Los papeles no eran más que bocetos y trazos extraños y sencillos. —¡Oh...! Así que... ¿existe tal cosa? Supongo que, entonces, nuestro testimonio sobre la inexistencia de pintadas no es preciso... es posible que verdaderamente hubiese habido una pintada ahí. —En ese caso, lamentamos haberte dado tantos problemas... de verdad lo sentimos. Interrogatorio acabado.
Mimi Honda Escuché atentamente las palabras de Pam, hasta el último punto. ¿La habían... matado a golpes? ¡Por el amor de Arceus...! Tensé la mandíbula. Aquello debía ser horrible para Mark... de sólo imaginar que algo así pudiese pasarle a mis pokémon la sangre me ardía en las venas. ¡Bastardos! —Y como imagino, nunca supieron qué fue lo que pasó— dije, llevándome los dedos a la barbilla—. Hmm... Mark también dice en su diario haber descubierto que le ocurrió a Pi, algo horrible que averiguó aquí, en su propio barrio. En la casa de su novia... Y que posiblemente sea esa la razón por la que decidió huir. >> ¿Qué hizo Mark cuando se enteró de la muerte de su pokémon?
—Oh, no... no tenía idea de que Mark hubiese descubierto qué le sucedió realmente a Pi. Cuando la encontraron muerta hace ya un tiempo, él estuvo muchísimo tiempo con depresión, casi sin salir de su casa. Poco a poco fue volviendo a salir, pero el recuerdo de Pi estaría en su mente por siempre...
Así que... eso pasaba. Me alejé de la obra tras agradecerle al hombre y miré el barrio. ¿Que podría hacer en ese momento? Podía intentar que la señora Morgan hablase un poco más. — Hola, ¿señora Morgan? ¿Puedo preguntarle que hacía fuera anoche, cuándo la persiguieron?
—Sí quieres... para hacerlo más formal y todo eso... puedo declarar sobre todos mis movimientos de estos días atrás, desde que iniciaron las amenazas.
¡Declaración! - Lo que hice esta semana (Morgan) Recuerdo que el día en que empezó todo lo de las amenazas estuve fuera haciendo unas compras... Regresé bien tarde y dejé el coche en el aparcamiento. Fue justo a la mañana siguiente... cuando ya tenía aquellas cartas en el buzón. Me quedé encerrada en casa un tiempo, aterrada al haber recibido tantos de esos mensajes... Y cuando salí... bueno, vi la pintada. No tardé en volver a encerrarme en casa, pero al poco tiempo empecé a sentir ansiedad y claustrofobia... Me pasaba antes, cuando me daban los ataques. Y... bueno, salí ayer por la noche, angustiada y sintiendo que las paredes se me caían encima. Fue entonces cuando me persiguió aquel tipo. No debía haber salido... no debía haberlo hecho.
Mimi Honda Asentí. —Volveré si descubro algo más—dije, retirándome del lugar—, gracias por su colaboración. Caminé por la calle en silencio, cavilando. Ahora había razones para explicar la desaparición de las pintadas; pintura autodeleble. Pero... Aunque pudiese demostrar que la señora Morgan no estaba loca, había algo que me inquietaba seriamente. Y esta era a desaparición de Mark. Por supuesto, había obviado mencionarle a Pam que sus coches se encontraban perfectamente aparcados, por lo que no podía haber ido muy lejos... Y la mancha roja que había encontrado Emily en su garaje... Me mordí el labio inferior. Nada de eso hacía pensar en situaciones demasiado halagüeñas. Lo único que podía hacer ahora era comprobar una última prueba. Si mi teoría era cierta y la novia de Mark vivía en el barrio sólo podía ser Rhyme... Y en la casa de Lady Morgan debían estar aquellos documentos que tanto habían inquietado a Mark. La prueba del asesinato de Pi. *** Regresé a la casa de Lady Morgan, pasando entre la seguridad sin saludar siquiera— ¿Para qué? Ya me habían visto antes— y entré dentro de la vivienda. Emily se encontraba hablando con Morgan, así que no quise molestar. Les dirigí una rápida mirada, indicando que subiría a la planta superior; y entré en la habitación de la señora. Nada más pasar la puerta, eché un vistazo a toda la habitación... Era rosa, rosa y pomposa... tal vez demasiado para una persona tan mayor. La amé. ¡Mi habitación en Sinnoh era tan parecida! ... ¡Pero vamos, no era momento para pararse a pensar en eso, diablos! Había cosas que tenía que hacer. Sacudí la cabeza. —A ver... Mark mencionó en su diario algo sobre unos papeles...— murmuré, observando a mi alrededor—. Unos papeles que había dejado desordenados... Encima de una mesa, había un montón de papeles dispuestos en un caótico orden. Me acerqué allí.
