Ciudad Témpera

Sonrei a Sylveon y noté un pequeño terremoto--Debe ser una gran batalla--Murmure para despues ponerme a mirar al cielo

 

Vi a Effy salir de esa trampa gracias a su Steelix—¡Estan bien!—exclame al ver a mis dos pokemon solo que estaban malheridos— ¿Puedes dejarme a Arnine y Chuchu aqui, effy?—le dije antes de ver a mi padre—no te saldras con la tuya,por favor dragonite tarremoto otra vez—le dije cuando noto a chikita correr hacia mi— ¡Chikita!—la abrace para aferrarme a ella por el terremoto.

(@Nami Roronoa)

 

—No, no iba a dejarlos aquí, pensaba tirarlos por la ventana —repliqué con mi sarcasmo usual, descendiendo de Steelix de un salto. Sneasel y Vileplume saltaron detrás de mí, y Alakazam posicionó al Raichu y Arcanine con delicadeza usando sus habilidades psíquicas—. Vamos a demostrar como se hace esto de verdad… ¡Dragonite, Carga Dragón! ¡Vileplume, Rayo Solar! ¡Steelix, Foco Resplandor!

Mis tres pokémon lanzaron de inmediato sus ataques más poderosos, que fulminaron a los tres pokémon del oponente… Mitsuki se abrazaba a su Bayleef, pero su padre intentó aprovecharse de que ella no la veía para tomarla por la espalda… Alakazam fue más astuto y lo detuvo con un Cabezazo Zen, pero Bayleef salvó el día liberándose del agarre de su entrenadora y aprisionando al hombre con sus látigos. Vileplume y Bayleef combinaron sus esporas para lanzar un potente somnífero que lo durmió en el acto.

—Ah, por fin… se ha terminado… —apenas terminé de pronunciar la última sílaba, todo el suelo comenzó a temblar—. Maldición, tenía que hablar antes de tiempo…

La estructura estaba en decadencia… la fuerza de Steelix al escapar del sótano fue demasiado para la estructura de la casa, se estaba desmoronando. Regresé rápidamente a Vileplume, Sneasel, Alakazam y Steelix, y liberé a Skarmory. Dragonite aprisionó con sus potentes brazos al padre de Mitsuki, y le ordené que lo llevara a la Oficial Jenny para que lo pusiera bajo custodia.

—¡Mitsuki, tenemos que irnos! —exclamé a la vez que montaba a Skarmory—. ¡Regresa a tus pokémon a sus pokebolas y vámonos de aquí antes de que se nos caiga la casa encima!

 

Sylveon se aferró a Mizuki, asustada, Heracross y Pinsir intentaron mantener el equilibrio exitosamente, Mankey ni se molestó en aferrarse a algo ya que no se podía caer
—Ahe, si, supongo que ese debe ser el Dragonite de Effy

 

—¡Esta bien!—me acerque rapido a arnine y chuchu para poner una mano en su frente—. No los volvere a dejar…

Los regrese a los dos seguido de Chikita para luego montarme en el Skarmoty de Effy.

—Ya podemos irnos —dije tras haber montado.

 

Vi que Sylveon se aferró a mi por lo que la abrace con un brazo mientras que me aferraba a Typhlosion con el otro brazo

--Supongo, pero es muy potente--Le dije

 

—¡Skarmory, sácanos de aquí!

Tras mi exclamación, el ave de acero desplegó sus alas y se alzó fuera de la casa por el agujero en el techo causado por Steelix anteriormente… a medida que no alejábamos en el aire, volví la cabeza y vi como la casa se caía a pedazos, y se reducía a escombros… había estado muy cerca, un momento más allí y no la contábamos.

—Skarmory, llévanos a casa —le solicité al pokémon, el cual asintió… me conocía lo suficiente como para saber hacia donde nos dirigíamos.

Tras un rato de zurcar el gran y vasto cielo azul, descendimos sobre la parte trasera del centro pokémon… Joy salió en compañía de su leal Chansey a recibirnos de inmediato, y recibió en sus manos las pokebolas del Arcanine y Raichu de Mitsuki… estaban muy malheridos, pero Joy era una muy hábil enfermera, y se puso a trabajar en su curación intensiva de inmediato. Nosotras, por nuestra parte, ingresamos al centro y nos sentamos en los sillones del hall de entrada, esperando a que Joy terminara el tratamiento y saliera a decirnos como se encontraban los pokémon heridos.

