Levon

Hell
—Tks, que molestas—dije mientras de mi ser salia fuego azul y quemaba las cadenas que me había pillado, aun no eran fuertes, ya que Hansamu seguía peleando por controlarse, así que por ahora era fácil librarse —sera peor si intentas salir es ese estado, en el cuerpo de Hansamu y Uchikina, no importa como lo veas, siguen siendo puros, solo puede salir un ser igual de puro, mejor apresúrate y platica con tu ser, si necesitas ayuda lo haré, pero no peleare por ti
—¡Si dejaran de platicar seria feliz!—Nos grito el molesto de Hansamu— argh

 

Blake
Había escuchado un grito y supuse que se trataba de uno de los gemelos — estoy en eso- le dije a Taya mientras me ponía de piel y recuperaba mi forma humana y caminaba hacia donde hansamu.

 

Pero no se como! -- Dije mientras un rayo blanco me atravesaba mi cabello negro se volvio blanco y mis mechones blancos a negros, --Hola chicos soy Hikari ... la parte pura de Makoto ... puaj pero que hacemos aqui? -- pregunte mirando a un chico encadenado.

 

Mar de las Alamas Perdidas.
​

Al fin habían llegado al dichoso mar, un lugar podrido y desolado, en el aire se notaba la tristeza y soledad de aquel lugar, el dolor, la impureza y repugnancia. El mar era de un color negro, con tan solo verlo se le erizaban los pelos a cualquiera y las ganas de huir albergaban en el ser de aquel.
Allí había toda clase de seres oscuros, la mayoría parecían de noche para poder tomar desprevenidos a sus victimas; pocos son los que salen vivos de aquel lugar, y pobres de ellos, pues, siempre terminan con las mente distorsionada.

Kodoku.

Me tapé la nariz cuando el olor llego a mi, hice una mueca y seguí de largo. No era la primera vez que me adentraba a ese lugar, ya había venido antes con Eliott y una que otras veces en mis antiguas misiones de ángel.

— Ahh este lugar trae recuerdos... Algunos graciosos ¿Verdad Eliott? Jajajaja.— me reí al recordar la pequeña aventura que había tenido en ese mar con Eliott; esos días en la marea bebimos tanto que terminamos siendo arrastrados por la corriente del agua y si no ¨reaccionamos¨ a tiempo ese maldito calamar gigante nos traga enteros.— Como sea, presten atención a lo que voy a decir y si se atreven a dejarme como si estuviera pintado tendré que usar el sartén.

 

Ver archivo adjunto 21194
Mar de las Alamas Perdidas.
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Al fin habían llegado al dichoso mar, un lugar podrido y desolado, en el aire se notaba la tristeza y soledad de aquel lugar, el dolor, la impureza y repugnancia. El mar era de un color negro, con tan solo verlo se le erizaban los pelos a cualquiera y las ganas de huir albergaban en el ser de aquel.
Allí había toda clase de seres oscuros, la mayoría parecían de noche para poder tomar desprevenidos a sus victimas; pocos son los que salen vivos de aquel lugar, y pobres de ellos, pues, siempre terminan con las mente distorsionada.

Kodoku.

Me tapé la nariz cuando el olor llego a mi, hice una mueca y seguí de largo. No era la primera vez que me adentraba a ese lugar, ya había venido antes con Eliott y una que otras veces en mis antiguas misiones de ángel.

— Ahh este lugar trae recuerdos... Algunos graciosos ¿Verdad Eliott? Jajajaja.— me reí al recordar la pequeña aventura que había tenido en ese mar con Eliott; esos días en la marea bebimos tanto que terminamos siendo arrastrados por la corriente del agua y si no ¨reaccionamos¨ a tiempo ese maldito calamar gigante nos traga enteros.— Como sea, presten atención a lo que voy a decir y si se atreven a dejarme como si estuviera pintado tendré que usar el sartén.

 

Hell
—Vale, ahí esta, ahora absorberlo para que sean uno o decidir si se quedaran así —dije mientras seguía esquivando las cadenas
—¡Elegir rápido!—nos presiono Hansamu, aunque si fuera yo, no pudiera haber aguantado tanto dolor que significaba aguantar un impulso, ademas, como Hansamu y Yo somos uno ahora estaba debilitado, Hansamu siempre aguantaba mas dolor, como cuando lo estaban sellando para que su parte mala se apoderara de su cuerpo, y ahí nací yo, también fue el que aguanto mas el dolor que causo el padre de Takashi cuando puso la maldición.
—Personalmente, les recomiendo unirse...si eres un ser menos demoníaco de como eres ahora, estar al lado de Lucille no dolerá— dijo Uchikina
No teníamos tiempo, por mas que Hansamu aguantara el dolor, si seguía así, moriría, y con nosotros adentro, también lo haríamos...

 

Hikari
Por ahora prefiero sali ya luego elejiremos!— dije mirando una de las alternativas para salir —no hay tiempo para decidir salgamos ya!

