Pokémon Chaos World

Tema en 'Fanfics Abandonados Pokémon' iniciado por xpokemaster, 4 Junio 2013.

Estado del tema:
No se permiten más respuestas.
  1.  
    xpokemaster

    xpokemaster Entusiasta

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Febrero 2011
    Mensajes:
    67
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Pokémon Chaos World
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Acción/Épica
    Total de capítulos:
    4
     
    Palabras:
    2479
    Prólogo:
    Inmensidad del espacio, lugar infinito, lugar insolado, un huevo a la mitad de la nada que si llegara a existir una persona en ese espacio-tiempo, no podría ni verlo. Oscuridad profunda, la nada absoluta, el nunca creado. El origen de los orígenes, el huevo de la generación total. Arceus Nace.
    La creación, el origen, el regalo de la vida comienza poco a poco, con un guardián en su espalda, con un ser que lo cuida ya que tan solo es un bebé de la creación a pesar de ser el organismo más fuerte de todos. Darkrai.
    Se hizo la luz, se dio al descubierto Darkrai, pero la oscuridad se creó al mismo tiempo quela luz. Traición. Arceus atacado por la espalda. Traición. Único pensamiento dado para Arceus al ver que su guardián lo ataca. Traición. Venganza. Atacar. Defenderse. La oscuridad, sonriendo, creció.
    Culpa infundada. Acusasiones. Dañado por el que intentaba proteger. Darkrai escapó juró algún día vengarce. Despecho. Odio. Ira. Furia. Darkrai se hizo un ser de pesadillas. Muerte. Sed de matar. La oscuridad, sonriendo, creció. Apoderándose de Darkrai en su totalidad, alimentándose de él. Creando la energía oscura de Darkrai, Energía Dark

    Capítulo 1: Rekyem of a Beginning.

    —Ciento veinticuatro —Cae una gota de sudor de su frente. —ciento veinticinco —Sus brazos le gritan qué pare, pero él no lo iba a hacer, no aún. —Ciento veinti… —Empiezan a temblar, sí el no los iba a dejar descansar lo obligarían. — ¡Sólo uno más!— Grita a su cuerpo y se inclina haciendo una lagartija. — ¡Otro! —se fuerza cómo sí su vida dependiera de ello. —Ciento veintisiete, ciento veintiocho, ciento veintinueve, ¡¡¡ciento treinta!!! —Grita con dolor en el último, lo había hecho todo muy rápido y su cuerpo cae rendido, se pone a descansar un rato.


    —Todavía falta más, un poco más —se dice a sí mismo. —pero esto será más sencillo.

    Un chico caucásico se limpia con una toalla el sudor, su arduo entrenamiento le había permitido hacer ya unas 130 lagartijas, pero su cuerpo le pedía a gritos qué ni se moviera, sin embargo no le hizo caso, quería poder controlarlo.


    Mira al cielo azul que se encontraba despejado, a pesar de qué el día anterior había llovido con furia; el monte dónde Chris se encontraba estaba lodoso en los rededores, olía al sereno del pasto de una manera muy relajante que a la vez era rejuvenecedora, el viento se sacudía con gracia a través del pelo medianamente largo del niño, dónde se entrenaba era un lugar liso de piedra qué el mismo había preparado con la ayuda de un Riolu.

    Los montes qué los rodeaban, a pesar de no ser muy altos, impedían la vista de su alrededor lo cuál era también conveniente a Chris, el chico, ya qué no le gustaba qué lo vieran entrenar, estaban llenos de pasto a una altura no muy grande, fáciles para andar en picnic en épocas de primavera y verano, sin embargo era 1 de enero, el nuevo año recién había llegado junto al cumpleaños número 10.


    La piedra era escarpada y un poco tosca, sin embargo contaba con superficies lisas e impecables para un buen entrenamiento. Los pokémon solían evadir la zona ya qué no tenía una gran fuente de comida lo cual también era conveniente, pero a pesar de todo se podían encontrar Caterpies y Kricketots en el camino de uno ya qué se alimentaban del pasto.

    También pokémon de pradera cómo Shinx se alimentaban con habitualidad por esos rumbos de los pokémon insecto, aprovechando para correr y jugar por los campos.

    El frío de la mañana mantenía a los pokémon diurnos reguarnecidos en sus propios nidos, mientras qué los débiles rayos del sol le impedían la salida a los pokémon nocturnos. Un ambiente pacífico y sin molestias el cual da facilidad de ejercicio desde las 6:30 hasta las 8:30.
    Chris sólo traía puesto sus pantalones cortos de color gris opaco y qué terminaban en algodón blanco para mantener el calor. El sudor se deslizaba por sus pequeños músculos qué apenas se desarrollaban. Era de baja estatura a pesar de ejercitarse (1.25 m), por los malos genes por el camino materno. Se para y pone una camisa negra de poliéster lisa, le gustaba mucho el negro. Arriba de ella se coloca su chamarra No le gustaba qué notaran qué se ejercitaba así qué se cubría con una chamarra siempre. Se coloca bien una gorra con una raya de color rojo oscuro en medio y a los lados era de color negro.


    Su cabello castaño oscuro era usualmente desarreglado y para evitar qué se notara mucho se colocaba su gorra con regularidad. Sus ojos son castaños y sus facciones son de una persona flaca a pesar de alimentarse bien, con mandíbula ligeramente prominente y unas cuantas ojeras de agotamiento.

    —Vamos chicos, qué ya es casi hora de terminar, ahora a ver los resultados. —Dice alegremente a sus 3 pokémon, los cuales se encontraban meditando en un descanso.

    —Rio… —Asiente un pokémon de pelaje azul corto, este pelaje ni se inmuta con el viento, su pelaje negro de la cara asemeja a un antifaz y el de las patas superiores a unos guantes. De rasgos caninos y unos ojos rojos. Al verlo se notaba la confianza y dureza del pokémon, no se podía tirar fácilmente.


    —Ralts —Susurra el otro con timidez y subiendo su mano a la altura de su boca, prefería estar meditando. Su forma humanoide tenía piel de blanco puro, a excepción de su cabeza qué tenía cómo un cabello de color verde con cuernos rojos en forma parabólico dirigiéndose hacia adelante y atrás. Sus piernas parecían arrastrar cómo un pequeño vestido, pero también era parte de su piel.

    —Pika… —Bosteza el otro, ya tenía 4 años a estar acostumbrado a este estilo de entrenamiento. El pokémon ratón qué es muy conocido agita su cola y saca unos destellos de electricidad azul, ramificados y muy veloces.


    —Jé, que confianza ustedes dos, pero vamos, que hay que reforzar la de Ralts —Dice Chris con un poco de energía sonriéndoles.

    —Ral… —Dice más relajado su pokémon, la confianza de Chris se transmitía al otro por la naturaleza de compartir sentimientos del humanoide.



    —Pikachu —Voltea a verlo y luego al otro. —Riolu, prepárense —Dicho esto lanza una piedra hacia Ralts con mucha velocidad, Ralts la esquiva moviéndose con rapidez hacía el lado, luego de ello Pikachu golpea una con su cola y va parabólicamente hacia Ralts, Ralts se agacha y la esquiva, dejándose expuesto a la de Riolu. —Recuerda, piensa —Dice Chris al ver qué Ralts entra un poco en pánico, sin embargo usa teletransportación en último momento y lo evade.

    Lo mismo sigue con Riolu y Pikachu, los cuáles eran mucho mejores en ésta área dando qué no les costara nada, Chris mira su reloj. “8:40”, no está mal, nada mal de hora. Comienza a caminar tranquilamente para descansar músculos. Tras un poco de tiempo llega al laboratorio del profesor Newt. Blanco y un poco chico debido a que la Región Legend es un lugar subdesarrollado conforme a tecnología, carcomido con el tiempo, pero a pesar de su aspecto estaba bien esterilizado para usos prácticos.


    —Profesor, ya estoy —Dice golpeando con fuerza la puerta del laboratorio, no podía esperar de la emoción, era ya hora de qué se le uniera un nuevo compañero.

    — ¡Ay! —Se oye un grito de dolor y Chris se le cae una gota por la frente sintiéndose culpable de ser el causante. — Ya voy, ya voy —Contesta para qué lo esperen.


    Se sorprende al ver qué solo es un chico, ve qué es Chris y suspira molesto.

