Grutas de Alforno

Tema en 'Lost Future: The Last Chance' iniciado por MrJake, 2 Mayo 2025.

  1.  
    Nekita

    Nekita Amo de FFL

    Piscis
    Miembro desde:
    18 Marzo 2012
    Mensajes:
    8,559
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Dante.png

    Mente: 28/30

    Otro suspiro algo más aliviado se escapó de sus labios cuando vio que era posible bajar sin hacer un salto de fe, mejoraba un poco la situación, sí, pero seguía siendo algo que debía seguir tratando con cuidado para simplemente no bloquearse y complicar más la situación para todo el grupo. Si ya lo había complicado evitando aquella pared, no quería todavía retrasarlas más con cosas que se le dificultaba lidiar.

    "Dante mírame."

    Salió del tren de sus pensamientos para centrarse en Mimi apenas escuchó su voz, temiendo que nuevamente hubiera perdido algo de información importante por pensar demasiado pero, cuando comprobó que aquella orden había sido precisamente para asegurarse que tuviera toda su atención, se relajó.

    Sus palabras estrujaron un poco su corazón, no le parecía nada ridículo su sugerencia porque era algo que también experimentaba, por algo había mandado hacer aquel amuleto en su cuello, para que no solo quedara en su imaginación o en un anhelo de su corazón, sino también para sentir que seguía siendo algo físico, como los viejos tiempos.

    Cuando sintió su tacto en su pecho dejó de acariciar su token para posar su mano sobre la de Mimi, haciendo que fuera toda su mano la que estuviese presionando la zona de su corazón. Si bien ella podía sentir que seguía latiendo con bastante fuerza ahora tan siquiera la miraba un poco más tranquilo y le pudo mostrar una sonrisa algo más tranquila, pero sobre todo más segura.

    —Gracias, por hacerme recordar.

    Los tenía allí apoyándolo, por mucho que aquellos oscuros recuerdos amenazaran con nublar esa realidad.

    Y cuando hubo una distancia segura entre Mimi y él para descender, respiró hondo y comenzó a descender por las salientes.
     
    Nekita ha tirado dados de 20 caras para Agilidad Total: 19 $dice
    • Fangirl Fangirl x 6
    • Ganador Ganador x 1
  2.  
    Etihw

    Etihw detective en prácticas Comentarista empedernido

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Julio 2013
    Mensajes:
    2,621
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Talía.png

    Vale. Retrocedamos un segundo.

    Uno de los guardias inconsciente contra la pared, el otro atrapado en el suelo bajo las pinzas de un Scizor con cara de pocos amigos, y Steve con esa sonrisita de “yo ya sabía que esto iba a pasar”. No sé qué esperaba, pero definitivamente no era esto. Me quedé ahí plantada, parpadeando como si necesitara reiniciar el sistema.

    Y entonces Steve me señaló.

    Con el dedo.

    Así, con toda la confianza del mundo.

    —Oh, claro. Sí, no pasa nada, interrogar personas random tumbadas en el suelo es lo mío —murmuré bajito, dándome ánimos. Ruby, sobre mi hombro, soltó un pequeño chirrido, como si le emocionara tener el control de la pelea, o algo así.

    Me acerqué con paso algo torpe, intentando parecer más segura de lo que me sentía, y me agaché al lado del que seguía consciente. Timmy, o Tommy. En serio, deberían llevar una chapita o algo.

    —¡Hola, buenas! —dije con una sonrisa casi brillante—. Disculpa la interrupción en tu día laboral, pero tengo algunas preguntitas rápidas, ¿sí?

    Ruby se bajó de mi hombro y se acercó al tipo, subiéndose a su pecho sin pedir permiso y lo miró desde arriba, moviendo las orejitas como si evaluara su valor nutricional.

    Sí que me ha salido macarra la niña.


    —Mira, sé que tienes miedo. Yo también lo tendría. No por mí, claro. Soy adorable. Pero Ruby lleva una mañana horrible y le encanta canalizar sus emociones a través de violencia selectiva. Como una terapia, ¿sabes?

    Ruby hizo un leve ruidito, como si estuviera de acuerdo. O como si estuviera decidiendo por dónde empezar a morder. No estaba segura. Me puse en pie de nuevo, sacudiéndome el polvo de las rodillas.


    —Bueno, venga —le dije al tipo, retomando mi tono alegre de interrogatorio amistoso—. ¿Por qué no empiezas contándome qué hacéis por aquí? ¿Turno doble? Porque no creo que os estéis tomando unas vacaciones si vais con armas, ¿o sí? ¿O sois de esos que vigilan cosas sospechosas porque están haciendo algo aún más sospechoso?

    Ruby hizo un pequeño y adorable gruñido. Lo cual, francamente, era más amenazante que si hubiera rugido. Yo le acaricié la cabeza, con cariño.

    —Tranquila, princesa. No te lo comas todavía. A lo mejor canta.
     
    • Gracioso Gracioso x 5
    • Fangirl Fangirl x 2
  3.  
    MrJake

    MrJake Game Master

    Capricornio
    Miembro desde:
    12 Julio 2012
    Mensajes:
    22,105
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Mimi logró bajar sin mucho problema de la pared, y luego llegó el turno de Dante. Aunque le costó decidirse, fuese por los recuerdos latentes o por las palabras de Mimi, o quizá por su propio valor, o por una combinación de todas las cosas... logró bajar con cautela, pero precisión y agilidad. De hecho, sorprendió incluso a Effy cuando colocó cada pie y cada mano en el lugar idóneo para hacer la bajada liviana, segura y rápida. En cuestión de pocos segundos desde que movió el primer pie, estuvo en el suelo, quizá sorprendiéndose a sí mismo de lo fácil que fue. Todo fue cuestión de concentrarse, y... al final lo logró, ¿eh?

    Se sentía bien haber tenido una pequeña victoria sobre ese miedo, aunque fuese solo una.

    +1 Mente.

    En todo caso, ambos estabais ahora en el suelo, por fin al otro lado de la maldita roca que provocó todo aquel rodeo. Effy la andaba analizando después de que estuvieseis allí reunidos los tres, junto a Shura, Livy y Yuu.

    —Tal y como pensaba, había algo que la bloqueaba —murmuró, reflexiva—. Mirad, hay más rocas algo más pequeñas apiladas. Pero esto parece hecho a consciencia... como si hubiesen querido bloquear el camino. Qué raro.

    Shura miró las rocas también, visiblemente extrañado, y dio un par de patadas a las mismas, derribándolas. Tras esas patadas, la roca grande ahora sí podría ser empujada con normalidad, probablemente. Con todo, tanto Shura como Effy parecían especialmente extrañadas de que hubiesen bloqueado el acceso manualmente.

    —... en fin —concluyó la chica, dirigiendo luego su vista al camino que les aguardaba. La linterna ya no era necesaria, porque ahora entraba bastante luz de una apertura que se apreciaba al fondo a la derecha. De hecho, el olor a sal inundaba vuestras fosas nasales—. No debemos andar muy lejos. Relativamente hablando, claro; llevamos la mitad de camino, diría, quizá un poco más. Y lo sé porque esa apertura al mar es mi referencia. ¿Seguimos?

    Caminasteis entonces detrás de Effy, que iba junto a Shura, ambos atentos a sus alrededores. El megabrazal de Mimi seguía reaccionando, sin embargo, de forma algo más intensa que antes, pero aún levemente. Frente a vosotros, el camino seguía, ahora no solo con algún Glimmora en la pared, sino con varios pokémon más pequeños que flotaban cerca, pequeños Glimmet: aunque no los conocieseis, era obvio que eran su preevolución, a juzgar por su aspecto.

    El camino se extendía al fondo, girando a la izquierda en aquellas grutas que seguían subiendo y subiendo. Pero al fondo a la derecha estaba la apertura que dejaba entrar la luz del sol, e incluso algunas olas resonaban en el eco de aquellas cavernas. El mar estaba cerca en esa dirección, sin duda...


    ***


    Cuando hiciste la pregunta, al inicio, el tipo no respondió, mirando en todas direcciones, como si tratase de encontrar una escapatoria. La pinza de Scizor, sin embargo, no le daba muchas opciones... y lo que era peor, cuando su mirada se cruzaba con la de Steve, que sonreía visiblemente encantado con la situación, se asustaba aún más. El gesto de Steve era tierno y despreocupado, pero quizá esa misma ternura era lo que despertaba miedo en Timmy. Porque aquella no era una situación en la que esa expresión comunicase algo bueno, desde luego.

    Así, que al final, resignado, te respondió. Tuvisteis suerte de que Timmy parecía el más "dócil" de los dos. O suerte, o mucha puntería por parte de Scizor y Steve, claro.

    —E-Estamos haciendo guardia, sí. D-De hecho hay... muchos más más adelante. No sé quiénes sois, ni qué hacéis por aquí, pero si yo fuese vosotros, me largaría de aquí cuanto antes. Es cuestión d-de tiempo hasta que vengan más y-

    —¿Es eso una amenaza? —preguntó de pronto Steve, alzando las cejas, ojos muy abiertos.

