Richy Escor Presentando: Primero que nada desde hace un tiempo he pensado en actualizar el primer capítulo, ósea reemplazarlo, pero descuiden es para que se pueda leer mejor y se entienda más aun así quiero dar las gracias a todas las personas que lo lean de ante mano gracias… Retomando, este es mi primer fic, los personajes no son míos, este es mi primer fic De nombre: Diabolik Lovers Vocaloid: Llegada este es el reemplazo del primer capítulo que escribí, por cierto este es el primer fic que escribí de Vocaloid, la ruta es de Ayato, aunque lo modifique en un 95%, y espero que lo disfruten será de RinXLen, y será un amor algo sádico, de misterios, sobrenatural, dolor y traiciones, así como las revelaciones serán fuertes, ¿Te animas a leer algo así?... Disclaimer: Diabolik Lovers no es de mi propiedad, solo lo uso con fines de diversión, así como el uso de los Vocaloid que no me pertenecen si no a Yamaha Corporation, para representarlos, en este fic, que no tiene fines de lucro, sino que es un fic de un Fan para Fans. El día no podía estar mejor, el hermoso cielo azul estaba presente, aunque este tenía algunas nubes grises que acompañaban el viento, me encontraba dentro de un taxi miraba por momentos la ventana, desde hace unos días me he sentido algo raro pero aun así lo he sobrellevado, durante la gran parte del trayecto a mi nuevo hogar, me mantuve en completo silencio, me encontraba algo abrumado por el hecho de vivir en un nuevo lugar lejos de mi madre, pero pues en ocasiones por cosas del destino no exactamente te puede dar algo bueno, pero lo que se puede hacer ante esto es no mostrar adversidad, pues desde niño siempre he sonreído y no será la primera vez que no lo haré, pero aun así ante esto, yo forjare mi propio camino…ya que me dirigía a mi nuevo destino… Tras unos horas de viaje de casa hasta este lugar, me he quedado un tanto impactado por el cambio de ambiente, pero nada que no pueda superar, estando meditando mi situación me sorprendí al ver por mi ventana a lo lejos, el supuesto lugar donde viviría de ahora en adelante, a lo lejos observaba un rio un tanto tranquilo, a los pies de bosque que lo rodeaba, se postraba un majestuoso castillo algo así como una mansión, algo un tanto rara, pues aunque estuviera lejos de él, de la nada me comenzó a doler un tanto el pecho… Baje un poco la ventanilla para poder respirar mejor, y a la vez controlarme un poco, pero al hacerlo quede maravillado por los pequeños detalles de la mansión, tenía muchas ventanas y estructura formidable, se podía observar los jardines y ver muy bien la puerta de entrada a la residencia. Al acercarnos un poco más, comprendí que estaba muy equivocado, sobre el hecho de que dicha mansión era más grande de lo que esperaba, pues estaba construido en forma de "U", rodeando a una plaza, donde se encontraban más jardines y un pequeño kiosco, en su centro había una majestuosa fuente, y unas cuantas estructuras ahí, que por supuesto, esto no estaba en mi planes el vivir en un lugar como ese, pero lo haré si mi madre me lo pidió… El taxi me había dejado en la puerta principal, tengo muchos nervios, y mi dolor en el pecho se ha tranquilizado, en este momento estoy vistiendo un pantalón de mezclilla negro, y un sudadera azul, en mis manos sostengo mi maleta mientras en el mi espalda llevo un bulto donde coloque unas cosas sin importancia. Sin duda alguna este lugar es algo sombrío pues no me da confianza, pero tomo algo de coraje y entro al lugar y comienzo a ver los alrededores. Camino con precaución los grandes árboles y los sonidos que provienen de ahí me da escalofríos, caminaba sin percatarme de nada hasta que una gota cayó en mi nariz, me sorprendió, no pensé que el clima pudiera cambiar con rapidez, tras unos minutos de entrar, el cielo se a nublado por completo y ahora caía ligeras gotas, por lo que me apresuro a correr pase por los alrededores del kiosco, y me apresuro a buscar la puerta principal, este lugar es enorme y no quiero perderme, corro en dirección a la puerta más grande que veo. Al cruzar paso por la fuente donde la estatua, que está postrada en lo alto de está, es una gárgola, algo que es para asustar, pero sigo mi camino a paso rápido, en ese mismo instante la lluvia se hace más fuerte y cae sin avisar, los rayos comienzan a sonar, relámpagos y truenos dan una danza dando al lugar un aspecto bastante descomunal y tétrico… Una vez que me acerque a la puerta, comencé a tocarla, estaba adornada con una extraña clavija de la colgada, tenía una forma extraña y pesada, sin duda, el clima empeora a cada instante pues ahora está lloviendo a cantaros, con más fuerza y nervios lo sigo tocando… Tras unos minutos, al no obtener respuesta alguna, comencé a llamar de forma más fuerte, y nada pasaba, estando en esta situación en la cual nadie me abría, decidí abrir la puerta, cuando algo inesperado pasó, la puerta se abrió sola, algo sin duda no está bien aquí, pensé… Me adentre en la casa, comencé a llamar a alguien, como nadie me abrió y la puerta por si solo se abrió, eso no quiere decir que tengo permitido pasar, o ¿No?... Sin embargo mi voz me tiembla, sin duda alguna tal vez, a lo mejor no sabían que venía hoy… dije sin pensar, caminando por un pasillo, logré llegar a un gran salón que estaba decorado con candelabros que daban apenas luz, la cual era algo tenue, el salón estaba complementado con una escalera que da lugar al segundo piso, dándole un aspecto un tanto antiguo, sin duda, no era normal, por lo visto había un foto de una mujer que no conocía, y que sin duda me estaba poniendo incómodo. Al llegar en el centro del salón llame por última vez y nadie me respondía, un relámpago ilumino mejor la habitación, tras examinar el lugar un poco más me sorprendí, había alguien en un sillón en uno de los cuartos anexos al salón, por lo que corrí para preguntar y al menos obtener un poco de información de ahí… Me quede anonadado, al ver a una chica que no aparentaba más de diecisiete años acostada, sin duda tenía un bello rostro, tenía el pelo rubio, arreglado con unos prendedores y ropa, ¿Escolar?, aunque algo un tanto desalineada, algunos mechones rebeldes se le caían por la cara, me dispuse a quitarlos para observarla mejor, y cuando mi mano hizo contacto con su piel me sorprendí de sobre manera, ¡Estaba completamente helada!… -¿Está bien?, -Tocando ligeramente su rostro, intentaba moverla, pero no daba resultado, intente hablarle más alto pero no me escuchaba, me acerque a su pecho con algo de nervios y coloque mi oído, no había ningún sonido... -¡No tiene pulso! –Aun estando exaltado, tenía que hacer algo, pensé lo más lógico en este tipo de situación llamar a una ambulancia, me quite mi bulto y buscando rápidamente entre mis cosas encontré mi preciado celular, colocando mis dedos en el teclado presionaba tan rápido como podía el número de emergencias… Cuando de la nada la chica sin inmutarse me lo arrebato de las manos, y comenzaba a mostrar signos de vida, se levantaba -¡Qué Ruidoso eres! –Me miró con sus ojos azules como el hielo –Molestando en casa de otros –Continuó -¿Estás vivo? –Estaba temblando en mi lugar, ella me veía realmente molesta -Claro que sí, ¿Quién te crees que eres para retar a la Grandiosa yo? –Con molestia se reacomodo mejor en el sillón -Pero tu corazón no latía –Intente levantarme e irme, pero al hacerlo ella fue más rápida y con una mano hizo que me cayera en el sofá, colocándose arriba de mí -¿Qué está pasando? –Intentando reincorporarme ella me detuvo -¿Pasando?, no es obvio ¿No?, -Mostrando una sonrisa burlona -¡Voy a tomarte! –Comenzando a sacar su lengua y comienza a pasarla suavemente por mi cuello, y apunto de morderme escucho una voz a lo lejos… -Rin-chan -¿A qué viene este alboroto? -Maldición, Luka-neesama –Con molestia ella aflojo su agarre, la chica que recién llegaba se acercó -Este es el vestíbulo, se supone que sirve para recibir a nuestros invitados, ocúpate de tus cosas en tú habitación. -Ah, que aburrido –Levantándose de mí, Rin-san mira con molestia a la llamada Luka-san, por lo que aprovechando esta oportunidad me levanto y corro hacía Luka-san, pidiéndole ayuda -¿Y tú eres? –Me cuestiona, acomoda sus lentes me mira extrañada -Soy Len Kagamine, mi madre me dijo que tenía que vivir aquí –Ella me examina con calma mientras me pongo nervioso por la mirada que me pone -No he oído hablar de ello –Volteando a la otra chica la mira –Rin-chan, ¿Tú sabes algo? -¡Eh!, y yo que sé –Molesta se acerca a mí de nuevo -¡Oye!, chico débil, nunca dijiste nada de eso -¡Eso… fue porqué me atacaste de repente! –Con miedo voy tomando distancia – ¿Y eso de débil? –Ante mi comentario, ella solo se voltea y hace un una mueca, no me agrada en lo absoluto la chica llamada Rin… -¿Te refieres a mí? –Con algo de confusión me apunto, ella pone una cara de molestia -Claro que sí, pues a quién más tonto –Dice con una risa –Deberías saber algo como eso, ¡Débil! -Esto es extraño –Luka comienza a caminar por una esquina del salón –No me han informado nada sobre esto -¿Quiénes son? –Les cuestiono mientras las miro aun con dudas -No deberíamos hablar aquí –Luka, hace un ademan –De momento ven aquí Sebastián, encárgate de su equipaje -Sin que yo viera cuando, un mayordomo entró y salió con mi maleta en sus manos, asustado solo veo cómo se va entre las sobras de un pasillo… Volteo y observo a la chica llamada Rin y sigo a Luka hacía donde va. Ahora me encuentro en el salón principal sentado en un sillón estando algo nervioso, me quedo inmerso en mis pensamientos, analizando mejor la situación… -Ahora comencemos, primero con la formalidad –Luka se sienta frente a mi -Cuéntanos sobre ti y ¿Cómo entraste a esta casa?... -Claro yo… -Intentando decir algo coherente una voz del segundo piso me interrumpió. -Vaya, Vaya… ¿De verdad hay un lindo y pequeño humano aquí? Enfocó mi mirada, hacía de donde provenía la voz... Desde la barandilla de las escaleras veo a una joven de al parecer la misma edad que yo, tenía el cabello café corto así como de igual manera sus ojos, mirándome fijamente… Al instante siento como una lengua pasa por mi mejilla derecha, me susto e intento moverme por inercia -Mmm… hueles y sabes muy dulce –Me quedé impactado, no vi en que momento esa chica de pelo café había llegado enfrente de mí me miraba divertida se deleitaba los labios con la acción que hizo. -Por favor deja que yo te pruebe –Dice una segunda voz mientras me lame mi oreja izquierda –Tienes razón es muy dulce, mientras se levanta de la parte de atrás del sofá. -Ustedes dos, no creen que comportarse así con un chico, que acaban de conocer es de mala educación –Luka se levanta y las reprende las mira con intimidación en los ojos. -¿Qué? –Responde la castaña -Pero no todas quieren probar algo que luce ten delicioso –Cierto Miku-Chan Claro –Asiente la nombrada, de la cual salen dos exuberantes coletas, mientras abraza fuertemente un oso de peluche que carga un cebollín. -Ustedes dos paren ya –Rin se levanta con un semblante furioso –La grandiosa yo, lo vio primero y pienso tomar todas sus primeras veces… -¡Qué ridículo!, estoy cansada con que siempre te llames "la grandiosa yo" –Dice una voz -¡No me fastidies!, esa voz, eres Haku, ¿verdad? –Con molestia en sus ojos grita al aire –Muéstrate, en menos de un instante una chica hace aparición enfrente de ella -Estoy aquí, me pareció oler a un humano aquí, ¿Eras tú?, ¿Cómo te atreves a interrumpir mi preciosa siesta? –Acercándose a mí, Rin se acerca de igual manera -¿De dónde has… …salido tú? –Mi voz sonaba quebrada y baja, estaban temblándome las piernas… -Mi pregunta primero –Me reclama y golpea la pared haciendo un gran agujero donde estaba su puño -Alguien sabe porque este muchacho que ha venido a vivir con nosotros –Luka mira con ojos rojos a las chicas las cuales estaban comenzando a rodearme… Se hace un silencio sepulcral, a lo que me levanto del sillón y comienzo a hablar: -Creo que ha sido un error, así que ¡Lo siento por molestar!, nos vemos luego –Comenzando a caminar cruzando el salón rápidamente -Espera un momento –Luka, se interpone en mi camino -Estoy intentando averiguar la verdad de este asunto, ¿No sería un poco descortés, irse ahora? -Pero… -Susurro con miedo -¿Eres el chico que ella menciono? -Dice una voz, volteo y veo a una pelirrubia en un sillón acostada escribiendo y escuchando música con un teléfono, mientras que una coleta le caía por su cara… -Neru, ¿Sabes algo sobre este chico? –Luka en menos de un segundo llegó frente a ella -Bueno… Suspira la susodicha -No digas solo bueno – Miku se levanta molesta –Me gustaría escuchar tu explicación -Mmm… -Suspira –Esa tipa, me llamo el otro día, dijo: -Tenemos a un invitado que viene de la iglesia, así que tratadlo con respeto" -¿Qué? –Con perplejidad Luka la reta -Me estás diciendo que este chico débil, ¿Será el futuro esposo? –Rin aun no salía de la sorpresa -Así que es eso –Imitando la acción de Rin, Miku me mira detalladamente -Es más como un sacrificio que un esposo –Recalca Meiko moviendo su sombrero -Y también dijo: Que no lo matemos –Concluye Neru -Entonces eso significa que vamos a tener una relación, mu… uy larga con él… -Meiko suelta una risa -Parece que no hay ningún malentendido –Luka se da media vuelta y hace una pequeña reverencia –Así que permite que nos presentemos: -La que está acostada escuchando música con celular, es la hija mayor, Neru. –La susodicha solo bufa -Yo soy la segunda hija, Luka, -Una de las trillizas, la menor es Rin, al verme ella me guiña un ojo -La Próxima vez no te me escaparas -Una de las trillizas, la segunda es Miku -Por favor deja que te pruebe otra vez –Advierte Miku mientras abrazaba más a su oso -La última de los trillizas, Meiko -Encantado de conocerte, Perrito-Chan –Acomodándose mejor el sombrero sonríe levemente -Y la última de las hijas… …Haku -¡Que Fastidio! –Acomodándose mejor de la pared suspira -Pero esto tiene que ser un error, Nadie me dijo sobre novios, o esposos… -Suspiro –Y… además… ustedes… tienen algo extraño… -Los miró mientras todas miran a otro lado -Yo necesito llamar a mi madre -Camino para atrás lentamente… -Mi teléfono –Digo mientras veo a Rin con él –Por favor devuélvemelo -¿Debería? –Me reta con la mirada, corro hacía ella, y le exijo que me lo devuelva ella solo se ríe, ante la pequeña discusión Haku lo toma en menos de un segundo… -¿Qué estás haciendo? –Intento tomarlo de sus mano, pero ella lo levanta -Voy hacer esto –Tomando con más fuerza el aparato lo comienza hacer añicos, me quede atónito, mis rostro mostraba una mezcla de asombro y miedo… -Cállate –Me dice en tono alto, mientras regresa a la pared -Bueno, bueno, perrito, vas a convertirte en amigo nuestro –Meiko me toma por los hombros en compañía de Miku –Así que no necesitas de compañía de un teléfono, ¿Verdad? -Desde hace rato me siento hambrienta –Miku se me acerca más mientras se lame lentamente los labios -Es verdad, hueles muy delicioso, perrito –Dice Meiko imitando la acción de Miku, sacando unos colmillos blancos, Intente gritar y salir de esa posición. Como pude me solté de sus agarres y correr hacía la salida, sin que me diera cuenta me caigo por los nervios, me intento levantar y al hacerlo siento un enorme dolor en mi pierna y veo un poco de sangre cayendo de ahí la herida que me provoque, volteo para ver a las chicas y las veo a todas con ojos rojos como la sangre… …Todos con colmillos fuera y con caras de éxtasis… -¿Vampiresas?... –Deduzco, al verlas poco a poco acercarse a mí, cómo puedo sacó un collar con una cruz con hermosas incrustaciones rojas, de mi bolsillo izquierdo y lo muestro –Tomen esto –Gritó, esperando que se detengan, ellas se quedan en su lugar y se ríen de mi acción… -En serio… -Susurra Neru con gracia… -¿De verdad crees en el cuento escrito por lo humanos de que los vampiros son vulnerables al ajo, cruces, y la luz solar? –Quitándose los guantes de las manos Luka se serena ocultando sus colmillos –Eso solo demuestra lo estúpidos y arrogantes que son los humanos… …que molestos Me quedó helado, no pude pensar claramente y hago lo que mis instintos me dictan, doy la vuelta y salgo disparado de ahí, muevo como puedo las puertas del salón y salgo dejando a esas vampiresas ahí… -Sus modales son horribles –Luka, se sienta con las piernas cruzadas…. Corro por los pasillos a paso presuroso, las piernas me tiemblan y mi respiración se hace entrecortada y el sudor me cae de mi cara… Pasando entre múltiples pasillos y diversas habitaciones, no he logrado encontrar la salida, por lo que bajo las escaleras que están de un lado y llegó por un pasillo algo lúgubre, y me sorprendo de encontrar a Miku abrazando con fuerza a su oso, a su lado se encuentra un carrito de té lleno de postres, azúcar y muchos pasteles, así como diversidad de dulces, mientras está saborea un pastel con calma… -Te voy a romper –Susurra mientras me ve pasar… Sudando frío, siento que ya llevo mucho corriendo pero aun así me desespero no encuentro nada, mis temores aumentan, no le hago caso a mí cuerpo, y sigo corriendo, tras pasar por una habitación salgo por una puerta negra y camino con cuidado, veo en el fondo un teléfono, como puedo lo tomo y comienzo a marcar, levanto este el aparato y lo coloco a mi oído, apurado espero alguna respuesta, pero solo escucho estática, me asusto y reviso la conexión y para mi sorpresa este está cortado… -Te lo dije, verdad, mientras estuvieras aquí no necesitarías ningún teléfono –Meiko me mira divertida mientras toca mi brazo -¿Y ahora dónde irás Perrito? -Intento dar hacía atrás y al momento choco con alguien y al voltear ahí la veo de nuevo…-Intenta adivinar, perrito… -La empujo y huyó de ahí… Corro a todo lo que mis piernas me permiten y como puedo llego a la puerta principal, a la cual golpeo con todas mis fuerzas… -¡Por favor, ábrete! –Grito a todo pulmón mientras algunas lágrimas caen de mis mejillas por la desesperación -A donde pensabas ir –Rin aparece de la nada a un lado mío, mirándome con ojos rojos que hacen que tiemble –Es el tan esperado momento de gritar, por favor grita con toda la fuerza de tus pulmones –Mientras se acerca más a mí, logró apartarla -No puedes escapar de mí ahora –Me sujeta fuertemente, pero al instante la empujo de nuevo y salgo corriendo hacía otra dirección, dejándola mientras está se ríe… Corro por las escaleras hacía el segundo piso…Logro correr por las escaleras y subo a otras con forma de caracol. Mientras ella subía en la última planta una habitación con cadenas y con enorme candado se rompían… Una sombra pasa, por los pasillos e ingresa a la habitación… Logro ver un pasillo con muchas fotos en las paredes cosa que me llamo la atención, por lo que la seguí y subí por otra escalera que daba hacía otra planta, a lo lejos logro ver una habitación que sobre slae de las demás, me asombre un poco por notar que tenía cadenas rotas y algo en mí hizo que fuera hacía ahí… Ingresar a la habitación, la cual está completamente oscura y apenas se podía ver el interior gracias a luz tenue que se filtraba por las ventanas de luna llena, cierro la puerta con picaporte, para asegurarme que no entraran esas vampiresas… Con cuidado y camino hacia el interior y logro ver muebles cubiertos con sábanas blancas, a un lado hay múltiples joyas, me acercó, logró ver que todos le pertenecieran a un hombre, así como muchos perfumes, los dejo de lado y siento como si alguien me observara… Atrás de él había la figura de un hombre de mediana edad unos 28 años, mirando hacía la luna, con un cabello café negruzco, en una coleta… que en unos segundos desaparece… Camino hacía un balcón y al ver hacía ahí veo a un hombre que al voltearse hace que mi pecho comience a dolerme de manera más fuerte que cuando venía hacía aquí… Me tambaleo y comienzo a tropezarme… -Duele, duele, mucho… -Por el dolor, me golpeo con un estante y se caen algunas cosas de él, cómo libros y cosas sin importancia…Me intento levantar y observo de nuevo hacía el balcón y no veo nada, suspiro aliviado, y regreso mi mirada hacía las cosas que se cayeron y tomo un libro un tanto antiguo del que sobresale una fotografía… -¿Qué es esto? –Suspiro con miedo, veo la fotografía y me asusto pues veo que aparezco en ella… -¿Yo?... ¿Esto es el diario de Mamá?... ¿Por qué?, ¿Qué hace algo como esto aquí?... comienzo a leer el diario con miedo... "Len me da alegría". "El hecho de que no es mi hijo, ya no significa nada". "Solo estoy agradecido por esta bendición de dios, todos los días de mi vida". -¿Qué significa esto? –Con lágrimas en los ojos la miro de nuevo, ¿Yo no soy hijo de mi Madre?, ¿Qué está haciendo el diario de Mamá aquí?... -De todas la habitaciones, tenías que escoger está para entrar. –Luka llega a un lado mío, volteo para verla, y para mi sorpresa todas están rodeándome en la habitación… -Está es una estancia que teníamos sellada para que nadie pudiera entrar, tendré que poner un nuevo candado… -Luka examina lo que tengo en manos -De verdad, ¿Cómo has entrado aquí?, perrito –Meiko me mira con una sonrisa fijamente -Por favor quédate quieto, eres mi presa –Miku me fulmina con un tono autoritario, mientras se acomoda cerca de mí -¡YO!, no soy presa de nadie –Le hago frente, no quería que ellas me hicieran algo, pero no sería débil ante ellas -¡Ya es suficiente!, ¡Cállate! –Haku golpea un librero y del cual caen más libros y papeles que se viertan en la habitación… -Ah…, Haku-Chan, no otra vez –Meiko la regaña mientras se levanta de la mesa en la que estaba -Cállate –Le advierte la peliblanca, mientras se para frente a ella -Esa expresión… … es la que más me excita –Responde Rin mientras me toca por la barbilla… -Tal vez yo participe –Meiko empuja a Haku, y camina hacia mí -Yo también quiero probar –Miku me agarra por la espalda y me aprisiona con sus brazos -Solo hay un hecho que debes comprender –Luka me mira mientras sus ojos se tornan de nuevo a rojo–Que nunca podrás escapar de nosotras -Tú nunca cambias, ¡Ve directo al grano! –Suspira Haku –Dile que simplemente si intenta huir, está muerto Mientras ellas están peleando, Rin y Meiko estaban encima de mí, lamiéndome mi cuello, Miku pasaba sus manos por mi espalda, haciéndome que gimiera levemente… -Ya paren, paren, paren… -Intento luchar, pero Rin impide que mueva mi brazo izquierdo, mientras Meiko me detiene el derecho… El sonido de algo rompiéndose hace que todo pare, Neru había lanzado un cuadro, el cual hizo que Miku, Rin, y Meiko se alejaran de mí. -Lo siento. Lo tiré –Neru levanta algunos pedazos, suspiro aliviado por que me haya salvado -Oye, Chico Débil –Rin cae encima de mí y me tira al suelo -¿Estás preparado?... Miro hacía un lado y veo a la luna en su punto más alto, intento pelear, pero ella me sostiene por ambos brazos, la veo de nuevo y Rin se me acerca, y saca sus colmillos blancos, mientras una sonrisa los acompaña… -¡Dios…! –Respondo mientras todo a mí alrededor se pone oscuro, me había desmayado, sin siquiera entender en que lió me he metido, ahora en un nuevo lugar me donde no tenía salida, mi vida ha dado un giro inesperado… Bueno amigos eso esto, hasta la próxima, quería darle más aire de misterio, pero bueno, si quieren que actualice manden reviews para que esté al tanto de sus gustos, y como tengo pensado pronto subiré mi próximo fic así que viva los fics. Nos vemos Hasta la próxima. Este mi reemplazo del capítulo uno díganme que les pareció se los aseguro continúen leyéndolo, no se arrepentirán. Atte: Richy Escor ¡Nos Vemos!