    —Todavía no son las 11 ¿Verdad? —Pregunta el joven y descuidado, con el cabello café muy largo hasta los hombros, unas gafas de gran montura y toda la bata mal acomodada, tras él salen un montón de pokémon pero se quedan afuera. A pesar de su apariencia de ese día normalmente estaba mejor arreglado.


    —Este… no jejeje —Se acaricia la nuca apenado el niño.

    —Debiste haber esperado sólo me sobresaltaste, bueno, aprovecha para familiarizarte con tu Chimchar —Le dice más calmado el joven de 24 años.


    El tierno pokémon chimpancé, de un rojo intenso con carne, un pelaje hacia arriba y una llama más grande que el promedio, se abalanza hacia Chris como si ya lo hubiera conocido con antelación. “Qué raro… siento por primera vez una empatía inmediata que no tiene nada que ver con la crianza” piensa Chris atrapando al mono y casi cayéndose.

    La gente llega poco a poco, saliendo y entrando del laboratorio, acaricia a sus pokémon, se pelean con ellos, algunos empiezan a practicar, otros empiezan las batallas pokémon o alimentan a estos.


    Los amigos de Chris tardan en aparecer y se quedan platicando un poco sobre qué pokémon se van a quedar. Ellos 3 entran al laboratorio y salen con sus respectivos.

    Aldo, el mejor amigo de Chris con su rara forma de parecida al del Team Galaxy pero en negro, va con una chamarra roja abierta y una camisa blanca, que lleva un Cráneo en la espalda, pero no se nota con la chamarra. Había escogido un Treecko que no se deja agarrar y se trepa por su cuerpo, teniendo un pedazo de rama en la boca y con una cicatriz en el brazo.


    Brayan va tan deportivo como siempre, no le gusta nada vestirse para invierno y muchas veces estuvo a punto de morir de un resfriado (metafóricamente hablando), con cabello parado y una gorra deportiva qué no cubría por arriba. Escogió a un Charmander, con unos ojos verdes muy raros en su especie, este va tranquilo junto a él con aire de lealtad.

    Michelle, la mejor amiga de Chris y que Chris siente algo secretamente por ella, lleva una minifalda roja y una camisa negra, con su gorrito gris y el cabello rubio casi dorado, su vestimenta se basa en la ganadora de todas las medallas de Sinnoh. Lleva en brazos a un mono Togepi qué anda casi dormido, a Chris le interesaban los Togekiss, pero por su odio a los pokémon volador no podía soportar estar junto a uno.


    —Nunca fui fan los tipo planta —Dice Chris agachándose a ver a Treecko, el cuál le da una mirada de desafío un poco altanera.



    —Vamos Chris, todo tienen gustos diferentes —dice Brayan. —A mí me gustan los dragones y por eso escogí a Charmander.



    —Pero Charizard no es un dragón —Se ríe Aldo mencionando a un viejo chiste de los Charizard.



    —Bueno… en eso tienen razón —No podía aguantar más, el fervor de la batalla lo llamaba, una pelea contra un entrenador sería muy diferente a lo qué está acostumbrado, se emocionaba sólo de pensar en la batalla. —No se atreverían a luchar conmigo ¿O sí? —Dice retador para qué se cabreen un poco.


    —No estaría mal una pelea —Responde Brayan interesado.


    —Sólo serás una práctica en mi camino para ser un campeón —Alardea Aldo con confianza.

    —Yo los vigilaré chicos —Dice Michelle desinteresada en las peleas, ya qué su intensión era ser coordinadora.

    —Entonces una batalla doble, Ralts y Chimchar contra Treecko y Charmander —Dice Chris.

    —No me parece justo, tienes ventaja, deberías utilizar a Riolu o de pérdida a Pikachu —Se queja Aldo.

    —No, quiero un reto, Ralts es más débil por su desconfianza, necesito qué gane para qué confíe en sí mismo —Aclara Chris. —Hasta te conviene.

    —Ya, sólo peleemos, muchas palabras —Bufa Brayan un poco molesto de tanta Charla.

    —Chimchar excavar —Ordena Chris teniendo la ventaja de saber algunos ataques al familiarizarse con su pokémon. —Ralts, teletransporte X1— Era una de las órdenes de Chris para ataques complejos.

    —Treecko bala semilla a tu espalda —Dice Aldo intentando prever una situación al conocer a su amigo, a pesar de parecer un idiota qué sólo habla, tiene su inteligencia.
    —Jé —Sólo sonríe Chris.


    —Charmander, lo qué te expliqué —Dice Brayan aprovechando el descuido de Chris.

    Charmander da un salto en el aire mientras acumula fuego morado entre sus colmillos, da una vuelta en el aire y utiliza Ascuas, el fuego morado era un Furia Dragón, este sale disparado con las ascuas que bailan entrando y saliendo por el fuego, en el giro aumenta su rango en los 360° de Charmander, Chimchar da una voltereta y lo rosa haciéndole un buen daño, sin embargo logra escapar con excavar de recibirlo todo.

    “Es una buena técnica, con el giro de 360° aumenta mucho el rango y evita ataques por la espalda, a su vez qué las ascuas al moverse aumentan aún más el rango y actúan cómo pirotécnica fragmentándose para hacer daño sí o sí al pokémon” piensa Chris analizando rápidamente la técnica “Lastima qué no llegaré a tener algún pokémon qué logra realizar esa técnica”

    —Giro dragón (Nueva técnica) así decidí llamarlo —Dice Brayan orgulloso.

    Ralts se teletransporta tras Treecko y recibe una parte del ataque, saliendo dañado, pero después usa un potente y rápido teletransporte a ambos qué los cambia de lugar y Treecko recibe la mayor parte del daño de su propio ataque.

    — ¿Qué mierda? —Insulta Aldo perplejo, no podía creer la velocidad para usar ataques de Ralts. —Treecko, destructor —Indica y audazmente Treecko golpea con su cola a Ralts tirándolo, Ralts viendo qué no puede más y está en desventaja lanza un confusión contra a Charmander y lo debilita por crítico mientras se recuperaba del combo. —Ahora finaliza con bala semilla desde el aire.

    Treecko salta y da un crítico en Ralts dejándolo noqueado.

    —Pan comido —Aldo se ríe y ufana de su victoria.

    —Revisa tus pies —Dice Chris con confianza.

    — ¿Qué? —pregunta Aldo demasiado tarde, Chimchar sale del suelo mientras utiliza Ascuas y deja noqueado a Treecko.

    Tras la intensa pelea recuperan a sus pokémon y Chris se despide, quería prepararse lo antes posible para partir, ya habría tiempo para encontrarse de nuevo con sus amigos….

    CONTINUARÁ…
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  2.  
    xpokemaster

    xpokemaster Entusiasta

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Febrero 2011
    Mensajes:
    67
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Pokémon Chaos World
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Acción/Épica
    Total de capítulos:
    4
     
    Palabras:
    2439
    Bien ahora empezamos fuerte!
    Un pequeño Art mío, espero qué no sea una molestía nunU

    Capítulo 2: Historia del Caos

    Chris, lleno de entusiasmo arde de fervor por continuar, sólo quería seguir adelante, seguir viviendo, explorar y recorrer lo qué venga en su camino, conseguir un tipo de felicidad. En realidad no le importaba la liga pokémon, no era nada para él, nada más qué algo qué su papá había ganado y seguía invicto…

    Su papá. Al recordarlo paró en lo qué hacía. Había estado controlando unos objetos por medio de su mochila semi-electrónica (La cuál opera tal cómo las pokébolas almacenando todo cómo datos, pero esto era controlado por medio de un panel holográfico táctil, una tecnología exportada desde Japón a la Región Legend, Chris al ser un chico de dinero pudo costeársela y también para sus amigos).

    ¿Por qué ya no vienes…? susurra para sus adentros y se queda mirando fijamente a su mochila, había perdido la concentración y ya no recordaba qué baya era cuál ni cuántas pokébolas tenía. Sólo la imagen del campeón de la Región Legend se afloraba en su mente.
    El tiempo no fluía, un malestar en su estómago se formuló y no dejaba de molestar. El reloj sonaba increíblemente fuerte… Tic tac Tic tac Tic tac, resonaba dentro de Chris. Él empezó a sentir nostalgia, por qué, al fin y al cabo era un niño que iba a emprender un viaje, su vida cambiaría, todo sería diferente, “Hay pasos qué al darse no se podrá regresar atrás”

    Traga saliva y se tira en la cama, se queda mirando su techo blanco, nada había cambiado en años. A pesar de ser de una cantidad de bienes, por el empelo de su padre, no solían ampliar la casa ni agregarle cosas, ya qué les parecía innecesario. Era una casa modesta a pesar de todo, modesta y en un pueblo alejado.

