One-shot de Inuyasha - Juntos Hasta el Fin

Antes que nada este es mi primer fic! Advierto que lo tengo en paginas de Face asi que si lo en es mio!! Espero les guste!!

¡A comer! –dijo Kagome, terminando de ordenar la comida sobre la manta.

Todos se hallaban hay: Sango, Miroku, Shippo, InuYasha y Kagome. Comían como siempre Sango y Miroku muy educados, InuYasha peleando con Shippo y Kagome retando a InuYasha.

Ya habían terminado y se dirigían hacia la aldea, cuando InuYasha noto un olor familiar...

Kag: Unos fragmentos se acercan rápidamente.

Inu: ¡Ese idiota de Koga nunca se rinde! –dijo moviendo sus garras en señal de amenaza.

Rápido como siempre llego Koga.

Koga: Mi amada Kagome ¿Cómo has estado? –dijo sujetando sus manos.

Kag: Ems... Bien... –dijo con su sonrisa de siempre.

Inu: Kogaaaa!! Maldito!! –Dijo parándose entre ellos separándolos –Ya viniste a molestar a Kagome.

Koga: Grr... Ahora que rayos quieres bestia!!

Inu: Quiero que dejes en paz a mi Kagome!!

Todos: Tu Kagome?

InuYasha estaba rojo como un tomate, no sabía que había dicho.

La más sorprendida en todo esto era Kagome, la cual no entendía nada...

Koga: Grr!! Bestia estúpida como te atreves?!!-dijo hirviendo en rabia.

Inu: Etto... –no sabía que responder, desde cuándo se refería a Kagome como suya?

Pero en ese momento para aliviar la tensión llegaron los compañeros de Koga, como siempre rezagados...

Y : Koga! Koga!

Koga: Y ustedes que quieren ahora!!!

: Ayame te busca dice que es muy importante.

Koga: Grr... Está bien iré para allá y conforme a bestia YA ARREGLAREMOS CUENTAS!!! –dijo para luego irse tal y como llegó y se fue seguido de y .

Los que quedaron allí estaban estáticos, sin mover un musculo... por mucho tiempo hasta que InuYasha rompió el silencio:

Inu: Ya... Ya vámonos –dijo entrecortado y cabizbajo.

Los demás al oírlo solo asintieron.

Iban InuYasha adelante, bien adelante, en cambio más atrás iba el resto del grupo.

Shippo: Que fue todo eso?

Miroku: No tengo idea...

Sango: Ni yo...

Pero por otro lado Kagome estaba cayada con la mirada perdida, pensando en que fue lo que quiso decir InuYasha y este pensaba exactamente igual “Que fue lo que dije”.

Y así entre pensamientos llegaron a la aldea. Pero lo que ellos no sabían era que algo los observaba...

Cuando llegaron a la aldea InuYasha se separó del grupo y se fue hacia el árbol sagrado necesitaba comprender que había pasado hace un rato atrás.

“Es hora” pensó un demonio entremedio de los árboles.

El resto del grupo se hallaba conversando en la cabaña de la anciana Kaede, ya habían resuelto que esperarían hasta que InuYasha estuviera listo para que el mismo les explicara lo sucedido en la mañana.

De improviso apareció un youkai con “apariencia” humana, de tez blanca, ojos rojos y grandes colmillos. El cual comenzó a atacar la aldea.

Los muchachos salieron rápidamente de la cabaña para combatir a este demonio.

¿?: Al fin han aparecido –dijo con una voz ronca.

Miroku: Quién eres? –dijo preparando su agujero negro.

¿?: Oh, soy Kentamaru y he venido por tu amiga, por cierto.

Y en ese momento tomo a Kagome y se fue corriendo.

Sango y Miroku iban a ir tras de él pero aparecieron Kagura y un centenar de demonios que empezaron a devorar la aldea.

Miroku: Kagura, Naraku está tras de esto, cierto? –dijo listo para usar su túnel de viento.

Kagura: Ni se te ocurra usar tu agujero monje!! –dijo desafiante.

Y en ese momento aparecieron los insectos venenosos.

Sango: Kagome-chan... –dijo para luego enfrentarse con aquellos demonios –Hiraikotsu.

En cambio InuYasha se encontraba pensando, cuando de repente a su nariz llegó olor a sangre... y provenía de la aldea... “Oh, no Kagome” pensó para luego salir corriendo hacia allá.

