dentro de la mochila parecía ser un buen punto medio.


Fue entonces que sonó el timbre, por las voces que escuché debajo debían ser Shouma y el resto que venían a buscarme. — Venga, también podrás conocer a mis otros amigos. ¡Pero recuerda que no puedes hablar o moverte! — Lo puse junto a mis cosas y me encontre con los chicos. Parecía que se habían hecho una idea equivocada sobre lo de ayer, y ahora querían saber los detalles. — Adiós Mamá, ¡Nos vemos luego! — Hice caso omiso de ellos y me despedí al salir de casa, como si no hubiese ocurrido nada especial. — Por cierto, perdón por no haberme podido sumar ayer luego de decir de juntarnos, pero al final conseguí un regalo así que valió la pena — Dije a los chicos mientras empezabamos a ir para la escuela con una sonrisa triunfante

 

ORFANATO
[Nereo]

—Puedo esperarte, Nereo ¡No te preocupes!— le aseguró su Digimon, mientras el chico bajaba a desayunar. La comida no estaba muy buena, tal vez lo mejor sería comprarle algo al Digimon, pues sólo era té con leche y pan tostado de ayer. Esta vez no habían conseguido ni para ponerle algo al pan.

En eso estaba Nereo, mirando el pan medio negro de su desayuno, cuando su Digivice emitió un leve pitido que ya era su señal característica. Tras mirarlo, pudo observar que otra vez se había convertido en una brújula, pero que ahora era diferente.

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La flecha era azul y marcaba hacia algún lugar que lo alejaría de la escuela. Podía llevarse a su Digimon y seguir al Digivice, pero tendría que faltar y adiós asistencia perfecta. Todo lo que había planeado sobre dejar a su Digimon guardado tendría que esperar si tomaba esta opción. De todos modos, aun podía ignorar la señal y asistir a clases como todos los días...

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Gigavehl Tenés $190. Podés elegir depositar dinero u objetos en tu casa.
Te vas con el Digimon siguiendo la señal o vas a la escuela?

 

Damarina

¿Qué era eso?... sí,... es un aroma... agradable... delicioso... sí,... se trata de... ¡chocolate!

Había dormido muy bien, y ahora el delicioso aroma de un buen chocolate caliente me indicaba que ya era hora de levantarse y disfrutar de un nuevo día lleno de aventuras.

Aún con la cabeza recostada del lado izquierdo sobre mi almohada, abrí mis ojos, para chocar mi mirada contra dos enormes ojos redondos que me observaban fijamente. De la impresión, abrí aún más mis ojos y pude observar bien,... tenía forma de... ¿Patamon?

Como si de una película que se reproducía a mil frames por segundo se tratase, mis recuerdos del día anterior regresaron a mí y pude ver con claridad.

— ¡Patamon, eres tú! ¡Qué alegría! —, casi por inercia lo abracé y no pude evitar derramar un par de lágrimas.

— Tuve miedo anoche de despertar y no encontrarte, ¡pero ya veo que no fue un sueño!, ¿qué tal dormiste? —, me incorporé para levantarme, pues sabía por sus ojitos que anhelaba probar ese chocolate así que fui y al corroborar por la nota que me había dejado mi hermano, supe que ya se había ido.

— Mi hermano ya se fue. Hay suficiente para ambos, y si no preparo algo, así que podemos desayunar en paz.

Mientras desayunábamos (yo aún en pijama), le comentaba acerca del colegio y de si sería buena idea o no llevarlo, si debía ir como peluche, o si me esperaba afuera en los árboles, o si prefería podía faltar... No suelo faltar al colegio salvo que esté enferma, pero bueno podía inventarme algo,... supongo.

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Perdón si no puedo estar muy al pendiente, ando de viaje y se me dificulta un poco, pero regreso el Miércoles y ya podré darle con todo uwu

 

Kaye

Luego de poder evitar revelar algo al escrutinio de mamá, volví a mí cuarto para recoger lo que intencionalmente había dejado atrás.

Huckmon (Koramon) seguía durmiendo donde los había dejado escondido bajo las sábanas.

Lo pinche un par de veces para comprobar si despertaba, siguiendo sin estar muy deseoso de arruinar su sueño.

Sabiendo que dejarlo aquí podría no ser una gran idea, y llevarlo también podría generar otros... Decidí que al menos haría más fácil su transporte.

Volviendo a tomar el extraño aparato, revives por sus segundos sus botones hasta recordar como acceder a sus digievoluciones. Entonces, de nuevo, lleve al ahora Digimon bebé a su forme anterior.

Koramon a Botamon. Pasando de la pelota rosa a una negra y más pequeña, y... ¿Con menos consistencia?

Curioso. Repetí el pinchado anterior, pero está vez me estremecí por el extraño contacto con la baba.

Cómo ha estaba dando demasiadas vueltas y perdiendo tiempo, lo metí rápidamente en la mochila juntos algunas otras prendas y me colgué la mochila al hombro.

Llegando a la escuela, el aparato tuvo un estarlo comportamiento, señalando hacía el interior de la escuela.

Huckmon estaba conmigo, asi que está vez no estaría señalando hacía él...

Dentro de la escuela. Tenía curiosidad. Pero también temor de involucrarme en lo que Huckmon me había señalado ayer.

Dentro de la escuela... ¿Y si algo pasa? Soy un alumno normal, también la totalidad de los alumnos aquí. Solo que ellos tengan menos idea o medios para entender lo que llegue a suceder...

Huckmon iría... Solo podia estar seguro eso...

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Vamos a por los problemas (?). Si se puede hacer a a escondidas mejor?

 

ESCUELA PRIVADA
[Kaede, Ilana, Aiden]

Finalmente, Ilana volvió a su cuarto a prepararse y se encaminó a la escuela. Al llegar, se encontró en los pasillos con Kaede. En ese momento, a ambas se les encendió el Digivice, indicándoles una brújula en la pantalla.
En la tele no daban nada sobre el suceso del parque el día anterior ni sobre los Digimon. Lo único que llamó un poco la atención de Aiden, fue una noticia sobre unas cabinas de teléfonos públicos que habían desaparecido misteriosamente por la noche, sin dejar rastro. Era como si las hubieran cortado de cuajo limpiamente.

Finalmente, su Digimon aceptó viajar en su mochila sin problemas y el chico bajó para reunirse con sus amigos y salir rumbo al colegio.

—¡Y qué lo digas!— exclamó Hirokazu, cuando Aiden mencionó lo del regalo.

—¡Y era una niña mayor!— agregó Kenta, como para sumarle puntos a la hazaña de Aiden.

—Bueno, bueno, ya déjenlo tranquilo— los clamó Shouma, mientras ya se encontraban caminando por los pasillos de la escuela.

En ese momento, Aiden se cruzó con Kaede e Ilana y su Digivice también le avisó con una señal que lo mirara; se había convertido en una especie de brújula digital.

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La brújula apuntaba fuera de la escuela, si quería seguirla debería faltar a clases.

—Miren, ahí está ella— comentó Kenta por lo bajo, para que sólo oyeran ellos, mientras señalaba disimuladamente a Kaede.

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Santygrass faltas a clases y te reúnes con tus nuevas amigas, siguiendo la brújula o la ignoras y entras a clase con tus amigos de siempre?

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CASA DE DAMARINA
[Damarina]

—¡No te preocupes! ¡No iré a ninguna parte!— exclamó Patamon con alegría, tras despertar y que a Damarina se le escaparan algunas lágrimas con la idea de perderlo.

El Digimon olfateó el aroma a chocolate y era obvio que iba a querer, por lo que en cuanto Damarina le avisó que estaba despejado y su hermano no estaba, se dirigió a la cocina y revoloteó por el lugar con alegría.

—Estoy ansioso por probar esto— mencionó, metiéndose de cabeza en una taza a tomar chocolate —¡Me encanta! ¿Cómo se llama?— levantó la cabeza de pronto, con toda la boca manchada.

En ese momento, a Damarina le dio un aviso su Digivice. Tras revisarlo, pudo comprobar que otra vez se había convertido en una brújula. Pero ésta era diferente, ahora la flecha era azul y no apuntaba hacia Patamon, sino hacia otro lugar. Descubriría a donde, si la seguía junto a su Digimon.

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Todavía estaba en pijama y ya tenía que decidir si faltar a la escuela por asuntos de Digimon o seguir su día como uno normal...

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Starluz Tenés $200. Podés elegir depositar dinero u objetos en tu casa.
Seguirás la brújula?

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ESCUELA PÚBLICA
[Hiori, Kaye, Nereo]

Nereo había realizado la pantomima de ir a la escuela para seguir la brújula, junto a su Digimon y ésta los condujo a una escuela, pero que no era la del chico. Nereo iba a tener que quitarse algunas prendas y arreglarse ese uniforme de privada si quería entrar pasando como un alumno cualquiera...