    La interrupción le erizó el vello a Timmy, quien negó repetidamente con la cabeza. Quizá era porque la garra de Scizor se había apretado ligeramente.

    —¡N-N-No, claro que no, yo...! I-Intentaba explicaros lo que hago aquí, nada más. Estamos... buscando a alguien. A una chica, simplemente. Una chica rubia a la que tenemos que asaltar y llevarnos en cuanto la veamos, ¡nada más! T-Tommy y yo estábamos de avanzadilla, reconociendo la zona, y nos topamos con vosotros. A-Al principio creímos que eras tú esa chica, al ser rubia, pero cuando te vimos más de cerca supimos que no eras tú. No encajas del todo en la d-descripción. ¡Juro que no sé n-nada más! L-Los Ferropokémon son poco propensos a dar explicaciones, joder, ya deberíais saberlo.

    Steve te miró. Seguramente, ambos estabais pensando lo mismo: ¿"Ferropokémon"?

    —Ahí has captado mi interés, amiguito. ¿Qué es eso de Ferropokémon? Cuéntame más, anda. O si no...

    —¡Eeek! ¡S-Sí, claro! —gruñó Timmy, aterrorizado—. ¿C-Cómo es posible que no sepáis qué son? ¿No sois de aquí...? ¿¡Quién coño soi-!?

    La presión de la garra se intensificó en cuanto un breve gesto de Steve dio la orden.

    —¿Desde cuándo haces tú preguntas?

    Vaya, casi parecía que Steve se estaba metiendo, quizá, demasiado en el papel.

    —V-Vale, ¡perdona, perdona! Y-Yo... los Ferropokémon son los que mandan, joder, ¡están en todas partes! La división Militar, la división de Control... ¡cualquiera de Paldea está más que acostumbrado a esos bichos, dirigen cada acción que hacemos!

    En ese momento, escuchasteis ruidos y voces. Steve se alarmó, mirando en ambas direcciones, y rápidamente se dirigió hacia ti, hablándote en voz baja, pero sin evitar que Timmy le escuchase, desde luego:

    —Mierda, parece que es verdad que hay más. ¿Qué hacemos? Tenemos que movernos, pero no podemos dejar que estos tíos les hablen de nosotros ni los encuentren aquí, o nos expondrían... quizá deberíamos acabar con ellos y esconder sus cuerpos, ¿no?

    Al inicio, quizá pensaste que Steve lo planteó como una broma. Su semblante estaba tan sereno, tan invariable, tan serio, y lo dijo con tal naturalidad, que pudiste llegar a pensar que era broma. Pero pronto fue evidente que no lo era.

    —¿Qué opinas, Talía? Lo último que quiero es que la misión salga mal por culpa de estos dos esclavos de Chance...

    —¡N-No me hagas daño, p-por fa-!

    De nuevo, una presión extra de la garra le hizo callar. Steve solo tenía que alzar una mera ceja para que Scizor captase la orden al momento. Y, ahora, se estaba dirigiendo a ti. Haciéndote esa pregunta: ¿qué hacer con Timmy y Tommy? Las voces se acercaban, y el tamborileo de los dedos de Steve, brazos cruzados, revelaban una impaciencia y urgencia que, por otra parte, estaba justificada.

    Teníais que actuar rápido. Tenías que responderle rápido.
     
    • Espeluznante Espeluznante x 5
    • Zukulemtho Zukulemtho x 1
    • Creativo Creativo x 1
  4.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,854
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi 2.png

    Agradecí sentir mis pies en tierra firme de nuevo. Dante también lo logró, quizás tomando coraje de mis palabras o de su propio valor, o tal vez de una mezcla de varios factores. El caso es que tras unos instantes de indecisión siguió mis pasos hasta alcanzar el suelo.

    —¿Ves?—le dije con una ligera sonrisa, genuinamente orgullosa de su pequeño progreso—. No ha sido tan difícil, ¿no?

    Estábamos al otro lado de aquella molesta roca y tal y como Effy había supuesto, alguien había bloqueado el camino a propósito. La pregunta ahora era: ¿quién? ¿Y por qué? Si nos habían bloqueado el camino específicamente a nosotros, quien quiera que hubiera sido sabía que estábamos allí o que en su defecto pasaríamos por ese lugar.

    Lo cual implicaría que nuestra llegada a Valthyria no había sido tan sigilosa como pensábamos.

    Aquel pensamiento me hizo tensarme y observé mi alrededor con atención. Flotando, como idos, pude ver a unos extraños Pokémon que imaginé que serían la forma pre-evolucionada de Glimmora. Probablemente no fuesen tanto un problema como estos últimos, pero no pensaba molestarlos para comprobar mi teoría.

    Auch—me quejé en voz baja.

    De nuevo sentí aquella especie de presión en mí muñeca. No era una presión en sí, ese cacharro no se movía para nada... era una especie de pseudo-presión, como una fluctuación de mi propia energía.

    Jamás había sentido algo así.

    Miré el brazal y después a mi alrededor. Exactamente, ¿a qué estaba reaccionando?
     
    Yugen ha tirado dados de 20 caras para ¿Mimi necesita gafas? (Percp) Total: 16 $dice
    • Fangirl Fangirl x 4
    • De acuerdo De acuerdo x 1
  5.  
    Nekita

    Nekita Amo de FFL

    Piscis
    Miembro desde:
    18 Marzo 2012
    Mensajes:
    8,559
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Dante.png

    Mente: 29/30

    Cada saliente que iba bajando se iba sintiendo en su cabeza como una pequeña meta cumplida hasta que llegó al suelo con un suspiro de alivio y una sonrisa bastante orgullosa de sí mismo por lograrlo, era un pequeño paso que probablemente sin la ayuda de Mimi no hubiera tomado o directamente le hubiera costado mucho más hacer.

    Porque definitivamente no había ninguna clase de fe para ese salto que había hecho Effy.

    Sonrió hacia el comentario de Mimi y cuando volvieron a iniciar a caminar la abrazó momentáneamente por el costado de sus hombros para no detener su andar y murmuró un simple "Gracias" antes de separarse nuevamente.

    —Si alguien genuinamente se tomó la molestia de bloquearlo, no sería extraño pensar en que nos quisieran obligar a ir hacia un camino en específico... —¿De alguna manera el gobierno de Chance se habría enterado que estábamos aquí? ¿Se habrían tomado el tiempo de simplemente ir construyendo formas de llevarnos a donde deseaban? —, porque si no fueron ellos quizás algo hay algo por aquí que alguien quizás quiere ocultar.

    O quizás estaba siendo demasiado paranoico.

    Se cruzó de brazos y comenzó a examinar sus alrededores, en busca de cualquier cosa fuera de lugar que lo ayudara a comprobar cualquiera de sus paranoicas teorías.

    Mimi —la llamó en voz baja, señalando su brazalete con el dedo índice —, ¿estás bien? En la cueva parecía que eso te estaba molestando también.
     
    Nekita ha tirado dados de 20 caras para Percepción Total: 13 $dice
    • Fangirl Fangirl x 4
    • De acuerdo De acuerdo x 1
  6.  
    MrJake

    MrJake Game Master

    Capricornio
    Miembro desde:
    12 Julio 2012
    Mensajes:
    22,105
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Poco a poco notabas que el tirón que daba tu brazal se suavizaba, pero seguía ahí, presente. Antiguamente era un megaobjeto, pero hacía muchos años que no funcionaba... así que no debería estar reaccionando a nada.

    A no ser, claro, que albergase aún cierta afinidad hacia la megaenergía. ¿Podía ser eso? ¿Estaba notando megaenergía cerca? No lo había hecho nunca antes porque en Sinnoh, especialmente después de la guerra de Kalos y Galar, no se veía nunca a nadie megaevolucionar: esa energía fue una que se le reservó prácticamente a quienes vivían en Galeia, Kalos y Hoenn. Por ello, no podías estar totalmente segura de que reaccionase precisamente a eso, pero era una posibilidad... y quizá era un mal augurio que hubiese precisamente megaenergía cerca.

    ¿O quizá reaccionaba a la energía terastal? No... enfrentaste a un Rockruff que la utilizó y no notaste nada; quizá te dio algún tirón o algo similar, pero concentrada en la batalla no notaste ningún movimiento, y este era bastante notorio como para pasarlo desapercibido así. No hacía falta pararse a sentir el brazal para darse cuenta de que estaba tirando de ti.

    Así pues, trataste de concentrarte en el movimiento del brazal. Parecía moverse ligeramente en una dirección determinada, ¿no? Como si hubiese un imán que lo atraía. El tirón era leve, eso sí, así que era difícil determinar la dirección exacta, pero... parecía estar al fondo del camino. Por el camino rocoso que había al fondo, ignorando la apertura al mar.

    Habría que esperar a ver si la reacción se intensificaba... y, por si acaso, permanecer alerta.


    ***

    Miraste por todas partes mientras os desplazabais con cuidado. Avanzabais muy lentos, y quizá se debía en parte a que estabas bastante atento a tus alrededores, buscando algo en el techo, las paredes, atento a todo lo que te rodeaba. No sabías bien qué buscabas, pero tenías el presentimiento de que esa roca bloqueando el camino... no auguraba nada bueno.

    Y fue entonces cuando te detuviste en seco al ver algo. No tuviste tiempo a verlo bien, porque lo que quiera que fuese aquello se movió rápidamente y desapareció de la esquina en la cueva en la que estaba, pero... estabas seguro de que allí, cerca del techo, había algo. Y encajaba con la extraña sensación que tenías de estar siendo observado.

    Qué pena, estuviste tan cerca de verlo... pero se te escapó. Estabas seguro, sin embargo, de que era algo pequeño y brillaba muy ligeramente, quizá por ser metálico o por emitir una pequeña luz. Y jurarías haber visto un reflejo verdoso. Pero nada más.

    —¿Pasa algo, Dante? —inquirió de repente Effy, girándose para mirarte—. Parece que los dos hayáis visto un fantasma, cada uno por su cuenta... ¿avanzamos, o no?
     
    Última edición: 16 Mayo 2025 a las 5:44 AM
    • Espeluznante Espeluznante x 4
    • Fangirl Fangirl x 1
  7.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,854
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi 2.png

    La voz de Dante me sacó de mi tren de pensamiento. Mi muñeca seguía punzando, el megabrazal ejerciendo un ligero, apenas perceptible tirón.

    —Sí, es solo...—le respondí a media voz, pero me detuve a mitad de la frase. Me resultaba tan... extraño—. Es este cacharro. Se supone que no debería funcionar, lleva años inutilizado. Pero desde que llegamos a Valthyria, ha empezado a actuar extraño. Como si... reaccionase a algo.

    Debía ser imposible, ¿verdad? No funcionaba antes. Era un simple recuerdo viejo y roto que ni siquiera sabía exactamente por qué había guardado durante tantos años. Quizás por simple y puro masoquismo, teniendo en cuenta que era lo único que Alpha me dejó cuando se fue.

    Todo lo demás se lo llevó consigo.

    >>Por sus características como megaobjeto me inclino a pensar que se trata de alguna clase de energía. Pero no reaccionó cuando enfrentamos a Rockruff.

    Dirigí mi mirada al fondo del camino allí donde la senda se bifurcaba y una de las salidas era al mar, justo el lugar que Effy usaba de referencia; y la otra era un camino ascendente y oscuro, que parecía perderse entre grutas. Era como si el brazal... ¿me atrajera hacía allí?

    Huh.

    No sabía exactamente por qué, pero tenía un mal presentimiento. La roca bloqueando nuestro camino, evidentemente cerrando el paso a propósito no podía augurar nada bueno. Si tal y como parecía no había sido un derrumbe natural, alguien o algo sabía que estábamos allí.

    Lo cual me ponía los pelos de punta.

    >>Effy, cuando dijiste que entraríamos en Valthyria por un acceso relativamente discreto—comenté con cierto tono de circunstancias—, ¿a qué tan relativamente discreto te referías? Porque es evidente que dejando de lado a los Glimmora, no estamos solos aquí.
     
    • Fangirl Fangirl x 3
    • Sad Sad x 2
  8.  
    Nekita

    Nekita Amo de FFL

    Piscis
    Miembro desde:
    18 Marzo 2012
    Mensajes:
    8,559
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Dante.png

    Frunció el ceño cuando se percató de aquel movimiento extraño en la cueva, lo frustraba y preocupaba por partes iguales no haber podido apreciar lo que era más que unos míseros detalles que no le aportaban demasiada información.

    Se mantuvo quieto con su mirada todavía atenta hacia donde había visto el movimiento en caso de que volviera y solo asentía lentamente a las palabras de Mimi, sí, que su megabrazal también estuviera reaccionando desde que llegaron a ese lugar era bastante extraño.

    —Mimi tiene razón, había algo viéndonos desde la cueva, no vi demasiado bien pero era algo pequeño, había un pequeño brillo, quizás incluso un reflejo verdoso.

    Se giró a ver a Effy —Creo que nuestra entrada efectivamente no fue demasiado discreta, la entrada bloqueada, que algo nos esté siguiendo, siento que si salimos vamos a estar completamente descubiertos a quien sea o lo que sea que nos sigue el paso.
     
    Nekita ha tirado dados de 20 caras para Agilidad Total: 19 $dice
    • Fangirl Fangirl x 4
  9.  
    Etihw

    Etihw detective en prácticas Comentarista empedernido

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Julio 2013
    Mensajes:
    2,621
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Talía.png

    Me quedé en silencio unos segundos, observando la escena con más calma de la que sentía. Tommy estaba inconsciente, desparramado contra la pared, y Timmy seguía entre las pinzas de Scizor, tieso como una tabla. La sonrisa de Steve me inquietaba un poco, no por lo que decía, sino por lo que no decía. Porque era evidente que estaba dispuesto a llevar esto hasta las últimas consecuencias. Y me estaba mirando a mí para decidir qué hacer.

    Cuando me señaló con el dedo para que me acercara, noté el estómago encogerse. Tragué saliva. Respiré hondo. Vamos, Talía. Ya te has metido en líos peores.

    Me acerqué a Timmy. Ruby me seguía, con ese trote corto y altivo que ponía cuando sentía que tenía el control de la situación. Me agaché un poco, mirándolo a los ojos.


    —Vale, Timtim. Antes de que la situación empeore para ti, voy a hacerte un par de preguntas muy simples. Y si sabes responderlas sin tonterías, puede que esta historia no acabe con tu cara siendo planchada por la pinza de tu nuevo amigo. ¿Estamos?

    Ruby asintió junto a mí. Bueno, más que un asintir, fue un pequeño saltito mientras inflaba el pecho, como si estuviera diciendo: sí, vamos a arrancarle la lengua, Tali.

    Al igual debía aprender de su agresividad algún día.

    ¿Quién es la rubia que estáis buscando? —pregunté con suavidad, aunque mi tono tenía filo. Luego añadí, cruzando los brazos—. Y quiero que me expliques qué demonios es eso de los “Ferropokémon”. Porque tengo la sensación de que estás a punto de contarme algo interesante.

    Levanté una mano al acabar de hablar y me giré hacia Steve antes de que pudiera soltar nada.

    —Antes de que responda… —dije, en voz más baja, mirándolo con seriedad—. Tengo una idea.

    Miré con nervios de donde venía el ruido, sintiendo bastante tensión en mi cuerpo, no sabiendo todavía si estaba haciendo lo correcto o no.

    —No quiero matarlos. Y no es porque me caigan bien, precisamente —aclaré, con una sonrisa tensa—. Pero no vamos a resolver nada dejándonos cadáveres por el camino. Ya bastante complicado es esto como para sumar más mierda encima.


    Hice una pausa. Quería estar segura de lo que iba a decir.

    No sé si habrá un hueco en algún sitio cerca donde meterlos o algo parecido —continué, hablando rápido, bajito, con la adrenalina subiéndome al cuello—. Pero tenemos que moverlos. Ocultarlos. Algo. Les tapamos la boca, los atamos con lo que podamos, y nos los llevamos a algún sitio. No lo sé sinceramente, Steve. Pero cualquier cosa menos... matar.


    Ladeé la cabeza despacito, observando a Timmy en el suelo, entrecerrando mis ojos amenazadoramente. Bueno, al menos un poquito. La propia Ruby seguía en el suelo y tras mirar mi gesto me imitó. Doble amenaza, me gustaba ese ambiente.

    —Espero que sepas hablar rápido, o no me hago cargo de lo que te puede pasar si no tenemos respuestas a todas nuestras preguntas antes de irnos.
     
    Etihw ha tirado dados de 20 caras para Carisma la chucha :( Total: 15 $dice
    • Fangirl Fangirl x 3
    • De acuerdo De acuerdo x 1
    • Ganador Ganador x 1
    • Adorable Adorable x 1
  10.  
    MrJake

    MrJake Game Master

    Capricornio
    Miembro desde:
    12 Julio 2012
    Mensajes:
    22,105
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Effy os miró primero con un gesto preocupado. Se giró y puso los brazos en jarra, el ceño ligeramente fruncido en una expresión que interpretabais como una mezcla de cansancio y preocupación, y suspiró profundamente.

    —No debería haber mayores problemas, chicos —admitió al final, aliviando el gesto y alzando una de las comisuras de sus labios. A su lado, Shura permanecía dado la vuelta, mirando al otro lado, una de sus piernas golpeando repetidamente el suelo en gesto de clara impaciencia—. De veras, esta zona, el camino que estamos siguiendo... debería estar libre de impedimentos. Es cierto que lo de la roca es extraño, pero... creo que es posible que haya sido uno de los nuestros, uno de los rebeldes.