Al llegar encontró a Sango y Miroku mal heridos, pero habían logrado acabar con todos los demonios (excepto Kagura la cual escapo).

Inu: Están bien –les preguntó, y en ese momento una persona volvió a su mente – Y Kagome? Dónde está Kagome?

Sango: Un... demonio se la... ha llevado... –dijo con pocas fuerzas.

Y luego de dejarlos con la anciana Kaede salió rápidamente en busca de ella.

Al cabo de un rato encontró su rastro, el cual lo guio hacia una pequeña casa, entro rápidamente pero para su sorpresa no estaba Kagome si no que Kagura con un mechón de su cabello.

Kagura: Al fin llegas

Inu: Dónde está Kagome –dijo desvainando su espada.

Kagura: Lamento decirte que ella no está aquí, fuiste atraído por este insignificante mechón de su cabello el cual contiene su olor.

Inu: Maldición dime en DÓNDE ESTÁ!!!

Kagura primero tendrás que vencerme –dijo fríamente

Inu: Viento Cortante!!!...

Estaban luchando codo a codo...

Kagura: ¡Danza de las cuchillas!

Inu: ¡Lanzas de diamante!

Y con este ataque pudo herirla a tal punto que no pudiera seguir...

Inu: Dime donde esta Kagome y por qué se la han llevado!! –dijo colocando a tessaiga en su cuello.

Kagura: Te he retenido durante bastante tiempo así que no importa si te digo. Para tu mala suerte, no sé dónde la han llevado, lo que si se e que Naraku desea sus ojos con desesperación.

“Maldición”, pensó InuYasha y en ese instante salió en busca de algún rastro de ella.

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Kag: Dónde... Dónde estoy?

Kentamaru: Al fin despiertas...

Kag: Quién eres y por qué me has traído aquí?

Kentamaru: Qué descortesía de mi parte, Soy Kentamaru. Naraku me ha ordenado obtener tus ojos –dijo cínicamente.

Y en ese momento se paró y le pegó una bofetada con la cual la dejó desmayada nuevamente.

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InuYasha había encontrado nuevamente el olor de Kagome y rogaba que esta vez sí lo condujera hacia ella.

“Kagome por favor resiste” pensaba.

Y en ese momento divisa una pequeña cabaña.

“Es hay estoy seguro”. Al entrar encontró a Kagome desmayada en los brazos de Kentamaru.

Inu: Suéltala maldito infeliz!!! –dijo InuYasha ya empuñando a Colmillo de Acero.

Kentamaru: Claro, pero no sin antes... –la dejo suavemente en el suelo tomo su mano y enterró fuertemente sus colmillos e su muñeca.

En ese momento el cuerpo de Kagome se empezó a retorcer bruscamente y en un momento se calmó.

Inu: ¡Maldito que le has hecho! –dijo con su mirada fija en Kagome.

Kentamaru: Nada... tan solo incrustarle mi veneno, para que este recorra su cuerpo y muera, en ese momento la podre controlar y sus ojos serán nuestros –dijo con una sonrisa malévola en su rostro.

Inu: Maldito te matare –dijo –Viento Cortante!!!

Pelearon durante un largo tiempo ambos sin dar un paso al costado...

Kentamaru: Esto ya ha tardado mucho... Acabemos de una buena vez.

Y en ese momento comenzó a transformarse, su piel se cayó, comenzó a crecer, hasta completar su verdadera forma, una descomunal serpiente.

InuYasha, quien ya estaba muy cansado, no paro ni un minuto de luchar y en un momento de descuido fue herido gravemente.

Kentamaru: Ja! No eres tan malo... pero no eres lo suficientemente bueno como para acabar con migo.

InuYasha estaba tendido en el suelo, sin moverse, su único pensamiento era salvar a Kagome, pero su cuerpo no le respondía no sabía como salvarla, se sentía impotente... y en ese momento su sangre youkai comenzó a fluir rápidamente por su cuerpo...

Kentamaru: Lo lamento hanyou, pero has fracasado, ahora los ojos de esta miko serán nuestros –dijo acercándose a Kagome.

Inu: No te atrevas... a acercarte... a Kagome! –dijo.

Kentamaru se volvió rápidamente, no comprendía como había hablado si estaba prácticamente moribundo.

Y ay estaba InuYasha estaba transformado en demonio, con el pelo alborotado, con dos rayas moradas atravesando su cara, con feroces y afilados colmillos igualmente garras y sus ojos estaban rojos con pupilas azules.

