Al final… Para ti Kaname… El perfecto silencio inundaba mis sentidos, fuego, calor, mi cuerpo aún mantenía la conexión con mi corazón que no se rendía, se regeneraba una y otra vez permaneciendo intacto y dándole fuerza y vida al metal de los cazadores. En mi cuerpo vacío y congelado permanecía una expresión de paz junto a una sonrisa, en el fondo esto era lo que había deseado desde el inicio, lo que hace diez mil años alguien me arrebató sacrificándose ella. Pero desde el principio, éste fue mi destino. Para ti Zero… La impotencia embargaba cada célula de mi cuerpo, los años pasaban uno tras otro y nada cambiaba. Ella permanecía por horas encerrada en esa habitación observando al hombre allí congelado. Sabía sin que me lo dijera cuáles eran sus pensamientos y sus intenciones, pero no la dejaría hacerlo, no la dejaría morir sin haber vivido antes al menos una vida. Sé que el tiempo para ella es inagotable y que el mío tarde o temprano llegará a su fin, pero hasta ese momento, hasta el último latido de mi corazón, quiero hacerla feliz. Que recupere esa sonrisa cálida que me brindaba en mis momentos de dolor, que vuelva a sus ojos esa dulzura con la que me daba aliento. Mi objetivo, siempre sería hacerla feliz. Hasta el final lucharía por ella. Para ti Yuuki… Mientras cerraba los ojos escuchaba con completa nitidez el latido dentro de mí, un latido que no era mío, que pertenecía a la nueva vida que se formaba en mi interior. Ella sería todo lo que me quedaría de él; a medida que los años pasaban, la observaba crecer, me recordaba a él en su cabello ondulado y rebelde, en sus ojos pacientes y amables, en su aura amenazante cuando estaba furiosa… todo me recordaba a él. Un segundo latido afloró en mí, algo completamente diferente, mucho más vivo, más rápido y cuando vio la luz, gorgojó feliz, levantando sus manitos al aire, sin la privación y debilidad del sol, olía a vida y era cálida, con el mismo cabello y ojos de su padre, con el mismo temperamento, la misma audacia y temeridad. Mientras yo dejaba pasar los años. Esperando el momento, hasta que llegó. Porque mi vida sin ellos no tendría sentido, porque mi vida le pertenecerá siempre a ellos.
No he llegado a entender del todo la intención de este relato, la misma forma de presentarlo se me hace confusa, pero eso no ha dejado que hay cosas que se me hacen realmente tiernas. Sobretodo ese último párrafo dedicado a Yuuki, me pareció hermoso. Bueno, se ha hecho algo confuso, pero ha estado bien. En cuanto a ortografía y gramática, perfectos. Simplemente, quizás algo más de claridad hubiese venido mejor, algo más... de contexto, por así decirlo. Espero seguir leyendo cosas tuyas. ¡Un saludo! :)
