The new adventure Ash.

Bueno aquí FanDeFic con un nuevo capítulo, espero que sea de su agrado. Sin más que decir, los dejo leer en paz.

Narrador: En el capítulo anterior nuestro héroe Ash, había dejado estupefacto a todos los que estaban viendo la batalla. Sus familiares y amigos fueron lo que más se sorprendieron, dado a que Ash no era así y más se asombraron por el nuevo estilo de vestimenta del azabache. En este momento está a punto de comenzar la batalla.

—¡Hola Lance! —Saludaba el ojimarron con una sonrisa de confianza y levantando la mano derecha y su fiel compañero lo imitaba en su idioma.

—¡Ash, tanto tiempo! — Saluda el campeón de Kanto con una sonrisa.

Capítulo 15: (Con la voz de Marina) Hoy presentamos: “Ash Vs Lance”.

—Sera una batalla amistosa, 3 vs 3, el último pokémon que quede en pie gana. No se permiten las sustituciones en pleno combate, pero si cambiar después de que algún pokémon caiga. —Explicaba el árbitro.

—¿3 vs 3? —Preguntó el azabache confundido.

—Sí, porque es una batalla amistosa. Pero si es por algún título u otra cosa más importante, es de 6 vs 6. No se permiten las sustituciones en pleno combate, pero si cambiar después de que algún pokémon caiga. —Volvió a explicarle el referí.

—Acaso, ¿Tienes miedo? —Preguntó Lance en tono burlón.

—Nah, solo que, así será más fácil del obtener mi victoria, ¿No lo crees? —Ahora Ash hablaba en tono de burla.

—Bueno, vamos a comprobarlo. ¡Charizard, yo te elijo! —Llamaba el campeón de Kanto a su pokémon y cuando salió hizo su rugido característico.

—Buizel al campo de batalla. —Le pidió a pokémon mientras arrojaba su ball y al igual que el pokémon fuego/ volador este también dio su bramido característico.


En alguna parte de las gradas.

—No puedo creer lo que mis ojos están viendo. —Hablaba Gary muy confundido.

—¿Qué le pasó a mi Ash? —Preguntó su madre de igual manera.

—Valla que creció y cambió estilo de ropas. ¿Pero por qué? —Se preguntaba Oak con su mano derecha en su mentón.

—No lo puedo creer, ¿Ese es Ash? —Preguntaba Misty mientras lo señalaba.

—Parece que sí. —Asintió Gary.

De esta manera estaban todos los conocidos de Ash excepto los que ya lo habían visto antes. Como Dawn, May, Drew y Brock.


De nuevo con Lance y Ash.

— ¡Lanzallamas! —Ordenó el pelirrojo parado firmemente.

— Neutralízalo con Hidropulso. —Pidió Ash muy serio.

Ambos ataques se ejecutaron, de la boca de Charizard salió una poderosa llama. Y el pokémon tipo agua formó con sus manos una especie de esfera celeste y la arrojo directamente al ataque de su oponente. Cuando hicieron contacto una explosión se hizo presente en el campo.

— Ala de acero. —Exigió el de capa.

—Enfréntalo con cola de hierro. —El azabache le dio una orden a su poké.

El pokémon de Lance se acercaba con una potente ala de acero, Buizel se acercaba a Crarizard con su ataque. El ala derecha y la cola chocaron, creando otra explosión haciendo retroceder a ambos pokémon.

—Valla, tu pokémon es muy fuerte, a pesar de la diferencia de tamaños parece que tienen las mismas fuerzas, no esperaba menos de ti. —Alagó el maestro dragón.

—Gracias, pero tu Charizard también es muy fuerte, a pesar de la diferencia de tipo. —Ash lo devolvió.

—Cola de hierro. —Pidió Lance.

—Tú también. —Imitó el ojimarron.

Ambos se lanzaron con sus respectivos ataques, cuando llegaron, ambos se atacaron con una dosis consecutiva de colas de hierro. Ninguno parecía ceder, las colas de los pokés chocaban sin parar, pero la cola de hierro de Charizard fue más fuerte y golpeó a Buizel mandándolo a volar.

—¡Ahora! —Dijo Ash, no obstante el pokémon de este le lanzo un potente Hidropulso, fue un golpe directo, que dañó e hizo retroceder a el pokémon tipo fuego/ volador.

—Ni siquiera le ordenaste a tu pokémon, ¿Acaso hacen lo que ellos quieren? —Preguntó Lance, para hacer enojar a Ash. En realidad quería ver si se desconcertaba de la batalla.

—No, lo que pasa es que, yo y mis pokémon somos uno. ¿Con eso, respondo a tu pregunta? —Dijo Ash sin caer en el truco de Lance.

—Claro. ¡Lanzallamas! —Ordenó Lance y a la vez pensaba. —Sí, creció mucho como entrenador. Pero que quise hacer, si no fuese así, no estaría en donde está. —Pensaba.

—Terminemos con esto, ¡Hidrobomba a todo poder! —El maestro pokémon mandó a su poké a atacar.

Ambos ataques chocaron, pero la Hidrobomba era notablemente más fuerte así que deshizo el Lanzallamas dando un golpe directo al pokémon de Lance, que lo empujo de tal manera que lo estampó contra la pared que estaba detrás de su dueño.

—Charizard ya no puede continuar, Buezel gana. —Exclamó en árbitro de la batalla.

—Regresa. —Dijo Lance para guardar a su pokémon y cuando termino de guardarlo dijo. —Gracias, lo hiciste bien, ahora descansa. —Agradeció.

—Tú también lo hiciste bien, regresa y descansa. —Ash le agradeció a su pokémon y lo guardo.


Todos los espectadores del estadio y afuera se emocionaron mucho y empezaron a gritar de emoción y empezaron a aclamar el nombre de “Ash”.

—Escojan su siguiente pokémon. —Pidió el referí.

—Infernape, yo te elijo. —Llamó Ash a su mono imponente.

—Gyrados, sal. —Sacó a su serpiente marina.

Ambos pokés salieron y dieron su rugido característico.

—Comiencen. —El árbitro dio inició a la ronda dos.

—Habar como respondes a esto Ash, Terremoto. —Ordenó Lance.

—Lanzallamas al suelo. —Pidió el azabache.

No obstante el pokémon dragón/ agua golpeo con su cola el suelo haciéndolo temblar. Pero Infernape ataco el suelo con su lanzallamas así haciéndolo elevarse unos cuantos metros en el aire, así no tendría efecto alguno el terremoto.

—¡¿Qué, lo esquivo?! —Dijo lance impresionado. Todos en la tribuna estaban igual.

El terremoto se detuvo y el pokémon mono bajo al suelo.

—Hiperrayo. —Ordenó Lance y pensó. —Este Gyrados es especial, carga rápido el Hiperrayo, pero le tomara unos 6 segundos.

—Puño certero. —Ordenó el portador del Pikachu.

A una gran velocidad Infernape golpeó con un Puño certero muy potente a Gyrador que ni siquiera había podido terminar de cargar el Hiperrayo. El golpe fue muy fuerte, pero con lo pesado que era Gyrados lo hizo retroceder unos metros nomas, pero le hizo un gran daño.

—¡Que rápido! —Dijo Lance impresionado. —Hidrobomba. —Ordenó sin pensarlo dos veces.

—¡Esquiva! —Dio una orden a su pokémon.

Gyrados atacó con una potente Hidrobomba pero Infernape lo esquivo, pero cuando lo hizo un potente Hiperrayo lo golpeó, creando una explosión en el campo de batalla. Cuando el humo se disipó, se mostró a un Inernape con los ojos como espirales.

—¿Dos ataques consecutivos como esos? —Pensó Ash.

—Infernape no puede continuar, Gyrados gana. —El intermediario de la batalla finalizó la segunda ronda.

—Regresa, lo hiciste bien amigo, descansa. —Ash guardó a su pokémon y lo agradeció.

—Pikachu, al campo amigo, todo depende de ti. —Habló Ash con determinación.

—¿De qué hablas? Te queda a Buizel. —Preguntó el campeón de Kanto un poco confuso.

—Ha, es cierto, se me había olvidado, jejeje. —Dijo Ash.

—Vaya, comencemos. —Habló Lance.


En las gradas.

—Acaso es tarado, ¿Cómo se va a olvidar? —Hablaba Misty un poco confundida y con cierto enojo.

—Mmmm. —Gary dudaba.

—No, Ash no se olvidó, él tiene planeado derrotar a los dos últimos de Lance con Pikachu. —Dijo Oak.

—Me lo suponía. —Dijo Gary aclarando sus dudas. Pero todas las personas que estaban alrededor de Oak lo quedaron mirando a este y a Gary con confusión.

—¿Y ustedes cómo pueden saberlo? —Preguntó un hombre que estaba de espectador.

—Sí, es verdad. —Preguntó otro y los demás esperaban la respuesta.

—Sí es como yo digo, ustedes me darán mil dólares cada uno y sí no es así yo les daré mil a cada uno. ¿Quieren?—Oak le hablaba a los dos que preguntaron. Los demás se limitaron a escuchar sin decir nada.

Los hombres dudaron un poco, pero al final se decidieron y aceptaron.


—Vaya profesor Oak, yo nunca creí que le gustaran las apuestas. —Dijo Misty confundida.

—Sí y yo tampoco pensé que le gustaran. —Dijo el nieto mirando de re-ojo a su abuelo. Delia solo escuchaba.

—No, no me gustan, pero cuando se presenta una oportunidad así no hay que desaprovecharla. —Dijo dejando a todos aún más confundidos. Posteriormente se volvieron a enfocar en la batalla.

—Hidropuso. —Ordenó Lance.

—Esquívalo con ataque rápido y golpea con cola de hierro. — Le ordenó a Pikahchu.

La serpiente marina creó una esfera celeste en su boca se la lanzó a Pikachu, este la esquivo con ataque rápido mientras preparaba para golpear con cola de hierro.

—Cola de dragón. —Exigió el portador de la serpiente marina.

Ambos ataques hicieron tanto, pero el de Gyrados resulto mucho más fuerte, y causó que Pikachu salga volando en el aire. —¿Por qué me atacó con esa cola de hierro tan débil? —Se preguntaba Lance.

—¡Trueno! —Ordenó Ash.

Pikachu que volaba por los aires, por el ataque de Gyrados, le lanzó un trueno muy potente. Fue un golpe directo y crítico, fue tanto que lo dejo K.O. de un solo ataque.

—Gyrados yo no puede continuar, Pikachu gana. —Declaraba el mediador.

—Pero, ¿Un ataque de esos en esa situación? Y esa cola de hierro. —Se preguntaba Lance. —Ash, dime ¿Por qué me atacaste con esa cola de hierro tan débil? —Preguntaba Lance, definitivamente quería sacarse esa confusión.

—Bueno, podríamos decir que, eres muy predecible. —Dijo Ash.

—¿A qué te refieres? —Preguntó confuso.

—Cuando le dijiste a tu pokémon que atacara con cola de dragón, me di cuenta que, si tu ganabas en ese ataque ibas a quedar vulnerable, por qué vulnerable, por el simple hecho en la posición en la que tu pokémon se colocó para ejecutar el ataque de cola de dragón. —Explicaba Ash. Todos estaban impresionados, le había encontrado el punto débil en tan solo unos segundos.

—¿Posición? —Preguntó Lance aún más confuso.

—Sí, definitivamente tu pokémon iba a saltar para ejecutar el ataque, y cuando termine de ejecutarlo se tendría que poner en posición otra vez, le iba a tomar unos segundos, por eso me deje atacar así. También hay que tener en cuenta que el peso de Gyrados es de 235 KG y su altura de 6,5 M. —Terminó de Explicar.

En la sala vip.

—No puedo creer lo que acabo de escuchar. —Hablaba estupefacta Cintia la campeona de Sinnoh.

—Lance está pasando un mal momento. —Misuki hablaba. —Ash es el mejor, no cabe duda.

—En verdad que es el mejor. —Pensaba Marina un poco ruborizada.

—Vaya chico, quien lo diría, no esperaba menos de Ash. —Hablaba el presidente de la liga.

En las gradas.

—Lo veo y no lo creo. —Hablaba Misty sorprendida.

—Has mejorado mucho Ash, Ancio tener una batalla con tigo. —Pensaba Gary sorprendido por lo que acaba de pasar.

—No me lo esperaba, encontrar un punto débil tan complejo como ese, se debe de ser muy observador y requiere de una buena concentración. —Explicaba Oak muy pensativo.

—Pero Ash es todo lo contrario a eso, ¿Cómo puede ser? Bueno, no todo lo contrario pero suele ser impulsivo. —Preguntó la líder de cabellos anaranjados.

—No estoy seguro, pero en este tiempo algo pasó. —Dijo Oak muy preocupado.

—Estoy muy orgullosa de mi hijo. —Hablaba Delia con suficiencia.

En otra parte de las gradas.

—Vaya Ash, bien pensado. Te felicito. —Hablaba un moreno.


Volviendo al campo de batalla, Lance no podía creer lo que había pasado.