 

Me quede callada...ya habia acabado todo con mi padre ¿no?—...Gracias Effy—le dije levantando la mirada, tenia razon en lo que pensaba de ella...al principio puede parecer fria(si le puedes decir asi) y muy sarcastica con uno, pero si la conoces bien te das cuenta de que en realidad era una grandiosa persona y muy amable—Si no fuera por ti, nunca me hubiera enfrentado a mi padre.

 

—Probablemente… pero al final lo hiciste, no te rendiste cuando quedaste sola contra él —le dije para alentarla… seguramente estaba preocupada por sus pokémon, debía intentar alejar su mente de ello—. Lo cual me recuerda… ¿tienes las pokebolas de Jolteon y Dragonite? Te la di antes de caer allí, en plena batalla...

 

Ya habiendo pasado todo me levanté y miré todo a mi alrededor, estaba tranquilo como de costumbre
—Como que todo acabó —le dije a Mizuki—

 

Busque la pokeball de Jolteon la cual estaba en mi cinturon y se la di—ten, y dragonite, recuerda que lo enviaste para que llevara a mi padre a la Oficial Jenny—le dije sonriendo.

 

—Lo se, pero la pokebola vacía la tienes tú… y hablando de Dragonite, ya debería estar volviendo, espero se de cuenta que estamos aquí… —suspiré, mirando la pokebola en mi mano. Liberé a Jolteon y el tipo eléctrico se sentó en el sillón junto a mí, acurrucado y con su cabeza sobre mi regazo. Lo acaricié con ternura mientras esperabamos—. Tranquilo Jolteon, pronto volveremos a entrenar… creo que tras esta gran pelea, nuestro pequeño descanso de las batallas ha llegado a su final.

 

Mire a Rojo--Pues eso parece--le dije a Rojo mientras me levantaba junto a Typhlosion el cual estaba preocupado aun

 

Suspiré
—Bueno, ¿Nos quedamos o nos regresamos a Óleo? —le pregunté a la chica mientras me levantaba—

 

Busque la pokeball vacia de Dragonite y se la di a Effy—Aqui esta—le dije sonriendo antes de recordar algo...o mejor dicho, a alguien, por lo que saque a doddy y le susurre algo y este asiente con las dos cabezas—te espero—doduo sale del CP y usa vuelo a buscar a alguien.

 

Nos quedamos, quiero ver a Mitsuki lo antes posible y si nos vamos quizas ya no la volvamos a ver hasta un buen tiempo--le dije a Rojo sonriendo

 

—¿A dónde fue tu Doduo? —le pregunté, curiosa, mientras acariciaba a Jolteon—. Oh mira, Joy ha salido ya…

Al escucharme, Jolteon saltó en su lugar y salió disparado hacia la enfermera… me puse de pie y fui tras Jolteon seguida por Mitsuki, que estaba algo temerosa de lo que dijera la enfermera… sin embargo, traía buenas noticias: Raichu y Arcanine se repondrían, las heridas fueron sólo superficiales, unas cuantos omnipociones bastaron para curarlos, aunque Joy le hizo prometer a Mitsuki que les diera buenas cantidades de alimentos para recuperar sus energías al máximo durante los próximos tres días.

Tras terminar de hablar, la amable mujer y vieja amiga mía le entregó a la chica las dos pokebolas y se retiró, había más pokémon que debía atender.

 

A la mente me vino una idea
—Venga, puede que esté en el Centro Pokémon, ¿Quieres ir a ver? —le propuse a la chica—

 

—¡Gracias enfermera Joy!—le dije ya que ella estaba ya lejos para luego yo sacar a los dos pokemon y abrazarlos—Chicos...lo siento—les susurre y arnine me correspondio el abrazo con una de sus patas delanteras y chuchu con sus patas—Pero lo importante es que estan bien—les dije mientras unas pequeñas lagrimas resbalaban por mis mejillas.

mientras Doddy ya habia aterrizado en la ciudad con el entrenador en su lomo y lo dejo delicadamente en el cesped, esperaba que el no se molestara por dejarlo solo. doddy volvio a entrar al CP

(@LucarioErmitaño)

 

Bueno valep, no hay otra cosa que hacer--Le dije sonriendo mientras empezaba a caminar junto a Typhlosion