Levon

Shruikan

"¿Otra vez navegar?" Pensaba sin poder ocultar su cara de desagrado; aquella tormenta soportando las inclemencias del clima mientras debía sujetar el timón evitando estrellarse, con sus manos cada vez volviéndose más frías y su visión empeorando a cada instante; el mareo, el olor salado del agua y sobre todas las cosas: el podía volar, odiaba tener que depender de otro medio que no fueran sus propias alas, no era divertido ser humano y pasar frío en un suelo de madera. Y algo le decía que en el famoso río de las almas perdidas tampoco podría volar –Odio los barcos...– dijo para sí mismo; mientras revisaba que su espada y su bolsita con círculos brillantes siguiera sujeta en su cinturón.

 

La mañana se hizo presente, la noche se fue en un abrir y cerrar de ojos, eliott como siempre no había dormido en todo el tiempo que estaba obscuro, simplemente se quedó a hacer la Guardia al lado del nuevo integrante para así poder de alguna manera vigilar sus movimientos.

Una vez que el sol rozaba con sus rayos el rostro de Eliott bajo y despertó con una voz firme y fuerte para ser escuchado --¡levantense! Nos espera un largo viaje--

Espero a que todos se levantarán pero pareció que no le habían hecho mucho caso, fijo la mirada en la cocina y sonrió al recordar los inicios de todo esto --nunca creí que recurrirera a esto --se dijo y tomo un sartén junto con una cuchara y recorrió los pasillos detonando aquellos instrumentos fuertemente. --Despierten! --Grito tal y como lo hacía aquel Ángel

Una vez que todos estuviesen reunidos , Eliot indicó que todos volverían a la pequeña aldea donde estuvieron antes. Y así fue todos siguieron a eliott, quien parecía ser diferente, ahora era más serio y dedicado, pero no lo demostraba, aunque a leguas se notaba aquel cambio radical que las circunstancias lo obligaron a hacerlo, ya no podía ser el mismo chico tímido, su hermano le había encomendado el liderazgo, que no iba a lograr con su carácter blando.

Una vez llegando a la aldea se escuchó una gran cantidad de gente reunida, abriendo camino hacia el Castillo, alabando a todos los heroes que habían salvado a su reina y los habían librado de la bruja negra.

Entre gritos de admiración y entre flores que lanzaban los aldeanos caminaron, estos chicos que ya habían marcado la historia de este pueblo, y se dirigieron al Castillo donde la reina Blanca los esperaba con mucha alegría.

Antes de entrar alzó las manos en señal de que todo su pueblo guardará silencio para dirigir algunas palabras.

--Estoy eternamente agradecida con estos chicos que nos devolvieron la paz y dicha--en ese momento se acercó a dos chicas en especial, las tomo del hombro --Kira, Lucielle yo les debo la vida --pronunció y las abrazo como nunca y les entregó un saco de oro a cada quien y un collar de gemas, típico de aquellas costumbres , a lo que todo el pueblo las aclamaba --larga vida a Kira! Larga vida a lucielle! --Al unísono se escuchaba después se dirigió a Blake específicamente --yo no te conocí mucho, pero sé que fuiste valiente al arriesgar tu vida, una de mis hijas me contó todo lo que pasaste, gracias por ayudar --mencionó he hizo lo mismo, lo abrazo y le otorgó esos humildes presentes.

Volvió a donde Taya estaba --me han dicho que tu nobleza ayudó mucho para encontrar a la bruja y apoyar a tus compañeros. Cuando más lo necesitaban, gracias --mencionó y agradeció de la misma manera que a todos.

El chico rubio y el joven nefilim no se quedaron atrás, la bruja se dirija a ellos y los miro con lágrimas en los ojos --Hansamu, Eliott, ustedes fueron los que derrotaron a aquella maligna bruja y nos trajeron dicha de nuevo, nos devolvieron las esperanzas que ya se habían perdido y por eso todo el pueblo se los agradece --se inclinó al terminar de decir estas palabras y todo el pueblo lo hizo gritando sus nombres de cada uno, sin más con tanta dicha.

Finalmente se acercó al joven vampiro --¿cual es tú hombre joven guerrero?--pregunto y al escucharlo todo el público se asombró pues no tenía buena fama, pero más pasmo la acción de su reina --toma estos presentes que también te mereces, puedo ver en tu corazón que la maldad que tenias ya no existe y tus ojos me dicen que ayudaste a estos chicos -- mencióno y tomo su mano llevándola a lo alto --larga vida a nuestros héroes --grito y los llevó al otro lado del Castillo, justo donde estaba el mar --les deseo un bien viaje mis valientes guerreros --mencionó por último abriendoles pasó al barco que fue preparado para ellos especialmente, con muchos lujos y provisiones.

Eliott agradeció y subieron todos al barco que sarpó de inmediato, los aldeanos lo despidieron al igua que la reina y ahora retomaban su camino.

 

Blake
Había tratado de dormir algo, pero me había sido casi imposible, saber que iríamos contra al rey de los demonios me emocionaba de sobremanera, a la mañana siguiente un molesto estruendo me despertó — Kodoku maldito angel del demonio!! — exclame molesto dispuesto a salir y darle una lección, pero antes de salir del cuarto recordé, no era posible que fuera el angel, suspire profundamente — pelos de algodón ...— dije suspirante, lo que paso después fue muy extraño para mi, alguien de la realeza me estaba no solo alabando si no también recompensando me por ser secuestrado?, trate de no reírme o de hacer ningún gesto, no quería que la reina se ofendiera, después nos condujeron a una hermosa y lujosa nave, un bote increíble con toda clase de lujos y comodidades — bueno dormiremos en bonitas y comodas camas antes de la batalla mas brutal y sangrienta de nuestras vidas —

 

Hansamu
En un abrir y cerrar de ojos, paso la noche, para lanzar los primeros rayos de sol.
Pero aún así Seguí cantando, ya que a pesar de que adorara más a la Luna y las estrellas, el sol seguía siendo hermoso.
Pronto nos llamaron, así que jadee un poco, al escuchar el sartén...aveces odiaba ser elfo.
Baje rápidamente del techo y me dirigí con los demás, que nos dirigíamos a la aldea.
Cuando llegamos comenzaron a alabarnos, mientras caminábamos hacia la reina, se me revolvió el estomago por dos razones.
La primera es que me traía recuerdos de cuando era pequeños y que mis padres me arrastraban, ejem, me llevaban a visitar a otros reino, nunca me gusto eso.
Y lo segundo, porque los salve, ¿Porque me sentiría mal de salvarlos?, fácil, porque no pase pruebas y luche con todas mis fuerzas para salvarlos, lo hice por salvar a mis amigos, a sí que me sentía mal que me adorarán por hablarlos salvado sin pensar en ellos.
Hice una reverencia cuando la reina nos dio otra, bueno, algunas viejas costumbres simplemente no se pueden ir, y la cortesía era una de ellas.
Nos llevaron en lo que viajaríamos, se veía mucho más cómodo que aquel barco.
Me incline nuevamente hacia la reina y murmure un "gracias", antes de entrar al barco para no mirar atrás.
Blake fue el primero en hablar, y su comentario me hizo sonreír.
- Bueno, eso es todo un consuelo, Blake.

 

Taya

Pasé de estar dormida plácidamente en la cama a despertarme rápidamente después de casi morir del susto, me levanté levemente con mi mano en mi pecho y luego me cubrí los oídos cuando terminé de cambiarme, me aproxime lentamente, sin mucho ánimo realmente pero aun así tenía una sonrisa en mi rostro cuando nos dirigimos al pueblo, sonrisa que se borró al sustituirse con una cara de sorpresa y susto al ver a tanta gente el castillo, pero no podía esconderme detrás de nadie, todos iban muy avanzados, mucha gente... demasiado para mi gusto.

La reina comenzó a felicitar a las personas importantes que habían hecho algo útil en toda nuestra misión, Lucille, Kira, Bebé dragón, pero cuando llegó conmigo estaba confusa "me han dicho que tu nobleza ayudó mucho para encontrar a la bruja y apoyar a tus compañeros. Cuando más lo necesitaban, gracias" ¿Mi nobleza ayudó para encontrar a la bruja?, hmm... ¿se refería a dejar que casi te capturen para que otra persona la capturaran y se vieran obligados a ir por él?... Tal vez, después de mi felicitó a Hansamu y Eliott antes de hacernos pasar

Estuve algo mas tranquila cuando ya no hubo gente que nos felicitara, debían felicitar a personas específicas por su trabajo, no al relleno. Finalmente llegamos al barco, en definitiva se veía un poco mejor que el que había conseguido Kodoku pero... en ese barco habían pasado muchas cosas, algunas de ellas me hicieron sonrojar un poco, pero nada grave.

"bueno dormiremos en bonitas y comodas camas antes de la batalla mas brutal y sangrienta de nuestras vidas"

Reí un poco cuando escuché eso, una risa nerviosa que pasó desapercibida como una risa normal, caminé hasta el final del barco y me recargué en el barandal — Ya solo queda esto... — murmuré cerrando mis ojos nuevamente por un rato

 

Eliott

Navegabamos entre las olas que está vez estaban tranquilas, un marinero que fue contratado especialmente dirigía el barco, yo estaba en la cubierta mirando al cielo, pensando en que tenía un sentimiento raro hacia cierta chica, ¿porque? Nisiquiera me atravia a hablarle, pero de alguna manera sentía una necesidad por verla, camine en su búsqueda, y recordé que una vez mi madre me dijo que eso se llamaba amor, y que llegaría a sentir por una persona, en ese momento me aconsejo que lo diera a saber ¿que tan difícil podría ser? Al fin la encontré, estaba sola para mi suerte --Kira...tengo que hablar contigo --le mencioné

@EliLover

 

Taya

Finalmente había logrado tranquilizarme, tenía que aceptar que todo terminaría y ya todo volvería a ser como antes, tendría que ir a mi pueblo o a cualquier parte para intentar reintegrarme nuevamente, ser nuevamente una persona común y corriente, ser una más y listo, ya no habría problemas.

Suspire, ya no habría nadie mágico cuidándome las espaldas siempre y apoyándome, eso sería lo más difícil pero sería lo correcto o eso me imaginaba. Mire por última vez el mar y me aleje por los pasillos

 

Severen

Caminaba por los pasillos, algo intrigado pues mis "compañeros " no me tenían tanta confianza, pude leerlo en sus mentes tome aquel collar que me fue entregando entre mi mano y lo apreté tanto que sangre considerablemente, no encontraba un mejor método para desahogarme, pues tanto tiempo rechazado y odiado me había afectado, agache la cabeza y sin querer derrame un poco de lágrimas "la maldad en tu corazón ya no existe " retumbaba en mi cabeza ¿eso es cierto?

 

Taya

Había explorado los pasillos del barco para encontrar las habitaciones hasta que por accidente di con otra persona, el nuevo integrante: el vampiro, se encontraba llorando y su mano sangraba, tome un pañuelo de mi pequeña bolsa de la cintura y me acerque algo preocupada

-- ¿Te duele mucho? ¿Por eso estas llorando?-- pregunte limpiando la herida de su mano con cierta preocupación, nadie podía herirse antes de la batalla

 

Severen
Abrí los ojos de una manera sorpresiva, pues sentí que alguien se acercó repentinamente a mi y me tomo la mano que se manchaba de rojo y la limpió, me pregunto el porque lloraba, pero no quería decirle en ese momento, seque mis lágrimas con mi mano libre y me hice el fuerte --no, no me duele--fue mi respuesta mientras dejaba que ella me limpiara ¿porque? Si yo era odiado

 

Taya

Una vez que la herida no hermanaba sangre tire el pañuelo en un cesto de basura cercano, luego saque una venda y comencé a vendar la mano -- Bueno... Ya esta listo, severen ¿no? -- me aleje un poco para rolearlo -- Trata de no tocar tu mano, te puede arder

 

Severen

Cerré mi puño después de que ella lo dejó al aire --¿porque lo haces? --Le interrogué, sin mirarla y agache la mirada, me había dado melancolía tal acción, pude sentir que la nobleza prevalecía en su corazón su pureza me inquietaba tanto, mis ojos se volvieron cristalinos, no pude evitarlo pero trate de aguantar

 

Taya

-- ¿Hacer que? -- pregunte confusa dándome la vuelta para mirarlo confusa, ¿se refería a curarlo? -- Ya eres miembro del equipo... Normalmente, en una manada se cuida a todos. Aunque se que esto no es una manada realmente... -- reí levemente, si fuéramos una seríamos una completamente extraña

 

Severen

Me sorprendí tanto de su respuesta que alce mi cabeza para mirarla , ella me acertaba en el equipo ¿no? Me cuidaba ¿eso entendí? Su sonrisa fue tan cautivadora que logró que una sonrisa discreta apareciera en mis labios --gracias --le susurre --puedes llamarme kraven por cierto...--le dije pues el otro nombre me traía malos recuerdos, no ese momento recordé que tenía más cortadas en los brazos, así que baje mis mangas para que no se vieran --¿quieres que te acompañe a algún sitio?

 

Taya

-- ¿Kraven? -- murmure mirándolo, si así quería que lo llamara no me molestaba en lo absoluto -- Esta bien, no hay problema -- sonreí y comencé a caminar al parecer con el mi lado -- Realmente estaba buscando las habitaciones.. Ya que supuse que sería un viaje algo largo

 

Hansamu
Después de estar un rato en la cubierta, me adentre a los pasillos, a decir verdad, solo quería explorar, así que iba sin rumbo.
Hasta que escuche una voz familiar, con otra no tan familiar.
Me asome discretamente y vi a Taya tomando la mano de aquel vampiro...
Sentí como se me revolvía el estomago, pero...después de darles una última mirada, me si la vuelta, no es como si tuviera que ver conmigo, pero...se sentía algo raro.
Agite con fuerza mi cabeza mientras salía a cubierta, era imposible que me sometiera así estando tan poco tiempo en el mar.
- Pff - se rió mi opuesto.
- Oh, cállate. - le dije con rudeza, pero solo hizo que el soltara una carcajada.
- Uchikina, voy a darle una paliza a ese tipo, cambiemos de lugar.
- ¿Eh?, ¡Ah!, si. - dijo Uchikina nerviosamente - Pero no le mates, ¿Okay? -mientras cerraba los ojos.

 

Kira.

Estaba sentada en el suelo de la nave mientrsas analizaba el collar que nos habían dado, seguia sintiendome culpable, por mi culpa el hijo de la reina habia muerto. Yo no merecía nada.

Una voz me saco de mis pensamientos, levante la vista y me tope con la mirada de Eliott.

"Kira... tengo que hablar contigo"

Dijo un poco nervioso, lo estudie de arriba para abajo intentando saber el porqué queria que hablemos. Me levante del suelo y limpie mis ropas.

—Claro Eliott, ¿de que quieres hablar?

 

Taya

Seguí mi camino de encontrar las habitaciones (que hasta ahora no me iba tan bien) cuando delante de nosotros vi a alguien familiar, muy familiar para mi -- Ya vuelvo...-- murmure al vampiro con una leve sonrisa, era de mala educación dejarle allí después de que el hubiera decidido acompañarme en vez de poder estar haciendo algo mejor.

Me aproxime lentamente hasta que me logre estar detrás de el y le abrace levemente -- ¿Ya te sientes mejor Hansamu? -- pregunte en un murmullo soltándolo para rodearlo y quedar frente a el, quedando con la sorpresa que tenía los ojos cerrados, ¿porqué?

 

Uchikina
Ya habíamos hecho el cambio, y hice una pequeña sonrisa algo forzada, al ver como Hansamu correteaba a Hell, diciendo que no se preocupara, que no podía morir.
Pero una voz interrumpió mi vista, Taya me estaba hablando...pero como si fuera Hansamu, aunque no se podía evitar, después de todo eramos idénticos.
- T-Taya...h-hola, umm, esto....estoy como Uchikina ahora...- me rasque la nuca, mientras bajaba la mirada, pero la voltee a ver de reojo, y agite mi cabeza con fuerza. ¡No, fuera pensamientos!

 

Taya

Ladee levemente mi cabeza y lo mire detenidamente, en efecto era uchikina, hace mucho que no le veía por aquí, así que le sonreí amablemente a modo de disculpa -- Lo siento de espaldas no pude reconocerte , ¿cómo estas uchikina?