—Ash, has cambiado, cuando te conocí eras un chico impulsivo, no pensabas en las mayoría de las cosas, y eras un inmaduro total, sin ofender. Pero ahora eres todo lo contrario, estoy orgulloso. —Hablaba Lance.

—Gracias, la verdad que sí, en verdad cambié. ¿Seguimos? —Preguntó el azabache.

—Claro. Dragonite, yo te elijo. —Lance llamó a su fiel compañero y este se Materializó en el campo. El imponente dragón de Lance se hizo presente.

—Comiencen. —El mediador, dio inicio a la batalla.

—Comencemos con aliento de dragón. —Ordenó Lance levantando el puño cerrado.

—Enfréntalo con Trueno. —El azabache daba la orden.

No obstante, Ash sacó su C-Gear, y llamó a Marina.

Ambos ataques colisionaron en la mitad del campo, creando una explosión de humo que hacía imposible la visualización del adversario, tanto Dragonite como Pikachu estaban atentos a cualquier movimiento.

En la sala vip, un C-Gear estaba sonando. Esto llamó la atención de los presentes.

—¿Ash? —Preguntó la chica de cabellos cerúleos incrédula, los presentes se sorprendieron al escuchar tal nombre. —¿Qué pasa? —Preguntó un poco confusa la chica, los demás campeones y Misuki miraban a Marina.

—Esta victoria, te la dedico a ti. —Se escuchó una pequeña oración, cosa que fue audible para todos.

—Ha-aa-a, bueno, Gra-cias. —Tartamudeó la chica con un notable sonrojo. No obstante se cortó la llamada.

—Hacer eso en plana batalla, ¿No es mucha confianza? —Preguntó Cintia un poco confusa.

—Él se tiene confianza, pero más confianza le tiene a sus pokémon. —Charles, le aclaro la duda a la campeona.

—Vaya, vaya, así que ustedes dos se traen algo. —Dijo Misuki con una sonrisa pícara.

—No, no, no es eso. Yo, yo y Ash solo somos amigos. —Dijo para luego pensar. —Pero no me molestaría si fuésemos algo más.

—Sí, sí, está bien.

Volviendo al campo de batalla, el humo se empezaba a disipar. Apenas se pudieron ver, ambos entrenadores, dieron su orden.

—Ala de acero. —Exigió el de capa.

—Cola de Hierro. —Ahora Ash ordenaba.

Ambos pokémon se lanzaron con sus respectivos ataques, llagaron al centro del campo, y chocaron, la cola de Pikachu y el ala de Dragonite. En ataque se mantuvo, ambos seguían chocando sus extremidades, ninguno parecía ceder. Pero la fricción que causa ese tacto, creo una explosión haciendo ceder a los dos.

Ambos pokémon estaban agotados, pero no parecían tener alguna herida.

—¡Meteoro dragón! —Ordenó el campeón de dos regiones.

—Devuélveselo con cola de hierro. —Pidió Ash.

Dragonite creó una especie de bola de fuego en su boca, apuntó hacia arriba y la lanzó, no obstante se separó y se dividió en varias bolas de fuego. Pikachu esperaba el ataque. Cuando los ataques del dragón se acercaban el ratón eléctrico preparo si cola de hierro y cuando llagaron le empezó a devolver las esferas a Dragonite.

—¡¿Qué?! ¡¡Recházalas con cola de dragón!! —Dijo Lance un poco exaltado. Posteriormente el dragón amarillo comenzó a desviar su propio ataque a diversas partes del campo.

—¡Bien el señuelo funciono, tacleada de volteos! — Ordenó el ojimarron.

Pikachu que ya había terminado de devolver las esferas del ataque de Dragonite, se acercó a éste, que estaba vulnerable por estar desviando su propio ataque, no se dio cuenta de la presencia de Pikachu y éste lo acometió con una potente tacleada de volteos, que lo hizo estampar contra la pared, dejando a un Dragonite con los ojos como espirales.

—Dragonite ya no puede pelear, Pikachu gana. Por lo tanto, el ganador de esta batalla es, Ash Ketchum, actual campeón de Unova y maestro pokémon. —El mediador finalizaba la batalla. Todas las personas del estadio estaban como loco, gritaban el nombre de Ash y Lance a más no poder. “Ash, Lance, Ash, Lance” y así sucesivamente.

—Regresa, lo hiciste muy bien, toma un buen descanso. —Lance regreso a su pokémon con una sonrisa y se acercó a Ash, éste estaba acariciando a su fiel compañero que se encontraba en su hombro.

—Buena batalla. Ash definitivamente eres un gran entrenador, tenía algunas dudas al principio pero me las despejaste en esta batalla. Tranquilo, para la próxima ganare yo. —Dijo Lance extendiéndole la mano.

—Claro. Gracias Lance, quería divertirme en grande y lo hice en esta batalla. —Habló, recibiendo el gesto.

Posteriormente el campeón de dos regiones se fue a su camerino.


En las gradas, Oak estaba recibiendo el dinero que ganó al apostar. Por otra parte, Misty, Delia y Gary estaban muy contento de por la victoria de Ash y decidieron ir a buscarlo para felicitarlo. Claro no sin antes llevarse a Oak, quien estaba contando los billetes.


Ya habían pasado unos cuantos minutos, el azabache había llevado a sus pokémon al centro pokémon del estadio y luego se encamino a su camerino.

…

Ash se encontraban en el camerino con Marina, pero Ésta no decía nada, se encontraba apoyada contra la pared y mirando para abajo, y Ash se encontraba en una silla giratoria frente a un espejo y rompió el silencio.

—¿Qué te pareció la batalla? —Preguntó el portador del Pikachu.

—Estuviste increíble… ¿En verdad, esa victoria me la dedicaste a mí? —Preguntó la chica sin mirarlo a los ojos.

—Claro, ¿Qué te hace pensar que no? —Preguntó confuso.

—No, nada, solo qué me parecía raro. — Dijo un poco tímida. Posteriormente Ash se levantó de su silla y se acercó a Marina, se puso frente a ella y e hizo que su frente hiciera contacto con la de ella y le dijo.

— ¿El qué te pudo haber parecido raro? —Le preguntó con una voz tierna el azabache.

Ambos estaban sonrojados, pero se notaba más en Marina. Ambos sintieron que sus corazones se aceleraron, esa sensación, que uno puede llegar a considerar amor.

Ambos jóvenes estaban cada vez más carca uno del otro, estaban a unos cuantos centímetros. Pero, la puerta del camerino se abrió de golpe.

Ash y Marina miraron confusos, las personas que acabaron de entrar los quedaron mirando a ambos y se sorprendieron mucho.

—¿Mamá, Prof. Oak, Gary Brock y Misty? Preguntó Ash incrédulo, luego de eso Ash y Marina se percataron de los cerca que estaban y se separaron rápido.

— ¿Ash? —Preguntaron los recién llegados incrédulo de lo que acabaron de ver, excepto Brock que algo sabía del nuevo Ash.

— ¿A caso no les enseñaron a golpear la puerta antes? ¿Y por qué están así, como si hubiesen tenido una especie de pelea? — Preguntó Ash mirando de arriba abajo a los presentes. Por parte de Marina estaba sonrojada y mirando para otro lado.

—¡¡Les dijimos que no pueden entrar!! —Se escuchaban los gritos de los hombres de seguridad, cuando llegaron al camerino trataron de sacar a los que estaban demás en el lugar, pero el azabache los detuvo y les dijo que los dejara y se fueron sin protestar.

Narrador:Y por el momento dejamos esta historia aquí, si quieren saber que pasa, averígüenlo en el próximo capítulo.


Bueno, hasta aquí el capítulo, espero que haya sido de su agrado y si fue así, denle like y comenten, ayuda mucho. Bye bye.

 

Capítulo 16: (Con voz de Brock): Hoy presentamos: “Confrontaciones y revelaciones”.


— ¡Ash ¿Que significó todo eso?! —Preguntó Misty, llamando la atención de éste.

— ¿De qué hablas? —Contestó con una pregunta.

—Lo de hace un rato, en el campo de batalla, y esa situación en la que tú y ella estaban. —Le dijo.

—Si Ash, ¿Qué fue todo eso? —Preguntó Gary extrañado.

—Bueno, Misuki me dijo que entrara con estilo al campo de batalla. —Explicó el ojimarron.

— ¿Quién es Misuki? —Preguntó Oak.

—Yo soy Misuki y soy una de las administradoras de la liga y actual representante de Ash. —Se escuchó una dulce voz proveniente de la puerta. Posteriormente todos voltearon a ver.

— ¿Y desde cuando tienes una representante? —Preguntó Oak.

—Desde qué se volvió una de las celebridades de las ligas pokémon. —Respondió la chica peliazul, sin dejar de sonreír.

—Eso no explica la situación en la que te encontrabas con esa chica. —Dijo la pelinaranja apuntando de Marina.

—Lo siento, no era mi intención. —Se disculpaba la chica haciendo una reverencia.

—No tienes por qué disculparte Marina. ¿Misty qué me estas reprochando, acaso eres mi mujer? —Preguntó Ash mirando fijamente a Misty. Esta interrogación sorprendió a todos.

—He, no, no, nunca sería tu mujer, además yo no quise decir eso… —Misty, no terminó de hablar porque Ash le puso el dedo en los labios.

—Shhh, entonces no tienes derecho a reprochar nada. —Le dijo. Misty abrió los ojos como platos, no podía creer lo que escuchó y de esta manera estaban los presentes, excepto Misuki, que no entendía muy bien que pasaba y Brock, que sabía que eso era debido al accidente que tuvo.

—Bueno, bueno, no es momento para esas discusiones. Ash, los periodistas van a tener una entrevista con tigo. Tranquilo ya arregle la tarifa por esa entrevista. —Todos miraban a Misuki, como se llevaba a Ash del brazo y este se llevaba a Marina.

— ¡Espérenme aquí! —Dijo Ash antes de desaparecer de la vista de sus amigos.

…

Misuki ya había llegado a una sala, donde varios reporteros estaban esperando al azabache.

El lugar era bastante amplio, las paredes estaban pintadas de blando, tenía cerámica de color blanco y negro y solo una ventana y dos puertas. Contra una de las paredes había una mesa, tres sillas y dos guarda espalda delante de estos objetos. Misuki le dijo a Ash se sentara en el medio, ella del lado derecho y Marina del lado izquierdo.

— ¿Por qué tengo que estar yo aquí? —Preguntó la chica acompañante de Ash en esta aventura algo confusa.

—Acompañas a Ash en esta aventura. —La representante de Ash dio una sencilla explicación y luego se dirigió a los reporteros y dijo. —Bueno doy comienzo a esta entrevista, solo tienen 15 minutos, y hagamos esto ordenadamente, uno a la vez y levanten la mano y Ash elegirá. —Terminó. Posteriormente todos levantaron las manos.

— ¿Si? —Preguntó el ojimarron apuntando a uno.

— ¿Qué opina acerca del campeón de esta región? —Preguntó.

—Bueno, Lance es un gran entrenador, un gran amigo y sin duda es mucho más fuerte que yo. —Respondió asintiendo con la cabeza y con los ojos cerrados. Posteriormente Ash escogió a otro periodista.

— ¿Cómo puede decir eso, después de ganarle de esa manera? —Preguntó uno de los integrantes de los medios, recordando la derrota de Lance.

—Bueno, podemos llamarlo suerte. —Contestó Ash mirando al emisor de la pregunta. Todos se sorprendieron al escuchar esa respuesta. No obstante Ash escogió a otro corresponsal.

Mientras Ash estaba en su entrevista, en su camerino se llevaba a cabo una conversación.

—Es muy modesto, él no es tan así que digamos. —Decía Misty un poco confusa de lo que escuchaba en el LCD del cuarto.

— ¿Qué habrá pasado aquí? —Preguntó Oak con su mano derecha en su mentón. Por parte de la madre del campeón no decía nada, se limitaba a escuchar.

Volviendo al chico entrevistado.

— ¿Cómo conoció a la señorita Marina? —Preguntó otro.

—Bueno en todo caso esa pregunta se la tendrían que hacer a ella. —Dio a entender Ash.

—Señorita Marina ¿Cómo conoció al Campeón? —Le preguntó a la chica.

—Bueno, nos conocimos en Ciudad Celeste. Yo estaba corriendo con desesperación, el simple hecho de que mi ex novio me engañara con otra, me dolió mucho, por eso corría. Fue entonces cuando sin querer choqué a Ash, y no me di cuenta. Ambos caímos al piso, pero yo seguía llorando, él pensó por su culpa yo estaba llorando, y se disculpaba, pero luego yo le dije que no era su culpa de que llore. Él me dijo que una chica tan hermosa como yo no debería estar llorando, después me invito a comer algo y le conté lo que lo sucedido entre mi ex y yo. El me consoló, me invito a viajar con él. Siempre sostuvo ahí para mí, y cada vez que estaba triste, él trataba de sacarme una sonrisa. —Explicaba Marina con cierto rubor en sus mejillas, Ash estaba un poco ruborizado.

