Prologo. El diario de Gemma Clawson A la edad de cuatro años fui adoptada por una pareja que actualmente no viven ni felices ni juntos, bueno por lo menos uno de ellos es feliz, mi padre que nos abandonó a mi y a mi madre Mary. Mi madre perdió su trabajo por segunda vez en este mes. Era un asco. Ella se pasaba todo el día en la calle, mientras tanto yo me ocupaba de los deberes de la escuela y el hogar; no recuerdo una vez después de que mi padre nos abandonó pasar un lindo día junto a mi madre. No tenía nada que presumir como mis otros compañeros, me consideraba una simple chica realizando el trabajo hogareño que debería estar haciendo su madre, mientras que lo que ella se encontraba haciendo lo estuviera haciendo mi “padre” el cual no tengo. Pero un milagro nos llegó, mis abuelos de HollyTown nos ofrecieron quedarnos en su casa para así tener una mejor vida y mi madre pudiera tener la facilidad de tener un nuevo empleo. Claro, eso no fue un felices para siempre. Anteriormente había estado en HollyTown y todo a su alrededor era bastante raro, bastante hermoso para ser real, demasiado normal podría parecer muy raro; en HollyTown había muchas leyendas y mitos, la mayoría eran de vampiros y eran muy mencionados en el pueblo aunque ninguno afirma su existencia, sólo cuentan.
