Boku no Hero Academia Confesión de amor al estilo Bakugo Katsuki [One-shot]

Contenido oculto: Advertencias. Antes de leer

La historia en si está basada en un fic que próximamente será publicado en ésta sección, que tendrá como nombre: "La vi una vez", previamente publicado en wattpad, pero como una probadita de lo que se viene he querido compartir este pequeño One-shot. Espero que les guste

『One-shot』: Confesión de amor al estilo Bakugo Katsuki.





Estando en la época cercana a los exámenes teóricos y el práctico de la Academia Yuuêi, para la correcta y mejor preparación para héroes, se encontraba una silueta femenina solitaria mirando el cielo. Había transcurrido sin problemas las horas escolares, el profesor Present Mic había intentado que fuese más sociable con su curso de compañeros. Por lo que había hecho que demostrara su buen desenvolvimiento en el inglés para conocer a la gente que la rodease.

Aquella clase había sido un total disparate de Hizashi, pero sabía que le preocupaba la salud mental de ella misma. Como todos en la academia parecían notarlo y preocuparse, metiéndose en temas personales y privados para entenderla.

Aún podía recordar la patética dinámica grupal que había hecho la cacatúa rubia, era algo que hubiera querido que nada hubiese pasado, porque realmente no deseaba interés de nadie hacia ella. Realmente evitaba hacer lío, o resaltar en las clases, pero todo se iba a la mierda por ella misma, parecía ser imposible pasar desapercibida.

—Who is your favorite person? —preguntó Momo Yaoyorozu curiosa, pero con perfil educado.

—Until now? No one —contestó Laviun Avez, cortante.

Era muy obvio que aquello era una verdadera mentira. Ya que desde la prueba del USJ, ella había demostrado una muy directa fijación en el rubio ceniza, aunque aquel día fue una excepción según la pelilavanda, ya que no podía darse el lujo de ir amando a alguien cuando sabía el final de la historia, por lo que mientras menos personas se interesaran en ella, su plan iría mejor.

—It's okay! next question? Come on, cheer up, Avez will not eat you —comentó Present Mic al sentir la tensión plantada en el ambiente.

—Hmm.. Etto... What is your favorite color? —preguntó nerviosa y ansiosa Uraraka.

—My favorite color is lavender, black and amber. And your favorite color? —contesto la mujer pelilavanda, con una expresión menos cortante.

Por alguna razón no podía ser tan maleducada y cortante con ella.

—Ah? ¡Oh! My favorite color is pink and white, thanks for asking —respondió emocionada la castaña.

Present Mic se estaba emocionando al ver que había esperanza ante la convivencia de Laviun Avez con sus compañeros de la Clase 1A.

—Yeahh! Next question, Miss Ashido —vuelve a interrumpir Present Mic, activando sin querer su quirk.

Ocasionando que todos se tapen los oídos por el dolor del sonido. Escuchándose quejidos por parte de los alumnos.

—I'm sorry guys! —se disculpó Present Mic.

—Don't worry, Yamada-sensei. —comentó sin interés.

O eso fingió, no le gustaba que dijeran o se hicieran falsas esperanzas con ideas de que ella pudiese ser una perfecta amiga.

—Yes, is my turn! Avez-san how old are you? —preguntó curiosa la chica rosada.

Bakugo enseguida había puesto atención al momento, esperando saber que contestaría, esperando saber lo que tanto ella resguardaba tras su misterio. Tras el misterio de la cuál se iba enamorando el rubio cenizo y orgulloso. Laviun lo había captado por lo que suspiró exhausta.

—I'm sorry, but the questions is personal.

Justo después de haber contestado aquello, aprovechó la campana de receso para retirarse junto a su loro pelirrojo –amigo plumífero que siempre la acompañaba–, de una manera rápida y ágil en dirección al patio, un tanto resguardado de los demás compañeros.

Por lo que actualmente la pelilavanda se encontraba mirando el cielo nostálgica, odiaba las preguntas que le habían hecho, si fueran más inteligentes se hubieran percatado que el nombre con el cual ellos se dirigen a ella, era falso, y no era su auténtico nombre. En síntesis, su verdadera identidad y pasado ocultado, se podría ir al retrete con sólo un desliz.

—Maldita perra, ¿por qué has huido? —preguntó una voz masculina rozando su cuello y oreja tras suyo.

Ocasionando que un recorrido electrizante y estremecedor diera por toda parte de piel no cubierta por el polo/chamarra violáceo oscuro que traía puesto, jadeando de sorpresa. Intentó alejarse de él, por que sabía que esto no debía suceder.

—No te interesa Bakugo-san —contestó firme luego de haber soltado aquel jadeo.

Sabía de ante mano que aquello había podido ocasionar algo en el rubio cenizo. Por lo que con más razón se estremeció al sentir que Bakugo la acercaba y apretaba contra él, gracias al agarre de su cintura. Él no tenía vergüenza de hacer lo que se le antojaba, más nunca lo admitiría de frente que aquello le agradaba hacer.

