[Capitulo Nueve]: Manos a la Obra

[Descansa, buenas noches]

— Me refería a emocionalmente —le miré casi llorando cuando habíamos llegado al salón y empezaba el maquillaje— ¿Qué te hace sentir? —me sentí triste, nunca soñaba mucho sobre ese momento, en realidad para mi no era tan importante, pero de algún modo me llenaba de curiosidad y un gran vacío en el corazón.

 

Unos cuantos minutos después de que retome la clase esta finalizo y todos salieron bastante apresurados así que rápidamente me quede sola —tal vez sea por lo del café que se va a abrir— pensé así que tome mi bolso y decidí dar un paseo por la escuela, empece a caminar por los pasillos sin rumbo fijo pensando en todo lo que había ocurrido hasta el momento.

 

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Este pots sí esta a la par con el rol n.n el otro ya no n.n y creo que el anterior lo voy a eliminar dentro de un rato ya que estoy por ingresando por el celu y es un poco costoso

Dejando mis cosas en mi habitación mire la hora que era en mi celular, eran las 5:20
pm, suspire, no me habia dado cuenta de lo que antes tarde desde casa hasta la escuela... ahora ya no podia ir a clases ya que no habia clases a esta hora...

—Bueno, deberia apresurarme e ir a dirección para avisar mj regreso al director... ya que dijo que fuera cuando volviera de mi licencia —dije para mi misma y tomando una bocanada de aire y sintiendo aquella inseguridad de siempre salí de la habitación y me encamine en rumbo a la dirección...

No me tarde mucho en llegar ya que había apresurado mi paso desde el inicio para llegar cuanto antes, me asome por la puerta y mire adentro, el subdirector estaba ahi en su escritorio...

—Bu-buenas tardes —dije con tartamudes y el hombre serio me miro y respondio a mi saludo.

—Etto... solo venia a decir que muchas gracias por darme la licencia, fue dificil resolver el problema pero al final se resolvio y ahora pude volver para continuar mis estudios... —mencione y el mayor solo dije que era una alegria que todo estuviera bien.

Con eso, luego de unas cuantas palabras, el subdirector dijo que me marchara a lo que con tranquilidad obedeci.

Ya afuera empece a caminar sin rumbo por el lugar— A donde seria mejor ir ahora —dije mientras miraba a mi alrededor...

Suspire un poco y tome el camino a la derecha y a lo lejos pude ver a cierto chico pelirrojo... Mis ojos se abrieron al reconocer a Shion-san, mi corazón empezo a latir, él aun no habia reparado en mi presencia pero... como habia pasado días desde que lo vi...

Una sonrisa aparecio en mi rostro mientras me sentia un poco nerviosa y tomando aire me atrevi a llamarlo.

—¡Shion-san!

 

No dije mucho mientras pensaba si buscar a Len para ayudarme con el arregló, por lo que había escuchado era bueno en estás cosas— Me pregunto donde estará —mientras caminaba observaba el cielo, las nubes y el sol.

 

seguí caminando por un par de minutos más seguía absorta en mis pensamientos cuando una suave brisa me trajo a la realidad —vaya que no hay mucha gente por aquí todos estarán ocupados— pensé di un leve suspiro —y yo que no quería quedarme sola en mi primer día— baje la mirada y decidí que debía aprovechar el tiempo así que me senté abrí un cuaderno y empece a escribir y tararear una canción

 

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Me había cambiado como había podido, incluyendo las extensiones del cabello, y aplicado maquillaje suave, como solía aplicarlo en mi hermana, me miré al espejo y sentí miedo— ¿Desde cuándo soy tan femenino? —me quejé, pero rápidamente sonreí tratando de entrar en personaje— ¿Hola? —dije suavizando la voz, sonando bastante femenina— mucho gusto —sin hacer más empecé a caminar con los volantes, cuando escuche una voz, seguí el canto, era algo torpe pero sumamente atrayente y encontré a una chica escribiendo en su cuaderno— ¿Hola? —dije fingiendo ser una chica, incluso en mi forma de caminar— ¿Estás sola? Vengo a invitarte a mañana una inauguración de un maid café —me sorprendí al ver de cerca que se trataba de Lily-chan, pero seguí en mi papel.