    >> Veréis, esta zona se utilizaba antes, en Paldea, para llegar al antiguo Pueblo Alforno como una de las únicas rutas posibles. Pero desde que Chance alteró el pueblo y creó la gran metrópolis de Nueva Alforno, se acceder casi siempre por el aire y este lugar ha quedado solo como zona de extracción y poco más. Y sabemos que en estos momentos no hay ninguna extracción desarrollándose aquí, así que... es un sitio seguro. Los rebeldes la usamos mucho para movernos sin ser vistos y hacer intercambios, negocios y cosas similares aquí. Por eso sé que puede ser una buena ruta... e imagino que habrá sido algún compañero el que bloqueó esa salida con una roca por alguna razón.

    Zarandeó la cabeza. A su lado, Shura se giró para mirarla, los ojos anaranjados alzándose. En su expresión se dibujaba un "¿has acabado ya? ¿Podemos seguir?" que era fácil de entender incluso sin palabras.

    —Por supuesto que existe riesgo de que las fuerzas de Chance estén por aquí —admitió después la chica—, pero no deberían estar. Es lógico que estéis paranoicos, eso sí; yo también lo estaría si estuviese en plena Valthyria viniendo desde fuera. Pero podéis... podéis fiaros de mí. Estaremos a salvo, solo tenemos que permanecer atentos... y si algo se tuerce, con Shura de nuestro lado, saldremos airosos, ya veréis. No sería la primera vez~.

    Lo decía con la confianza típica de Effy, desde luego... Y aunque Shura no pareciese tener ganas de colaborar habitualmente, estaba claro que si se lo proponía podía llegar a ser bastante hábil: no se podía dudar que, si se lo proponía, podía ser confiable. Si se lo proponía, por supuesto.

    —¿Continuamos, entonces? —preguntó Effy, una mano en la nuca, como reflexiva. Luego señaló al camino que ascendía entre rocas, en sentido opuesto a la salida al mar—. Subiendo por allí nos quedará ya poco, en teoría... yo lo que sí que veo es un problema: y son esos Glimmet. Están un poco alterados, miradlos.

    Era cierto: había múltiples pokémon por la zona, esos que eran prevolución de Glimmora: Glimmet, según Effy. Y se concentraban por allí particularmente.

    —Normalmente están escondidos como los Glimmora, si eso ves un par flotando, pero poco más. Que haya tantos... es señal de que están alterados. Pasa a veces, hemos peleado justo hace un rato con un Rockruff y hemos alertado a un Glimmora así que... ahora estarán agitados ante tanto movimiento por sus cuevas. No están acostumbrados. Lo positivo es que no son demasiado peligrosos: yo votaría por intentar cruzar y debilitar a los que se nos crucen sin mucho más problema. ¿Algún otro plan?


    ***


    Trataste de convencer a Steve para que no se deshiciera de ellos, argumentando que no resolveríais nada y que era innecesario. El chico, sin embargo, parecía incluso algo molesto ante tu comentario. Frunciendo el ceño, murmuró:

    —Hmpf. Pero si acaban cantando sobre nosotros... seremos perseguidos —luego, finalmente, habló en alto, gesticulando bastante, de forma más casual e incluso alegre de lo que parecía cuadrar con sus palabras—. ¿Sabes, Talía? Me da rabia eso de que los héroes no terminen de rematar a los malos. ¡Luego siempre acaba resultando volverse en su contra! Si se dejasen de tantas tonterías y acabasen con el villano de turno en el momento en el que lo tienen bajo sus pies, ¡todo saldría mucho mejor! Por eso creo que es una estupidez dejar a estos dos vivos; al final nos va a acabar mordiendo en el trasero. Así es como funciona.

    Se agachó junto a Timmy, completamente paralizado por el miedo, y le sonrió.

    —... mira, no te voy a matar, ¿vale? Pero solo porque me lo ha pedido Talía. Agradécele, anda.

    —¡G-G-G-Gracias! ¡Muchas gracias, gracias!

    Pero Steve no había terminado. Quizá le convenciste de que era extremo acabar con sus vidas, pero seguía claramente preocupado ante la idea de que, cuando se reuniesen con los del Imperio, Timmy y Tommy les hablasen de vosotros, describiesen cómo erais y eso os pusiese en un punto de mira y estropease la misión.

    Y eran los villanos, después de todo.

    —Me gustaría que respondieses a las preguntas de Talía y nos dieses más detalle, pero... —miró a un lado, de donde venía el ruido de pasos acercándose y murmullos—. Parece que los tuyos están cerca. Buenas noches~.

    Y Scizor golpeó su cabeza, noqueándolo y dejándolo inconsciente, como a su compañero.

    Poco tiempo después, Scizor los había llevado tras una gran roca a ambos. A su lado, Steve estaba junto a ti, y te puso una mano en el hombro.

    —No te preocupes, Talía. Si crees que matarlos era excesivo, no pasa nada...

    Scizor se estaba acercando entonces a ambos hombres inconscientes, y tomó a uno por la cabeza, alzándole la barbilla con una pinza. Luego, le abrió la boca con la otra.

    —Pero te voy a proteger, tal y como me prometieron. Eso desde luego. ¡Y no voy a dejar que estos dos nos delaten! Scizor, cuando quieras.

    Clac.

    Fue solo un golpe de la pinza de Scizor, y el rojo salpicó frente al cuerpo inmóvil de Tommy. Algo cayó al suelo, sangrante, algo rosado que Scizor acababa de arrancar de una sola sentada.

    Una lengua.

    Luego se acercó al otro, e hizo el mismo proceso. De un solo corte... le cortó la lengua a Timmy. Tras eso, tan tranquilo, el pokémon se acercó a Steve, que le dio un par de toquecitos en la cabeza, sonriendo con dulzura.

    —Genial, Scizor. Lo hiciste genial —se dirigió a ti de nuevo, frunciendo el ceño, mirando a ambos lados—. Bueno, ¿cuál es el plan, Talía? Con estos dos fuera de combate, tenemos el próximo problema... viene compañía. ¿Qué hacemos? Podríamos pelear de frente contra ellos, pero no sé cuántos son ni cómo de fuertes son... quizá no es lo más sensato.

    Seguía mirando, distraído, buscando algún camino alternativo, algún escondite, algo. Tú, sin embargo, no pudiste apartar la atención de las dos lenguas arrancadas a unos cuantos centímetros de ti... e-era muy desagradable, y sucedió rápido, de forma inesperada, y... fue algo escalofriante.

    -2 de Mente.

    Cuando por fin prestaste atención de nuevo a la situación que tenías ante ti, se hizo obvio que, en efecto, teníais que moveros y rápido. Se oía a gente acercarse, y aunque quizá estaban más lejos de lo que parecía en un inicio, el sonido impulsado por el eco hasta llegar a vuestros oídos, no dejaban de ser posibles guardias. Teníais que hacer algo, o seríais descubiertos.
     
    Última edición: 18 Mayo 2025 a las 4:29 AM
    • Espeluznante Espeluznante x 3
    • Ganador Ganador x 1
    • Zukulemtho Zukulemtho x 1
    • Impaktado Impaktado x 1
  11.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,854
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi 2.png

    Las palabras de Dante me sorprendieron y miré a mi alrededor con evidente tensión en el gesto. ¿Algo pequeño y con un reflejo verdoso? ¿Podía ser un Pokémon? Pero ni los Glimmora ni los Glimmet parecían encajar en esa descripción. Quizás podía tratarse de otra especie, alguna con la que no nos habíamos cruzado aún... pero no dejaba de ser extraño.

    —¿Y por qué iba uno de los vuestros a cerrar el camino si esto solo lo usáis vosotros?—cuestioné cuando Effy se explicó y extendí mi brazo, mostrándole el megabrazal. Seguía reaccionando, tirando ligeramente de mí en aquella dirección—. ¿Y esto? Si no hay extracciones de energía en la zona, ¿a qué está reaccionando?

    ¿Paranoicos? No estábamos paranoicos, estábamos siendo cautos. No podías caminar como quien da un paseo por el campo cuando te metías directamente en la boca del lobo. Valthyria no era precisamente cordial con los forasteros, y era aún peor si esos forasteros habían desafiado la hegemonía de Chance en el pasado. Y yo, especialmente, no era una cara desconocida fuera de la región. Estaba segura de que mi fama no había traspasado las fronteras de la Coalición, pero eso no me tranquilizaba en lo más mínimo.

    Ese hijo de puta sabía quienes éramos todos.

    Nada negaba la posibilidad de que los rebeldes estuvieran más que fichados por la guardia de Chance y les hubieran seguido la pista hasta aquí. Eso explicaría la roca bloqueando el camino y la constante sensación de estar siendo vigilados. De que alguien o algo nos seguía los pasos.

    Podía ser incluso que todo esto fuese una trampa, una artimaña muy bien diseñada y que la propia Effy formase parte de eso. No quería ni pensarlo, me hervía la sangre en las venas, pero era una posibilidad. Y prefería pecar de desconfiada que de ingenua y tonta.