Inu: Ya te lo dije, no te atrevas a tocarla!! Maldito infeliz!!! –dijo para luego atacar rápidamente

Usando sus garras lo ataco fieramente hasta que Kentamaru no aguanto más y desistió.

Luego InuYasha se acercó hacia donde estaba Kagome la tomo delicadamente en sus brazos, esta estaba pálida y su cuerpo estaba completamente frio, y sin dudarlo corrió rápidamente hacia la aldea.

“Kagome por favor resiste” pensaba mientras corría hacia la aldea.

Al llegar la anciana Kaede estaba en la cabaña curando a Sango y Miroku, cuando entro le conto todo lo sucedido, la mordida, la muerte de Kentamaru, etc.

Y luego de escuchar lo sucedió le dijo:

Kaede: InuYasha, debes irte a un lugar seguro junto con Kagome ya que por lo que me contaste Naraku anda desesperado por sus ojos tienes que darle este té cada día y si su cuerpo permanece muy frío tienes que darle de tu propio calor. Ahora márchate.

Y así se fue, InuYasha llevaba a Kagome en su espalda tapada con una manta. La llevó hacia una cueva detrás de una cabaña en un lugar bastante seguro con suficiente agua y luz.

Recostó a Kagome en la manta y la tapo con su chaqueta para luego darle el té que le dio la anciana Kaede.

Inu: Kagome... –susurró –lo lamento por mi culpa tu estas así... yo... debía protegerte... no volverá a suceder... pero por favor DESPIERTA!!!!

Ya llegada la noche, Kagome estaba demasiado fría, aunque estuviera bien tapada no lograba entrar en calor, hasta que recordó lo dicho por la anciana Kaede... “si su cuerpo está demasiado frio tendrás que darle de tu propio calor”

Entonces delicadamente de recostó junto a ella apoyo la cabeza de ella en su pecho y la abrazó tiernamente hasta quedarse profundamente dormido.

Así pasaron 3 días y Kagome poco a poco recuperó su calor.

Un día mientras InuYasha la arropaba, esta comenzó a despertar...

Kag: Inu...Yasha –dijo casi susurrando

En ese momento InuYasha abrió los ojos sorprendidos

Inu: Ka... Kagome!!!!! –dijo abrazándola fuertemente aferrándola hacia su cuerpo.

Ambos disfrutaron ese momento. Kagome al verse en ese momento tan íntimo no pudo evitar sonrojarse...

Estuvieron así durante un largo tiempo hasta que Kagome rompió el silencio:

Kag: InuYasha... Don...Dónde estamos??

Al oírla se separó rápidamente de ella y se volvió hacia otro lado para que ella no viera lo rojo que estaba...

Kag: InuYasha?? –dijo con una pequeña sonrisa en su rostro al ver la reacción de este...

Inu: Ems... estamos en una cueva detrás de una cascada... –y así le dijo toda la historia...

Kag: oh... pero... y Miroku con Sango??

Inu: tranquilízate ellos ya están bien.

Kag: qué alivio... cuanto llevamos aquí??

Inu: como 4 días...

Eso si InuYasha no pudo contarle lo sucedido cada noche ya que temía que esta se enojara, se fuera y Naraku la capturara...

*Continuará...*

 

He aquí la continuación, disfrutadla

Eso si Inuyasha no pudo contarle lo sucedido cada noche ya que temía que esta se enojara, se fuera y Naraku la capturara...

*Kagome se hallaba sentada bebiendo el té que le ayuda a eliminar el veneno de Kentamaru.

— ¡Ash! Esta caliente —

En ese momento apareció Inuyasha quien andaba en busca de comida.

— ¿Estas bien? —le preguntó con tono preocupado

— si , por cierto, ¿no crees que es momento de irnos a la aldea? —le dijo tratando de pararse

Pero en ese momento se desequilibra y cae justo en los brazos de Inuyasha, quien la sujeta con gusto, para que no cayera.

Se quedaron así, abrazados, Kagome cargada en los brazos de Inuyasha. Ambos mirándose fijamente a los ojos hasta que... se besaron... un beso tierno, romántico que se fue volviendo apasionado, un beso que expresaba todo lo sentido el uno por el otro, es como si se necesitaran demasiado, así se quedaron en ese momento, besándose hasta que por falta de aire se tuvieron que separar, pero sin soltar su abrazo.