—Interesante. —Dijo. Posteriormente Ash eligió a otro.

— ¿Hay alguna relación amorosa entre ustedes dos? —Preguntó otro.

—No, solo somos amigos. —Dijeron ambos al mismo tiempo.

—Bueno, se terminó la entrevista, si quieren alguna entrevista privada, solo llámenme. —Aclaraba Misuki. Ulteriormente los guardias, ayudaron a salir a los periodistas, Quedando solo Ash, Marina y Misuki en la habitación.

— ¿Dime que fue todo esto de la entrevista Misuki? —Preguntó el ojimarron.

—Como soy tu representante, tengo que hacer esto. —Dijo un poco nerviosa.

— ¿Cuándo dije que eras mi representante? —Interrogó confuso.

—Bueno, yo lo decidí, como soy una de tus fans y por eso también te dije que entraras con estilo y mandé a hacer una canción para que puedas entrar al campo de batalla. —Explicaba.

—Me haces ver como un agrandado así, y yo no soy así. —Dijo.

—Ok, ya no lo aré más. Déjame que te expliqué. Como yo te voy a representar, todas tus solicitudes tienen que pasar por mí, yo arreglo el dinero y ambos ganamos. Se dividirá así, un 70% para ti y 30 % para mí. Es una oportunidad de ganar más dinero. —Terminó de explicar.

—Mmmm, 70/30 creo que está bien. —Dijo el azabache pensativo.

—Bien, yo te depositaré todo en tu cuenta y te mandaré un recibo para que veas que no hay nada raro. —Terminó.

—Tranquila, confío plenamente en ti. —Dijo el azabache.

—Gracias no te decepcionaré. —Dijo saltando de emoción.

—Ash, creo que te están esperando en el camerino. —Recordó la chica de cabellos cerúleo.

— ¡Ha, es cierto, lo había olvidado! No vemos luego. —Dijo para luego salir del lugar con Marina.

—Adiós. —Dijo Misuki y luego se retiró.

…..

Ya había pasado unos minutos, Ash ya estaba en su camerino, pero antes paso por el centro pokémon del lugar, para recoger a sus pokémon.

—Bueno Ash Ketchum, ¿no te parece qué tienes que darnos algunas explicaciones? —Preguntó su madre y todos asintieron excepto el moreno.

— ¿Qué quieren saber? —Preguntó confuso.

—Estas muy cambiado, ¿Qué paso? —Preguntó la líder de Celeste.

—Eso es fácil de responder. Las personas cambian con el tiempo. —Dijo, aunque sabía que él no cambió por el tiempo, sino que por un accidente, que lo benefició bastante.

— ¡¿Qué?! ¡¡Devuélveme al Ash que yo conocí hace tiempo!! —Dijo Misty zamarreándolo para todos lados.

—Tranquila Misty, el Ash que conociste, ya no existe. Un nuevo Ash ha nacido. —Dijo el campeón. Brock estaba a punto de decir algo, pero prefirió después preguntárselo a solas.

—Me agrada. —Dijo Oak con los parpados bajos.

—Mi niño ha crecido. —Dijo su Madre encantada.

—Pika, Pika. —Dijo el pokémon asintiendo.

Posteriormente se escuchó unos golpes en la puerta y Ash fue a abrir. Para luego ser abrazado por una hermosa rubia de ojos de ojos celestes.

— ¿Elesa? —Preguntó incrédulo el de la setas en las mejillas sin recibir el abrazo. Por alguna razón el azabache sintió lo mismo que senté cuando habla, abraza Marina. Su corazón se aceleraba.

—¡Te he echado de menos. —Decía entre lágrimas y sonrojos la rubia.

Los presentes estaban incrédulos de lo que veían, a diferencia de los demás Marina y Misty estallaban de celos.

—¿Qué está pasando aquí? —Interrogó la chica de cabellos cerúleos un tanto enojada, a diferencia de esta, Misty estaba a punto de explotar.

—¡¿Y ahora que sucede?! —Dijo quisquillosamente la líder de Celeste.

—Lo siento amigos, pero pueden dejarme un rato a solas. Les daré explicaciones a ustedes después. —Pidió el azabache. Posteriormente todos se dispusieron a salir. —Marina, tú no. —Terminó. La chica obedeció, a Misty no le gustó nada esa petición, pero se la tuvo que bancar.

Ya una vez todos fuera, quedaron sólo cuatro integrantes en el camerino: Ash, Marina, Elesa y Pikachu.

—Elesa, ¿Qué sucede? —Preguntó un tanto nervioso por esa pregunta embarazosa.

—¿Me estas cargando Ash? —Preguntó con los ojos cristalinos.

—Lo siento no lo recuerdo. Creo que debió ser otros de los efectos colaterales del accidente. —Dijo apenado el azabache mientras miraba el suelo. —Pikachu que ya sabía lo que pasaba, solo se limitó a escuchar.

—¿Qué accidente? —Preguntaron las dos chicas al mismo tiempo un poco confusas.

—Después de haber ganado en Unova, yo viajé a Kanto en ferri. —Contaba el azabache. —Pero en un entrenamiento que tenía con mis pokémon. Uno de los ataques me golpeó y… Me caí del quito piso del ferri. —Las chicas no podían creer lo que escuchaban. —Pero por alguna razón tardé ese tiempo en recuperarme, ya que un ser humano normal con el golpe que me di, tardaría siete meses en reponerse. Después me enteré que eso fue gracias a los poderes del aura. —Marina que algo había comprendido, ya que ella había visto algo del “entrenamiento” de Ash. Pero al escuchar esa historia tan triste ambas se lanzaron a abrazar al azabache. Los ojos de las hermosas chicas se tornaron cristalinos. Estuvieron unos treinta segundos abrazados y Pikachu veía la escena conmovido. El corazón del azabache ya no aguantaba más, palpitaba a mil por hora, definitivamente las acciones de las chicas fueron muy confortantes y él no quería que se acabara, hasta que.

—Pero, ¿Por qué no me lo dijiste? —Preguntó Marina confusa de ése secreto separándose del ojimarron. —Eso quiere decir que no confías en mí. —Dijo la chica a punto de llorar.

—Y en mí tampoco. —Dijo Elesa tapándose la boca con las manos.

—No, no es que no confíe. Solo es algo que no quisiera recordar. —Hablaba el Ash entre verdades y mentiras, esto era debido a que no quieran que ellas se enteraran debido al accidente.

—Tienes un buen punto, también sería algo que yo no quisiera recordar. —Dijo Marina entendiendo.

—Sí, es verdad. Yo tampoco lo querría recordar. —Apoyaba la rubia pensativa. —Eso quiere decir que no te acuerdas lo que paso en la fiesta en tu honor en Unova; el beso, la promesa de que me escribirías. Fue culpa del accidente, que no recordaras eso. Entonces, eso quiere decir, que tú ya no recuerdas, y no tenemos un vínculo especial como el que armamos esa noche. —Dijo la modelo, para luego derramar unas lágrimas. Ash y Marina miraban, a éste le dolía verla así, así que se arriesgó y la abrazó. Marina que tenía celos, comprendía la situación y ella tampoco quisiera estar en lugar de la rubia, así que no dijo nada.

Elesa aprovecho la situación y preguntó.

—Ash, ¿Cuáles son tus sentimientos hacía mí? —Preguntó, entre sollozos, mientras abrazaba fuertemente al azabache. Marina se exalto con tal pregunta, ella sabía que todo dependía de lo que Ash contestara, ellos podrían estar juntos o no.

—Bueno… —Dijo Ash mientras se separaba y miraba hacia abajo. —Estoy en una confusión, mi corazón está en una encrucijada total. —Dijo.

—¿A qué te refieres? —Preguntó Elesa, aún más confundida, pero no los ojos llorosos. Ella cría que sabía la respuesta.

—Yo, no sé qué decir. Si se los digo, ambas dirán que es algo ilícito. —Dijo Ash aun mirando el suelo.

—Dinos. —Pidió Elesa.

Mi corazón se acelera a mil por hora, cuando estoy contigo. —Marina al escuchar esas palabras se le vino el mundo abajo.

—Pero por alguna razón siento lo mismo por Marina, cabe destacar que esto me pasa desde que la conocí. Y si eso es amor, las amo a las dos. Ahora sí pueden hacerme lo que quieran, golpéenme, insúltenme. Es algo inmoral, pero es la verdad. —Terminó derramando unas lágrimas. Las palabras honestas y sinceras del azabache tocaron el corazón de ambas, haciendo que derramaran unas lágrimas de felicidad. No obstante el ojimarron fue abrasado por ambas chicas. Ash abrió los ojos por la actitud de las chicas.

—Te amo Ash. —Dijeron ambas al mismo tiempo con los ojos llorosos.

—Yo quiero que tú seas feliz, si tú dices que amas a otra chica pero si tú eres feliz así, con dos chicas. Yo lo acepto. —Dijo Marina, entre sollozos.

—Sí, yo también lo acepto. Por más que sea una relación inmoral. No me importa mientras tú seas feliz. —Dijo Elesa al igual que Marina. —Sabes, ahora me estoy dando cuenta de que eres más alto y tienes músculos. ¿Por qué? —Preguntó confundida la chica.

—Bueno, me puse a entrenar con Lucario. Es por eso. —Hablaba feliz el azabache, mientras abrazaba a ambas.

—Bueno, te ves mucho mejor con músculos. —Dijo Elesa para luego darle un beso en los labios a Ash, un beso corto, pero se demostraban el afecto que se tenían el uno al otro.

—¡Maldición! Se me adelantó. —Pensó Marina un poco exaltada y celosa por tal escena. El beso no duro mucho, fue como un “pico” debido a que Marina se encontraba tan cerca.

—Ash yo, también, quiero uno, de esos. —Dijo Marina un poco apenada y sonrojada. Posteriormente Ash dejo a Elesa y le dio un tierno beso. Elesa se dio vuelta para no ver eso, bueno todavía no se acostumbraba. Pero fue corto al igual que el de Elesa.

—Ash, tenemos, que, tener una, cita. — Dijo Elesa nerviosa. —Ya que bueno, yo y Marina no nos conocimos, bien. —Terminó algo nerviosa y sonrojada. Marina al escuchar una cita también se sonrojo.

—Bueno esta por proponer lo mismo. —Dijo Ash con una sonrisa. —Y dime, ¿Quién se hace cargo del gimnasio? —Preguntó.

—Lo deje para poder venir a verte y estar contigo. —Dijo aún más sonrojada

—Y ahora no quiero que nos separemos más. —Dijo el azabache para abrazar a ambas chicas.

—Nosotras también. —Dijeron ambas aceptando el gesto muy felices. No obstante se escuchó que alguien golpeaba la puerta del camerino y Ash fue a abrir.

—Ha, hola Cintia, Lance, Charles. Pasen. —Dijo el azabache y los presentes entraron.

Una vez adentro, una conversación se inició.

—Felicidades Ash. —Alagaba Cintia con una sonrisa.

—Sí, Ash. Felicidades. —Apoyaba el presidente de la liga.

—Fue una gran batalla, pero demostraste ser mejor que yo. No será así para la próxima. — Elogio Lance.

— ¿Y, Plubio? — Preguntó Ash.

— Bue-no. — Dijo Cintia y Charles le hacía señas de que no diga nada. — Lo siento, pero tiene que saberlo. —Posteriormente se escuchó otra vez que llamaban a la puerta y el azabache fue a abrir.

—Amigos, pasen. —Dijo al azabache contento.

—Tienes que dar explicaciones Ketchum. —Dijo Misty entrando al camerino, al igual que los demás entraban.

A unos cuantos metros dentro del cuarto, Charles y Cintia hablaban en susurro.

— No le digas eso, se va a armar. Conozco a Ash. —Decía lo más bajo posible.

—No, él tiene que saberlo. — Misuto la campeona de Sinnoh. — Lo siento pero ya está decidido. Sí él lo dijo que se haga cargo de sus palabras. —Sentenció.

—Pero si están todos los campeones aquí. — Dijo Oak.

— Yo quiero sus autógrafos y una foto con ellos. — Hablaba Misty, Brock y Gary apoyaron a la peli-anaranjada.

—Pero falta Plubio. —Dijo Gary pensativo y eso hizo recordar a Ash.

—¡Ha, es cierto! ¿Qué dijo Plubio? —Preguntó Ash a Cintia.

—Bueno, dijo que, el no vendría por tres razones: Una; porque su madre se enfermó y tiene que cuidarla. Dos; dijo que ya sabía los resultados. Y Tres; dijo que no tendría sentido ver a un niño batallar, que se convirtió en campeón a duras penas. — Los presentes estaban estupefacto por lo que había dicho un campeón acerca de otro campeón. Todos miraron a Ash. Éste estaba con la cabeza agacha y los puños cerrados.