—Tsk... ¿Por qué me quieres y no me mereces según tú? —preguntó Bakugo, descolocándola.

Laviun Avez por primera vez en toda su existencia, temía por ser descubierta, sabía que este rubio no era alguien inepto y sacaría sus conclusiones, llegando rápido a su plan inicial.

—Porque causas el revivir de mis emociones, y por lo otro, soy muy bipolar, muy inexpresiva para ti, mereces algo mejor que alguien tan depresiva como yo... —decidió decir algo que no fuese tan mentira.

Ya que de alguna manera era cierta, desde que el sensei del One for All, había hecho que Tomura la olvidase, y ella se creyera la muerte de su mejor amigo –que en su momento se había sacrificado por ella–, la hacía sentir más impotente, deprimiéndose en su encarcelamiento de sentimientos, y por algún tiempo en su estado de mudez, con el que se presentó a primeras instancias. Aunque aquello haya cambiado, ya que desde que descubrió que estaba vivo, empezó a hablar, planeando su ataque a aquel villano que deseaba el poder sobre los héroes.

Si bien a veces le costaba demostrar sus sentimientos, pero parecía que cada vez que estaba cerca de él, sus sentimientos salieran del enjaulamiento y quisiera con todo su ser, que él fuera suyo, como ella suya. Pero si el plan de volver a tener a su mejor amigo y hermano de la infancia de vuelta, constaba de dar su vida por el de él, lo haría, pero... Cada vez que sentía crecer el sentimiento del amor en ella, hacia Bakugo, sentía que las fuerzas por dar su vida sin importarle el resto, se hacían cada vez más difíciles.

Por lo que por eso, era que no dejaba que ninguno de la clase 1A, la conociera más de lo estrictamente necesario. Y que nunca supieran de sus planes, ya que ser heroína, no era uno de sus planes, sólo era un atajo.

Eso más que nadie lo sabía el Director Nezu, el héroe número 1: All Might y Present Mic, sus únicos amigos que sabían vagamente de ello, por una reunión que tuvieron poco tiempo después del Festival deportivo. Por lo que su cuartada estaba hecha. Pero, ¿cómo se zafaba del amor que empezaba a crecer por Bakugo?

Justo cuando los pensamientos de la pelilavanda empezaban a colisionar entre sí, un giro y choque de su espalda contra la pared de la Institución, la hicieron volver al actual y presente momento, encontrándose con la mirada intensamente ofuscada del rubio, quien agarró un tanto rudo su mejilla y se la acarició.

—Óyeme bien maldita perra, que no lo repetiré ni una vez más... —empezó a decir Bakugo.

Ocasionando que ella no quisiese escuchar, e intentara zafarse, pero el rubio cenizo colocó su pierna cercamente y en medio de la entrepierna de ella –si bien ,nunca negó su ser pervertido, por lo que su contrario sabía instintivamente con que armas tomar con ella–, cortando todo paso de ser fuerte, tomándola sin mucho quebradero, paralizándola.

—No Bak-...—fue interrumpida, por que los dedos de Bakugo la silenciaron al posarse sobre ellos.

Mientras que la miraba intensamente. Se iba acercando a ella, mientras que la pelilavanda sentía calor en las mejillas, sólo él sabía como hacerla sentir incómoda, más bien nerviosa.

—Me gustas, y no habrá cosa que no lo haga, tienes dos quirk impresionantes que si quisieras me sacarías el puesto a número 1, pero no te interesa por lo que no eres ningún extra en mi camino. Mi cuerpo se niega a matarte porque deseo que sólo seas mía, ¿lo entiendes maldita perra? Te quiero, y sólo a ti te permito hacer tus malditos berrinches de acercarte y tocarme, aunque los odie, por parte de otros. Porque realmente odio no poder matarte, pero me odiaría más no tenerte ni siquiera puedo dañarte, tks... Eres y serás siempre la mejor entre todas las perras, ¿oíste? —preguntó Bakugo ya cerca de su oreja, para luego morderla con cierta locura y amor en sus ojos.

Ocasionando que sin poder evitar ella gima de dolor pero con sabor a dulzura y ternura. No podía creer que un chico tan bipolar y agresivo se fijara en ella, y más aún correspondiera sus sentimientos, por lo que solo en ese momento se dejó otra vez llevar. Tomando el rostro del rubio entre su mano derecha, y acariciarlo.

—L-lo escuché perfectamente... —tartamudea, y sin más siente labios cálidos, dulces pero rudos sobre los de ella.

Dejando llevarse por aquel beso que tanto deseaba y quería. Su primer beso no robado por ella de Bakugo Katsuki, su primer y único amor. Que sin duda lamentaría mucho lastimar si no pudiese ganar la guerra contra el sensei.

Sólo esperaba que todo el plan saliera bien, y si podía, se permitiría amar por aquel chico rudo y explosivo que le encantaba descolocar siempre que podía.