    Chris agarra su despertador y estornuda. No debía haber salido de la casa tan temprano, coger un resfriado antes de partir no era bueno. Su cajón de ropa qué tenía al lado tenía fotos de su padre, su madre, sus tíos fallecidos y también de o un Starly. No se limpiaba por qué siempre Chris siempre evitaba voltear hacia ella.

    Su cuarto era vacío y limpio, nunca le gustó decorar, le parecía una pérdida de tiempo, ni siquiera los posters, se la pasaba la mayor parte del tiempo en la incubadora de su madre, junto a los pokémon para comprenderlos más. Al dar una última mirada antes de irse, se dio cuenta qué sí no fuera por la cama, éste ni siquiera sería un cuarto, sólo una habitación más.

    Sin dejar rastro, cómo un ser inexistente… Dijo parándose con una sonrisa y los ojos vacíos. Conservador en el olvido.

    Sacudió la cabeza y mejor guardó todo de golpe en vez de acomodar, ya le daría tiempo.

    Chris Se escucha una débil voz, suave pero autoritaria, cuándo Chris va bajando las escaleras. Ven un momento por favor.

    Sí madre Contesta el joven.

    ¿Por qué vas a ir?, piénsalo seriamente —Le dice sentada en la mesa, todo era tan tenso.

    Por qué tengo qué… contesta tajantemente Chris, no estaba para dar explicaciones.

    Pero tú eres criador dice enojada por cómo le habla. !Y debes hablarme con respeto!-

    No soy criador como tu, tú asumiste qué lo soy…

    Pero tú odias las peleas pokémon-

    Sólo “por eso” dice Chris recordando con dolor. —No significa qué las odie, incluso me parecen algo entretenidas, recién hoy tuve una y fue genial —Dice levantándose.

    Pero no tienes ni siquiera una motivación, no quieres ser campeón, no quieres ir contra los líderes de gimnasio ¿¡Para qué vas!? Al menos tu padre tenía talento y carisma para ello…

    Mi padre mi padre ¡Mi padre! ¡¡Joder!! ¿Por qué demonios todos lo mencionan? ¿Por qué me comparan? ¡Yo soy yo y elijo lo qué quiero hacer!, ni el destino me marcará un camino


    Dices lo mismo que ella —Dice llorando su mamá de cabello castaño y rizado, sus ojos verdes derraman lágrimas qué hacen arrepentir a Chris de lo qué dijo.

    No… la entrometas en esto… le prometí qué nunca perdería… Le prometí a Ingrid qué lucharía, mi hermana… vivirá dentro de mí y mis acciones, traeré la gloria le dice mirándole a los ojos.

    Ve… pero no regreses, no regreses hasta qué lo hayas cumplido dice molesta. Sólo recuerda, qué tú familia te ama

    No me quieras dar lástima para qué me quede, ya suficiente me retrasaste evitando qué entrene más aún mis pokémon, no pasan del nivel 10…

    Se queda callada mientras Chris mueve la silla preparado para irse

    Soy sólo un hombre, no intentes cambiarme, sé qué tal vez… tal vez no lo entiendas, pero he de luchar —Se acomoda la gorra y tapa ligeramente la cara, no voltea para evitar llorar al ver a su madre devastada. Yo también te quiero, pero debo partir.

    Dicho esto sigue con pasos firmes, pero al avanzar un poco más sus pasos firmes se vuelven cómo un papel quemado y se tira a un árbol.

    Sal Riolu Dice. Por favor, informe de perímetro —Su voz se va quebrando cada vez más con cada palabra.

    Rio —Asiente con lealtad el pokémon azul, su pelo se eriza y concentra su mente con armonía.

    A través de sus venas fluye su energía vital, se contrae y retrae una y otra vez, la calma de su ser permite esto fluir y pronto su energía sale disparada de una manera ultrasensible qué ni siquiera en Snubull con el oído más refinado podría notarlo. Pero sí Riolu, ya qué era uno con la energía, uno con el todo qué lo rodeaba. La energía al regresar se convertía en una energía azul, sus orejas al ser ligeras ascienden pero Riolu ni se inmuta con ello.

    Rioooo… lu —Recita un mantra personal para mantener aún más la calma.
    ,
    a energía le transmite la información y para, había muchos pokémon en rededores, pero los importantes eran una bandada de Kakunas, se podía aprovechar debido a qué los Beedrills estaban en una recolección de comida.

    Perfecto —Dice Chris al poder entender de manera parcial a Riolu, su aura les permitía comunicarse de manera muy burda. Será perfecto para entrenar a Chimchar…
    ////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////
    Nunca confíes en otros, te podrían traicionar —Le dice un hombre autoritario a su hijo de cabello blanco.

    Padre, yo confío en los demás —Responde con una sonrisa, No todo puede ir mal con la gente.

    Dile eso a los otros líderes de gimnasio, yo los conocía… o creía conocer —Dice molesto al recordar el pasado.

    Pero ¿Qué pasó? Siempre he oído fragmentos en las noticias, pero la guerra del 2001… ¿Cómo empezó todo? Apenas tenía 2 años.

    Hace 19 años… 19 malditos años comenzó, ese traidor de Fear… se alió a unas manzanas podridas…, nunca entenderé qué quiso ¿Poder, ambición, dinero?, no, sólo era un hombre mayor qué quería ascender a la gloría.
    <<Clamando ser el más poderoso dirigió a los restantes del Team Rocket, sólo residuos de lo qué una vez fue una poderosa compañía de mafia. >>
    <<Pero… estos residuos tenían pokémon poderosos, tan sólo Fearstyle tenía un Dragonite nivel 75, lo cual, haría temblar a cualquiera —El viejo acaricia a su Staraptor nivel 40. Fear los proveo de poder y estrategia, parecía un militar, fue contenido por el campeón por 3 años, aún con su poder inigualable… ya qué los rehenes eran parte importante del juego así qué para conservar esas vidas se debió permitir poco a poco el avance del Team Rocket, adueñándose así de la parte norte de la región Legend.
    <<Sólo los líderes de gimnasio estábamos enterados, casi todo era en secreto, sí hubo quienes supieron la verdad, pero se podía callar al fin y al cabo. No se vio esto fuera de Legend ya qué Estados Unidos estaba ocupado chillando con el mundo sobre la caída de dos torres… olvidando al Archipiélago Soul, este país en medio del mar>>
    <<Claro qué al ver una oportunidad de comercio el Team Aqua y Magma necesitaban restablecerse tras la desaparición de sus líderes, así qué invadieron cada quien por el lado este y oeste aprovechando la confusión, otra vez nos traicionó L, un niño qué era líder de gimnasio tipo dragón y qué se había entrenado en Unova con los dragones legendarios del lugar>>
    <<El campeón y el alto mando tenían qué sostener todos los flancos, todo pareció ir bien y empezaban a retroceder, hasta qué uno de los miembros del Alto mando fue asesinado en el 2010, momento que aprovechó el Team Galaxy para dominar el flanco sur, el cuál defendía este>>
    <<Cómo podrás adivinar, cada miembro cuidaba una de las regiones, siendo una desgracia conjunta el campeón se enfermó fatalmente justo después del nacimiento de su segundo hijo y no pudo acudir a la ayuda, ya era tarde, el Team Galaxy se reprodució cómo el cáncer, masacrando mucha gente… tenían un niño prodigio de Allegro, una región, cómo ya sabes, no muy lejana de Legend y qué forma parte del Archipiélago Soul>>
    <<Un miembro más poderoso aún, Rex, se unió a la causa, viniendo de Argentina. Era comparable con Eric Kustem, hasta incluso lo llegó a derrotar, el campeón se recuperó pero ahora lo importante era lograr una manera de defenderse mientras intentaban recuperar a la gente>>

    Y ahí entramos nosotros —Dice el joven de 20 años con cabello de nube. Los líderes de gimnasio cuidamos cada entrada.

    No, tú solo me asistes, yo soy el líder de Gimnasio.

