El gris se esparcía en el deprimido cielo, esparciendo sus tonalidades y, entre oscuridades, gritaba rabioso con rayos de luz que iluminaban, como rápidas luciérnagas nocturnas, el lluvioso cielo de la Capital Federal. Abrí la pesada puerta de madera tallada, en una de aquellas tantas locaciones de Departamentos cercanos a la 9 de Julio, y me adentré, percatándome juguetona de la mezcla de sonidos provenientes de aquella puerta, la madera siendo empujada con delicadeza por mis manos, el doloroso quejido de aquellas bisagras que, maltratadas por el tiempo, esperan ignoradas a que el Encargado las aceite. Caminé por el extenso pasillo y subí dos Pisos a pie, pasando mi mano por el barandal de frío y despintado metal color verde Ingles, el cual había perdido su verde monotonía con el cruel paso del tiempo y la pintura de mala calidad. "Llegué" anuncié subiendo el tono de mi voz, el cual se veía opacado por la música proveniente de aquél disco de Sandro, rutinariamente encendida por mis padres, los cuales, usualmente se encuentran en la cocina haciendo cosas de padres, así como preparando el almuerzo mientras ignoraban, acostumbrados, las letras y las poesías que diariamente escuchadas y repetidas, perdían aquél sentido literal y comenzaban a fusionarse con el ambiente. Pero hoy ellos no estaban en la cocina, y la voz de Roberto Sánchez sonaba aún más fuerte de lo normal, tapando con su vibrante voz los demás sonidos, los cuales eran efectivamente, las voces enojadas de mis padres. Hice caso omiso durante unos instantes, entrando con sigilo a la cocina y tomando de la Heladera el cartón de leche, intentando silenciar en mi cabeza los cantos mientras tomaba un vaso y lo rellenaba con la blanca leche. Tomé de la alacena un paquete de Plantillas, procurando no hacer sonido alguno entre el contacto del embace plastificado y mis manos temblorosas; aunque pensándolo bien, era imposible ser notada siquiera con aquella música tan fuerte. Me senté en la mesa de la cocina, mirando atentamente la puerta que conectaba la Cocina con el cuarto de mis padres. La puerta de un tono gris como el cielo de la Capital estaba ahora entreabierta, dejando ver, desde mi posición, la sombra perteneciente a las largas y finas piernas de mi madre, la cual aparentemente, caminaba de un lado a otro de la habitación con penetrante nerviosismo, mientras discutía con la otra sombre presente, cuyo movimiento era nulo. Mi padre estaba sentado al borde de la gran cama matrimonial, observando a mi madre ir y venir frente suyo, discutiendo sobre una supuesta Cuota Alimentaria, discutiendo sobre qué hacer conmigo una vez que “El Asunto” llegase a su fin. Yo estaba al tanto de su separación, de su crisis matrimonial, y podía ver con los ojos que se escondían en mi mente cómo mi padre pasaba su mano por su cabeza, revolviendo su cabello mientras suspiraba pesadamente y pronunciaba, entre dientes, insultos descontrolados, desubicados, hacia mi madre. Pero había algo que sí era seguro, y ese algo era el cigarrillo que aquella inquieta sombra sostenía entre sus manos, claramente encendido. El espectral humo se filtraba por la puerta, danzando, dibujando serpientes de palabras, de sentimientos que escapaban desde aquella pesada situación; serpientes que se fugaban desde el cigarro más barato del mercado, el cigarro que se quemaba instante tras instante, y aquellas danzas, aquellos dibujos atormentados de una guerra que nadie iba a ganar, se esfumaban casi por arte de magia, llegaban hasta el momento cumbre de su existencia y se rendían, exhaustos de su corto pero duro recorrido, y se mezclaban en el aire hasta desaparecer en el espacio. El humo de aquel cigarrillo representaba, para mí, la corta vida matrimonial de mis progenitores, comenzando desde la ardiente e insolente llama que, enceguecida por la chispa de la pación, encendía los elementos tóxicos que, lentos pero seguros, carcomían con calculador silencio la relación, y transformaban aquella pasión en cenizas, las cuales caían al suelo. Pero las cenizas no eran lo único que se iba. Los buenos momentos, los recuerdos de una familia feliz, del amor, de la compañía, intentaban escapar en forma de un envenenado humo, intentando impregnarse en los pulmones de los sufrientes, pero, por más que lo intentan, siempre terminan extinguiéndose en la atmósfera, dejando de existir, obligados por su frágil composición a ser olvidados. Y allí estaba el humo, el cigarro sostenido entre los dedos, la mano que se apoyaba en la cintura, las largas piernas que caminaban de un lado a otro de la habitación, las voces opacadas por los cantos de un disco que ya se había escuchado incontables veces, y ahí estaba yo, en el ojo de la tormenta, esperando que los vientos pasaran sin hacer mucho daño. En la calle, el cielo amenazaba con llorar a mares, y seguramente, cuando las lágrimas del cielo comenzaran a caer, las mías también lo harían. —.—Uff, y con ésto le doy comienzo a mi vida en el foro. En realidad me he visto casi obligada a escribir este texto, debido a que es en realidad una tarea con nota para mi colegio. Aún así, me ha gustado bastante, y me parece que...bueno, es un buen relato para iniciarme por aquí.
[edito]Bueno primero que nada bienvenida al foro, estoy segura de que te encantará estar aquí. Debes de situar bien tus historias, ya que tu fic es un One-shot entonces pertenece al sub-foro de Historias terminadas. Ahora no importa mucho por que eres nueva, pero para escritos futuros recuerda ubicarla bien. Ahora daré mi opinión sobre la historia: El tema principal y la melancolía con la que escribiste esa situación es bastante sentimental y conmovedora. Aunque debo decir que al principio me disgustó un poco el hecho de que tu narración esté tan cargada. Usas demasiadas metáforas y adjetivos, de hecho te excediste un poco. Ten cuidado con eso,por que si bien tu intención era hacer sonar poética la lectura terminó siendo algo rebuscada. Sin embargo esto se arreglo un poco desde la mitad para abajo, y entonces pude disfrutar la historia. Un detalle gracioso es que tenía una melodía bastante bonita de fondo así que eso te dió un bonus (?). El tema del divorcio en la vida de los adolescentes y niños es algo bastante triste, y lamentablemente algo muy comun hoy en día. Yo misma estoy en esa situación y aunque a mi no me afectó tanto conozco a personas que hasta la fecha no pueden superar la separación de sus padres. Pudiste expresarlo muy bien, el relato es bastante bonito si quitamos el exceso de metáforas... Sería perfecto y hasta hermoso. Me gustó mucho como representaste la relación de los padres del chico en el humo del cigarro, fue una comparación bastante interesante. De hecho el relato en si me gustó bastante. En cuanto al aspecto técnico solo podría señalarte que inicias con mayúscula algunas palabras que no deberían llevarla, recuerda que eso es solo con los nombres propios, al inicio de una oración o después de un punto. Pero eso sería lo unico por que en realidad no noté errores de ortografía, así que buen trabajo n.n Espero seguirte viendo por aquí, saludos.
Buenas noches Nightfall, y muchísimas gracias por la bienvenida y por la crítica. Para ser sincera, es la primera vez en mi vida que alguien me da una crítica constructiva y el hecho de que se hayan percatado de mis errores me hace muy feliz :'D Por el tema de la ubicación de la historia, ha sido una tremenda metida de pata de mi parte, puesto que me di cuenta de que había una sección de historias terminadas luego de haber publicado el relato, he comenzado con el pie izquierdo >.< He tomado en cuenta lo que me has dicho y he decidido reescribir la primera parte del micro-relato (Además hoy me he salvado de entregarlo y tengo algo de tiempo para pulirlo). Creo yo que me ha quedado muy engorroso debido a que no estoy nada acostumbrada a la grandes descripciones y esta vez quise "jugar" con mis límites o algo por el estilo, y con el tema de las mayúsculas, mi dios querido, he escrito un montón de idioteces con mayúscula, te agradezco muchísimo que lo hayas señalado. En fin, esta ha sido mi primera crítica y me ha encantado ;A; muchísimas gracias, espero recibir más comentarios como este. <3
Te diré cuál es el problema principal de tu cuento: está muy cargado. Es un cuento que si lo reduces a la mitad de palabras, igual queda bien. Me parece que en muchas partes te distraes demasiado con los detalles y te dejas llevar por caminos falsos. Quiero decir: el párrafo empieza narrando una idea principal, y en un detalle te vas alejando del hilo narrativo hasta acabar diciendo cosas que nada tenían que ver con el punto. Mira este párrafo: ""Llegué" anuncié subiendo el tono de mi voz, el cual se veía opacado por la música proveniente de aquél disco de Sandro, rutinariamente encendida por mis padres, los cuales, usualmente se encuentran en la cocina haciendo cosas de padres, así como preparando el almuerzo mientras ignoraban, acostumbrados, las letras y las poesías que diariamente escuchadas y repetidas, perdían aquél sentido literal y comenzaban a fusionarse con el ambiente." La idea principal del párrafo era que la protagonista anunció su llegada. Terminas hablando no sé qué de la música: hay dos ideas principales en un párrafo y es algo que debes evitar a toda costa. Otra cosa: "El gris se esparcía en el deprimido cielo, esparciendo sus tonalidades y, entre oscuridades, gritaba rabioso con rayos de luz que iluminaban, como rápidas luciérnagas nocturnas, el lluvioso cielo de la Capital Federal." Necesitas limitarte con la cantidad de adjetivos. De bello, termina a ser monótono, y más si todos los adjetivos están localizados de la misma manera, anteriores al sustantivo. Suena como un poema de rima molesta. Hay que hacer un relato más repartido, para no ahogarte en tus propios recursos y darle estética a todo en conjunto. Una última queja: "El espectral humo se filtraba por la puerta, danzando, dibujando serpientes de palabras, de sentimientos que escapaban desde aquella pesada situación; serpientes que se fugaban desde el cigarro más barato del mercado, el cigarro que se quemaba instante tras instante, y aquellas danzas, aquellos dibujos atormentados de una guerra que nadie iba a ganar, se esfumaban casi por arte de magia, llegaban hasta el momento cumbre de su existencia y se rendían, exhaustos de su corto pero duro recorrido, y se mezclaban en el aire hasta desaparecer en el espacio." Tus ideas son extremadamente largas, ¿dónde quedan los puntos? Si uno lee en voz alta algo así, se va a ahogar. Y recuerda siempre esto: párrafos demasiado extensos fatigan la mente del lector y nos entorpecen. Es lo que me ocurrió, al ver la idea tan larga empecé a leer más rápidamente, devorando las palabras y no pudiendo disfrutarlo realmente. Los puntos existen para cerrar la expresión de algo en concreto, para dar una pausa y digerir lo que acabamos de leer. Abusas de las comas; el uso excesivo de ellas es permitido en el asíndeton, pero aquí estás tratando de expresar distintas ideas de una sola vez y eso es lo que nos vuelve locos. En fin... no puedo dar un comentario tan alegre como el de Nightfall. El tema del cuento es el divorcio y como efecto secundario, la preocupación que le produce a la hija dicho cambio, las peleas y todo eso. Es un cuento sobre el divorcio, con muchas metáforas. Muchas, muchas, muchas... El título no me cuadró, pero eso ya es cosa personal y no demerita en nada, cada autor pone el título de su obra como se le dé la gana. Para comprimir mi comentario: no está mal, no... Sólo recuerda utilizar tus recursos literarios de forma correcta.