    >>No tenemos otro plan. Por el momento, tienes mi confianza—afirmé y me agaché para recoger a Yuu del suelo antes de declarar con gravedad—. Pero Effy, si nos estás mintiendo, ni Shura va a poder protegerte.

    Ni siquiera la miré una última vez antes de pasar por su lado y continuar el camino.
     
    Yugen ha tirado dados de 20 caras para Agilidad (aywey) Total: 12 $dice
    • Fangirl Fangirl x 4
    • De acuerdo De acuerdo x 1
  12.  
    MrJake

    MrJake Game Master

    Capricornio
    Miembro desde:
    12 Julio 2012
    Mensajes:
    22,105
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Cuando dijiste aquella última frase, Effy iba delante de ti. No se giró al escucharla, pero la viste pasarse una mano por el rostro y subirla hasta el cabello, apartándoselo ligeramente en el proceso. A su lado, Shura hizo un ruido bajo de molestia, que sonó parecido a lo que para un humano sería un chasquido de lengua, un "tché"; aunque no era novedad que Shura se molestase por todo, desde luego.

    —... entiendo tus sospechas, Mimi —confesó al final Effy, aún avanzando, pero reduciendo el ritmo de la marcha de por sí poco acelerada—. Yo sospecharía también, en tu lugar. Al fin y al cabo, hace quince años que no nos vemos. Más, de hecho, ¿eh? Quién sabe lo que pueden haber cambiado las cosas. Demonios, solo se te encontré porque tu cara estaba en todas partes, y eso me llevó de casualidad hasta Dante. Pero no tenía idea de cómo serías tú tampoco después de tanto tiempo, cómo... sería mi recibimiento, digamos. Me había mentalizado de los tres escenarios posibles en mi cabeza: que desconfiases de mí y me quedase allí, sin nadie a quien traer para Paldea; que por el contrario fuese yo la que viese algo en ti que no me gustase, que no me fiase, y decidiese igualmente volver con las manos vacías después de todo lo que supuso para mí lograr salir... y que, pese al tiempo que había pasado, ambas confiásemos la una en la otra.

    Fue entonces cuando se giró, y esbozó una sonrisa tranquila cuando te miró.

    —Puedo decirte que no tengo motivo alguno para querer haceros daño, Mimi. De verdad. Quizá ahora genero más desconfianza que cuando estaba tumbada y calladita en una cama, ahí debía verme angelicalmente buena. Pero no he cambiado tanto. ¿Acaso físicamente no estoy igual, o qué?

    >> Sobre la roca, es posible que uno de los nuestros la haya bloqueado precisamente para evitar que pasen Ferropokémon. Sabían que iba a venir con refuerzos, así que sería un problema si alguno de esos bichos lograse pasar y bloqueasen el camino. Y son peligrosos, pero bastante estúpidos si se les sabe engañar: si no se dan cuenta de que el bloqueo es manual, quizá lo ven como un callejón sin salida y dan media vuelta. Es lo que tiene ser robots, que no "ven", solo aplican su código y ya.

    >> Eso sí, ya sí que me pierdo con lo que dices de tu brazal, la verdad —admitió Effy, encogiéndose de hombros—. Hace mucho que por aquí no usamos megaobjetos ni nada parecido. Es difícil siquiera hacerse con una pokéball, imagina con una de esas. Pero... por si acaso, yo me mantendría alerta. Si detectó algo quizá fue megaenergía, y no me gusta cómo suena eso de que pueda haber energía cerca.

    Poco después de ese intercambio, Effy esperó a que estuvieseis preparados para pasar por el borde de la pared, evitando a los Glimmora, pero también tratando de no molestar a los Glimmet que había flotando en mitad del camino, para tratar de evitar conflictos innecesarios.

    Tanto tú como Effy lograsteis pasar sin muchos problemas, pero Dante iba detrás. ¿Conseguiría él no llamar la atención de ningún Glimmet ni perturbar a los Glimmora?


    Neki, lánzame tú también dado de agilidad uwu
     
    Última edición: 18 Mayo 2025 a las 4:17 PM
    • Fangirl Fangirl x 3
    • De acuerdo De acuerdo x 1
  13.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,854
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi 2.png

    Apreté a Yuu contra mi pecho, conteniendo como pude mis emociones. ¿Qué significaría exactamente para mí una traición de parte de Effy? El solo hecho de imaginarlo era suficiente para desgarrar algo dentro de mí. Siempre había sido... como una hermana mayor. Una hermana molesta y burlona que disfrutaba sacándome de mis casillas, pero una hermana a fin de cuentas.

    La escuché hablar pero mantuve la guardia alta. Incluso si hablaba con honestidad o con lo que sentía muy dentro de mí que era algo genuino, no podía simplemente confiar de forma ciega. No después de todo lo que había pasado. Por mucho que quisiera derrumbar el muro de suspicacia y desconfianza, mis experiencias pasadas volvían para recordarme que confiar no era una opción.

    Y entonces, en determinado momento, algo de todo de lo que dijo me crispó verdaderamente. Fue como una pequeña chispa, apenas notable, pero capaz de iniciar un incendio.

    "Quizá ahora genero más desconfianza que cuando estaba tumbada y calladita en una cama, ahí debía verme angelicalmente buena."

    No podía mirarme a la cara y decirme eso. No podía tener los ovarios de mirarme a la cara y decirme eso.

    —No tienes idea de lo que significó para mí—le espeté repentinamente—. Ni siquiera Hubert tuvo los huevos de decírmelo, me tuve que enterar sola. ¿Tienes idea de la cantidad de días que fui a verte y hablarte, esperando que por algún milagro divino de Arceus despertaras? Lo hubiera dado todo. Incluso si te hubieras metido conmigo en ese momento me hubiera dado igual.

    Nunca había demostrado abiertamente afecto por ella porque era un amasijo de orgullo sin dirección, pero verla en una camilla, después de recordarla con aquella sonrisa desafiante, siempre confiada y haciéndole frente a todo, fue descorazonador. Fue como si una parte dentro de mí se quebrara para siempre.

    Solté una risa sardónica y amarga.

    >>No eras buena entonces, eras un completo dolor de cabeza para mí. Pero eras mi referente. Estar a tu altura primero y superarte después se convirtieron en mi meta. Y cuando finalmente lo logré, o lo que era mi visión de lograrlo en ese entonces, no podía mostrártelo. Porque estabas intubada y encadenada a la jodida cama de un hospital.

    Mi tono sonó más brusco de lo que pretendía, amargo y tintado de una rabia sorda. Incluso después de años... aún me quemaba. La incertidumbre, el miedo, la absoluta impotencia sentí. Cuando desapareció por un tiempo siempre imaginé que estaba por ahí, enfrentándose en combate a todo ser vivo viviente, porque era eso lo que le obsesionaba: combatir. O tal vez que se había marchado con Hubert y tenían una bonita vida juntos, aunque no me hubieran contado nada. Prefería cualquier cosa, cualquier jodida cosa, antes que eso.

    >>Hubert te leía libros, uno detrás de otro. Y yo te hablaba. Dicen que a pesar de estar en coma los sentidos siguen activos, que alguien comatoso puede escucharte incluso si no te responde. Te conté miles de cosas que probablemente no recuerdas o que quizás ni siquiera escuchaste, no lo sé, y de todos modos ya da igual ahora.

    >>Te perdí la pista después. Y de pronto resulta que despertaste en algún momento y vienes a buscar mi ayuda sin dar explicaciones de nada, como una maldita acosadora, desde Valthyria. ¡Después de más de una década, Effy! ¡¿Qué se supone que piense?! “¡Oh, mi rival despertó del coma! ¡Qué increíble! ¿Quieres pasar a tomar un té con pastas y charlamos de nuestras vidas como si el mundo no se hubiera ido a la mierda hace quince años?”

    Logramos cruzar junto a la pared sin alertar a ninguno de los Glimmet. En nuestra pequeña discusión, Dante quedó ligeramente atrás, pero pudo cruzar sin mayores dificultades.

    Volví a notar el ligero tirón del megabrazal. Podía sentirlo de forma mucho más notoria a medida que nos acercábamos al desvío y el murmullo del mar rompiendo contra las rocas se hacía más fuerte.

    Pero una tempestad completamente diferente se había desatado dentro de mí.

    >>Me tienes mucha fe si esperas que no desconfíe. Ya nada es igual. Ese mundo y este son completamente distintos y tú y yo también lo somos. Estoy aquí por Drake, así que no me pidas que confíe a ciegas en una desconocida.