 

Hell
—Solo tu podrías salir ¡Idiota escúchame!— dije mientras una cadena me ataba el cuello — ¡Solo tu tienes una poca de pureza!, así que unirse o Makoto se quedara aquí
—Ya...llegamos—dijo Hansamu, y sentí como me recuperaba, estábamos en el mar de las almas perdidas.

 

Hikari
Anda el esta en mi cabeza! -- suspira-- Ademas ... faltan partes que el aun no conoce... las oculta por proteccion... vamos ya diganme como rayoz salir o si no moriremos!

 

Kira.

Salte del hombro de Lucille y salte a la cabeza de Kodoku. —¿Y cuanto crees que tardáremos en cruzar el mar? —Le pregunte al ángel sentandome en su cabeza.

 

HELL
—Por la salida—dijo inocentemente Uchikina —pero ustedes no le pueden ver
—No se preocupen, les ayudare —dije mientras le sonreía sadicamente y sin más, con mi espada el daba directamente al corazón — jomei


Hansamu
—N-no puedo más—dije mientras dejaba escapar las cadenas y aprisionaban a Hell—lo siento, no puedo evitarlo
—esta bien, tu cuerpo reacciona, aunque intente ser bueno por el, sigo siendo malo—dijo Hell mientras era jalado por las cadenas — de todos modos, esto es aburrido, volvamos a unirnos
Asentí con la cabeza y absorbí a Hell, y formamos de nuevo el mismo cuerpo, Uchikina no podía hacer eso.

 

Hikari
Gracias-- Decia saliendo del cuerpo-- Al fin libre ... --Estas bueno ser libre!-- grite sin darme cuenta en dónde estaba, un fenir una chica lobo y una unicornio... --Hey Makoto ... no se que hacer-- dije hablando con Makoto que estaba en mi mente.

Makoto
Ahora estaba en un lugar de color negro ... --no se listillo interactua! --

 

Lucille

Esta sensación...tan pacífica...tan llena de quietud..me tranquilizaba enormemente.
Mi cuerpo ya casi no temblaba y ya no sentía frío alguno. Tal parecía que la fiebre había bajado."Que bueno!" pense contenta.
Comencè a abrir mis grandes ojos lavandas muy despacio y lo primero que pude observar fue a la preciosa forma lobo de Taya que yacía junto conmigo en el suelo. De inmediato me invadió una gran sensación de ternura y comencé a acariciar su bello pelaje.
—Taya...muchas gracias por permanecer a mi lado todo este tiempo...eres la mejor amiga que un unicornio podría tener- expresé sonrojada con dulzura.

 

Taya

Lucille y había despertado y había comenzado a acariciar mi pelaje, yo me levantarme lentamente para ayudarla a sentarse en el suelo y recargar mi cabeza en su hombro, por lo menos sabía que ella estaba mejor

 

Blake
Me encontraba caminando hacia Hansamu cuando de repemnte vi a Makoto salir del cuerpo de este — tu!! Uraca!! Ya me recuerdas o tengo que hacerte recordar?!! - amenaza a Makoto mientras hacia tronar mis nudillos

 

Hikari
Uraca Makoto! -- grite mirando a el fenir-- un gusto yo soy Hikari! ... se nota que no soy Makoto por mi cabello blanco y mis alas no son negras vez? -- decia enseñándole mis alaa blancas.

 

Lucille

—Eres muy hermosa Lady Taya! Ahora sí te quedaste! Muchas gracias!!- le dije sonriente.
—Discúlpame por quedarme dormida! Pasaron muchas horas desde que me dormí?.
—En verdad eres muy bonita! en tus dos formas...y tienes el pelo largísimo! si no te hubieras quitado tus trenzas nunca lo hubiera notado! Huummm...quieres que te cepille el cabello y lo arregle en un lindo peinado- le dije acariciandola con sutileza.

 

Blake
—Pero que €%&#@... - dije con cara de incrédulo — no me digas que tu también tienes personalidad múltiple!! - le grite a Hikari — no seras uraca pero en definitiva te voy a llamar gaviota, quien se supone que eres tu? - le pregunte ya estando mas serca de el.

 

Taya

¿Lady?... vaya, no me hubiera esperado eso en ningun sentido, pero no era nada malo. Abandoné mi forma de lobo cuando terminó de acariciarme y me senté frente a ella colocando una de mis manos en mi nuca

— No importa... fue un placer haberte ayudado, pues... creo que no muchas... — dije no tan convencida — Y sobre eso último... lo dejaré a tu decisión

 

Pues nisiquiera yo sabia ...bueno Makoto no sabia-- decia mientras una gota de sudor caia por mi nuca-- Hacia que Gaviota. .. x que el afan de llamarnos como las avez? ... soy la parte pura de Makoto ... su bondad interna ... el timido y hasta cierto punto debil e inocente--