    Jé, pero pronto seré suficientemente fuerte para….


    Se para su padre al oír crujir una rama, estaban en un bosque, el lo tira a unos arbustos.

    ¿Dónde está el otro?. —Dice una voz potente, era un esbirro del Team Magma.

    Huyó, con su pokémon usando teletransportación.


    Jé, te abandonaron tal parece dice con malicia y saca un Magcargo nivel 60


    Staraptor… combate cercano-susurra el líder de gimnasio volador sorprendido, sólo tenía qué demostrar el poder del Magcargo a su hijo, para qué se salvara cuándo todo estuviera bien

    Sólo necesito encargarme de ti, normalmente entreno para conquistar a ese alto mando qué tienen, pero… tú eres una molestia, por ahora necesitamos detenerte sí llegas a ser una molestia mayor —Dice y Magcargo resiste el combate cercano a pesar de qué sí le hizo mucho daño. Avalancha Ígnea (Nueva técnica).

    Impulsa su propio magma hacia el cielo, éste se solidifica ligeramente y se llena de llamas, su rango es impresionante y cae con rapidez. Staraptor intenta evadirlo, pero era muy difícil maniobrar en el aire y le caen muchas piedras encima qué le terminan partiendo el cráneo. El líder de gimnasio no resistió ni la primera.

    En medio de la confusión el hijo huye, tenía mucho miedo, bastante, su viejo era lo más poderoso qué había conocido y tal parece qué había muerto cómo un insecto, esto era un infierno de Región, una región de Caos.
    CONTINUARÁ...
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  3.  
    Paralelo

    Paralelo Viajero dimensional

    Virgo
    Miembro desde:
    16 Agosto 2012
    Mensajes:
    259
    Pluma de
    Escritor
    Bien, ya te debía una crítica, así que aquí estoy.

    Primero, en el aspecto técnico:
    Los spoilers no son para poner en los fics, puedes ponerlo como si fuera parte del primer capítulo o como un capítulo aparte. Las imágenes sólo se permiten como portada para el primer capítulo, no se pueden poner en cada capítulo del fic o lo podrían mover a Historia ilustrada. Hablando de eso, me gustó la imagen con el Arceus negro, pero el título es muy difícil de leer, te recomiendo que le pongas el nombre del fic en lugar de sólo el nombre del capítulo.
    Luego, no se dice "beggining", se dice Beginning. Cuando el verbo termina en consonante + vocal + consonante, la última consonante se duplica al adquirir la forma -ing, excepto con Y, X y W.
    En general la ortografía estuvo bien, sólo hubo algunos lugares donde te comiste los puntos finales, los nombres de los pokémon son siempre en singular, no es correcto "pokémons" o "pokemones".
    Se recomienda que dejes un espacio entre los párrafos y los diálogos para que sea más fácil leer y no quede todo tan junto.

    Con respecto a la historia:
    El prólogo, o sea el tema central de la historia a mi parecer, si bien no está mal, se me hace un poco inverosímil, ¿Arceus se creó un guardaespaldas para que lo protegiera de qué si no había nada todavía? Es una pequeña incongruencia que no parece afectar la trama, pero aún así habría sido bueno buscarle un poco más.
    El personaje principal, Chirs, me gustó, parece estarse desarrollando bien aunque todavía es pronto para decidirlo. El resto de los personajes se me hicieron un poco cliché, bueno, todavía no han sido desarrollados para determinar bien qué tan clichés son. Te recomiendo que no te olvides de ellos y le des toda la atención al protagonsita, de otro modo parecerá que el resto son sólo compañeros del protagonista de adorno.
    Las batallas me gustaron, bastante bien narradas, aunque hubiera estado mejor no narrar solamente los movimientos como un cronista de futbol, sino también los sentimientos y reflexiones de los entrenadores, lo hiciste en un momento, pero sólo con el protagonista, y aún así, se pudo haber analizado un poco más.
    Un aspecto "negativo", entre comillas porque todavía considero que es muy pronto para decidirlo, es que la historia no parece tener relación con el prólogo, o como mínimo no se ve que la historia arranque más que sólo para presentar a los personajes, pero como te digo, sólo vas por dos capítulos, pero te recomiendo que no esperes mucho para hacernos ver la relación de todo lo que sucede con el objetivo principal o se volverá aburrido. Hay una introducción de personajes, un pequeño momento de drama y recuerdos, pero no se ve bien porqué todo importa en la historia.
    Otro aspecto que sí es negativo, al menos para mí, es que mencionas la existencia de países reales, Estados Unidos, Argentina... no sé tú, pero mencionar lugares reales en el mundo pokémon se me hace... poco realista con el concepto de pokémon, qué ironía, como cuando mencionaron a Sudamérica en los primeros juegos.

    Pero en general la historia pinta bien, aunque como te digo, conecta lo más pronto posible los eventos con una historia o va a parecer que nunca comienza y terminará aburriendo. Saludos.
     
  4.  
    xpokemaster

    xpokemaster Entusiasta

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Febrero 2011
    Mensajes:
    67
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Pokémon Chaos World
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Acción/Épica
    Total de capítulos:
    4
     
    Palabras:
    1951
    Capítulo 3: Legends

    —Amm —Exclama Chris mientras le da una grande mordida a una manzana gorda y roja. —Mmm Mmm —Dice relamiéndose. —Ahhh está deliciosa.



    Su Chimchar se le queda viendo con una ceja alzada, luego se ríe de su entrenador con picardía, era de naturaleza alegre. Chris disfrutaba pasar el tiempo con su nuevo pokémon. Este se había subido a su hombro, lo cual no era tanto un problema para Chris ya que había ejercitado lo suficiente para soportarlo.

    — ¿Qué? —Pregunta por las risas de Chimchar. —Me encantan las manzanas.

    Acaricia la cabeza de Chimchar y se termina por completo su manzana. Caminaba tranquilamente y muy sonriente, el entrenamiento había ido en excelente forma, aparte de derrotar a los Kakuna se encargó de los Beedrill al traerles una emboscada, todos sus pokémon recibieron bastante experiencia de combate y Ralts mejoró su confianza.

    Sube sus brazos tras su cabeza mientras los agarra y camina despreocupado, sólo debía llegar a Hewaitoraru para dejar a sus pokémon en un centro. El bosque joven (Ya qué es cortado con regularidad) va terminando poco a poco, el camino de tierra se hace de asfalto y las flores empiezan a abundar, todas bastas y bellas.

    — “Hewaitoraru” la capital de las leyendas… a veces me arrepiento de tener este apellido sólo por esa frase jeje —Dice con una gota en la frente al leer el letrero de bienvenida con los alto mando luchando.

    Los edificios tenían una buena altura, el bullicio se daba de un lado al otro, los carros pasaban por los caminos casi sin parar. La gente caminaba lo más rápido posible y sin mirar a los alrededores. Puestos de comida, entretenimiento, entrenamiento pokémon, ventas, juguetes, todo estaba en abundancia. La zona más rica de Legend al ser la capital.

    —Espero pasar desapercibido, la gente aquí tiene mucho fanatismo con los Legend —Dice Christopher Mikael Legend, el hijo del campeón James Wolfang Legend, descendiente de muchas generaciones de Christian Van Legend, el cuál ayudó a liberar a la región de un enemigo oscuro, que a su vez era tataranieto de Fiore Legend, el independentista de Legend hacia los invasores españoles dando así qué la región fue nombrada en su honor.

    Había pocos rascacielos por la capital, sin embargo estos eran de compañías extranjeras, uno de ellos pertenecía a PokéMart, el cual daba servicio de sanidad gratuito a cambio de la reducción de IVA y de envío al extranjero para su conveniencia. Eso estaba muy bien por qué los hospitales y centro pokémon tendrían mucho abasto además de personal cualificado junto con mejor tecnología médica.

    Había parque en los alrededores para qué los niños jugaban, habían bastantes del laboratorio del profesor Newt, apenas probándolos en peleas, uno intentó invitar a Chris a pelear, pero este rechazó con amabilidad, no quería llamar la atención. Los edificios eran extravagantes, les gustaba la originalidad a los Soulences, muchos escritores y artistas lograban un buen negocio ahí. Los programas de televisión se comparaban a los de Pokémon Studios y los de Jubilo TV.

    — ¡Vamos qué no puedes huir de una batalla pokémon! —Le reclama el chico de su misma edad. — ¿O no crees tener la talla?

    —Confío plenamente en mis pokémon, pero ahora mismo necesitan descansar, no pelearé en vano —Dice sin perder la sonrisa en ningún momento. —Sí me disculpas.

    —Eh niño presumido, qué no nos gustan los de tu tipo aquí —Se oye una voz al fondo, un joven de 16 años, cabello castaño y quebrado se dirige hacia él, era mucho más alto qué Chris pero éste ni se inmuta. —Sólo dame tus pokémon, no necesitan un entrenador tan mierdas.

    —Jé, ¿Eso crees? Sí no necesitan un entrenador tan mierdas no debería dártelos —Ríe a lo bajo y todos se quedan pasmados. —Tengo mejores cosas qué hacer, sí me permiten…

    El chico lo detiene para voltearlo, dispuesto para golpearlo en la cara, pero una roca le pega en la mano y se la soba con dolor.

    — ¿Tengo qué estarte cuidando? —Se oye a Aldo que tenía un Bonsly a su lado.

    —Normalmente es al revés —suspira. —Y gracias, pero puedo con esto so…

    — ¡De ninguna forma! —Lo interrumpe. —Yo quiero luchar.

    —Bueno te lo encargo, nos vemos en el centro pokémon qué tengo sueño —Bosteza ampliamente y se dirige hacia allá mientras los otros lo miran pasmado, sin creer su atrevimiento.
    ...

    En un cuarto algo pequeño se encontraba leyendo “Legend, la tierra de las leyendas” lo cuál a Chris le parecía un título estúpido, pero a pesar de ser redundante era el único título posible para aludir a las leyendas, los demás sonarían mucho peor.

    Habían muchas bastas, la mayoría trataban sobre el rasgo linear sobre su familia, otras sobre la gran cantidad de legendarios qué se encontraban hace muchísimo tiempo en estas tierras pero partieron a otras, pero la qué más le intrigaba era una, una en especial qué no hablaba de ninguno de esos legendarios, al menos no de este mundo.

    Esta rezaba así.

    <<Muchos textos hacen alusión al pokémon legendario “Arceus”, el cual se ha denominado cómo el pokémon de la generación. En investigaciones recientes el profesor Samuel Oak ha dado ésta información cómo verdadera, a pesar del descontento de bastante gente. Siendo cómo prueba las tablas del mismo pokémon. Su ayudante Crystal lo agregó con éxito junto con otros dos personas (Se citan libros para saber más información)>>
    <<Sin embargo uno sólo cita a otra criatura similar, sin embargo se describe cómo superior en todos los aspectos, ya qué puede seguir creando, al mismo tiempo que destruye con facilidad, relatado con más magnificencia y color>>
    <<En una época de la Región Legend se estalló una guerra, una gran guerra, los sectores este y oeste de la Región se encontraban en una disputa muy fuerte. La región Oeste tenía en su poder una energía muy poderosa, actuaba cómo un tipo de esteroide qué mejoraba mucho los stats de los pokémon, su furia y bestialidad se resumía a los más bajos instintos, dejando su mente a los más viles, pero ocultos, deseos del afectado>>
    <<Una energía negra, tan oscura y manipulable qué se podía contener en botellas, se transmitía de unos a otros. Christian Van Legend fue el primero en descubrir esto e intentó ocultarlo lo mejor posible de otras personas, más sin embargo los “Skyknights” (De los cuales cada documento fue quemado por ellos mismos) lograron propagarla y embriagaron al mejor amigo de Christian, Artyon>>
    <<En él surtió un efecto diferente qué realzó todos sus peores sentimientos: el odio, la envidia, la tristeza y la ira. Su avaricia se adueñó de él, se separó de su amigo y empezó a cometer actos mafiosos, reclutaba gente para su causa y les inducia a drogarse con esta energía, el mismo la nombró energía Dark ya qué todo lo qué se llenaba de ella se veía más negro que la noche>>
    <<Pronto logró inducir a la gente logrando dividir a la Región en dos ejes, viajó a otras regiones mientras tanto a buscar algo en el mundo distorsión, nadie sabe cómo pudo llegar pero muchos dicen haberlo visto por la parte este inferior de Sinnoh cerca de un acantilado>>
    <<Regresó cuándo al fin estaba ganado la zona opositora, pero todo cambió ya qué tenía en su poder a Giratina, Christian se enfrentó a él dando una gran batalla, era una batalla con mucho riesgo y pensando fríamente Artyon se transportó al mundo distorsión, necesitaba poder, más poder, así qué viajo hacia otra dimensión qué conectaba>>
    <<A diferencia de la creencia popular de Sinnoh, el mundo distorsión más qué nada es la conexión entre dos universos paralelos, cómo la fibra de unión de ADN qué lo mantiene estable e impermutable, Giratina y Artyon aprovecharon esto para viajar al otro universo>>
    <<Listo para dominar y atacar y conquistar el lugar dónde se encontraba se topo de inmediato con un “Arceus”, pero este era diferente, de color dorado muy brillante, magnifico a la vista, sus anillos brillaban cómo un arcoíris ya qué las tablas se habían vuelto parte de su ser en vez de tan solo ser un objeto. Su tan sola presencia hizo desfallecer de forma temporal a la energía Dark, el ya consiente Artyon le rogó que lo liberara de esa atadura qué lo corrompía, Arceus con benevolencia lo liberó con una gran suma de poder, preocupado por qué volviera a pasar esa energía Dark con más poder aún le otorgó una herramientas de poder, 20 de ellas, poderosas y devastadoras>>
    <<Debía haber una forma de qué se encontraran de nuevo, para pedir auxilio, así que creó una prueba, 3000 metros de altura en escalones para una torre, al final siendo una puerta gigante qué sólo se abriría con la llave del pánico, cualquiera qué rompiera ese trato sufriría la ira del Arceus dorado en persona>>
    <<La guerra finalizó en forma relativamente pacífica, Artyon fue perdonado ya qué no fue su culpa causar la guerra sí no de los “Skyknights”, los instrumentos fueron utilizados por ellos para evitar más conflictos, pero al final eran tan codiciados qué los dejaron a distintos guardianes, unos eran los líderes de gimnasio, otros pokémon extremadamente prodigiosos y los últimos a Gaia, la madre tierra los protegía>>
    <<Actualmente en las escaleras se refortificó la ciudad de Hewaitoraru y la liga pokémon está erigida alrededor de la torre, el Alto Mando es enfrentado al subir esas escaleras plagadas de pokémon, sin embargo no se puede abrir la puerta ya que la llave fue robada y perdida en la historia, nada más se sabe del Arceus dorado ya qué se encuentra en otro universo…>>

    —Lo necesitamos —Dice Chris. —Para qué pare esta guerra —acaricia a su Chimchar qué dormía plácidamente. —La gente sufre, pero bueno, me haré fuerte… tengo qué.

    No quería dormir, dormir para él era una tortura, ya que usualmente tiene pesadillas, pesadillas realistas con gritos de muerte de personas, de pokémon e, incluso, de sí mismo, fragmentos de explosiones, la muerte de su hermana, pero esas partes eran borrosas. Dolor y tragedias sólo soñaba desde qué tenía 8 años, nadie lo sabía, no lo había permitido, a pesar de todo duerme sin inmutarse para no preocupar a otros. Resolver sus problemas sin preocupar a los demás, eso era algo en que creía firmemente.

    Pero no podía evitarlo, estaba muy cansado, no podía leer más, debía pararse temprano para seguir con su entrenamiento y mejorar a sus pokémon, cierra los ojos y espera qué este sea uno de los días qué no soñara nada, normalmente era o un sueño en negro o una pesadilla.
    Se queda dormido sin soñar, apaciblemente y con tranquilidad, su cuerpo y mente descansan para otro día más… Sin saber qué la energía Dark había regresado, esto motivo a la guerra hace diez años, habría terminado sí no fuera por qué se empezó a manifestar en la gente lo cual aumento el poder de los Teams, pronto se pondrían las cosas mucho peor. Se merecía descansar en paz, aunque sea un solo día.
    CONTINUARÁ…
     
  5.  
    xpokemaster

    xpokemaster Entusiasta

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Febrero 2011
    Mensajes:
    67
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Pokémon Chaos World
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Acción/Épica
    Total de capítulos:
    4
     
    Palabras:
    4544
    Capítulo 4: Guardían.​
    —Ciento cuarenta —Dice y cae rendido Chris, había estado entrenando temprano, debía hacer varias compras y eso, pero podía esperar, había visto a Aldo el día anterior, por ello sentía que lo iba a encontrar de nuevo ese día. —Estaría… estaría bien ir con más gente —Se limpia el sudor con una pequeña toalla y pone bien la ropa, debía disimular para no llamar la atención. —Atención… nunca me gustó y siempre la tuve, ¿Por qué las cosas llegan a ser así?

