Cocina

La cocina estaba tapizada, es decir, sus paredes, con una tela sumamente fina. Extravagante. Era increíble que a pesar de lo tétrica que era la Academia, había lugares maravillosos dentro de ella, y la cocina era una.
"Cada día, Monokuma, es decir, yo, relleno la comida del refrigerador y las despensas". Eso decía todo: No tendrían problema alguno con la comida.

Pronto empezarían a llegar los alumnos. Algunos seguro se iban a sus habitaciones, otros quizá se quedarían a comer.

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@GalladeLucario @Fabian @Liza White @Nekita @juanjomaster @Miguel Angel xx @Ana inukk @HitomiHyuuga @EliLover @rapuma @Ookami redfox

 

Con mi desganado pasó llegué al susodicho lugar, fue una sorpresa ver tan elegante tapizado.--Qué bonito detalle de nuestro director.--susurré, mientras me disponía a buscar alguna fruta fresca.

 

Llegué a la cocina en poco tiempo. Era una cocina... rara. No vi demasiado práctico el hecho de tapizar paredes en una cocina, donde es más fácil que prenda un fuego, o salpique agua. La tela no parece el material más idóneo, pero bueno, no me meto en asuntos de decoración.

Suspiré, al ver que nadie estaba allí. Deduje que para conocer a mi querido director aún quedaba un tiempo.
Abrí la nevera, y vi que estaba flamantemente llena, de todo un poco. Tenía un poco de hambre, pero no me apetecía cocinar, ni mucho menos. Así que agarré una botella de agua y un par de latas de atún. Con eso me apañaría por ahora.

 

Llegue arrastrado a la cocina, pero justo al entrar me lance a la nevera y tome mucho de ella.

--Provecho.

 

Al entrar en la cocina, me dirigí a la nevera y observé la comida.

--¿Qué podría hacerme? --murmuré para mi misma y tomé algunos alimentos para dirigirme a cocinar.

 

Entre a la cocina seguiendo a Evangelin para notar que era algo extravagante por todo tapizado, me suponía que era el lugar menos tétrico de la academia

-- Bueno por lo menos hay comida -- me acerqué a Evangelin para ver que se pondría a cocinar

 

--Menos mal porque empezaba a preocuparme por ese detalle. --le respondí a Brooke de espaldas mientras sacaba las cosas necesarias para prepararme una pequeña lasaña.

 

Aparecí detrás de la muchacha que ahora llevaba por mi persona, el apodo de "Black Francis"--¿Qué tipo de comida prefiere señorita?

 

Yo comía sentado en la mesa que había en medio de la cocina, observando a Evangelin. Tenía curiosidad por saber qué cocinaría.

 

Llegue detras de los hombres, temerosa, vi la tela y nada mas aparte de lo normal de una cocina. Decidi respirar y cofiar, luego busco comida para preparar pues lo ultimo de comida casera que comi fue hace dos meses, vi que Eve se disponia a cocinar apenada me acerque a su espalda.

-Hey Eve, disculpa pero ¿pudieses preparar comida para las dos? Porfavor nunca he aprendido a hacer comida casera y lo necesito- Me sonroje por pedir ayuda casi nunca lo hago -Yo podria hacer postre, eso es lo unico que hago bien.

 

--Yo cocino más que bien--Irrumpí hacia la chica que me había golpeado, antes de que la joven Black me pudiese contestar.--Digo, tantos lugares que conozco... no es por nada.

 

-- Cuando prepares lo que vayas a preparar... ¿puedo robarte un poco? -- le pregunte a evangelin riendo un poco, lamentablemente yo no sabía cocinar y si me decía que no.. terminaría haciendo un sandwich pero bueno no era la unica Nix también había pedido comida

-- Pues Graham.. no sabría decirte.. -- dije mirandolo de reojo.. ¿de donde aparecia?

 

Debido a mi escaso talento para la cocina, tuve que conformarme con algo de fruta y uno que otro bocadillo.

--Este sitio si que es curioso... --me dije mientras mordia una fruta.

 

Me moví de donde estaba, revisando la nevera. Sería buena onda preparar algo rico para todos.--¿De qué tienen hambre?

 

Terminé la segunda lata de atún, y aún seguía con hambre. Me levanté y abrí la nevera, cogiendo un par de manzanas. Imitaría un poco al pelirrojo, la fruta es sana.

 

--Esta bien chicas. --reí a las dos. --No me importa hacer más comida. ¿Os gusta la lasaña? --les dije con una sonrisa.

 

Mi orgullo estaba herido por tener que refugiarme al entrar a esta sala y por pedir comida Eve, no podía tragármelo y aceptar el casi ofrecimiento del músico, solo me sonroje otra vez y sonreí esperando respuesta de Eve.

 

—Lo que sea que no sea envasado, por favor— dije alegrándome un poco —Hare torta y si encuentro chocolate eso será perfecto ¿Qué les parece? Y ¿ustedes también quieren pastel?— les pregunto a los que se había decidido por no preparar nada y se fueron por comida lista ya.

 

--La lasaña me parece bien--Ya lo había escuchado, Evangelin era la maestra por aquí, cordialmente saqué unos cuantos ingredientes, dispuesto a ayudarle.--Te ayudaré hermana...

 

--Cualquier cosa esta bien... --le repondi al musico, yo solo queria comer.