—Oh, el señor... dio muchos problemas cuando vivía aquí... y un día, cuando regresó de aquel centro, dejó de salir de casa, y ya no molestaba más... Así que, ahora mismo, es casi como si no existiese. @Amane ¡Declaración! - Ayer por la noche (Doña Catelyn) Verás, hija... ayer por la noche caminaba yo dando un paseo con Herdier. Justo esa tarde había conocido a casi todos los vecinos, y ya estaba familiarizado con ellos. En la noche, paseamos por las obras de reconstrucción... y entonces oí un grito. Era la señora Morgan, pude verlo claramente. Estaba siendo perseguida por alguien, o eso creía, claro. Porrque cuando me fijé, vi que salía corriendo... pese a que nada ni nadie la estaba persiguiendo, ni había ningún indicio de que así fuese. Oh, niña... ¿qué querría decir aquéllo?
Justo esa tarde había conocido a casi todos los vecinos, y ya estaba familiarizado con ellos. — ¿Casi? ¿A quién no había conocido el perro?
Mimi Honda ''Ya, pero su locura sólo hizo empeorar...'' —Oí que fueron Lady Morgan y el señor Henry los que tomaron cartas en el asunto y llamaron a un hospital para que se lo llevase a un centro— asentí ante las palabras de la chica, recordando aquel hecho. Sin embargo, me estaba quedando sin preguntas—. ¿Sabe si el anciano tiene familia, algún hijo o hija que pudiera tomar represalias por ello?
Salí de la casa ligeramente. —Está bien señor, todo está bien, creo que empezamos con el pie izquierdo. Me gustaría hablar con usted acerca de algo importantísimo, ¿cree que eso es posible?
Amigos, amigos, amigos. Aquel sujeto me había dicho que me uniera a alguno de mis "amigos" en la investigación, pero.... ¿Y si no tenía?....En fin, que me uní a la primera persona con pintas hostigadoras que vi; por lo general así se comportan los detectives. —Yo, hola Henry —exclamé, a modo de saludo, a un chico que hostigaba a un anciano con pintas de estar en la últimas. El chico se me hacía muy familiar, pero, entre que no soy muy fijado y que realmente no me importaba, no pude reconocer que ese chico era Ukita, aquel que me acompañó durante un corto tiempo—. ¿Qué haces hostigando a este viejo senil, Henry?
De pronto, este muchacho, Iván, surgió, llamándome Henry, creo que tenía algún truco bajo la manga, pero este era mi caso y no quería entrometidos, ¿o es que venía a ayudar? —Estoy hablando con el conorel... Necesito que me revale una cierta información.—bromeé, quizás el señor entraba en el juego de que era un importante miembro de la policía.
Obviamente, al señor anciano... y a Mark. —Hasta donde sé, no. El viejo era soltero y nunca se casó... aunque no sabemos mucho de su vida, realmente. @Hey Miguel El garaje era tan amplio y grande que parecía toda una nave industrial subterránea. Varias columnas tenían números y nombres, y había varios coches y demás vehículos aparcados; contabas más coches que vecinos, así que era lógico pensar que la mayoría tenía más de uno. Los aparcamientos estaba separados entre sí y eran enormemente espaciosos.
—Ciertamente lo es; y yo estoy muy apenado por el comportamiento de Henry para con usted, señor. No tenía el menor derecho de hacerle lo que.... lo que le hizo, claro —saqué un lápiz y una pequeña libreta—. Me gustaría saber con más detalle lo que le hizo Henry a usted señor, con el fin de que éste sea al fin llevado a la justicia y al fin se aleje de usted.
Una vez seguro de que no se me pasaba nada, fui hasta las columnas y las miré de cerca. Tenían número y nombres, quizás los que dejaban ahí sus autos tenían lugares asignados.
—¿... eres aquel enfermero de la clínica, cierto? Las columnas designaban con números y nombres el límite de las plazas de garaje correspondientes a cada vecino. ¿De cuál de ellos te interesaría examinar?
—Es todo tuyo...— Me fui del lugar sin más, Iván era capaz en todo lo que hacía, como Alf, así que seguro él se haría cargo. Seguí el camino hasta el garaje, donde Chad revisaba unas columnas, no quise interrumpirlo, por mi cuenta noté que habían muchos coches, así que intenté acercarme para verlos más de cerca. @GalladeLucario
La columna de Mark estaba en una esquina de los aparcamientos, algo apartada de los demás. Era un lugar con espacio para hasta 4 vehículos. No obstante, no había nada más que fuese interesante ahí.
—Eeeeeeah, sí.... lo soy. Claro. Y necesito su testimonio de todo lo que pasó en la clínica y de lo que le hizo el señor Henry, señor.
Había tantos coches que era complicado fijarse en uno solo. ¿Los coches de qué vecinos quería examinar Ukita?
Mark... hum... me estaba empezando a resultar realmente sospechoso. — Si me disculpa, debo mirar una cosa... — me alejé con una leve sonrisa y empecé a caminar hacia la zona de construcción. Que problema... En cuánto llegué a la zona de construcción observé que había un obrero ahí. >> ¡Perdone! ¿Puedo hacerle unas preguntas?
—¡Ese Henry, señor enfermero...! Es un rastrero. ¡Y esa Morgan también! Acabé en este centro en el que estoy por su culpa. ¡Que estaba enfermo, decían! ¡Alzheimer! Cómo se atreven...
No había nada fuera de lo normal en la columna del pintor. Fui hasta la de la señora Morgan. Saqué el mando extraño del bolsillo y presioné el único botón que tenía, esperando que ocurriese algo.