—Con que eso dijo. —Habló el azabache con enojo. —Él dijo que sabía los resultados porque pensaba que Lance iba a ganarme. —Dijo. Los presentes escuchaban detenidamente. —Si tanto piensa que no estoy a nivel de un campeón. ¡¡Señor Charles, arregle una batalla en Hoenn por el título de campeón de esa región y que sea rápido. Le voy a dar una lección a ese tipo!! —Terminó dirigiéndose al presidente, para luego levantar la mirada, los presentes estaban atónitos por la petición de Ash, y ver que su expresión había cambiado totalmente; de una mirada alegre y sonriente, cambió a una seria, enojada y determinada.

—Ash, no tienes que hacer esto. —Habló Gary. —Has la vista gorda a lo que pasó recién. —Terminó.

—Sí Ash. —Apoyó Misty y tanto triste por la situación.

—Las personas ganadoras no critican: Solo observan, callan y demuestran con actos. —Dijo muy serio el ojimarron muy sabio.

—Bueno, eso es verdad. —Dijo Oak pensativo.

—Es verdad, se pasó con lo que dijo. —Añadió Brock.

— Yo le voy a quitar lo bocón. — Hablaba Ash. — Presidente Charles, quiero esa batalla lo más rápido posible. — Exigió Ash.

—Ash, cálmate. — Hablaba la chica de cabellos cerúleos.

— Sí Ash, no ganaras nada. — Apoyaba Elesa.

— Sí, voy a ganar algo. Le serraré la boca a esa cotorra, y por cotorra le arrebataré el título de campeón de Hoenn.

—Bueno Ash, si pido una batalla de esas, tendrías que esperar al menos un mes, haciendo lo más rápido, no es fácil, hay que llenar mucho papeleo, además de que tu representante todavía no está informada de esto. — Explicaba el jefe del comité de la llama.

—Solo arregla esa batalla. Es lo que más quiero en estos momentos. —Dijo Ash.

—Bien, lo aré. —Aceptó Charles.

—Espero que se prepare. Porque yo he fallado una y otra vez en mi vida, por eso he conseguido el éxito, y no voy a dejar que nadie hable así de mí. —Terminó con una expresión muy seria.


Narrador: El campeón de Hoenn: Plubio, ha herido los sentimientos del azabache, y éste está dispuesto a darle una lección. Solo les puedo decir que sigan esta emocionante historia hasta el final, recién comienza y no los decepcionara.


Hasta aquí lo dejamos hoy, espero que les haya gustado, ya que bueno, es uno de los capítulos que más disfrute escribiendo. Si les gustó, like y comenten.
Bueno, quería mostrarles unos dibujos que he hecho. Pero antes que nada quería que supieran que, no soy bueno para dibujar otros dibujos. Y también dibuje a Misuki, la representante de Ash. Claro que éste último me salió mejor, debido a que yo lo inventé.

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Aquí Ash y Marina, básicamente lo que está pasando es que nuestro protagonista favorito, le dice algo "lindo" a su novia: Marina y ésta se sonroja

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Recuerden que Misuki tiene el cabello largo hasta la cintura, cosa en esta imagen no se aprecia, debido a que tiene el rodete.

Espero que les sea de su agrado. Hasta la próxima.

 

Capítulo 17: (Con la voz de Gary)-Hoy presentamos: “El nuevo trabajo de Ash”.


Narrador: En el capítulo anterior, Ash, se había enterado de las cosas que hablaba Plubio a sus espaldas. Nuestro héroe al saber esto pidió al presidente de la liga y jefe del comité de la llama una batalla, donde algunos de los campeones derrocara al otro, y éste accedió. Ash quiere darle una lección, debido a que tanto le costó llegar a donde está ahora, y nada más para que venga alguien a decir esas cosas.

—Bueno, entonces esperare a que pasé el mes, para poder batallar contra Plubio. Yo le avisaré a Misuki de lo sucedido, para ponerla al tanto—. Hablaba el azabache y los presentes le ponían mucha atención—. Pero por el momento, pasare un tiempo en Paleta—. Terminó.

— ¿Enserio, no viajaras? —. Preguntó Delia una lágrima en su ojo izquierdo de felicidad, posteriormente se la limpió.

—No, ya no viajaré. Por el momento me quedaré en paleta—. Afirmaba Ash.

—Bien Ash, quiero tener una batalla con tigo—. Pidió Gary alegre.

—No, no ganaría nada—. Gary, el Prof. Oak, Misty y Delia se sorprendieron por lo dicho—. Sería lo mismo que entrenar solo, o aún peor. No ganaría nada, tus pokémon no están al nivel. —Hablaba Ash con cierto ego. Los ya nombrados estaban incrédulo de lo que había dicho Ash—. Era broma, jaja, ¿Se la creyeron? —. Terminó con una pregunta mientras reía.

— ¡¡¿Y tú que crees? Si apareces siendo maestro pokémon, campeón, con otro estilo de ropas y muy maduro mental y físicamente!! —. Regañó Misty muy enojada. Todos los presentes se rieron por la verdad que había dicho la líder de Celeste.

— Lo siento, lo siento—. Se disculpaba el ojimarron con la mano derecha en la nuca.

Y así pasó el tiempo hasta que llegó la hora de despedirse. Con el incidente que hubo Misty olvido preguntar acerca que de la relación que Ash tenía con Marina, y mucho menos se imaginaban, que Elesa, la ex líder de gimnasio de la región Unova, tendría una relación con el campeón actual de dicha región. Y éste, les pidió que no dijeran nada acerca de su relación ilícita de tres personas. Cuando el ojimarron estaba de rumbo a pueblo Paleta, en una de las limusinas que les prestó en jefe del comité de la llama, llamó a su representante y le contó lo sucedido, ésta comprendió y le dijo que esperaría a que llegué el momento, Misuki le dijo a Ash que ella se encargaría del resto y que no se preocupase, que lo tendría al tanto.

….

Seis horas después ya habían llegado a pueblo Paleta, más bien se encontraban en la puerta del laboratorio del Prof. Oak llamando a la puerta. Posteriormente Tracey abrió.

—Ha, hola, pasen—. Hablaba el artista pokémon feliz de verlos.

—Hola Tracey, ¿Cómo va todo?—. Preguntó el dueño del lugar entrando, y los demás lo siguieron.

—Bien, muy bien. Hola amigos—. Saludaba el de la banda en la cabeza.

Los chicos saludaron y entraron. Una vez adentro, en el living de la residencia Oak. Éste era grande: había una mesa ratona de vidrio y sillones a su alrededor, una alfombra azul debajo. Las paredes eran color celeste al igual que el techo.

Habían sillones de uno, tres. En que estaba solo se encontraba sentado Oak, y al costado derecho, en el sillón de tres, se encontraba: Marina, Ash y Elesa. De enfrente estaban: Delia, Brock y Misty. Y enfrente de estos en diagonal: Gary y Tracey.

—Gran batalla Ash, en verdad le encontraste un punto débil muy complejo y además tenía mucha lógica—. Alagaba el artista sentado en el sillón.

—Va, enserio, no fue nada. Creo que gané por suerte—. El entrenador hablaba mientras reía y se sobaba la nuca.

—No seas modesto Ash. Eres un gran entrenador—. Elogiaba Elesa la ex líder de gimnasio.

—Sí, ella tiene razón—. Apoyaba la chica de cabellos cerúleos.

—Pero, me llamo mucho la atención la entrada al campo de batalla. ¿Qué fue eso? —. Preguntó el de remerita verde muy confuso.

—¿Y por qué cambiaste de estilos de ropa? —.interrogó la madre del campeón.

—Sí, es como si fuera que tienes algún interés por la moda—. Hablaba la pelinaranja.

—Bueno, qué les puedo decir, las personas cambian con el tiempo. — Respondió el azabache, con los ojos cerrados y ambas manos a los costados de los hombros, como diciendo “ni idea”. Todos se sorprendieron al escuchar eso. Tracey después de esto, decidió irse a dormir, debido a que la noche anterior se había quedado hasta tarde haciendo algunos trabajos.

—Ash, ¿Podemos hablar? —. Preguntó el moreno con una expresión seria.

—Claro, ¿Qué pasa? —. Interrogó.

—A solas, por favor. —Insistió, para luego marchase a la cocina, cosa que llamó la atención de los presentes. Posteriormente Ash se levantó y lo siguió. Cuando ambos desaparecieron de la vista de los demás, Misty preguntó.

—¿Y ustedes, que son de Ash? —. Cuestionó.

—Yo soy Elesa, ex líder de gimnasio y actual compañera de Ash. Era líder en ciudad Mayólica en la región de Unova—.Respondió con algo de elegancia.

—Yo soy Marina, soy acompañante de Ash en esta aventura, soy de Johto—. Informaba la chica.

En la cocina de la residencia Oak.

—Ash, ¿Por qué no dices acerca del accidente? —. Preguntó el ex líder de Plateada un poco confuso.

—No quiero que se enteren Brock, si se enteran se preocuparan, y no quiero eso ya que me encuentro muy bien—. Decía el ojimarron—. Además, tampoco quiero que se enteren que cambié gracias al accidente. Por eso dije lo que dije recién—. Terminó.

—T u secreto está a salvo con migo—. Dijo el moreno con confianza mientras sonreía.

—Gracias Brock, eres un gran amigo—. Contestó Ash.

Entiendo, bueno era eso, vamos—. Dijo mientras regresaba al living, y el campeón lo seguía.

El maestro y el doctor pokémon entraron al living donde se encaraban todos sus amigos.

—¿De qué hablaban? —. Preguntó curiosa Misty.

—Nada importante—. Contestó el azabache, mientras tomaba lugar entre sus novias.

—Cosas de chicos—. Dijo Brock tomando asiento.

—Bueno Chicos, creo que se está haciendo muy tarde y quisiera ir a descansar—. Hablaba Ash estirándose y bostezando.

—Sí, es verdad. Mañana haremos una comida familiar a eso de las 4P.M. para celebrar el regreso de Ash. Están todos invitados—. Invitó Delia Ketchum muy alegre.

—Gracias señora Ketchum, estaré ahí. ¿Hay que llevar algo?—. Preguntó.

—No se preocupen por eso, con su asistencia es más que suficiente, yo invitaré todo—. Dijo Ash. Posteriormente todos agradecieron y aceptaron la invitación.

—Delia, ¿Qué te parece si hacemos esa comida al aire libre? En la reserva—.Propuso Oak.

—Es una gran idea. ¿Qué te parece Ash? —Preguntó a su hijo con su típica sonrisa.

—Claro, por mí no hay problema—. Contestó el azabache—.Gary, ¿Puedes avisarles a los demás? —. Preguntó Ash mirando al aspirante a profesor pokémon.

—Claro…—. Gary no pudo terminar de hablar, en ese entonces suena el C-Gear de Ash, llamando la atención de los presentes.

—Hola Ash, solo llamaba para avisarte que mañana a eso de las 9 A.M. tienes que estar en tal lugar, te mandaré la dirección por Gmail—. Explicaba Misuki, la chica representante del ojimarron.

—¿Se puede saber para qué? —. Preguntó confuso.

—Claro. Apenas terminó la batalla con Lance, contando la manera en la que entraste al campo de batalla más en nuevo estilo de vestimenta y la canción que yo hice componer para ti, y además tu nuevo físico, incrementó tu fama al máximo. No te lo dije antes porque quería que tomaras un respiro. Bueno la cuestión es; me llamaron de una empresa de modelaje, ellos me dijeron que admiraron tú nuevo físico y querían tenerte en la portada principal de las revistas: “Quiero ser un maestro pokémon”, “El entrenador del mes” entre otras. El contrato ya está firmado—. Ilustró la peliazul con una sonrisa detrás del aparato comunicativo. Los presentes no podían creer lo que escuchaban, tenían los ojos como platos, pero se limitaron a escuchar.

—¡¡Qué!! ¿De qué estás hablando? ¿Acaso me preguntaste si quería ser “modelo”? ¿Además con qué autoridad firmaste ese contrato?—. Dijo Ash sobre exaltado e incrédulo de lo que escuchó.

—Ash, desde que aceptaste que yo sea tu representante, aceptaste los términos y condiciones que yo tenía y tú los aceptaste. No te quejes—. Los espectadores de esta discusión, solo se limitaban a escuchar.

—¡¡¿De qué estás hablando?!! ¡¡Nunca firmé tal contrato!! —Exponía el azabache.

—Solo mira el lado positivo, es una buena oportunidad para ganar dinero, pagan muy bien—. Razonó Misuki del otro lado.

—Solo te importa el dinero ¿Verdad? —. Preguntó el campeón con la típica gotita de sudor.

—Si me importara el dinero, no te hubiese propuesto un 70/30, ¿No crees? —Dijo la emisora de la llamada.

—Tienes razón. Bueno, mándame las direcciones al Gmail. Mañana a las 9A.M. estoy en donde me dijiste—. Ash se resignó al darse cuenta que no podría ganarle a Misuki, definitivamente ella tenía la última palabra.

—Bueno Ash, como ya dije, esta todo firmado, solo tienes que ir de 9 a 11A.M. y te vas a tú casa, el resto déjamelo a mí y como siempre te depositaré el 70% de las ganancias en tu cuenta bancaria de campeón. Bye bye—. Dijo Misuki para luego cortar la llamada.

