[Capitulo Ocho]: Nueva semana... ¡Quiero Morir!

Me emocionaba tener un retrato mío dibujado por Luki, pero tampoco estaba segura de ello. "Me encantaría tener uno, pero me va a dar mucha pena que estés viéndome fijamente" Mande lo que me hacía dudar del retrato, nunca me habían hecho uno, pero estaba segura que Luki tendría que verme por un largo tiempo.

 

—¡Que no me gusta Mikuo, carajo! —Me quejé, luego miré que el pequeño Len estaba algo nervioso, así que decidí dejarlo ahí. Miré a Gakupo con cierta curiosidad. —Mucho gusto... Emm... —A pesar de mirarlo no me atrevía a decirle lo que tenía en mente, así que dirigí mi mirada a Mikuo de nuevo, con cierto enojo.
—¡Prefiero amor de alguna mujer! —Al decir esto pensé que sería difícil convencer a una mujer de besarme, con una voz como esta, sí no me ve de seguro pensaría que soy una mujer...

 

Len parecía demasiado nervioso, se había coloreado de rojo, algo muy normal en él pero no para tanto. Algo había pasado con ese chico, algo que sinceramente no deseaba saber.
—Soy Gakupo Kamui— dije sin humor. Si hubiera llegado el día anterior probablemente le habría invitado un helado, me hubiera presentado correctamente, etc. Lo normal en mí pero hoy no quería hacerlo. Los Lunes estaban malditos en este lugar. Me saludó incómodo y regresó a su pelea pre-matrimonial con Mikuo, suspiré. Esperé a que acabaran de pelear y seguí mirando: ¿quién me podría dar pistas? Len estaba nervioso: —¿paso algo?— le pregunté.

 

— Bueno... —quise bromear— pues puedes buscar a la hermanita gemela de Len, viendo que te gusto tanto y quieres a una mujer, ella podría ser una opción —reí pero luego acaricie la cabeza del nuevo— aunque me da igual si quieres un romance conmigo o no, no eres mi tipo —sin más vi a Gakupo— oye... ¿Crees que a los nuevos los hayan incluido? Sería importante saberlo para no hacer preguntas innecesarias.

 

Estaba consciente de ello, y por un segundo le dio vergüenza también. Le mandó otro recadito. "Tampoco soy profesional, pero si no le añado mucho detalle no tengo que verte tanto". Una vez dejado ese papel junto al brazo de su compañera, la vio por un segundo y comenzó por tratar de copiar las facciones de su perfil. Le era muy fácil elaborar los ojos, y por lo mismo se le grababan mas que cualquier otro gesto de la mirada. En un lado del boceto de Kaiko hizo los ojos de Mikuo, Len y Gakupo. La volteó a ver de nuevo, por unos segundos, para ver a dónde le llegaba el cabello. Solo era un dibujo del torso hacia arriba, asi que le tomó menos de media hora. Le añadió un par de sombras y lo dejó sobre la libreta de la peli azul.

 

—Len no me gusta —Aclaré con cierto enojo, la verdad me parecía molesto escucharlo hablar de mí como sí fuera homosexual. Nuevamente miré a Gakupo. —¿Juego? —Pregunté mientras me rascaba la cabeza.

 

El único que conozco de aquí, y se ve inteligente, es......Len
—*Pero sigue incomodo, waa!*—Me eche a llorar en mi escritorio, si esto seguía así, tendría que estar todo el día sin Nova y eso no lo aceptaría

 

— ¿No te gusto? —empecé a llorar un poco más, era la primera vez que alguien me decía que me odiaba— ¡Lo siento! ¡Lo siento! —me sentía molesto e irritado, al punto que no podía pensar en la cuestión de Mikuo sobre aquel juego.

 

Le regresé la mirada a Mikuo y asentí.
—Tienes razón— miré al nuevo, se me había olvidado su nombre, me quedé ahí mirándolo fijamente hasta que el mencionó algo de un juego, ignoré lo que dijo de Len y me puse frente a él. Era solo un poco más alto que él— ¿Sabes acerca del juego de objetos perdidos que creó la dirección?— le pregunté al chico. El llanto de Len me distrajo y con tal de animarlo, le dije: —Me gustas a mí.

 

— ¿En serio? —dije tímido mientras me aferraba a su chaqueta— ¿Esto? ¿Gakupo-san? Si nosotros no sabíamos del juego, dudo un nuevo sepa del mismo —me sonroje y trate de contener el llanto.

 

—¡Espera niño, no llores! —Ahora sí había metido la pata, así que moví mis manos frente a él lo más rápido posible mientras hablaba de manera muy apurada. —Claro que me gustas, pero no me gustas en el sentido de amor, me refiero a que me gustas como amigo... ¿Así mejor?
Miré a Gakupo, era un poco más alto que yo, me pregunto... ¿Qué comerá para ser tan alto? De repente me mencionó algo de un juego, lo miré más curioso que antes. —¿Un juego? ¿Qué sería ese juego? —Me empecé a rascar la cabeza, sólo pensaba en juegos de mesa, o quizá vídeo juegos.

 

— Pero a mi si me gusta Tenchou —dije secando mi llanto— aunque es extraño y más pervertido que Mikuo —luego sonreí— el juego consiste en que 5 de nosotros han perdido objetos, pero fueron dejados en cuartos de 5 compañeros —mire a Gakupo— hay un juego que se ha iniciado, los que perdieron cosas deben investigar quienes las tienen, pero los que tienen las cosas deben ocultar el secreto del objeto que tienen —trate de explicarlo lo mejor posible— la pregunta es... ¿Tienes algún objeto que no te pertenezca?

 

Para mí Len en ocasiones me parecía raro, quizás tanto abuso en su pasado le había provocado indecisiones con su preferencia sexual. El nuevo estaba también nervioso, no le gustaba Mikuo ni Len pero actuaba muy raro con el último.
—Len te aclaró el juego, entonces ¿sabes algo acerca de eso?— le pregunté, aunque como decía el rubio, quizás no sabía nada al respecto. Me sentí sin esperanzas...

 

Escuché claramente lo que Len quiso decirme, pero eso me parecía muy confuso... ¿Qué cosa podría no ser de mis pertenencias? Por un momento pensé en mi closet, pero dejé de pensar en ello, era bastante probable que era un regalo para los nuevos, así que mire a Gakupo fijamente. —Lamento decirte que no creo tener lo que buscas... —Le puse la mano en el hombro para compadecerle.

 

— Es algo largo y filoso —dije recargado en la pared— que seguro tiene una funda ¿No te suena? —trate de estar seguro— es más, no recibiste una carta de invitación al juego, alguna carta especial —le mire fijo— si es así, sería bueno saberlo.

 

Me quede quieta cuando recibí el mensaje de Luki, quería que el retrato quedará bien, así que me asegure de no moverme. Unos minutos después vi como me dejaba el dibujo encima de mi libreta y cuando lo vi, quede encantada por este, me gustaba demasiado el dibujo. Tome un papel y escribí: "Me encanta, en serio gracias ♥" puse un pequeño corazón al final de la nota.

 

—¿Largo y filoso? —Rasqué mi cabeza nuevamente. —¿Cómo tú personalidad? Ya sabes... Alargado y filoso como malo... —Dije con cierto tono de broma.
La carta... ¿Una carta? Bueno... Recordé haber perdido muchas cosas, quizá también perdí la carta, no lo sé, mire a Mikuo con una sonrisa. —¡Creo que perdí la carta!

 

— ¿Por qué siempre buscas insultarme? —fruncí el ceño— esto es serio chico —al ver que parecía totalmente ignorante de la situación— pero bueno... si no sabes nada, ¿Puedes por lo menos ayudarnos a buscar?

 

Sonrió, contento y halagado, y en una tirita de papel escribió; "De nada, me alegro que te guste". Se lo dio y volvió a la clase. Entre apuntes, repasaba unas partituras de piano que había ensayado al día anterior. Instintivamente, durante algunos segundos, empezó a fingir que tocaba en el pupitre las primeras notas de una melodía que conocía con el nombre de "Para Elisa". Pensaba pedirle a Kaiko un poco de ayuda con aquellas prácticas de piano después de invitarle el helado. Se le estaba olvidando de a poco el MP3.. "¿A quién más le pregunto?"

//Jeje, ahora si, buenas noches

 

—Bueno, porque es fácil... ¡Claro que sí! Les ayudaré a buscar lo más que pueda, seré como un ninja —Dije mientras empezaba a reír, intentando animar a Gakupo... Ahora que lo pienso... Podía ser un emo, por eso quizá estaba triste.