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Gigavehl perdón, te puse que tenías 200 y tenés $190. También te entendí cualquier cosa con el Gurimon, que lo ibas a dejar y era que lo ibas a llevar a la escuela, perdón xd

Podés arreglarte un poco las ropas y lanzar CAR (Carisma) a ver qué tan creíble quedas xd
También podés volver al Orfanato a cambiarte, aunque perderías más tiempo

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Mientras tanto, Kaye ya había ingresado a la escuela y se encontraba siguiendo la brújula, hasta que, finalmente, la señal se detuvo, dejándolo justo frente a la puerta de la biblioteca...

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Monpoke Ingresas a la biblioteca?

 

Kaye

Ronde alrededor de la puertas un par de veces, siempre verificando que la señal me estuviera dirigiendo hasta adentro.

Me había acercado, buscando comprobar su interior, pero todavía no había entrado.

Me hacía temblar las piernas la idea de acercarme más.

No podía hacerlo solo.

Si, debía contar con Huckmon para esto. Por lo menos debería despertarlo antes de mandarlo sin aviso a una pelea.

Me di media vuelta, alejándome de la puerta y buscando un lugar donde esconderme hasta comprobar que suceda algo.

 

Ilana Rockefeller

Llegué a dudar que papá aceptara, pero la mirada no falló y con rapidez estiré la mano para tomar una rosquilla y esconderla. Con la comida resuelta, regresé a mi cuarto, me preparé y salí hacia la escuela luego de haber hecho pequeñito a Coronamon. Lo acomodé con cuidado en la mochila y le dije que hoy veríamos qué hacer, al menos para poder entender mejor lo que estaba sucediendo.

En los pasillos me encontré a Kaede y me acerqué, alzando la mano para saludarla. Al llegar junto a ella el objeto que había aparecido junto a los digimon se activó y al verlo pude notar que tenía una brújula marcando una dirección. Miré a la chica algo confundida y me asomé para husmear su propio digivice.

—¿Deberíamos seguirla? —pregunté en un susurro, por aquello de los chismosos.

No había terminado de formular la pregunta cuando Aiden apareció y aunque venía con otros niños, también me acerqué a él para mostrarle la pantalla de mi digivice con cierta urgencia. A ver, no era yo de sugerir escaquearnos las clases así nada más, pero esto eran condiciones extremas.

—¿Qué hacemos? —le pregunté al mismo volumen que le había hablado a Kaede—. Tenemos que descubrir qué es lo que está pasando.

¿Y esos que estaban cuchicheando? ¡Qué falta de respeto!

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GO GO POWER RANGERS

 

ESCUELA PÚBLICA
[Hiori, Kaye, Nereo]

Kaye intentó esconderse en un casillero, pero ninguno abría y el suyo estaba muy lejos. Sin embargo, en eso notó que un aula estaba abierta y desocupada, así que eso le serviría para meterse ahí y hacer lo que tenía pensado.

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Monpoke No ingresaste a la biblioteca y en su lugar, entraste al aula de al lado que estaba vacía, estás lejos de las miradas de todos y contigo está tu Digimon que por ahora lo mantienes en Botamon

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Mientras tanto, en las afueras de la escuela, Nereo intentaba arreglar su ropa para parecer un alumno más de la pública, pero no había caso. Camisa y pantalón de vestir seguía siendo demasiado formal para esta escuela. Podía ingresar igual, pero corría el riesgo de que alguna autoridad lo viera y echara del recinto.

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Gigavehl podés entrar igual, pero vas a lanzar AGI para ser sigiloso. Si fallas esa tirada, una autoridad te verá y deberás lanzar CAR para convencerla con alguna excusa para que no te expulsen.

También puedes volver al orfanato a cambiarte, posteas que vuelves al orfanato y te hago resolución ahí. Luego posteas que vuelves a la pública cambiado y te hago resolución ahí (En este último caso no te detendrá ninguna autoridad).

 

Kaye

Habiendo entrado al salón, estuve unos segundos mirando al pasillo antes de cerrar la puerta tras de mí.

Fui llevando mí mochila hasta mí pecho mientras me movía a unas mesas con vista a la puerta, pero que me puedan ayudar a ocultarme.

Coloque con cuidado la mochila en el suelo, agachado, la abrí y saque la pelota negra que era actualmente Huckmon.

De nuevo, me estremecí al tocar su cuerpo no del todo solido o líquido.

"Despierta, Huckmon, puede que haya problemas pronto". Lo sacudí levemente, aceptando que su sueño realmente ya estaba llegando demaciado lejos. "Con suerte, solo va a involucrar a la biblioteca y no la escuela entera". O el mundo.

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Voy a estar espetando hasta que un personaje de mayor edad decida poner un poco de coraje y entrar primero. Mientras, a congeniar con el Digimon?