Richy Escor: ¡Ola a todos!, soy nuevo escribiendo sobre los Vocaloid, pero pues mi imaginación y el ver algo inspirable mi cabeza hace que trabaje, de acuerdo no mucho, pero la intención es lo que cuenta, a SessKagome and Shade Shaw, les agradezco mucho los PM, y gracias enserio me inspiraron a pues cambiar un poco y que pues creciera como escritor muchas gracias, se los dedico, y muchísimas gracias, hasta la próxima, saludos, hasta próxima. Segundo Capítulo De Capítulo de Diabolik Lovers Vocaloid, bueno que lo disfruten y hasta próxima, ¿Merezco un Review?... Disclaimer: Diabolik Lovers no es de mi propiedad, solo lo uso con fines de diversión, así como el uso de los Vocaloid que no me pertenecen si no a Yamaha Corporation, para representarlos, en este fic, que no tiene fines de lucro, sino que es un fic de un Fan para Fans. Así que sin demora El fic. Los rayos del atardecer se encontraban ocultándose en el horizonte, dando al lugar una atmosfera de completo cambio. Dentro de una habitación, con las luces aún encendidas, y todo en completo silencio, por lo que se podía ver entre el piso de la habitación algunos muebles muy bien decorados, entre los cuales sobresalían un gran ropero, estantes con libros, un gran candelabro, y junto del espejo las maletas de dueño de la habitación, frente al espejo, que daba hacía la cama del joven humano, por el cuál se podía observar que este aún se encontraba despertando, abriendo uno por unos sus ojos, aún con el sentimiento de fatiga, que le daba la impresión de estar desorientado, levantando las sabanas que cubrían su cuerpo, se quedó pensando por unos instantes, y casi de golpe, instintivamente colocó sus manos en su cuello revisando si este tendría alguna marca, y tras unos minutos de estarlo revisarlo cuidadosamente suspiró –Menos mal… -y entrelazo sus manos encima de sus piernas dejo escapar un suspiro de alivio–No me han mordido -Viéndose las ropas que llevaba, hizo que sé sorprendiera – ¡¿Y esto?! –Mirando con miedo su piyama que tenía colocada encima de su cuerpo –No recuerdo haberme cambiado –recito mostrando un semblante confundido. Casi al decir concluir esa afirmación, cayó en cuenta de los hechos ocurridos la noche anterior. Conoció a seis chicas, que sin duda alguna eran vampiresas, y por ende al caer en cuenta de esto, ya estaba temiendo por su vida. Claro sin olvidar el hecho de que la rubia de nombre Rin le había intentado tomar la sangre en más de una ocasión el día anterior, así como la extraña actitud de las demás. Tenía no muy claro la actitud de las seis; Neru la hija mayor no representaba para ella mucho peligro pensaba, pues al parecer está no tenía algún interés en él, así como dejó muy claro que había venido en plan de novio e inclusive esposo, dicha idea que al parecerle no le agrada en lo absoluto, por lo que no podía irse. Luka la segunda hija, era muy estricta con sus reglas, así como con la clara advertencia de Haku en el cual estaría muerto si intentaba escapar del lugar sin avisar, y por el tono y las acciones de Haku que sin duda alguna no eran signos de amistad, claro estos eran de agresividad, así como romper y fracturar una pared, un estante y no se sabe que tanta cosa, con un solo puño, no era normal. Miku la dulce vampiresa que no soltaba en ningún instante a su peluche con un cebollín entre sus garras no era mejor que está, y que desde ayer que la vio estaba muy curiosa de él, mostrando su lengua en señal de diversión. Y Por supuesto no estaba de acuerdo para nada que la vampiresa llamada Meiko, estuviera llamándole perrito-chan, eso no le gustaba para nada, así como de estar tomándolo por sorpresa… Estando tan sumido en sus pensamientos que solo divagaba entrecortadamente… -Porqué, de qué manera le había podido pasar esto, ¡Tengo que darme prisa e intentar pedir ayuda! – Se decía mientras apretaba sus manos con fuerza –al instante recordaba la foto de ayer, encontró en esa extraña habitación, en la cual mostraba a su madre vestida como monja, tomándolo entre sus manos cargando el rosario que siempre tenía, que junto al diario, que con puño y letra de su madre decía que no era su hijo, y tras unos segundos de pensarlo, solo dijo en un susurro… -¿Cómo es posible que mi Mamá no sea mi Mama?... –Soltando una lágrima rebelde que comenzaba a caer por su mejilla. Una voz interrumpió por completo el ambiente, -Llorar no te servirá de nada, perrito-chan –Dijo con burla Meiko –Mirando con ojos lujuriosos a Len continuo –Estás bastante sexy con esa piyama transparente, deja ver ese blanco torso –Sonrió mostrando los colmillos relamiéndolos –Además desprendes este embriagante olor, un olor que no se compara a ningún sake que haya probado antes, ¿Intentas tentarme? –Sentenció, avanzando a paso lento sobre la cama, quedando frente a frente de la cara de este… Len se quedó en shock por la acción repentina de Meiko, y solo lograba articular -¡No te… me…a-cer-ques…! -En un intento por detenerla, pero está solo se reía por la confusa cara que mostraba el chico, en tan solo unos instantes ya tomaba el mentón al chico, por lo que Meiko se comenzó acercar a sus labios y a unos instantes de probarlos sintió una fuerza que lo hizo caerse abruptamente de la cama del rubio. -¡No toques las cosas de la gran yo, sin mí permiso! –Gritó furiosa Rin -¡Rinny-chan, qué violenta! –Decía sobando sus posaderas pues había caído de sentón en el suelo -¡Cállate! –Bufó, señalando a Len –Él es mío –Y acercándose a Len y lamió rápidamente su cuello, haciendo que este soltara unos gemidos entrecortados, pero que al parecer solo fueron momentáneas pues este logro empujarla. -¡Por favor, para! –Dijo Len mirando enfurecido a su agresora, tomando distancia de esta mientras continuaba mirándola con ojos desafiantes. -Ustedes dos –Sentenció Luka, llegando al cuarto dando orden a la situación –Llegaran tarde –Dijo mirando con ojos de desaprobación a Rin y Meiko por las acciones indecentes de ambos. -Rin bufó y mirando a Luka -¡Eres tú otra vez Luka!, ¿No puedes dejarme divertir? –Terminó dándole la vuelta a está -¡Y justó cuando me estaba divirtiendo! –Exclama Meiko levantando del suelo Pasando por alto las palabras de sus hermanas, Luka miro a Len –Tú también tienes que cambiarte Len mostró un semblante confuso -¿Cambiarme? –Dijo señalándose a sí mismo –Pues, ¿A dónde vamos? –Recato levantándose de la cama –Es evidente, ¿No? –Declaró Luka –Al Instituto -¿Al Instituto?... ¿A, estás horas? –Pregunto confuso Len mientras miraba con ojos perplejos a Luka -Que mal entiendes las cosas, ¿A caso, necesitas que te expliquen cada cosa con lujo de detalles? –Poniendo una mano en la frente suspirando por la actitud lenta de Len–Es un instituto nocturno – -Pero, ir al instituto a estas horas –Mostró una mueca Len –Solo por que tengas el sentido común de un ser humano, no significa que podamos dejar que estés activo por el día, porque mientras vivas en nuestra casa bebes ajustarte e nuestro estilo de vida –Dijo dándole señales a sus hermanas que salgan de la habitación –Si tienes algún problema con esto, puedes irte cuando puedas –exclamo Luka mientras se daba la vuelta para salir de la habitación -Pero tú me dijiste que estaba muerto si me iba –objeto Len –Has dicho algo –Exclamo Luka deteniendo su paso volteando a verla con ojos rojos, hecho que hizo que Len cambiará su expresión y con nerviosismo dijera: -No, claro que no -bueno, si lo has entendido, ponte el uniforme de ahí –Y como el viento solo se escuchó el cierre de la puerta, ante la mirada de susto de Len al ver que nadie estaba ahí… Al abrir un cajón de una mesita de noche, tomo su crucifijo y colocándolo en su cuello, se dispuso a ir al extraño cuarto de ayer para intentar tomar el diario de su madre, por lo que se dirigió a la puerta y al abrirla, se encontró con Rin mirándolo –Ola –Saludo Rin – ¿Aún no te has cambiado? -Dijo, Mostrando sus colmillos –La grandiosa yo ¡Te ayudara! -¡No, gracias! -dijo Len, azotando la puerta, colocando rápidamente el cerrojo a esta, suspirando tras la puerta, mirando de reojo el uniforme escolar, el cual no era tan malo, pues era de color negro con decorados blancos y amarillos que iban a juego con un corbata de color amarillo, suspirando se colocaba este mientras se empezaba a imaginarse lo que le esperaría en el instituto… Tras unos minutos de haberse arreglado Len en conjunto de aquellas hermanas se subieron a una limosina que esperaba en el patio principal, y sin perder tiempo Luka dio la instrucción de que todos entraran a este, cosa que todos hicieron sin demora. Durante el recorrido había un ruido sepulcral, pues todas esas hermanas, se encontraban en su propio mundo, Neru solo suspiraba por ratos, mostrándose aburrida, Miku jugaba animosamente con Teddy, Meiko sonriendo por ratos, Haku mirándome sin parpadear, Luka leyendo un libro, y por supuesto Rin sentada a un lado de mi haciendo muecas a Haku. Después de observarlos un rato, me quede pensando –Todos… son hermanos ¿Verdad?, -Vacile un poco ente mi pregunta mental – ¿Es que acaso no se llevan bien? –Suspirando me moví un poco de mi asiento –Al parecer ellas no hablan mucho entre sí –Pensé mirando de nuevo el ambiente -¿En qué estás pensando chico débil? –Sonrió Rin –Al parecer tienes muchas agallas para desafiarme, chico débil –Acercándose más a mí Le hice frente ante sus palabras y declaré –Puedes dejar eso Rin-san, eso de llamarme chico débil, es muy grosero, llámame por mi nombre, me llamo Len Kagamine, -Objete -Cállate –Gritó molesta Rin –No me importa tú opinión en absoluto, chico ¡Dé-bil! –Deletreó sacando sus colmillos, de la nada comenzó a acercarse peligrosamente a mí, a lo que Luka cerró fuertemente su libro -Rin, ¿Cuántas veces debó decírtelo?, haz esas cosas en tú habitación –Mirándola seriamente Rin se estremeció, cambiando su mira, me miro a mí –Esto es para ti –Decía mientras me daba algo, lo cual acepte con algo de miedo -Es zumo 100% hacho de arándano es el mejor remedio para la sangre débil -Sonrió –Muchas gracias -logré responderle –No es necesario darme las gracias, pues debes ser completamente consciente de que eres nuestra presa, así que desde ahora la beberás todos los días –Decía mientras su boca mostraba una sonrisa todavía más grande Me asuste, por un momento, pues pensé que Luka-san me estaba apoyando, resultando todo lo contrario, me quede sin aire y temblaba… -Sus dientes están castañeando… Teddy, cuando los humanos tienen miedo lo demuestran de esa forma –Sonrió Miku, mientras le daba la vuelta a Teddy para que observara la escena –Es divertido así que mira bien. La limosina paró en la puerta del instituto, del cual todos nos bajamos del auto. -Estás en la misma clase que Rin y Miku, así que llévate bien con ellas por favor –Dijo Luka Mirándome fijamente, A lo cual solo asentí –A no ser que quieras un castigo, no intentes nada imprudente, ¿Has entendido? –Tras unos segundos me quede mirando al vació -bueno, ¿Y tú respuesta? –Dijo con algo más de fuerza Luka –Claro –Solo alcance a decirle, nos despedimos y me dirigí a mi salón para el cual al ingresar me lleve una gran sorpresa al ver que no había nadie, nadie a excepción de Rin y Miku las cuales se encontraban en sus respectivos lugares, Miku jugando con Teddy riéndose con él, y a Rin aburrida, con la cara en su lugar, ingrese al salón y observe en la pizarra que nos tocaba clase de cocina, lo que explica él porque no había nadie ahí. Rin vocifero –ah… ¿Nos toca clase de cocina? –Y Levantándose poco a poco de su lugar, mostrando en la cara una risita entre los labios… -¿Takoyaki? –Pregunte confuso –Obvio, ¡Hazme el mejor takoyaki del mundo! –Me dijo Rin mirándome a los ojos -Pero… tenemos que ir a la clase –exclame intentando convencerla pues, en un momento me encontraba en el salón de clases para después parar en otro salón de cocina vació. -No me repliques –Gritó molesta –La grandiosa yo los probara, ¡Así que date prisa y cocina! -Pero, ¡Lo que dices no tiene sentido! –Intente justificar en algo aquella extraña petición. Pero de nada sirvió pues al final tuve que hacer lo que aquella vampiresa me dijo. Rin movía impacientemente su lengua mientras se comía uno a unos los takoyaki que le di, soltando uno o que otro sonido de estar gustosa con la comida – ¡Está buenísimo! –Decía mientras se metía otro a la boca -He hecho lo que al final quisiste –Dije suspirando por la extraña actitud de ella -No te preocupes por pequeñeces, y come tú también –Me miró intentado convencerme, a lo cual no negué pues quería probar algo de mi trabajo -Que rico está –Reitere -¡Verdad! –Sonrió Rin, mientras seguía comiéndoselos, pues ella parecía estar más que encantaban pues me había dicho que los aderezará con naranjas. -¡Ah… tengo que limpiar e irme a la próxima clase! –dije empezando a poner manos a la obra para limpiar todo el desastre que hice en la cocina al preparar el deseo de Rin. Me puse a fregar los vasos y platos, así como el molde que tenía un poco de masa de takoyaki, el cual era sumamente difícil de limpiar, así que hable a Rin –Rin-san por favor ayúdame, porque yo solo hice el takoyaki porque me dijiste que lo hiciera -Rin que se estaba balanceando entre la silla y la mesa, mirándome se levantó y comenzó a caminar hacia mí. -Oye, Rin-sa… -alcance solo a decir pues en un instante ya se encontraba alado mío, por lo que corrí hasta el extremo del salón -¿Por qué huyes? –dijo acercándose hacía mí –Sabes, me estado conteniendo desde ayer, así que déjame tocarte –Sentenció tomando de una mano, por lo cual instintivamente intente zafarme de ella, pero al parecer ponía una fuerza para nada natural en el agarre –No, suéltame –Dije intentando empujarla, pero ella me tomo del mentón acercándome a su rostro –Por favor, para, para –Intente moverme y poner resistencia, pero mis fuerzas se estaban perdiendo… Rin que todavía me tomaba del mentón me dio la vuelta dejando a la vista mi cuello –Tú piel luce deliciosa sin marcas de colmillos, da gracias que la grandiosa yo tomara todas tus primeras veces –Terminado la frase sacando sus colmillos y acercándose a mi cuello los clavo… Sentí un dolor muy fuerte del cual solo pude quedarme quieto, sentía que mi alma se escapa de mi cuerpo, mientras era remplazada por una sensación completamente extraña, escuche que Rin hacía ruidos raros, por lo que me imagine que era mi sangre siendo bebida por ella, en un descuido ella me acercó más a su pecho y con fuerza me estrujo contra ella, pudiendo jurar que sentía que sus brazos se pasaban por mi espalda jugando en ella, pasaron minutos que para mí eran una eternidad, donde solo podía cerrar los ojos intentado no mostrar alguna emoción por este hecho… En un instante el acto se interrumpió Rin abrió los ojos perpleja y sorprendida a la vez, y con mucho asombro en los ojos… -Deliciosa… -Suspiraba entrecortadamente -¿Qué es esto?... es más dulce que cualquier cosa que allá probado hasta ahora –Abría sus ojos como platos, suspiraba –Tú... me gustas –Y al terminar la frase continuó bebiendo mi sangre, ahora de manera más salvaje, con más sed, mientras intentaba solo ignorar el dolor que me invadía, ella comenzaba a pasar una mano por mi cabello queriendo soltar mi cola mientras la otra mano me comenzaba a tocar mi pecho… -para por favor… para –intentaba gritar y moverme, ¡Suéltame! –en ese instante logre quitarla de mí agarrándome el cuerpo entre mis brazos de forma protectora -Tonto, por supuesto que te dolerá más si te mueves así, ¿A caso no lo entiendes? –Decía mirándome desafiante mientras mi sangre se derramaba por sus labios –Tus lágrimas y tú expresión de dolor me excitan –Se relamió los labios limpiándose el resto de mi sangre -Por favor ya basta, ¡Ya basta! –Decía asustado –Para de una vez –Intente convencerle -¡No!, no pienso hacerlo… -susurro mientras caía encima de mi atrapándome contra una pared, calvándome sus colmillos mientras sus piernas se enredaban en las mías, intentado detenerla, mis manos dejaron de pelear y cedí pues me había desmayado en las manos de aquella chica… -Madre mía, sí que eres una desgracia –Decía Luka cerrando la puerta del salón e ingresando a él con paso lento, interrumpí mi postre y mire a ella –Nunca pensé que harías esto en el instituto –Me reprochaba Luka mi comportamiento -Bufe alto –Luka… ¡Estaba a punto de llegar a la mejor parte! – Grite histérica -¡No me importa!, así que hazte responsable y asegúrate de llevarlo a casa –Ordeno y miro a Len que se encontraba en el suelo del cual su sangre recorría su cuello bajando a través de está. -Solo mostré una cara de fastidio por el comentario de Luka y veía como está salía del salón acercándose a la puerta y apagando las luces. Realmente no entendía nada, pero no puedo moverme muy bien, pero aun así comienzo abrir los ojos lentamente, al hacerlo me doy cuenta que estoy en una gran habitación, ladeando mi cabeza y logro ver una piscina, por lo que de inmediatamente me doy cuenta que he llegado a casa pues en la escuela con anterioridad Rin me conto de algunos cuartos de la mansión, pero aun así no comprendo porque estoy ahí… -Hey, Len, ¡¿Ya estás despierto?! –Me pregunta Rin mientras me mira, me levanto apenas y logro ver que ella tiene mi corbata amarilla entre sus manos, intento levantarme tomando impulso y por una extraña razón me dolía un poco el cuello, pero ante mi reacción Rin se separa de la pared y camina a paso lento hacía mí… -¡No te me acerques vampiresa! –Grité histérico -¿Por qué estás haciendo esto? –Maldije apretando mis puños, ella se rió y mirándome fijamente ironizo –parece que aún no lo has entendido –Se acercó más y tomándome entre sus brazos logro alzarme con suma facilidad del sillón y me llevo a paso rápido al borde de la piscina –Estás bajo la clemencia de la grandiosa yo, así que ¡Deja de quejarte por cada cosas que hago! –Sentenció terminándome por arrojar en medio de la piscina, mientras me caía en la piscina comencé a perder fuerza pues algunos músculos me dolían mucho, pero para Rin el verme caer no le importó. -Dilo, Di que soy la mejor –tomando más seriedad continuó –Que soy la mejor que todas las demás, y que me perteneces –Dijo mirándome, aunque yo apenas sobresalía de la piscina pues aunque con todas mis fuerzas intentaba nadar a cada segundo que pasaba más y más me dolían los músculos -¡Ayud- Por favr-! –Intentaba decir pero la fuerza se acaba y terminaba por ceder y caer aún en lo más profundo de la piscina… Rin solo observaba, mientras recuerdos amargos le invadían la mente… -Flash Back - Una mano temerosa y pequeña sobresalía de un río en pleno apogeo, intentaba desesperadamente llamar la atención de un hombre que se encontraba a la orilla el cuál solo observando a la niña, Rin, una pequeñita vampira que desesperadamente intentaba llamar la atención de su padre… -Papá, por favor, ¡Ayúdame! –Lloraba mientras la corriente lo jalaba –Cambiare me hare más fuerte que ellas dos, de nosotras el mejor seré, yo lograre tomar el lugar de Mamá, será la Reina… El hombre solo la miraba más fríamente pues se lamentaba el ver a su hija mayor, en ese estado él creía que nunca Rin lograría ser como su esposa, para ser la Reina de los vampiros se reacomodo los lentes y le dio la espalda, alejándose de una Rin que se ahogaba… -Fin Flash Back- -¡Ayuda…! –Un grito de Len logró sacarla de sus pensamientos y sin dudarlo dos veces se lanzó al agua por él, la mano de Len poco a poco se caía, dejándose guiar por su cuerpo que estaba más y más en el fondo, pero Rin nadaba más rápido e intentaba sostener su mano, tras unos segundo logró tomarla y jalando el cuerpo inconsciente de Len hacía el suyo, lo examino mirándolo con detenimiento, miro la cara de este, más risueña de lo normal, y sus ojos cerrados haciéndolo parecer dormido y en un instante sin previo aviso… …Lo besó tomando ligeramente su barbilla lo acerco a su boca profundizando el beso, en el cual intentaba pasarle aire, jugando con la lengua de este durante el proceso, mientras nadaba hacía arriba aún con los ojos cerrados Rin besaba profundamente al chico, el cual poco a poco tras unos segundos lograba recuperar la conciencia a duras penas, viendo como esa vampiresa le había robado su primer beso, por lo que entrecerraba sus ojos lentamente, Rin desacomodaba la camisa de Len y se la quitaba mientras tocaba la piel del cuello de este, y se acercándose y lo mordió suavemente pasando suavemente su lengua entre la piel tan suave de Len, el cual comenzaba a jalar a la chica y dejaba escapar de su rostro señas de un ligero dolor, soltando algunas burbujas de aire, y la sangre que poco se escapaba de los labios de Rin, que esta comenzaba abrir los ojos pues estaba muy concentrada en beber la sangre de Len y en unos segundos se encontraban en la superficie de la piscina. Con Len entre sus brazos y el cual estaba intentando sacar el exceso de agua de su pulmones, tosiendo muy fuerte. Y jadeando por la falta de aire… -Tu Sangre… Fluye por todo mi cuerpo… ¡Es totalmente abrumador! –Decía con un semblante impactante, con sus pupilas muy dilatas, regodeando de que la sangre de Len la tenía loca, pero unos inaudibles y casi sordos murmullos la trajeron a la realidad –Para… de… una vez… -decía Len apunto de desmayarse por casi no tener sangre y la dificultad de respirar se le hacía cada vez más presente. -Qué remedio… supongo que por hoy es suficiente –Suspiro Rin mientras sacaba a Len de La piscina. Len suspiraba un poco más normal, una vez en el suelo, mientras se agarraba fuertemente el pecho, Rin le tiró una toalla a lo que Len se sorprendió por ese acto de ella, por lo que quería darle las gracias pero Rin se retiraba del lugar, dejándolo pensando sobre las acciones que acababan de pasar, tocándose los labios con sus dedos, Len se quedó pensando, en que estos aún estaba desprendiendo un agradable olor a naranjas… En las a fueras de la mansión se encontraba una extraña señorita de apariencia joven, que aparentaba tener unos 27 años, de cabello rojo como el fuego, y unos ojos del mismo color, mirando fijamente al castillo, que se encontraba rodeado de la oscuridad de la madrugada, y donde algunos murciélagos paseaban encima de la silueta de la luna llena… Me encontraba realmente cansado, estaba caminando por el pasillo, a paso lento, temiendo por cualquier ruido, o sombra que pudiera presentarse, temiendo por que alguno de esas chicas me robara, porque por no quiero verlas, tengo miedo de que algo grave pase de lo cual tal vez no despertaría con vida… Con sumo cuidado llegue hasta la puerta de la extraña habitación en la cual encontré el diario de Mamá y por suerte aún no tenía los candados que Luka prometió poner, hice un ademan de victoria, y silenciosamente mire a ambos lados por centésima vez aquella noche, gire la perilla lentamente adentrándome en aquella extraña alcoba, cerré con seguro y camine lentamente entre los vidrios de la foto que había roto Neru anteanoche, seguí caminando y encontré lo que vine a buscar los libros aún seguían tirados por lo que internamente sonreí, me agache moviendo entre estos –¡Lo encontré! -deje salir un pequeño grito, pero eso no impidió que mi felicidad decayera, lentamente abrí la portada -¿Eh…?. ¿Qué significa eso? –Decía confundido, pasaba página tras página y todas y cada una de ellas se encontraban igual, en blanco no podía creerlo -¡Todo, todo ha desaparecido! –mis emociones se fueron al caño con el sentimiento de que mi mundo, mi mundo, ya no era mismo pues de la impotencia deje caer el libro, maldiciendo, desde el momento en que entre a esta casa… Bueno Hasta Próxima, espero Que les haya gustado, si más nos vemos hasta próxima semana. Sin más me despido. Hasta La Próxima. Richy Escor: Se despide. Bye…
Richy Escor: ¡Ola a todos!, ¿Cómo están?, espero que bien pues yo no estaba muy bien de salud pero aun así vengo a traerles más, por lo que relájense, tomen palomitas y su bebida refrescante, y disfruten del Fic, Y absténganse de ser duros con este fic, que apenas va creciendo y tomando forma, por lo que espero de su positiva crítica muchas gracias… Tercer Capítulo De Capítulo de Diabolik Lovers Vocaloid: Intimidación En el Baño, bueno que lo disfruten y hasta próxima, ¿Merezco un Review?... Disclaimer: Diabolik Lovers no es de mi propiedad, solo lo uso con fines de diversión, así como el uso de los Vocaloid que no me pertenecen si no a Yamaha Corporation, para representarlos, en este fic, que no tiene fines de lucro, sino que es un fic de un Fan para Fans. Así que sin demora El fic. La noche era sumamente extraña, el ambiente demasiado frio y hostil, acompañada de una luna que se encontraba en una posición no tan favorable… Me sentía de cierto modo incomodo, con la impresión de que algo no estaba bien, y cuando digo que algo no estaba bien, es en el buen sentido de la palabra y es que hoy, precisamente hoy, vi algo que nunca me imagine posible, y claro algo que me tenía con duda, y eso era ver a esas hermanas comiendo un banquete, y claro, este no consistía en sangre o algo por el estilo, si no que se trataba de comida humana, y para rematar estamos todos reunidos comiendo en el salón principal, el cual para la ocasión estaba muy bien arreglado para la ocasión, el mayordomo solo estaba por así decirlo pintado en la espera que sus amas le diesen la más mínima orden. -Tobías, pásame el vino tinto del 69' –Decía Meiko pasándole la copa al mayordomo el cual lo tomaba y rellenaba con el líquido –Por cierto, arréglame unos asuntos que mañana iré de visita poresa–soltando un gruñido, –como ordene joven Meiko-sama –haciendo una reverencia el mayordomo salía del salón dejándonos a nosotros solos en la habitación. Yo aun no comprendo mucho de su mundo, o de cómo funciona, pero por lo visto, nadie está muy cómoda cuando hablan de esay por más que pregunta nadie me dice nada, el simple hecho de ver a todas como cambiaban sus facciones al preguntar del tema me lo aclaraba más… Neru, se limitaba a tocar su comida por momentos, se la pasaba más escuchando su teléfono que viendo el transcurrir de la cena, Haku tomaba más pausadamente el vino que Meiko, pero aun así lo tomaba en gran medida, comiendo con algo de pereza el pavo ahumado en salsa, Luka se limitaba a comer atún con caviar, de manera muy elegante, haciendo uso de destrezas sutiles, Miku comía con hambre los cebollines con pato a la naranja, que sin duda alguna Rin estaba comiendo con más energía que está, y aún que no lo crean el ver a Rin comer naranja de postre me hace sentir de cierta manera un tanto mal, sin embargo de alguna manera no hago caso a lo que dice y evito entrar en conflicto con ella, pues tras una pelea con Miku por el último pedazo de naranja dulce, ella en estos momentos me está molestando, mientras que yo intentaba comer algo de sopa con aderezo de plátanos –Oye chico Débil, ¿Necesitas ayuda para comer? –Me mostraba una sonrisa algo cínica –Si te apetece puedo darte de comer con la cuchara –Decía mirándome aún más de cerca, es que acaso le gusta mofarse de mí, me pregunto mentalmente, solo la miro con molestia, pero por lo visto a ella le hizo gracia mi acción -¿Acaso el nene necesita del avioncito? –Mostrando un risa, luego intento darme de comer en la boca algo de su comida,algo que por supuesto logre evadir, pues para mí el estar soportando ese trato no me agradaba para nada y puesto por lo que ocurrió hace unos días, sumando al despertarme en la fuente colgado de mis calzoncillos era la gota que desbordaba el vaso – ¡Sabes, no sé ni porque pensé que cambiarías!, eres muy cruel e insensible y no me interesa saber si la grandiosa yo se enfada, pero, ¡Es que no se puede vivir contigo! –Grité mientras me retiraba de la comida, dejandoa las vampiresas algo,perplejas y sin palabras… -Parece ser que Perrito-chan está creciendo, ¿No crees Rin-san? –Susurro Meiko bebiendo el vino lentamente, -Ese me las pagara –Vocifero Rin levantándose de su asiento yendo en busca de Len. -Eso sí que fue de mala educación de parte de ese chico el levantarse cuando aún se está cenando –Agregó Luka. –Que fastidio –Comento Neru levantándose de su asiento –Lo lamento me retiro –Y a paso lento desapareció. -Que malcriada, alguien como ella que ha sido criada y consentida desde pequeña, no tiene remedio –Dejando de lado los utensilios comentó Luka. -Teddy, ¿Qué quieres comer ahora? –Le preguntaba Miku a su oso de peluche el cual estaba sostenido por el brazo. Con suma sutileza intento darle de comer a su peluche pero al intentar tomar unas galletas de vainilla, estas se rompían por el exceso de fuerza que la chica hacía, y en un intento de por fin tomar algunas torció su sonrisa y comenzó a destrozarlas todas con sus manos –Ja, ja, ja, muere, muere… -susurraba Miku mientras estrujaba el polvo de las galletas. -Ni siquiera la cena especial realizada una vez al mes, puede ser normal –Dijo irritada Luka levantándose de su lugar y retirándose, dejando en el salón a Miku, Meiko y Haku disfrutando de lo que quedaba de cena. Sin duda alguna estaba muy molesto por la actitud odiosa de Rin, no me agradaba en nada como ella se comportaba, simplemente no me agradaba en nada, y pensar en un momento que ella podría ser algo diferente –suspiraba– sin duda alguna, era muy tonto el creer eso de ella… Sentado al borde de mi cama solo pensando, el hecho de que le haya levantado la voz era algo que no me imagine hacer, tras un poco de estar pensándolo creo que tengo el derecho de hacer eso –digo –No creo que ella este escuchando esto, ¿o sí?... -¿Qué crees que hiciste allá?, debilucho –sonreía maliciosamente Rin, que para mi sorpresa no noté en lo absoluto -¿Qué haces aquí? –digo asustado, no podía creerlo que la culpable de mi mal humor estaba frente a mí, cruzada de piernas sentada en una silla, y mirándome retadoramente –Eso es asunto mío, el haberse enfrentado a la grandiosa yo, es algo imperdonable –tomando más seriedad –Es por ello que, no sabes comportarte, por lo que creo que tendré que hacerte entender por las buenas tú lugar –Sonriendo sado quistamente de un momento a otro se levantó de la silla, y se acercó a una velocidad inimaginable frente a frente de mí –Por la cara que pones parece ser que no sabes lo que pasará –rio maliciosamente –Solo disfruta de como la gran yo te hará pagar por tu falta –Y terminando la oración se tiró encima de mí, tomando mi cara con delicadeza comenzó a lamer mi cuello mientras sus manos pasaban por mi espalda, jugando con esta, clavándome sus uñas en mi piel –No, por favor para –decía suspirando, el dolor que ella me proporcionaba me estaba haciendo sentir algo extraño –No todavía es muy pronto para parar –Dijo con tono juguetón, y acercándose más a mí sentía su pecho en el mío, y no es que sea un pervertido pero eso se estaba tornando en una situación muy difícil para mí, como era posible, que hace unos minutos atrás estuviera molesto con ella para que en estos momentos este así con ella, tanto estaba pensando en esto, cuando sentí un dolor muy agudo en mi cuello, por supuesto, era Rin clavando sus colmillos, aun que estaba sacando sonidos de dolor ella no parecía importarle en lo absoluto, estuve soportando eso por unos minutos, en los que no paraba de acostumbrarme al dolor, era algo muy doloroso, pero Rin me mantenía aprisionado, colocando más su cuerpo encima de mí, de un momento a otro sus manos habían tomado las mías dejando que sus piernas rodeen a las mías, cuando sin aviso alguno ella soltó mi cuello y aún con rastros de sangre en su boca pronunciaba jadeantemente –Simplemente exquisito, absolutamente dulce el aroma que emana tu piel, acompañado del embriagante sabor de tu sangre hace que me vuelva loca chico débil –Decía con unos ojos llenos de lujuria, mientras jugaba con mi cabello oliéndolo incesantemente, intentaba mover mis labios los cuales al intentar articular una palabra alguna se hicieron presa de los labios de la rubia la cual me besaba con un hambre extrema, posándolos sobre los míos, haciéndome arrancar gemidos, cuando intentaba moverlos ella me mordió los labios, podía sentir como utilizaba sus colmillos para hacerme sangrar la boca más, la sangre que brotaba por ellos no quedaba desperdiciada, pues ella la bebía, mientras intentaba respirar desesperadamente, pues mis fuerzas se agotaban, y sentía que no podía seguir con las acciones de la chica… Así transcurrieron unos minutos en los cuales Rin se centraba en tomar mi sangre de los labios, ella se separo de mi rompiendo el beso y mirándome a los ojos me susurro –Quédate callado que no puedo disfrutar de tu sangre así –Me decía frustrada –En verdad a veces no entendía para nada a ella, en un momento era algo y al otro completamente lo opuesto, eso es algo que nunca entenderé. Entre tantos abrazos y besos fugaces yo soltaba gemidos ahogados y pequeños sonidos pero ella solo me respondía indiferentemente –Oye no hables de esa forma –se reía de mi actitud, cortando el beso ella se lamio la boca con su lengua y separándose de mi abrió salvajemente mi camisa blanca rompiendo los botones de esta, ella se acercó a mi pecho y lamiendo con delicadeza dijo entre cortadamente –Me sorprende ver que tan blanca y tan marcado están tus músculos de tu pecho chico débil – y tocando suavemente la tetilla de mi pecho hizo que soltara un pequeño gemido –y nunca imagine que de igual manera sea muy sensible, y por tu rubor en tu mejillas, debo suponer que es la primera vez que una chica te toca así, ¿O me equivoco? –Preguntó con el usual tonito dulce de su voz, pero el solo pensar de responderle que sí es algo que no iba a permitir, pues aunque sea la verdad, y nadie en mi vida me había hecho algo semejante, no quería darme el lujo de perder contra ella, por lo que solo le conteste –Tú no sabes nada –E intente levantarme de la cama pero su mano cobro más fuerza e impidió mi escape –Parece ser que tú no comprendes tu posición, ¿Verdad chico débil? –Pregunto irónicamente Rin mientras me miraba con sus ojos rojos, yo trague algo de saliva para contestar pero se formó un nudo en mi garganta, en lo que Rin aprovecho y salto a mí pecho clavando sus colmillos en él, haciendo sentir que la sangre de mi cuerpo se iba de mí, y no por el simple hecho de que fuera verdad, si no porque ella lo hacía de manera brusca y sin cuidado, aun sin importarle cuantas veces intente empujarla sus manos y su inhumana fuerza hacían esos intentos fueran inútiles, creo que de verdad comprendí sus palabras… Tras romper el beso ella me miró y sonrió mostrándome sus colmillos aún con su sangre –Ese dolor es mi marca, la prueba de que eres mío y de nadie más –y sin previo aviso continuo besando mi pecho y mordiéndolo dejándolo marcado como muestra de que era de ella y de nadie más, lo que más me sorprendió fueron sus palabras que dijo después… -solo espero que no traiciones mis acciones Len-kun –susurro – Y dicho esto se separó de mí dejándome completamente sólo en mi habitación, dejando marcadas con sangre las blancas sábanas de la habitación y mi cabeza en un estado de conmoción, confusión y por lo visto de fatiga, pues apenas me levante y sentí el aroma el aroma de naranjas maduras que emanaba mi cuerpo, el cual cayó rendido en mi cama a causa de un profundo sueño… Me desperté completamente tarde ese día, la cabeza me daba vueltas y mi cuello y pecho me ardían de sobremanera, en verdad no podía asimilar los hechos ocurridos la noche anterior, simplemente me sentía extrañamente confundido, las acciones de Rin no concordaban con sus palabras, debía pensar en que tal vez eran solo de molestia, pero no, ese no sería el caso, por lo que mejor decidí pensarlo mejor, tras un refrescante baño, por lo que aliste mi habitación y acomode el desastreque había en mi cama y salí del cuarto con mi ropa en brazos directo al baño, camine por el pasillo que al parecer estaba solitario, por lo que haciendo caso omiso de este fenómeno me encamine decidido al baño y tras abrir la puerta del baño, la cerré con seguro para asegurarme que ninguna vampiresa entrara, me desabotone lo que quedaba de camisa y vi, ahí frente a mí estaban las marcas que me había dejado Rin, mi pecho cubierto con unos cuantos besos y mordidas rojas marcadas en él, y viendo detenidamente mi cara veo que mis labios estaban un tanto inflados no mucho pero podía sentir que me dolían, suspire completamente triste y al darme la vuelta me asuste por completo, que casi se me sale el alma del cuerpo… -¿Neru-san? –Preguntaba impactado, pues de todas las personas posibles, tenía que toparme con la vampiresa mayor, no es que tuviera miedo de ella, si no que se encontraba remojada en la tina, con su ropa colocada, aunque debería decir que tenía algo expuesta su ropa interior pues el agua la delataba, intentaba no mirar, pues esos no son los principios con los que fui criado en la iglesia en donde viví -¿Neru-san?, ¿Neru-san? –Volví a preguntarle a la rubia, la cual ni se inmutaba a mi pregunta, tras unos minutos de estar llamándola esta hablo con voz sepulcral –Cállate, ¡¿Puedes dejar el alboroto?! -Bufó –Se nota que eres muy fastidioso –Y abriendo sus ojos amarillos me miró –Solo estoy metida en la tina –Volvió a bufar -¿Pero, con todo y ropa? –pregunte algo perplejo ante su respuesta, ella cambio un tanto su mirada y con voz seductora contesto –Pues quítamela –me quede en shock, ella se río de mi reacción que puse, pues mis mejillas se tornaron rojas -¿No será que viniste, porque querías verme desnuda? –Tarde un poco en reaccionar ente las acusaciones, pero tras analizarlo le grite indignado -¡Te equivocas!, ¡No digas cosas extrañas! –Poniendo más seriedad –Yo sólo vine porque quería bañarme –ella me miraba un tanto divertida y se río -¿Quieres bañarte conmigo?... –Claro que no –Le respondí, nunca me espere que ella tuviera esa actitud –Estás sonrojado muchachito –Hizo énfasis en su comentario, al negar mi estado ella se rio más de mi y cerrado los ojos susurro -¡Que pereza! –Y cambio a su estado inicial, yo no entendía para nada esa actitud de ella, haciendo preguntarle -¿Por qué todas son diferentes si son hermanas? –La mire esperando alguna respuesta ella se levanto de la tina cambiando su posición y bufando contesto –No tenemos los mismo padres –cambie mi expresión por una de confusión -¿Qué? –dije constipado, ella solo se acerco a mí y explico: -Luka y yo tenemos al mismo padre, y las trillizas Rin, Miku, Meiko son de otro padre, así como Haku de un padre distinto al de nosotros, por lo que en conclusión no tenemos al mismo padre, pero si una misma madre -¿De veras? –Pregunte aún confundido, al decir esto, ella se resbalo de la tina dejándose caer en ella, yo por instinto me apresure a tomarla para evitar que se ahogara, al tomar mi mano ella se desconecto por un momento de la realidad comenzando a recordar algo de su cruel pasado… -Flash Back- En un campo de guerra mientras los tanques avanzaban por el horizonte y aviones iban por el ancho cielo, el sonido del caos en las ciudades tornaba a esa tarde llena de sangre y con llamas devorando edificios… Frente a una Neru que se encontraba enfrente de la casa de su mejor amiga la cual estaba siendo consumida por las llamas, recordado a esa peli-rosa que había sido su compañera de juegos siempre sonriendo alado suyo, pero que por el simple hecho de haber sido humana, y ella una vampiresa había pagado el precio de esa amistad con la muerte de su amiga y de su familia a manos de alguien en la que ella confiaba… -No pude ayudarte Michelle, no pude –Lloraba a mares la pequeña Neru, mientras a sus espaldas una pequeña peli-rosa se reía de la desdicha de está –Te lo mereces por acaparar toda la atención –susurraba aquella figurita extraña que regresa a velocidad inhumana de donde vino -Fin Flash Back- La voz de Len me sacó de mis pensamientos, en unos momentos me había perdido en mis recuerdos – ¡Neru-san!, ¡Neru-san!, ¡Me duele! –Por fin pude salir de mis recuerdos y rápidamente fije mis ojos en Len el cual estaba intentado zafarse de mi agarre por lo que baje la fuerza y vi marcas en sus manos, las cuales había dejado por haberlo apretado con mucha fuerza por minutos, en un arrebato lo jale adentro de la tina, haciendo que su torso desnudo se mojara y parte de su cabello igual, cosa que realmente me deslumbro, el ver el agua correr por su cuerpo hizo que mis instintos salieran a flote… -Dame de beber de tu sangre –Pregunte a Len el cual no entendió en lo absoluto a lo que le pregunte por lo que le pregunte nuevamente -¿Estás asustado? –Al hacer esa pregunta hizo que cambiara su semblante de confusión por terror, pude ver en sus ojos el miedo, el cual al verlo hizo que me excita, de un momento a otro lo acerque a mí cara, teniendo la oportunidad de ver en ellos el azul del cielo, y de sus facciones que sin duda eran algo perfectas, mirando más de cerca su piel susurre –Qué blanco eres, si te cortara tu cuello lentamente te mancharía con lo rojo de tu sangre –Sonreía ante la idea, pero él solamente temblaba más, viendo detenidamente su pecho sonreí al reconocer marcas de colmillos que sobresalían de la camisa de Len, en un momento los despoje de la molesta prenda dejándome ver con más detenimiento su torso, reflexione un poco –Con que la responsable de esto fue Rin –Dije con perspicacia, lo pude deducir al ver claramente reflejado su deseo de tenerte solo para ella –Y yo que pensaba que eras diferente Neru-san –Hablo Len con miedo en su voz -¿Porqué? –Intentaba saber él, esa actitud de él me irrito -¡No te confundas!, Yo soy una vampiresa, por lo que te mostrare un mundo diferente –Al terminar la oración me dispuse a colocar mis labios sobre los de él, comencé a besarlo algo posesivamente, por lo que quise lastimarlo, clavándole mis colmillos en sus labios, quise hacerle sentir cual es su lugar, pero él gemía de dolor, me sorprendí, cuando sentí que me mordió los labios por lo que corte el beso –Vaya, vaya, por lo visto tengo que domesticarte –Sacando mis colmillos más de la cuenta los clave agresivamente en el cuello de Len, dejando que mi lengua lamiera suavemente su dulce piel, la cual para mi sorpresa era sumamente tersa y suave, segundo a segundo que tomaba su sangre me daba cuenta de la forma de su sangre. -Tu sangre es sumamente caliente, tanto que podría quemarme –El decir esos susurros, observe la expresión de su rostro por lo deduje que se estaba excitando -Que hombre más obsceno, su cuerpo se pone caliente con el simple hecho de clavarle los colmillos en el cuello –Si que me daba risa sus acciones -¡Te equivocas! –Intento defenderse ante mis comentario, pero no le tome importancia alguna deje de beber de su sangre –Por fin, entendí el motivo por el que viniste a esta casa –Decía impactada -Tú sangre es de primera clase –Deje que su sangre se derramara por mis colmillos, cayendo en el agua de la tina, me acerque a su oído y susurre –La próxima vez no intentes darme la mano con tanta soltura, que no se te olvide muchachito –Tras mi comentario seguí divirtiéndome el ver el rostro de Len, el cual se iba apagando poco a poco, por lo visto ahora no hacía más que mirar al espacio, creo que por mis comentario le dio un ataque y se desmayó, por lo que aproveche para besar suavemente su espalda y clavarle mis colmillos un par de veces, mientras con la otra le quitaba las ropas y lo besaba suavemente en su cuerpo, tras unos minutos de estar jugando con él, lo comencé a bañar, pues pensé que sería divertido, que se despertara y se dé cuenta que jugué un poco con él, me reía, agarrando espuma, lo pasaba por su cuerpo, masajeándolo suavemente y restregando su cabello mojado contra mi pecho, mientras sus ojos estaban cerrados, dándole un semblante muy lindo, sin duda alguna me divertiría en otra ocasión con él pensé, por el momento solo lo bañare y lo dejare, pues tengo que hacer unos asuntos importantes más tarde, por lo que me apresure y salí del baño, llevando entre mis brazos al inconsciente Len hasta un mueble donde lo arroje y me da vuelta dejándolo ahí… Me desperté completamente mareado, para mi sorpresa me encontraba en un mueble de uno de los pasillos, me coloque las manos en la cabeza intentando pensar claramente él porque me encontraba ahí, fue cuando recordé que Neru estaba en el baño y tras jalarme en la bañera me había besado y luego había bebido de mi sangre, no recordaba mucho, por lo que instintivamente coloque mis manos en mi cuello y comprobé que había marcas ahí así como sentía un poco de dolor en mí espalda, me entro un miedo descomunal, pues vi que me encontraba cambiado de ropa, y por lo visto bañado, tenía miedo, pues no recordaba que ella me había bañado el simple hecho pensar eso no me dejaba tranquilo, porque ella se propaso, sin duda alguna esto no se quedaría así por lo que me tendré que vengar de esa vampiresa pervertida que me había bañado, algo que nunca quise que ocurriera… Me levante del sofá y camine hacia mi habitación, la cual por alguna razón tenía las luces apagadas por lo que, no tome importancia, cerré la puerta con seguro y camine hacía el armario y saque unas ropas y me cambie ahí mismo, me acosté en mi cama y me dispuse a dormir, pues tras haberme enfrentadoa esas vampiresas estaba cansado y por supuesto débil, algo que odio pues no tenía mucha sangre por lo que tome algo de zumo de zarzamoras y un plátano que tenía en una mini-nevera y me dormí sin rechistar, pues pensaba vengarme en la mañana del domingo. Sin embargo algo no andaba bien en la habitación de Len, una sombra se movía entre los muebles de la habitación mostrando unos colmillos blancos que brillaban con la luz de la luna que entraba por las ventanas de la habitación. –Que lindo se ve Lenny, ¿No crees Teddy? –Riéndose Miku abrazo más a su osito de peluche y acercándose al chico dormido, miró su semblante dormido y comenzó a pasar su lengua por sus mejillas de él disfrutando de ello –Sin duda alguna sabe muy bien, ¿No crees Teddy? –Ella se preguntaba que tal sabría su sangre, la idea de probar la sangre de Len, le parecía algo buena, pero guardo sus colmillos y salió de la habitación dejando a Len dormido, el cual solo se movió de posición mientras uno de sus ojos se habría y cambiaba de color azul a café y susurro –Mi siempre mimoso Kanato, por lo visto nunca cambia como siempre uno de mis preciados… Los rayos del Sol entraban fuertemente en la habitación, la luz que entraba en el cuarto era algo fuerte, por el hecho de ser algo tarde, la posición del Sol, daba a entender que era cerca de más de medio día, pero lo sorprendente era que el joven rubio todavía se encontraba durmiendo en su cama, la peli-rosa ingreso a la alcoba dejando alado de una de las mesas de noche el desayunodel chico, el cual todavía seguía dormido, la chica agarro una de las manos del chico y de un tirón logró sacarlo de su cama haciendo que en el acto este se cayera por el suelo mostrando una mueca de dolor. -¿A qué se debe esto Luka-san? –Pregunto aun tocándose la cabeza que fue la sufrió los daños de ese incidente, la chica se acomodo sus anteojos y mirándolo con seriedad – ¿No cree que debería de levantarse temprano? -Suspiró ante la mirada de confusión del rubio - ¡Cómo era de esperarse de ti!, no tienes lo más mínimos modales ni educación, por lo que coma su desayuno y alístese pronto, que tendremos más tarde una reunión con los demás acerca de ciertos asuntos importantes, así que sin más me retiro –Dando por terminada la charla Luka salió del cuarto de Len, dejándolo algo más que confundido, pues él no sabía nada de lo que tal vez tratarían de eso de hablar más tarde, pero aun así no podía ponerse a pensar en eso, pues tenía mucha hambre, tras haber dejado escapar un ruido de hambre de su estómago, por lo que sin dudarlo había comenzado a comer del desayuno que Luka le había traído, el cual no duro mucho, pues el rubio lo comió con algo más que salvajismo disfrutando por último un plátano el cual se estaba desapareciendo a cada segundo en su boca del chico. Plaf, se escuchaba el ruido de la puerta abrirse, dejando ver descansando en el marco a una vampiresa rubia… -¡Chico Débil! –Grito Rin, entrando con un semblante molesto y literalmente esparciendo humo, y acercándose más al chico que se encontraba sentado en la cama que casi se atraganta al verla entrar así, -¿Rin-san? Que haces aquí –Intentaba dialogar con ella, mientras lentamente me levantaba intentado no mostrarme débil, pues había decidido no ser más temeroso de las vampiresas - ¡Chico Débil!, ¿Por qué no regresaste inmediatamente tras bañarte a tu cuarto? –Mirándome con enfado Rin me pregunto, no sabía si decirle la verdad pero iba a contestarle que no era de su incumbencia, pero al parecer ella instruyo que diría algo así, así que tomándome de la piyama amarilla que llevaba me acerco a ella y mirándome a los ojos cambio los suyos de unos azules a unos rojos me miro –Espero que no hayas intentado irte a divertir con alguna de ellas, porque para que quede claro tu eres posesión de la Grandiosa Yo, por lo que debes de mostrar respeto y sumisión a mí, y para quitarme el enfado –sonrió –Vengo por mi ración –Y sacando los colmillos y apunto de clavarlos en mi cuello, ella se detuvo… -¿Chico Débil? –Sí –Respondo mostrando un semblante preocupado, comenzando a sacar unas gotas de sudor por mi frente, mientras ella no mostraba sus ojos pues estaba tapados por sus flequillos dorados -¿Qué es esto? –Dijo tocando la marca de unos colmillos en mi cuello –Auch –Dije soltando un gemido de dolor, ella comenzó a pensar –Meiko, no fue Neru, esa tipa me va a conocer –Mostrando un semblante lleno de Ira me soltó con fuerza, mientras ella quito mi camisa con fuerza, dejando al descubierto mordidas que Neru me había dejado en uno de mis hombros, así como en la parte de baja de mi espalda y en mi pecho –Sin duda alguna ella me va a conocer –Gritó y jalándome fuera de la habitación desaparecimos… Llegamos a un cuarto bastante oscuro, el cual estaba lleno de juegos, había una mesa de billar, dardos, una mesa de jockey, y varías cosas más, pero lo que me sorprendía era que Rin estaba con un aire de los mil demonios. Camino hacía un sofá donde estaba recostada Neru-san que parecía estar dormida -¡Neru!, maldita, ¿Estás buscando pelea conmigo? –Rin le gritaba pero ella no parecía escucharla -¡Oye!, ¡¿Me estás escuchando?! –Ella solo movió un poco la cabeza aun sin abrir los ojos -¡Cállate! –Dijo en tono monótono, Rin solo bufó molesta –Vamos a competir con los dados –Neru se dio la vuelta –Me da pereza –Maldita –Contraatacó Rin, pero de la nada se escucharon unos pasos que indicaban que alguien había ingresado al cuarto -¡Que bien el premio será Perrito-Chan! –Sonreía Meiko sentada encima de la mesa de Póker –Eso sí que está bien –Sonreía mostrando una cara sería -¿Premio? –Pregunte aún confuso por esa declaración –Que bullicio, ¿Cuál es el alboroto? –Entrando al cuarto Luka-san preguntó -Él no me importa en lo absoluto –Neru se había vuelto a centrar más en la música de su teléfono –Así que déjenme en paz –Y subiéndole al volumen de su teléfono cambio de posición –Como siempre, pensé que dirías eso, vacilas cuando te mencionan competir, es precisamente por esta mujer que existe el término "cobarde" –Se rio Luka –No puede hacer nada sola, de veras que holgazana –Sentenció mostrando sus ojos rojos, tras unos segundo el ambiente sé tenso, y podía sentir el aire muy denso, de la nada Neru se levanto del sillón y mirando a Rin dijo: –Rin, competiré contigo –Mostrando un semblante serio. Ambas vampiresas se prepararon y mirándose una a la otra se acomodaron en sus respectivos lugares y lanzaron dardos unos tras otros, Rin había lanzado dos dardos dando muy cerca del centro, pero que ambos sumados eran al menos de 60 puntos y Neru había lanzado los suyos alcanzando un puntaje de 65 puntos por lo que si en el siguiente tiro Neru lograba acertar a 30 puntos más sin duda alguna le ganaría, -Si el siguiente tiró Neru lanza y consigue los 30 puntos, te ganara Rin-Chan –Se burló Meiko de Rin la cual solo mostraba sus colmillos por la rabia que sentía en esos momentos, yo solo me sentía molesto pues estaba de premio y eso que sin duda alguna no era lo que tenía en mente intentaba salirme de ahí pero Meiko me tenía sujeto –Esto es raro, déjame ir gritaba –No hagas eso, el premio no debe moverse por su cuenta –Canturreaba Meiko, sacando sus ojos rojos me miro dejándome aterrado pues no tenía tanta confianza en enfrentarme a ella, pues el verla así sin duda alguna era muy atemorizante. Así que alistándose, mirando su objetivo con detenimiento, acomodando sus pies Neru se preparaba, levanto su mano y centrando su mirada, suspiró, yo la veía en sus ojos había determinación, pero no quería que ganara, algo me gritaba por dentro que no, pero solo podía quedarme a observar. Bajando sus manos lanzo el dardo que salió disparado hacia delante clavándose en el puntaje de 25, soltando una risa Neru, miro a Rin –Dudo que ganes mi puntaje –Y dándose la vuelta le dio el último dardo a Rin la cual lo acepto y mirándome susurro –La Grandiosa Yo, no perderá ante nadie e inclusive ante los hijos de esa –Cambio sus mirada y agudizo su vista y acomodando sus pies disparo, el tiro parecía que perdía potencia y se iba de lado, haciendo que estuviera a punto de clavarse en el 10, pero algo sorprendente paso le dio justo del otro lado dando en el 35, puntuación que necesitaba, dando como resultado como ganadora. Neru bajo la cabeza y Luka solo se rió de su acción. – ¡Bien hecho Rin-chan! –La felicito Meiko –Son 95 –Rin se levanto en alto levantando su puño en el aire –Se los dije que la grandiosa yo no perdería ante nadie –Y acercándose a mí, Meiko me empujo en el camino de Rin –Aquí tienes Rin-chan, Perrito-chan es ¡Tú premio! –Sonriendo ella me había empujado e intente detenerla pero Rin me había tomado por los brazos y mirándome a los ojos declaró –Los humanos son solo alimento, pero tú eres mi posesión, eres parte de la Grandiosa Yo –Así que levantándome el cuello, y sacando sus colmillos se acercó a mi oreja y susurro –Tú deberías saberlo, y hare saber a cualquiera que tú eres mío y de nadie más –Y mordió mi cuello con salvajismo, mientras gemía de dolor, mientras las demás vampiresas se retiraban dejando a la campeona sola con su premioel cual estaba desmayándose en brazos de su dueña… Bueno eso esto amigos, nos vemos la próxima, cuando actualice, la verdad, espero que no me haya retrasado mucho, pues andaba mal de salud e intente esforzarme mucho en este fic, pero aun así me gustaría algún review, para saber aunque claro ustedes mandan sobre lo pase, hasta pronto, un saludo, nos vemos… Atte. Richy Escor P.D. Díganme que tanto quisiera que agregara o acepto sugerencias, por lo pronto solo avisen y se los aseguro los sorprenderé. ¡Hasta la Próxima!