    Riolu solamente se le queda viendo raro, el lo ignora, debía seguir entrenando pero no podía más, le molestaba tener un cuerpo tan débil, quería tener la fuerza y temple de un pokémon, su libertad, lo que logran hacer es magnífico superando con creces lo de cualquier humano ¿Entonces por qué los humanos estaban arriba de la cadena?

    Ve al cielo de la mañana, todo era tan extraño en ese mundo, todo era tan diferente e igual a la vez, no podía comprenderlo, no ahora, el cree que es por ser un niño, otros porque creen que es raro. Sin embargo la respuesta es sencilla, el mundo está en constante cambio, no hay un orden exacto en las cosas, todo el orden proviene del Caos, se origina en él y regresa. Es bastante común que haya locura en la gente porque es parte del orden natural de las cosas, sin embargo esto origina Caos al ser una anomalía.

    Mejor se va comprar rápido Mts y varias súper pociones para evitar cualquier imprevisto por el lugar, ahora Ralts iba a su lado practicando su fuerza física al caminar todo el día, necesitaba fortalecerlo para que fuera un fuerte Gallade. La gente ya estaba haciendo bullicio junto a los trenes del fondo, una típica ciudad sería sí no fuera porque en el centro se erige una torre muy extensa hasta las nubes, quedando cubierta por ellas, nadie sabía que había hasta arriba, pero todos los regionarios creían en la leyenda y la contaban como un hecho histórico. En sus faldas estaba el estadio de la liga pokémon que se celebraba en diciembre, el anterior estuvo un poco aburrido para Chris, al fin y al cabo fue derrotado el ganador por el primer miembro del alto mando con facilidad.

    Ya que los documentos oficiales de los líderes de gimnasio seguían perdidos además de las medallas oficiales, se necesitaba tener las 4 medallas de los líderes de gimnasio vigentes y las 8 de otras ligas, esto era relativamente fácil para los de Legend, debido a que se consideraba la segunda Región más peligrosa de todas, después de Illius, al tener pokémon salvajes de niveles 65 incluso. Se podían llevar 10 pokémon para al menos tener una alternativa de escape en el caso de encontrarse con una bestia de tanto poder, lo cual amplía mucho los combates y su dificultad.

    — ¡Hey!, ¿Por qué no te quedaste a ver mi victoria ayer? —Se oye detrás de Chris mientras recordaba algo de su región. —Fue una gran batalla, a pesar de que se unieron más chicos.

    —Te digo que tienes talento jeje, algo que nunca tuve —Sonríe Chris mientras se ajusta la gorra.

    —Siempre tan molestamente modesto, ¿Nunca cambiarás?

    —En serio, no tengo ningún talento, solo tiempo…

    —Ya hombre, deja de estar de emo y vamos, ¡por el primer gimnasio!

    —Pero… —Lo piensa un poco, no tenía ningún plan de qué hacer, sabía que en sí no tenía oportunidad para un líder de gimnasio, sin embargo el quería ser fuerte, debía serlo, darle cara a un reto no sonaba tan mal como entrenamiento. —Claro, vamos, no veo el porqué no —Estira los brazos y saca una manzana de su mochila.

    —Bueno, pero no me vayas a atrasar —Empieza a correr Aldo infantilmente, Chris solo sonríe y lo sigue alegre, la aventura llamaba.

    Se pararon a descansar después de haber recorrido toda la ruta principal, una pequeña extensión entre bosque y prado, abundante de pokémon salvajes para entrenar los cuales ignoraron por su carrera, se encontraban ante la entrada de una cueva con piedra de tono algo azulado, la humedad se sentía de tan solo estar fuera de ello, sin embargo el olor de los minerales era bastante atrayente, a lo cual daba origen a la convivencia de los pokémon agua y roca con facilidad, los problemas no abundaban por esa ruta excepto en la época de Tyranitar porqué eran bastante antipáticos con los entrenadores.

    —Chris… —Dice Aldo con los brazos detrás de su nuca. —Quiero que me ayudes a capturar un nuevo pokémon, uno fuerte.

    — ¿En serio? ¿El disque entrenador más poderoso de todos pidiendo ayuda a un débil criador? —Responde en forma de burla, en realidad sí le había dicho así en forma de burla una vez, por eso se lo regresaba. —Jajaja, de acuerdo, pero… creo que hay un Larvitar por la zona, abandonó su manda, desconozco el porqué, estás de suerte que mi madre me dijo más o menos la zona donde se encontraba, no lo había querido capturar ya que es de gran temperamento y no está hecho para ser criador —Le dice recordando lo que me había dicho hace un mes.

    —Un Tyranitar en mi equipo —Dice entusiasmado, la alegría era evidente de tan solo estar a su lado. — ¡Vamos! —Jala a Chris dentro de la cueva arrastrándolo.

    —E-e-espera —Dice arrastrado y con algo de dolor, pero ya se habían adentrado.

    —Ha… haaa —Suspira cansado después de un rato, Ralts solo se teletransporta donde ellos y se les queda mirando.

    —Awww —Se queja mareado Chris y sacude la cabeza. — ¿Por qué Giratina hiciste eso? —Grita pero se para en seco, luego susurra. —Ralts, utiliza confusión.

    Ralts entiende fácilmente a que se refiere, ya que el también escuchó un crujido en su espalda, utiliza confusión para tirar una roca sobre un pokémon que intentaba atacar por las espaldas

    —Riolu ve, escanea el área —Se asegura de evitar que haya entrenadores o pokémon que intenten emboscar, Riolu realiza su técnica y niega diciendo que no hay ningún problema. —Bueno Aldo, te presento a tu posible Larvitar —Sonríe Chris ya relajado.

    —Larvitar —Gruñe enojado el pokémon de tierra, parecía molesto de haberle arruinado sus planes.

    Aldo solo se queda viendo maravillado al pokémon roca, sin embargo Chris lo conocía muy bien, sabía que en situaciones normales lo atacaría sin chistar, el estaba muy nervioso además de que su mente se llenaba de dudas, su amigo tenía talento, pero no se igualaba a él ya que había entrenado la potencia de sus pokémon.

    —Vamos, es tu oportunidad, nadie va a hacerlo por ti —Ordena Chris sonriendo para darle confianza, pero Aldo solo lo mira molesto para ocultar sus nervios.

    —Ya sé, ya sé ni que fuera un novato —Susurra molesto sin embargo su mano le tiembla al sacar la pokébola, al lanzarla sale toscamente y se daña un poco.

    — ¡Ey! Siempre te he dicho que cuides las pokébolas, no se vayan a romper —Regaña Chris molesto, quería evitar varios daños que sufren los pokémon cuando su pokébola se rompe, a veces son nulos pero otras fatales.

    —Ya sé, ¡Ya sé! —Grita hartado de la situación, Larvitar aprovecha para utilizar excavar. —Ahora por tu culpa se escapó.

    —Bien puedes sacar a Treecko y que use excavar, sí no yo lo hago y me lo quedo —Reta el chico de cabello café al de negro mientras saca su pokébola que contiene a Chimchar.

    —Vete al demonio —Responde con odio Aldo y saca rápidamente a Treecko. —Excavar Treecko sin contenerse con lo que encuentres.

    El pokémon planta se desorienta un poco al principio, sin embargo logra salir de su desorientación al saber que es una situación sería, algo que indica que se puede confiar de él en situaciones tensas.

