Ethan_BlanKnight "Eres una chavalita muy educada, seguro eso es lo que te gusta de ella, ¿verdad mocoso?" Me encontraba tranquilamente mirando a la chica cuando el anciano Stan salió con aquel comentario que me hizo comenzar a toser por instinto, miré de forma casi asesina al hombre y cuando voltée a mirar a la chica simplemente ella miraba hacia otro lado: "Probablemente esté apenada..." pensé mientras volvía mirar al hombre que probablemente esta disfrutando nuestras reacciones. —Ella te podrá decir Stan o señor, pero yo seguiré diciendote, anciano, viejo o inclusive abuelo, espero que quede claro.—respondí con una leve sonrisa mientras me volteaba para darle un último vistazo al tablón de misiones. Volví mi rostro para mirar a la chica, pero ésta había desaparecido nuevamente. Menée mi cabeza varias veces intentando encontrarla, pero sólo estaba el anciano que buscaba a... "¿Un granjero?" pensé y comencé a buscarlo también. Localicé a la chica y al lado lo que parecía un granjero. Señalé a la chica y le dije a Stan.—Por alla, abuelo, ese debe ser el granjero.—respondí antes de comenzar a acercarme hacia la chica y el NPC que conversaban.
Stan Colt —Mientras no me digas papá, dime como quieras, niño. No estoy aquí para cambiar pañales, pero sí para destapar botellas con la cuenca de mis ojos. Una habilidad que te transmitiré algún día. —el viejo siguió los pasos de Ethan hacia donde se encontraba Akizu, charlando con el supuesto granjero NPC encargado de la misión. Stan carraspeó con su garganta para hacerse notar. —Queremos empezar la maldita quest cuanto antes, dile a la chica lo que preguntó para que nuestro trabajo empiece. Y si tienes pociones curativas podrías darnos algunas, vamos a limpiar una endemoniada plaga en tu honor a fin de cuentas. Nos ayudas y te ayudamos, ¿qué tal? Mira nada más que corte de pelo... ¿has estado en el ejército...? —y nuevamente, la locura del viejo Stan volvía a erupcionar.
El golpe de Alex hizo desestabilizarse a la Novilla, quien cayó sobre una de sus patas al suelo dándole ventaja al chico para abrirse paso y rematarle con la espada. El monstruo tenía su barra con muy poco Hp de vida y al combate le quedaba poco, pero los jugadores estaban igual o peor de cansados. ¿Serían capaces de acabar con ella antes de que lo hiciera la Novilla? Novilla (Nvl 4) HP: 96/250 Fuerza: 50 Defensa: 20 Amanda HP: 110/200 Fuerza: 30 Defensa: 20
"Disculpe... ¿usted sabe de esa plaga que hay de jabalíes no muy lejos de aquí?, por que nos gustaría hacernos cargo o tan siquiera ayudar con esa misión~" El granjero dejó de colocarle la montura a uno de los caballos de un establo cercano y se fijó en los nuevos tres jugadores que venían por la misión. Asintió, pidiéndoles que aguardaran unos instantes, y tras dejar al caballo regresó junto a los demás con gesto atareado. —Ya veo, vosotros también venís por la plaga... —observó a cada uno de ellos con expresión analítica, sobre todo al viejo Stan, a quien no le pasó por alto aquellos comentarios, no obstante siguió con lo suyo así sin más. No podía negar la ayuda que en verdad necesitaba—. No hace mucho que se fueron otros dos novatos hacia al campo para ayudarme con la plaga, pero no creo que vayan a poder solos con tanto. Me sería de mucha ayuda si van también y tratan de echar al jefe de los jabalíes y sus aliados, éstos tienen más nivel que el resto así que tengan mucho cuidado. Si logran echar a ese molesto animal serán bien recompensados, no lo duden. El muchacho les dirigió una última mirada y dio media vuelta, al parecer no podía permanecer más tiempo allí. —Hasta entonces, suerte.
María Akizuki "Akizu" El granjero ya nos había respondido sobre la misión al parecer ignorando los comentarios de Stan sobre las pociones y demás. Pero me suponía que era normal ya que ya nos daría una recompensa así que no nos daría nada de lo que pidió Stan, solo esperaba que no se molestara por eso. — Muchas gracias por la suerte señor — dije con una sonrisa tranquila antes de mirar a Ethan y Stan — ¿Aquí hay tiendas donde se compran cosas? — pregunté algo ligeramente confundida, después de lo del bosque era mejor que hubiera algo como eso... solo para prevenir.
Conseguimos desestabilizar a la novilla,pero mi HP estaba muy bajo,de otro golpe podría perder.No lo pensé 2 veces y use una poción para recupera un poco de HP. —Oh no,hoy no moriré...no hoy...— Dije mientras subía al lomo de la criatura para intentar rematarla con un golpe certero,parecía que o le quedaba mucho para caer,pero no había que confiarse...pero algo lo tenia claro alguien seria derrotado hoy...y no seriamos nosotros. Alex Wood HP: 115/200 Fuerza: 30 Defensa: 20
Stan Colt —Claro que hay tiendas, yo compré esta hacha inmensa. —elevó su arma, orgulloso de su nuevo instrumento para matar. Señaló una choza no muy lejos de donde estaban. —Pueden darse una pasada por ahí antes de ir a matar a la plaga de jabalíes. Si ganaron dinero en el tutorial les servirá, aunque a decir verdad, yo gané mucho en esa estúpida ruleta rusa, jeje.
—¡Alex, mira la barra de Hp de la novilla, está en rojo! ¡Lo vamos a conseguir! —esbozó una sonrisa entusiasta al ver que los esfuerzos de ambos daban sus frutos, y se echó hacia atrás notando que el animal ya preparaba su ataque final—. Si aguantamos el ataque ganaremos, adelante. El golpe fue duro, y los jugadores estaban ya al límite de sus fuerzas. Amanda podía ver cómo su barra de energía casi ni se podía ver, estaba a punto del Game Over. Pero lo más importante, lograron soportar el ataque. Ahora solo quedaba el golpe final y lo habrían conseguido. Novilla (Nvl 4) HP: 18/250 Fuerza: 50 Defensa: 20 Amanda HP: 9/200 Fuerza: 30 Defensa: 20
María Akizuki "Akizu" Finalmente, después de que la amable vendedora me diera las pociones sali de la tienda algo ya mas tranquila, ya de cierta forma estaba "mas segura" para la misión en caso de que se complicara la misión y me suponía que Ethan también había ido a comprar un par de cosas también — ¡Bueno Stan, Ethan, me iré adelantando al campo occidental! — grité desde mi lugar para que lograran escucharme antes de comenzar a correr con emoción hacia el campo. Tan solo esperaba hacerlo bien.
La novilla estaba en las ultimas,lo íbamos a lograr...finalmente,ambos corrimos hacia la novilla para dar el ultimo golpe antes de acabar con ella. Amanda también estaba con su HP muy bajo había que darse prisa o algo malo podría pasar... "Si aguantamos el ataque ganaremos,adelante" Al oír a Amanda con ese entusiasmo nos colocamos cerca de la novilla,encajando nuestras espadas en su cráneo para derrotarla de una vez... —Tu sufrimiento termina aquí novilla...— Alex Wood HP: 84/200 Fuerza: 30 Defensa: 20
Adrian Henderson —¡Vamos, Neos, ya puedo ver la posada! —decía mientras corría en dirección al lugar—. ¿Crees que llegamos a tiempo? Espero que el pobre cocinero siga vivo... ¡Venga, el último tramo! Mientras corría por la calle revisaba llevar los cuatro pedazos de carne y no haberme equivocado o de lo contrario la entrega se retrasaría mucho. Una vez llegué al sitio, entré. —Buenos días, señor chef, ¿nos ha echado de menos? Aquí le traemos su comida, esperamos que no sea demasiado tarde... —Tomé los trozos y los coloqué en la mesa en fila.
Neos. Al momento de entrar en la posada todo iba más o menos igual: El hombre seguía de rostro a la mesa, los personajes no jugables estaban reclamando y nosotros pasábamos por el medio como si nada hasta llegar al dueño del lugar. —Llegamos a tiempo—De inmediato abrí la barra del menú, comencé a bajar con el dedo hasta llegar al apartado de inventario y de inmediato seleccioné las carnes reunidas.—. Aquí tienes la comida, viejo.—Cuando mi compañero había dejado los trozos le di a la opción que haría materializar los objetos, haciendo que estos de inmediato cayesen sobre los que Adrian dejó.
Y la Novilla, tras soltar un último alarido, sucumbió. Su enorme cuerpo desapareció ante los ojos de todos los presentes, y la sonrisa de las personas que había estado pasando los días persiguiéndola era inmensurable. De un momento a otro un cúmulo de personas se arremolinó alrededor de los agotados jugadores, atosigándolos sin dejar que se repusieran del todo. —¡Wow, eso estuvo genial muchachos! ¡Sois muy buenos! —exclamó un anciano, dándole una palmada sonora al chico que tenía más cerca. —¡Muchas gracias, de verdad nos habéis hecho un gran favor! —esbozó una sonrisa sincera una de las propietarias de las tiendas dañadas por la novilla. —¿Me enseñáis a hacer eso con la espada? ¡Moló mucho! —un pequeño niño admiraba a ambos chicos, correteando a su alrededor. Amanda tomó una bocanada de aire y se apartó su larga cabellera rubia del rostro, pues le impedía visualizar la escena. Desde el suelo, miró a Alex, quien se encontraba cerca en las mismas condiciones, y sonrió alzando el pulgar con satisfacción. —Eso estuvo muy bien, lo conseguimos. Entonces fue cuando entró en escena un hombre con vestimenta pueblerina y un sombrero de paja vistoso algo extravagante, y ayudó a ambos a levantarse del suelo, lleno de gratitud. Admiró a sus "héroes" del momento, y sacó algo de sus bolsillos: la recompensa no se hizo esperar. —Gracias, de verdad. Nos salvasteis de una buena, esa Novilla nos llevaba molestando desde hace bastante tiempo, pero ninguno tuvimos el valor suficiente de plantarle cara. Como muestra de gratitud, aquí tenéis la recompensa. Os la tenéis bien merecida —y tras despedirse por última vez, todos los NPCs congregados en el lugar se esparcieron finalmente, perdiéndose entre las calles del Pueblo de Los Inicios. Al momento, Amanda y Alex recibieron unas notificaciones en su menú. +200 Cols cada uno. +Crema (+150 Hp) x5 +250 de Exp
El pobre Chef estaba más desquiciado que de costumbre, esos muchachos que se habían marchado de la posada hacía bastantes horas, días, meses... Ya ni recordaba bien cuándo, no habían vuelto a dar señales de vida. ¡Y eso que habían sido cuatro los enviados hasta allí, cuatro! ¿Es que acaso iba a permanecer con este jaleo por el resto de su insignificante vida de NPC? Pero por suerte, nada más lejos de la realidad. Abrió sus ojos de la sorpresa al oír dos voces conocidas para él depositar ocho piezas de carne en su mensa, y alzó la vista para observarlos con un brillito de emoción en su mirada. ¡Estaban ahí, su negocio no se iría al caño! —Por dios muchachos, ya pensaba que os había comido alguno de esos malditos jabalíes. ¿Pero qué me traéis por aquí? ¡Oh, oh, ocho piezas de carne, ni más ni menos! ¡Así se hace chavales! —exclamó, levantándose del asiento de un salto y abrazándoles a ambos por los hombros. Casi no podían respirar de la fuerza que ejercía, sin duda estaba contento—. Gracias a esto al fin podré continuar sirviendo mi plato estrella a estos brutos. ¿Lo han oído? ¡Carne a la plancha para todos! —y tras aquel anuncio, todos en el bar gritaron de júbilo, siguiendo al chef hacia la barra. Pero antes de desaparecer de la vista de los chicos, se giró a ambos por última vez con una sonrisa de lado, imborrable. —Casi se me olvidaba, aquí tenéis una recompensilla por el esfuerzo. ¡Nos vemos muchachos! Tras salir de la posada finalmente, ambos chicos recibieron sus correspondientes notificaciones. +1000 Cols cada uno +Experiencia por cada jabalí derrotado
Adrian Henderson El agradecido cocinero nos dio la recompensa y la multitud se tranquilizó, ahora tocaba pasar a otra quest. El tablón estaba lleno de estas, pero ninguna se veía apetecible. ¿Tal vez un descansito no vendría mal? Esos jabalíes fueron muy pesados. Me dediqué durante unos instantes a pasear por las calles del pueblo, pero una figura llamó mi atención. Se trataba de un hombre encapuchado que observaba a todo el mundo como buscando alguien que le ayudase. —Hola, señor, ¿necesita ayuda?