Richy Escor: ¡Ola a todos!, ¿Cómo están?, De nueva cuenta yo espero que bien, estamos en noviembre ya cerca la navidad, y aun en clases que mal, pero no se diga más disfruten del Fic, Y absténganse de ser duros con él, por lo que espero de su positiva crítica muchas gracias… Cuarto Capítulo De Diabolik Lovers Vocaloid: Sangre O Chocolate, bueno que lo disfruten y hasta próxima, ¿Merezco un Review?... Disclaimer: Diabolik Lovers no es de mi propiedad, solo lo uso con fines de diversión, así como el uso de los Vocaloid que no me pertenecen si no a Yamaha Corporation, para representarlos, en este fic, que no tiene fines de lucro, sino que es un fic de un Fan para Fans. Así que sin demora El fic. Rin sin duda alguna se estaba divirtiendo, soltando de vez en cuando, pequeñas risas que se escapaban disimuladamente, mientras terminaba de arreglar los últimos detalles… Veía muy de cerca a él chico que se encontraba inconsciente frente a ella… -¡Chico Débil!, levántate –Moviéndolo fuertemente, no lograba hacer que este reaccionara, ya tenía rato intentándolo y nada -¿Escuchas mi voz? – Preguntando al aún inconsciente chico, mirando algo molesta se acercó a él y haciendo uso de un poco de fuerza pellizco a una de las mejillas de Len, que en eso instantes seguía sin reaccionar –Auch, ten cuidado –Gemía Len intentando sobarse la mejilla, Rin sonreía pues por fin había logrado que Len se haya despertado. Intentando levantarse Len se da cuenta de que está encadenado tanto en sus brazos como en sus piernas -¿Qué significa esto? –Intentado quitarlas de él, se intenta levantar, entre tropiezos y pasos torpes, cayendo nuevamente en su lugar, ante las risas y burlas de Rin, -¿Dónde nos encontramos? –Intentando convencerla le exige una respuesta, ella lo mira y soltando un gruñido asiente a su petición. -Estás en algo así como una sala de juegos y como gané ante Neru hace unas horas quiero al menos divertirme un poco con el premio –Cambia su expresión a una de felicidad -Estuve horas enteras pensando en que hacer para divertirnos pues yo quería que te reunieras conmigo está noche, pero por lo visto con lo que ocurrió con Neru –Suspira –Se arruinaron los planes un poco así que… - ¡¿Así qué!? , pregunta con más miedo, intenta de nueva cuenta liberarse de las cadenas mientras tiembla ante las últimas palabras de la rubia – ¡Jugaremos al prisionero y el carcelero un poco! –Y mostrando mis colmillos me acercaba a Len que en estos momentos se movía desesperado mientras su rostro corrían gotas de sudor y nerviosismo. -Que Idiota Chico Débil, el que te haya amarrado con las cadenas es algo muy necesario para el juego, y es que apenas acabamos de comenzar y por lo visto ya quieres renunciar –Riendo por ver la expresión de miedo de Len, el ver su cara con ella era lo que más le gustaba a Rin, el ver como el orgullo de él se estaba derrumbando, sumamente hermoso… -El grito de sorpresa de Len haciendo eco en esa habitación fue demasiado fuerte, pues algo había rozado su mejilla haciendo que un poco de sangre se derramaba por esta… -¿Qué fue eso? –Intentando ver de que se trataba, rodo su mirada hasta encontrar cerca de él lo que parecía ser un dardo -¿A caso fue un dardo? –Aun con algo de confusión veía como Rin se acercaba hacía él, muy cerca de la cara de Len, decidida lo toma del mentón y le susurra al oído – Te explicare las reglas del juego, te lanzare dardos como el que hace unos instantes te lance, si sangras demasiado, entonces estaré en mi límite de intentar de limpiar tu sangre –Lamiendo un poco de la sangre de la herida de Len, ella se ríe de su tiro excelente –Tu eres el objetivo de mis dardos, por lo que tendrás que evitarlos, dándose la vuelta para regresa a su posición inicial. -¿A dónde debería apuntar el siguiente? –Mostrando un semblante dudoso Rin se acomodaba para lanzar el siguiente -¡No por favor ya para!, ¡Detente! –Intentaba hacerla entrar en razón pero ella ya no lo escuchaba -¿Por qué haces esto? –Haciendo eco a sus preguntas Len se da cuenta de que ella siempre le está haciendo Bullying, pero el ver sus ojos de Rin algo le hace saber que esta noche es algo diferente. -No me detendré Lenny –sonreía la vampiresa mostrando sus colmillos –No tendré misericordia por lo que hizo Neru, este será como un castigo je, je, je… -Soltando el dardo fue a parar muy cerca de un brazo de Len pero por suerte logró esquivarlo por casi nada, pues había caído justamente arriba de su mano –Tuviste suerte –Y haciendo más rápido sus tiros Rin fue disparando ante las expresiones de impotencia y miedo de Len –Ya para por favor, no puedo más ya llevamos más de 15 minutos y mi sangre se está derramando, no me quedan muchas fuerzas para moverme –Con lágrimas en los ojos y una expresión de derrota Len se arrodillo -¡Para! -Eso es lo quería ver, esa expresión tuya –Mostrando una expresión sería lo miro, dándose cuenta de la mirada penetrante de Rin se da cuenta que esa expresión no es usual en ella, nunca la había visto así, pero aun así, puede percibir en su mirada algo de sed, sed de su sangre. -Esto chico débil, lo hice para mostrarte que realmente eres muy débil, por no decirte inútil, y por lo tanto para que pudieran surgir tus agallas, mira en la posición que actualmente estás, no quiero que ellas… -susurro lo último, intentado que Len no se dé cuenta, cambiando su voz, pero por lo visto Len no la escucho pues intentaba levantar la mirada mostrando una expresión de comprensión –Te pase nada, por lo tienes que hacerte fuerte en tu actitud y con tu cuerpo, aunque esté un poco marcado no significa que puedas hacer mucho contra alguien. -No entendía para nada las acciones de Rin, no hasta ahora, ella había hecho esto por mí, no lo había visto así, pero había algo que no me gustaba, y eso era su forma de hacerlo… -¡Así que al menos como pagó por esto quiero que ruegues por tu vida! –Rio con ironía la rubia mientras preparaba el siguiente dardo, esto no puede estar pasando, se maldijo Len internamente –Si lo haces, te liberare Lenny –Sonriendo y mandándome un beso volado ella me miraba mostrando sus colmillos… -Yo negué a su petición mientras intentaba mostrarme fuerte ante sus acciones no quería dañar más mi orgullo, haciéndome uso de las pocas fuerzas que me quedaban me levante y mostrando un rostro serio y decidido negué –No lo haré Rinny –Dije Sonriendo -Mostrando un semblante completamente opuesto al anterior Rin me mira y con voz tétrica y ojos rojos sentencia –Si no lo haces, entonces no me queda otra salida que destrozar tu cuerpo con los dardos –Manteniendo mi postura, le volví a repetir lo mismo con la misma expresión en mi rostro, Rin levantando una ceja, ella deja la postura de lanzar el dardo y acercándose a una velocidad que no pude ni siquiera ver, ella se acerco a mi oído y tomando mis brazos e inmovilizándome me susurro… -Entonces probaras como castigo por hablare así a la grandiosa yo, mis colmillos en tu cuerpo –Y tomando una respiración profunda antes de siquiera darme la oportunidad de responder la tartamudez en mi voz se hizo presente, ella me tiro al suelo y fue pasando su lengua por los rastros de sangre que aun sangraban, lamía con una demanda salvaje mi cuello, mi rostro, mis mejilla haciendo un camino hasta mi pecho que estaba descubierto – Estaba avergonzado, más que avergonzado por la sentir su lengua que estaba bailando por mi pecho haciendo que mi tartamudeara y soltando unos pequeños gemidos. Rin entorna los ojos rojos nuevamente antes de decirme que mi tiempo ha terminado. Sonríe lentamente la vampiresa, mientras se reacomoda su cabello, -Te liberare –Con un suave movimiento de su mano, hice una mueca de dolor ante la fuerza de su apretón que hacía en mis hombros, que era más fuerte que de costumbre. Al instante ella se da cuenta y se disculpa por el dolor que me causo. Riéndose de esto, me explica que no puede calmar el impulso de hacer este castigo, todo se debió al efecto de la luna llena. Yo estaba un poco sorprendido por esta revelación, no sabía de algo así. Tras un poco de silencio ella me mira y me pregunta -¿Sabías que la luna llena hace más fuerte aun vampiro?, El impulso de beber sangre también se incrementa en un punto muy alto. –Aun mirándolo a los ojos vacios de ella, no sabía que responderle, intentado articular alguna palabra, mis ojos se ensancharon al sentir los labios de Rin sobre los míos, en un primer momento sentí una sensación muy cálida, pero tras unos segundos los besos de Rin se hicieron más profundos hasta el grado de que ella comenzó a morder mis labios. Yo intentaba moverme pero, ella jadeaba entre los besos que mi sangre estaba excepcional, simplemente exquisita, empezando a sentir su potencia en ascenso su poder -¡Esto es realmente increíble! -Ella empezaba a jadear mientras continuaba besándome y chupándome la sangre que corría por mis labios -Esto es malo… ¡No puedo parar! ... Ha... Ha… -No puedo parar capturar cada gota de sangre que emanaba de tus labios suspiraba pesadamente, entre cortadamente, me besaba profundamente hasta el punto de no poder respirar. Queriendo tener más movilidad sobre él, rompió las cadenas mientras se caía más sobre él. Simplemente no quería soltarse de Len que en esos instantes esta dejándose llevar por el momento… Correspondiendo al beso que Rin le daba, aun sin siquiera pensar, en nada, solo sintiendo el contacto cálido y desbordante se su propia esencia… La silueta de un demacrado Len sentando en los peldaños de la escalera del último piso de la casa, con la cara entre sus rodillas, llorando un poco por lo acontecido, él había huido de Rin… Ahora me encuentro totalmente confundido, estaba más que consciente del beso, no tenía idea alguna, pero obtuve fuerza suficiente para zafarme del agarre del Rin y correr del cuarto de juegos, aun con una cara de miedo y dolor, corría entre pasillos y puertas que encontraba en mi camino, sin importarme que me pasara solo quería irme de ahí, todavía no aceptaba el beso, no podía creer que le correspondí… Apreté mis manos con fuerza, sólo quería estar solo en esos momentos, sé que es raro que sintiera algo en ello, pero es que hay algo que no me deja pensar… Tan encimado me encontraba en mis pensamientos, que no me percate del agarre de alguien en mis hombros, intente levantarme pero Rin me tenía acorralado contra las escaleras, maldita sea la hora en que decidí colocarme a reflexionar ahí… -¿Y bien? –Haciendo más fuerte el agarre -¿Qué esperas para hablar chico Débil? –Sólo me limitaba a negar ante sus interrogantes, Rin no se inmutaba ante mis expresiones, por lo que me quedo en silencio con la mirada baja, ella solo baja de igual manera la mirada y susurra débilmente -¡Por favor explícate, ¿Por qué te fuiste?! –Levante mi mirada pues me sorprendí por su forma de hablar, intente levantarme y alejarme de ella, pero ella tira de mi mano y me mira con cara seria -¡No me dejaras! –Me asuste por sus expresiones que estaban cambiando su semblante, sus ojos cambian de color y sus colmillos sobresalen por sus labios entreabiertos. Como puedo, logró alejarme y la miro –Perdóname –Susurro mientras mis piernas corren todo lo que pueden, dejando tras de mí la figura de Rin, susurrando maldiciones en voz baja y con la cara gacha -¿Porqué estoy tan metida con él?... Aceleró el paso y logro salir de la casa por la puerta trasera que está entre abierta, logro divisar el kiosco a lo lejos y paso de largo de él, sigo caminando por un buen rato, decido esconderme tras un pequeño almacén que está a unos metros del kiosco, cierro la puerta con suma delicadeza para evitar algún ruido y me recargo en la parte trasera de la puerta, noto que mi respiración está entre cortada, y mi pecho está un poco impregnado de sudor por lo que me quito la camiseta y la coloco tras mi espalda, me quedo quieto y pienso un poco lo que acaba de pasar, nunca había visto a Rin, tan enojada y sobre todo en la forma en que la vi, estaba por levantarme cuando siento la presencia de alguien delante y me quedo sin aliento cuando veo que esta se acerca peligrosamente a mí… -Por lo visto no te puedes alejar de mí –Riendo dulcemente se va acercando a la cara de Len, toma con cuidado su barbilla y lame lentamente su rostro mientras saborea un poco –Detente Rin por favor, déjame tranquilo –Intente decir pero siento las manos de Rin en sus hombros –Lo lamento pero creo que no entiendes Debilucho –Mirándolo detenidamente Len asiente y logra levantarse, quita cuidadosamente las manos de Rin mirándola pone un semblante serio –Lamento haber huido, pero aunque no entiendo mi posición te lo repetiré nuevamente ¡No me convertiré en el juguete de nadie! –Se da media vuelta y camina con calma pero la mano de Rin detiene su ida, en un segundo lo tiene contra el suelo y cara a cara, Len traga saliva y su semblante serio queda destruido ante la mirada penetrante de Rin –Si que tienes agallas para hablarle así a la gran yo, eso es algo que respeto, pero –Se detiene y lo sostiene por su barbilla, mirando detenidamente se da cuenta de la cara que tiene Len esos momentos, una cara completamente roja y con pánico en ella, ríe dulcemente por sus acciones y cierra sus ojos mientras baja su cabeza hasta llegar a la de Len y lo besa por unos segundos, la expresión de Len que se encontraba completamente en shock por las acciones inadvertidas de la vampiresa. -Tú… -Susurra Rin mientras toca los labios de Len con sus dedos, una sonrisa aparece en su rostro y dice que logró entender todo ahora -¿De que hablas? –Intentando levantarse, Len cuestiona a la vampiresa que lo mira divertida –De tu secreto habla con voz sepulcral -¿Cuál? –Intento hablar pero Rin se acerca de nuevo a mis labios –La fuente de ese comportamiento que tienes se debe a esto –Tomándolo desprevenidamente roza los labios del chico – ¿No? –Riéndose de la cara que puso el rubio, este se da cuenta que ha sido descubierto, logra incorporarse pero la mano de Rin se lo impide de nuevo – ¿No me digas que esperabas algo inesperado para tu primer beso? –Len se pone nervioso por el cuestionamiento repentino de Rin, pero piensa que la otra vez fue solamente significo un juego para ella – ¿Eso no fue nada, tú solo estabas bebiendo mi sangre en la piscina? –Ella levanta una ceja y lo levanta en segundos, de un golpe seco lo tiene contra la pared a lo que Len hace una mueca de dolor por el golpe repentino, Rin se acerca a su oído y susurra seductoramente – ¡En ese caso!… …te dejare en claro quién ¡Es la que manda! –Los ojos de Len se ensanchan por la confusión, pero se da cuenta de que Rin tiene sus labios contra los suyos, el beso se torna algo salvaje, y con demanda de aire, pero ella lo besa firmemente, protestando mentalmente, trata de empujarla, pero ella ingresa su lengua en su boca… Len intenta asimilar lo que ocurre, la primera vez que lo beso el sintió dolor, pero esta vez no sintió daño, lo besaba con fuerza, con urgencia, algo que él no podía expresar, débilmente se preguntaba por que se sentía así… -Rin murmuraba entre cortando el beso – ngh... Haa… Jeje, je, qué, ¿se siente bien? Estás en confusión… -Mirando a los ojos de Len, él intenta negarlo, pero su rostro nervioso y los torpes pasos que demuestra en el beso dan a entender lo contrario - Si te gusta esto, ¿no? No es bueno ocultarlo –Sonríe maliciosamente Rin –Volviendo a besarlo esta vez con dulzura, la cabeza de Len da vueltas, este contacto sin duda era muy diferente a cuanto ella bebía de su sangre, comenzando a perder la cordura, Rin comenzaba a deslizar sus manos por el pecho de Len, él se sobresalta un poco por la acción de la chica, lo que hace que Rin suelta una pequeña risa –Esto me confirma que eres muy inocente con esto ¿Cierto? –Continuando con la labor, pasa una mano tras la espalda de Len, haciendo que este suspire, un poco ofendido por las palabras de la rubia, Len intenta aclararlo, pero ella no lo deja, y lo besa de nuevo, intentando luchar contra ella, el siente peligro y con la adrenalina al máximo -¿Qué estás haciendo? –Pregunta fuertemente, Rin se ríe nuevamente y le susurra lamiendo el oído derecho de Len -¿Qué quiere decir que... es obvio?, ¿no? Vamos a hacerlo –Y dejando a Len más que colorado por el hecho que se estaba suscitando… -Debes de sentirte honrado por tener el privilegio de tener su primera vez con la gran Yo, pues aunque reconozca que no sabe nada, hare que te sientas bien chico débil –Con la declaración de Rin, con un beso se reanuda la acción, ante los gritos y movimientos de escape continuos de Len. De pronto la puerta se abre, Rin suelta un bufido, da la media vuelta, molesta, se da cuenta de la presencia de Luka con un aura de molestia en ella -¡Perdón por interrumpir! –Con cierto toque de ironía, se dirige a Len que esta con la mitad de su pantalón rasgado y bajado, así como su camisa que se encontraba sujetándolo por sus manos y con la blusa de Rin en su boca impidiéndole cualquier grito posible. -¿Qué te pasa Luka-neesan? –Con cólera en la cara -¡Me interrumpiste en la mejor parte! –Siguiendo con insultos y gritos de una endiablada Rin, Luka se acerca a Len y le quita la mordaza de la boca, Luka levanta una ceja –Creo que no estás en posición de hablar Rin-chan así que mejor contrólate –Suspirando –¡No debes hacer siquiera eso y menos en público, yo solo vine aquí por unos libros, así que no los dejare continuar, así que, si me vuelves a insultar Rinny-chan me encargare de que tu cama no pueda abrirse nunca más y cuando estés dentro te cocinare lentamente como a algunos de mis experimentos –Con una sonrisa en los labios Luka mira desafiante a Rin, ella maldice por debajo y cierra su boca con un resoplido -¿Qué pasa? Por favor, ignóreme y continúe –Ríe perversamente Luka ante la cara que pone Rin, ella solo golpea suavemente el suelo y levanta la mirada –He perdido el ánimo por hoy, así que me iré a casa –Levantándose pesadamente se va del lugar, Luka sonríe inexpresivamente por su cometido y Len se da cuenta que de cierto modo Luka lo salvo… en cierto modo, se pregunta mentalmente si Luka vino a salvarlo… Antes de que Rin desaparezca por la puerta, da la vuelta y susurra a Len –Recuerda que la grandiosa yo, será la que se robe todas y cada una de tus primeras veces, así que prepárate… -Ante las palabras de aquella un tanto explosiva vampiresa, se toca los labios con un dedo, ¿Por qué será que Rin le hace todas estas cosas?, intenta saber el por que, aunque es un tanto clara, pero le resulta muy mala, ella estaba robando cada una de sus primeras veces, todo por el placer propio de ella, eso definitivamente no es amar, el pecho le duele inesperadamente, ante el dolor que se siente cada vez más fuerte a cada instante se abraza así mismo, mientras se desmaya… La cabeza le dolía, no entendía como rayos había llegado a su habitación, intento levantarse pero vio una nota en su mesita de noche, tomándola con algo de miedo, logro leer lo que decía… -Estimado bello durmiente por motivos de urgencia, tenemos una reunión como le dije esta mañana, en el salón principal, por lo que se le ordena que esté listo lo más pronto posible y se apresure que discutiremos asunto de suma importancia, así que es mejor que se aliste… Atte: Luka, y los demás que esperan. PD: Si no se apresura ira alguien a despertarlo de la peor manera posible así que tómese su tiempo será un gusto levantarlo… Sin duda alguna algo no estaba bien con ellas, se dijo internamente Len, y tomando una camisa blanca y un chaleco negro así como pantalones negros se vistió como pudo y salió disparado hacía el salón, sin duda alguna no quería que alguna de ellas fuera a verlo, pues lo que hace unas horas se suscito con Rin lo dejaron confuso y molesto, pues él creía que la forma en que Rin le hacía eso era porque ella no sentía amor por él si no, que todo solo se trataba de un mero un juego, algo que él no toleraría, estando tan metido en sus pensamientos no se dio cuenta que ya había ingresado al salón. -Hola perrito-chan –Riendo entre dientes Meiko se le acerco tomándolo en un abrazo rápido –Sin duda este olor me hace no ser una dama, lamiéndolo rápidamente lo hizo sentarse en un sillón, ante la mirada de molestia de Rin se acerco a Meiko -¿Puedes tomar asiento y alejarte de las cosas de la grandiosa yo? –Poniendo un semblante oscuro Rin miraba desafiante a Meiko, esta solo sonrió y se sentó en otro sillón. –Bueno por lo visto todos estamos aquí, por lo que se da por iniciada la reunión sobre el asunto de ver los papeles de transferencia de Len en la casa, para asignarlo como parte de la familia, pues como todas recordaran será el novio oficial que se destino para este lugar –Ante las miradas de curiosidad de todas Luka sentencio y prosiguió –Por lo que a mí respecta Meiko ira con Len, para arreglar los papeles en la ciudad de Tokio mañana por la tarde, pues por lo visto creo que no habrá nadie en oposición o ¿Sí?-Ante la mirada de demonio de Luka nadie dijo nada, aunque Miku mostraba un puchero y Rin se apretaba las manos con rabia, Neru se concentraba más en su teléfono y Haku estaba mirando al vació. –Pues que no se diga más, Sebastián –La merienda –Con voz suave Luka ordeno al mayordomo traer zarzamora para Len y algo de tomar para ellos, pues aunque Len pidió tímidamente un plátano, Luka no le tomo importancia, las demás prosiguieron hablando de asuntos que deberían tomar en cuenta con la forma de que Len se debería asignar con planes de la casa así como el tendría determina a cumplir ciertas funciones, la reunión se extendió cerca de una hora más o menos por lo que todos se marcharon para sus respectivas habitaciones. Len se encontraba en su balcón algo pensativo, su cabello se movía por la brisa que le ofrecía el suave viento, se encontraba un tanto mojado, pues hace unos minutos que se había tomado un baño para quitarse los rastros de suciedad y lodo que había obtenido en el almacén cercano al kiosco, mirando al cielo estrellado que estaba más que hermoso, tomaba pequeños sorbos de su chocolate caliente, dando pequeños suspiros de resignación, signos de que se encontraba melancólico -¿Qué daría por comer una banana? –Gritaba histérico –Sin darse cuenta alguien había ingresado a su habitación moviéndose sutilmente entre las sombras hasta llegar cerca de la cama de chico -¿Te refieres a una banana cómo esta? – Con una banana en la mano Miku se acercaba Len con una sonrisa en su cara -¡Sí!, como esa… …Pero –Pensando un poco las cosas se alejo de ella un poco -¿Qué estás tramando Miku-san? –Tomando distancia segura de ella le volvió a repetir la pregunta aunque ella solo reía por las acciones de Len -¡Nada!, Nada, enserio ten –Dándole el plátano entre sus manos Len no perdió tiempo y se comía con prisa la fruta, que desapareció lentamente en su boca –Miku reía por las expresiones que ponía el chico -¡Que Lindo! –Admitió sonrojada la vampiresa mientras abrazaba a Len mientras este terminaba de comer el fruto -¿Miku-san que sucede? –Un tanto confundido Len intento quitarse a la chica de encima mientras que ella ponía más fuerza en el abrazo –Sin duda alguna desprendes un olor que me cuesta mucho resistir Lenny-kun –Lamiéndolo suavemente el logra zafarse de ella pues había soltado inconscientemente al chico –Se debe al chocolate caliente –Intento dar una explicación Len a su amenazadora, ella rio por debajo y tomando la taza de chocolate caliente en una mano vuelve a tomar prisionero a Len –Me pregunto si te importara que pruebe un poco –Sin perder tiempo Miku tomo algo de la bebida del rubio, ante la mirada de asombro de Len –Me pregunto que será más dulce, ¿El chocolate caliente o tu sangre?, sin dejarle siquiera responder derramo la bebida por el cuerpo de Len el cual soltó un grito que fue cayado por una de las manos de Miku, tomo por el hombro a Len y logro soltarlo en la cama, sin perder tiempo ella se arrojo encima de él aprisionándolo, con desesperación rompió la camisa de Len y clavo fuertemente los colmillos en el cuello del rubio, el intento de sacarla de encima pero el peso de la chica se lo impedía, sentía como el agarre de la aguamarina se volvía más fuerte y salvaje, Miku suspiraba fuertemente, sus ojos estaban abiertos como platos, tras unos tragos más, corto el contacto - ¿Por qué?, ¿Por qué?, -Se preguntaba -Tú sangre me resulta familiar y exquisita, no puedo entenderlo –Sin dejar de jadear mordió al chico nuevamente en su cuello, Len no entendía porque pero no podía siquiera moverse, Miku levanto a Len y lo acerco a su pecho –Tu sangre me encanta sin duda alguna me sacia la sed, pero no es suficiente, necesito más –Tomándolo de sus manos e impidiendo cualquier forma de escape beso y lamio el cuerpo del chico que aun tenía rastros de chocolate caliente en él. La sangre comienza a gotear por el cuerpo de Len, que se encuentra desconectado del mundo, sus ojos azules que se encontraban dilatados y comenzando a ponerse de otro color, mientras Miku sigue bebiendo de la sangre y el chocolate que juntos han hecho una combinación demasiado dulce, cosa que le encanta, - Me fascina lo dulce que es esto –Decía con la respiración entre cortada –La dulzura de tu sangre está muy bien, pero la del chocolate no es tan mala… -Tras beber un poco más dice con tono infantil –Ne, Lenny-kun, tu sangre sin duda es exquisita, pero creo que es hora del show… -Comenzando a desgarrar los pantalones del chico la puerta se abre y Rin ingresa en compañía de Haku, la cual toma por las manos a Miku la cual se resiste y pelea, pero Haku la deja inconsciente con un golpe seco y se la lleva fuera de la habitación, dejando solos a Len y Rin… Rin ve en el estado que se encuentra Len y bufa fuertemente mientras lo lleva al baño para asearlo y bañarlo nuevamente, tras unos minutos lo recuesta nuevamente en su cama la cual se encuentra limpia tras quitarle las sabanas y colocar otras, Rin mira a Len el cual se encuentra un tanto mal, por lo que le da un dulce beso en los labios y usa sus poderes para borrar la memoria de Len, pero que sorprendentemente ve que los ojos de Len cambian y susurra… -Miku, como siempre veo que le siguen encantando las cosas dulces, ese siempre es su delito…. –Tras terminar la oración sus ojos toman de nuevo el color azul cielo y se desmaya en un profundo sueño... Rin no entiende nada de lo que acaba de pasar, pero sale de la habitación esperado que tal vez mañana le vaya mejor a Len mientras ella intentara apoyarlo en lo que pueda mientras estará en la escuela, sale del cuarto en silencio mientras Len se encuentra moviéndose entre sus sábanas, las cuales de lejos parecen tener a alguien sujetándolo entre sus brazos, una coleta café y un brillo en los lentes hacen que la silueta de ese hombre salga de ahí… Bueno eso esto amigos por el momento si sé que me tarde mucho en actualizar pero que no se diga más intentare no fallar que les juro no me maten por los hechos ocurridos, todo tiene su razón, nos vemos la próxima, pero me gustaría algún review, bueno, para saber que piensan aunque claro ustedes mandan sobre lo pase, hasta pronto, un saludo, nos vemos… Atte. Richy Escor PD: ¡Hasta la Próxima!