Ash iba a decir algo, pero no pudo debido a que Misuki cortó la llamada.

—Creo que no tendría que tomar esas decisiones sin consultarte antes—. Misty le hablaba al campeón.

—Lo sé, pero qué se le hacer. Bueno, entonces cuando me desocupe, mañana. Prepararemos todo, Gary avísales a los demás.

—¡Claro, no hay problema! —. Gary estaba alegre.

—Bueno creo que es mejor que nos vallamos, ya es muy tarde—. Dijo el azabache mientras se levantaba de su lugar y agarraba sus cosas.

—Ash, ¿Y nosotras que hacemos? —Preguntó Marina algo confusa y Elesa asentía.

—Ustedes vienen con migo—. Explicó Ash, la madre de este no tuvo objeción alguna, después de todo eran sus compañeras.

—Prof. Oak, me rejaría quedarme está noche aquí, es solo por hoy. —Preguntaba el moreno.

—Sí, yo también, ¿Puedo? —Misty se al igual que Brock preguntó.

—Claro, no hay problema, ustedes siempre serán bienvenidos aquí—. Aceptó el profesor pokémon.

Posteriormente a esto Ash, sus “compañeras” y su madre se dispusieron de sus amigos, el prof. Oak los acompaño hasta la puerta y se fueron a su casa. Por lo tanto Gary les enseñaba sus habitaciones a Misty y Brock y en el camino se pusieron hablar.

El grupito de chicos, se encaminaba por un corredor del recinto de Oak.

—Ash cambió bastante, ¿No creen? —. Hablaba Misty un poco preocupada cosa que ambos chicos notaron.

—Sí, es verdad, pero, ¿Qué te preocupa? —Preguntó Gary curioso.

—Si Misty, ¿Qué pasa? —Insistió Brock al ver la preocupación de la chica.

—Es qué, si Ash cambió tanto, eso significa que ya no es el Ash que conocimos. El Ash despistado, el que siempre está feliz. He notado que está mucho más serio—. Explicaba la líder de gimnasio pensativa.

—Bueno, eso es obvio—. Dijo Gary comprendiendo.

—Pero aun no entiendo cuál es el tu problema Misty—.Brock trataba de descifrar el enigma.

—Nada, solo que, extrañaré al viejo Ash—. Dijo la peli anaranjada nostálgica.

No obstante llegaron a una habitación, era en la cual Misty pasaría la noche y ésta se fue a descansar. Ulteriormente los dos chicos se encaminaron unos metros y se encontraron con la habitación en la cual Brock pasaría la noche, se detuvieron y hablaron por unos segundos.

—¿Qué crees que le pase a Misty? —. Preguntó Gary confuso y pensativo.

—Creo que está sintiendo cosas por Ash—. Brock sacaba conclusiones.

—Pero si Misty está de novia con Tracey, ¿De qué hablas? —Hablaba el aspirante a profesor.

—¡¡Que!! —, Grito en susurro. —No lo sabía. Bueno si tenemos en cuenta eso, no sé—. Dijo. A Gary le salió una gotita estilo anime.

—¿Pero por qué lo ocultan? —. Preguntó el moreno.

—Supongo que no quiere lastimar de algún modo a Ash—. Dijo el nieto del profesor Oak.

—Y por eso estaba triste, porque sabe que Ash ahora cambió, cree que va a captar esos sentimientos más rápidos y los lastimaría aún más—. Dedujo el criador pensativo.

—Pero, no creo que Ash haya cambiado tanto como para saber acerca del amor—. Habló en tono burlón y los parpados cerrados.

—No te creas tanto, recuerda como entro Elesa al camarín de Ash. Yo dudo mucho que una compañera de viajes haga esa escena—. Recordó el doctor.

—Sí, tienes un buen punto—. Dijo Gary absorto de lo que Brock decía.

—Pero lo veremos mañana… ya es muy tarde Gary—. Habló el ex líder bostezando.

—Es cierto, ya es muy tarde, no vemos mañana—. Saludó Gary para posteriormente irse del lugar, más bien a su habitación.

En la casa de los Ketchum, Ash, Pikachu, Delia, Marina y Elesa habían llegado, para ser precisos, Delia estaba abriendo la puerta para entrar, cuando la abrió, las personas ya nombradas entraron.

—Pika, pi—. Dijo el pokémon amarillo feliz cuando entró y observó.

—Bueno chicas esta es mi humilde morada, siéntanse como en su casa—. Dijo Ash entrando a su casa.

—Gracias Ash. —Agradeció la ex líder de Unova con una deslumbrante sonrisa.

—Sí, gracias—. Y Marina la apoyaba con el mismo gesto.

—Bueno chicas, vengan les mostrare su habitación—. Dijo la madre del campeón apuntando hacia las escaleras.

—Yo dormiré en el sofá, una puede dormir en mi habitación—. Manifestó el azabache.

—¡¡Yo dormiré en la habitación de Ash!! —. Dijeron ambas chicas levantando el tono de voz, cosa que sorprendió bastante Delia.

—Vamos, no peleen, pueden solucionarlo con un “piedra, papel y tejeras” —.Declaró el azabache—, Pero solo el mejor de uno.

—¡Bien! ¡Piedra, papel, tijera! —. Dijeron ambas haciendo los gestos con las manos un tanto enojadas. Finalmente, Marina hizo tijeras y Elesa piedra, definitivamente, ganó Elesa.

—¡Gané, gané! —. Exclamó la rubia con felicidad, al ver que había ganado el juego.

—Pika, Pika, pi—. El inicial que estaba en el piso asentía a la exclamación de la Elesa.

Marina dio un suspiro de resignación, y al igual que ese suspiro ella también se resignó. Antes de que delia diga algo Ash se adelantó.

¿Bueno, quieren comer algo antes de irse a dormir? —Preguntó el azabache con su típica sonrisa.

—No Ash, comimos en la limusina de regreso al pueblo. Eres un glotón—. Dijo la ídolo pokémon.

—Yo no iba a comer, solo les pregunte a ustedes para atenderlas bien, ya que son mis invitadas—. Con los ojos entre cerrados y una gota estilo anime.

Esto causó la risa de las tres mujeres, excepto la de Ash.

Bueno Marina, Elesa vengan por aquí, les enseñare sus habitaciones—. Pidió la señora Ketchum. No obstante ambas la siguieron. Por parte de Ash se fue al living y se recostó en el sofá y se puso a pensar, desafortunadamente para él, ése no era el que se hacía cama.

—Vaya, una relación 3, es algo ilógico, al menos para mí. Ya que o nunca he tenido una novia. Pero por el otro lado, es reconfortante. Sí—. Pensaba el azabache mirando el techo, Pikachu quien se encontraba recostado en la caja torácica de su dueño. Le pregunto en su respectivo idioma.

—¿Pika, pi?

—Nada, solo pensando en las cosas locas que han estado pasando al igual que las decisiones que he tomado en estos últimos meses—.Respondió sin dejar de mirar el techo.

—Pika—. Dijo el pokémon diciendo “es verdad”.

—Pero no me arrepiento de nada—. Terminó. Posteriormente Ash y Pikachu cerraron los ojos para quedarse dormidos. En la habitación de Marina, ésta al igual que Ash se encontraba pensando. La habitación en la que estaba, no era muy grande, las paredes eran de color turquesa, y solamente había una ventana, una cama, una mesa de luz y un televisor. Marina se encontraba tapada, mirando a su castado que se encontraba una vidriera. Mirando el inmenso cielo, totalmente cubierto de cuerpos celestes y el satélite natural del planeta en el que habitaban, en su fase llena.

—A mí me gusta Ash y estoy segura de eso, solo que, bueno, una relación así, es algo como, mmm, no sé, raro diría yo. Pero no me arrepiento. Elesa es más hermosa que yo, claramente Ash me pudo haber dejado por ella, pero él dijo que nos ama a ambas y lo dijo con una honestidad y sinceridad en la cual no se veía una sola pisca de mentira. Yo lo amo y si esto lo hace feliz, así será—. Dijo Marina para cerrar los ojos y dormirse. En la habitación de Elesa, ella estaba, totalmente dormida, con su típica sonrisa deslumbrante, llena de confianza, era obvio que ella tampoco se arrepentía de la esa “relación”.

…

Y así paso el tiempo, las centésimas, los segundos, los minutos y las horas pasaron. Eran las 6 a.m. y Ash ya estaba levantado. Precisamente se estaba preparando el desayuno para él y sus pokémon sigilosamente para no despertar a nadie. Cuando terminó de prepararlos los guardo en una bolsa, se cambió, se puso unas ropas de gimnasia, agarro a Pikachu en sus brazos y salió del hogar. Comenzando a trotar por el pueblo paleta.

— ¿Pika? —. Preguntó el pokémon adormilado, refregándose el ojo derecho con la pata izquierda.

—Lo siento por despertarte, nos ejercitaremos un poco—. Habló Ash mientras paraba, sacaba una pokéball del bolsillo y sacaba a Lucario. Después de que saliera Ash lo saludo al igual que Pikachu y el pokémon mega devolvió el saludo.

—Entrenaremos un poco antes de ir a ese “trabajo” que Misuki aceptó sin mi consentimiento. Supongo que habrás escuchado, ¿Estoy en lo correcto? —. Preguntó.

—Sí, sí escuché—. Contestó el pokémon bostezando.

—Pero primero desayunaremos—. Dijo para mirar a los alrededores, luego de unos segundos, encontró lo que buscaba—. Vamos a ése árbol—. Dijo mientras caminaban, Ash le dijo a Lucario que después de esas secciones de fotos. Cuando llegaron al sitio que el azabache, éste de la bolsa donde había guardado las cosas, sacó; una mantel, comida para sus pokémon y para él. Posteriormente sacó a sus pokémon restantes; Charizard, Sceptile, Buizel e Infernape. Para disfrutar de una comida rápida de mañana. Lo que Ash se había preparado era: waffles con crema, miel u jugo de naranja.


Narrador: El capítulo 17 de esta historia ha terminado. Ash se está preparando para las fotos que tiene que sacarse para portadas de revistas. Además de que se está por celebrar en regreso de Ash a su pueblo natal: Kanto.

Bueno aquí lo dejamos, espero que les guste y sí es así, like y comenten. Bye bye.

 

Bueno queridos lectores, espero que les haya gustado la historia hasta entonces.

Capítulo 18: (Con la voz de Marina): -Hoy presentamos: “El favor de Charles y el candidato perfecto de Ash”.


Narrador: En el capítulo anterior, Ash había despertado temprano como acostumbraba a hacerlo últimamente, para así poder entrenar, para luego irse a las secciones de fotos que tenía pendiente. A pesar de que él no quería hacerlo, lo tenía que hacer porque ya Misuki había firmado el contrato.

Una hermosa mañana despertaba en Kanto, en pueblo paleta. El sol empezaba a mostrase, haciendo así un el cielo anaranjado. Los Pidgey cantaban desde las copas de los árboles, otros surcando los cielos.

Después de un agradable desayuno, Ash guardo a sus pokémon con excepción de Pikachu. Posteriormente a esto ambos se pusieron a correr.

…

Y así el tiempo pasó y el momento de las secciones de fotos llegó, Ash se fue a su casa a darse una ducha, para luego cambiarse y ponerse las ropas que habitualmente lleva. Cuando salió de su casa, llamó a Charizard, se montó en él y con Pikachu atravezaron los cielos para luego revisar las direcciones que le había mandado Misuki.

— Bien, queda cerca, está en ciudad Celeste —dijo el azabache, el pokémon fuego/ volador lo escuchó y se dirigió al lugar ya nombrado. Solamente les tomo unos quince minutos llegar a la cuidad natal de la peli anaranjada. Cuando llegaron Ash buscó exactamente el lugar que decía la dicción y cuando lo encontró le ordenó a Charizard que descendiera, al descender le agradeció y lo guardó.

Era un edificio, de 6 pisos de color gris, había dos guardias de seguridad en la puerta y esta era giratoria. Ash entró, pero no sin antes ser detenidos por los guardias. Éstos vestían de negro con detalles rojos y eran altos.

— Alto señor. Su identificación —dijo uno de los guardias parándole el paso al campeón.

— No tengo identificación, pero espero que mi nombre sirva, soy Ash Ketchum —habló el azabache, posteriormente su pokémon saludo en su idioma.

— Ah, lo siento señor, lo están esperando, adelante —dialogó el guardia avergonzado y nervioso de no reconocer al campeón de Unova. No obstante el otro guarda asintió de igual manera.

— Gra-cias, pero no hace falta, tanta, como se dice, mmm, formalidad —habló el ojimarron, para luego entrar.

El lugar era amplio y elegante. Ash caminaba hacia delante por una alfombra roja con flecos dorados, que conducía a la recepción. Las paredes estaban pintadas de color dorado con detalles blancos, las baldosas de verde marino, el techo de blando y de él colgaban un candelabro, también de color dorado.

Cuando llegó a la recepción un hombre de al menos unos 30 años de edad, castaño, con un esmoquin lo entendía detrás de una mesa de 1 metros de alto por 2 de ancho.