    I love drama. Specially lesbian drama
     
    • Fangirl Fangirl x 4
    • Ganador Ganador x 1
  14.  
    MrJake

    MrJake Game Master

    Capricornio
    Miembro desde:
    12 Julio 2012
    Mensajes:
    22,105
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor

    Esa frase en particular hizo que Effy redujese el paso. Tanto Dante como tú habíais pasado con suficiente sigilo junto a aquellos Glimmet y Glimmora, sin alertar a ninguno, de alguna forma... y ahora estabais al otro lado, los tres ilesos. Pero notaste a Effy apretar el puño al escucharte, como conteniendo emociones fuertes que surgieron repentinamente. Todo cuanto hizo luego, sin embargo, fue esbozar otra sonrisa, aunque esta vez sin llegar a mirarte del todo, solo dándote el perfil levemente.

    —Por desgracia, no tenía la capacidad para decidir a quién decírselo o a quién no estando en coma, pero sería injusto decirte que fue cosa de Hubert. Porque sí tuve opción a decirlo antes de... bueno, de acabar en ese coma, claro. Pero no quería preocupar a nadie innecesariamente; lo cierto es que no apostaba porque saldría de aquella. Y Hubert solo cumplió con lo que yo le pedí: que guardase el secreto.

    Se giró de nuevo hacia delante, algo sombría.

    —... algo que he aprendido en estos quince años, Mimi, después de tanto tiempo fuera, y de verme inmersa en Valthyria con toda la mierda que ello ha conllevado, es que hay cosas contra las que no puedo hacer nada, y cosas que no son mi responsabilidad. Es así. Hay ciertos factores que no están en mi mano. Si puedo hacer algo por cambiar las cosas tal y como quiero que estén, joder, claro que lo intentaré. Pero he aprendido también a no cargar con todas las responsabilidades y a aceptar que hay veces que no me corresponde a mí solucionar cosas. Y que hay veces en que no soy yo la que debe decidir, ni la que debe convencer o cambiar a otros.

    Había algo de tristeza o melancolía en sus palabras, de alguna forma. O algo parecido a esos sentimientos. Se detuvo entonces, y se giró. Sus ojos estaban curiosamente humedecidos, y su expresión, sin embargo, permanecía estoica.

    —Siento mucho que te sintieses así en aquel momento. De verdad. Y, en parte, te agradezco que hayas estado allí conmigo, mientras dormía y dormía. Lo agradezco porque sé que eso es una señal de que fuiste una gran amiga, mucho más, quizá, de lo que yo pude llegar a pensar en su momento.

    >> Sin embargo —Se giró otra vez, encarándote más, ceño fruncido, pero ojos aún humedecidos—, mi decisión fue que no os enteraseis, estuviese bien o estuviese mal dicha decisión. Y hasta ahí llega mi responsabilidad. Que tú me vieses como tu mayor rival y alguien a quien superar no fue algo que yo pidiese, fue algo que elegiste tú; que tras enterarte de mi coma decidieses acompañarme no fue algo que yo pidiese, lo elegiste tú. Así que no me culpes por ello, por no haberte dado ocasión de demostrarme todas aquellas cosas que querías demostrarme, por haberte sentido sola y haber sufrido por mi estado, y por haber decidido irme después de despertar, cuando ya todo estaba sumido en el caos en el mundo. Yo decidí que no quería involucraros en mis problemas más de la cuenta, y puedes cuestionarme eso todo lo que quieras, pero fue mi decisión. Si tú no la respetaste, Mimi, y sufriste por haber estado apegada a mí, esa fue tu decisión, no la mía; de hecho, significa que no respetaste del todo lo que yo quería.

    Ella también habló de forma brusca, de hecho: pero, con todo, había un deje en su tono de voz que revelaba una cierta intranquilidad, una cierta inseguridad. Eras lo suficientemente buena leyendo expresiones de la gente como para darte cuenta de que había más de fondo en esas quizá duras palabras de Effy, algo que no mostraba. Algo que se callaba, igual que en su momento se calló todos esos problemas.

    —Dicho lo cual —siguió, girándose brevemente—, si confías en mí, de nuevo, es por tu decisión. Y Dante, igual. Ambos estáis aquí porque habéis decidido acompañarme, ¿no? Si tenéis dudas al respecto, no tuvisteis por qué seguirme, por qué venir aquí. El mundo es muy distinto, y yo soy muy distinta: eso es verdad. No asumo que vayas a confiar en mí, por eso te lo estoy pidiendo. Si no lo haces, o si decides hacerlo, sigue siendo decisión tuya. Lo que no puedes es girar la situación para que parezca que yo controlo tus acciones como una titiritera, desde que estaba en coma. Eres mayor para decidir qué quieres hacer, y has decidido venir a Paldea, punto. Te pedí ayuda para con los rebeldes, al tiempo en que te ofrecía ayuda para entrar a Valthyria e ir junto a Drake para ayudarle en lo que fuese que estaba haciendo. Yo propuse un plan, tu lo aceptaste: es tu responsabilidad lo que pase desde este punto en adelante. Así que si quieres dar media vuelta, nadie te lo impide.

    >> No busco que vuelvas a ser mi amiga, Mimi. No cuento con ello; no es mi prioridad. Mi prioridad es arreglar los problemas que tiene la Resistencia, simplemente. Si busco que nos llevemos bien es porque te sigo apreciando, lo creas o no, y porque no me gusta estar en un operativo complicado como este con alguien que anda con resentimientos y desconfianzas hacia mí. Pero si quieres tenerme rencor por mis decisiones pasadas, adelante. Yo no te lo tengo a ti. —Esas últimas palabras las murmuró en un tono más bajo que el resto, de forma que fue difícil escucharlas.

    Exhaló aire pesadamente tras aquel monólogo repentino, y volvió a girarse. Sus palabras fluyeron de sus labios de forma lenta, pero con un tono de voz más elevado de lo usual, y con una contundencia que denotaba severidad y una gran carga de algún tipo en su interior, eso desde luego.

    A su lado, Shura la miraba con patas cruzadas frente al pecho, con gesto entretenido.

    —... perdona, Dante, por el numerito. Y... perdona también tú, Mimi, de hecho. Quizá me pasé un poco con las formas. Ser sutil nunca fue mi fuerte.

    Pero, sin más, miró hacia delante otra vez, en silencio.


    Let's roll some posts en lo que Talía también avanza un poquito más, podemos tomárnoslo con calma si queréis uwu
     
    • Ganador Ganador x 4
    • Fangirl Fangirl x 2
  15.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,854
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi 2.png

    Apreté los labios, tensa, antes de soltar una risa irónica y carente de cualquier alegría interna al escucharla. Sonó forzada, incluso.

    —Por supuesto, fue mi decisión consciente y perfectamente calculada sufrir por la situación, ¿quién lo diría?—dije con un tono que era claramente irónico pero brusco y ácido. No era simple sarcasmo, había un innegable dolor en mis palabras—. Me encanta sufrir, de hecho. Es la mejor sensación del mundo. Creo que necesito sufrir más. Nunca es suficiente.

    La poca sutileza era algo que siempre compartimos.

    Effy tenía los ojos vidriosos, pude notarlo a pesar de que buscaba ocultarlo y no era la única. Agradecía que no me estuviera mirando para parpadear con rapidez, tratando de sacar todas mis dotes interpretativas para enmascarar lo cerca que estaba de quebrarme ahí mismo.

    Tomé una bocanada de aire ligeramente temblorosa.

    Tienes 32 años, Honda. Deja de actuar como una maldita adolescente.

    >>... Ir a visitarte es algo que yo elegí y es algo que haría de nuevo si volviese atrás en el tiempo—declaré—. Nadie me pidió nada y nadie me obligó, lo hice porque quise. Porque es lo que sentía que debía hacer y lo que mi corazón me pedía en ese momento. No te equivoques, Effy, no te culpo por haber estado en coma, culpo a la situación en sí. Y culpo al hecho de que tenía la confianza en que alguien me diría algo. Eras… importante para mí, joder, merecía saberlo. No me vengas con esa mierda de que querías guárdartelo para ti como quien barre la suciedad bajo la alfombra; uno no se guarda algo así y sigue con su vida como si nada. ¿No se supone que éramos todos la gran familia feliz? ¿Siempre apoyándonos en las buenas y en las malas, que aún si caímos estaríamos ahí para los demás porque eso es lo que hacen las familias? Al menos era lo que solía pensar. Qué visión tan infantil y estúpida.

    Siempre lo había creído. Nunca había tenido una familia en sí pero los holders fueron en su momento lo más parecido que tuve jamás. En el apoyo y el cariño de todos encontré coraje, comprensión y la fuerza suficiente y el valor para romper con las cadenas de mi pasado y plantarle cara a mi padre ausente. Supe lo que era la verdadera confianza, el orgullo genuino y la lealtad más absoluta. Y jamás lo dudé o titubeé siquiera un instante.

    Sin embargo... no éramos nada realmente. Solo un grupo de extraños que ni siquiera debían existir en primer lugar y que habían formado unos vínculos que no estaban destinados a formar. Tau nos creó como meras herramientas, no nos planificó para sentir, para padecer o para amar.

    Y aún así lo hicimos.

    Al menos hasta que Chance decidió hacer del mundo su patio de juegos particular y el pequeño pedazo de mundo idílico se hizo trizas, derrumbándose con todo su peso sobre nuestros hombros. En mi caso lo perdí todo y cobardemente decidí huir, porque era mucho más fácil eso que seguir sufriendo.

    Y ahora nada era igual. El mundo era un maldito campo minado y cualquier paso en falso podía ser el último. No había seguridad de nada. La confianza no es algo que se da gratuitamente, es algo que se gana con tiempo y esfuerzo y que puede perderse en un solo segundo y jamás recuperarse.

    Fue mi decisión seguir a Effy hasta Valthyria, nadie me obligó, nadie me puso una pistola en la sien. Lo hice porque quise, por supuesto. Porque estaba harta de ser una víctima.

    Y no iba a retroceder.

    Al menos había cosas que jamás cambiarían.

    >>No te tengo rencor, Effy—confesé finalmente y desvié la mirada, sombría, apretando mis brazos en torno al cuerpo de Yuu—. Me duele, es cierto. No voy a negar que me duele. Pero no te odio. Simplemente no confío ciegamente en ti, ni tengo razones para hacerlo.

    Sho iba a tirar dado de percepción pero pos Mimi está sad, ni se habrá fijado en que Effy le oculta algo idk-
     
    • Fangirl Fangirl x 5
  16.  
    MrJake

    MrJake Game Master

    Capricornio
    Miembro desde:
    12 Julio 2012
    Mensajes:
    22,105
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Ya cuando empezaste a hablar de forma algo sarcástica notaste a Effy enrojeciendo un poco, parada contra una pared rocosa, desviando la mirada y brazos cruzados bajo el pecho. Parecía estar haciendo un esfuerzo consciente por reprimir emociones enfrentadas: enfado, rabia, pero también impotencia y, quizá, tristeza, de algún modo.

    Pero fue esa frase la que hizo que chasquease la lengua. Esperó a que terminases, pero entre dientes, murmuró antes de que lo hicieses:

    —No has entendido nada.

    Luego alzó la voz, haciendo un verdadero intento por no descomponerse en rabia o en llanto, o en algo. Effy quizá siempre fue bastante contenida en sus emociones, pero lo que veías en ella ahora no era para nada comparable a la chica que conociste. La Effy de hace quince años hubiese, probablemente, estallado ya. Porque tal vez no era mucho de expresar sentimientos más profundos, pero tampoco se cortaba a la hora de soltar sus verdades. Esta era mucho más comedida.

    Y, aún así, acabó hablando. Con un tono brusco, la cara enrojecida, sí, pero... de forma extrañamente tranquila, calculada.

    —Que no te vaya con eso de que quería guardármelo, que uno no se guarda algo así... Mimi, no te corresponde a ti decidirlo. Eso es lo que trato de decirte. Era mi problema. Yo no quería que te enterases, ni tú, ni nadie. Y tenía derecho a que así fuese. Tenía derecho a guardarme lo que me diese la gana guardarme, a sufrirlo sola si quería, a morir sola si quería. Pero actúas como si tú fueses la que elige qué debo y qué no debo compartir contigo, como si tú fueses la que cataloga qué es ser "una familia", como dices que éramos, y todo lo que no encaje en esa descripción, en esa idea que al final es tuya, fuese una prueba de que realmente nunca fuimos eso, o fuese una forma de "traicionar" ese concepto de amistad, o de "familia". Pero es tu concepto, no el universal. Cada uno puede tener su visión de cómo cuidamos, mostramos aprecio, respeto y cariño hacia otros. Y la mía era no contároslo, mi decisión era pasar aquel mal trago, aquella enfermedad, aquel coma, por mi cuenta. Así que no me digas que "uno no se guarda algo así y sigue su vida como si nada": yo quería hacerlo así. Para mí, eso no invalida que fuésemos una "familia feliz": para mí, eso es lo que yo, como familia, consideraba que era cuidaros. Y querría que al menos lo entiendas ahora, joder.

    Se movió entonces, separándose de la pared y poniendo una mano en la cabeza de Shura, que parecía impaciente ante aquel parón. El gesto cariñoso de Effy hacia su pokémon pareció más una disculpa que otra cosa, sin embargo, pues el bicho estaba claramente impaciente... pero, con todo, también miraba a Effy con cierta compasión.

    La viste mirar hacia el techo de la gruta, tomar una bocanada de aire profunda, y cerrar los ojos con la barbilla alzada.

    —Quince años cambian mucho las cosas. Mucho. No soy la misma, Mimi. Para nada. Ni quiero.

    Miró a otro lado de nuevo, y pronunció una frase tan, tan bajo, que no la llegaste a escuchar bien. Fue casi un soplo para sí misma.

    —... tampoco creo que merezca serlo.
     
    Última edición: 19 Mayo 2025 a las 1:48 PM
    • Ganador Ganador x 2
    • Sad Sad x 2
    • Fangirl Fangirl x 1
  17.  
    Nekita

    Nekita Amo de FFL

    Piscis
    Miembro desde:
    18 Marzo 2012
    Mensajes:
    8,559
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Dante.png

    Escuchó atento las palabras de Effy, tratando de razonarlas con cuidado para combatir aquella paranoia (o cautela como lo llamaba Mimi) de que había algo que no cuadraba del todo con todo lo que llevaban recorrido, una parte de él seguía sintiendo como si los hubieran querido conducir a un lugar específico para, de alguna forma, atraparlos.

    Porque si ellos estaban ayudando a Effy a traer ayuda, ¿no sería lo mejor decirle que buscarían alterar algunas rutas para que los "Ferropokémon" (lo que sea que fuera eso) no interfirieran?

    Mientras la discusión se acaloraba y él trataba de salir con cuidado de la cueva evitando alterar demás a los pokémon, trataba de cuidar que cualquier rastro de que estuvieran pasando por ese camino ya no existiera, porque si los iban a seguir prefería que fuera una tarea un poco más difícil y ahora que también tenía eso presente, buscaba estar atento a ese pequeño espía.

    Porque fuera del deseo de cuidar al pequeño grupo, tomarse el tiempo de estar viendo cualquier otra cosa que no fuera esa pequeña discusión era mucho mejor. Podía aportar para tratar de frenarlas o desviar el tema a algo más tranquilo, sí, pero no era algo que lo estuviera involucrando en realidad. Effy y él habían tenido una buena amistad, la admiraba y apreciaba en partes iguales, obviamente había tenido una gran emoción de verla sana y salva en ese café pero nada de eso se compraba a la relación que ambas hubieran podido desarrollar así que... quería dejar que lo arreglaran, en cierta manera, solas.

    Y por mucho que tuviera una pequeña espina hacia la situación, entendía un poco el sentimiento de Effy de decidir que compartir y que no, decidir lo que ella quería lidiar por su cuenta sin que nadie se enterara.

    Así que, cuando toda la discusión pareció calmarse un poco, se acercó a ambas nuevamente y posó una de sus manos sobre un hombro de Effy con cariño. —Entiendo el sentimiento de decidir qué clase de problemas quieres compartir o no con alguien, yo fui el primero en ocultarle cosas a todos ustedes cuando éramos chicos porque no deseaba en lo absoluto que tuvieran que lidiar con eso.

    —Ciertas situaciones pueden sentirse más ligeras si las compartes, claro, pero otras simplemente pueden llevarse mejor para uno si las mantienes cerca de tu pecho y sin que nadie pueda entrometerse para proteger a quienes quieres de un mal momento, de que te miren diferente o te traten diferente. Se comprende, tampoco se te debe recriminar, es normal...

    Sonrió y le dio un par de palmaditas amistosas antes de darle algo más de espacio personal, volviendo en cierta forma al lado de Mimi para mirarla —También descubrí que estar del otro lado también puede sentirse horrible, creo que ambas cosas son muy válidas de sentir, y quizás haya muchas mas cosas que pudieran hablar pero creo que debemos seguir adelante para no desesperar a Shura tanto...—Aquello último era tan solo una pequeña manera que quería aligerar un poco el ambiente, un pequeño chiste —, yo seguiré vigilando nuestras espaldas, así que, ¿qué tal si tú mantienes un ojo también al frente con Effy?

    Era una buena sugerencia para mantener a todos a salvo, aunque por todo lo que había escuchado estaba seguro que Mimi también podía interpretarlo en tratar de estar atenta a algo más que nuestro futuro paisaje.
     