Richy Escor: ¡Ola a todos!, ¿Cómo están?, De nueva cuenta yo espero que bien, estamos en noviembre ya cerca la navidad, y aun en clases que mal, pero no se diga más disfruten del Fic, Y absténganse de ser duros con él, por lo que espero de su positiva crítica muchas gracias… Cuarto Capítulo De Diabolik Lovers Vocaloid: Sangre O Chocolate, bueno que lo disfruten y hasta próxima, ¿Merezco un Review?... Disclaimer: Diabolik Lovers no es de mi propiedad, solo lo uso con fines de diversión, así como el uso de los Vocaloid que no me pertenecen si no a Yamaha Corporation, para representarlos, en este fic, que no tiene fines de lucro, sino que es un fic de un Fan para Fans. Así que sin demora El fic. Rin sin duda alguna se estaba divirtiendo, soltando de vez en cuando, pequeñas risas que se escapaban disimuladamente, mientras terminaba de arreglar los últimos detalles… Veía muy de cerca a él chico que se encontraba inconsciente frente a ella… -¡Chico Débil!, levántate –Moviéndolo fuertemente, no lograba hacer que este reaccionara, ya tenía rato intentándolo y nada -¿Escuchas mi voz? – Preguntando al aún inconsciente chico, mirando algo molesta se acercó a él y haciendo uso de un poco de fuerza pellizco a una de las mejillas de Len, que en eso instantes seguía sin reaccionar –Auch, ten cuidado –Gemía Len intentando sobarse la mejilla, Rin sonreía pues por fin había logrado que Len se haya despertado. Intentando levantarse Len se da cuenta de que está encadenado tanto en sus brazos como en sus piernas -¿Qué significa esto? –Intentado quitarlas de él, se intenta levantar, entre tropiezos y pasos torpes, cayendo nuevamente en su lugar, ante las risas y burlas de Rin, -¿Dónde nos encontramos? –Intentando convencerla le exige una respuesta, ella lo mira y soltando un gruñido asiente a su petición. -Estás en algo así como una sala de juegos y como gané ante Neru hace unas horas quiero al menos divertirme un poco con el premio –Cambia su expresión a una de felicidad -Estuve horas enteras pensando en que hacer para divertirnos pues yo quería que te reunieras conmigo está noche, pero por lo visto con lo que ocurrió con Neru –Suspira –Se arruinaron los planes un poco así que… - ¡¿Así qué!? , pregunta con más miedo, intenta de nueva cuenta liberarse de las cadenas mientras tiembla ante las últimas palabras de la rubia – ¡Jugaremos al prisionero y el carcelero un poco! –Y mostrando mis colmillos me acercaba a Len que en estos momentos se movía desesperado mientras su rostro corrían gotas de sudor y nerviosismo. -Que Idiota Chico Débil, el que te haya amarrado con las cadenas es algo muy necesario para el juego, y es que apenas acabamos de comenzar y por lo visto ya quieres renunciar –Riendo por ver la expresión de miedo de Len, el ver su cara con ella era lo que más le gustaba a Rin, el ver como el orgullo de él se estaba derrumbando, sumamente hermoso… -El grito de sorpresa de Len haciendo eco en esa habitación fue demasiado fuerte, pues algo había rozado su mejilla haciendo que un poco de sangre se derramaba por esta… -¿Qué fue eso? –Intentando ver de que se trataba, rodo su mirada hasta encontrar cerca de él lo que parecía ser un dardo -¿A caso fue un dardo? –Aun con algo de confusión veía como Rin se acercaba hacía él, muy cerca de la cara de Len, decidida lo toma del mentón y le susurra al oído – Te explicare las reglas del juego, te lanzare dardos como el que hace unos instantes te lance, si sangras demasiado, entonces estaré en mi límite de intentar de limpiar tu sangre –Lamiendo un poco de la sangre de la herida de Len, ella se ríe de su tiro excelente –Tu eres el objetivo de mis dardos, por lo que tendrás que evitarlos, dándose la vuelta para regresa a su posición inicial. -¿A dónde debería apuntar el siguiente? –Mostrando un semblante dudoso Rin se acomodaba para lanzar el siguiente -¡No por favor ya para!, ¡Detente! –Intentaba hacerla entrar en razón pero ella ya no lo escuchaba -¿Por qué haces esto? –Haciendo eco a sus preguntas Len se da cuenta de que ella siempre le está haciendo Bullying, pero el ver sus ojos de Rin algo le hace saber que esta noche es algo diferente. -No me detendré Lenny –sonreía la vampiresa mostrando sus colmillos –No tendré misericordia por lo que hizo Neru, este será como un castigo je, je, je… -Soltando el dardo fue a parar muy cerca de un brazo de Len pero por suerte logró esquivarlo por casi nada, pues había caído justamente arriba de su mano –Tuviste suerte –Y haciendo más rápido sus tiros Rin fue disparando ante las expresiones de impotencia y miedo de Len –Ya para por favor, no puedo más ya llevamos más de 15 minutos y mi sangre se está derramando, no me quedan muchas fuerzas para moverme –Con lágrimas en los ojos y una expresión de derrota Len se arrodillo -¡Para! -Eso es lo quería ver, esa expresión tuya –Mostrando una expresión sería lo miro, dándose cuenta de la mirada penetrante de Rin se da cuenta que esa expresión no es usual en ella, nunca la había visto así, pero aun así, puede percibir en su mirada algo de sed, sed de su sangre. -Esto chico débil, lo hice para mostrarte que realmente eres muy débil, por no decirte inútil, y por lo tanto para que pudieran surgir tus agallas, mira en la posición que actualmente estás, no quiero que ellas… -susurro lo último, intentado que Len no se dé cuenta, cambiando su voz, pero por lo visto Len no la escucho pues intentaba levantar la mirada mostrando una expresión de comprensión –Te pase nada, por lo tienes que hacerte fuerte en tu actitud y con tu cuerpo, aunque esté un poco marcado no significa que puedas hacer mucho contra alguien. -No entendía para nada las acciones de Rin, no hasta ahora, ella había hecho esto por mí, no lo había visto así, pero había algo que no me gustaba, y eso era su forma de hacerlo… -¡Así que al menos como pagó por esto quiero que ruegues por tu vida! –Rio con ironía la rubia mientras preparaba el siguiente dardo, esto no puede estar pasando, se maldijo Len internamente –Si lo haces, te liberare Lenny –Sonriendo y mandándome un beso volado ella me miraba mostrando sus colmillos… -Yo negué a su petición mientras intentaba mostrarme fuerte ante sus acciones no quería dañar más mi orgullo, haciéndome uso de las pocas fuerzas que me quedaban me levante y mostrando un rostro serio y decidido negué –No lo haré Rinny –Dije Sonriendo -Mostrando un semblante completamente opuesto al anterior Rin me mira y con voz tétrica y ojos rojos sentencia –Si no lo haces, entonces no me queda otra salida que destrozar tu cuerpo con los dardos –Manteniendo mi postura, le volví a repetir lo mismo con la misma expresión en mi rostro, Rin levantando una ceja, ella deja la postura de lanzar el dardo y acercándose a una velocidad que no pude ni siquiera ver, ella se acerco a mi oído y tomando mis brazos e inmovilizándome me susurro… -Entonces probaras como castigo por hablare así a la grandiosa yo, mis colmillos en tu cuerpo –Y tomando una respiración profunda antes de siquiera darme la oportunidad de responder la tartamudez en mi voz se hizo presente, ella me tiro al suelo y fue pasando su lengua por los rastros de sangre que aun sangraban, lamía con una demanda salvaje mi cuello, mi rostro, mis mejilla haciendo un camino hasta mi pecho que estaba descubierto – Estaba avergonzado, más que avergonzado por la sentir su lengua que estaba bailando por mi pecho haciendo que mi tartamudeara y soltando unos pequeños gemidos. Rin entorna los ojos rojos nuevamente antes de decirme que mi tiempo ha terminado. Sonríe lentamente la vampiresa, mientras se reacomoda su cabello, -Te liberare –Con un suave movimiento de su mano, hice una mueca de dolor ante la fuerza de su apretón que hacía en mis hombros, que era más fuerte que de costumbre. Al instante ella se da cuenta y se disculpa por el dolor que me causo. Riéndose de esto, me explica que no puede calmar el impulso de hacer este castigo, todo se debió al efecto de la luna llena. Yo estaba un poco sorprendido por esta revelación, no sabía de algo así. Tras un poco de silencio ella me mira y me pregunta -¿Sabías que la luna llena hace más fuerte aun vampiro?, El impulso de beber sangre también se incrementa en un punto muy alto. –Aun mirándolo a los ojos vacios de ella, no sabía que responderle, intentado articular alguna palabra, mis ojos se ensancharon al sentir los labios de Rin sobre los míos, en un primer momento sentí una sensación muy cálida, pero tras unos segundos los besos de Rin se hicieron más profundos hasta el grado de que ella comenzó a morder mis labios. Yo intentaba moverme pero, ella jadeaba entre los besos que mi sangre estaba excepcional, simplemente exquisita, empezando a sentir su potencia en ascenso su poder -¡Esto es realmente increíble! -Ella empezaba a jadear mientras continuaba besándome y chupándome la sangre que corría por mis labios -Esto es malo… ¡No puedo parar! ... Ha... Ha… -No puedo parar capturar cada gota de sangre que emanaba de tus labios suspiraba pesadamente, entre cortadamente, me besaba profundamente hasta el punto de no poder respirar. Queriendo tener más movilidad sobre él, rompió las cadenas mientras se caía más sobre él. Simplemente no quería soltarse de Len que en esos instantes esta dejándose llevar por el momento… Correspondiendo al beso que Rin le daba, aun sin siquiera pensar, en nada, solo sintiendo el contacto cálido y desbordante se su propia esencia… La silueta de un demacrado Len sentando en los peldaños de la escalera del último piso de la casa, con la cara entre sus rodillas, llorando un poco por lo acontecido, él había huido de Rin… Ahora me encuentro totalmente confundido, estaba más que consciente del beso, no tenía idea alguna, pero obtuve fuerza suficiente para zafarme del agarre del Rin y correr del cuarto de juegos, aun con una cara de miedo y dolor, corría entre pasillos y puertas que encontraba en mi camino, sin importarme que me pasara solo quería irme de ahí, todavía no aceptaba el beso, no podía creer que le correspondí… Apreté mis manos con fuerza, sólo quería estar solo en esos momentos, sé que es raro que sintiera algo en ello, pero es que hay algo que no me deja pensar… Tan encimado me encontraba en mis pensamientos, que no me percate del agarre de alguien en mis hombros, intente levantarme pero Rin me tenía acorralado contra las escaleras, maldita sea la hora en que decidí colocarme a reflexionar ahí… -¿Y bien? –Haciendo más fuerte el agarre -¿Qué esperas para hablar chico Débil? –Sólo me limitaba a negar ante sus interrogantes, Rin no se inmutaba ante mis expresiones, por lo que me quedo en silencio con la mirada baja, ella solo baja de igual manera la mirada y susurra débilmente -¡Por favor explícate, ¿Por qué te fuiste?! –Levante mi mirada pues me sorprendí por su forma de hablar, intente levantarme y alejarme de ella, pero ella tira de mi mano y me mira con cara seria -¡No me dejaras! –Me asuste por sus expresiones que estaban cambiando su semblante, sus ojos cambian de color y sus colmillos sobresalen por sus labios entreabiertos. Como puedo, logró alejarme y la miro –Perdóname –Susurro mientras mis piernas corren todo lo que pueden, dejando tras de mí la figura de Rin, susurrando maldiciones en voz baja y con la cara gacha -¿Porqué estoy tan metida con él?... Aceleró el paso y logro salir de la casa por la puerta trasera que está entre abierta, logro divisar el kiosco a lo lejos y paso de largo de él, sigo caminando por un buen rato, decido esconderme tras un pequeño almacén que está a unos metros del kiosco, cierro la puerta con suma delicadeza para evitar algún ruido y me recargo en la parte trasera de la puerta, noto que mi respiración está entre cortada, y mi pecho está un poco impregnado de sudor por lo que me quito la camiseta y la coloco tras mi espalda, me quedo quieto y pienso un poco lo que acaba de pasar, nunca había visto a Rin, tan enojada y sobre todo en la forma en que la vi, estaba por levantarme cuando siento la presencia de alguien delante y me quedo sin aliento cuando veo que esta se acerca peligrosamente a mí… -Por lo visto no te puedes alejar de mí –Riendo dulcemente se va acercando a la cara de Len, toma con cuidado su barbilla y lame lentamente su rostro mientras saborea un poco –Detente Rin por favor, déjame tranquilo –Intente decir pero siento las manos de Rin en sus hombros –Lo lamento pero creo que no entiendes Debilucho –Mirándolo detenidamente Len asiente y logra levantarse, quita cuidadosamente las manos de Rin mirándola pone un semblante serio –Lamento haber huido, pero aunque no entiendo mi posición te lo repetiré nuevamente ¡No me convertiré en el juguete de nadie! –Se da media vuelta y camina con calma pero la mano de Rin detiene su ida, en un segundo lo tiene contra el suelo y cara a cara, Len traga saliva y su semblante serio queda destruido ante la mirada penetrante de Rin –Si que tienes agallas para hablarle así a la gran yo, eso es algo que respeto, pero –Se detiene y lo sostiene por su barbilla, mirando detenidamente se da cuenta de la cara que tiene Len esos momentos, una cara completamente roja y con pánico en ella, ríe dulcemente por sus acciones y cierra sus ojos mientras baja su cabeza hasta llegar a la de Len y lo besa por unos segundos, la expresión de Len que se encontraba completamente en shock por las acciones inadvertidas de la vampiresa. -Tú… -Susurra Rin mientras toca los labios de Len con sus dedos, una sonrisa aparece en su rostro y dice que logró entender todo ahora -¿De que hablas? –Intentando levantarse, Len cuestiona a la vampiresa que lo mira divertida –De tu secreto habla con voz sepulcral -¿Cuál? –Intento hablar pero Rin se acerca de nuevo a mis labios –La fuente de ese comportamiento que tienes se debe a esto –Tomándolo desprevenidamente roza los labios del chico – ¿No? –Riéndose de la cara que puso el rubio, este se da cuenta que ha sido descubierto, logra incorporarse pero la mano de Rin se lo impide de nuevo – ¿No me digas que esperabas algo inesperado para tu primer beso? –Len se pone nervioso por el cuestionamiento repentino de Rin, pero piensa que la otra vez fue solamente significo un juego para ella – ¿Eso no fue nada, tú solo estabas bebiendo mi sangre en la piscina? –Ella levanta una ceja y lo levanta en segundos, de un golpe seco lo tiene contra la pared a lo que Len hace una mueca de dolor por el golpe repentino, Rin se acerca a su oído y susurra seductoramente – ¡En ese caso!… …te dejare en claro quién ¡Es la que manda! –Los ojos de Len se ensanchan por la confusión, pero se da cuenta de que Rin tiene sus labios contra los suyos, el beso se torna algo salvaje, y con demanda de aire, pero ella lo besa firmemente, protestando mentalmente, trata de empujarla, pero ella ingresa su lengua en su boca… Len intenta asimilar lo que ocurre, la primera vez que lo beso el sintió dolor, pero esta vez no sintió daño, lo besaba con fuerza, con urgencia, algo que él no podía expresar, débilmente se preguntaba por que se sentía así… -Rin murmuraba entre cortando el beso – ngh... Haa… Jeje, je, qué, ¿se siente bien? Estás en confusión… -Mirando a los ojos de Len, él intenta negarlo, pero su rostro nervioso y los torpes pasos que demuestra en el beso dan a entender lo contrario - Si te gusta esto, ¿no? No es bueno ocultarlo –Sonríe maliciosamente Rin –Volviendo a besarlo esta vez con dulzura, la cabeza de Len da vueltas, este contacto sin duda era muy diferente a cuanto ella bebía de su sangre, comenzando a perder la cordura, Rin comenzaba a deslizar sus manos por el pecho de Len, él se sobresalta un poco por la acción de la chica, lo que hace que Rin suelta una pequeña risa –Esto me confirma que eres muy inocente con esto ¿Cierto? –Continuando con la labor, pasa una mano tras la espalda de Len, haciendo que este suspire, un poco ofendido por las palabras de la rubia, Len intenta aclararlo, pero ella no lo deja, y lo besa de nuevo, intentando luchar contra ella, el siente peligro y con la adrenalina al máximo -¿Qué estás haciendo? –Pregunta fuertemente, Rin se ríe nuevamente y le susurra lamiendo el oído derecho de Len -¿Qué quiere decir que... es obvio?, ¿no? Vamos a hacerlo –Y dejando a Len más que colorado por el hecho que se estaba suscitando… -Debes de sentirte honrado por tener el privilegio de tener su primera vez con la gran Yo, pues aunque reconozca que no sabe nada, hare que te sientas bien chico débil –Con la declaración de Rin, con un beso se reanuda la acción, ante los gritos y movimientos de escape continuos de Len. De pronto la puerta se abre, Rin suelta un bufido, da la media vuelta, molesta, se da cuenta de la presencia de Luka con un aura de molestia en ella -¡Perdón por interrumpir! –Con cierto toque de ironía, se dirige a Len que esta con la mitad de su pantalón rasgado y bajado, así como su camisa que se encontraba sujetándolo por sus manos y con la blusa de Rin en su boca impidiéndole cualquier grito posible. -¿Qué te pasa Luka-neesan? –Con cólera en la cara -¡Me interrumpiste en la mejor parte! –Siguiendo con insultos y gritos de una endiablada Rin, Luka se acerca a Len y le quita la mordaza de la boca, Luka levanta una ceja –Creo que no estás en posición de hablar Rin-chan así que mejor contrólate –Suspirando –¡No debes hacer siquiera eso y menos en público, yo solo vine aquí por unos libros, así que no los dejare continuar, así que, si me vuelves a insultar Rinny-chan me encargare de que tu cama no pueda abrirse nunca más y cuando estés dentro te cocinare lentamente como a algunos de mis experimentos –Con una sonrisa en los labios Luka mira desafiante a Rin, ella maldice por debajo y cierra su boca con un resoplido -¿Qué pasa? Por favor, ignóreme y continúe –Ríe perversamente Luka ante la cara que pone Rin, ella solo golpea suavemente el suelo y levanta la mirada –He perdido el ánimo por hoy, así que me iré a casa –Levantándose pesadamente se va del lugar, Luka sonríe inexpresivamente por su cometido y Len se da cuenta que de cierto modo Luka lo salvo… en cierto modo, se pregunta mentalmente si Luka vino a salvarlo… Antes de que Rin desaparezca por la puerta, da la vuelta y susurra a Len –Recuerda que la grandiosa yo, será la que se robe todas y cada una de tus primeras veces, así que prepárate… -Ante las palabras de aquella un tanto explosiva vampiresa, se toca los labios con un dedo, ¿Por qué será que Rin le hace todas estas cosas?, intenta saber el por que, aunque es un tanto clara, pero le resulta muy mala, ella estaba robando cada una de sus primeras veces, todo por el placer propio de ella, eso definitivamente no es amar, el pecho le duele inesperadamente, ante el dolor que se siente cada vez más fuerte a cada instante se abraza así mismo, mientras se desmaya… La cabeza le dolía, no entendía como rayos había llegado a su habitación, intento levantarse pero vio una nota en su mesita de noche, tomándola con algo de miedo, logro leer lo que decía… -Estimado bello durmiente por motivos de urgencia, tenemos una reunión como le dije esta mañana, en el salón principal, por lo que se le ordena que esté listo lo más pronto posible y se apresure que discutiremos asunto de suma importancia, así que es mejor que se aliste… Atte: Luka, y los demás que esperan. PD: Si no se apresura ira alguien a despertarlo de la peor manera posible así que tómese su tiempo será un gusto levantarlo… Sin duda alguna algo no estaba bien con ellas, se dijo internamente Len, y tomando una camisa blanca y un chaleco negro así como pantalones negros se vistió como pudo y salió disparado hacía el salón, sin duda alguna no quería que alguna de ellas fuera a verlo, pues lo que hace unas horas se suscito con Rin lo dejaron confuso y molesto, pues él creía que la forma en que Rin le hacía eso era porque ella no sentía amor por él si no, que todo solo se trataba de un mero un juego, algo que él no toleraría, estando tan metido en sus pensamientos no se dio cuenta que ya había ingresado al salón. -Hola perrito-chan –Riendo entre dientes Meiko se le acerco tomándolo en un abrazo rápido –Sin duda este olor me hace no ser una dama, lamiéndolo rápidamente lo hizo sentarse en un sillón, ante la mirada de molestia de Rin se acerco a Meiko -¿Puedes tomar asiento y alejarte de las cosas de la grandiosa yo? –Poniendo un semblante oscuro Rin miraba desafiante a Meiko, esta solo sonrió y se sentó en otro sillón. –Bueno por lo visto todos estamos aquí, por lo que se da por iniciada la reunión sobre el asunto de ver los papeles de transferencia de Len en la casa, para asignarlo como parte de la familia, pues como todas recordaran será el novio oficial que se destino para este lugar –Ante las miradas de curiosidad de todas Luka sentencio y prosiguió –Por lo que a mí respecta Meiko ira con Len, para arreglar los papeles en la ciudad de Tokio mañana por la tarde, pues por lo visto creo que no habrá nadie en oposición o ¿Sí?-Ante la mirada de demonio de Luka nadie dijo nada, aunque Miku mostraba un puchero y Rin se apretaba las manos con rabia, Neru se concentraba más en su teléfono y Haku estaba mirando al vació. –Pues que no se diga más, Sebastián –La merienda –Con voz suave Luka ordeno al mayordomo traer zarzamora para Len y algo de tomar para ellos, pues aunque Len pidió tímidamente un plátano, Luka no le tomo importancia, las demás prosiguieron hablando de asuntos que deberían tomar en cuenta con la forma de que Len se debería asignar con planes de la casa así como el tendría determina a cumplir ciertas funciones, la reunión se extendió cerca de una hora más o menos por lo que todos se marcharon para sus respectivas habitaciones. Len se encontraba en su balcón algo pensativo, su cabello se movía por la brisa que le ofrecía el suave viento, se encontraba un tanto mojado, pues hace unos minutos que se había tomado un baño para quitarse los rastros de suciedad y lodo que había obtenido en el almacén cercano al kiosco, mirando al cielo estrellado que estaba más que hermoso, tomaba pequeños sorbos de su chocolate caliente, dando pequeños suspiros de resignación, signos de que se encontraba melancólico -¿Qué daría por comer una banana? –Gritaba histérico –Sin darse cuenta alguien había ingresado a su habitación moviéndose sutilmente entre las sombras hasta llegar cerca de la cama de chico -¿Te refieres a una banana cómo esta? – Con una banana en la mano Miku se acercaba Len con una sonrisa en su cara -¡Sí!, como esa… …Pero –Pensando un poco las cosas se alejo de ella un poco -¿Qué estás tramando Miku-san? –Tomando distancia segura de ella le volvió a repetir la pregunta aunque ella solo reía por las acciones de Len -¡Nada!, Nada, enserio ten –Dándole el plátano entre sus manos Len no perdió tiempo y se comía con prisa la fruta, que desapareció lentamente en su boca –Miku reía por las expresiones que ponía el chico -¡Que Lindo! –Admitió sonrojada la vampiresa mientras abrazaba a Len mientras este terminaba de comer el fruto -¿Miku-san que sucede? –Un tanto confundido Len intento quitarse a la chica de encima mientras que ella ponía más fuerza en el abrazo –Sin duda alguna desprendes un olor que me cuesta mucho resistir Lenny-kun –Lamiéndolo suavemente el logra zafarse de ella pues había soltado inconscientemente al chico –Se debe al chocolate caliente –Intento dar una explicación Len a su amenazadora, ella rio por debajo y tomando la taza de chocolate caliente en una mano vuelve a tomar prisionero a Len –Me pregunto si te importara que pruebe un poco –Sin perder tiempo Miku tomo algo de la bebida del rubio, ante la mirada de asombro de Len –Me pregunto que será más dulce, ¿El chocolate caliente o tu sangre?, sin dejarle siquiera responder derramo la bebida por el cuerpo de Len el cual soltó un grito que fue cayado por una de las manos de Miku, tomo por el hombro a Len y logro soltarlo en la cama, sin perder tiempo ella se arrojo encima de él aprisionándolo, con desesperación rompió la camisa de Len y clavo fuertemente los colmillos en el cuello del rubio, el intento de sacarla de encima pero el peso de la chica se lo impedía, sentía como el agarre de la aguamarina se volvía más fuerte y salvaje, Miku suspiraba fuertemente, sus ojos estaban abiertos como platos, tras unos tragos más, corto el contacto - ¿Por qué?, ¿Por qué?, -Se preguntaba -Tú sangre me resulta familiar y exquisita, no puedo entenderlo –Sin dejar de jadear mordió al chico nuevamente en su cuello, Len no entendía porque pero no podía siquiera moverse, Miku levanto a Len y lo acerco a su pecho –Tu sangre me encanta sin duda alguna me sacia la sed, pero no es suficiente, necesito más –Tomándolo de sus manos e impidiendo cualquier forma de escape beso y lamio el cuerpo del chico que aun tenía rastros de chocolate caliente en él. La sangre comienza a gotear por el cuerpo de Len, que se encuentra desconectado del mundo, sus ojos azules que se encontraban dilatados y comenzando a ponerse de otro color, mientras Miku sigue bebiendo de la sangre y el chocolate que juntos han hecho una combinación demasiado dulce, cosa que le encanta, - Me fascina lo dulce que es esto –Decía con la respiración entre cortada –La dulzura de tu sangre está muy bien, pero la del chocolate no es tan mala… -Tras beber un poco más dice con tono infantil –Ne, Lenny-kun, tu sangre sin duda es exquisita, pero creo que es hora del show… -Comenzando a desgarrar los pantalones del chico la puerta se abre y Rin ingresa en compañía de Haku, la cual toma por las manos a Miku la cual se resiste y pelea, pero Haku la deja inconsciente con un golpe seco y se la lleva fuera de la habitación, dejando solos a Len y Rin… Rin ve en el estado que se encuentra Len y bufa fuertemente mientras lo lleva al baño para asearlo y bañarlo nuevamente, tras unos minutos lo recuesta nuevamente en su cama la cual se encuentra limpia tras quitarle las sabanas y colocar otras, Rin mira a Len el cual se encuentra un tanto mal, por lo que le da un dulce beso en los labios y usa sus poderes para borrar la memoria de Len, pero que sorprendentemente ve que los ojos de Len cambian y susurra… -Miku, como siempre veo que le siguen encantando las cosas dulces, ese siempre es su delito…. –Tras terminar la oración sus ojos toman de nuevo el color azul cielo y se desmaya en un profundo sueño... Rin no entiende nada de lo que acaba de pasar, pero sale de la habitación esperado que tal vez mañana le vaya mejor a Len mientras ella intentara apoyarlo en lo que pueda mientras estará en la escuela, sale del cuarto en silencio mientras Len se encuentra moviéndose entre sus sábanas, las cuales de lejos parecen tener a alguien sujetándolo entre sus brazos, una coleta café y un brillo en los lentes hacen que la silueta de ese hombre salga de ahí… Bueno eso esto amigos por el momento si sé que me tarde mucho en actualizar pero que no se diga más intentare no fallar que les juro no me maten por los hechos ocurridos, todo tiene su razón, nos vemos la próxima, pero me gustaría algún review, bueno, para saber que piensan aunque claro ustedes mandan sobre lo pase, hasta pronto, un saludo, nos vemos… Atte. Richy Escor PD: ¡Hasta la Próxima!
Richy Escor Presentando: ¡Ola a todos!, ¡Un gusto enorme!, De nueva cuenta reportándose, ¿Cómo están?, Yo bien, así como lo espero de ustedes también, estamos ya en Diciembre época de amor y felicidad ósea la navidad, y aun en clases que mal, pero no se diga más disfruten del Fic, Y absténganse de ser duros con él, por lo que espero de su positiva crítica muchas gracias… Quinto Capítulo De Diabolik Lovers Vocaloid: Rosas & Tentaciones, bueno que lo disfruten y hasta próxima, ¿Merezco un Review?... Disclaimer: Diabolik Lovers no es de mi propiedad, solo lo uso con fines de diversión, así como el uso de los Vocaloid que no me pertenecen si no a Yamaha Corporation, para representarlos, en este fic, que no tiene fines de lucro, sino que es un fic de un Fan para Fans. Así que sin demora El fic. Len se encontraba completamente dormido, su semblante mostraba indicios de no haber conciliado bien el sueño la noche anterior, su rostro demacrado y cabellos rubios desarreglados, a un lado de su cama blanca, se encontraba Rin mirándolo detenidamente, se culpa internamente por lo sucedido la noche anterior, si sólo hubiese llegado más rápidamente se repetía mentalmente, quizás, quizás… hubiera logrado evitar que ocurriera eso… Miraba el cuello y parte del pecho de Len, donde se suponía que estuviera blanco y suave con unas cuantas marcas de ella pero ahora… ¡No!, se encontraba lleno de marcas y mordidas de Miku, Se estremecía mentalmente al recordar que Len tenía marcas que no habían sido producidos por ella. Acercándose lentamente hacía el torso desnudo del chico, fue pasando sus dedos por aquellos lugares rojos y marcados, pasando suavemente las yemas de los dedos para no lastimarlo más de lo que ya estaba, se percata del dolor que eso producía, lo podía notar en las expresiones que hacía Len, su rostro que antes se encontraba algo calmado, ahora mostraba dolor y sufrimiento, por lo que dejo de hacerlo, ya se había percatado de lo suave que era la piel de Len, lo supo desde la primera vez que lo tocó, aunque le encantaba hacerle esas marcas, y dejando estampado en su piel que era de su propiedad, el seguía desprendiendo ese aroma que tanto la hacía enloquecer… Camino un poco por la habitación meditando un poco la situación, tras pensar un rato, levantado una ceja, se pregunta mentalmente, si en verdad tal vez, solo tal vez, Len no se presentó ante Miku, tentándola de alguna manera, tras pensarlo, rápidamente descarto dicha idea, pues de alguna forma retorcida y rara, confiaba en Len, aunque en estos momentos sentía que no podía perdonarlo por lo ocurrido, aunque pensándolo mejor, no entendió las palabras de Len la noche anterior… -Miku, como siempre, veo que le siguen encantando las cosas dulces, ese siempre ha sido su delito… Aquellas palabras no tenían un porque, no tenían algún tipo de conexión con Miku, como es que Len conocía que su hermana tenía una adicción de vida o muerte por lo dulce, así como esos enigmáticos ojos cafés que le mostró la noche anterior, los ojos de Len, esos ojos esos ojos le hacían recordar a… Una risita inundo la habitación, Luka se adentro en la alcoba, quedando frente a ellos. –Rin-chan tienes que apurarte para hacer los deberes de hoy, y que no se te olvide, nada de holgazanear, Yo le daré el desayuno a Len y me encargare de hablar con el de lo ocurrido la noche anterior, -Suspirando miro con detenimiento al dormido Len –Ya me conto Haku la situación, así que si realmente no quieres estorbar te agradecería que salieras de aquí, necesito también contarle sobre lo que debe hacer por la tarde con Meiko en la ciudad, así que por favor, sal –Ante las palabras de la su hermana mayor Rin maldijo por debajo y salió de la habitación dejando a Len aun dormido en manos de Luka, aunque no le gustara la idea, temía por el bienestar del rubio, aunque no negaba el hecho que le molestaría que la sangre de él fuera succionada por otra persona que no fuera ella… -Len-kun, levántate –con pequeñas sacudidas logró hacer reaccionar al rubio, aunque Luka no lo demostrara, se sentía algo inquietante por el olor que desprendía el rubio, aunque logrando controlarse comenzó a examinar el estado del chico; Len al levantarse con un bostezo, sintió algo de dolor en su pecho y en su cabeza, lo que hizo que Luka se preocupara por ello - ¿Qué te pasa? –Con algo de asombro en su voz, Luka toco con cuidado el pecho descubierto de Len, cosa que hizo que se este se sorprendiera… - ¿Luka-san?, -Mirando a la susodicha, giro su cabeza –Porque me duele la cabeza y ¿Siento algo pesado el cuerpo? –Con algo de miedo en su voz Len alzo la cabeza de Luka la cual se encontraba algo perpleja por ver hasta que grado Miku se había excedido con el chico, su pecho estaba realmente marcado con marcas de colmillos, y en sus labios aun emanaban rastros de olor a chocolate… - ¿Len, recuerdas algo de lo sucedido anoche? –Con algo de dificultad Len negó, tocándose la cabeza con ambas manos intentando que el dolor disminuyera. - ¿A caso no recuerdas que Miku vino a visitarte ayer por la noche? -Luka intento tocar a Len, cosa que hizo que este se quedara pálido - ¿Miku?, Ella, ella, me dijo que quería probar de mi sangre, y recuerdo algo de chocolate caliente cayendo por mi cuerpo, recuerdo haber sentido dolor, y algo extraño, algo que me jalaba, lentes… - ¿Lentes? –Preguntaba y repetía Luka algo confusa, -Así es –Suspirando se acerca a ella –Si, aunque no sé porque, sentí que alguien que no era Miku también estaba aquí… - ¿Alguien más? –Aun con dudas, Luka no quiso seguir preguntando del tema, pues veía en el rostro de Len con miedo y confusión, por lo que era obvio que no obtendría más información, por más que insistiera en el tema, por lo que decidió dar por concluido el interrogatorio por ahora… -Apresúrate a bajar que necesito que desayunes para ir luego al salón, necesito que hablemos de las cosas que Meiko y tú resolverán por la tarde en la ciudad, así que por favor, apresúrate –De la misma forma en que apareció, Luka se esfumo de ahí, dejando algo intrigado al chico el cual estaba pensando exactamente que haría, pues no le agradaba mucho la idea de ir con Meiko sólo, y mucho menos a Tokio, aunque lo primero por ahora era cambiarse… Esperando en el salón a Len, Luka se sentó en un sillón y se dedico a disfrutar de leer el libro que llevaba consigo, no es que no pensara mucho las cosas simplemente se ponía un poco reflexiva con las cuestión de Len ahí, no dudaba de las ordenes de su Madre, y que desconociera el pasado de Len y ciertas cosas que no le habían dicho, ella solo suspiraba por la carga que soportaba en esos momentos, ser la 2da hija no era un puesto alto, el ocuparse del trabajo que Neru haría, era algo que desde hace años hacía ella, cosa que le encantaba, pues eso llenaba su ego, algo de lo cual se enorgullecía… -Luka-san, llegué –Con algo de nerviosismo se quedó estático en el marco de la puerta, Luka alzo la vista y miro con indiferencia a Len - ¡No tengas miedo! –Suspiro - ¡No quiero de tu sangre! –Ante la perplejidad de Len, Luka se levanto y se dirigió a él, -Siéntate por favor, así esto será más rápido y tranquilo para ambos, ante aun las dudas de Len, ella se sentó y prosiguió: -Len espero que estés al tanto de tu posición aquí, aun quedan pendientes sobre tu estadía en la casa, así como de tu paradero, por lo que tendrás que firmar papales y formas sobre tus datos y cosas de esa categoría –Quitándose los lentes lo miro seria –Por lo que espero que no ocurra algún imprevisto, recuerda que esta es la casa Sakamaki, por lo que tienes que portarte a la altura… Len palideció un poco ante este último comentario pero se quedo en silencio y asintió, -Bueno por lo pronto hablaremos de un tema más importante –Luka se levanto del sofá y se acercó a Len, tomando delicadamente su rostro miro fijamente sus ojos –Parecen normales –Luka examino detenidamente sus oídos y le abrió la boca para examinar su garganta –No hay nada anormal en ti –Len se estremeció - ¿Hay algo en mí, de qué habla? –Luka suspiro con desesperación - ¡Me refiero que no tienes secuelas por lo ocurrido a noche, así como por lo visto no recuerdas casi nada!, ¡¿Cierto?! -Con algo de miedo Len le dio la razón a Luka, él sabía que algo estaba mal, cosa que hacía que nada mejorara, lo peor es que no podía recordar mucho… -Solo sé que vi a Miku entrar a mi cuarto, y no sé puso oscuro, al abrir nuevamente mis ojos solo pude ver las figuras momentáneas de Rin y Haku… Y… Vi a alguien con gafas… -Con miedo en la voz y dolor en su pecho, su mirada se puso perdida… -Len, Len –Intentando hacerlo reaccionar Luka se coloco encima de él e intento moverlo fuertemente pero nada, fue cuando sintió algo que en ella se desataba le subía un calor por toda la espalda, por lo que se alejo de él y se sentó de nuevo en el sofá, tras unos instantes de lo ocurrido Len se levantó del suelo al cual había caído. - ¿Qué pasó? –Sobándose la cabeza –Len miro con confusión a Luka la cual estaba leyendo… ¿Un libro?... - ¡Ah!, despertaste, bueno pues como te explique eso es todo por el momento, por lo que puedes retirarte –Haciendo ademan de que se fuera, Len se levanto y se dio la media vuelta, aun confundido, pero sin reclamar nada, se despidió de Luka que regresaba a su lectura, marchándose del salón. Luka que se encontraba confundida, no entendía lo que hace unos minutos ocurrió con Len ni consigo misma, haciendo un lado el libro, se levanto del sofá y camino con lentitud hacía la ventana, intento quitarse esa idiota idea que tenía en su mente, por lo que movió un poco las cortinas para intentar ver si el aire podía despejarse la mente, pero en cambio observó la figura de Len alejarse sin rumbo fijo por los jardines… -Pude controlarme –Sacando algo de aire, apretó sus puños con fuerza –No sé cuanto podré resistirme a probar de esa sangre y ese olor que me hace perder la cordura… Len se encontraba vagando por los jardines con algo de preocupación en su rostro, no del todo pues el tener que ir a arreglar asuntos en la ciudad en compañía de Meiko, y precisamente con ella, aun así no se sentía muy bien que digamos el estar con ella a solas en una ciudad que muy poco conocía, pero lo peor es que le dolía la cabeza, y un poco la espalda, no entendía muy bien lo que sucedió en el salón, pero él podía jurar que algo había pasado, el estar pensando en ello hacía que le doliera la cabeza… - ¿Por qué me pasa esto? –Estando agarrando sus cabeza con sus dos manos, intentado que al menos el dolor cesará un poco, pero al parecer no funcionaba, agarrándose del tronco de un árbol logro distinguir el sonido de una flauta, que al parecer sonaba bastante agradable y armoniosa, dándole un instante de paz, comenzó a caminar un poco mejor dirigiéndose hacía de donde provenía dicha sinfonía, al adentrarse un poco más entre los árboles logro distinguir de entre ellos a Miku a plena sombra de estos, tocando delicadamente el instrumento de color blanco, a los pies de ella se encontraba Teddy, a quien al parecer le dedica le hermosa melodía, con una expresión concentrada, y los ojos cerrados la vampiresa tocaba fervientemente… Intentando escuchar mejor me acerque con mucha delicadeza hasta quedar a unos metros de ella, no me esperaba que Miku supiera tocar un instrumento, aunque tampoco contaba con el hecho de supiera tocarlo tan bien, estando tan encima en la sinfonía que no me percate de la aproximación de esta, cuando abrí mis ojos me percate que ella me tenía en contra del árbol que me servía como escondite… -Vaya, vaya, ¿Qué tenemos aquí? –Mirándome irónicamente, intente moverme y esquivar su abrazo, pero ella se movió velozmente que no me dio tiempo de escapar -¡Pero si es Lenny!, ¡Qué alegría!, ¿No es así Teddy? –Mirando al oso ella se centro su vista en mi cuello, lamiéndose los labios se acerco hacía mi, sentía su respiración exaltada sobre mi garganta, de pronto sentí un enorme dolor, me incline para ver de dónde se provenía pero me sobresalte al verla bebiendo de mi brazo, quise alejarla y correr pero ella me tiro en el piso y al colocar sus manos sobre los míos pude ver en sus ojos ese típico destello rojo que nunca me ha gustado… -¡Que hermosa expresión tienes en el rostro de hoy Lenny!, más, más, muéstrame más de esa expresión –Diciendo cosas si sentido, yo no lograba sacármela de encima, por más que me llenaba de sudor y mi expresión se hacía más y más desesperada, ella solo se reía de mis inútiles intentos, hasta que mis puños dejaron de moverse y finalmente me rendí, porque aun así había algo que no me dejo tranquilo, algo se me hacía familiar esa silueta que veía a lo lejos cuando estaba por cerrar mis ojos, pude ver con claridad unos ojos cafés que me miraban tras unos lentes… No sé cuantos minutos trascurrieron en los cuales Miku se sacio de mi sangre, pero no se siquiera lo que ocurrió después, solo había algo de lo que estaba seguro es que me dolía mucho el pecho, por lo que me levante y me sorprendí de ver aquel instrumento el cual fue el culpable de haber caído en su juego se encontraba ahí, junto a una nota… Querido Lenny la noche anterior me divertí como nunca, tu sangre dulce fue exquisita, tanto que me he vuelto adicta, así que descuida descubrí una forma de ser la próxima en asunción al trono… Por lo que espérame, que te regalare algo especial cuando regrese del colegio te iré a visitar por la madrugada… Así que adiós mi queridísimo Lenny que tu sangre será solo mía… Firmado con una extraño dibujo de Teddy solo lo arrugue, y lo arroje al suelo, sin duda algo pasó de lo cual no recuerdo mucho, pero… Pero de alguna forma me hace sentir muy molesto y enojado… Me di la vuelta y tomando al instrumento salí hacía la mansión en busca de unas cosas… Me sorprendí no creí que la tarde caería realmente tan rápido, ahora me encontraba en el auto el cual era conducido por Meiko, sinceramente me esperaba esto de ella, pero el manejar a 200 km/h era algo sumamente exagerado… -Meiko-San, ¿Podría bajarle algo a la velocidad? –Con algo de miedo en mi voz intente sonar seguro pero al parecer había sido el efecto contrario, riéndose de mi ella me miro divertida -¿Qué me dices perrito-chan?, tranquilo no pasara nada incluso estando un estado de ebriedad manejaría aun mejor –No sé si lo dijo de broma o no, pero el imaginarme en una situación hipotética así no quisiera estar con ella. Nos dirigíamos a las oficinas de la Procuradora, en la cual según las palabras de Luka iríamos a buscar papales de transición legal, papeles sobre mi datos personales así como si no mal recuerdo mis respectivos permisos de algo que tenía que ver sobre mi estado, aunque la verdad no estaba muy concentrado que digamos pues miraba por momentos toda la enorme estructura de aquella institución de gobierno, -Es muy grande, ¿No perrito-chan? –Mirándome con una sonrisa yo solo asentí, pues no había salido casi nunca de mi anterior pueblo, así como la gran parte de mi vida me la pase rodeado de figuras de santos y de imágenes divinas, -Sígueme si no te perderás –Haciendo caso a la castaña camine tras de ella por unos enormes pasillos hasta llegar en una puerta que al parecer por las insignias le pertenecía al jefe de asuntos fiscales, Meiko tocando levemente la puerta escuchamos un llamado muy educado –Adelante Señorita Sakamaki, la estábamos esperando –Asiendo caso sus palabras ingresamos en aquella sala… -Me honra mucho con su visita Señorita Meiko Sakamaki, espero poder ser de ayuda con sus asuntos –Mostrando una sonrisa la castaña solo asintió, cosa que me sorprendió de aquella vampiresa no me imagine eso de ella… –Bueno primero lo primero, lo primero, necesito que el joven Kagamine firme estos papeles de situación actual –Mostrando unos papeles, los tome con algo de miedo pero vi a Meiko haciéndome señas de firmar, con algo de miedo las firme –Aquí tiene –Le regrese las hojas a lo cual él solo guardo y mostro unas nuevas, -Bueno a hora platicaremos un asunto importante, veo algo interesante como me dijo señorita, en las hojas veo datos inconclusos y por supuesto alterados pero no estamos muy seguros, por lo que los datos de origen del chico se los enviaremos más tarde por fax, pero por el momento los de matrimonio en 12 semanas están siendo terminados –Suspirando –Creo que lo único que queda pendiente sería que firme su situación financiera –Mostrándome los papeles, los tome y firme, pero lo que vi me sorprendió -¿Ese es mi estado financiero? –Aun con una expresión de sorpresa y mi boca entreabierta Meiko se rió de mi -¡Claro!, pero hasta que te cases en 3 meses, pero –Mostrando una expresión seria, y casi inaudible para el fiscal… -Si es que llegas hasta esa fecha… pues a veces no todos logran llegar… …!¿Llegar a que te refieres?! –Aun teniendo mis dudas no entendí a lo que me contesto –Nada, nada, solo limítate a cumplir tu papel todo dependerá si despiertas… Con dudas en mi cabeza salimos ya muy de noche de ahí e ingresamos al auto, el ambiente no era para nada agradable, pero no me animaba a romperlo miraba de vez en cuando a Meiko que solo se limitaba a conducir… -¿Quieres cenar algo?, digo si es que tienes hambre perrito –Sonriendo ella se giro para verme, iba a contradecir algo pero mi estómago me jugó una mala pasada y delató mi estado –Por lo visto eso es un sí, pero no te preocupes aquí cerca hay un restaurante, pasaremos y comeremos algo, ¿No crees? –Aun no muy convencido por la sugerencia solo asentí y mire el camino hacía el restaurante… -Aquí esta su pedido –Postrando sobre la mesa un plato de langosta y caviar el mesero se retiró; estaba un poco anonadado con lo que Meiko pidió aunque yo solo al principio iba a pedir una simple sopa, ella se me adelanto y me pidió Filete al gusto de la casa, así como acompañantes para diversas sopas, aun con algo de molestia intente comer, pero cada vez que ingresaba algo de comida por mi boca, ella se me queda mirando –Meiko-San, ¿Ocurre algo? –Intente ser amable pero ella negó con la cabeza y solo me sonrió mostrando su lengua, que rara, pensé, no me imagine que ella sería algo así, sin embargo me sorprendí que se bebiera un botella de whisky como agua, la verdad me preguntaba si estuviera bien, aun así termine de cenar y pagamos la cuenta que para mi sorpresa excedía mi efectivo, intente decir algo a Meiko, pero ella dio una tarjeta y el mesero solo sonrió y dijo que era cortesía de la casa que nos podíamos marchar sin pagar nada, salimos sin más de ahí… Ya teníamos un rato caminando por la calle hacía el auto que por ideas de Meiko, lo estacionamos en unas calles más adelante… Meiko y yo caminamos en silencio, pero la verdad es que no me había fijado, pero miraba como tonto la luna que se encontraba postrada en su esplendor esa noche, caminamos un poco más hasta donde ingresamos al lamborghini negro, que por alguna razón estaba un poco más… … ¿Oscuro?... Ingrese y cerré la puerta, y mire a Meiko que esta por alguna razón se encontraba mirando hacia la nada… -Meiko-San –intente susurrar pero ella me sujetó fuertemente de mi brazo golpeándome contra la silla del auto, ¿Perrito-Chan sabías que es malo escuchar o pedir información de más? –Con un tono de burla ella me sujeto con más fuerza ¿Cuándo estábamos con el jefe fiscal ¿No escuchaste un poco de esto y aquello?, te dije que tenías que irte por un rato por ahí, porque tenía asuntos que ver con él, lo que realmente odio es a humanos como él, que solo por el poder que tengo como hija de los Sakamaki puedo hacer y deshacer a mi antojo, pero… …Por lo que has escuchado, me pregunto ahora… ¿Qué deberíamos hacer? –Tomándome fuertemente de mi cuello con una mano, ella me estaba estrangulando, sentía el aliento se me estaba yendo -¡No puedo respirar!... –Grité enardecido, aun sintiendo el dolor quise detenerla, pero ella me susurro al oído –Creo que necesitas ser castigado, riendo me tomo con agresividad y rompió parte de mi camisa que tenía dejando al descubierto mi pecho que tenía unos cuantas mordidas de Rin y Miku que aún no habían sanado… -Por lo visto ellas ya me ganaron, pero… aún hay lugares donde no te han hecho nada… ¿Así que donde lo quieres?, perrito… -Supondré donde eres más sensible, porque nosotros los habitantes de la noche, nos volvemos particularmente sedientos en noches como está… -Mirándome con aun sus manos en mi cuello, dejando al descubierto sus colmillos blanco -Nos volvemos terriblemente sedientos, con la necesidad de saciar esa sed –Acercándose a mi cuello paso su lengua por esta -¡Detente! –Susurre, porque mi voz me fallo, mi garganta me dolía por el haberlo agarrado de esa forma. -No sé si es la luz de la luna, pero me estoy excitando un poco –Agrandando sus colmillos los clavó en mi cuello, cerré mis ojos por instinto sentí dolor, sentí algo que no me gustaba, me sentía más débil de lo normal no tenía ni 8 horas que me había bebido de mi sangre, pero por alguna razón su agarre se hizo más fuerte, me estaba apretando mis manos, podía sentir su respiración hacerse más pesada, abrí mis ojos y lo vi a ella mirándome… -¿Podría ser?... –Susurro con dudas Meiko, yo no la deje terminar, porque la empuje y salí del auto, y corrí tanto como mis pies me lo permitieron, corrí por las calles que aun permanecían con luces tenues y autos pasando por las calles solitarias. Me mantuve corriendo sin parar por un sin número de calles, hasta que logré visualizar una cabina telefónica, corrí hacía ella e ingrese en él, intentado mantener el aliento, marque el primer número que se me vino a la mente… -¿Hola?, Madre, escucha, ¡He sido capturado en algo que no tiene sentido!, así como, ¡Ser novio o esposo de vampiresas! –Mi voz se escuchaba quebrada tenía mucho miedo y nerviosismo, no conocía mucho a Meiko ni de lo que era capaz, pero algo me decía que tenía que alejarme lo antes posible de ese lugar… -¿Sin sentido, dices?, ése no es el caso, perrito-chan –Con una voz burlesca Meiko se encontraba en la otra línea -¿Pero cómo? –Intenté preguntar -¿Qué está ocurriendo? –Ella solo río por debajo –Me encanta esa expresión tuya, porque sé todo de ti, perrito-chan… -Poco a poco volteé mi mirada para ver, entre los autos que pasaban, se encontraba al otro extremo de la calle con un teléfono en la mano a Meiko sonriente con la mirada baja, ella bajo el teléfono cerrándolo, mientras me quedaba sin palabras, ella subió la mirada, mientras de mi mano caía el teléfono del cual hace unos momentos estaba llamando, salí instintivamente de la cabina y salí disparado sin rumbo fijo, golpee a gente que pasaba junto a mí, pero no me disculpe con ellos, seguí y seguí ante los reclamos de ellos, cuando sentí que un par de brazos me sujetaban, y subí la mirada para encontrarme con Meiko mirándome divertida… -¿Has disfrutado tu efímera libertad, perrito-chan? -Déjame –La empuje con enojo, ella me tomo con fuerza los hombros, al lo cual yo me resistía y me sacudía… -¡Hoy tenemos como invitada de honor con nosotros a la señorita IA SAKAMAKI, la cual es una de las políticas más entusiastas que representa la estrategia política en el exterior de Japón, aunque por los momentos apoya a una coalición de nuevos proyectos en la industria de la tecnología, esperamos que pueda decir más sobre este hecho… Moví mi cabeza hacía un anuncio gigante en el cual se mostraba una entrevista, por lo cual dejé de pelear con Meiko, pero ella solo apretó los puños y mientras miraba melancólicamente hacía la pantalla –Ella una gran política con muchas influencias y conexiones, Ia Sakamaki, la madre de todas nosotras, aunque para mí –con enojo en la voz – ¡No es más que una persona a la cual odiar!... -Mirando detenidamente hacía el monitor me quedé hipnotizado mirando la imagen de la señorita Ia, con esos cabellos rubios cenizas, esos ojos azules, y esa espectacular y bella sonrisa… -¿Ia Sakamaki?... –Miraba detenidamente su imagen – Ia Sakamaki… Ia Planets… -Susurre… Len se desmayo frente a mí, reaccione rápidamente y evite que cayera al suelo, me quede mirándolo, me sorprendió que supiera el nombre de mi madre… -¿Quién eres tú? –Susurré realmente nada tenía sentido… El frio de la noche pasaba por ventana entreabierta, dejando al descubierto una sombra que vagaba por los jardines, se movía velozmente y ágilmente, en unos segundos paro hasta llegar a él balcón del segundo piso de la mansión y de un solo momento se coloco encima del durmiente joven rubio que seguía durmiendo… -Escuche un crujido, por lo que abrí mis ojos y por alguna razón me dolían, los sentía pesados, mi cabeza entera me daba vueltas, intentando levantarme mi pecho me dolió nuevamente, y no podía recordar nada, como pude me levante y saque de mi cajón, mi crucifijo de plata, había algo que me incomodaba, sentía que había algo que me asechaba pero no me sentía tranquilo, como pude logre correr por los pasillos de la mansión y baje con cautela las escaleras, mi respiración se hacía cada vez más agitada, pero logre llegar hasta la puerta principal, con algo de miedo gire la perilla y logré abrir la puerta, mire detenidamente el interior y me sorprendí, no me imagine que lograría escapar así de fácil, cerré y corrí hacía una Iglesia, ya tenía un tiempo que iba a alguna, para mi suerte no estaba muy lejos, por lo que no me llevo ni 25 minutos el llegar. Miré detenidamente el aspecto, algo de estilo barroco así como estatuas que adornaban la entrada en forma de ángeles, y serafines, di unos pasos hacia el interior e ingrese en la iglesia, me quede maravillado con el decorado que tenía, y las pinturas rupestres colgadas en las paredes, los candelabros, algunos encendidos dándole al lugar una atmosfera algo aterradora, seguí caminando hasta llegar frente al altar donde vi vitrales de flores y una imagen enorme del señor en su gloria, intente acercarme un poco más y me arrodille… -Dios mío, ¿Será está otra prueba que me has puesto? –Cerré mis ojos y uní mis manos -¿Estará bien mi Mamá?, No entiendo nada de lo que pasa, pero dios, te pido que… -Una voz hizo eco en la casa de dios, con ironía en su voz se hizo más fuerte –Aunque le preguntes eso a dios, él no te va a responder –Me giré sorprendido encontrándome con Meiko sujetando su sombrero felizmente en la cabeza… -Buenas madrugadas Perrito-chan… -¿Cómo supiste que estaba aquí? –Con temor y enojo en mi voz le hice frente, mirándome divertida se comenzó acercar hacía mi -¿Te dije, no?, conozco todo de ti, y el probar tu sangre me hace suponerlo… Así que sería mejor que dejaras de huir. -¿Sabes acaso algo sobre mi madre? –Mirándola con algo de miedo comencé a retroceder hasta tomar una vela grande que se encontraba encendida, la cual estaba encima del altar lleno de rosas rojas y blancas en conmoración de un pasado evento religioso. -Eso que importa –Teniéndola enfrente de mí, ella solo soplo la vela que tenía y me acercó hacia ella en un abrazo oficiante, agarrándome del mentón susurro –Sólo vine a mostrarte quien eres realmente –Ella olió mi cuello y lo lamio, déjame, la golpee con fuerza en su hombro –Que salvajes eres perrito-chan, pero me temo que no me ganaras con esto –Su comentario hizo que mis fuerzas desaparecieran, mi mente se estaba dando por vencida… -Dios… -Susurre débilmente, pero por lo visto de una forma sorpresiva logré tomarla de sus manos y la empuje haciéndola caer y revolviendo su peinado, ella solo se rió mientras se reincorporaba… -¡No pierdas tu tiempo hablándole! –Decía con gracia y ahogándose en risas –Dios no es más que una tontería creada por los humanos -Eso no es cierto –Le grite histérico mientras me ponía a su altura – ¡Que bien! –De verdad crees en él –Soltando una risa se reacomodo su cabello –Crees que te vas a salvar si crees en él, ¿Será que eres estúpido perrito-chan?, o acaso ingenuo… ¿O ambas cosas? –Teniéndola enfrente de mí mi respiración se hiso pesada –En todo caso, eres un tonto, eso de ti me provoca, perrito-chan –Me tomo con una fuerza que hizo que mis brazos queden completamente inútiles en cualquier intento de moverlos ella cambio su mirada por una de molestia y enojo –Pero… -No, nada en lo que puedas creer y aunque reces, no hay nada que se te conceda… -Me encontraba con la mirada baja escuchando su discurso pero algo en mi interior me dio valor y la mire, aun sintiendo como hacía más presión en mis brazos, el dolor no disminuyo, pero me dio el coraje para defenderme –Aun así, yo seguiré rezando, y creyendo… -Ella me miro con una sonrisa ante mi comentario y me susurro al oído –Lenny, hoy estas mejor que nunca, por lo que revelare todos los deseos que tienes escondidos… Sin dejarme tiempo alguno de responder ella me lanzo encima del altar, tirando todas las cosas que se encontraban encima moviendo una capa de rosas que se me metieron por mi camisa, enterrándome algunas espinas, mis brazos no me respondían, logre ver las marcas de su agarre de Meiko, estaban rojas y me dolían… -Dime, ¿Quieres que empiece por la parte de arriba o de abajo? –Con mirada de lujuria Meiko sacaba su legua, yo logré levantar la mirada -¡Deja de hacer esto en una iglesia!, - ¿!Acaso estas enojado conmigo perrito-chan!? –Cerré los ojos porque lograba aspirar el aliento de la vampiresa que olía a vino blanco y un poco de tequila, cosa que hizo que me dieran ganas de vomitar –Que mirada tan fascinante me das, sigue, sigue, Te ves muy lindo así, por favor, enójate más, más –Con una voz completamente fuera de sí Meiko me comenzó a lamer mi cuello, ante mis gritos y súplicas ella no se detenía con la voz entre cortada ella solo sonreía y dejaba escapar pequeños gemidos -¡No me importa que me insultes!, pero por más que te esfuerces no podrás conmigo, ya que no soy humana –Quitándome mi camisa botón por botón, mi mente se nublo y mi cara se tornaba roja de rabia e impotencia –Te entregaras a mí, y estarás a mi merced –Despojándome de mi camisa y desbrochando mis pantalones ella sonrió y acariciando mi pecho con sus dedos, haciendo círculos con la yema de sus dedos… -Veré parte de ti, que te avergonzaría que otros vieran, te destrozare y te dejare mi marca para que nadie de ellas te tome nunca y al final las destruiré una a una, porque yo será tu única dueña, y al final tú serás mío… -Dejando un rastro de besos por mi pecho, mi voz se quebraba y mis pensamientos se hacán lentos –Jamás, jamás –Susurre torpemente, mis palabras apenas eran inaudibles y mi expresión cada vez era más y más terrible sentía como las malditas lágrimas salían por mis ojos, me sentía impotente de no poder hacer algo, mis manos no se movían por el agarre de Meiko que me lastimo, y mis pies no tenían fuerza para siquiera levantarlas, me tenía a su merced, lo único que aún quedaba en pie era mi voluntad… -La mirada de Meiko realmente me enfureció, ella se relamía la boca mientras decía cosas que me molestaron de sobremanera… -¡No aguanto! , con solo imaginarlo me… -¡Nunca!, ¡Nunca, jamás!, -No la deje terminar de hablar… -¡Me escuchas jamás me entregare a ti!, pasé lo que pasé… -Mis gritos hicieron eco en las paredes del recinto, tras unos instantes la risa de Meiko estalló, se paso una mano por la cabeza intentando controlarse, pero su risa se hizo más fuerte, con algunas lágrimas de risa en la cara me miro - ¡Qué bien que actúes con ese carácter! –Dejando de lado las risas, se puso seria –Nada mal, me gusta, por lo que vamos a ver que tanto aguataras hoy, levantando una de mi piernas comenzó a besarlo lentamente mientras me miraba con más lujuria –Debo decirte que estás algo formado, no te niego que se me antojan esos pectorales en desarrollo, y eso me encanta te ves adorable así, no tan grande ni tan pequeño, por lo que déjame recompensarte –Mordiendo fuertemente mis pantorrillas mi grito hizo eco, y mi expresión cada vez era más miserable, miraba hacia techo de la doctrina mirando un grabado de un corazón en llamas rodeado de espinas por un segundo me imagine que me encontraba en esa situación y la visión se comenzó hacerme borrosa… -¿Te duele? –Decía cínicamente con su boca que derramaba unas gotas de mi sangre -¡Pobrecito!, entonces haré que te duela más entonces, fluyendo gotas que caían por su pecho ella volvió a morderme en mi pecho, no me queje en absoluto, no tenía caso hacerlo, mis ojos empapados de lágrimas se volvían pesados y no me quedaba mucho tiempo antes de perder la consciencia… -Te diré un secreto, perrito escucha –Parándose me miro a los ojos –Quién te ofreció como sacrificio para nosotras, fue esta Iglesia a la que tanta fe le tienes… -¡No puede ser! –Quise levantarme pero su mano me lo impidió –Entonces, ¿Quién te envió hasta nosotras?... -No puede ser –Me repetía mentalmente, una y otra vez, las lágrimas no paraba de salir de mis ojos, se volvieron opacos y sin luz y me quede mirando a la nada… -Me encanta tu cara de desesperación, perrito-chan –Colocándose encima de mí, besando mis labios –vamos, vamos, sigamos disfrutando… -De caer en el infierno por un momento… Mis ojos ya no tenían color alguno, ya no sentía nada, solo escuchaba el ruido del viento, y palabras que no tenían significado alguno… -Nadie ha sido salvado por su fe –Meiko se reía por lo ocurrido, se preguntaba hace cuanto que no disfrutaba así, ya tenía tiempo, pero… Fue algo sumamente agradable y delicioso aun sentía en su boca el sabor dulce y adictivo de la sangre de Len, así como la esencia del chico en su interior, se encontraba arreglando su aspecto y acomodándose su ropa, cuando de repente sintió un par de brazos que la tomaban por sorpresa… -Mi querida Meiko-Chan, ha paso mucho, no recuerdas… -Pe… ro… o… -Shhhí… tranquila –Tapándole la boca con un dedo la figura de Len con ojos cafés se hizo presente… -Es imposible eres… -Con temor en su voz ella se desmayo… -Len se levanto del altar y recogió su ropa y se arregló, estando a punto de salir por la puerta principal de la Iglesia miro de nuevo a la desmayada Meiko… -Querida, aunque pase el tiempo, parece que no te enseñe lo suficiente, aun no sabes cómo complacer a un hombre –Riéndose, se dio media vuelta y siguió su camino, hasta que paro en secó, su mirada cambio, y sus ojos retornaron a ese puro y claro azul celeste, haciendo que el chico se desplomara en el suelo… Muy cerca del lugar se encontraba mirando Haku caminando por el campo santo, tenía una mirada de odio en el rostro, y gruñía por debajo… -¿Por qué siempre es así? –Mirando por debajo dio un salto y en aire logro distinguir la silueta de Len en el suelo, por lo que se apresuro a bajar y con una mirada de fastidio lo cargo de vuelta hasta la mansión, durante el camino estando saltando entre el paisaje, veía fijamente el rostro del chico que se encontraba en pocas palabras hecho un desastre, su pelo rubio no tenía la misma esencia de siempre, ahora se veía por alguna extraña razón un poco diferente entre sus mechones rubios caía uno completamente café, intento moverlo pero se dio cuenta de que en la frente y parte de sus manos tenía manchas y mordidas, el olor que despedían estás eran de alcohol, ella solo maldijo por debajo y se apresuró hasta llegar a las puertas de la mansión donde le esperaba Luka mirándola fijamente… -Llegas tarde –Dijo sin ánimos la peli-rosa, -Claro intenta buscarlo entre todos los posibles lugares de aquí –Indignada Haku le pasó a Len en sus brazos – Y bien, ¿Qué pasó?... -¿No lo ves?, Chica lista… -Mirándola con los ojos rojos Luka miro detenidamente al chico -¿Fue Meiko?... -¡Claro!, pero ella no cumplió con las condiciones y yo no creo estar de acuerdo tampoco –Haku se dio la vuelta y desapareció dejando a Luka en la puerta con Len brazos. -No hay de otra –Suspirando –Creo que es hora de unos experimentos, veré que aun te falte despertar –Diciendo esta última frase se fue hacía la habitación del Rubio dejando atrás unas figuras que recién regresaban… -Chico Débil, ¡Ha regresado la grandiosa yo!, espero que estés listo para mi ración, porque me estuve conteniéndome… -Rin, no solo tú te divertirás yo igual –Pegando más a Teddy a ella Miku se puso en el camino de Rin, la cual la veía divertida… Mientras Luka limpiaba el cuerpo de Len y lo arreglaba, se dirigía a su cuarto por unos frascos de medicina experimental así como paños limpios pues Len ardía en una fiebre bastante alta… En unos pisos más arriba, una sombra se movía sigilosamente por los pasillos, con un ligero golpe rompió las cadenas que aseguraban la puerta morada e ingresó en la habitación, las cosas parecían estar en orden, con un ligero soplido dejo al descubierto pilas de libros y documentos que parecían estar en desorden, con cuidado movió algunos, y con suma delicadeza miro algunos en los cuales se observaba las fotografías de las hermanas jugando cuando eran pequeñas aunque solo con sus respectivas hermanas, en una de ellas se observaba a un rubio mirándolas de lejos, con un crucifijo entre manos, con un simple movimiento incendio estos y tomo un libro rojo y grande haciendo que se movieran los libreros, dejando al descubierto un pasillo oscuro y con telarañas… Con sigilo y precaución se adentro, los librero se movieron de nueva cuenta dejando la entrada sellada como si nada hubiese pasado, caminado por un pasillo lúgubre y oscuro llego a una sala que estaba muy arreglada y contenía retratos de los antiguos jefes de familia posteriores, había de diferentes épocas y todos vestían de diferentes maneras. Los candelabros que daban poco luz, daban una atmosfera tétrica y macabra, caminando en silencio la sombra se quito la capucha que la enmascaraba, dejando al descubierto dos coletas rojas muy largas y un par de ojos rojos que brillaban vivamente… Develando las cortinas se vio en un aparador algo viejo y antiguo un maniquí que tenía un traje de gala, de color café y con muchos adornos, tenía decorados dorados y largos, en el pecho tenía una flor roja, que estaba bañada en sangre así como el pecho mismo del traje, el cual estaba rasgado y ensangrentado, en uno de los bolsillos sobresalía una gafas las cuales brillaban por la poca iluminación del lugar… -Ha pasado demasiado tiempo no… -Kiyoteru… Bueno, esto es todo por el día de hoy los dejare en suspenso por les momento, pero les aseguro, que recompensaré más el fic, con escenas de RinXLen, aunque por ahora deje en claro muchas pistas ¿No?, aunque por lo visto tal vez no entiendan como sucedieron las cosas, pero se los aseguro este fic, irá mejorando, y les agradezco mucho su apoyo lo cual hace que me apresure a actualizar, por lo que se los agradezco enserio, por lo que no desesperen y estén listos para el próximo capítulo que tendrá más emoción y suspenso y por supuesto hare feliz a Rin en el próximo así solo espérenlo y dejen Reviewns para saber su opinión así que ya lo saben hasta la próxima… Atte.: Richy Escor PD: Pronto tendré más fics por esta temporada de navidad que seguro les encantara solo comenten para asegurar ¿Vale?... Sin más hasta la próxima… +PD: Quiero agradecer de todo corazón a los lectores, pues ustedes me inspiran a continuar y se los quiero agradecer mil gracias por lo que les deseo Feliz Navidad y Prospero Año Nuevo que están muy cerca gracias: silent23 Sin duda Tu lo has seguido y te lo agradezco igualmente: Si esconde un enorme secreto y te aseguro que se pone cada vez mejor espero que te haya gustado. Maru-Li Tsukiyomi Espero que haya estado a tu gusto, si es así te aseguro que no te desepcionare Dannii-xD Gracias enserio te lo agredezco tus comentarios y mucho son hermosos... sofialexandra15 Espero que ta haya gustado hasta la próxima... Nos Vemos hasta la Próxima
Richy Escor Presentando: ¡Ola a todos!, ¡Un gusto enorme!, De nueva cuenta reportándose, lo sé hace mucho que no actualizo, pero es que con tantas cosas en mente no puedo, los cursos que tomo para el ingresó a la Universidad, el gimnasio, el estudio, la escuela, las responsabilidades, enserio es algo estresante, aun así me tome un break, y aquí está el fruto, tranquilos pues Lo que más amo del trabajo está a la mitad, por lo que mientras tanto disfruten de un Capítulo más De Diabolik Lovers Vocaloid: ¿Transición & Atracción?, bueno este sería dos capítulos, pero los fusione para que sea más extenso por lo que el título de este capítulo es doble, así que sin más lo disfruten y hasta próxima, ¿Por cierto?, dejen un comentario si quieren más información de algún personaje o comentario para tomar en cuenta en la trama, pues lo que tengo pensado es hacerle cuando mucho 12 capítulos o unos 10, pues quiero hacer un derivado de este y un sub-derivado por lo que esos dos serían continuaciones y serán emocionantes para los amantes de la acción y suspenso… Una cosa más ustedes me dirán si quieren que lo continúe o si les gusta me podrían decir su opinión es muy importante… Disclaimer: Diabolik Lovers no es de mi propiedad, solo lo uso con fines de diversión, así como el uso de los Vocaloid que no me pertenecen si no a Yamaha Corporation, para representarlos, en este fic, que no tiene fines de lucro, sino que es un fic de un Fan para Fans. Así que sin demora El fic. Luka se encontraba cambiándole los paños húmedos de Len, la fiebre no cedía, los síntomas que se presentaban de igual manera eran anormales, ya tenía dándole medicinas experimentales de su creación desde hace unas horas, sin que ninguna de estas hiciera efecto alguno, suspirando se acomodo cerca de la cama de Len, lo miro dormir por unos minutos, sabía que lo que había sucedido hace horas era algo que no había previsto, y mucho menos que Meiko callera hasta ese punto por Len, aunque pensándolo un poco ella misma estaba cambiando gradualmente, era algo que no quería que sucediera, y mucho menos querer hacerle algo a él, aunque ya estaba acostumbrada a tomar la sangre de los humanos, ella solo lo hacía para alimentarse y en otras veces para divertirse, pero ahora las cosas eran diferentes, ella nunca se sintió diferente con cualquier humano, que para ella solo significara alimento… Pero, el ver el rostro tranquilo y las muecas que hacía Len le daban algo de indiferencia, aunque no se mentía que lo miraba de otra manera que antes, sentía algo de rabia y cólera que le hayan hecho algo así por su hermanita Meiko, en el aire que emanaba Len, todavía podía oler los pequeños rastros de alcohol que desprendía, aunque combinado con algo que la volvía loca, sin duda el haberlo tratado le había afectado, así que decidió salir por un momento a buscar algo de comer para el paciente y ella, acercándose hacía la puerta, escucho algo muy débilmente, pero no se sobresalto, saliendo de la habitación en fracciones de segundos había llegado a su destino, la cocina, en la cual sin vacilaciones tomo unas frutas y las corto de forma esplendida en pequeños pedazos, tras unos segundos le añado miel y jarabe, del refrigerador tomo un pequeño recipiente para ella, y salió de nuevo hacía la habitación donde se encontraba Len… -Aléjate Miku, ¡No me dejas que la grandiosa Yo examine su pertenencia! -No seas así Rinny, que te aseguro que a Lenny no le habrá pasado nada, aunque sea débil, ¡Creo que solo se desmayó o algo! Estando metidas en su discusión ambas no se percataron del movimiento de la puerta, por lo que enfrente de ellas en cuestión de segundos ambas se sorprendieron por la repentina aparición de su hermana mayo, por lo que con velocidad se movieron hasta llegar hasta el otro extremo de la habitación, frente a ellas manteniendo una pose de molesta Luka comenzó a caminar tranquilamente hasta Len, en la mesita de noche acomodo las cosas, dándose la vuelta hacía sus hermanas las miro con cólera -¡No hagan ruido!, tengo que terminar de examinar a Len-kun, por lo que les agradecería que se retiraran –Reacomodando sus gafas, ambas chicas solo se limitaron a ignorar la pregunta, Rin camino hacía Luka haciéndole frente –¡Lo lamento!, Luka-Oneesama, pero solo pasábamos por la habitación del chico debilucho y, ¡lo vimos en este estado!, -Bajando la mirada, sus mechones ocultaban sus ojos rojos -¿Porqué desprende aroma a alcohol?... –Miku asistió levemente y se acercó a Rin la cual temblaba, Luka las miro sorprendidas, sus hermanas nunca se habían mostrado con esas facetas, aun así suspiro –Creo que, lo primero que deberían de hacer antes de hablar de la situación es que se cambien el uniforme de la escuela, nos vemos en 5 minutos en el salón principal, mándenle un mensaje a Haku-chan, para que confirme la llegada de Neru, en el extranjero, Rin-chan, quiero que te encargues después de la salud de Len, mañana tiene que ir a la escuela, por lo que no nos queda de otra que buscar la manera de que no destaque mucho por el momento –Tomando de nuevo los paños de Len los cambio –Así que por favor si me permiten tengo que trabajar… Ambas asistieron y se dieron la vuelta para dispersarse, pero sintieron manos en sus hombros que detuvieron su caminar… -Por favor no hagan alguna locura antes de que hablemos antes, ¿Entendido? –Luka las miraba con los ojos rojos, Rin y Miku asistieron y se fueron a sus respectivas habitaciones, la peli-rosa suspiro y miro de nueva cuenta a Len, mientras apretaba los puños –Creo que la verdad, es más profunda de lo que pienso, -Suspirando miro a la ventana, en la cual el cielo nocturno estaba tornándose blanco, señal del amanecer -Tengo que descubrirlo antes de que sea demasiado tarde… Rin se maldecía internamente, no sabía el porqué de tanto misterio, aun así confió en Luka –Oneesama, por lo que rendida se cambio velozmente y llegó primera al salón, con un jugo de naranja entre manos que tomaba ocasionalmente, mirando con molestia la puerta principal, espera la entrada de sus hermanas… -¡Hola Rinny! –Saludo energéticamente Miku, la cual venía en compañía de su inseparable oso de peluche, tomó asiento en el mueble de alado y ambas esperaban por su hermana mayor, Rin solo bufo por debajo, sin duda le molestaba la tardanza de Luka, aun así se reacomodo en el mueble, hasta que el sonido de la puerta abriéndose la detuvo… -Siento haberme retrasado, pero tuve algunos inconvenientes –Ingresando a la sala, la peli-rosa se acomodó en el mueble principal mirando a sus hermanitas… -Tomando ligeramente el té que el mayordomo servía, hizo un ademan de retirarse, a lo cual Sebastián obedeció y se esfumo entre las sombras –Bueno ya que estamos aquí –Colocó la taza en la mesa –Hablare de la situación –Miro detenidamente a las chicas –Podría decirse que Len se encuentra en un estado algo cambiante, podría ser sólo temporal, pero por lo visto, puede que por el momento experimente uno a que otro desmayo ocasional producto de mis medicinas, pero les aseguro que en unos días se encontrara recuperado, puedo decirles sin preocuparse que sus niveles vitales están normales y se estabilizaron –Medito un momento sus palabras –Por lo que me sorprende un poco tras el incidente que ocurrió con Meiko… -¡Meiko-nee! –Gritó escandalizada Rin, que se había levantado de su asiento -¡Tranquila Rin-chan! –Luka la miro y guardo compostura regresando a su lugar –Por lo visto ella tomo mucha fuerza vital de Len y por lo visto se apresuro en los planes de nuestra madre, la cual está hablando en estos momentos con Neru en el extranjero, por lo que tenemos que tener en cuenta de lo que ocurre tras tomar la virginidad de un humano como Len o ¿No?... -¡Claro! –Gritó resignada Rin apretando sus puños, pero… -Eso explica el olor a alcohol –Pregunto Miku mirando a Luka. -No todo acaba ahí –Parece ser que existe algo de lo cual no estamos completamente enteradas, por lo que en unas 3 semanas vendrá de inspección nuestra madre, por lo cual ella quiera ver los progresos y determinar una acción a tomar –Suspirando miro por la ventana –Sólo espero que no ocurra como nos contaron nuestros padres, si eso ocurre de nuevo, asegúrense de verme como su enemiga, porque, ¡No tendré piedad! –Luka se reincorporo y tomó su tasa –Por lo pronto iré a determinar el estado de Len, por lo que espero, ¡Que no hagan locuras!, en especial ¡Tú Rin!, -A punto de salir por la puerta miro a la aludida una última vez – ¿Haku-chan me confirmo la llegada de Neru? –Rin se paró y con molestia en la voz le confirmo -¡Qué bueno!, me alegra, por lo pronto nos vemos hermanitas –Luka salió de la sala dejando aun en duda a ambas chicas. -¿Crees que tengamos que ir a ese extremo Rin? –La aludida palideció un así mostrando sus ojos rojos a Miku la miró -¡Si es por Len haré lo que sea!, por lo que me encargaré de darle una lección a Meiko, tan pronto como tenga la oportunidad… -¡Espera!, sabes que hará Luka-neesama, ¿Cuándo sepa que la desobedeciste? –Miku estaba algo nerviosa pero temblaba, Rin no la miro y se marcho de la sala dejando a Miku sola… -Teddy, ¿Qué dices? –Tomando delicadamente a su peluche el lo coloco en su oreja, haciendo ademan de escucharlo sonrió –Aja, Ajá, Ajá, ya veo… Pero… Si eso sucede no tendré mucho tiempo para pelear con ella, convertirlas en muñecas no durara mucho, solo puedo por poco tiempo… Aunque… -La aguamarina rió, y miro a la ventana que daba los primeros rayos de Sol, y se retiro en una ráfaga de aire, dejando solo algo de polvo que caía de su peluche… -Por lo visto, eso fue suficiente para asustarlas –Mientras camina hacía su alcoba Luka se quitó las gafas y las dejó en su bolsillo, con sumo cuidado, ingresó a su habitación, tomo un libro y comenzó a leerlo, con algo de pereza se acostó en su cama, tras unos segundos cayó dormida, pero no se dio cuenta que una persona con una capa negra se movía por la ventana de su cama, por lo que este río ante la escena y bajo desde el tercer piso de un salto, acomodándose sus coletas rojas miró los campos