Conexión (las parejas clásicas)

Tema en 'Fanfics Abandonados de Naruto' iniciado por AmyCrazyxD, 17 Noviembre 2011.

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    AmyCrazyxD

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    Conexión (las parejas clásicas)
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    12
     
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    Hola! lamento no haberles avisado la vez anterior, estaba muy apurada y apenas tuve tiempo para publicar el capi, pero hoy eso no pasara n.n En fin, espero les guste y gracias por sus ENORMES comentarios ¡me encantan! xD

    Personajes que aparecen: Tenten, Shikamaru, Gaara, Kankuro, Kiba, Matsuri, Ino, Sasuke, Suigetsu, Jungo, Naruto, Jiraiya (Momo y recepcionista)

    Conexión
    Capitulo 09


    Tenten



    De no haber sido por Shikamaru, hubiera tardado horas en llegar al hospital. En verdad estaba apenada por pedirle aquel favor cuando apenas lo conocía y ya había hecho tanto por ella, pero en ese momento solo podía pensar en Temari. Apenas se estacionaron, corrieron a la sala de espera en donde seguramente estarían Gaara y Kankuro.

    ―Y pensar que la gente si podría morirse por trabajar tanto…― comentaba Kankuro un tanto sarcástico para el gusto de Gaara.

    ―Chicos― los llamo Tenten avisando su llegada.―¿Qué paso?

    ―Al parecer es solo fiebre causada por el estrés. Ahora están intentando bajarle la temperatura ya que la tiene muy alta― respondió el hermano del medio.

    ―¿Aun esta inconsciente?

    ―No lo sabemos, supongo que sí― contestó Gaara.

    ―¿Y él es?― preguntó Kankuro refiriéndose al joven castaño de raro peinado de piña.

    ―¡Ah! El es Shikamaru, el chico que les conté. Ellos son Gaara y Kankuro― presentó Tenten.

    ―Un gusto, y gracias por traerla también ahora― dijo Kankuro un tanto burlón.

    ―No hay problema. ¿Quieres que me quede?― preguntó dirigiéndose a la castaña.

    ―¡Ah! No, no hace falta.

    ―Bien, te estaré llamando― le aviso para después irse― Nos vemos luego.

    ―Chao― se despidieron los presentes.

    ―Es guapo― comentó Kankuro mirando a Tenten con complicidad, haciendo que inevitablemente los presentes soltaran una sonrisa.


    Kiba


    Al llegar, como era de costumbre, camino hasta el patio y atendió a los animales, uno por uno, como era debido, pero al observar que la jaula de Momo se encontraba vacía se preocupo. Busco por todo el patio y se adentro al edificio husmeando en cada rincón. Aunque Ino se le cruzo por la mente no quería pensar que ella tendría algo que ver con esto, después de todo, también estaba el hecho de que Momo era un experto con los pulgares, motivo por el cual había solicitado una jaula especial para él.

    ―Disculpe, ¿Ha visto a Momo?― le pregunto Kiba a Bruno quien pasaba por el pasillo con el celular en la mano.

    ―¿Quien?― repitió extrañado.

    ―El chimpancé

    ―¡Ah! Si, esta con Ino― contestó haciendo que Kiba se imaginara una horrible escena de Ino, vestida de negro, mientras preparaba un caldero enorme frente al simio, quien probablemente se encontraría amarrado en una esquina.

    Sin dudarlo si quiera arranco a correr al camerino de la catira a toda velocidad. Subió escaleras, paso por entre vestidos, zapatos y telas, y choco contra más de una persona completamente desesperado. Al llegar abrió la puerta, sin siquiera tocar, viendo la escena que nunca hubiera logrado imaginar.
    ―Te dije que no tocaras nada, ya suelta― le gritaba Ino al chimpancé mientras intentaba arrancarle de las manos lo que parecía ser una blusa azul.

    ―Venga Ino, se más amable― decía Matsuri tratando de calmarla pero la catira se encontraba totalmente furiosa. Momo por su lado gritaba del mismo modo exigiendo la camisa.

    ―Que sueltes te dije― gritó nuevamente cuando de la nada un silbido se escucho desde el umbral de la puerta provocando que el mono soltara la camisa de un golpe, cosa que hizo que Ino callera al suelo.―Maldito simio…― gruño dispuesta a lanzársele encima pero fue detenida por Matsuri.

    ―Solo es un monito― le recordaba, pero la risa gloriosa de Momo la irritaba.

    ―¿Alguien me podría explicar lo que está pasando?― preguntó Kiba quien aun no podía comprender lo que pasaba.

    Milagrosamente, Ino recobro su compostura de diosa al notar la presencia del cara de perro mientras que Momo corría al regazo del castaño con emoción.

    ―Dijiste que él sería mi compañero ¿no? Pues estoy tratando de hacer las paces, ¡pero no me la hace fácil!― gruñó señalando a Momo con el dedo de la acusación.

    ―Por supuesto que no, es un chimpancé― concluyó Kiba como si fuera lo más lógico del mundo mientras le acariciaba la cabeza al mono en su regazo. Ino por su parte se sonrojo avergonzada ante, lo que para ella era, una muestra de inferioridad a su persona.― Pudiste comentármelo, yo con gusto te hubiera ayudado.

    ―Hago las cosas a mi manera, gracias― rechazó con terquedad cruzando sus brazos.

    ―Por favor, hazlo― le suplicó Matsuri hablando por la catira.

    ―Oye…

    ―Ino, admítelo, necesitas su ayuda― le dijo interrumpiéndola, era obvio lo que iba a decir.

    ―Hmp…


    Sasuke


    No era normal en él hacer eso, de hecho, era la primera vez que arrastraba a una chica ha su moto y la llevaba a aquel lugar. Fue un impulso, simplemente no pudo evitarlo… algo en esa chica era diferente, lo sabía y tal vez por eso es que sintió aquella necesidad de querer hacerla sentir bien. Aunque debía admitirlo, le encanto la forma en cómo le hacía cara a Deidara con sus comentarios, en definitiva no era una chica común.

    ―Hmp…― dijo un tanto burlón al observar en su casco un delgado mechón rosa posando en su interior. Lo tomo observador y dejo que el viento se llevara la única evidencia física de aquel momento.

    Lo único que tenía seguro en este instante, es que esa chica había causado en él una gran curiosidad.

    ―¿Nos vamos?― le preguntó un chico de cabellos plateados, lizos y largos con brillantes ojos morados. Su piel blanca y estilo playero le iban a la perfección con su forma de ser. Suigetsu cargaba su propia moto e iba acompañado de un joven alto, moreno y musculoso de cabellos anaranjados y ojos marrones.

    ―Sí.

    ―¿Iremos a recoger a Karin?― preguntó Jungo, el chico peli-naranja.

    ―Tsk, siempre arruinando la fiesta― bufó Suigetsu con fastidio.

    ―La necesitamos al fin y al cabo― comentó Jungo.

    ―Bien, pero no la subiré a mi moto esta vez, que se la aguante otro― gruñó Suigetsu montándose en su vehículo con brusquedad. Minutos después los tres arrancaron fuera de la mansión del Uchiha.


    Naruto


    No es que estuviera nerviosos en ir a la alcandía a buscar a Jiraiya en donde se encontraba Tsudase-sama, lo que le alteraba eran todos esos guardias armados y cámaras, además de sistemas de seguridad avanzados aunque no lo suficiente para diferenciar un robo de una de las estupideces que podría cometer, ya que después de todo, era imposible para él quedarse quieto.

    Lo dejaron en el recibidor junto a uno de los recepcionistas que de vez en cuanto alzaba la mirada para verlo recibiendo una sonrisa tímida del oji-azul, el cual miraba a todas en busca de algo interesante durante la espera. Se acerco a los muebles y se sentó en uno de ellos, era suave y fácilmente su cuerpo rebotaba en él a causa de los resortes en su interior, por lo que, inevitablemente empezó a dar saltitos indiscretos hasta que el recepcionista lo miro con mala cara, de modo que se detuvo. Sin embargo, una curiosa polilla se reflejo en uno de los rayos del sol, siempre se había preguntado como lograban entrar a lugares cerrados como un auto o la misma recepción la cual escaseaba de ventanas. Recordó que su profesor le había dado hace tiempo una clase de eso, lo tenía en la punta de la lengua, pero no se le venía…

    ―¡Ah, cierto!― recordó de repente, aquellas eran las células muertas que abandonaban su piel y vagaban en el aire hasta desintegrarse… suponía. El hombre detrás de esa enorme mesa lo observo nuevamente con esa mirada, a lo que Naruto le sonrió mientras se sentaba recto en el mueble ya que se encontraba todo encorvado mirando como la polilla caía al suelo.

    Aquel lugar era totalmente silencioso, tanto que empezaba a exasperarlo. Sintió la necesidad de iniciar una conversación con aquel hombre pero era tan… extraño que simplemente no se atrevía a intercambiar palabras con él. De su bolsillo saco una barra de chocolate negro que se encontraba un poco derretido, lo saco e intento abrirlo pero la envoltura estaba fuertemente pegada, cosa que extendió aquel ruido irritante provocado por la agitación de aquel papel característico. Cuando por fin pudo abrirlo, empezó a comerse el chocolate derretido como si de un helado se tratase, lamiéndolo y chupándolo a la vez que emitía sonidos molestos en aquel silencio mortal. Nuevamente el recepcionista lo miro con odio pero esta vez Naruto hizo caso omiso y continuo comiéndose su dulce haciendo que ese hombre revirara los ojos y bufara con apatía. No pudo evitar reír ante su reacción, era divertido irritar a las personas…

    ―Lamento la espera, es que Tsudase… mejor te cuento afuera― comentó Jiraiya al llegar a la recepción con un cachete marcado por una mano roja.

    “¿Qué habrá hecho ahora ese viejo pervertido?”


    Hinata


    Corría lo más rápido que podía a su habitación. Sus pasos eran torpes y débiles, su respiración se volvía cada vez mas descontrolada, rápida y asfixiante. Se apoyaba de la pared para no caer al suelo y morir ahorcada por su propia respiración. Era terrible sentir como el espacio en su garganta se iba disminuyendo cada vez más. El sudor frio apoderaba todo su cuerpo y la desesperación le invadía por completo. Usando todo el peso de su cuerpo abrió la puerta de su cuarto y cayó al suelo. Gateando hasta la mesa de noche al lado de su cama, abrió la gaveta y saco el inhalador, lo coloco en su boca y lo presiono dos veces. Respiro profundo… De inmediato la desesperación en ella se fue aliviando, lentamente su respiración se fue controlando. Apoyo su cabeza en el borde de su cama dejando que el aire entrara y saliera libremente de sus pulmones. El sudor frio desapareció, lo que antes era un túnel del tiempo donde su vida corría peligro, era ahora un lugar con el tiempo detenido o indefinido, donde todo era lento o insignificante a su alrededor.

    Sonrió al recordar el clásico sermón de su padre que siempre le indicaba que llevara el inhalador consigo a todas partes. Nunca pensó que lo necesitaría encima de ella en casa, tal vez había menospreciado esta enfermedad demasiado tiempo… Sabía que el asma no era cosa de juegos, que era algo serio pero ¿Por qué perder una vida por algo que se puede controlar con un simple inhalador? Ya había pasado por lo peor, su cuerpo se encontraba en el mejor de los estados físicos, completamente saludable y fuerte, podía tener una vida normal como cualquier adolescente que evita la educación física.

    Más calmada, subió a su cama y conecto su IPod a las cornetas y coloco música a bajo volumen para no molestar a los demás miembros de la casa. Cerró los ojos y se dejo llevar por la melodía suave que en ese momento necesitaba.

    ―¿Puedo pasar?― se escuchó detrás de la puerta de su habitación, reconocería esa voz en cualquier parte.

    ―Claro― respondió al sentarse en su cama con una almohada entre sus brazos.

    ―¿Me puedes hacer un favor?― le preguntó un tanto insegura extrañando a Hinata, generalmente era ella la tímida y Hanabi la ruda.

    ―¿Qué clase de favor?

    ―Es que necesito ir a un lugar. No tengo licencia, Neji jamás me llevaría y si voy con uno de los choferes mi padre se enteraría y me regañaría― le explicó de forma suplicante.

    ―¿De qué lugar estás hablando?― le preguntó intrigada. Hanabi era la rebelde de la casa, temía por lo que fuera hacer en quien sabe donde, sin embargo, esta le tendió un folleto, cuyo contenido la sorprendió…―Nuestro padre te mataría si se entera de esto― murmuro un tanto anonadada y burlona, no era nada del otro mundo, ni siquiera era un delito, es más, la idea se le hacía divertida.

    ―Hinata, en verdad deseo ir a ese lugar, por favor…

    ―Lo hare― dijo Hinata interrumpiéndola, toda su vida había estado encerrada en esa mansión. Iba a empezar una nueva vida y nada mejor que empezándola con una pequeña travesura.

    ―¿En serio? Gracias, Hinata, eres la mejor― celebro Hanabi un tanto sorprendida, pero más emocionada que todo lo demás. Rápido, salió de su habitación y tomo las cosas para luego salir en el auto de Hinata a “un pequeño paseo por el centro comercial”.

    -*-*-*-*-*-*-*-

    ¿Les gusto? ¿Parte favorita?

    ¿Opinas igual que Kankuro sobre Shikamaru? (¬¬ no, no es gay…)

    ¿Qué sería de Ino sin su ego y sin Matsuri?

    ¿De dónde conoce Sasuke a Karin, y a donde van?

    ¿Naruto y el recepcionista?

    ¿Hinata haciendo una travesura? ¿En qué mundo estamos?
     
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    Bueno, encontré un poco de tiempo para publicar el capi así que mejor me apuro xD Espero les use al capi n.n

    Personajes que participan: Sasuke, Suigetsu, Jungo, Matsuri, Ino, Karin, Hinata, Hanabi, Tenten, Lee, Neji, Gai-sensei.

    ConexiónCapitulo 10

    Sasuke


    Sin sobrepasar el límite de velocidad corrían en sus motos los tres jóvenes a recoger a la morena nombrada con anterioridad en la academia de modelaje. A decir verdad, no era común verlos con esa clase de gente pero ellos fueron los causantes de que Karin se metiera al modelaje al tratarla como un chico más del grupo, nunca la vieron precisamente como la mujer que era, e incluso se referían a ella como hombre cosa que la molestaba indiscutiblemente.

    Al llegar, Suigetsu tocó el claxon de la moto tres veces como señal de su llegada. Como era de costumbre, se quedaron ahí parados hasta esperar la llegada de la morena, la cual tardaría, como mínimo, unos diez minutos.

    Por su lado, Ino estaba saliendo también dispuesta a irse a casa cuando vio a los chicos. Acompañada de Matsuri fue hasta ellos mientras buscaba algo en su bolso.

    ―Tiempo sin verlas― comentó Suigetsu refiriéndose a las dos jovencitas.

    ―Cierto, nos han hecho falta― respondió Matsuri con una amplia sonrisa tan clásica en ella.

    ―Oye, ¿Qué le hizo ahora el idiota de mi hermano a Kaede?― interrogó la rubia con un tono de molestia.

    ―Nada que no haya hecho antes, es la misma historia de siempre― contestó Sasuke con amargura.

    ―No sé como no lo ha dejado ya― murmuró Ino al tiempo que saco una bolsa negra de su cartera.― Ten, en verdad me gusto, a excepción de Karin pero lo demás está bien― comentó con toda la ironía posible acentuando así su enemistad con la aludida cosa que hizo que los presentes soltaran una sonrisa.

    ―¿Podemos acompañarlos a las audiciones?― preguntó Matsuri un tanto emocionada.

    ―Claro, Matsuri les seria de mucha ayuda, es buena en esa clase de cosas― comentó Ino.― Aunque yo no puedo, tengo asuntos pendientes.

    ―Por mí no hay problema― contestó Sasuke con indiferencia.

    ―Ten el casco, tú te montas conmigo― dijo rápidamente Suigetsu sabiendo que de no ser así, la morena terminaría montándose en su moto, como era de esperarse, ya que Jugo era un sádico en la moto y Sasuke siempre evitaba llevar personas en la parte de atrás por lo que no tenía muchas opciones.

    ―Gracias.

    ―¿Has visto a Deidara?― preguntó Sasuke en su forma de saber si se encontraba bien o no, pues a pesar de ser un cretino, creció con él y le tenía aprecio, le importaba.

    ―Ha estado raro, creo que esta vez metió la pata en grande.

    ―Así fue― aseguró Suigetsu quien había recibido la primicia en boca de Sasori. ―Al parecer la chica con la que la engaño apareció ese día en el parque y se vengó por completo― le contó un tanto emocionado.

    ―¿Se vengó?―repitió extrañada, lo común era ver a las tontas esas llorar en un rincón y desaparecer por completo. Era la primera vez que veía a una que se vengaba.―¿Sabía que Deidara tenía novia?

    ―Supongo que…

    ―No lo sabía― interrumpió Sasuke con frialdad― No es esa clase de chicas― completo haciendo que todos se le quedaran mirando un tanto extrañados.

    ―Muévete a un lado, Ino― ladró Karin con amargura cortando por completo aquella escena confusa.

    ―Aprende abrirte paso cinco centavos, que bastante lo necesitas― contestó Ino de la misma forma, resaltando su peculiar apodo. Ino era una experta en eso de cambiarle los nombres a la gente.

    ―No empiecen, estamos apurado― bufó Suigetsu.

    ―Cierto, nosotros tenemos trabajo que hacer. Tú a un hermano de quien encargarte, se está volviendo molesto últimamente― comentó Karin mientras se colocaba un casco.

    ―¡¿Le dijiste lo de Deidara?!― le interrogó Ino enfurecida a Suigetsu.

    ―No me mires a mí, yo no fui…

    ―Oh vamos, es la misma historia de siempre. El hace algo estúpido y ustedes se reúnen a hablar sobre él sin llegar a ninguna conclusión. Después no saben nada uno del otro hasta que el idiota de tu hermano se sale con la suya, nuevamente. Es un circulo vicioso, sinceramente, ya me está cansando.

    ―Esta vez te vas con Jugo― le indicó Sasuke dando por terminada la conversación y haciendo que la morena tragara grueso. No era precisamente una fanática de las motos y se montaría con el más maniático de las carreras que había conocido.

    ―¿Y eso por qué?― cuestionó aterrorizada por la idea y al ver a Matsuri con Suigetsu lo entendió todo, aun así se rehusaba rotundamente a montarse con Jugo. Después de acabárseles las excusas y las preguntas término por montarse con Sasuke gracias a su infalible carita de perro triste que siempre funciona en este tipo de situaciones con el azabache y de ahí arrancaron con rapidez al lugar donde se darían las audiciones en busca de un pianista para su banda.


    Hinata


    Apenas salieron de la vista de los miembros de su inusual familia se desviaron a un camino totalmente opuesto hacia donde quedaba el centro comercial. Ambas jóvenes se encontraban entusiasmadas y un poco nerviosas, sobretodo Hanabi quien participaría en lo que podría ser un cambio total de su vida. Sabía que le traería muchos problemas pero no se rendaría por nada, ni siquiera ante su padre. Sin embargo, tenía primero que ganar... entre miles de personas.

    ―¿A dónde es que vamos exactamente?― pregunto Hinata pidiéndole a Hanabi la dirección del lugar.

    ―¿No sabes dónde queda la casa de los Uchiha?― le cuestiono Hanabi atónita. Todo el mundo sabía en donde vivían gracias a las fiestas que ahí se formaban.

    ―No, lo siento― dijo la mayor un tanto apenada, nunca había ido a una fiesta y solo sabía de los Uchiha por la relación que tiene con el negocio de su familia.

    ―No importa, yo te indico― le respondió rápidamente para cambiar la atmosfera que se había formado repentinamente entre ellas. Tomo el papel de GPS y poco a poco le iba diciendo a donde tenía que ir.

    A la hora pudieron llegar a la entrada de la mansión Uchiha y quedaron boca abiertas el fijarse en la cola enorme que se formaba en dirección a la puerta del porche.

    ―Vamos a estar aquí toda la tarde― dijo Hanabi en pucheros.―Debimos venir más temprano, maldición― y de la nada la depresión se volvió en frustración.

    ―No te preocupes, para cuando llegues ya estarás preparada mentalmente para tocar― comentó Hinata con una sonrisita burlona teniendo en cuenta que sería la primera vez que Hanabi hacia audiciones.

    ―Hmp.


    Tenten



    Tan entusiasmada como nerviosa, la castaña se dirigía, acompañada de Lee, al famoso dojo de la familia Hyuga. Iban corriendo ya que el tren se había retrasado más de lo usual e iban tarde. Esto no había empezado bien…

    ―¡Ya llegamos!― grito Lee todo acalorado y exhausto entrando precipitadamente al dojo. Todos voltearon a verlo extrañado, segundos más tarde, llego una apurada Tenten que dejo boquiabierto a todos los presentes.

    ―Lamento mucho la tardanza― se disculpo la castaña apenada a lo que los alumnos respondieron a gritos diciéndole que no había problema, cosa que asusto a la joven por la euforia repentina.
    Neji por su parte estaba exceptivo, no era el tipo de chicas que solía ver en las competencias de artes marciales. Ella se veía, de alguna forma vulnerable.

    ―Así que tu eres la famosa Tenten― saludo Gai-sensei en un tono de alabanza.― Lee nos ha hablado muy bien de ti. No esperaba que fueras tan linda― comento como si de una nota mental se tratara haciendo que los chicos lo miraran con mala cara, por su parte la castaña se limito a sonreír sin saber que decir con exactitud. ―Muy bien, se acabo el descanso, empiecen con el entrenamiento― ordeno Gai-sensei de forma animada y luego se dirigió a la castaña. ―Midamos tus habilidades― dijo al tiempo que Neji se acercaba.

    ―Elije una arma― le pidió Neji con una voz seria y fría, sin expresar alguna emoción.

    ―Bi…bien― contesto un tanto intimidada. Corrió a la sección de armas y tomo la barra de madera que era la más común entre los duelos, pero su manejo solía ser un tanto complicado debido a su longitud.

    ―¿Por qué con Neji, Gai-sensei? El es capaz de herirla de verdad― le murmuro Lee preocupado por su amiga mientras veía como el Hyuga tomaba el misma arma y se colocaba frente a ella en posición.

    ―No te preocupes, Lee, él sabrá cuanto detenerse― le dijo con simpleza cuando el aludido inicio la combate de prueba.

    Tenten se encontraba en un estado de nerviosismo y adrenalina extremo, no estaba segura del todo lo que hacía o debía hacer, tan solo se dejo llevar por el instinto. Al ver acercase la barra de madera hacia ella utilizo la suya como protección impidiendo el golpe, pero tan pronto detuvo ese Neji uso el impulso de la repulsión para atestarle otro posible golpe, siendo tan repentino que asusto a la castaña, pero que por suerte logro impedir. No hacía más que defenderse y detener la barra de madera impulsada hacia ella sin oportunidad alguna de contra-atacar.

    ―Tenten, ¿Qué esperas en responder?― le grito Lee en un es todo completo de euforia.

    ―¡No presiones, Lee!― le grito Tenten enfurecida, casi en un estado demoniaco que asusto al azabache. Impulsada por la rabia que había provocado en ella el azabache, detuvo un golpe de Neji con fuerza y rápidamente con un giro tomo propulsión para golpearlo debajo de las costillas, enredo su barra con la de él e hizo que éste la soltara sorprendiendo a todos. Pero rápidamente Neji movió sus piernas en una patada que la lanzo al suelo y aprovecho el tiempo para buscar su arma.

    ―¡Tenten!― le grito Lee con suma preocupación viendo como la castaña gemía de dolor en el suelo sin notar como el Hyuga se aproximaba a ella. La aludida se pasmo al verlo corre a su dirección por lo que tomo la barra y detuvo el golpe y luego otro y otro mientras que desesperada buscaba la oportunidad de levantarse. De un impulso empujo al oji-perla y se arrastro hasta atrás para alejarse de él y levantarse un tanto atolondrada por la precipitación del movimiento.

    ―¡Increíble! En verdad es buena― se murmuro al fondo con obvia sorpresa. Para ser su primera pelea en el dojo mostraba una gran habilidad, claro que Neji era mejor que ella.

    De un momento a otro Tenten fue derrotada, Neji golpeo la muñeca de la castaña haciendo que soltara la barra de madera por instinto y luego la derribo al suelo apuntándola con su arma sin permitir que se moviera.

    El ruido se expandió de la nada asustando a la castaña, nuevamente. Todos eran alabanzas a Tenten, en verdad los chicos había quedado impactados con ella a pesar de que hubiera perdido.

    ―Por favor, se mi maestra― de momento a otro los chicos la rodearon y la aludieron con comentarios similares a esos sonrojándola al extremo, se empezó a sentir un poco sofocada. ¿Qué clase de chicos eran estos?

    ―Lee, ¿Tenten se sabe las reglas?― le interrogo Gai-sensei a su alumno quien sonreía satisfecho ante la impresión causada por la castaña.

    ―¿Uh? No, es que no le he hablado mucho sobre las competencias, solo le he estado enseñando pasos básicos para defenderse― contesto sin tomarle mucha importancia.

    ―¿A caso no quiere ser una especialista en artes marciales?― pregunto ahora con intriga, conociendo a su alumno, él solo le enseñaría a una persona que deseara las artes marciales tanto como él.

    ―No le interesa mucho las artes marciales― le explico.― Solo quiere aprender a defenderse― contesto y Neji, que logro escuchar aquello, se enojo, no quería que una persona así estuviera en el dojo de su familia. ¿Si no le gustaba que hacia aquí? De seguro no es más que una malcriada que deseaba lucirse con sus “nuevas habilidades”. O sentirse especial…

    ―¡Lee, ayúdame por favor!― le suplicó Tenten que estaba atrapada en medio de la multitud en una presión asfixiante.

    ―Ahí voy― respondió alzando su mano con emoción como si de un reto se tratara.

    Mientras tanto, Neji se acerco a Gai-sensei para hablar con él, al tiempo que Lee calmaba a los chicos.

    ―Tal vez le guste― comento Neji― Es una explicación lógica como para que Lee haya traído a una chica así al dojo. ―dijo en un análisis simple.― Puede que tenga la habilidad, pero no me agrada. No creo que sea buena idea dejarla unirse a nosotros.

    ―No, Neji, hay algo más. Es una chica muy inusual, y conociendo a Lee, ha de tener un buen motivo como para atreverse a traerla― opino Gai-sensei observándola con detención. ―Veamos cómo le va, después saca las conclusiones― concluyo haciendo que el Hyuga frunciera el ceño un tanto molesto.

    “¿Una chica inusual? No es más que una chica ordinaria ¿Qué puede tener de especial?”







    Sasuke


    Las horas pasaban con lentitud, ya a menos de media hora de empezar lamentaba haber venido. Sus oídos pedían a gritos un descanso de tanta tortura musical de novatos sin conocimientos. ¿Qué parte de rock no eran la que entendía? ¿Qué acaso no se podían despegarse de las libretas? ¿Si tan nerviosos se ponían ante una presentación tan simple como esta que carajos hacían aquí? Era una canción fácil, ¿Cómo es que no podían seguirles el ritmo? Buscaban a un tecladista con talento que pudiera tocar rock… r-o-c-k ¡Rock! Por el amor a dios, al demonio o a quien sea… ¡es rock!

    ―¡Siguiente!― gritó Karin con histeria, ya llevaban dos horas sentadas en esas malditas sillas forradas de cuero tachando a cada una de las personas en su lista. A decir verdad, ella era la única que hacia el trabajo de verdad, los demás perdían el tiempo haciendo garabatos y dibujitos estúpidos o simplemente mirando al vacio al borde del sueño.―¿Cuál es tu nombre?― le preguntó a la chica que pasaba al pequeño auditorio formado en la cochera de la casa del Uchiha.

    ―Hanabi― se limitó a responder sin ganas de darles el apellido, el simple hecho de ser Hyuga podría darle como quitarle ventaja y era lo menos que quería.

    ―¿No eres muy joven? ¿Cuántos años tienes?― le preguntó Suigetsu un tanto escéptico pero a la vez interesado, era muy linda, aunque no linda de hermosa sino linda de infantil.

    ―Quince― respondió, solo era dos años menor, pero aun así la veían con desgana. No será más que un “siguiente” bien gritado por Karin.

    ―Ok, empieza a tocar― le ordenó Karin para luego darle play al reproductor en el que tenia grabado el ritmo de sus canciones.

    Hanabi respiro profundamente y dejo su mente en blanco, coloco sus dedos encima de las teclas sin presionarlas y al llegar su turno, empezó a tocar con los ojos cerrados para así no mirar a los presentes y concentrarse completamente en sus notas.

    Al escucharla, los chicos volvieron a la vida de un instante a otro, se irguieron y dirigieron sus miradas a ella con total interés. Tocaba de una forma increíble, no pudieron evitar notar que había cambiaron unas cuantas notas pero solo mejoraban más la sinfonía de la canción. Sus ánimos subieron y las sonrisas en su rostros se marcaron, la piel se les erizo, ¡esta chica tenía talento!
    Al terminar, los presentes, incluyendo a Sasuke, se levantaron y la alabaron con aplausos y grititos de emoción.

    ―¡Eres genial!― vociferó Suigetsu como si de un milagro se tratase, aunque después de escuchar tanta porquería en verdad era algo así como un milagro.

    ―Por el amor a Dios, retira a los demás, esta niña será la que tocara con nosotros― ordenó Karin a Matsuri quien animosamente asintió y salió a dar el anuncio.

    Hanabi sonrió al escuchar a la morena y afuera, Hinata al escuchar el anuncio de la castaña sonrió de felicidad.

    “Como siempre causando conmoción”.



    Pensó divertida.

    -*-*-*-*-*-*-*-*-*-

    ¿Les gusto? ¿Parte Favorita?

    ¿Les gusto la idea de una banda? ¿Y su nueva integrante?

    ¿Cuál es el problema de Neji con Tenten?


     
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    Ashlotte

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    Hola, muchas gracias por avisarme, y de verdad, lamento la tardanza. u.u'

    Bueno, primero lo técnico.

    Faltas de acentos y, que cuando se hacen varias preguntas, éstas son separadas por comas.
    Fué lo único que noté, a decir verdad.

    Ok, en cuanto a mi opinión.

    Me gustó mucho el capítulo, estuvo bastante interesante. ^-^
    Ne... ese Neji... ¬¬ Mas le vale que le empiece a agradar Tenten o se las verá conmigo... (?)
    Ok, no... pero espero que comprenda que Tenten no es una mala persona. ^-^

    Oh, qué genial idea lo de la banda. Y quién diría que Hanabi sería la elegida, jeje.

    Bueno, responderé tus preguntas:

    ¿Les gusto? ¿Parte Favorita?
    Si, me gustó. Mmm... tal vez la pelea entre Neji y Tenten.

    ¿Les gusto la idea de una banda? ¿Y su nueva integrante?
    Si, es una buena idea, como ya lo dije. Me sorprendió, lo de Hanabi me sorprendió, pero, así es algo diferente. Jeje.

    ¿Cuál es el problema de Neji con Tenten?
    Nu sé... u.u' Pero espero que se solucione...
    ¿Tal vez será que Neji piensa que no es como las demás chicas por que es buena luchando?
    ¡No sé! Tengo intriga... U-U'

    Bueno, espero la conti. ¿Podrías avisarme? ¡Por favor! ;-;
    Sin más, me retiro.
    Que tengas un buen día, saludos.
     
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    pinkprincess

    pinkprincess Entusiasta

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    Holaaa! :D Muchas gracias por avisarme de la conti ^^

    Me ha gustado muucho este capi, aunque se me hizo corto :| Pero bueno, se te perdona porque publicas seguido... XDD

    En primer lugar, faltas y narración. Como ya te he dicho miles de veces, mejoras cada día que pasa en cuanto a la forma de escribir :) No obstante, tienes bastantes faltas de acentos, sobretodo en los tiempos pasados. A parte de eso, creo que el primer punto queda resuelto... XDD

    En segundo lugar...

    ¿Les gusto? ¿Parte Favorita?

    Me he encantado :3 En serio! ^^ Sobretodo la pelea entre Tenten y Neji *^* Que emocionanteee! Aunque mi parte favorita a sido cuando Sasuke a salido a "defensa" de Sakuraaa *^* Que dulceee! >< En serio! Lo adoro en este fic! No es el típico estirado odioso de siempre, aunque conserva su parte fría, y eso me encanta! ;)

    ¿Les gusto la idea de una banda? ¿Y su nueva integrante?

    Si, estuvo bien :) Era de esperar que la cogiesen, sino no tenía graciaa! XDD Pero me gustó que los chicos despertasen en cuanto ella comenzó a tocar ;) Y lo de Karin, ni te cuento! XDD Que montón de reir me di con ella. A veces es una *** pero en ocasiones contadas me cae bien :p

    ¿Cuál es el problema de Neji con Tenten?


    Pues que a él le apasiona lo que hace y Tenten, técnicamente, solo lo hace para aprender a defenderse. Lo malo es que Neji lo malinterpretó todo ¬¬ El no sabe NADA de Tenten y la juzga como una niña mimada cualquiera... Pues que te enteres que no!! XDD Que Tenten vale muucho! Y ya te puedes ir dando cuenta! XDD

    Por mi parte, nada más que decir, solo que subas conti lo antes posible, y que no te olvides de tus otras historias ^^ (Ahora en mi subconsciente se repite una y otra vez... "Segunda temporada de Sed de sangreee..." XDDD)
     
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    Bonita Lokita

    Bonita Lokita Usuario común

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    ¿Les gusto? ¿Parte Favorita?
    R= se te ara tipico de mi pero fue donde Sasuke recoge a Karin, no se, me encanta ver como Ino le responde con su misma medicina jajaja... pero ¡¡es hermana de Deidara!! o por dio por eso me gusto esa escena, me dio muchas pistas jajaja

    ¿Les gusto la idea de una banda? ¿Y su nueva integrante?
    R= Me mparecieron perfectas ambas cosas, es el primer fic donde vere a Hanabi mas seguido jajaja.

    ¿Cuál es el problema de Neji con Tenten?
    R= que Neji es un egocentrico, conservador y calculador y Tenten muy inestable. Ambos tendran severos problemas, realmente pienso que en este momento la pareja mas cercana que podria tener tenten seria Shikamaru pues el si es buena onda con ella. ¬¬ Pero ojala me akivoke ya ke adoro el Shikatema, aun asi Neji me parece demasiado especialito.


    es lo unico que te puedo decir ojojo, estoy de rapidin.
    ATTE: I'm my tiguer creazy loka,loka,loka
     
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    AmyCrazyxD

    AmyCrazyxD Entusiasta

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    Conexión (las parejas clásicas)
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    Hola! Un.n lamento la tardanza ¡pero esta vez no fue mi culpa! fue culpa de la computadora que le dio por dañarse (a saber por qué xD) asi que ahora estoy en un cyber publicando los capitulos de mi fics que ya tenia listos (odio el cyber T-T) lamento de antemano no poder haberles avisado que habia actualizado por que sinceramente tengo un monton de cosas que hacer (¡y odio el cyber!). También por los errores ortograficos, no me ha dado tiempo de corregir.

    Personajes que aparecen: Temari, Hinata, Hanabi, Sasuke, Suigetsu, Karin, Jungo, Tenten, Lee, Shikamaru, Naruto, Kakashi, Iruka, Ino y Deidara
    Canción: Remember December de Demi Lovato

    ConexiónCapitulo 11


    Temari


    La puerta del baño se abrió seguida del ruido característico del inodoro de los hospitales al bajarse la palanca. Fatigada, caminaba de regreso a su camilla segundos antes de que una de las enfermeras llegara a la habitación con una bandeja de comida.

    ―Su almuerzo, señorita Temari― dice con amabilidad mientras deposita la bandeja en la mesita con ruedas y la arrima hacia ella.

    ―Gracias, ¿Sabes en donde están mis hermanos?― le pregunta al tiempo que se acomoda en la camilla.

    ―Los vi hacer rato en la recepción, no tenían un buen aspecto― respondió con una sincera preocupación.

    ―Bueno, gracias.

    ―De nada, que tengas buen provecho― le dijo con educación antes de salir de la habitación.

    Temari borro su sonrisa apenas esta se fue, la situación era obvia: no había pagado la póliza de seguro por lo que de seguro la cuenta con el hospital ha de ser grande, y ellos no tenían de donde sacar dinero.

    ―Asss… más cuentas― suspiro angustiada, ya no tenía ganas ni de comer. Esta vez sería difícil salirse de la deuda. No tendría más opción que dejar que sus hermanos colaboren trabajando también, pero detestaba la simple idea, no quería que sus hermanos pasaran trabajo, que a diferencia de ella pudieran dedicarse a tener una vida propia, con amigos y alguna novia, cosa que ella no pudo experimentar como se debía. Al menos tenía a Tenten, la única amiga que tenia, pero era demasiado orgullosa como para pedirle ayuda a ella también.


    Hinata


    La joven oji-plata se quedo afuera esperando a su hermana, ya habían pasado varios minutos desde que todos partieron de la mansión de los Uchiha. Un tanto impaciente y deseosa de saber noticias de ella se aventuro en dirección a la cochera. Según iba acercándose, el sonido de la batería retumbaba en las paredes, la guitarra seguía el ritmo y el bajo apenas se notaba dando sonidos gruesos en una combinación perfecta con la guitarra, logro captar también el teclado con notas simples, el cual seguramente estaría tocando su hermana. Y la voz, le pertenecía a una mujer, era indescriptible, con esa atmosfera jazzista pero a la vez roquera.


    …Tu dices que no les permitía cambiar de opinión
    Por que cuando estamos juntos, el fuego derretía el hielo
    Nuestros corazones están en sobre-marcha
    Ven conmigo, vamos a correr esta noche
    No dejes que estos recuerdos se quedan atrás
    ¡No te rindas, recuerda, diciembre!
    ¡Por favor, recuerda, recuerda diciembre!
    Estábamos tan enamorados en ese entonces
    Ahora que estás escuchando lo que dicen, no te vayas de esa manera
    ¡Recuerda, recuerda diciembre!
    ¡Por favor, recuerda!

    Recuerda que nos unen
    Ambos nos prometimos que para siempre
    Podemos hacer esto, luchar contra la presión,
    ¡Por favor, recuerda, diciembre!
    ¡No te rindan!
    La batería era tocada por un peli-naranja que se encontraba en un estado desatado de euforia golpeando a toda potencia la batería. La guitarra la usaba un curioso chico de cabellos platinos y ojos de morado lila fuera de este mundo, por su lado, el bajo lo tocaba un guapo chico azache de mirada profunda, totalmente concentrado en la música, mientras que la voz provenía de una chica morena, de largas piernas y lentes marrones, era hermosa, y tenía esa aura de superioridad que llegaba a kilómetros de distancia.
    ¡No te rindas, recuerda, recuerda!
    Por favor, recuerda, recuerda diciembre!
    Estábamos tan enamorados en ese entonces
    Ahora que estás escuchando lo que dicen, no te vayas de esa manera
    ¡Recuerda, recuerda diciembre!
    ¡Por favor, recuerda!
    ¡No te rindas!
    Al terminar, los chicos, exhaustos, intercambiaron miradas de satisfacción y rieron con los ánimos en lo más alto. Hinata, sorprendida anuncio su presencia con aplausos de felicidades, al acto todos dirigieron su mirada a ella y Hanabi, emocionada, corrió hasta ella a abrazarla.

    ―¿Nos escuchaste? ¿No fue genial? Dios, la adrenalina… mi cuerpo esta temblando de la excitación― decía Hanabi con una sonrisa de oreja a oreja.

    ―¿Y quién es esa?― murmuro Suigetsu por lo bajo con picardía y curiosidad.

    ―Hanabi, ¿Quién es ella? ―pregunto Karin en un tono audible.

    ―Es mi hermana mayor, Hinata― la presento haciendo que se adentrara más a la cochera― Ella me trajo ya que yo no tengo licencia para conducir― explicó.

    ―Supongo que la veremos muy seguido― dijo Suigetsu para luego presentarse formalmente y luego a los demás mientras los señalaba. No pudieron evitar ver la increíble similitud entre ellas, además de sus ojos aperlados tenían la misma nariz y forma de rostro. Hanabi aun no estaba del todo desarrollada pero Hinata era otra cosa, su cuerpo tenia la forma de un reloj y su cabellera oscura quedaba a la perfección con su piel clara y ojos. Hanabi por su lado era plana a su totalidad y su cabello castaño le daba ese toque de rebeldía a su aspecto.

    ―Solemos reunirnos todos los miércoles a las tres de la tarde ¿Podrás a esa hora?― le informó Sasuke.

    ―Claro, ¿tú puedes?― le preguntó Hanabi a su hermana mayor la cual afirmo con un ligero movimiento con su cabeza.― Quedamos entonces― aceptó Hanabi emocionada.


    Tenten


    En ese momento se encontraba en la tienda de películas dando su hornada de medio tiempo junto a Lee, con el cual se encontraba hablando solo para matar el tiempo. Como era obvio el único tema a tocar en ese entonces eran las artes marciales y todos sus derivados, los chicos del dojo, el mismo dojo, el cómo le hizo competencia a Neji, y como todos la admiraban, aunque según la castaña, solo lo hacían por el simple hecho de ser la única chica en ese lugar.

    ―No sé, Lee, no estoy del todo convencía― decía Tenten, ella lo único que quería era poder aprender a defenderse, no a meterse en competencias internacionales de artes marciales juveniles o ese tipo de cosas.

    ―Vamos, ya verás que te va a gustar― insistía, pero por más que lo hiciera Tenten no se veía siendo tan fanática como lo era él.

    ―Asss… tal vez― suspiró rendida, no era buena para negarle a Lee cuando se ponía así. Ella estaba segura de que no había forma de que entrara a una de esas competencias, concursos o sea lo que sean, no le llamaba el interés, solo quería dejar de sentirse débil. Poder andar en las callas otra vez sin sentirse amenazada.

    ―En serio, te va a gustar― repitió casi a gritos, Lee ya sabía lo que había pasado con Tenten, ésta misma se lo conto en uno de sus entrenamientos y por eso mismo la castaña sentía como si sus peticiones estuvieran siendo ignoradas, no sabía si era a propósito o amnesia temporal pero ya empezaba a lamentar haberle pedido ayuda al azabache.

    ―Asss…



    Shikamaru
    En la mañana siguiente



    La luz golpeo sus parpados al punto de irritarlo lo suficiente para sentarse en su cama y quitarse las sabanas de encima, suspiro con fastidio y miro al vacio pensativo, la cuenta regresiva se marcaba y segundos más tarde el despertados colocado a su lado sobre la mesa de noche empezó a sonar. Bufo nuevamente, esta vez con pesadez, siempre pasaba lo mismo, ya ni le veía la lógica de tener un despertador. Lentamente movió sus piernas fuera de la cama y se levanto para apagar aquel aparato ruidoso, luego camino hasta el baño y se preparo para bajar al comedor a desayunar con sus padres.

    ―Buenos días― saludó el azabache con pereza. Shikaku por su parte despego el ojo del periódico y lo cerró para dedicarle su atención al recién llegado.

    ―Buenos días, hijo ¿Tienes noticias sobre la amiga de Tenten?― le preguntó con curiosidad a lo que Shikamaru movió la mirada al reloj de pared.

    ―Son las siete de la mañana― contestó con cierto sarcasmo dándole a entender que era muy temprano para eso.

    ―A esa chica Tenten le pasan muchas cosas ¿no creen?― opinó la mujer de la casa sirviendo el desayuno.

    ―Sí, ha pasado por muchas cosas, pero es una chica de buenas intenciones― dijo Shikaku siguiendo con la mirada el plato con su desayuno en manos de su esposa.

    ―Tiene que, han hablado mucho de ella últimamente― comentó la mujer con cierto recelo.

    ―Que problemático― murmuró Shikamaru, su madre de la nada le daba el ataque. Se volvía loca de la nada, por suerte su padre sabía qué hacer en situaciones como estas.

    ―Deberías conocerla― apuntó Shikaku, a lo que la mujer hizo una mueca de “tal vez, en algún momento” para luego sentarse en la mesa y comenzar a alimentarse en compañía de los dos amores de su vida.

    Al terminar, Shikaku salió a trabajar a pesar de ser fin de semana y no haber clases dado que tenía que hacer cuentas, las cuales estaban guardadas en la computadora de su oficina. Shikamaru por su parte se quedo en la sala buscando cualquier bobería que pudieran estar dando en la televisión, pero al no ser así opto por salir de la casa y dar un paseo, observar la nubes y contar las hojas de los arboles, cualquier cosa…

    No había terminado de salir del patio de su casa cuando un mensaje llego a su celular, se trataba de Tenten dándole las buenas noticias: <<Temari despertó, iré a visitarla ¿Quieres venir conmigo a conocerla?>>.

    ¿Y por qué no? No tenía nada mejor que hacer en ese momento con su vida, todo era tan ordinario y repetitivo que ya no le veía la gracia, todo el tiempo estaba aburrido, pero con Tenten la rutina cambiaba un poco, tal vez era por eso que le gustaba estar con ella.

    <<No tengo nada mejor que hacer>>.

    Si, para él hasta escribir era un total fastidio.


    Naruto


    Aun era temprano, bueno las doce y media en un sábado era temprano para el catire quien aun dormía plácidamente en su habitación desordenada. A no ser por el brusco movimiento causado al alzar la colchoneta con fuerza hubiera seguido hasta más tarde, si, vivir con dos hombres como esos tenía más negativas que positivas.

    ―¡Itte! ¿Pero qué demonios les pasa?― gruñó Naruto adolorido quitándose el colchón de encima de un solo golpe.

    ―Tienes que ir a trabajar, Naruto― contestó Iruka con una sonrisa de oreja a oreja, no por estar precisamente emocionado, si no porque aun se reía de la medida drástica que habían tomado para poder despertarlo. Éste tenía unos veinte años, de pelo castaño recogido en una coleta y ojos marrones, moreno y con una cicatriz en su rostro.

    ―¿Y me tenían que despertar así?― gruñó en un estado iracundo.

    ―¿Si no de que otra forma? Los métodos convencionales no hacen efecto en ti― respondió Kakashi con simpleza. Éste era un poco mayor, llegando poco a poco a los treinta, de cabello blanco platino y ojos negros, siempre cargaba una mascarilla que cubría la mitad de su rostro y también cubría su ojo derecho. Era de lo más extraño, aunque todo en él estaba fuera de lo común.

    ―Vamos, Naruto, apúrate o llegaras tarde― le dijo Iruka antes de salir de la habitación.

    ―Mooo… justo a mi me tenía que pasar― chilló en puchero mientras caminaba con pasos flojos hacia el baño.


    Ino


    Disfrutando del fin de semana, Ino se tomo el día libre en el patio de su casa tomando sol dentro de la piscina con ayuda de un flotador con forma de camilla. Tenía las cornetas de su ipod a un buen volumen permitiéndole disfrutar de aquel momento tan pasivo.

    ―¿Y eso qué estás aquí?― se escuchó a lo que Ino se quito las gafas de sol para mirar al dueño de dicha voz tan familiar.

    ―Yo también me canso, por si no lo sabías― contestó con sarcasmo haciendo reír a Deidara quien se encontraba parado en la orilla de la piscina frente a ella.

    ―Me entere de lo que paso en el parque― apuntó Ino marcando el punto directamente.

    Deidara al escucharla borro su sonrisa y suspiro con fastidio. Ino se enserio y salió de la piscina, tomo una toalla y entro a la casa junto a su hermano. La catira fue a la cocina a buscar una bebida y Deidara se quedo en la sala observándola dado que era un espacio amplio, sin muros que obstruyeran la vista.

    ―No tengo ganas de hablar sobre ello― comentó sin muchos ánimos.

    ―Claro que no― burló Ino. ―Deidara, si un chico me engañara tu serias el primero en ir a darle una golpiza― comentó la catira tratando de razonar con su hermano, quería entenderlo.― ¿Por qué engañas a Kaede?

    ―Ino, en serio no quiero hablar de esto, menos contigo.

    ―¿Por qué? ¿Por qué soy mujer? ¿O por qué soy tu hermana pequeña?― interrogó obligándolo a quedarse en la sala y responderle.― ¿Si quiera te gusta Kaede?

    ―Si me gusta…

    ―¿Entonces por qué?

    ―No lo sé, Ino, culpa a mi masculinidad o a la genética, que se yo. Solo pasa y ya― respondió molesto, no deseaba analizar los detalles. ―¿Para esto te quedaste?

    ―Depende, ¿quieres desahogarte con la única persona que está dispuesta a escucharte en este momento?― le cuestionó dejándolo sin palabras. Pero luego de pensarlo un poco empezó a hablar.

    ―Ino, yo amo a Kaede, en serio, desearía casarme con ella y formar una familia a su lado, puedo vivir el resto de mi vida con ella porque la amo, pero no puedo jurarle monogamia.― dijo con sinceridad.

    ―Si continuas así puedes perderla…

    ―Lo sé, pero no vale la pena prometerle cosas que no puedo cumplir― la interrumpió, se dejo caer al sillón cerca de él y miro al techo conteniendo con una mirada sombría y perdida― En verdad la amo…

    Ino no pudo evitar sorprenderse, pero al mismo tiempo los deseos de cachetearlo la invadía ¿Quién demonios lo entendía?

    ¡Hombre tenía que ser!
     
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    AmyCrazyxD

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    Siento la tardanza Un.n espero les guste el capi y no se olviden en dejar sus comentarios

    Conexión
    Capitulo 12

    Gaara y Kankuro


    ―Tenemos que buscar trabajo rápido, esta vez la deuda es grande, Temari no podrá sola― comentaba Kankuro sacando conclusiones junto a su hermano menor, Gaara, en la sala de espera.

    ―Lo sé, pero a nuestra edad no encontraremos trabajos con buena paga, así tengamos los tres turnos será difícil pagar todas las cuentas, mucho menos la del hospital― opinó Gaara con seriedad.

    ―Y ahora con Temari en sus estado solo estamos nosotros dos― agregó Kankuro.― No tenemos de otra más que deshacernos de alguna cuenta.

    ―¿Cómo cuál? Necesitamos pagar el condominio de la casa, el agua, la electricidad, el gas. Mantenimiento, las tarjetas de crédito, alimentos, la escuela y los materiales que solicita. Y también esta los sustentos necesarios como ropa, zapatos, lo de la limpieza…

    ―Gaara no me marees, ya me sé la lista― interrumpió Kankuro un tanto estresado― Supongo que tendré que dejar la escuela.

    ―¿Dejar la escuela? Kankuro, no puedes…

    ―No tenemos de otra, ¿sabes cuánto gastamos en los dos en la escuela? Temari tiene una beca para su universidad, pero nosotros no. Tu eres el genio, tienes que estudiar, yo solo soy el hermano del medio, ni siquiera me gusta le escuela.

    ―¿En serio quieres que me trague eso?― objetó Gaara con una voz seca y fría― Sabes que Temari no te dejara hacerlo.

    ―Para cuando se entere ya estará hecho y no podrá hacer nada― contestó con seriedad tensando el ambiente. Gaara estaba en total oposición pero no hallaba otra solución, su mente procesaba todo tipo de información que pudiera serle útil pero ninguna funcionaba, y en las escuelas no te preparaban para esta clase de situaciones. Aun así, no creía que debían llegar a esos extremos.

    ―Hola, chicos― aquella voz tan dulce y genuina irrumpió en la sala de espera cortando en ambiente creado por los jóvenes presentes de un instante a otro. Tenten había llegado al lugar acompañada de Shikamaru, de hecho él la trajo en su auto después de haberla pasado a buscar en su casa.

    ―Hola, ¿Irán a ver a Temari?― preguntó Kankuro, aunque la respuesta era obvia.―Creo que ahora le están haciendo un chequeo, pero pueden ir a verla, está en la habitación 236, toquen antes de entrar en todo caso.

    ―Vale, gracias― dijo Tenten y camino junto al azabache a la habitación, toco tres veces y desde el otro lado, la voz de Temari se escuchó dándoles el aviso de que podían pasar. Al abrir la puerta salieron dos enfermeras y al entrar, estaba Temari de lo más animada, viendo la tv.― Guao, te ves muy bien― alagó Tenten.

    ―Gracias, aunque, al parecer sufro de la tensión― respondió.― Dicen que es algo genético.

    ―¿No eres muy joven para sufrir de la tensión?― preguntó Shikamaru un tanto intrigado.

    ―Pues, al parecer estoy entre el porcentaje de los desafortunados― dijo en broma. ―¿Tu eres el chico que trajo a Tenten el otro día verdad? Gracias por cuidarla, es una chica muy problemática― comentó divertida haciendo que Tenten frunciera el ceño con infantilismo.

    ―No fue nada― se limitó a decir el azabache.

    ―¡Oh! Mira, la jarra está vacía, iré a pedir que la llenen en la recepción, ya vuelvo― avisó Tenten rápidamente, apresurada por salir.

    ―Tenten, espera…― le decía Temari pero esta hizo caso omiso y salió de la habitación.―La jarra está llena― murmuró con cinismo― Es pésima mintiendo.

    ―Lo hizo a propósito― opinó Shikamaru, quien a pesar de conocerla hace poco sabia ya ciertas cosas de ella, siempre fue una persona muy observadora.― Es su forma de decirte que están en un aprieto.
    ―¿Hablaron con Gaara y Kankuro verdad?

    ―No hizo falta, al llegar a la sala de espera, con solo ver el ambiente no fue muy difícil sacar aquella conclusión.

    ―Y ahora Tenten va a querer ayudar también― dijo un tanto melancólica― Asss… justo cuando las cosas empezaban a mejorar― pensó en voz alta.

    ―¿De dónde se conocen tú y Tenten?― preguntó Shikamaru con curiosidad, además, era una buena forma de quitar esa atmosfera deprimente. Temari lo observo un tanto consternada al tan apresurado cambio de tema, pero se dio cuenta de sus intenciones. Rápidamente su ánimo subió, Tenten, Gaara y Kankuro representaban lo mejor de su vida, hablar de ellos la ponía de buen humor. Parecía una madre a decir verdad.

    ―En el orfanatorio, cuando llegamos Tenten ya estaba ahí, ella tenía ocho años al igual que Gaara mientras que Kankuro tenía diez y yo doce. Si te soy sincera, no recuerdo mucho como paso, solo nos conocimos y nos volvimos inseparables.

    ―¿Pero, si son huérfanos cómo es que no siguen en un orfanatorio? Tú eres mayor de edad pero los otros tres no.

    ―Porque los adopte, literalmente claro, eras mis hermanos al fin y al cabo. Con Tenten fue más difícil, pero logre traerla conmigo. Un orfanatorio no es un buen lugar donde crecer, pierdes la infancia rápidamente.


    Naruto


    Como de costumbre, Naruto fue a buscar al viejo pervertido de Jiraiya en la alcaldía. Ya había entrado tantas veces al lugar y husmeado por cada uno de los rincones, además de molestar y hacerles bromas a los empleados mientras esperaba a Jiraiya. Ya todos lo conocían bien, ya hasta se sentía en casa, la intimidad que le causaba antes había desaparecido por completo. Corriendo, subió unas escaleras y abrió de golpe las puertas que lo llevaban al despacho de la alcaldesa Tsudase.

    ―¿Cómo está? ¡Vieja Tsudase!― gritó a todo pulmón haciendo que esta se enfureciera por completo.

    ―¿A quién llamas vieja, mocoso? ¿Y cuántas veces te tengo que decir que toques la puerta? ¡No estás en tu casa!― le regañó Tsudase molesta dándole un fuerte golpe a la mesa. Naruto trago saliva un tanto nervioso.

    ―Oh! Pero si aquí estabas― dijo de la nada Jiraiya llegando a la escena y tomando con fuerza al rubio por el hombro para retirarlo de ahí― Se…será mejor que nos marchemos. Tenemos muchos lugares que conocer ¿No es así Naruto?

    ―S…si― respondió siguiéndole el juego, pero eso solo irrito más a Tsudase. ―¡Corre!

    ―¡Largo de mi despacho!― gritó con toda la fuerza que le permitía sus cuerdas vocales. Obviamente, ambos hombres salieron huyendo del lugar lejos de la alcaldía. Tsudase, al librarse de ellos se sienta pesadamente en su silla de cuero negro que se ajusta perfectamente a su espalda.― Chizune, tráeme sake― ordeno con amargura haciendo que la aludida saliera corriendo a buscar el sake de la señora… digo, señorita.

    ―Pfff… de la que nos salvamos esta vez― pensó Naruto en voz alta una vez estuvieron kilómetros lejos de aquel lugar.

    ―Vaya que te gusta meterte en problemas, Naruto, solo tú eres capaz de desobedecer a Tsudase más de una vez seguida― comentaba Jiraiya refiriéndose a lo cometido hacia menos de cinco minutos atrás.

    ―Oye, Jiraiya ¿Podemos ir a comer ramen?― le preguntó con sumo entusiasmo.

    ―Más tarde Naruto, tenemos que ir primero a un lugar― respondió el anciano con suma seriedad haciendo que el catire se extrañara. Ni si quiera se atrevía a preguntarle cual era ese asunto tan importante así que solo lo siguió inocente hasta una enorme tienda de trajes de gala a la que entraron.

    ―Buenos días señor, ¿Les puedo ayudar en algo?― le preguntó uno de los empleados al ver entrar a Jiraiya a la tienda. Naruto estaba anonadado y fuera de sí observando la amplitud de ese local de dos pisos, marcos de oro, madera fina y espejos largos en todas partes. Maniquís de cuerpo completo de color plateado con esmoquin de la mejor marca y probadores con cortinas rojas de calidad. No era un lugar para cualquiera, de eso estaba seguro.

    ―Sí, quiero comprar un traje para el chico atrás mío― respondió Jiraiya haciendo que Naruto volviera a la realidad de un solo golpe.

    ―¡¿Un traje para mí?!― gritó asombrado llamando la atención de todos en la tienda, los cuales lo miraron con mala cara.

    ―No estés gritando Naruto, que no estás en un boulevard― le regañó en un murmuro a lo que Naruto lo miro con cinismo y malcriadez.―Pronto será el cumpleaños de Tsudase y se hará una gran fiesta a la cual los mejores hombres de la industria japonesa asistirán, así como los amigos y familiares claro. Ella me permitió dejarte venir con la condición de mantenerte controlado― le explicó, a Naruto la verdad no le atraía ese tipo de fiestas superficiales y aburridas, así que solo bufo en negación pero antes de poder decir algo, Jiraiya hablo.― Así que más te vale que no te metas con las hijas de los empresarios, son muy guapas y educadas pero son zona prohibida― le advirtió.

    ―Vale, lo prometo― dijo como si no fuese nada del otro mundo. Siempre se había preguntado si las chicas del otro lado de la clase social eran en verdad como lo decían las películas.


    Tenten


    ―No dejaras la escuela y punto. Temari se ha sacrificado mucho por nosotros, no puedes hacerle eso― le regañaba Tenten totalmente en oposición a la idea de Kankuro.― Ya nos las ingeniaremos, pero ni tu ni nadie dejara sus estudios ¿te quedo claro?

    ―¡Bien! ¿Pero qué haremos?― preguntó el castaño un tanto fastidiado.

    ―Al llegar a la casa sacamos cuenta, ahora preocupémonos por Temari.

    Nadie dijo más, tan solo despejaron sus mentes cada uno por su cuenta y más calmados fueron a la habitación de Temari quien se encontraba conversando animosamente con Shikamaru.

    ―Volví― avisó Tenten a gritos con una de sus clásicas sonrisas.

    ―Tenten, llévate a este vago de aquí― bufó Temari con fastidio dejando en blanco a los recién llegados.

    ―Tsk… que problemático.

    ―¿Qué no dejas de decir eso? Estúpido vago― comentó con histeria.

    ―Bien, ¿Qué paso?― preguntó Kankuro en boca de los tres.

    ―Pues me pidió que buscara algo en el armario cuando estaba de lo más cómodo en el sillón― explicó Shikamaru con simpleza haciendo que los presentes le dirigieran una mirada sarcástica.

    ―¡Y todavía sigues ahí!― gruñó Temari molesta desviando la mirada a la vez que cruzaba sus brazos. Si algo no soportaba Temari era a los chicos perezosos y vagos como ese de allí.

    ―Temari, debemos hablar― comentó Kankuro con seriedad aprovechando el pequeño momento de silencio que se había formado. Claro, Temari ya tenía una leve impresión de lo que le iba a decir, por lo que al igual que su hermano, su rostro reflejo la seriedad del asunto. Tenten tan solo se le quedo mirando un tanto molesta, no creía que era el mejor momento para hablar de ello.


    Ino


    Descansando aun en su fin de semana libre, la catira aburrida decidió salir con la única chica que conocía y se llevaba bien: Matsuri. Ambas fueron al centro comercial a ir de compras mientras hablaban de sus vidas como si se tratasen de amigas de toda la vida. Y es que Ino podía ser muy amigable cuando quería.

    No pudieron evitar tocar el tema de Hanabi, Matsuri contaba detalle a detalle todo lo que había pasado ese día en el cochero de los Uchiha. Estaba emocionada realmente e Ino no pudo evitar contagiarse, le gustaba mucho la clase de música que tocaban, y aunque no lo admitiera en voz alta, Karin tenía una voz excelente. Luego, cambiaron el tema y como lo habían hecho miles de veces, empezaron a discutir sobre Momo.

    ―Pero, Ino ¿Le tienes fobia a los animales?― cuestionó Matsuri, quien desde hace ya un tiempo había sacado esa conclusión mas no pensaba que fuera serio.

    ―¿Fobia yo? ¡Ja!― se burló la rubia como si se tratase de la cosa más ridícula del mundo. En definitiva no le gustaba hablar de sus debilidades, o de su vida personal.― Es ridículo, ¿Podemos hablar de otra cosa que sea realmente interesante?

    ―¿Cómo qué?― le preguntó aceptando su sugerencia. Ino era imposible, pero tenía el presentimiento que al final terminaría por enterarse.

    ―No lo sé, hablemos de lo mal que nos cae Karin, eso es interesante― comentó divertida.― Y algo que tenemos en común.

    ―Hmmm… No lo sé Ino, a mi Karin no me cae mal precisamente― dijo pensativa dejando a la catira atónita.

    ―¿Y eso por qué? Te ha tratado mal― le recordó.

    ―Sí, pero no es muy diferente de ti― concluyó haciendo que a Ino casi le diera un ataque ante tal comparación ¿Cómo se le ocurría?―¿Ah? Yo… lo siento, lo dije sin pensar― se disculpó un tanto asustada por su reacción.― Pero, no es mala persona― dijo para intentar explicar su punto.―¿Te acuerdas de Angie? Ella fue la que arruino tu vestido y Karin la boto de la agencia, al parecer no había sido ordenes de ella― le informó esperando que Ino se sorprendiera o se inmutara o algo, pero no hizo nada, solo siguió caminando.

    ―Sí, ya me lo suponía, no es su estilo estar arruinando vestidos― comentó.― Karin es una pesada pero sabe lo que hace. Y ni se te ocurra volver a compararme con ella.

    ―¿Así que esto es a lo que se refieren con “amienemigas”?

    ―Sí, claro― contestó con sarcasmo.

    Matsuri solo suspiro, tratar de entender a Ino era una misión imposible.
     
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    Bonita Lokita

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    Mision imposible?? Ino lleva tatuado el "imposible" por toda su aura -.-
    OJAYO!!! bonita lokita crazy of madara alias la funny llego a ti para mejorarte el dia!!! o aurrinarlo, depende xDD
    Ejem, en pocas palabras me gusto este capitulo, la realidad fue porque metiste el momento de TEmari y Shikamaru como es y me diverti mucho jajaja.
    EEEEEh yo sabia, no era el estilo de Karin el romper vestidos, lo sabia ERA INOCENTE!! aunque no dejo de pensar en lo lido y divertido que es verlas pelearse a toda costa jajaja
    Las revelaciones de Sasuke en los antiguos capitulos me gustaron, tambien la relacion que tienen Deidara e Ino, y con cuerdo con la rubia, su hermano es un idiota en su totalidad -.-
    ¿COMO LA AMA PERO LA ENGAÑA? si sera idiota de veras, y luego la otra que no le pone un limite, aaaaaash que fastidio ¬¬
    Ne, por cierto mi querida compañera Crazy, TT-TT

    ATTE: I'm my tiguer creazy, loka,loka,loka
     
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