— Campeón, lo esperábamos. El administrador lo espera en el último piso, habitación 45— dijo el hombre —el ascensor está a 8 metros a su derecha.

— Gracias —contestó un el azabache mientras caminaba al lugar para subir al ascensor, para así poder subir arriba.

Unos cuantos minutos después, estaba frente a la puerta 45, del último piso.

— Creo que debe de ser acá— dijo y su pokémon asintió, posteriormente tocó la puerta. Alrededor de unos segundos, una chica de pelo color rosa, ojos color azules y muy linda de su anatomía humana. (El cuerpo de ella se lo dejo a su imaginación) y además de voz muy linda y suave.

— ¡¡Haa!! ¡¡Pero si es el mismísimo Ash Ketchum!! Y ¡¡El legendario Pikachu!! —dijo incrédula la chica, haciendo una reverencia. Al campeón no le sorprendía hasta que—. Cuando me dijeron que vendría, pensé que era una broma. Disculpe mis modales. Adelante su eminencia —terminó para darle paso al maestro pokémon.

— Hola, ¿Su eminencia? ¿Por qué? —preguntó perplejo el azabache mientras arqueaba la ceja—. ¿Pika? —inerrogó el poké al escuchar que lo llamaron legendario.

— Miku es su mayor fan. Además de que está loca por ti, en todos los sentidos—. Un hombre aparecía detrás de la chica que aún estaba con la cabeza agachas. Éste hombre era un poco más alto que Ash, para ser exactos una cabeza. Usaba gafas, tenía el pelo color verde y ojos del mismo color, aparentemente tenía unos 26 años—. Soy Martin, el encargado de todo éste lugar.

—Ya no tienes que hacer esa reverencia— dijo el azabache con la gotita estilo anime mientras se rascaba la mejilla izquierda con su dedo índice. Posteriormente la chica se levantó y preguntó.

— ¿Me da-daría un autógrafo y se sacaría una foto conmigo? —preguntó la chica con vergüenza y sonrojada agachando un poco la cabeza.

— Claro, pero después de lo que vine hacer —dijo Ash.

— Que vestimenta más chic, Ash —alagaba el Martin.

— Gracias.

— Ven, sígueme —pidió el administrador del lugar mientras se daba la vuelta y caminaba a la hacia el interior de la habitación. No obstante Ash con Pikachu lo siguieron, y Miku los siguió.

— ¿Alguien puede ser tan fan mío, cómo para llamarme “eminencia”? —preguntó el ojimarron inconscientemente pensativo, haciendo énfasis en la palabra cursiva. Miku al darse cuenta de lo dicho por el azabache se sonrojo un poco.

— Sí, en el caso de ella puede ser posible, ella decía: “Yo quisiera conocer personalmente a Ash Ketchum, es mi sueño más grande, él es muy lindo, le gusta la moda y es muy intrépido”. Eso decía, y lo decía de una manera muy, mmm no sé cómo decirlo, pero trabaja pensando en ti, cuando duerme sueña contigo, se la pasa hablando de ti. Es súper fanática tuya Ash. ¿Puedo tutearte, verdad? —informó y terminó con una pregunta Martin. Esto causo que Miku se sonroje y se avergonzara, tapándose su cara con ambas manos mientras movía la cabeza a ambos lados y caminaba.

—No es cierto, sólo qué, bueno sí, pero no es tan así. —dijo Miku—. Soy solo un fan, no es que esté enamorada de usted —dijo avergonzada.

—Pero… Yo nunca dije que estés enamorada de mí. Y pueden tutearme ambos. —dijo Ash con una sonrisa mientras caminaba entre medio de ambos. Pikachu solo se limitaba a escuchar, pero le causaba gracia, pero reía para sus adentros.

—Dejamos la conversación para después, ¿Qué tal si empezamos? —preguntó el administrador Martin. Por parte de Miku se sintió más calmada y le agradeció a Arceus, por no dejar que esa conversación siga.

En la habitación que se encontraba era más amplia que las demás, muy elegante, había cámaras por doquier. Contra una de las paredes, había como una lámina de color blanco y en el suelo una alfombra del mismo color y sobre esta, un banco del mismo aspecto.

—Hacia tu derecha tienes el vestidor, Miku es una de las encargadas de los vestuarios. Ella te dará ropa que te pondrás para las fotos. —avisó el gerente mirando a Ash.

—Pikachu, ¿Quieres comer algo? —preguntó el mismo director.

—¡Pika! —dijo el poké saltando a los brazos del emisor de la pregunta.

—Comimos antes de venir. —dialogó el campeón.

—No hay problema, Ash. —habló el dueño de lugar.

—Sígueme por favor. —dijo la encargada de vestuarios para caminar a la puerta donde se encontraba toda clase de ropas, posteriormente el maestro de maestros, lo siguió y pensó.

—Pikachu es un glotón. —posteriormente le salió una gotita estilo anime.

Pikachu fue invitado a comer por el dueño del lugar, Ash fue a conducido a los vestidores y Miku lo acompaño. No piensen mal, Miku solo pasó un rato a buscarles las prendas que se tenía que poner, para sacarse las fotos.

15 minutos después, Ash salió con un Jean chupines negros, unas deportivas verdes, una camisa mangas largas desabrochadas donde se dejaba ver el torso del ojimarron, el cabello seguía normal, pero había algo que resaltaba en Ash, él usaba unas gafas de sol.

—Bien, bien, me agrada tu nuevo look. Definitivamente eres la estrella que esperábamos. —habló Martín admirando la vestimenta de Ash.

— Gracias, la verdad que me gustó mucho éste nuevo look. —

—¡¡Bueno, empecemos con la sesión de fotos de Ash!! —el gerente alzó su voz para llamar la atención de todo los presentes y comenzar con lo dicho.


Mientras el azabache comenzaba con su nuevo trabajo por así decirlo. En otro lugar, para ser más exactos a unos kilómetros de pueblo Paleta, una chica se encontraba yendo a dicho pueblo. Ésta vestía con una camisa mangas largas que terminaba como falda de color lila y sandalias del mismo color, también llevaba una calza de color rosa. Su cabello era castaño y sus ojo color rojo, aparentaba tener unos 17 años de edad.

— Bien, Gary, espérame. Pronto estaré ahí. —Hablaba esperanzada la chica, mientras caminaba por aquellos lugares.


En pueblo paleta el profesor Oak ya estaba levantado junto a Tracey, ambos estaban preparando de comer para los pokémon de la reserva, mientras que Gary, Brock y Misty estaban por desayunar.

En la residencia Ketchum, Delia, la madre de nuestro campeón, estaba preparando el desayuno. Mientras que Elesa y Marina seguían dormidas. Era algo extraño, ya que últimamente la chica de Johto acostumbraba a levantar a estas horas más o menos, bueno eso fue durante el entrenamiento de Ash con Lucario.

El tiempo pasaba. Para ser más exactos, faltaba media hora para que termine la sesión de fotos de Ash, en estos momentos éste se encontraba tomando un descanso. Bueno, estaba comiendo una hamburguesa, junto a su inicial, Miku y Martin.

— Dime Miku, ¿Desde cuándo eres mi fan? —preguntó el portador del Lucario más poderoso del mundo un poco intrigado. Pikachu no decía nada, solo se limitó a oír y comer su comida al igual que Martin.

— Bueno, para ser precisos, desde que ganaste la liga Unova. —contestó la chica un poco nerviosa.

— Sí, es tu mayor fan, Ash. Básicamente, tiene posters y fotos de ti en todo su cuarto. —en eso suena el C-Gear de Ash y éste contesta.

— Hola señor Charles. —saludaba el ojimarron.

— Hola Ash, ¿Cómo vas con tu nuevo trabajo? —preguntó el de barba para luego reír.

— No me hagas acordar. —Dijo desviando la mirada. Los presentes solo se limitaron a escuchar—. Misuki me contó todo, jajaja. —Se reía el jefe del comité de la llama.

— Sí, sí. En éste momento estoy un poco ocupado. ¿Llamas para algo importante? —interrogó.

—Sí, básicamente. Mira como sabrás Kanto tiene aeropuerto, pero en ciudad Verde, por eso estoy buscando a un buen arquitecto, para que lleve a cabo los planos del aeródromo que se llevará a cabo en Azafrán. Él antiguo aeropuerto de cuidad Verde lo queremos convertir en una fábrica de pokébolas. Solo te llamó para preguntar. ¿Tiene a alguien en mente? Obviamente a esa persona se le pagará lo acordado entre S.A.L y X persona. Pero como ando muy ocupado, necesito que me hagas el favor de encontrar a alguien que sepa de “dibujos” por así decirlo y si lo consigues me llamas y así acordamos un lugar para hablar del tema. Claro es solo un favor, ahora la pregunta es: ¿Puedo contar contigo? —el presidente de las ligas interrogó.

—Claro, no hay problema. —Aceptó el azabache para luego pensar—. Tracey dibuja muy bien, pero le preguntaré antes. —Eso pensaba el azabache.

—Otra cosa. La batalla con Plubio, no te la puedo conseguir debido a que en dos meses es la liga de campeones. En ella participarán los campeones de elite 4 y los campeones de las últimas ligas, Misuki te dará más información. —informó.

— Está bien, en dos meses batallaré con él. Con respecto a lo otro. Cuenta conmigo.

—Bien Ash, eso era todo, te dejo para que te sigas sacando fotos. —terminó para luego colgar la llamada y dejar a un Ash pensativo.

— Pero en el caso de que Tracey acepte, el profesor Oak no tendrá ningún ayudante y tiene muchos pokémon. —Esos eran los pensamientos del joven entrenador.

— ¡Ash! —el gerente del lugar levantó un poco la voz para llamar la atención del ojimarron, ya que estaba tan metido en sus pensamientos, que no escuchó cuando le hablaron.

— ¿Está todo bien? —preguntó.

— Sí Martin, todo está perfecto. —respondió Ash para luego sacar otra vez el tema que estaban hablando entes de que llame Charles— . ¿Pero cómo sabes que su cuarto está con cosas mías? —preguntó.

— Bueno, él es mi hermano. —interrumpió Miku un poco avergonzada.

— ¿Enserio? No sabía eso. —dijo Ash sorprendido y su inicial lo apoyó— ¿Pika?

— Sí, somos hermanos y ella me ayuda aquí. —respondió riendo.

— Y que pasatiempos tienes además de esto, Miku. —interrogó.

— Bueno, me gustan muchos los pokémon, yo quiero ser criadora pokémon. Ése era mi otro sueño, después de conocerte claro está. —contestó la chica con brillos en los ojos. Ash al notar que ella estaba esperanzada en ser una criadora pensó que estaba de suerte y dijo:

— ¡¿Enserio?! Genial, yo estaba necesitando a alguien que se encargue de todos mis pokémon, además de ayudar al profesor Oak. Claro que si aceptas trabajar con migo te pagaré un buen sueldo. Pero eso si estás de acuerdo, al igual que tu hermano. ¿Lo siento si lo dije tan a la ligera, pero en verdad necesitaba a alguien que me ayude con mis pokés, y al profesor Oak. —se disculpó el azabache por su repentina propuesta.

— Por mí no hay problema Ash, además ella es una gran fan tuya y ayudarte a cuidad de tus pokémon sería como un sueño hecho realidad para ella. —Martin aceptó la propuesta.

— ¡¡Sí, sí, acepto trabajar para ti!! —ella al escuchar la propuesta de Ash y la aceptación de su hermano se puso muy feliz.

—Bueno entonces te esperaré en pueblo paleta, ahí conocerás a todos mis pokémon, acordaremos tu paga y empiezas a trabajar en el laboratorio del profesor Oak.

— Genial, también seré ayudante del profesor más grande, el que inventó la pokédex. —ella se seguía emocionando.

— Bueno Ash, esta sesión ha terminado. Como estamos apresurados, las revistas saldrán mañana. Cualquier cosa le avisaré a Misuki, para que te mantenga al tanto. —el jefe daba por terminada la sesión de fotos del azabache. Pikahcu se subió al hombro de Ash, éste se despidió de los demás al igual que su inicial, le dijo a Miku que hoy vaya para pueblo paleta, para ser más exactos al laboratorio del profesor Oak. No obstante salió fuera del edificio acompañado del dueño del lugar y su hermana. Ash saco a su Charizard y se montó en él, con una velocidad impresionante éste dio una vuelta en el suelo y despegó en línea recta al cielo, cuando llegó a una altura determinada, emprendió viaje al pueblo natal del azabache con la misma velocidad.

—¿No es genial esa manera tan osada de irse? —preguntó a su hermano con un brillo en sus ojos y una admiración tremenda al azabache.

— Sí, esa velocidad tan impresionante. No cabe duda de que se tiene bien merecido el título de campeón y maestro pokémon. —alagó el gerente del lugar—. Vamos, tú tienes que juntar tus cosas e irte a pueblo Paleta. —Terminó para luego entrar al edificio y ser seguido por su hermana.