Sin nada más que investigar que los lápices y brochas desperdigados por el escritorio, salí de la casa de Mark con la grabación del teléfono que Mimi nos hizo escuchar en mente. Fui hasta la casa del señor Henry y llamé a su puerta. —Señor, necesito que declare.
—Bueno, sufría de ciertos ataques y tenía brotes de delirios. Por suerte no derivó en un trastorno propiamente dicho, pero fue un poco bochornoso... todos los vecinos se terminaron enterando. Y por eso tengo miedo de que todo esto sea una locura mía, si me diagnosticasen eso... Declaración actualizada Recuerdo que el día en que empezó todo lo de las amenazas estuve fuera haciendo unas compras... Regresé bien tarde y dejé el coche en el aparcamiento. Fue justo a la mañana siguiente... cuando ya tenía aquellas cartas en el buzón. Me quedé encerrada en casa un tiempo, aterrada al haber recibido tantos de esos mensajes... Y cuando salí... bueno, vi la pintada. No tardé en volver a encerrarme en casa, pero al poco tiempo empecé a sentir ansiedad y claustrofobia... Si me diagnosticasen el trastorno delirante... podrían inhabilitarme, y eso sería horrible. Y... bueno, salí ayer por la noche, angustiada y sintiendo que las paredes se me caían encima. Fue entonces cuando me persiguió aquel tipo. No debía haber salido... no debía haberlo hecho
Desgraciadamente, Mimi no encontró lo que pretendía encontrar, pues todo cuanto tenía lady Morgan entre esos papeles eran documentos del banco y papeleo relacionado con los concursos de Acuarela. Henry se extrañó ante la repentina orden de Chad. —Oh, pero... ¿sobre qué? Perdona, pero me has dejado impactado, no esperaba tanta vehemencia
—¿Puede hablarme de Mark? ¿qué tipo de relación tenía con los vecinos?—pregunté esperando que surgiese algo de aquellas preguntas—. ¿Sospechaba que mantuviese una relación amorosa con alguien del vecindario?
—Oh, Mark. Bueno, no lo conocía mucho, realmente. Pero si quieres, podría declarar sobre todo cuanto sepa sobre él...
Fue entonces cuando me persiguió aquel tipo. — Me sabe mal esto pero... hay una grabación en la que se ve que no está siendo perseguida por nadie. - Grabación de la obra: Una grabación de ayer por la noche, donde y cuando se produjo la supuesta persecución.
—Necesito preguntarle dos cosas mi buen hombre, en los materiales de la construcción tienen pintura? Y a que hora normalmente usted se retira del trabajo? Tengo entendido que las mezcladoras trabajan por la noche, y alguien debe de preparar las mezclas y dejarlas funcionando, no creó que se lleve poco tiempo cargando todas y cada una de ellas...— exclame tocando mi barbilla mientras miraba con atención al hombre esperando su respuesta. @GalladeLucario
Mimi Honda —¿... Ah? Me quedé pálida, petrificada. ¡No, no, no! ¡Espera, eso no podía ser! Repasé una y otra vez los papeles, uno a uno, pero no eran más que un montón de estúpidas facturas y documentos sin ninguna importancia para el caso. Estrellé la palma de mi mano contra la frente. —¡Ugh!— gruñí, molesta—. ¡No puedo creer que me haya equivocado...! ¡Parecía tan fácil! >> ¿Qué debería hacer ahora...? Descendí pesadamente las escaleras. Ahora mis pensamientos estaban más confusos que antes. ¿Pam mentía? ¿La pareja de Mark podía ser un chico? Yo ya no entendía nada... ¡Había creído firmemente que Rhyme tenía algo que ver! ¡Y sin embargo había fallado en todo...! Si esos papeles no estaban en posesión de Lady Morgan... ¿dónde estaban? —Definitivamente Mimiko Honda no sirve para esto...—me dije a mí misma con un tono de resignación, regresando de vuelta a la sala.
Oh, pero... pero yo juro que me perseguían... puede ser que... no sé, ¿que el asaltante no fuese atrapado por las cámaras? ¿O... o que... manipulasen el video de alguna forma? Oh, por favor, dime que hay alguna prueba de que el video fue manipulado, por favor... no quiero... no quiero estar loca. Dime que no estoy loca.
—No, actualmente no tenemos pintura, dado que aún estamos elaborando la estructura, y... no tenemos un horario determinado, tenemos horarios bastante variables.
¡Declaración! - Mark (Henry) Bueno, a decir verdad, Mark es un chico muy agradable, pero sé poco sobre él. De hecho, nunca he mantenido una conversación con él. Sólo lo conocía de vista, y lo he saludado un par de veces, nada más. Así pues, lamento decirle que no dispongo de mucha más información a este respecto.