—aun no puedes caminar —dijo sin soltarla —además tu cuerpo aun esta frío—.

— Es-está bien –dijo mirando a su amado fijamente a los ojos, esos ojos color miel que tanto le gustaban.

Inuyasha dejo suavemente a Kagome sentada y la cubrió cariñosa mente con su chaqueta.

Al llegar la noche, hacía mucho frío, Kagome estaba tiritando, no podía entrar en calor. Inuyasha estaba preocupado Kagome se estaba poniendo pálida hasta que no aguanto más se paró y se dirigió hacia donde estaba ella y se acostó junto a ella.

— Inu...Yasha... —dijo asombrada por lo que estaba sucediendo

— A... acércate para que...entres en calor —

Kagome se acercó lentamente hasta llegar a escasos centímetros de él. Inuyasha la abrazo y la acercó hacia el hasta que la cabeza de Kagome estuviera en su pecho.

Así poco a poco Kagome entro en calor y cada noche Inuyasha la abrazaba para hacerla entrar en calor.

Al cabo de una semana..............

—¿no crees que deberíamos irnos? Me preocupa la seguridad de los chicos —dijo una ya recuperada Kagome.

—está bien a mí también me preocupan—

Ordenaron todo y emprendieron su marcha al llegar a la cabaña, vieron a la anciana Kaede desmayada y una nota que decía:

“Si quieren volver a ver a sus amigos, entréguenme a Kagome”

“Muchachos” pensaron ambos con una expresión triste en sus rostros.

—¿Que haremos?—

—Iré por ellos... tu quédate aquí con Kaede —

— Me quiere a mí, iré contigo, quieras o no —contesto muy decidida Kagome

— Es muy peligroso además todavía no te recuperas—

—No me importa—

—¡no! Tu no iras—

—que sí—

— ¡que no!—

— Inuyasha... Abajo—

Partieron, Inuyasha cargando a Kagome en su espalda, corrieron de prisa (luego de dejar a Kaede en un lugar seguro)

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— ¿Do...Dónde estamos? ¿Excelencia?—

— Sango al fin despiertas—

— Donde...—

— Naraku nos encarcelo para atraer a la señorita Kagome, quiere sus ojos para ver dónde está el ultimo fragmento—

— ¿donde están Shippo y Kirara?—

— no lo sé parece que no los han capturado—

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Iban rápidamente por un valle y de repente Inuyasha para en seco, algo se movía entre la hierba.

Y de repente aparecen Kirara y Shippo quien al verlos salta a los brazos de Kagome.

—¡¡Kagome!! —dijo entre sollozos

— Shippo que bueno que estas bien! —dijo abrasándolo

—¿Y Sango con Miroku?—

— Naraku se los ha llevado—

— Y que esperamos, vámonos—

Fueron rápidamente, Shippo los guiaba hacia la cueva de Naraku.

Al llegar Kagura los esperaba, así comenzó una batalla de Kagura v/s Inuyasha, Kagome, en cambio corrió con Shippo y Kirara en busca de sus amigos.

Al cabo de un rato de correr apareció Naraku.

— Shippo ve con Kirara y busquen a Sango y Miroku, dílganles lo sucedido –le susurró Kagome

Estos solo asintieron y se fueron.

—al fin te encuentro... ¡busca en fragmento! ¡Sé que está en esta cueva! –vocifero a todo pulmón

— está bien, pero, ¡deja a mis amigos libres!—

Asintiendo Naraku la tomo con uno de sus tentáculos y se la llevándosela hacia lo profundo de la cueva

Al cabo de un rato Shippo logro encontrar la celda en la cual estaban sus amigos y los liberó con ayuda de su fuego mágico y Kirara

— ¿Donde están los demás?—preguntó la exterminadora de demonios

— InuYasha pelea con Kagura, y a Kagome se la llevado Naraku—

— vámonos entonces, hay que rescatar a la señorita Kagome—

Y en poco tiempo llegaron hacia donde estaba Inuyasha

—¡Hiraikotsu!—

—¡muchachos!—dijo eufórico Inuyasha

—estamos bien, tú ve y salva a la señorita Kagome, nosotros nos encargamos de Kagura—

Inuyasha corría en busca de Kagome—por favor que no llegue muy tarde—pensaba para si mismo.

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— el fragmento está cerca—

— donde, ¿dónde está?—

—está en esa pendiente—

— por fin... el último fragmento, ¡¡será mío!!—

Naraku lo tomo sin problemas. Pero Kagome se lo arrebató y corrió en un acto de mucha valentía.

—¡maldita idiota! —

Inuyasha corría rápido en busca de Kagome hasta que en una vuelta choco con ella y ambos caen al suelo, al verse se abrasaron fuertemente. Pero en ese momento aparece Naraku y toma a Kagome separándole de su amado y comienza a apretarla fuertemente haciendo que esta soltara un grito desgarrador...

—¡Suéltala maldito!; ¡lanzas de diamante!

Pero Naraku activa su campo de protección, Kagome suelta el fragmento, Naraku lo atrapa y al juntarle con la perla contaminada ambos desaparecieron en un meido

— ¡Kagomeee! —gritó desdesperado—¡Meido Zangetsuha!

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En una oscuridad total Naraku, Kagome y una perla debatiéndose entre el bien y el mal, eso era lo que veía Inuyasha, pero lo peor de todo era una Kagome inconciente y él sin poder moverse

— ¡¡Kagomeee!! Kagome despierta!! –gritaba

Pero esta no podía oírlo

—¡Kagome! Despierta por favor, tienes que luchar, tienes que despertar, ¡¡¡Kagomeee!!!!—

—Inu...Yasha –la miko despertaba lentamente

— ¡Kagome!, tienes que purificar la perla!—

—¡Inuyasha! ¡Donde estas no puedo verte!—

—no importa solo ¡hazlo¡—

Y en ese momento comenzó una batalla de purificación contra maldad...codo a codo... Pero al cabo de un rato Kagome no podía más, sus poderes estaban cesando

—¡Jamás podrás vencerme mocosa, no tienes la fuerza!—

—¡eso es mentira Kagome! Tú puedes, creemos en ti, ¡YO creo en ti!—

Luego de eso Kagome se fue acercando a la perla, así poco a poco hasta tocarla y cuando lo hizo Naraku desapareció e Inuyasha se mostró junto a ella. Pero la perla aun no era purificada completamente...

— ahora lo entiendo...debo unir mi alma a la perla para que esta desaparezca al fin de este mundo...—

— pero si así fuera... tu...desaparecerías junto con ella –dijo entrecortado

Kagome tan solo asintió con la cabeza

— ¡No! ¡No puedo permitirlo! ¡¡No quiero que te vayas!!—

—¡tengo que hacerlo! –dijo con los ojos cristalinos

En ese momento Inuyasha se acercó y la beso, un beso apasionado, lleno de amor, ambos lloraban, era un beso de despedida, mientras se besaban lágrimas de cada uno se unieron formando una sola la cual toco la perla purificándola completamente...

Pero en ese momento...todo se llenó de luz ambos se separaron al ver tanta luz que los reconfortaba y en ese momento Midoriko apareció

—Muchísimas gracias—Inuyasha y Kagome no entendian nada— gracias a su amor incondicional la perla ha desaparecido junto con todas las desgracias causadas por ella—

Pero ambos sin darse cuenta, de un momento a otro volvieron al mundo feudal, se hallaban junto al pozo devorador de huesos

Inuyasha miro a Kagome fijamente a los ojos por un largo momento, se alegraba que estuviera con él y que no hubiera desaparecido...

—Kagome... tengo algo que decirte –dijo el ojidorado

— ¿si? –dijo aun media consternada

— yo... te quería aclarar el porqué de lo sucedido con Koga...—

— lo de “mi Kagome” ya no me importa descuida...—

—¡no!, quiero decírtelo... yo... yo —

— ¿Inu...yasha?——

— TE AMO—

—Inuyasha... yo también te AMO—dijo con una lágrima corriendo por su mejilla

Esas palabras alegraron tanto al hanyou que no se pudo contener y el beso hasta más no poder, abrazados fuertemente uno contra el otro

— Kagome ahora la pregunta la quiero hacer yo –dijo con una pequeña sonrisa –puedo quedarme a tu lado?

— Por supuesto Juntos Hasta El fin—

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“Sango y Miroku se casaron, Kohaku quedo ayudando a las aldeas vecinas con los demonios, Shippo termino su examen zorro, Koga se casó con Ayame, Sango y Miroku tuvieron 2 hijas, Inuyasha y Kagome 1 hija a la que llamaron Akami, Kaede...sigue con vida...Y TODOS ESTAN FELICES, JUNTOS HASTA EL FIN ”

Fin :D