Neos. Tras el peculiar agradecimiento de aquel hombre decidí salir de ahí. Comencé a caminar por el pueblo hasta llegar al tablón de los anuncios. Ahí muchos de los jugadores del lugar estaban reunidos, algunos solos y otros al parecer como equipo, para poder buscar trabajar en alguna de las posibles misiones. —Me llevo esa.—Tras tomar las indicaciones hacia la zona necesaria me dirigí de inmediato hacia el lugar.
Cuando finalmente la novilla fue derrotada,nos dimos un momento para tomar un respiro,estábamos exhaustos. —Si...no estuvo nada mal...Hacemos un buen equipo ¿no crees?— Dije con una sonrisa mientras guardaba mi espada en el inventario y me sentaba en el suelo.Podía contemplar todo es daño que había causado esa novilla,parecia que realmente les habíamos hecho un favor a eso NPC... —...Bien...y...¿que hacemos ahora?
¡Se ha activado de nuevo la Quest: la novilla contraataca! Ante Adrian se encontraba uno de los NPCs encargados de asignar las misiones, pero este se veía algo más... extraño. Le dirigió la mirada, dejando ver únicamente sus ojos entre la oscuridad de la capucha que portaba, y por unos instantes pareció sonreír. Su pregunta le tomó unos instantes, tiempo suficiente para hacer pensar al chico si había sido buena idea acercarse a ese NPC tan particular. —Supongo que te habrás informado también de esta Quest y por eso estáis aquí, ¿me equivoco? No pareces muy apto para la misión que te voy a encomendar, pero no juzgaré un libro por su portada por más debilucho que parezcas —la escena programada se repitió ante el chico, como si la misión nunca hubiese sido realizada. >>En uno de los recintos cercanos a estas instalaciones se guardan al ganado que no cabe en la granja del campo occidental. Hasta hace poco ningún habitante tuvo problemas con ellos, los animales se comportaban bien en dichos recintos y no hubo queja alguna, pero por alguna razón, hace poco apareció un fallo... Una de las novillas programadas apareció con un aspecto y tamaño descomunales para sus verdaderas dimensiones, y ahora anda desbocada por el ala sur de este enorme pueblo, arrasando todo a su paso. Y bien, ¿te ves capaz de pararle los pies antes de que provoque un desastre aún mayor o necesitas refuerzos?
Amanda La chica asintió, jadeando ligeramente y observó el cielo por unos instantes tratando de procesar su pregunta. —¿Seguirás con las misiones o avanzarás por las rutas? He oído que hay programado para dentro de un par de días un evento bastante importante en Tolbana, la ciudad que está luego de pasar el frondoso bosque que hay cerca de aquí. Supongo que lo mejor será prepararse para el evento, y sacarle el mayor povecho, ¿no crees? —y miró al chico con una sonrisa, expectante de su respuesta.
Adrian Henderson Ignorando que aquel tipo me había llamado débil acepté la quest y me dirigí al ala sur del pueblo. Por el camino iba pensando si en verdad era lo suficientemente fuerte, pero con el escudo y la espada no tenía nada que temer. —A ver, este es el sitio de la quest. ¿Dónde estará esa novilla? Pregunté a un par de personas si la habían visto y por fin pude localizarla. ¡Vaya, sí que era grande! Era hora de la batalla.