    Archivos adjuntos:

    • Dante.png
      Dante.png
      Tamaño del archivo:
      110.3 KB
      Vistas:
      1
    • Fangirl Fangirl x 3
  18.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,854
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi 2.png

    Solté el aire de golpe, claramente harta de esta absurda discusión. Apoyé mi espalda contra la pared en un movimiento resuelto y la miré con seriedad, tratando de zanjar el asunto de una vez por todas. Podía sentir un nudo en la garganta cada vez más tenso, pero había aprendido a fingir de forma bastante decente, después de todo mi profesión consistía en eso. Por eso mi voz no vaciló ni titubeé cuando finalmente respondí:

    >>¿Quieres saber lo que pienso? Pienso que fuiste egoísta. No quisiste decirnos nada y te resguardaste en ti misma pensando que al ocultarte de todos nos protegías del dolor al descubrir tu estado de salud. Crees que fuiste noble ocultándonos la verdad, pero jamás tuviste en cuenta el daño que nos podías hacer no confiando en nosotros. No nos protegiste, Effy. Nos mentiste y Hubert fue cómplice. Me importan tres cuernos de Tauros si fue tu decisión, fue una decisión de mierda. Siempre has sido así, te lo guardas todo, cargas con un peso que quizás es demasiado para ti, pero insistes en hacerlo porque piensas que es tu responsabilidad. Igual que Alpha con Darkrai.

    >>... Os pareceis tanto que es ridículo.

    Lo último lo dije de forma más baja, entre dientes. Alpha pensó que cargar con las pesadillas que Darkrai le causaba cada noche y pasar días enteros sin dormir era su deber, porque si él no lo hacía alguien más tendría que hacerlo. El complejo de salvador llevado a su grado máximo o puro y duro masoquismo, no había punto medio. Era igual que Effy. O Effy igual que él. Porque incluso yo, habiendo sido un amasijo de orgullo sin dirección, sabía aceptar la ayuda de otros.

    Dante se unió a la conversación intentando mediar y poner paz entre nosotras. Era evidente que entendía el punto de Effy, pero no lo compartía. Al menos él tenía la sutileza que nosotras no.

    >>Tal vez no tenga idea de lo que es una familia—dije finalmente y me aparté de la pared para seguir caminando, pasando de largo por el lado de Effy—. No tengo un gran historial del que comparar, así que disculpa si mi concepto no te satisface. A mi no me satisface el tuyo.
     
    • Sad Sad x 2
    • Fangirl Fangirl x 1
  19.  
    MrJake

    MrJake Game Master

    Capricornio
    Miembro desde:
    12 Julio 2012
    Mensajes:
    22,105
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Effy asintió ante tus palabras, con un cierto gesto de alivio. En un leve susurro, dijo:

    —Me alegro de que lo entiendas, Dante.

    Pero luego... Mimi siguió hablando. Y tocó un cierto tema, dijo algo, que crispó a Effy. Tanto, que dio un par de zancadas para alcanzarla, puso una mano en su hombro y la hizo girarse para mirarla de frente. Los ojos de Effy tenían una cierta llama encendida en ellos, una llama que ni siquiera las evidentes lágrimas que contenía podían apagar.

    —A mí dime lo que quieras, Mimi, pero no metas a Hubert. Él no hizo nada malo.

    Después de eso, respiró hondo, y fue ella la que se adelantó un par de pasos.

    —La diferencia entre tú y yo es que yo sí te entiendo. Yo entiendo que estuvieses preocupada, que vinieses a verme y que te enfadase que no te contase nada. Lo entiendo y hasta te he agradecido por ello. Pero tú pareces no entenderme a mí. —Se giró por completo, encarándote de frente—. ¿Has tenido una enfermedad terminal que amenazase con matarte alguna vez, Mimi? ¿Quién coño eres para saber si en esos momentos, si viviendo esa experiencia, te apetece un huevo contarle a todo el mundo lo que sucede, para que se apiaden de ti, para que generes un halo de tristeza a tu alrededor? ¿O para que te digan "seguro que sales de esta" cuando es lo último que quieres escuchar, porque piensas que no vas a hacerlo? No decides eso, Mimi. No tienes ningún derecho a decirme que fui egoísta, y que me lo diga refleja que no tienes verdadera empatía hacia la situación que viví. Te estoy diciendo ahora que entiendo que quisieses saberlo, pero que quiero que entiendas que yo no quería que lo supieseis. Y no tienes ni esto de derecho —hizo un enfático gesto, acercando su pulgar y su índice frente a sí— para juzgar esa decisión. De decir que fue una "decisión de mierda". De decirme cómo soy o cómo dejo de ser... o más bien cómo era o cómo dejaba de ser. Aquí el punto es que mi decisión fue válida, y tenía muchos más motivos. No todo hay que compartirlo con los amigos o la familia, Mimi, y no todo se hace solo por evitarles daño o por cargar tú sola con ellos. A veces simplemente no quieres compartirlos porque son tus problemas, quieres pasar por ellos sola y no quieres que los demás se involucren porque no es algo que les atañe a ellos.

    Se giró.

    —Lamento que mi estado de salud fuese algo que aparentemente tenía que contaros sí o sí a todos, pregonándolo a bombo y platillo holder tras holder, porque no hacerlo aparentemente es egoísta. Pero a mí me parece más egoísta que te esté diciendo que no quería que lo supieses, que en parte me dolió no sentir que mi decisión fue respetada, y aun así tú digas "pero a mí me dolió", "fue una decisión de mierda", "yo", "nosotros", "yo". No decidas automáticamente que "sufrí más" por "guardarme cosas", porque te aseguro que gracias a que Hubert guardó el secreto hasta que ya no fui consciente de nada... llevé con mucha más dignidad todo aquello que si os hubiese tenido a todos a mi alrededor. Ese era mi problema, no el vuestro: y por tanto, que lo enfoques todo el tiempo en torno a lo que tú crees que debí haber hecho o cómo os sentisteis los demás por una decisión sobre un problema únicamente mío me parece una puta mierda, Mimi. Así de claro.

    Soltó otro suspiro pesado, y empezó a andar, hasta alejarse unos cuantos metros. Se giró y os miró a ambos.

    —No voy a discutir más, digas lo que digas. Yo seguiré adelante, vosotros podéis seguirme si queréis. Shura, vamos.

    Cuando volvió a enfocarse hacia delante, estuvisteis seguros de que murmuró algo más en voz baja, pero... no alcanzasteis a escucharlo fácilmente.
     
    Última edición: 20 Mayo 2025 a las 2:44 AM
    • Ganador Ganador x 2
    • Sad Sad x 2
    • Fangirl Fangirl x 1
  20.  
    Yugen

    Yugen D e p r e s s e d | m e s s

    Piscis
    Miembro desde:
    25 Mayo 2013
    Mensajes:
    5,854
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Mimi 2.png

    Ella misma había dicho que no decirnos nada era su forma de cuidarnos. Lo que me parecía una mierda si era el caso, pero no iba a insistir más. Me pareciese bien o no, era su decisión y aunque no la compartía, era lo que había pasado. No íbamos a llegar a un acuerdo en este punto y seguir discutiendo tampoco era una opción.

    En el momento en que me puso la mano en el hombro y me volteó con aquella rabia impresa, las piezas encajaron de golpe. Fue como un shock repentino, un cubo de agua helada que me congeló la sangre en las venas.

    Una… ¿enfermedad terminal? Ni siquiera imaginaba que lo de Effy había sido tan grave. Había mil razones por las que alguien podía terminar en un coma, ¿por qué tenía que ser una jodida enfermedad terminal?

    Un escalofrío me recorrió la espalda.

    Nunca la había vivido en mi propia piel, pero sí la había visto de cerca en mi madre. Recordaba como ella misma negaba con debilidad su condición intentando mostrarse fuerte y seguir haciendo las cosas que había hecho siempre, incluso cuando le faltaban las fuerzas. Era demasiado pequeña en ese momento para comprenderlo, pero su muerte me dolió igual, supiese de su condición o no.

    Si Effy hubiese muerto… ninguno de nosotros lo sabríamos.

    Y en ese momento, entendí que era eso lo que ella quería. Desaparecer, como una vela que se consume sola lentamente en mitad de una habitación oscura hasta que todo se sume en las tinieblas. Su última voluntad era dejar esta existencia en silencio, sin bombo ni platillos, sin despedidas, sin más lágrimas que no fuesen las suyas.

    Porque ella sabía que iba a morir.

    Al fondo de mi mente, una voz hizo una pregunta, algo que hasta ese entonces no había tenido en cuenta: Effy tenía la seguridad de que iba a morir pero… no había muerto. ¿Por qué? Aun desconociendo su condición exacta, alguien no se salva de la muerte por simple suerte. Y ella tenía la seguridad absoluta de que su destino era funesto.



    Hubert. ¿Hubert había tenido que ver? ¿Pero cómo? Siempre fue inteligente y quizás se había decantado por alguna profesión relacionada con la ciencia o la medicina. No dudaba que hubiera puesto todos sus esfuerzos en salvar a Effy. Pero, si era así, ¿dónde estaba ahora? ¿Formaba parte de la Resistencia?

    O había… ¿algo más que se me escapaba?

    —Effy—la lamé con gravedad, deteniendo mis pasos repentinamente —. ¿Dónde está Hubert?
     
    • Fangirl Fangirl x 2
    • Sad Sad x 2
Cargando...
Similar Threads - Alforno
  1. MrJake
    Respuestas:
    32
    Vistas:
    985

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso