Crystal Sentí mis lágrimas caer por mi rostro. El corazón me latía muy deprisa. Cogí la mano de Vantage y le abracé fuertemente. —Te amo...— le dije en un susurro. Nos separamos tras unos segundos y le miré, preocupada. —Tengo miedo de que vayas, no quiero que te hagan daño a tu también. Además, tengo miedo de... —¿Tu padre?— dijo Vantage continuando mi frase. Le miré a los ojos y asentí en silencio. —Poroque si vas, yo iré contigo... y puede que nos lo encontremos. No se si estoy preparada para encontrarme con él...—dije suspirando. Sentía Cómo mi corazón se escogía. Era una sensación dolorosa.
Vantage Le acaricie el pelo y le di un beso en la frente. Luego la abracé, me sentia más tranquilo pero el enfado aún seguia. —Tranquila, no me va a pasar nada, mis monstruos y yo tenemos ganas de pelear, puede que ellos me presten su fuerza pero...—No termine la frase. Ella me miro extrañada. —¿Pero qué?—Preguntó ella curiosa y con alguna lagrima. —Tu eres la que me da realmente la fuerza para seguir—Respondi con una amplia sonrisa. Crystal no aguantó más todo y rompió a llorar en mi pecho. Yo solo la abrace mientras ella se desahogaba.
Clevert. —así sera—dije sonriendo un poco también. —quien sabe si se les ocurra poner en marcha una operación en Magnolia—veo un poco para la ventana. —parece que ya dejara de llover pronto—. @mikari
Mizuki Sonrei y supe que pronto la lluvia parara —Es verdad,bueno pronto iremos a hacer una mision—dije al preparar mis cosas y cuando me di cuenta la lluvia se detuvo—ya dejo de llover,vamos Clevert @Narue Feiler
Clevert. al fin la lluvia paro con una cara más confiada pondría en acción al equipo Kiseki. —en marcha—dije al momento de salir. unos cuantos pasos en la calle mi mente fue de nuevo asaltada por el miedo a lo que mi familia sufriría...no es el momento..pensé para despejarme el ligero silencio de la calle no ayudaba, recuerdo que aparte de Alice algo me relajaba y alegraba— ¿pero sera?—susurre. —¿sabes algo Mizuki?—le pregunte algo apenado más que todo por sentirme algo egoísta, buscaba solo calmar mi mente, hacia algunos gestos de arrepentimiento, —eh.. seria g-genial escuchar tu canto mientras caminamos—dije riendo aun apenado. —solía escuchar cantos en el teatro...pero como que tu voz es... la más linda hasta ahora— @mikari
Mizuki —Claro,no hay problema—respondi con una sonrisa—bueno se algunas canciones que he escrito—empece a cantar la quinta que he escrito, la he escrito respecto a cierto chico pelirrojo Contenido oculto: cancion @Narue Feiler
Clevert. —gracias, en verdad es genial..—susurre y me concentre para seguir escuchando su canto era motivador para mi, lograba mantener mi mente en orden. @mikari
Crystal Lloré durante un rato. Sus palabras me habían llegado al corazón. Sentí como su brazos me abrazaban mas fuertes.cuando me hube calmado un poco nos separamos. Yo le dí un beso a modo de agradecimiento. —No te merezco— le dije mientras me secaba las lágrimas. Él hacía tantas cosas por mí y yo, en cambio...
Vantage Su frase me sorprendió, no esperaba ni mucho menos escuchar eso. —No digas tonterias—Dije dandole un fuerte abrazo. Después de separarnos la tome de la mano y salimos de casa para ir en busca de mi amigo.
Crystal Estuvimos andando tranquilamente por las calles de Magnolia mientras me secaba las lágrimas. —Dime una cosa— le dije a Vantage mirándole— ¿Qué has visto en mi para estar conmigo y protegerme tanto? Aún no lo entiendo...
Vantage El comentario que me hizo me tomo por sorpresa. —Pues...—Me quedé pensando unos segundos ante su atenta mirada. —No creo que fuera en algo en especial sino en todo, tu forma de ser, tu sonrisa, tus acciones infantiles, tu lado gracioso...es dificil de decir—Comente mientras seguia pensando. Antes de continuar con la conversación vi la casa. —Aqui es...puede que mi amigo sea algo...raro—Le adverti a ella. —Más raro que yo...—Ante su comentario me enfade un poco. La agarre y le di un fuerte beso en los labios dejandola atontada unos segundos. Abri la puerta, era un poco oscuro el interior. —¡Kramsi!—Grite tratando de hacer que saliera. Tras dar unas voces él salio, seguia igual que la última vez. Era algo bajito, con un pelo negro y muy largo y su ropa era totalmente pasada de moda. Di unos pasos para ir a su encuentro cuando me vió lo primero fue darme un puñetazo en la barriga. Tosi por el duro golpe, Crystal iba a hacer algo pero la detuve. —Ya estamos en paz—Me dijo mientras nos invitaba a sentarnos. —Aún no lo habias olvidado jeje—Comente tomando asiento y Crystal se sentó a mi lado. Ella parecia perdida a lo que Kramsi se pusó a explicarle. —Este tio es un....fuimos a por unos bandidos y yo hice de cebo...acabe con una flecha en el pandero por su culpa—Ante su comentario Crystal soltó una leve risa. Yo interrumpí el ambiente. —Queremos saber el sitio donde se esconden el gremio oscuro Demonios de las sombras—Le comenté serio. El se detuvo unos instantes y luego respondio. —Según parece, llevan cargamentos de diamantes falsos a todas partes de Fiore, y parece ser que ahora mismo...han encontrado una persona con la magia de crear diamantes—Dijo mientras se sentaba y nos servia un té. Nosotros le contamos sobre Crystal y su pasado, más bien fue ella quien lo dijo. —Olvidalo Vantage...no sobreviviriás...ahora son muy fuertes, tienen armas, guardias, seguridad, magos de rango alto, no son S pero son realmente terribles...por eso no los han cogido aún—Explicó tomando un sorbo. Senti como Crystal tomaba mi mano y la apretaba y con su mirada parecia decir que lo dejará estar. —Hubo alguien antes que tu que fue y no regresó con vida—Dicho esto me dio un colgante. Lo reconocí...no podia creerlo...no era posible... —Se que es duro...pero así son las cosas...es de tu amigo Edgar...—Concluyó mientras seguia bebiendo. Me levanté enfadado, estaba harto de ese gremio, ahora tenia una razón más para pelear. —No importa lo que hagas, dejalo estar, vive feliz y con tu gremio—Me comentó levantandose. —Dime donde están—Le pedí a Kramsi. Él negó con la cabeza pero al mirarme suspiró. —Al oeste, hay unas cataratas, en su interior hay una mina que estaba maldita, eso decian para alejar a los magos, allí están—Respondió él. Tome a Crystal de la mano y salimos de la casa después de despedirnos de mi amigo. Cuando dimos unos pasos ella me detuvo y me abrazó poniendo su cabeza en mi pecho y comenzando a llorar. —Dejalo...te lo ruego Vantage...no quiero que pases...esas cosas...por mi...—Verla así me destrozaba. Le acaricié el pelo y vi como me miraba con lagrimas en los ojos. —No tienes nada que temer...son ellos los que temerá.—Concluí dandole un beso en los labios. La besé dulcemente mientras le rodeaba con los brazos. Luego con mi mano le sequé las lagrimas.
Crystal Sentía sus cálidas manos sobre mi rostro húmedo. Le Sonreí y luego le bese. —Gracias... Por todo. No sé cómo podré compensartelo—le dije mientras terminaba de secarme las lágrimas.
Vantage Negué con la cabeza. —No tienes porque compensarme—Respondi feliz. Luego tome un poco de aire y por fin me decidí. —¿Aún quieres venir?, puedo ir yo solo, quizás tus sentimientos te impidan atacar y te podrias poner en peligro—Le comente serio. Ella me miró unos instantes. —Eres todo lo que tengo—Dije con una sonrisa.
Crystal Trague saliva y luego negué con la cabeza. —No te pienso abandonar nunca, ¿entiendes? ¡Nunca!— dije mientras le miraba seriamente. Notaba cómo Vantage podía leer la sinceridad en mis ojos. Aunque Vantage tuviera razón, y no estuviera en condiciones de luchar contra ellos, no pensaba dejarle solo.
Vantage Le abrace feliz, le di un beso y luego marchamos rumbo al gremio oscuro. —Luego podriamos celebrar la victoria en mi cuarto, tengo una sorpresita—Le dije guiñando un ojo. Queria que la travesia fuera tranquila y relajarnos un poco.
Crystal Me sonroje antes lo que dijo Vantage, ya que me imaginé por donde iban los tiros, pero no dije nada. Nos adentramos en el bosque de Magnolia. Hacia sol, y los colores verdes del bosque resplandecían. —Por lo menos hace buen tiempo— dije intentando mantener mi cabeza ocupada. Sentía que cada vez estabamos mas cerca, y eso me hacia ponerme nerviosa.
Vantage Tome su mano y la apreté al ver como se sentia nerviosa a cada paso que dabamos. Tras un buen rato caminando divisamos la mina y unos hombres fuera. Crystal y yo nos ocultamos entre los árboles, eran dos fornidos que vigilaban la entrada. —Muy bien, ahi están—Dije en voz baja. —¿Cual es el plan?—Me preguntó ella. —Los atacare, causare ruido y eso obligara a salir, en ese momento tu vas por ahi y los pillas desprevenidos—Explique indicando una de las grietas que daban al interior de la mina. Entonces le di un beso y me fui. Desenvainé mis espadas y los golpeé en la nuca, fue facil pero fui visto por uno que yo no divisé y que dió la voz de alarma. —Ahora empieza lo serio—Dije preparandome y mirando de reojo como Crystal estaba corriendo hacia la grieta y entrando. Salieron más de lo que pensaba y concentré mi poder en mis espadas, la magia oscura fluia a traves de mi. Dos en particular se abalanzaron y esquive como pude tratando de devolver los golpes. Le hice un tajo a uno y el otro aprovechó para golpearme por la espalda. —Mierda—Pensé levantandome. Del interior salieron más y empezaron a lanzarme magia de toda clase, esquivaba como podia pero no pudé evitar todos los poderes y un rayo impactó en mi. Cai al suelo, aunque solo duró unos segundos antes de que uno de ellos me levantase y empezara a golpear. El resto se unió y recibi una buena tunda. —¡Rayo de la tormenta!—Grite liberando un potente rayo que se deshizo de muchos. Sin embargo aún quedaban. —Tormenta de diamante—Dijó una voz. Vi como los enemigos se convertian en diamante. Un mago de rango bastante alto se lanzó contra mi, desprendia mucha magia pero por lo menos solo era uno. Con una mirada ordené a Crystal que siguiera ella. —Fuego del abismo—Conjuró el mago lanzandome bolas de fuego. Yo con mi poder de agua neutralicé el fuego creando una gran humareda. Usé mi poder del monstruo para aumentar temporalmente mi velocidad y sali con la espada de las sombras golpeando al enemigo. Cayó al suelo inconsciente, no estaba muerto por poco. Tome aire después de tanta lucha. Una vez recuperado fui a la mina, baje por el camino y encontré a Crystal y otros enemigos los cuales habia dejado ella KO. Guarde mis armas y dejé de concentrar mi poder. —Mira esto—Dijo ella señalando las cajas llenas de diamantes falsos. Al verlos ella empezó a temblar, la abracé para calmarla, duró unos segundos antes de separarnos. —No hay rastro de mi padre—Comentó ella un poco más tranquila. —Tu...eres aquella niña—Dijo uno de los hombres antes de que yo le diera una patada dejandolo inconsciente. Miramos por todo el lugar, nada de nada, solo cajas llenas de falsos diamantes. —Bueno, sera mejor avisar al consejo—Dije mientras miraba unos documentos y contratos. Crystal buscaba algo por las mesas a distancia de mi. Cuando ella volteó a verme su cara cambió. —¡Cuidado!—Exclamo ella. Yo no pudé reaccionar, senti un fuerte dolor en mi costado. Al bajar la mirada vi el filo de un cuchillo. Volteé a ver quien era el responsable, no era otro que el padre de Crystal. Sentia mi cuerpo paralizado. Luego senti otro dolor cuando el hombre retiro la hoja ensangrentada. Mire a Crystal mientras de mi boca salia sangre y cai de rodillas.