    “Vamos Aldo, tu puedes, no es tan difícil como crees, yo no te juzgaré si fallas” apoya mentalmente a su compañero este Chris. No podía ayudarle ya que su orgullo se profanaría y se repetiría esta misma situación de estrés, debía lograrlo por sí mismo, aprender a confiar, aprender a darlo todo y no dar movimientos en falsos al pensarlo todo como si fuera más difícil.
    Sólo había silencio, se inundó la luminiscente cueva de silencio. Las goteras que antes se oían parecían haberse acallado, los pokémon dormían plácidamente y sin molestar, algunos simplemente contemplaban la situación, divertidos, lo cual aumentaba la perturbación del amigo de Chris. La luz se reflejaba en muchos cristales, por eso no se recomendaba iluminar la zona, la simple luz del sol bastaba para hacer un buen campo de visión por los alrededores, haciendo ver de color azul a las rocas que conformaban las paredes. En ciertas partes también había claros donde la luminiscencia se aumentaba gratamente a lo cual le agradaba a los pokémon tipo planta, aumentando los 3 pequeños lagos subterráneos de los alrededores que se mantenían con calma y un agua con alta cantidad de nutrientes y minerales por los mismos que se hallan en cuevas.

    La cueva era perfecta para capturar 3 tipos diferentes de pokémon, sin embargo a Chris y Aldo no les importaba más que el Larvitar. Una reserva natural para pokémon y entrenadores la cual se prohibieron los cazadores, mineros y explotadores de manantiales, llena de colores y pokémon de grandes variaciones y solo les importaba un pokémon que se quedó ahí por la migración.

    —Lar…—salta del suelo el pokémon larva y da una voltereta hacía atrás para evadir un bala semilla que sale despedido del suelo.

    —Tree… cko —Gruñe el otro pokémon molesto de haber fallado, parece ya cansado mientras que Larvitar tiene mucha resistencia a comparación.

    —Treecko, quédate ahí, luego ya a la derecha —Indica Aldo crípticamente, parecía ya haber hecho un lazo con Treecko, el cual solo asiente con confianza en su entrenador.

    — ¿Qué planeas? —Pregunta Chris curioso.

    —Ya lo verás, pronto, ya dejarán de tratarme como algo menos pronto —Susurra muy bajo lo último, como sí quisiera demostrar algo a los demás, darse a destacar.

    “Aldo…” se dice Chris en sus pensamientos, lo conocía ya de un año, conocía sus miedos y hábitos comunes al ser muy observador. Aldo nunca fue bueno en algo particularmente, siempre le costaban mucho las cosas, al igual que Chris, sin embargo Chris siempre lo intentaba para nunca perder, cada vez que algo le fallaba lo analizaba para hacerlo 10 veces mejor. Aldo nunca tenía motivación o la ocasión para demostrar lo contrario, en su alrededor con su familia sí fallaba en algo, lo apartaban de ello, lo mandaban a otra cosa, una tras otra, nunca funcionaba, siempre se cambiaba, nada era frecuente ni lograba dominar algo tan solo por rendirse a la primera, su familia era promedio y poco ambiciosa, solo buscaban algo en lo que se era relativamente bueno y lo utilizaban para vivir, nunca por lo que disfrutaban ni algo a que anhelar, solo algo que encontrar y vivir de ello.

    Chris había sido vecino de Aldo por 3 años, no hablaba con nadie en realidad, se la pasaba con los pokémon salvajes en esas épocas, al hablar con la gente sentía mucho cansancio y dolores de cabeza, como sí tomara toda su energía, un día Aldo se le quedó mirando con envidia como peleaban Ralts y Riolu con magnificencia, él quería ser igual a Chris, igual de bueno. Pero Chris solo intentaba separarlos ya que no quería que pelearan, lo hizo con torpeza y fallaba siempre al controlar a sus amigos pokémon.

    Aldo se interpuso y vio la pokébola de Pikachu que había sido disparada, por instinto la lanzó hacia el aire justo sobre los pokémon y dio una orden básica: “Ataca” la cual fue atacada con rapidez del leal pokémon amarillo, los ataco por sorpresa y separó, luego Aldo fue ordenando para que los pusiera en una situación sumisa como si fuera algo evidente que Chris no podía ver, algo que no estaba en él.

    Tan solo para lograr una confianza para dar órdenes tan simples y eficaces a la vez le tomó a Chris 4 años, Aldo lo hizo en 4 segundos, eso destrozó la moral del chico pero le sonrió, debía estar agradecido de ello y le dijo que podía ir con él a entrenar luego, pero Aldo no siempre podía.

    “Tienes talento, no como yo, no lo desperdicies, naciste para ello” piensa Chris, tenía ganas de decirlo, pero el código de un hombre se lo impedía, no debía de, por que sí no Aldo no tendría la fuerza suficiente por él mismo.

    — ¡Vitar! —Exclama el pokémon gris mientras de su brazo lanza una gran piedra con una gran potencia, Treecko tan solo va corriendo hacia ella y en el último momento salta a su derecha para poner sus extremidades en la pared, rebota contra a ella con gracilidad y ataca a Larvitar con bala semilla mientras se dirige hacia este como un cohete.
    El pokémon tan solo se cubre con sus brazos y utiliza bofetón lodo con algo de tierra húmeda que tenía bajo él, lo cual hace que Treecko caiga y se le meta en los ojos el lodo. Treecko abre los ojos ligeramente con una expresión de desafío a pesar de que le costaba mucho. Aldo extiende un puño hacia enfrente esperando que funcione, le parecía algo difícil pero imprevisible lo que seguiría.

    — ¡Vamos! Que tú puedes Treecko —Lo alienta con algo de sudor en su frente, era muy tenso para el estar junto a alguien para capturar un pokémon tan escurridizo, era más fuerte que su Treecko al ver que podía resistir tanto a pesar de la desventaja de tipo. —Utiliza eso que recién aprendiste ayer.

    Treecko recibe con todo las piedras que lanza Larvitar, pero sigue impermutable y hace una voltereta, agarra de los hombros a Larvitar y utiliza su propio peso para lanzarlo lejos mientras brilla de un color verde por la habilidad espesura.

    Larvitar ya un poco cansado lanza una piedra directo al ojo de Treecko, el cual trae hacia atrás con un poco de sangre saliendo, pero no del ojo sí no del párpado, evitó un daño perjudicial para después. Ya no podía más, estaba a las últimas y cae contra el suelo temblando, su cuerpo no le daba tregua.

    —Vitar —Suspira pomposo el pokémon mirando con superioridad al gecko mientras utiliza excavar para escapar antes de que lo capturen.

    —Aldo… —Sólo dice Chris, lo había hecho magnífico Aldo, pero en realidad sí parecía demasiado para él.

    —Calla, solo mira —Aldo sonríe mientras Treecko muerde una baya aranja que tenía guardada. —La compré porque me serviría, aunque sea para algo, no me equivoqué, mi instinto sirvió —Sonríe algo relajado ya. —Excavar Treecko para finalizar.

    El gecko sale hacia el agujero donde se escapó el pokémon mientras va utiliza bala semilla y se escucha el impacto de las bolas de energía verde, luego como se arrastra algo muy pesado, era Larvitar debilitado.

    —Pero no había forma que sobreviviera, estaba en las últimas, ya tenía espesura —Dice Chris incrédulo. —Recibió un crítico de lleno.

    —Pero utilizó absorber justo en el momento que lo mandó lejos con una voltereta, necesitaba estar cerca para que tomara más efecto, sorpresivamente hasta para mí Treecko se dejó golpear por las rocas para que espesura estuviera en efecto y pudiera quitar más vida al absorber energía de Larvitar, luego sí se derrumbó por el golpe pero tenía la baya para proseguir.

    —Jé, te dije que tenías talento, pero también tienes suerte —Dice Chris para que no se le suba a la cabeza.

    Treecko aparece con Larvitar a rastras, se tira al suelo cansado, Chris se acerca a él y le da una baya sitrus para que descanse más, el pokémon se la come y solo sonríe dispuesto a descansar.

    —Treecko, regresa —Sonríe Aldo para después mirar la pokébola de Treecko contento, era un buen pokémon. —Y ahora —Tan solo lanza una superball contra el Larvitar que ya casi no se podía mover, se agita las tres veces predilectas mientras brilla y se apaga con un sonido parecido a cuando sale aire de metal, indicando su captura.

    —Puff la tuviste difícil, me pregunto yo qué nivel será, ojalá tuviéramos una pokédex —Solo dice Chris, pero Aldo no responde, solo miraba al suelo sin recoger la pokébola contenedora de Larvitar.

    —… —Parecía atontado, como si nada pasara por su cabeza, súbitamente empieza a correr en cierta dirección, sin mirar a donde va, Chris agarra rápido la pokébola de Larvitar y sale corriendo tras él, eso no era normal.

    —Alto… —Lo embiste para tirarlo al suelo, se iba a tirar un lago que brillaba en el fondo — ¿Qué mierda te pasa? —Le grita enojado, pero ve su mirada perdida como sí no le hubiera importado la embestida, estaba controlado, lo sacude y regresa un poco en sí.

    —Ugh ¿Qué pasó? —Se toca la cabeza, algo mareado, no había estado en sí en los últimos segundos.

    —Espera… guarda silencio —Observa Chris a su alrededor viendo cadáveres de personas en el fondo del lago, todos ahogados y con uniformes rojos. —Team Mag… —Es interrumpido por un movimiento en el agua.

    Oculta a Aldo rápidamente mientras guarda en su pokébola a Ralts, era obvio que algo había acabado con los miembros del Team Magma en esa zona, había dos cadáveres y partes de ropa del mismo Team, eso indicaba que muchos habían escapado. Debía ser poderoso, inigualable es pokémon para poder con tantos, a pesar de que sean novicios debía ser potente para controlar la mente de la gente.

    —No te muevas —Susurra nervioso tapándole la boca a Aldo, sin embargo se escucha el movimiento fuera del agua y una luz azul ondulada brilla, sabía que estaban ahí, por su poder psíquico llego a saberlo. — ¡Vamos! —Dice Chris nervioso

    Da una voltereta para el suelo hacia otra piedra para esconderse o al menos defenderse de otros ataques, Aldo lo sigue un poco después torpemente al estar sin comprender nada. Poco después la roca donde se escondían explota.

    —Saca a tu Bonsly, ¿Recuerdas lo que dicen las noticias sobre los peligrosos pokémon salvajes? Es hora de sacar a todos los que podamos para defendernos —Susurra pero en realidad saca a 3, Pikachu, Ralts y Riolu. —Cuidado, es al menos tipo agua, creo que también psíquico, no creo que sea Lugia, pero algún relativo a Slowpoke o Psyduck es probable.

    —Sí —Asiente firme pero nerviosamente su amigo, saca a Bonsly pero lo mantiene detrás de él.

    —Pikachu, tacleada seis, Riolu palmeo desliz, Ralts energíbola cuando se distraiga —Dice como un estratega Chris, no iba a morir ahí.

    —Bonsly, vamos —Lo conduce Aldo para ir a una parte más segura, iba a aprovechar para utilizar golpe bajo cuando hubiera oportunidad, quería pasar desapercibido.

    —Sabe que estamos aquí, pero no exactamente donde, debe estar lastimado de los ojos —Analiza Chris, normalmente su instinto le decía lo correcto así que lo seguía normalmente. — ¡Ahora! —Grita Chris mientras Pikachu salta de su hombro y corre rápidamente cargando electricidad a su paso.

    —Pikapikapikapikapika —Ruge invocando más electricidad a su alrededor, la roca hacía choques eléctricos a cada paso del pokémon, pequeños rayos eléctricos daban curvas mientras pisaba y poco a poco se hacían más grandes cada uno, se vio rodeado de ellos y da un salto desde la pared que corría para impactar al pokémon que los atacaba.

    Chris sale de donde se escondía para poder ver mejor la situación, tener más claro el campo. Era un Slowbro que se elevaba ligeramente por su poder psíquico, el ataque de Pikachu lo agarra desprevenido por detrás siendo que la electricidad recorre su cuerpo por un crítico, sin embargo sigue impermutable como un tanque, era realmente poderoso.

    —Pikachu, nada —Indica Chris moviendo su brazo hacia un lado preocupado, no se podía permitir un solo daño con su pokémon.

    Slowbro voltea con lentitud y utiliza Psíquico donde había rebotado Pikachu tras el ataque, pero falla por muy poco, donde lanzó el ataque se hace un pequeño hueco en la pared.

    —Woa, más vale no ponerse en su camino —Dice Aldo preocupado, todavía no podía arriesgarse, Treecko y Larvitar estaba débiles, Bonsly no podía mucho contra el pokémon de agua.

    —Sigues Riolu —Dice Chris mientras Riolu sale corriendo y Slowbro lo detecta rápidamente y utiliza Psíquico nuevamente, sin embargo Riolu se desliza por el suelo y logra esquivarlo, luego da un salto y utiliza Palmeo justo a la cara a Slowbro, justo donde es más fácil paralizar al enemigo, este solo cae un poco de donde está elevado del suelo, Pikachu se eleva del suelo y utiliza cola de hierro, aprovechando para respirar, Slowbro había recibido 3 críticos al ser emboscado de buenas a primeras, pero no todo sería tan fácil, ya que se teletransporta tras Chris al enfadarse.

    —Mierda —Salta hacia atrás con miedo, no todo sería tan fácil, por alguna razón se tuvieron que retirar los miembros del Team Magma.

    Slowbro utiliza bola sombra donde está Chris pero Ralts capta la atención de Slowbro con una energíbola, y la logra desviar.

    —G-gracias —Alcanza a balbucear asustado Chris, la muerte había pasado delante de él.

    El corazón de los pokémon y entrenadores latía a mil, golpe a golpe los estresaba, les daba tensión mientras Slowbro seguía con furia atacando, Ralts recibe uno de lleno pero se cura con una baya enigma a duras penas, podía seguir.

    Slowbro entra en una verdadera ira y empieza a atacar a lo loco por todos lados, bola sombra, psíquicos e hidropulsos volaban por el lugar, la energía oscura bailoteaba con los poderes psíquicos y las ondas de agua, Pikachu y Riolu se refugiaron en el agua, Chris se tiró hacía detrás de una roca, Ralts se teletransportó lo más lejos posible.

    —Bonsly, golpe bajo —Arroja Aldo a Bonsly con toda la fuerza que puede, no siendo demasiado, pero es suficiente impulso mientras Bonsly se le llena de energía oscura sus costados, la cual aprovecha para impulsarse y atacar antes de que Slowbro lo haga, eso lo golpea haciendo mucho daño por la ventaja de tipo. Slowbro simplemente utiliza hidropulso, el cual saca volando a Bonsly pero Aldo lo regresa antes que sufra mayores daños.

    — ¡Ahora Ralts! —Grita Chris mientras lanza una ultraball lo más fuerte posible hacía una pared, antes de que choque contra ella Ralts utiliza con excelente precisión un teletransportación justo detrás de Slowbro, en su nuca, el punto más débil, lo cual hace que sea más efectiva aún.

    La ultraball era crucial para vivir, ya no podían seguir atacando porque solo le lograron hacer daño gracias a la triple emboscada de parte de Pikachu, Riolu y Bonsly. Chris solo toca su corazón mientras los pulsos lo vuelven loco, se agita una vez, respira tensamente sin ver a Aldo cerca, da la segunda sacudida, prepara a Chimchar para tan solo resistir un poco más, se sacude otra vez, la mira con gran tensión, lo mataba la tensión y estresaba, todo era tan crucial. Resuena el eco de metal al pasar aire, había sido capturado.

    — ¡¡Caray!! —Grita Aldo aliviado, lo habían logrado, había sobrevivido a lo que dos soldados del Team Magma murieron.

    — Waaa que puro susto me di —Se deja caer temblando Chris, se recargaba de sus brazos por detrás, estaba sudando, pero súbitamente le llegó la rabia. —Este pokémon no es así, fue atacado por los soldados seguramente, debía proteger su hábitat y los mató, debió haber sido recientemente para aún tener tanta desconfianza —Explica a Aldo enojad y golpea a la pared agitando un poco de polvo. —Como odio a esos tipos, causando desconfianza y muerte aún con los inocentes —Agarra la ultraball del pokémon. —Vamos, tenemos que irnos ya de aquí —Regresa a sus pokémon. —Estamos cansados al igual que nuestros pokémon, no falta mucho para que anochezca ni para llegar a la próxima ciudad, debemos tener prisa por que los pokémon de la noche son más peligrosos.

    —Deja de estar serio, no te queda —Bosteza Aldo tras decir eso altaneramente. —Creo que éste era como el “boss” de la zona o algo parecido, como tú dijiste anteriormente, no hay tanto pokémon fuerte por los alrededores.

    —Solo vamos —Suspira Chris aún molesto, solo llevaba dos días fuera y ya podía haber muerto una vez.


    CONTINUARÁ…
     
Estado del tema:
No se permiten más respuestas.

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso