—¿Oh, sí? —miré Mizuki— No lo veo muy posible: tengo conocimiento de los Gardevoir son los pokémones más fieles que existen... Si la de Yair lo traicionó, habrá sido producto de alguna trampa, no creo que lo haya hecho adrede... En fin... ¿En qué consistió la "traición"?
—Pues lo lamento, Yair, eso fue producto de la casualidad. Si tanto te molesta, no tengas tus problemas en la vía pública...
--Lo se, es un poco raro--Le dije--Pues se puso de parte de los que quieren matar a Yair--Le dije a Hubert y miro a Yair--Tampoco es para ponerse asi--Le dije a Yair
Me llevé una mano a la cara —Unos tipos le tendieron una trampa al chico y manipularon a Gardevoir, pero sigue empeñado que es culpa de ella —respondí—
Me reí irónicamente al saber que Gardevoir era injustamente culpada por algo que, en realidad, no había hecho. —¿Y he oído bien...? —dije de pronto, cruzándome de brazos y mirando a Yair de soslayo— ¿Cómo te atreves a considerar la opción de liberarla? Muy feo de tu parte, Yair, te estás precipitando. Primero deberías calmarte antes de hablar. Romperías el alma de Gardevoir en pedazos, imagina cómo de triste se pondría.
Ninetales salio de su pokeball y este me miro fijamente --Que pasa?--Le pregunte y este solo me pidio que me montara en el por lo que me monto y este me llevo corriendo a alguna parte--
Asentí ante lo que decía Rojo. —Lo único que deseo es que esos impulsos no lo hieran, y mucho menos a sus pokémon —respondí, volteándome para mirarlo—. Yo obviamente no puedo hacer algo por ayudarlo: como habrás visto, Yair huye cada vez que me acerco a ustedes —suspiré—. En fin, por lo menos sé que tú puedes evitar que alguien salgo lastimado de sus embrollos: me doy cuenta de que, pase lo que pase, eres fiel a tus amistades.
Segui montado en ninetales y este siguio corriendo hacia una parte --.....debi creerle?--Dije mientras veia el camino--
Tras lo que dijo Hubert asentí —Buscaré a Gardevoir y a Yair, y voy a hacer que se reconcilien, de una manera u otra —me levanté a cumplir el cometido—
—Te acompaño —le dije, regresando a Pidgeotto a su pokébola— Serperior, Maractus, vayamos a apoyarlo. Maractus asintió entusiasmado, haciendo sonar su cuerpo, mientras que mi inicial lo hizo con desgano. Seguimos a Rojo hasta donde se encontraba Yair.
Blastoise rió ante la acción del simpático cactus y me acompañó hasta donde estaba Yair —Detente un segundo, Yair...
--.Vale que pasa?--Le pregunte a rojo ya calmado y veia como gardevoir estaba siguiendo a los chicos--
—Discúlpate con Gardevoir, por que la has culpado de algo que no ha hecho, vamos, Gardevoir fue manipulada —le dije— Les tendieron una trampa a ustedes dos, eso es lo que quieren esos tipos, que desconfíen, y a la final terminan siendo una presa fácil, los dos
—Por que quieren que te separes de tus pokémon, no tendrás a nadie que te defienda, eso es ser presa fácil —respondí— Muy bien, Yair, Gardevoir, hora de disculparse
--Cierto...y vale...--Le dije mientras me bajaba de ninetales y me acercaba a gardevoir la cual seguia triste--Perdon gardevoir no era mi intencion herir tus sentimientos--
Sonreí un poco —Vamos Gardevoir, el tampoco sabía lo que hacía —respondí y me volteé hacia Hubert— He oído que capturaste a Cresselia y al Hada Soñadora
Gardevoir asintio sonriendo y feliz --Pero porfavor no vuelvas a aceptar cosas de desconocidos vale?--Le pregunte sonriendo y esta asintio--