Siento irme, volar, cada vez que el horizonte me atrapa, y me lleva como un globo que lleva el viento, sin rumbo fijo, como si ya nada en el mundo importara. Y me eleva, y eleva, hasta que la oscuridad me despierta con su imponente presencia.
Qué rico es soñar. Me ha gustado mucho, sencillo, lleno de fantasía te dan ganas de cerrar los ojos y dejarte llevar por las descripciones.
No sé si todo dependa de como te sientas. Últimamente todo lo que he leído lo he interpretado como algo muy melancólico y tu poema no fue la excepción. Me gustó porque me sentí identificada. Sobre todo esta parte: