Claro Pincel

Estaba completamente relajado y calmado, ahí, junto a Mizuki y sin problemas que fastidiaran, todo tranquilo t sereno, momentos así no se dan todos los días

 

Abri un poco los ojos, y solte un pequeño suspiro.
—Me siento un poco tranquila—susurre sonriendo levemente mientras veia el cielo.

 

Seguí mirando el cielo y cerré los ojos para pensar con mayor tranquilidad

 

--Si--Sonrei levemente al ver el cielo para despues bajar la mirada y cerrar los ojos--

 

Me acosté en el suelo, me gustaba estar así de tranquilo y calmado sin problemas, era grandioso

 

Mientras miraba el cielo, decidí cerrar los ojos y ponerme a pensar en algo.

 

Abrí un poco los ojos y sonrei
--Que tranquilidad--Murmure mientras miraba al cielo

 

Abrí los ojos, todo el lugar en completo silencio y el cielo estrellado hacía esto un momento tranquilizante y pacífico
—Pues, si, nunca había disfrutado tanta tranquilidad... —dije sonriendo levemente—

 

Estaba cayendo dormido pero no queria dormir aun

 

Seguia mirando el cielo
--Jaja, exactamente--Le dije a Rojo sonriendo

 

Abri los ojos, y note que yair casi se quedaba dormido.
—Oye, ¿porque no descansas?

 

--Porque no quiero dejarte sola--Le dije sonriendo cansadamente mientras la veia--

 

Sonrei.
—Pero si es para que tu descanses, no me importa que me dejes "sola"—le dije sonriendo mientras lo veia.

 

Comenzaba a hacer un poco de frío
—Brr, ¿No tienes frío? —pregunté—

 

--Vale...aunque antes quiero terminar--Le dije sonriendo mientras le daba un beso corto en sus labios--

 

Sonreí y le di un beso en la mejilla.
—Descansa—le dije sonriendo.

 

Mire a Rojo
--Pues con sinceridad un poco de frío si que tengo--Le dije sonriendo a Rojo

 

--Tu tambien--Le dije sonriendo mientras cerraba los ojos y me quedaba dormido poco a poco hasta que me quede dormido--

 

Me apegué a ella con la intención de darle un beso corto en los labios, y lo hkce
—Ya está... Si está haciendo frío —sonreí levemente sonrojado—

 

Sonreí, y lo acomode un poco para que durmiera bien, luego yo me recosté en el árbol y empece a cerrar los ojos, ya que el sueño me empezaba a ganar, hasta que me quede completamente dormida.