 

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—hola— dije sonriendo con una leve sonrisa —si, estoy sola jejje y gracias por invitarme — dije sonriendo algo en esa chica se me hacia conocido pero no quise preguntar —y por cierto una pregunta espero y no te moleste ¿tu estudias aquí? es que nunca te había visto— pregunte curiosa mientras sonreía levemente

 

— ¡Claro que estudio aquí! —sonreí— mi nombre es Miki Hatsune ¿Y el tuyo? —agregué con demasiada confianza, luego fijé mi mirada seria en sus ojos— aunque soy de segundo año, quizá por ello no me has visto —mostré una leve sonrisa mientras me sentaba a su lado— dime... ¿Qué tarareas?

 

—oh, tal vez sea por eso, mucho gusto Miki-san mi nombre es Lily— dije sonriendo la voltee a mirar —bueno en realidad es una canción que escribí no soy muy buena lose jejeje— dije un poco sonrojada realmente no estaba acostumbrada a que me escucharan cantar

 

— Suena bastante bien —sonreí con calma— solo que deberías evitar que alguien la escuche para que no te roben la idea —luego empecé a cantar un poco de su letra, fingiendo un poco mi voz, sonaba lo suficientemente aguda como para pasar desapercibida— bueno, no tengo tan buena voz Li-san —dije haciendo una rara abreviación.

 

reí levemente —sabes nunca me habían llamado así— sonreí —y no cantas mal Miki-san— dije sonriendo y mirándola a los ojos —ciertamente no creo que la roben y si así fuera realmente lo hago por diversión así que no me molestaría— —¿y tocas algún instrumento o solo cantas?— pregunte algo intrigada y feliz

 

Llegue a el edificio de los dormitorios, no parecía haber nadie por ahí y eso me calmo, al menos tendría un tiempo para acostumbrarme al disfraz. A la puerta de mi habitación pude observar un paquete en el suelo, como tenía mi nombre lo tome en mis manos, entre en la habitación y abrí el paquete curiosa. En el había un helado de peluche, cuando lo vi sonreí era bastante lindo, lo puse en mi cama al lado de mis almohadas, a partir de ahora dormiría con el. Mire la caja en la que venía el peluche, había lo que parecía ser una carta, la abrí de inmediato para ver quien me había dejado ese regalo.

Contenido oculto: Carta :3

Querida hermanita, espero que mi regalo te guste.
Cuando lo vi, pensé que te encantará tanto como a mi.
Sin más, espero que tengas un buen día.
Te quiero.
Kaito.

PD: Aléjate de ese tal Luki, no me agrada...

Reí inevitablemente al leer el postdata. No estaba segura si debía quedarme con el regalo o no, no quería nada con Kaito y que el me regalara algo me hacía pensar que quería una reconciliación o algo así. Suspire, no estaba muy segura lo que debía hacer, sin embargo en este momento debía ponerme el disfraz y salir a repartir volantes. Deje la carta de lado y tomo el paquete donde esta el disfraz, aún sigue ahí, sigue sin desvanecerse o algo así... Suspiro nuevamente, lo saco de ahí y seguidamente trato de ponérmelo, me cuesta un poco subir el cierre, sería más fácil si una persona me ayudara. Trato de subirlo pero por más que lo trato, no puedo hacerlo, parece que no subirá mientras lleve mi ropa puesta. ¿Qué debería hacer? ¿Quitármela y salir en ropa interior? Claro, con el disfraz pero yo sabría que estoy en ropa interior y me haría sentir incomoda. ¿Debería desobedecer a la dirección? Ah... Eso no suena nada bien.

Finalmente decido quitarme mi ropa y entrar en ropa interior al traje de conejo, me pongo mi bufanda de igual manera, para sentirme un poco más normal. Salí un poco avergonzada de la habitación, seguía sin haber nadie en el edificio y eso me tranquilizo. Cuando salí de ahí con los volante ya estaba un poco más tranquila, ¿me encontraría con alguien pronto? Camine por los alrededores para tratar de invitar a alguien al café. Llevaba unos minutos de caminata, cuando vi a una Lily sentada en una banca, solo que estaba acompañada de una chica con traje de lolita gothica, así que seguro Lily ya tendría un volante. Decidí tratar de pasar desapercibida para que Lily y la chica no me vieran con el traje de conejo.

 

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— ¡Oh! Ka-san —vi a la chica de pelo azul e hice señales leves para que se acercará— bueno Li-san, yo suelo tocar un poco la flauta, pero nada espectacular —le mire tranquilamente mientras tocaba su cabello— realmente muy lindo pelo Li-san.

 

voltee hacia donde Miki-san señalaba y mire a Kaiko-san después volví a mirar a Miki —genial yo toco la guitarra acústica— dije sonriendo —y gracias tu también tienes lindo pelo Miki-san — dije sonriendo un poco sonrojada

 

Escuche como la chica me llamaba, ¿cómo sabía mi nombre? Olvide eso rápidamente cuando me percate que la chica me estaba haciendo señales para que fuera para allá, no tuve más opción y decidí ir caminando hasta allá — Hola — Las salude con una sonrisa cuando ya estuve ahí, la chica de cabello celeste tenía volantes y Lily tenía uno, así que no podría darle ninguno de los míos a ellas.

 

— Ka-san, ¿¡Entonces no me equivoque!? —dije fingiendo alegría— es que mi primo siempre habla de ti, por lo que pensé que no podría equivocarme —miré a Lily-san— bueno, ustedes son muy lindas, debe ser maravilloso ser tan jóvenes ¿Cuántos años tienen? ¿15? ¿14? —les miré con inocencia mientras sonreía amablemente— por cierto Ka-san, muy linda ropa ¿Tú también repartes volantes?

 

—¿Tu primo...? ¿Quién es tu primo? — Me atreví a preguntar — Eh... Yo tengo 18 años — ¿Realmente parecía tan joven como para que dijera que parezco de 14 o 15? — Usted también es muy bonita, eh... — ¡Oh! Se me había olvidado preguntarle su nombre — Si, yo también reparto volantes, aunque no he encontrado a nadie para darle un volante — Le dije, estaba un poco decepcionada quería dar al menos un volante.

 

me reí levemente —gracias Miki-san pero tu tampoco eres fea— dije sonriendo un poco sonrojada por su comentario —y mi edad tengo 19 — dije sonriendo — kaiko- san te ves muy linda así aunque debe ser pesado ese traje— dije sonriendo levemente

 

— Hatsune Mikuo es mi primo —sonreí tranquilamente mientras me le acercaba— ¡Mucho gusto! Soy Miki Hatsune, significa "Tallo de flor" —sonreí mientras le ofrecía mi mano— aunque creo que el nombre de Ka-san y Li-san son demasiado más lindos —les mire— debería estar celosa ya que mi amado primo esta rodeado de tanta chica linda, aunque es un poco tonto y torpe con las chicas —dije eso mientras buscaba un pañuelo para limpiar un poco la mejilla de Kaiko-chan.

 

—El gusto es mío, yo soy Kaiko Shion — Parecía que ella ya lo sabía, pero decidí presentarme por mi cuenta mientras hacía una reverencia — Bueno, es cierto que Mikuo-san es un poco... Torpe — No era la palabra que iba a usar, pero estaba frente a su prima, así que lo deje de esa forma. — ¿Qué edad tiene usted, Miki? — Le pregunté, ella nos había preguntado nuestras edades pero ella no dijo la suya.