Crystal —¡Nooooo!—exclamé. Mi grito fue como el aullido de un animal herido. Me tiré sobre el cuerpo de Vantage y lo sujeté con mis brazos. Nunca le había visto tan malherido. Notaba cómo mis lágrimas caían a gran velocidad. —Hola... Hija... ¿No piensas saludar a tu padre como es debido ?— dijo la voz de mi padre en tono de burla. —Eres un monstruo—le espeté mientras dirigía la mirada hacia él. En ese momento sentía asco por descender de él. El asco y la ira me invadieron. Notaba que Vantage estaba cada vez más débil. —Oh... No me digas qué... Vaya, no sabía que tenías novio... Si es que no me cuentas nada—dijo mi padre burlándose— Aún así te he hecho un favor, no me gustaba para ti... Esperaba que fueras una chica más lista y encontraras a un hombre más fuerte. Lástima... Se acercó a nosotros y me acarició la cabeza. —¡No me toques!— exclamé llena de furia. Sentía cómo mi cuerpo cambiaba, y se transformaba en diamante. Estaba realmente furiosa y llena de poder. —Ohhh... Al fin lo conseguiste—dijo mi padre sonriendo—Está bien, te voy a ofrecer un trato. En el gremio hay un mago que podrá curar a tu amigo. A cambio trabajaras para nosotros, como en los viejos tiempos. ¿Qué te parece? Salvas a tu amigo y a ti o morís los dos, tu eliges. Miré a Vantage, que estaba en estado crítico. Cerré los ojos y sentí cómo mis dos últimas lágrimas cayeron sobre él. —Lo siento...— le susurré. Noté cómo el diamante de mi cuerpo desaparecía. Miré a mi padre, destrozada— está bien... Pero hasta que no vea que vuelve a estar en perfectas condiciones y le dejáis marchar, no os ayudaré. Mi padre sonrió, satisfecho.
Vantage A pesar de estar muy mal de salud podia escuchar todo. No iba a permitirlo pero mi cuerpo no reaccionaba. Las imagenes de la sonrisa de Crystal empezarón a aparecer, notaba como la ira me consumia por dentro. —¡IDIOTA!, ¿NO RECUERDAS MI PODER?—Dijo una voz en mi interior. Entonces recordé el poder del monstruo que sellamos hace poco. Centre mis pensamientos en Crystal, en su sonrisa, alegria, sus besos... —Libera mi poder—Susurró la voz. Mi herida poco a poco empezaba a cerrarse, notaba como las fuerzas volvian a mi. —No lo hago porque me caigas bien—Dijo otra voz. Esta vez era el otro monstruo, el primero que vivia en mi. Tome mi espada y la lancé contra el padre de Crystal tomandolo por sorpresa y atravesando su pecho llegó hasta la pared. Me levanté ante la mirada atonita de Crystal y su padre. —No subestimes mi poder—Dije acercandome furioso. —Pero...¿como?—Preguntaba él aturdido por la situación. Me mantuve a unos pocos pasos de él. —Yo seré quien la haga feliz, quien le de una familia, quien le ha dado un hogar—Comence a hablar. Cada palabra enfurecia más a su padre que no podia hacer nada y sentia como sangraba por la espada clavada. —Vantage...—Decia ella entre lagrimas. —El solo hecho de haberle hecho lo que le hicisteis...no tiene perdon...y ahora querias chantajearla...—Di un par de pasos y quede muy cerca de él. El hombre me miraba asustado ahora. —Se lo prometi Crystal...—Le dije tomando la empuñadura de la espada. Pero cuando iba a hacerlo senti que ella me detenia y me miraba llorando. —Ya...ya es suficiente—Me dijo ella. Yo saque la espada de su cuerpo y él cayó al suelo. Después de eso avisé al consejo de magia quien acudió en unos minutos. —Gracias por capturarlos—Nos felicitaron por nuestro trabajo. Después retomamos el camino a casa, al parecer los rumores sobre que tenian rango S o casi eran falsos y lo hacian para asustar a la gente. Crystal no decia nada, estaba como ida, todo esto habia sido mucho para ella. —¿Cómo te encuentras?—Le pregunte pasando el brazo por su hombro y apoyando su cabeza en mi.
Shun-Casa Llegamos rápidamente a la casa, me dio nostalgia ver el río pero sacudí la cabeza para volver a concentrarme, entendí que yo no tenía la llave entonces se me ocurrió una idea. Baje del gato, el se hizo gigante y se poso en mi cabeza, me dirigí hacia la puerta con Mizuki en mis brazos, toque la perilla y cree una llave de plata, abría la puerta y entramos. No me gustaba entrar a las casas así pero estaba aún parecía mi casa, subí las escalera e hice el mismo truco, la cerré y me dirigí a la habitación de Mizu. La coloque suavemente en la cama, se veía muy linda, no pude evitar acercarme a su rostro pero la cola del gato me golpeo en la cara. El era muy inteligente. —No le haré nada— Me dirigí a las ventanas y abrí las cortinas para que la luz entrará, me quede viendo el río, extrañaba esa vista pero seguramente Mizuki me odiaba por lo que le había hecho. Tenía miedo de seguir sufriendo, una mueca de tristeza se formó en mi rostro y el gato me dio un rasguño en la frente, le molestaba verme triste. Solté una risa, el era un buen compañero. @mikari