En algún lugar muy alejado de Kanto, para ser más exactos en un lugar de tiempo y espacio, un hombre con un traje y un pokémon muy singulares. Le hablaba a su compañero.

—Está pasando, tenemos que avisarle antes de que esto le cause malos entendidos. —avisó el hombre.

—Pero, ¿Cómo lo aremos? Y sabes, su aura se incrementó considerablemente. —preguntó el poké mediante telepatía.

—Sí, lo noté, sin duda que es un aura guardián muy poderoso. Bueno te contaré como haremos… —comenzó a contarle la forma, mientras que nosotros nos enfocamos en la residencia Ketchum, situada en pueblo Paleta.

— Buenos días señora Ketchum. Lo siento si demoré mucho en despertar. —se disculpaba la chica proveniente de Johto un poco apenada.

—No es problema querida, es desayuno está listo. ¿Podrías llamar a tu compañera y decirle que baje a desayunar? —terminó con una pregunta. Posteriormente Marina aceptó y fue al cuarto de Ash, el cual Elesa había ganado dormir justamente. Cuando llegó, toco la puerta y al rato se abrió.

—Marina… —musitó la rubia un tanto incomoda. Bueno era lógico, una relación de tres es algo que ambas habían tomado a la ligera al momento de aceptar, no digo que haya sido un error, pero tenían que dedicarle un poco más de tiempo, para conocerse y después aceptar. Pero en el momento que aceptaron fue cómo qué, el corazón y el subconsciente estaban en una tregua. Definitivamente el amor que ambas sentían por el azabache y sus subconsciente las habían traicionado. Pero como dije, no se arrepentían.

—La madre de Ash quiere que bajemos a desayunar. —avisó la chica proveniente de Johto con la misma incomodidad, posteriormente bajo a la cocina, para ser seguida por Elesa, que ya estaba arreglada.

Volviendo con el azabache, él junto a Pikachu surcaban los cielos en Charizar, uno de los pokémon más fuertes del ojimarron. A decir verdad ya faltaba poco y nada para llegar a Paleta.

—Desciende en el laboratorio del profesor Oak. —Ash pidió a su pokémon. No obstante, con la misma velocidad que había despegado el pokémon de color naranja, aterrizó en la a unos metros de la puerta principal del laboratorio y al hacer contacto con el suelo a esa velocidad, causo un estruendo, acompañado de una onda expansiva y al mismo tiempo levantando un poco de polvo. Éste suceso llamó la atención de los que estaban adentro; el profesor Oak, Gary, Brock, Misty y Tracey, salieron apresurados de la residencia.

—Ah, sólo es Ash. —dijo Misty suspirando.

—Ash, nos asustaste. —regañó el dueño de la reserva.

—Eres un tonto. —acotó Gary, dando la espalda. Por parte de Brock y Tracey, sólo suspiraron aliviados.

—Lo siento. —se disculpó el azabache sobándose la nuca un poco apenado. Posteriormente Ash le agradeció a su pokémon y lo guardó. Pikachu al igual que Ash se disculpó en su idioma e imitando al azabache.

—¿Terminaste con esa sesión de fotos? —preguntó intrigado el moreno.

—Sí, por suerte solo fueron unas cuantas fotos, me cambiaron el vestuario dos veces nomás.

—y, ¿Qué pasó que viniste aquí? —preguntó el de la banda en la cabeza.

—Es que tenemos que hablar Tracey. —contestó el campeón, cosa que llamó la atención de todos.

—¿Conmigo? —preguntó confuso en dibujante.

—Bueno, hablen adentro, pasen. —invitó Oak. Posteriormente los demás asintieron y entraron, para dirigirse al living. Una vez ahí, todos ya sentados, Tracey preguntó.

—Y, ¿De qué quieres hablar? —los demás se limitaron a escuchar.

—Bueno, básicamente, en plena sesión de fotos, me llamó Charles Goodshow. Él me comentó, que quería hacer un aeropuerto en Azafrán. Me dijo que si sabía de algún arquitecto, para llevar acabo los planos del aeródromo y yo pensé: “ Quien mejor que Tracey para esto? —Todos estaban sorprendidos por eso, todos sabían que Tracey era un dibujante experimentado, pero, no era arquitecto y mucho menos tenía título.

—Ash, no sé qué decir. Pero creo que no, no quiero dejar al profesor con todas las responsabilidades. —hablaba el “arquitecto”.

—Vamos Tracey, además se te pagará bien y si te preocupa de que el profesor Oak se quede solo con todo, no será así, porque ya me encargué de conseguir a alguien de confianza para que lo ayude aquí.

—Tracey, no te preocupes. Es una buena oportunidad, no desperdicies tus talentos. —el dueño del laboratorio.

—Tracey yo también te apoyo y es verdad lo que dice el profesor, tienes un gran talento, no lo desperdicies. —apoyaba Misty su novia.

—Bueno, si tanto insisten. Está bien aceptaré. —el dibujante acepto el trabajo que le propuso el azabache, mus gustoso al saber que sus amigos lo apoyaban.

Posteriormente, Ash sacó su C-Gear y llamó a Charles, al cabo de unos segundos, éste lo atendió.

—Solo llamaba para decirte que encontré al candidato perfecto para el trabajo. —avisó el ojimarron.

—Bien, entonces dile que venga a… —el jefe del comité de la llama le pasó una dirección en la cual debían encontrarse.

—Bueno, solo llamé para eso. Ojo que es un amigo. Le pasaré la dirección de la reunión nos vemos luego. —Dijo el azabache, posteriormente cortó la llamada emitida por él.

Posteriormente Ash le pasó la dirección al joven ayudante de Oak, para luego despedirse e irse a su casa.


Narrador: Y así es como termina éste capítulo, Ash terminó con su sesión de fotos. Tracey tiene un nuevo trabajo. ¿Qué es lo que pasará de ahora en adelante? averigüémoslo en el próximo capítulo. Hasta la otra.


Bueno eso ha sido todo por esté capítulo. Espero que haya sido de su agrado y si fue así like y comenten. Bye bye.

 

Narrador: En el último capítulo, Ash había terminado con su sesión de fotos, Charles lo había llamado para pedir un favor; el de encontrar a un arquitecto, posteriormente el azabache le ofreció trabajo a Miku, ésta es hermana de Martin y éste es dueño del lugar donde Ash se sacó las fotos.


Capítulo 19: (Con la voz de Elesa) -Hoy presentamos: “La cena, sorpresas y más”.

Ash ya había regresado a su casa, cuando entró caminó hasta el living y con una chica de cabellos cerúleos y ojos esmeralda se encontró.

—Hola Marina. —saludó el azabache dedicándole una sonrisa.

— ¡Hola Ash! —saludó alegremente la chica proveniente de Johto, yendo a abrazar a su novio—. Te extrañé. —le dijo al oído un poco ruborizada.

—Yo también te eché de menos. —contestó el azabache recibiendo el abrazo—. Y… ¿Elesa y mi mamá? —preguntó.

—Se fueron a hacer unas compras a ciudad Verde. —respondió la chica sin dejar de abrazar al azabache.

—Eso quiere decir que estamos solos, ¿no? —volvió a preguntar.

—Sí.

—Sabes que significa, ¿no? —interrogó nuevamente, separándose un poco, para poder unir su frente con la de la chica.

— ¿Más tiempo para nosotros? —contestó con una pregunta desviando los ojos, con sus mejillas rojizas.

—Sí. —respondió para después darle un suave beso en los labios, a lo que Marina aceptó gustosa, y así un pequeño juego de besos, pero no duro mucho ya que:

—Piii kaaa. —intervino el pokémon diciendo “estoy aquí, muestren respeto” en su respectivo idioma, con los ojos entre cerrados y una sonrisa pícara.

—No, Pikachu, no es lo que piensas. —la chica trataba de defenderse, muy avergonzada de lo que había pasado, estaba roja a mas no poder.

—Me olvidé completamente que Pikachu estaba aquí. —dijo Ash, un poco avergonzado, pero la que más estaba era marina.


En otro lugar, más bien de camino a cuidad verde, se encontraban caminando Delia y Elesa.

—Elesa… —llamó la atención la madre de Ash.

—Sí, ¿qué sucede señora? —habló la exlíder de gimnasio, un poco tímida.

—Dime la verdad, a mí no me engañan ¿qué está pasando entre Marina, tú y Ash? —preguntó muy seria. A Elesa agarró una desesperación, su corazón latía constantemente a una velocidad, que era indició de que no podría salir de esas situación así de fácil. Ash le había pedido que guardara el secreto hasta el momento adecuado. Pero… ¿qué podía hacer ella en ése momento? Así que pensó rápido y dijo: —Lo siento señora, pero creo que es algo que le tendría que preguntar a Ash. —fue lo que articulo la rubia.

—Ustedes tres tienen un comportamiento muy extraño. Primero, entras al camerino de Ash abrasándolo y todo eso, y después se pelean con Marina por quien duerme en la cama de Ash. Dime, Elesa, ¿qué es lo que pasa? —la chica al ver que no podía ganarle a la madre de su novio, se resignó y le contó todo lo sucedido. Luego de unos minutos de narración, la señora Ketchum responde:

—Vaya, la verdad era muy predecible algo como esto. ¿Entonces son una pareja de tres? —preguntó Delia.

—Bueno, básicamente. Aunque fue una decisión tomada a la liguera, y yo no me arrepiento. —contestó un poco ruborizada, desviando la mirada,— ¿Está enojada, señora? —preguntó.

—No, ya que soy la madre de Ash, y como su madre lo apoyaré en cada decisión que él tome. Siempre y cuando no sea la equivocada. —contestó la pregunta que la novia de su hijo le hizo.

—Entonces, ¿me acepta como la novia de su hijo? —volvió a interrogar, esa respuesta a ella le interesaba mucho, pero la respuesta era obvia, sólo quería sacarse la duda.

— ¡Claro, a ti y a Marina! —bueno, definitivamente esa respuesta quería escuchar la chica y escuchó. Mientras ellas dos iban al centro comercial para hacer las compras, en otro lugar, más bien a bordo de un ferry. Un grupo de personas se encontraban hablando alrededor de una mesa redonda dentro de un restaurant del barco.

—Bueno, ya falta poco para estar en Kanto. —hablaba un chico de lentes de aparentemente 13 años.

—Sí, es verdad. —hablaba una castaña de ojos color zafiro, muy emocionada. Al terminar de decir eso un hombre con un carrito con bandejas llega a la mesa, para dejar su comida, bueno la de los presentes.

El destino había hecho que Max, May, Drew, Dawn, Kenny se encontraran en ése ferry. Bueno ése es uno de los ferry que sale de Unova y llega a Kanto pasando por todas las regiones, excepto por una. Así que las sorpresas aún no paraban.

Todos estaban por comer pero dos personas pasaron, hablando de un tema peculiar.

—Sí, de verdad Ash cambió bastante desde que viajaba con nosotros en Unova. —dialogaba una morena con abundante cabello de color negro.

—Sí, es verdad. —dijo un peliverde, mientras caminaba con los parpados cerrados y ponía su dedo índice a la altura de su rostro.

—Disculpen, ¿están hablando de Ash Ketchum, el campeón de Unova? —esa conversación la interrumpió Dawn, la chica peliazuli, bueno, ella no la hubiese interrumpido si no hubiese escuchado el nombre de su amigo.

—Sí, el mismo. —aclaró el peliverde, mientras ambos paraban su caminata.

—Nosotros también somos amigos de Ash, y en este momento nos dirigimos a su casa en pueblo Paleta. —Kenny había informado a los recién llegados, con su típica sonrisa.

—Nosotros también nos dirigíamos a casa de Ash, nos invitó a una comida al aire libre. Pero veo que no somos los únicos. —añadió Iris, sonrientes.

—Y… ¿Por qué no vamos todos juntos? —la coordinadora castaña había preguntado algo interesante.

—Pero no queremos ser una molestia. —dijo Cilan.

—Tranquilos, no lo son, acompáñennos. —insistió el chico de anteojos.

—Bueno, si insisten. —aclaró el líder de Unova, mientras tomaba asiento y la morena lo imitaba.

—Y dígannos, ¿eran compañeros de Ash? —preguntó intrigado el chico de lentes.

—Sí, en su travesía por Unova. —contestó sonrientes Iris.

—Disculpen nuestros modales, yo soy Cilan, líder de gimnasio de dicha región.

—Yo soy Iris, aspiro a maestra dragón y el mi compañero Axew. —se presentó, a lo que el pokémon saludó.

—Yo soy Max, ella es mi hermana mayor May. Yo soy entrenador y mi hermana coordinadora, conocida como “la princesita de Hoenn”. —el menor de los Balance se presentó y a su hermana. —Esa soy yo, May Balance. —dijo la castaña sonriente.

—Yo soy Dawn y él es Kenny. Ambos somos coordinadores de la región de Sinnoh.







Y así se conocieron y para luego conocer a sus pokémon. El ferry tardaría una hora más en llegar a Kanto. Mientras que en otro lugar, un pokémon se encontraba corriendo a una gran velocidad, y en verdad tiene prisa.

Pero por el momento dejemos eso de lado y nos enfocaremos en el laboratorio.

—Chicos, empecemos a preparar las cosas para la fiesta. —informó Oak, a los que los chicos asintieron.

—Pero abuelo, ¿dónde haremos la fiesta?, dentro o afuera, en el patio trasero. —preguntaba el aspirante a profesor pokémon.

—En la parte de atrás chicos. Prepararemos la mesa y la dejaremos preparada para la tarde, Delia dijo que fue a comprar a ciudad Verde, y cuando traiga las cosas, los hombres armos la parrillada y las mujeres se encargaran de las ensaladas y demás. —volvió a informar a los presentes a los que los demás se pusieron en marcha.

En la residencia Ketchum, Ash junto a Pikachu y Marina estaban por salir, el momento vergonzoso ya lo habían superado, y estaban a punto de ir a la reserva para que Ash visitara a sus pokémon, ya que no los había visto desde que llegó.

—Oye, Marina… —el azabache había llamado la atención de la chica, mientras se dirigían a la residencia Oak—. Lo siento. —la chica no entendía por qué se disculpaba, así que sólo se limitó a escuchar. —En verdad, las quiero a ambas, son lo mejor que me han pasado. Pero me siento extraño, no es que esté inseguro de esta relación.

— ¿A qué te refieres? —preguntó atontada por la actitud del chico.

—No… tranquila, ni yo sé lo que digo. —habló para luego pensar—. Pero tengo ese presentimiento… algo está por suceder. —Terminó, un poco confuso, Marina al ver que no estaba bien. Le dio un abrazo de comprensión y dijo. —Tranquilo Ash, yo no me arrepiento de nada. Lo mejor que me pudo haber pasado fue conocerte. Gracias por todo, te quiero.

Estuvieron un rato así, no mucho tiempo, ya que la gente del pueblo pasaba, y al ser campeón, llamaba mucho la atención. Posteriormente se dirigieron a la residencia Oak, para que Ash pudiera ver a sus pokémon y presentar a Lucario con el resto de los suyos.

…

Pasó el tiempo y el azabache y la de cabellos cerúleos habían llegado al laboratorio de Oak. Llegaron a la puerta, golpearon y fueron atendidos por Tracey. Se saludaron y entraron. Ash dijo que iría a la reserva a ver a sus pokémon y Marina lo acompañaría.

Cuando llegaron a la reserva, Ash pegó un silbido, y al cabo de unos segundos docenas y docenas de pokémon llegaban corriendo a toda velocidad, levantando una polvareda. Marina se sorprendió al ver esa cantidad de pokémon juntos. Pikachu se apartó del hombro de su compañero.

—¡Marina, aléjate! —dijo Ash, posteriormente la chica obedeció y se apartó un poco más lejos con Pikachu para ser más conciso.

Ash, ya sabía lo que pasaría, y pasó, todos esos pokémon le dieron una arremetida con cariño.

—¡Ash! —la chica se exaltó al ver esa acción, pero era predecible. Los pokémon estaban lamiendo a Ash cariñosamente.

—Tranquila, estoy bien. —el chico calmó a la chica, Pikachu se acercó para hablar con son compañeros pokémon.

—Amigos, estoy muy feliz de verlos a todos. —dijo Ash, mientras trataba de abrazar a todos sus pokémon. Un minuto más de cariño, y después Ash se levantó y dijo—. Salgan todos. —posteriormente todos los pokémon que acompañaban a Ash actualmente salieron de sus ball. Llamó la atención de Lucario para luego decir.

—Él es Lucario, un nuevo integrante de la familia, espero que se lleven bien. —los pokémon de Ash que estaban en la reserva que aún no conocían a Lucario asintieron y se pusieron a hablar con él, a los pokémon le impresionó la menera de hablar el idioma humano, pero no se sorprendieron mucho, ya que si un gato lo hizo, por qué no un Lucario.

—Amigos voy a estar con los chicos adentro. —los compañeros de Ash asintieron. Pikachu se quedó allí a jugar con los demás pokémon—. Vamos Marina. —dijo, la chica fue con él y empezaron a caminar.

—Ash tienes un montón de pokémon, y son muy lindos y cariñosos. —hablaba la chica.

—Gracias…


Mientras Ash se dirigía hacia dentro, fuera del laboratorio, una chica tocó timbre. Luego de unos segundos de espera, el dibujante volvió abrir la puerta.

—Hola… ¿en qué puedo ayudarle? —preguntó.

— ¿Se encuentra Gary? —respondió con una pregunta.

—Sí, ya lo llamo. —dijo, posteriormente dejó la puerta abierta y se fue a buscar al profesor. Unos segundos después Gary salió a ver quién lo llamaba.

Cuando la chica lo vio—. ¡Gary! —dijo para posteriormente abrazarlo.

—Roxanne, ¿qué haces aquí? —preguntó incrédulo y ruborizado el chico, para luego de unos segundos aceptar el gesto.

—Tenía tantas ganas de verte… desde aquel día. Desde que nos separamos supe lo valioso que eras. —hablaba ella, recordando el día en el que Gary la había salvado del enjambre de Beedrill, sí, si era atacada por esa cantidad de aguijones su vida correría peligro. Si ya era peligroso que uno solo de esos pokémon te atacara, que podrían hacer un enjambre completo.

—Yo también quería verte… —habló Gary nostálgico, mientras recordaba esos momentos y todos los que habían vivido, después de eso.

Luego de unos segundos más se separaron y Gary la invitó a pasar… una vez adentro, éste la presentó con los demás, era obvio que sus amigos la conocían ya que era líder de gimnasio.

En ese todos se encontraban saludándose cuando entró Ash.

—Ah, pero si es Roxanne. —hablaba Ash mientras entró a con Marina al living.

—Ha, veo que me recuerdas. Cómo eres una persona famosa, pensé que me habías olvidado. —habló la chica con ironía.

—Jaja, eso no pasará. Pero, ¿acaso viniste por tu relación con Gary? —todos se sorprendieron al escuchar eso.

— ¡¿Cómo sabes eso?! —preguntó su rival, sonrojado y exaltado.

—Sí, ¿cómo lo sabes? No se lo dijimos a nadie. —preguntó la líder confusa.

Todos estaban sorprendido, Gary era una especie de mujeriego, pero nunca había llegado más lejos de abrazos. Pero jamás pensaron que tendría una novia en particular.

—Bueno esa respuesta es muy fácil… —dijo Ash mientras sobaba bajo su nariz con su dedo índice y una sonrisa confiada… cosa que llamó la atención de todos. Posteriormente se puso serio y dijo; —Yo siempre estoy un paso adelante —eso dejo más impresionados a todos, su ego en ese momento fue tremendo, pero luego dijo; —es broma, pero la verdad ni me acuerdo quien me lo había dicho, pero sí que no fue Gary. —terminó.

—Eso me recuerda… felicidades Ash, has cumplido tu sueño —felicitó Roxanne, con una sonrisa.

—Gracias… hasta yo estoy sorprendido. Jeje. —agradeció sobándose la nuca con un notable sentido de modestia.

— ¿Pero qué te pasa Ash?… hace un rato tenía un tremendo ego, y ahora eres modesto —hablaba Misty con cierta confusión con las actitudes de su amigo.

Y así pasó el tiempo… Gary invitó a quedarse a Roxanne, hablaron rieron, hasta que llegaron Elesa y Delia. La líder saludó a Ash normalmente para no llamar la atención de los presentes. Posteriormente se pusieron a preparar las cosas, para la comida “familiar”, por así decirlo.

Y así pasó el tiempo…


Cerca de pueblo Paleta, un grupo de jóvenes… se acercaban al laboratorio del profesor Oak.

—Que bien, llegamos. Hace mucho no veía éste lugar —hablaba un chico de gafas un poco aliviado.

—Sí, vamos, seguro nos deben estar esperado —habló una chica de cabellos azules muy contenta.

Posteriormente todos asintieron y tomaron camino a la residencia del creador de la pokédex.


Unos minutos después… todos estaban frente a la residencia, tocaron timbre y Ash abrió.

—Hola amigos, llegaron, por un momento pensé que no vendrían —hablaba Ash mientras reía.

— ¡Claro que vendríamos, tienes que explicar muchas cosas jovencito! —exclamaron las chicas presentes que acababan de llegar.

—Sí, sí, tranquilas. Pacen amigos… la comida estará lista dentro de poco —dijo, invitando a pasar a los recién llegados.


Las chicas lo miraron con los ojos entre cerrados y entraron, no obstante los chicos pasaron y saludaron a Ash en el camino.


Cuando entraron, Ash cerró la puerta, los demás fueron a saludar a los demás, para luego sacar a todos sus pokémon y presentarlos con los demás y los de Ash, para dejarlos jugar en la reserva. Brock y Cilan ayudaron a Tracey a preparar la comida para todos los pokémon. Y el tiempo pasó hasta que la comida estuvo lista.

Todos se encontraban sentados en la mesa que habían preparado en la reserva. Era una mesa rectangular, donde en la cabecera principal estaba Ash y a sus costados Elesa y Marina, en la otra cabecera estaba el Profesor Oak, al costado de éste se encontraban Delia y Gary, y luego imagínense a los demás.


—Qué será ésta aura impresionante que siento en estos momentos. —se preguntaba el maestro pokémon en su mente.

—Bueno Ash, es hora de que empieces a responder unas preguntas. —

Dijo May haciéndose la enojada. Posteriormente todas las recién llegadas dijeron—Sí. —

al unísono.

— ¿Qué fue todo eso de la batalla con Lance? —la castaña de Hoenn empezó las preguntas.

—Exactamente ¿qué? —preguntó mientras se servía un pedazo de vacío.

— ¿Qué fue esa canción, esa manera de entrar al campo de batalla? —preguntó Iris siendo más específica.

—Primero respóndanme ustedes. ¿Cómo se conocieron? —preguntó Ash mientras comía con una sonrisa alegre.

—De pura casualidad nos encontramos todos en el ferry, a Cilan e Iris los cruzamos cuando estábamos todos juntos y escuchamos que hablaban de ti, y le preguntamos si era tú y dijeron que sí. —explicó Max, para luego tomar un poco de ensalada.

—Listo respondimos las preguntas, ahora es tu turno. —apuró Dawn, la chica de Sihnno.

—La canción la armó Misuki y no me acuerdo para que era, jajaja. Y la manera de entrar al campo, bueno Misuki dijo que tenía que cambiar de de estilo, por eso la ropa y que tenía que entrar de una manera que causara un gran impacto. —contestó a sus preguntas.

— ¿Y qué hay con tu cuerpo, por qué los músculos? —preguntó la coordinadora de pelo azul.

—Bueno eso es debido al entrenamiento que hice con Lucario. —explicó sin inmutarse.

— ¿Por qué cambiaste tanto? —preguntó Misty, a ella le interesaba esa respuesta. Ash tanto como Brock sabían el por qué.

—Todos o casi todos pasamos por algo en la vida que nos cambia hasta tal punto que ya nunca volvemos a ser los mismos de antes. —respondió tranquilamente.


En otro lugar, muy cerca de donde estaba Ash y sus amigos.

—Llegué, voy a recuperarte Marina… —dijo un chico de gorrita y pelo azul. Ese chico era Jimmy. Posteriormente tocó el timbre de la casa de Oak. En el fondo se escuchó el timbre, y el dibujante fue abrir.

—Hola, ¿puedo ayudarte en algo? —preguntó el artista.

—Sí, estoy buscando a Marina, me dijeron que estaba aquí.

—Sí, está aquí, ya la llamó, aguarde un segundo. —dijo Tracey dejando a Jimmy esperar afuera del portón. Para luego ir a buscar a la chica.

…

—Marina…

—¿Quién era Tracey? —preguntó la líder de Celeste curiosa.

—Un chico de gorrita busca a Marina. —explicó. Posteriormente Marina le agradeció y fue a la puerta. Ash cuando escuchó que era un chico de gorrita cambió su mirada, de una alegre a una seria. No obstante se limpió la boca con una servilleta, se levantó y dijo—. Ahí vengo. —May, Drew y Dawn cuando vieron la reacción de Ash se levantaron para ver qué pasaría, por precaución. No sin antes decirle a Max que espere en la mesa.

El resto; Gary, Misty, Brock, Tracey y Roxanne, que no entendía que pasaba, se levantaron y siguieron a los últimos tres que siguieron a Ash. Los únicos que quedaron en la mesa fueron Max, Elesa, Delia y Oak.


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Bueno, ese ha sido el capítulo 19 de mi fic, espero que les haya sido de su agrado. Disculpen la demora. La verdad es que tengo poca inspiración, sin contar que tengo muchas cosas por hacer, como estudiar para las integradoras, terminar de ver 4 animes, unas historias, fic pendientes que leer, entre otras cosas. Me estoy desbordando un poco. Pero no lo abandonaré.

PD: Les dejaré un dibujo que @Jhosep Zar hizo y me la regaló para el fic. Aunque el Ash de mí fic es más esbelto.

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