Clefairy saltó repentinamente de mis brazos y se echó a correr por su cuenta… llegó una plaza no muy poblada, a pesar de que hacía un caluroso día de sol, y se encontró cara a cara con un Togekiss… el mismo Togekiss que había visto sobrevolando el pueblo donde fue capturada por su propia voluntad. El pokémon hada dio un saltito de alegría y se marchó de la plaza de regreso por donde vino, haciéndole una seña al Togekiss para que la siguiera, y fue saltando con su entusiasmo usual hasta llegar junto a su querida entrenadora de nuevo.
Después de presentarme a Effy, me puse un poco tensa así que comuniqué que me iría a dar una vuelta. Para no estar del todo sola, saqué a Luxray para que me acompañara. Caminando y "hablando" con Luxray, el cual solo hacía más que gruñir como respuesta, me encontré un Charizard con un huevo pokémon entre sus manos. Me pareció bastante... ¿gracioso? No, curioso, y decidí a acercarme. También había un Espeon, muy bonito por cierto, junto con la silueta de una persona. —Er... hola. —dije con timidez, parándome unos cuantos metros alejada del Charizard. Podía ser de esos entrenadores que no les gustara que se acercaran y tocaran a sus queridos pokémon. Seh, hay gente así.
Escuché una voz, la cual nos llamó la atención a mis pokémon y a mi. --Vaya... ¡Hola! ¿Pasa algo? Me sonaba... Me sonaba mucho... Pero bueno, decidí no darle importancia. Me fijé en las distancias que guardaba con mis pokémon y sonreí. --Tranquila, no muerden. Bueno, sólo si no tienen hambre.
Togekiss, con mucha curiosidad, emprendió el vuelo en dirección al rosado... —¿De nuevo te vas? —pregunté en voz baja algo exhausto. Lancé un suspiro, y sin más remedio, me puse a correr para no perder de vista al pokémon festejo.
Yo sonreí, parecía simpática y también me recordaba mucha alguien. Pero no tanto como me pareció Liza al principio. —Nada, ¿ese Charizard es tuyo? —le pregunté con una sonrisa.—Tiene un huevo pokémon, ¿también es tuyo? —me quedé mirando ese huevo con curiosidad, nunca antes había visto uno de tan cerca.— ¡Ah, perdona las molestias!, me llamo Jenna. —agregué atropelladamente— ¿y tú? Quizás fuera tímida, pero no suelo serlo si estoy sola. Cosas de la vida de cada uno.
—¿A dónde te habías metido, Clefairy? —le pregunté, cruzada de brazos—. ¿Qué dijimos sobre salir corriendo sola así nada más? No me hagas tener que repetirme… Levanté la mirada de mi pokémon… tras ella se acercaba un Togekiss planeando hacia nosotros, y detrás de aquella hada voladora un tipo que supuse era su entrenador… al acercarse, lo recordé, era el chico que había conocido hace tiempo, había tenido una batalla y todo, incluso creí haberlo visto en el volcán… ¿Steve era su nombre? Sí, era ese su nombre… creo. —Buenas, Steve —me arriesgué con una sonrisa.
Al ver a Effy al frente, supuse que de ella era el Clefairy. Vaya, tieempo que no veía a esa chica. Incluso me pareció que no recordaba mi nombre, así que decidí hacerle una pequeña bromita... —Oh, Estefi... ¿qué tal? —¡Toge, Toge! —exclamó Togekiss saludando.
Jenna... ¡Pero si me suena un montón! --Me llamo Destiny, y sí, tanto Charizard como el huevo son míos, al igual que el Espeon. Espeon saludó con su cola estando aún sentado en el suelo, pero Charizard no hizo nada. --Charizard... Non essere poco istruiti e saluta -- Dije en otro idioma riñendo al "dragón", y al parecer funcionó, ya que se giró a la chica, acercó su hocico, e hizo su característico sonido para saludar. --Él es un poco... Raro con los desconocidos, pero en el fondo es muy buena gente.
Destiny... En algún sitio que FIJO lo había escuchado Sonreí y saludé con una mano al Espeon y al Charizard cuando este lo hizo. Luego me di cuenta de que había hablado en otro idioma al pokémon y sentí aún más curiosidad. —Oh, no te preocupes. Cada pokémon tiene su propia personalidad, es entendible. —asentí yo, con otra sonrisa.— ¿En qué idioma has hablado? ¿Qué significa esa frase? —ladeé la cabeza con curiosidad.
--Pero este es "especial"... Retard vamos... Charizard gruñó, y miró a otro lado. --Y respondiendo... Hablé en italiano, y exactamente le dije que no fuese maleducado y que saludase.
Yo parpadeé perpleja. —¿Has insultado...? —sacudí la cabeza— Nada, perdón. ¡Vaya! ¿Sabes italiano? —me acerqué un poco más.— ¿Y desde cuándo tienes el huevo? ¡Que suerte que tengas uno! —fruncí el ceño, inflando las mejillas.
Reí. Creo que no sabe mi relación con Charizard. --Él sabe que es de broma-- dije riendo --. Y no sólo sé italiano. También Catalán, inglés, alemán un poco de ruso, un poco de japonés... Pero en fin. ahora sobre el huevo... ¿Quieres uno? -- le pregunté
—Es Effy —le aclaré… vaya, no era la única que recordaba poco del otro, al menos. Eso hizo que respirara un poco más normalmente, pues así era menos presión el no recordar muchos detalles del otro, y la charla se hizo algo más suave y amena—. He estado bien, no me puedo quejar realmente… entrenando mucho, por supuesto. ¿Cómo has estado tú? Ese Togekiss es muy bonito… ¿tú pokémon, intuyo?
Suspiré aliviada. —Ya veo. Bonita relación, jaja. —sonreí ampliamente— ¿Catalán? ¡Yo sé valenciano, que es un idioma igual pero que cambian palabras! Aunque, dirás que si tienen palabras distintas no son iguales, ¡pero sí son el mismo idioma! Se habla igual, la fonética...— ya, ya estaba en mi mundo. Sacudí la cabeza para despejar eso.— ¿Huh? ¡Sí, sí quiero un huevo! ¡Me haría mucha ilusión!
—¡Oh!, ¡Eseffy! Claro disculpa... —dije disimulando las ganas de reírme. La chica se veía relajada al pensar que yo tampoco recordaba su nombre, supuestamente. Al escuchar el cumplido, Togekiss sonrió y con un aletazo, hizo que una rosa cayera hacia Effy para agradecerle la buena onda. —Gracias, era mi Togepi que evolucionó recientemente. ¿Y ese Clefairy?
—Es Effy… E, F, F, Y —le deletreé al chico con cuidado. Al principio pensé que quizás era un idiota… pero luego al ver su expresión me di cuenta de que me estaba cargando. Suspiré, los chicos siempre serán chicos supuse… Y en eso, me cayó una rosa de la nada del cielo, era muy bonita, miré y vi que fue el Togekiss del muchacho el que me la dio… bastante bella, le agradecí al Togekiss con una amplia sonrisa que significó que me agradó el gesto, y el tipo hada pareció complacida con mi respuesta. —Oh, este Clefairy es mi más reciente compañero… se nos unió en un pueblo hace poco, prácticamente se capturó sola —admití, rascándome la nuca al admitir esto último.
Me leyó la mente... No es lo mismo si hay palabras distintas. --Bueno... Podría llevarte para que te lo den, pero tendrías que subir conmigo en Noivern.
Contenido oculto JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!!! Esperaba esa reacción "E,F,F,Y" jajajajajajjajaja —Oh, sí... sí —dije ya soltando todas las ganas de reírme—. Pues está bonito tu Clefairy, te felicito.
—Gracias —le sonreí en respuesta, a la vez que jugaba con la rosa en mis manos. Clefairy, al sentirse aludida en la conversación, saltó de arriba abajo de felicidad—. Y dime… ¿qué te trae por Ciudad Barniz?
[¡QUE SÍ SON EL MISMO IDIOMA, CARAJO! D:< Lo sé yo mejor que no paro de darlo en clase de valenciano...] Empecé a tartamudear un poco. —¿Tengo que alejarme de aquí? Liza y los demás no lo saben. Aunque... sí quiero ese huevo. —me mostré indecisa, mirando hacia atrás, como si aún los pudiese ver.