[Capitulo Nueve]: Manos a la Obra

—Vale, ¡Yo invito a todas!—dijo Maika felizmente
—Ama tramposa—dijo NOVA y Maika se detuvo
—¿Que tiene de malo?—pregunto Maika ofendida—No me dijeron nada...

 

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— ¡Si! ¿Por qué no? —dije con una sonrisa mientras tomaba un poco de jugo y miraba a Mikuo, se veía más alegre que la última vez que lo vimos ayer— ¿Te sientes mejor? —sonreí tímidamente, ya que en parte me preocupaba por mis amigos, claro que Gakupo ya estaba mejor, o eso suponía, había recuperado su katana, y pues Luki había recuperado su MP3, ahora que lo pienso, Luki recibió un paquete también ¿No? Eso significaría que estaría repartiendo volantes como nosotros ¿Qué tipo de traje le habrá tocado? Ya había dos chicos con traje de mujer, quizá el tuvo suerte al igual que yo con un traje masculino, bueno, aunque era pensar demasiado en el asunto.

 

Llegando al comedor mire a algunos chicos comiendo en una mesa pero no quise interrumpir fui por un poco de fruta y unos pastelitos me senté en una mesa —bueno, tal vez me toque comer sola esta vez —

 

— Bueno, hoy es hoy y ayer es ayer —dije sin más empezando a comer, el día se veía algo flojo por lo que me sentía un poco aburrido, pero no quería que las clases empezarán, o mas bien esperaba que durarán una eternidad, en realidad no es que tuviera algo en contra de usar vestido, en parte podría ser divertido, no me afectaría se burlaran de mi, solo que era demasiado esponjoso para mi gusto.

 

Tomé el baño con agua fría, esta vez utilizaría poco shampoo. A decir verdad, el cabello corto podría traer ciertas ventajas: menor tiempo de secado, menor cantidad de shampoo, menor cantidad de agua...No sabía si buscaba auto-consolarme con esos ánimos; suspiré y me unté el shampoo, mi cabello se sentía diferente...¿Es que le había echado algo también? No era tan suave como lo recordaba.
Me vestí y sequé solo unos minutos con la toalla, me acomodé unos cuantos cabello y salí a la cafetería esperando a que no hubiera demasiadas personas.

 

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— Espero sinceramente que eso sea verdad —suspiré mientras pensaba como debería repartir los folletos, tal vez decir algo como "¡Por favor ven!" con tranquilidad y una agradable sonrisa, o quizás un "¡Te estaremos esperando!" con demasiado animo y una enorme sonrisa dando a entender que era algo emocionante o tal vez "¡Quiere ser genial, puedes debes venir!" todo sonaba tan vago que me hundí pensando las opciones, hasta que de pronto vi entrar a Gakupo a los comedores.

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— ¡Hey Gakupo-san! —dije animoso pero de pronto me sorprendí al ver algo nuevo y extraño— ¿¡Se corto el cabello!? —no pude evitar gritar sorprendido, luego rápidamente tape mi boca con las dos manos — lo siento —musité, no era extraño, todos tenían derecho a hacer con su cabello lo que quisieran, incluso cambiar de estilo, no era malo hacerlo y era incluso normal, solo que era extraño, ya me había acostumbrado al largo cabello de Gakupo-san, incluso recordaba apenas ayer haberlo peinado, y hoy era... realmente extraño, yo que había comentado de broma cortar mi cabello, ahora resultaba que quien lo corto fue Gakupo-san.

 

Casi me tapo los oídos cuando Len gritó. Lo miré con una sonrisa, no lo culpaba, suponía era casi un impacto verme con el cabello corto, nunca lo había llevado así, creo que hasta a mí me sorprendía.
—No fue por voluntad propia— dije con el gesto serio y mirando de reojo a Mikuo. Ahogué un suspiro y caminé hacia la barra, pedí unos hotcakes con miel de zarzamora y un chocolate, no tenía antojo de berenjenas este vez; pagué lo que correspondía y me senté en la primera mesa que vi que era la de Len y los demás. Me sentía un poco como el día anterior pero decidí no mostrarlo esta vez —¿Qué tal se ve Len?— Le pregunté para hacer la plática.

 

— Pues se ve bien —sonreí, no era mentira, en realidad Gakupo se veía bastante bien con pelo corto, le daba un aire más juvenil— con el pelo largo te ves demasiado maduro, así te notas de la edad de Mikuo —sonreí— creo que realmente te hace ver bien, aunque si quiere una mejor opinión sería cosa de preguntarle a una chica —sinceramente empecé a comer— ya que como chico solo puedo darte esa vaga opinión sin sonar gay.

 

Me había distraído con la banana unos instantes y cuando me dí cuenta Mikuo y Gakupo con un cabello bastante extraño... ¿Sería que se decidió hacer un corte? Ahora que lo pienso, me preguntó sí debería decirle la verdad... Creo que mejor no.
—Lindo peinado Gakupo. —Dije mirándolo algo dudoso, quizá a Gakupo le gustaban los cambios radicales.
—Y bueno Len, yo pienso que es algo atrevido, es muy corto y se ven los bloomers. ¿Y cómo me dices que las clases no son para hacer bloomers? —Me rasqué la cabeza dudoso.

 

— Nada, nada —suspiré y luego sonreí— debería olvidarlo Tenchou-san —dije eso para después terminar de comer e ir a la máquina por una soda de banana mientras esperaba a los demás terminarán de comer— aunque bien Tenchou-san, dígame... ¿Tiene alguna peluca o usará el pelo corto?

 

—Es una buena pregunta Len... Quizá usé mi cabello en coletas, sería muy moe. —Sonreí, esperando que comprendiera a que me refería yo. —Por cierto. ¿A qué sabe la soda de banana? —Me estaba interesando un poco más en sembrar una amistad, interesándome en lo único que sabía de Len además del maquillaje... Las bananas.

 

—Vamos a comer esta pequeña tigre mutante tiene ambre — dije moviendo la cola falsa en circulos con la mano, y caminaba fuera de la habitacion

 

Se encaminó también a la cafetería, con la mochila al hombro y con un increíble y extraño buen humor. Su MP3 seguía guardado en su mochila. Fue a comprar un omelette de huevo con atún (cosa que en la cafetería le cumplieron aunque sonara extraño y asqueroso) y un café. Cualquiera pensaría que no era raro que se enfermara, pero su estomago podía resistir meses de revolturas insensatas. Se acercó a la mesa donde ubicó a Mikuo, Gakupo, Len y... un chico que sabía ya había visto, pero o se habían presentado formalmente. —¿Puedo sentarme, amigos mapaches?

 

— Hai, hai, pequeña neko—dijo Maika mientras se dirigían hacia la cafetería, se sentía rara. — ¿Que pedirán ustedes?
— ¿Segura que estas bien, Maika?—Pregunto preocupada NOVA
— Claro, me siento de maravilla—"claro, si ignoras este peso como de 10 kilos en la cabeza y que estas sintiendo escalofríos por doquier, pero eso no es algo que pueda decir, sí cuando era pequeña podía ocultar hasta una semana mi enfermedad por no causarles problemas a mis papas, no creo que sea un problema ocultarlo ahora” ese era el pensamiento de Maika

 

Hoy tengo ganas de ...— decia mientras llegabamos a la cafeteria, esperaba que nadie me viera asi de ridicula vestida— Huevos con tocino y un coctel de fruta — decia pidiendo mi orden, evitando las miradas sonrientes y burlonas que me veian —y ustedes?— pregunte mirandolas.

 

—Yo quisiera un pastel de banana y un juego de manzana, por favor — Le pedí a Maika — ¿Estas segura que quieres pagar? No quisiera que gastes todo tu dinero — Por más que lo pensaba, casi nunca pagaba la comida, casi siempre alguien la compraba por mi.

 

— Yo quiero umm....—"Quédate quieta Maika, no te puedes caer ahora, sabes lo que pasa cuando te resfrías..."—Sopa de verduras con pollo, por favor, y si, no se preocupen—Maika dijo mientras pagaba todo lo pedido—es prácticamente imposible que se acabe mi dinero, y si lo hace, no me dolería en absoluto, yo me lo gane, así que puedo hacer lo que me guste con el—dijo sonriendo para tranquilizarlas
— No nos preocupa el dinero—dijo NOVA para tranquilizar a las chicas— pero lo que me preocupa es lo que pidió, Maika. Usted odia las verduras...

 

Estaba sentada en la cafetería cuando mire a unas chicas entrar pero algo en especial llamo mi atención la pequeña Defoko estaba vestida de tigre se miraba bien pero era extraño verla vestida así —que linda se ve— dije para mi misma

 

Kaito Shion

Vi que varias perdonas habían entrado a las cafetería, un grupo de chicos se sentó un poco más alejado de mi. Había pensado en ir y sentarme con ellos, pero no lograba decidirme ¿Y si les caigo mal?
Luego llegó Defo-chan y Maika-chan, sonreí, y detrás de ella venía Kaiko y mis nervios me colmaron ¿Qué diría si se sentaba conmigo? Ahg, seguramente se alejaría de mi...

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Perdón, por mi mensaje. Es que sin querer lo mandé ¬¬ tonto teclado.

 

En cuánto no entregaron las comida, tome la mia y la pagué, mire a mis alrededores y vi a Lily que estaba mirandonos'' asi o mas ridícula'' pense hacerca de mi ropa-- Hola Lily-chan nos podemos centar? -- pregunte mirandola y sonriendo, animando a Maika y Kaiko a que se precentaran con ella, mire de nuevo y vi a Kaito, movi mi mano a modo de saludo desde lejos esperando que me viera.