Harry Potter Relatos del meroreador

Canuto, Cornamenta y Lunático presentan estos relatos surgidos de las cosas que ocurren en Howards y no todos pueden ver, de algo pueden estar seguros juramos solemnemente que las intenciones no son buenas.



Intuición Femenina


La clase de encantamientos nunca le había parecido tan larga con ese momento a Harry,entre el encargo de Dumbledore, lo que hacía Malfoy en la sala de menesteres el nombre e Ginny retumbaba en su cabeza cada vez más, le parecía de pronto tan graciosa, tan encantadora y decidida que no había nada mal igual que Dean más odioso, pedante y molesto al estar con ella. Sin embargo volvía ese pensamiento “Ron es su hermano y no puede tomárselo bien”.

—Deberías de decirle a Ginny que te gusta Harry—le susurró Hermione mientras daba una risita.

—¿¡Qué!?...¿Ginny?... —Harry se sintió desarmado por un momento estaba seguro que no había dado ni una señal.

Pensó que dar una negativa era lo mejor, luego tenía que salir corriendo de allí antes de que hiciera más preguntas.

—Creo que te has desgastado mucho Hermione, no sé de dónde argumentas algo así. —indicó Harry mientras tomaba los libros que se le escapaban de las manos mientras se levantaba.

—Digamos que es mi intuición…—argumento Hermione riendo divertida con la reacción que había tenido el chico.

El salió corriendo, tropezó con Neville en el pasillo y volvió a correr con medias gafas callendo.

—Media hora, murmurando “pero ella es hermana de Ron” y Dean …—La chica miró al chico en la mesa de enfrente presionando la pluma exageradamente sus uñas el doble de grandes y completamente paralizado. —seguro que lo hizo inconscientemente, la buena noticia es que ya domina los encantamientos no verbales.

 

Hola a todos, en esta ocasión Canuto tiene una pequeña confesión, espero puedan guardar el secreto por él.



Aquella noche cuando el sombrero seleccionador seleccionó a esa chica pelirroja hacia su casa el grupo de amigos de James Potter explotó en vitoreos y festejos hacia el chico como si hubiera ganado el premio anual, el con una sonrisa extendió sus brazos a ella para recibirla pero la chica solo se limitó a dar un respingo y sentarse de espaldas a este por lo que los festejos se transformaron en burlas de parte de sus amigos.

Habían pasado ya varios meses desde su último intento de hablar con ella pero simplemente lo seguía evitando y mucho peor solo parecía andar con ese chico extraño llamado Severus, para empeorar las cosas, ambos solían ser muy afines en la clase de pociones y pasar enormes ratos en la biblioteca solos haciendo los deberes de esa clase.

James por otro lado solía tener un incomparable ingenio que solía usar más que nada en hacer algunas bromas y divertirse, tenía un enorme talento para volar por lo que a pesar de ser de primer año ya perfilaba para ser jugador de quiddich, él como su grupo tenían cierto encanto que los había vuelto muy populares, aunque él hubiera cambiado todo eso por la atención de Lily Evas.

— ¿Por qué esa chica James?, muchas de grados superiores le pareces encantador—indicó Sirius mientras caminaba con él con los libros en los brazos.

—Precisamente por eso Sirius, es un reto, si puedo estar con ella será porque ve algo en mí que le interesa y no solo se limita a repetir lo de otros—respondió James mientras acomodaba sus gafas—hay algo en sus ojos…

Otro chico de aspecto delgado se abalanzó sobre él y ambos rieron.

—¿Lily Evans de nuevo? —preguntó el otro chico.

Sirius lo miró sonriendo aprensivamente y James afirmó con la cabeza.

—Hablaste con ella la última vez ¿no? —cuestionó de nuevo Remus.

—En realidad, ella accedió a encantarlo soltándolo “accidentalmente” luego de hacerlo levitar. —respondió Black mientras James se sonrojaba.

—Al menos te veía mi querido Cornamenta—señaló Lupin dándole algunas palmadas.

James abrió los ojos y se pegó con el puño la palma sonriendo había tenido una idea.

—Eso es, Lunatico podría ayudarnos tu pequeño problema peludo. —afirmó James.

Lupin lo miró casi asustando y Peter un chico fornido que no había hablado hasta el momento asomó su cabeza por encima de sus hombros.

—No, no amigo no me refiero a que lo hagas tú, si no lo que nosotros aprendimos para solucionarlo. —aclaró Potter.

Los amigos lo miraron intrigados.

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Apenas unas pocas semanas después todos los gryffindor la mayoría sospechando que esto ocurriría comenzaron a ver a ver a Lily y James muy juntos, él siempre estaba contando chistes y ella jovial no paraba de reír, al chico no se le había visto más radiante y hasta los profesores vieron mejorar en sus notas y trabajos.

—Hola Lily, hola James realmente se ven bien juntos—saludo Sirius Black encontrándolos en el pasillo.

—Hola Sirius—contestó Lily primero.

—Que hay Canuto, en un rato nos encontraremos por el lago ¿verdad?.

—Claro, claro.

Otros tres chicos de su misma casa se juntaron al grupo.

—Tienes que decirnos como paso—indicó una chica de pelo rizado—como es que pues, ahora van a todos lados juntos.

Lily se sonrojo y James pareció hincharse de orgullo.

—Él, James me salvó…—musitó Lily un tanto tímida.

Todos se sorprendieron a escuchar esto y se acercaron más.

—¿Pero de qué? — cuestionó otra chica rubia.

—Yo salía de clases el profesor Horance me estaba invitando a formar parte de un grupo por destacar en pociones, entonces salí a los pasillos, un enorme perro negro gruñía como si quisiera atacarme, en el momento en el que se lanzó sobre mí, James saltó sobre él y lo sometió para que yo escapara, fue muy valiente. Comenzamos al día siguiente a hablar y me di cuenta que era muy simpático— lo miró sonriendo.

—¿Dices que un perro negro? —preguntó Sirius fingiendo estar intrigado. —suena muy tenebroso. —concluyó dirigiendo una mirada cómplice a su amigo.

-Travesura Realizada-​

 

A veces las travesuras pueden venir de quien menos lo esperan ¿no nos creen?, Canuto cuentales.


Dolores Umbrige salió echando rayos y maldiciones mientras los gemelos Fred y George salían de su oficina apenas tocando los pies del suelo mientras corrían destrampandose de risa. Ron al ver esto sintió que un montón de agua helada lo empapaba y abrió sus ojos de par en par.

—¡Malditos chiquillos majaderos! ¡Los expulsaré! ¡El ministerio pondrá su familia en la ruina! —gritaba furiosa la vieja hurraca.

Ron tuvo esa reacción precisamente por esa razón, esa mujer y el poder que le daban haría que no solo los gemelos pagaran si no toda su familia. Ya estando más cercas notó el porqué de su berrinche, tenía vello en su rostro creciendo más y más para cuando paso junto a él ya era demasiado evidente.

—Se parece al gato de Hermione…—susurró.

Y era así.

Tardó unos segundos en superar la impresión y volver en sí.

—¡Fred! ¡George! ¿¡Pero que están pensando!? —exclamó el chico pelirrojo.

—Nuestros servicios al colegio hermanito—indicó George.

—¿El pequeño prefecto nos acusará? —preguntó Fred.

Ron frunció el ceño y comenzó a seguirlo justo detrás de Umbrige.

—¡¿Qué acaso jamás piensan?! —reclamó.

En ese momento Umbrige se dio la vuelta y lo miró colérica.

—¿Es su hermano? —cuestionó rechinando los dientes la mujer.

Trago saliva y retrocedió.

—N-nos expulsaran, eliminaran a gryfindor para darnos una lección…¿pensaron que diría McGonagall diría de esto?

Pareciera como si la hubiera invocado pues la profesora apareció doblando el pasillo y Ron Weasley sintió desmayarse.

Ella sonreía los gemelos se acercaron con ella que parecía emocionada y sonrió más al ver la bola de pelo que era Dolores Umbrige en ese momento.

— Esta vez sí se lucieron, diez puntos para gryffindor para cada uno. —dijo la profesora con una mueca burlona.

—¡Minerva! ¿¡Qué significa esto!? —chilló la mujer peluda haciendo un berrinche.

—Finite Incantatem—pronunció McGonagall y el pelo se desvaneció—Obliviate— y el rostro e Umbrige quedó perplejo.

—¿Qué hacen aquí? —preguntó grosera la mujer enviada por el ministerio.

—Estos jóvenes de mi casa me ayudaban con una tarea, los llevo a su dormitorio—respondió tajante Minerva.

Umbrige dio un respingo, dio media vuelta y se alejó.

—No puedo esperar que le hacen el día de mañana—dijo la profesora en tono travieso.

—Le encantara profesora—respondió Fred.

Ron la miró incrédulo.

—Ni una palabra señor Weasley —dijo mirando a Ron— o lo culparé a usted de todo. —agregando amenazante llegando a la sala común.


-Travesura Realizada-