de rosas del jardín, suspirando pesadamente, se reincorporo, mirando por última vez el jardín, dándose media vuelta se disponía a irse, cuando una voz la hizo detenerse… -¿Qué haces por aquí, Teto-san?... - La aludido se rió y miró detenidamente a su acompañante -¿Acaso no puedes llamarme tía, Haku-chan?... -Ella apretó los dientes y bajo la mirada -¡Cállate!, ¡Desaparece!... –Tras decir eso, una cortina de aire la golpeó, ella se coloco en posición de defensa y con algo de esfuerzo se mantuvo en pie… -Dentro de un tiempo, llegará el momento de su despertar… Cuando por fin pudo mirar a Teto, ella ya había desaparecido, maldijo por debajo, por las extrañas palabras de su tía… -¿Llegará el momento de despertar?... No me sentía muy bien, la cabeza me daba vueltas, intentaba reincorporarme pero me dolía mis piernas y mis brazos los cuales aun estaban rojos llenos de marcas y moretones, con algo de esfuerzo logré solo sentarme en la cama en la que me encontraba, al hacerlo de mi frente cayeron paños, por lo que los deje a un lado y mire detenidamente donde me encontraba, suspire algo asustado pues no había visto esta habitación antes, por lo que al mirarla de nuevo, encima de la mesita de noche encontré frutas picadas, que se veían realmente bien por lo que no lo pensé dos veces y me dispuse a degustarlas -¡Que ricas! –Sonreía, sin que me diera cuenta ya me las había acabado, pensé que hacía aquí, no recordaba en lo absoluto como llegué, pero veía recuerdos borrosos de Meiko y una voz que me hablaba… No tome importancia por el momento, quería regresar a mi habitación para pensar por un momento, salí de esa habitación y camine por los pasillos que desprendían oscuras sombras producto de la escaza iluminación, no ayudaban las ventanas cerradas y las largas cortinas negras que ondeaban, tras caminar a paso lento por unos minutos logre llegar a la cuarta planta, por lo que con cuidado llegue al frente de mi puerta, a punto de abrirla un sonido me hizo detenerme, venía de unas habitaciones más adelante, con cuidado camine hasta llegar a ella, no se me hacía conocida la puerta la cual tenía extrañas inscripciones, por momentos se oían extraños ruidos por lo que con delicadeza ingrese y me sorprendí por lo iluminada que estaba, vi por montones frascos y recipientes, estaba rodeado de estantes con decenas de libros en ellos, camine un poco hasta ver a Luka-san en su cama, la cual parecía que dormía, pues no se había movido en lo absoluto, me acerqué a una orilla para verla. No me esperaba esto, realmente se veía linda, pero por alguna razón sentía algo de temor recorrer mi espalda, por lo que opte por irme, estaba por dar media vuelta pero Luka-san me tomo de una de mis manos evitando que me fuera… -¿Qué haces aquí? -Preguntaba mientras me reincorporaba, mire a Len-kun enfrente de mí, eso era algo nuevo… -Perdona mi intromisión, pero es que escuche algo de esta habitación por lo que vine a ver de que se trataba –Estaba a punto de irme cuando ella me detuvo de nuevo, me miro divertida y sonrió –Y pensar que me despertó el olor de tu sangre… -Se relamió sus labios y me miro fijamente, tras unos segundos se relajo y miro a otro lado -¿Cómo te encuentras? Pensé por unos minutos y no entendí, ella al parecer comprendió mi duda y contesto fríamente –Me refiero, que si por el momento no te encuentras cansado o de alguna forma, ¿Normal? –Ella me miro con brillo rojo en sus ojos por lo que trague y asentí, creo que por el momento bien, me volvió a sonreír y se reincorporo de su cama, cerrando su libro –Eso es bueno, que gusto haber despertado, que haber continuado teniendo esa pesadilla… -¿Se te ofrece algo más? –Le pregunte con molestia, me costaba controlarme, por lo que camine hacía una estantería y tome un frasco de Té de manzanilla, miré a Len que me veía con dudas, le dije que no se preocupara que todo por el momento está bien, por lo que con una taza de té en mano, camine hasta un sofá y lo deguste –Verás –asenté la tasa en la mesa –tu sangré está madurando, por así decirlo será pasajero, por lo que no te preocupes… -Gracias por cuidar de mí –Le agradecí a Luka-san la cual seguía bebiendo su té, ella sonrió y me dijo que no era molestia, el ambiente sé tenso por un momento –Me di cuenta que estabas teniendo una pesadilla… -Por un instante me tensé por lo que me levante y prepare más té para mí… Me reacomode en mi lugar, y mire molesta la sonrisa que me ofrecía Len-kun, la ignore y cambie mi expresión –Se me había olvidado por completo, el decirte cuál era tu posición… sin embargo… no pensé que tendría que decirte algo así… -Mire como el ponía una expresión de confusión en su rostro, me encantaba verlo así, ser la causante de su dolor y confusión… -¿Piensas que te voy a servir tú té?... Hazme el favor de no creerte más de lo que eres… Es muy presuntuoso de tu parte… Así que solo disfruta del aroma… -Me reí de su expresión -Me dolía un poco la indiferencia de Luka-san aun así, me prometí que sería fuerte y no cedería ante nada… Me di media vuelta y estuve analizando detenidamente la habitación, me sorprendí –Este es tú despacho de investigaciones, ¿Cierto?, ¿Las demás la utilizan?... ¿Cómo Neru-san?... -Luka se levanto de su lugar con los ojos más que rojos, me miro mientras daba pasos bruscos –No menciones ese nombre en mi presencia, de tan solo escucharlo hace que me duelan los oídos… -¿Por qué la odias tanto? –Le cuestione mientras miraba algunas plantas que se encontraban cerca de la cama de Luka-san –No es necesario que lo sepas –Con sigilo camino hacía una ventana, yo la mire con algo miedo, su mirada se encontraba perdida mirado el atardecer… -Flash Back- Luka caminaba entre los pasillos de la biblioteca principal en busca de algo con que entretenerse, miraba diversos libros de diversas temáticas, tras unos minutos de estar caminando por los corredores, suspiro, no tenía nada más que hacer ese día, la inmensidad de libros en aquel recinto ya habían sido leídos sin fines de veces por esa pequeña, con algo de molestia camino hacia la ventana… Su semblante se tensaba, sus ojos color azul cambiaban, sin poder hacer nada, solo apretaba sus puños… -¡Neru!... -La pequeña rubia se reincorporaba del césped, sus rostro sonriente y sus ojos amarillos miraron hacía el origen de aquel llamado… -Hija, ya te lo he repetido incontables veces, debes de ser capaz de sobre llevar el apellido de la familia, ser una Sakamaki, recuerda tú eres la primera, por lo que espero, ¡Qué no decepciones a tu padre! –La pequeña rubia asistió y abrazo a su padre… -Claro Oto-sama… -El gran vinculo que tenían padre e hija era inquebrantable… La pequeña Luka aun miraba la escena desde lejos, esa escena a la cual a diario se enfrentaba, su padre siempre ha querido a su hermana mayor, por lo que ella siempre se quedaba al margen, algo tenía que hacer… La peli-rosa salió de sus pensamientos y se dio media vuelta para mirar a su acompañante, el cual la miraba sin perder detalle alguno de ella. -Haré una excepción y te prepararé de este té especial… -Con delicadeza tomo un tarro negro decorado de dorado, y con cuidado comenzó a hervir agua, agrego el contenido y le coloco algo de azúcar, Len aún miraba a la chica, no entendía su comportamiento, pero desde hace un rato ha estado algo decaída y ausente, podía mirarlo en sus ojos los cuales no tenían en esos instantes su gafas. Sirviendo algo en una taza, le agrego té –Aquí tienes – Dándole la taza Len agradeció, detecto el agradable olor que desprendía aquella taza por lo que le sonrió a Luka, la cual le devolvió el gesto, bebiendo un pequeño sorbo, las manos le temblaron, sus ojos se fueron entre cerrando, y su respiración se aceleró, dejando caer la taza, su cuerpo se tambaleó del sofá y cayó al suelo, con apenas fuerzas se sostuvo del respaldo, miro a la mayor la cual camino hacía un estante -¿Qu-qué hizo? –La voz de Len era apenas audible, la chica agarró un libro y leyendo detenidamente camino hacía una mesa con vasos de precipitado en ella, tomando algunos y vertiéndolos los contenidos en un matraz -¡No te preocupes!, no hare nada que atente contra tu vida, pero lo que te di, no debería causarte parálisis, tendré que volver a prepararlo… En menos de un segundo se encontraba a un lado de Len, sosteniendo su cabello entre sus manos, sonrió divertida, los ojos de Len se abrieron por el dolor que le causaba la bebida que ingirió, Luka con poca suavidad reincorporo a Len en el sofá y abrió su boca con una mano –Bébelo –Exigió, Len no pudo luchar siquiera, su cuerpo no le respondía, Luka vertió en la boca de Len una nueva sustancia, tras tomarlo, dejo caer a Len en el suelo, el cual solo respiraba entre cortadamente. Ella lo miro molesta -¡Es una grosería que te ahogues con tanta exageración!, ¿Qué te sucede? –Ella se rió por debajo y quedo a la altura de Len, el cual con esfuerzo intentaba reincorporarse del suelo –Recoge enseguida lo que rompiste –Le ordeno Luka, que se daba la vuelta y se paraba alejándose del chico, Len asistió a sus palabras y se paro aun sintiendo algo de dolor, pero miro con detenimiento su mano izquierda de la cual comenzaba a emanar sangre, miro con detenimiento el piso y vio que era producto de haber caído sobre los vidrios de la taza, intentado ocultar su dolor, guardo su mano en su bolsillo, disimulando la sangre, se arrodillo y comenzó a limpiar como podía aquel desastre… Luka, en menos de un segundo tenía a Len agarrado por una mano, examinando la otra… -¡No te confundas!, al igual que está taza, no le tengo ningún interés a aquello que no es perfecto, sin embargo desde hace unos instantes el aroma que emanas ha sido algo demasiado dulce… Tomando con cuidado la mano del chico, posó delicadamente su boca en ella, succionando suavemente la sangre que salía, tras unos segundos sus ojos se abrieron por la sorpresa… -Esto es… Se levanto del suelo y camino hacía una esquina de la habitación, realmente no lo entendía, pero había algo… Quitándose los guantes de sus manos miro hacia la nada –Me he ensuciado con tu sangre… Len aun no procesaba lo que acababa de pasar aun así intento levantarse e irse –Pero es que… -Luka no lo dejo hablar porque se giró y lo vio amenazadoramente -¡No quiero escuchar tus excusas ni nada! Len se asusto por su mirada, por lo que no lo pensó dos veces y corrió hacía la puerta desesperado, estando por girar la perilla de la puerta, cuando la voz de Luka lo hizo temblar… -¡Quédate donde estas!, ¡Si es que valoras tu vida! –Len se quedo quieto, sentía como si su cuerpo se tensará, algo en el estaba mal, no podía evitar seguir la orden de Luka… -¡Date media vuelta! –siguiendo las órdenes de Luka, Len la miró, sus ojos estaban rojos, y su mirada reflejaban vació, de un momento a otro dejó sus guantes en el piso, al otro tenía a Len contra la puerta, sujetándolo fuertemente por sus hombros, podía oler aquel aroma que desde hace tiempo la tenía loca, lamiendo suavemente el cuello del chico aspiro el aroma que desprendía, toco con fuerza el pecho de Len el cual estaba en shock, quería irse de ahí, pero sus cuerpo no le respondía, Luka miro sus expresiones, dolor, impotencia, miedo, angustia, todas aquellas facetas de Len, en el mismo momento, sonrió, le encanto escuchar las súplicas que intentaba decir desesperadamente el rubio, quitándole la camisa con el solo pasar sus dedos por el contorno del pecho de chico, hizo que dejara salir una risa, aunque Len que no dejaba de moverse levemente, le dio gracia el hecho de que él no supiera lo que sucedía… -¿Que se siente mi poder?... –Luka lamia la oreja derecha del chico mientras este se quedaba estático -¿Tú poder? -Pregunto con algo de miedo -¡Sí!, mi poder, es algo simple, -Jugo con los mechones del chico –Mientras alguien beba una gota de mi sangre lo tengo a mi merced aunque el efecto dura poco, depende de la fuerza del individuo que lo ingirió… -Len intento empujarla, pero Luka se lo impidió tocando levemente su frente –Es inútil Len-kun… -tocando su cuello, este solo dejo caer una lágrima, la cual al verla Luka sonrió –Tranquilo, no hare que nada que no quieras, pero algo te advierto ganare a cualquier precio, seré la próxima cabeza de la familia… rozando apenas los labios de Len, lo miro detenidamente, azul contra azul -¿Me preguntó, quién podrá escucharte?... Clavándole fuertemente sus colmillos en el cuello del chico este intentaba gritar, pero no producía sonido alguno, miraba con enojo, impotencia y rabia que se aprovecharan así de él… -Luka se despegó de él, y lo miro –Los humanos no son más que recipientes de sangre, sangre sin valor pero… a pesar de ser eso… desean obtener más placer que nadie… -Pasando una mano por el pecho de Len mientras profanaba el cuello del chico nuevamente se regocijaba del sabor de la sangre del chico, le sorprendía que la sangre de Len haya cambiado para mejor, el haberle robado su virginidad por Meiko adelantó parte de lo estipulado, pero… su sabor era dulce, exquisito, adictivo, sentía como le quemaba la garganta, le hacía sentirse completa, estaba lejos de estar satisfecha, quería más… más… Len de alguna forma sintió algo de mareo y con un golpe en la mano derecha de Luka logró liberarse y camino hacia la puerta con lentitud, Luka lo detuvo por una mano -¡No seas arrogante, humano!, ¡No te perdonare que me desobedezcas! –Len la miro de frente, aun sintiendo su cuerpo a punto de colapsar no se dejaría vencer sentía que cada vez que no cumplía a las exigencias de Luka, el dolor en su pecho aumentaba… Le dolía, pero no se rendiría sin luchar… Luka lo tomo por ambas manos y lo trajo contra la pared -¡Témeme más!, mucho más ¡Témeme más!... ¿Quieres que te cure de esta herida? –Luka lo miro desafiante, sus ojos no mostraban emoción alguna, Len aun no se rendía pero el agarre de Luka se intensificaba –Te la voy a vendar tan fuerte que te paralizará la sangre, tras unas horas tu brazo se pudrirá lentamente… tan solo de imaginar el sonido que vas a emitir, se me hace divertido… retorcerás la cara de arrepentimiento y sufrirás la penitencia, al final llorarás y morirás… como él… jamás lo perdonaré… -Las palabras que salían de la boca de la chica eran cada vez más frías, sus ojos estaban rojos segados por la sed, Len sabía que ella no saldría de ese trance, aun así fue firme -¡Jamás!, ¿Me oyes? –Mostrando una sonrisa se burlo de ella, Luka se molesto y lo mordió aun más fuerte en el cuello, Len maldijo por lo bajo – ¿Ves te lo dije? –Pasando su mano por sus cabellos le sonrió cínicamente -Len-kun, eres tan joven e inocente no sabes mucho, pero algo es seguro –Mostrándose seria -¡Tú nunca te irás! –Levantándolo contra un sillón le mordió parte del hombro, Len tembló, por un segundo su conciencia se nublo y se desmayo por un momento… La chica besaba parte del cuerpo del chico el cual para su sorpresa dejo de pelear, corrió por unas cadenas algo oxidadas, con precisión las pasó por los brazos del chico, lentamente busco entre sus frascos uno con una inscripción en latín… Conscientia dámper con rapidez logró mezclar un té, abriendo la boca del chico lo hizo que lo bebiera, tras unos instantes se escucho unos ligeros ronquidos del chico cosa que festejo la peli-rosa… -¡Ahora si Len-kun!, te enseñare mejor que Meiko, esa niña nunca ha sabido nada… -Con un ligero movimiento se fue acercando al chico el cual estaba tendido sobre el sofá, acomodándose entre sus brazos logro acercarse a su rostro… Tras un segundo ella sintió un ligero dolor, se encontraba en el suelo, algo desorientada por el golpe miro hacía la puerta en la cual al parecer Len la miraba… -Ja,ja,ja… creíste que me detendrías con estas oxidadas y viejas cadenas… lo lamento hace mucho que no las había visto, te aseguro que la dueña original le encantaban cuando le daba sus castigos, pero… Tú no eres ni la sombra de ella… lamento decirlo pero, no me pareces en nada atractiva –Con una ligera reverencia se dio media vuelta y entreabrió la puerta… -La chica aun no salía de su confusión, ni podía procesar en lo absoluto lo que sucedió, que le paso al niñito el cual no podía defenderse, se suponía que había bloqueado su conciencia y lo había paralizado lo suficiente para al menos unas 6 horas… -Aun no… aun no… se repetía mentalmente, no lo podía dejarse irse así, ella le iba enseñar, í -¡Espera! ¿Quién eres? –Intento llamar la atención del rubio, el chico volteo y soltó una carcajada por aquel comentario, medito con detenimiento, mirando a la chica que se debatía mentalmente aun, -No soy nadie y a la vez alguien, sólo te aseguro que muy pronto regresare para vengarme de ellas tres… Aunque este chico, no está del todo mal… -Sus ojos cafés se veían sombríos, y sin más salió de la habitación, Luka se levanto y logró alcanzarlo, tras tocar su hombro, él la miro nuevamente, Luka se sintió débil y se desplomó en el suelo del pasillo… Len se rió y siguió su camino, le hizo divertido el haberle tratado así a la chica… Luka aun no se reincorporaba, este hecho, el ánima que sentía en el aire era distinto, sus sospechas se invalidaban, y su investigación acerca de Len se venía abajo, aun así sonrió con malicia, no negaba que le gustaran los retos, y este no sería la excepción… -Serás mío antes que nadie Kagamine… Camine hacía mi habitación sin duda aun no me acostumbro, me cansa demasiado caminar y tener algo de control, veo borroso, sin duda tarde o temprano lo dominaré, chico no te quedara de otra que hacer lo que te ordene, es solo cuestión de tiempo para que profane tu despertar… Sentía mi cabeza un caos, me dolía, sin embargo, me levanté, camine hacía ventana veía como el sol estaba por ocultarse por el horizonte, según lo poco que recuerdo Luka-san me dijo que debía prepararme para ir a la escuela hoy, por lo que camine hacía el ropero donde tome mi uniforme, con rapidez me dirigí al baño y me di una ducha rápida, tras unos minutos me cambie y me amarre el cabello como siempre en una coleta, tome mi mochila y estando apuntó de ir de la habitación sentí el agradable olor de, ¿Bananas?... Observe con detenimiento un pequeño refrigerio en la mesita de noche, recién servido, había las amadas bananas que adoraba, también podía ver una tortilla de clara de huevo acompañado de jamón y especias, algo de yogurt con frutas picadas, acompañado de pan tostado, sonreí, camine hacía ella y me fascine por su apariencia… -Veo que te gusta lo que cocine, lamento si algo no es de tu agrado… -Volteé y mire a Rin-san en el marco de la puerta -¡No!, al contrario te lo agradezco. -Ella dio media sonrisa y camino hacia un lado de mí, y bufo por lo bajo, aun así me miro -¿No comerás?, adelante no te contengas –La vi me gusto sus ojos azules brillaban en la puesta del Sol… -¡Claro! –Me senté a un lado de la cama y comencé a comer con hambre, por alguna razón sentía algo de fatiga, pero ese desayuno me llenaba de energía, el ver como Rin me observaba me ponía de cierta forma ¿Nervioso?, aun así me sentía muy feliz… En el transcurso de la ida al colegio, fue en silencio, por alguna razón el ambiente era tenso, Meiko-san estaba algo nerviosa, miraba por momentos el paisaje, desde que la vi no ha hecho alguna de sus bromas, Luka-san estaba absorta leyendo sin cesar unos 4 libros a la vez, Miku, miraba sin pestañar a su oso Teddy, Haku-san, se encontraba jugando con una daga blanca, la cual por alguna razón me dio unos escalofríos…. -Len, ¿Te encuentras bien? –Rin-san se acercó a mí, y pasó su mano por mi frente, no comprendía muy bien está nueva faceta de Rin, desde esta mañana no me ha tratado de la forma habitual, aunque no sé tal vez… -Por un segundo la mire y negué, ella aun me miraba seria, por lo que le asentí nuevamente, así estuvo el ambiente de tensó hasta llegar a la escuela, todas se dirigieron a sus respectivos salones a excepción de Neru-san que había salido de viaje hacia Europa… Las clases fueron algo aburridas aun así escribí con detenimiento las clases de aritmética y mitología, suspire algo molesto, por alguna razón Rin escribía cosas de igual manera y no se había puesto a dormir en lo absoluto, Miku por otra parte miraba hacía ventana como siempre… Tras la hora de receso me puse algo mal por lo que salí un momento en la terraza de la escuela, realmente quería salir aunque sea un momento para respirar aire fresco, por un momento mire la luna estaba en fase menguante, realmente no sabía que me hacía el verla, me ponía de cierta forma nostálgico…. -Creo que es hora de que vuelva –Dándome media vuelta para regresar al salón de clases me lleve una sorpresa al ver a Rin-san mirándome -¿Por qué saliste del salón Len? –La voz de Rin-san me dio un escalofrío, por lo que trague duro, e intente justificarme -¡Sólo salí por un instante!, comenzando a caminar hacía ella, algo me hizo detenerme, por un instante flanquee y caí desplomado… Corría por los pasillos desesperada, desde ayer en la madrugada tenía muchas dudas con la condición de Len, lo podía notar por el aroma que emanaba de él, había cambiado, pero aun así olía más que exquisito, quería asegurarme de su salud por lo que no había despegado la vista de él, hasta hace unos minutos en los cuales hable con Miku-nee y le exigí que no se acercará a Len en lo absoluto… Ahora sin ninguna pista de su paradero corría frenética entre los pasillos, no podía correr como quisiera por estar en la escuela, por lo que intentaba ser rápida… Tras unos minutos de carrera logré verlo en la terraza, el único lugar que me faltaba, al llegar lo noté bastante calmado, miraba sin cesar la luna, intenté ser directa con él -¿Porqué saliste del salón? –Le grité, no tenía intenciones de mostrarle más mi lado débil, intentaba ser buena hasta cierto punto, pero las cosas que hacen mis hermanas hacen que me salga de mis cabales y me moleste, ya que ellas me obligaran a ser la terrible Rin de la cual nadie ha visto en años… El dio media vuelta y me vio, no escuche sus patéticas excusas, le exigí que se apurara a regresar, cosa que obedeció, caminaba hacía mi cuando se desplomo, fui rápida y lo tome entre mis manos, podía ver su rostro rojo, con cuidado lo tomo del rostro y lo examine, ardía en fiebre, me había dicho Luka-Oneesama que para hoy estaría bien, pero al parecer no, con cuidado lo tome entre mis manos y camine hasta la enfermería, en el camino muchos estudiantes me veían con algo de sorpresa pero los mire a los ojos, los cuales al verme, sus ojos perdían color y se iban, bufe por lo bajo y seguí mi camino hasta llegar a la puerta de enfermería, la cual para mi tranquilidad se encontraba desierta, con cuidado lo coloque en una cama, y me puse a buscar entre los medicamentos algo para ayudarlo, tras inspeccionar las alacenas y estantes logre juntar algunas pastillas, un jarabe y algunos paños adhesivos, con calma logre disolverlos en un vaso y se lo di para que bebiera, le coloque los paños en su frente, aunque también quise colocárselos en su pecho para que mejorara más rápido, con delicadeza le desabotone su camisa, retire el saco negro, al quedar expuesto su torso me sorprendí, tenía más marcas de las que podía imaginar, se veía realmente mal, me enfade, realmente me enfade, eso no es lo que acordamos al pelear, por lo que apreté mis puños con rabia y lo vende, podía oler algo perfectamente el aroma que desprendía, me imaginaba que cambiara algo, y era verdad no olía como siempre era algo más fuerte y embriagante, pero me rehusé a tomar alguna gota, no quería dejarlo más débil, por lo que sólo lo observe dormir plácidamente, su rostro ahora se encontraba más tranquilo, su respiración se hacía más calmada, sonreí un poco, se me hacía gracioso sus detalles, por un momento me desconecte del mundo, pero al volver a mí, me encontraba cara a cara de Len, podía sentir su respiración serena junto a la mía, no entendí en que momento había pasado, pero lo besé, realmente lo besé… Era un dulce roce, necesitaba aquel tacto, con mucha suavidad me retire de él, y lo vi sonreír, sin más me dedique a sentarme a un lado de él, no quería dejarlo, por lo que me quede en vela cuidando de él, sólo esperaba que nada más pasará, no podía soportarlo, no me quedaba de otra, le enseñaría a Meiko-nee que nadie se mete con mi propiedad… Ya tenía unas horas de arribar a aquel país, la lluvia caí sin fin desde que llegué, suspire, tras caminar a a entrada del aeropuerto mire a los mayordomos que me esperaban en una limosina, mi madre nunca cambia, de mala gana los seguí hasta llegar a una limosina, en la cual entre y pregunte por mi madre, el mayor de los mayordomos me dijo que ella había tomado unas vacaciones a Praga tras resolver conflictos tecnológicos con parte de la Unión de Empresas R.A.E, pero que me vería en la noche, en el salón, maldije por debajo, realmente no quería verla, pero necesitaba respuestas… Tardamos al menos unas 3 horas hasta llegar a las tierras de la familia, en Francia mi madre tenía algunas propiedades como el castillo Chateau d 'Useé, al cual me dirigía, tras llegar el mayordomo mayor me escolto a el interior, me condijo por algunos pasillos y subimos tres plantas, me dijo que podía escoger cualquier habitación que deseara, que viera a mi madre a las 12 de la noche en el salón, que muy pronto estaría la cena, por lo que me apresurara a cambiarme, de forma veloz desapareció el mayordomo y me dejo suspirando, ahora tenía que enfrentarme a mi Madre por respuestas, las cuales por alguna razón me dejan intranquila… La cena había sido muy callada como siempre, aun no tenía indicios de la presencia de mi madre, pero sospechaba que estaría por llegar, aun así comí algo, sin más me despedí y regresé a mi habitación. Una vez dentro, me puse a gusto y dormí un par de horas… Me levante de improvisto, había escuchado un ruido demasiado fuerte por lo que corrí por los pasillos, y en menos de unos segundos me encontraba frente a las puertas del salón, abrí y entré… Una silueta descansaba en uno de los sillones de la habitación, adornada de cuadros y estantes, trofeos de caza, y uno y que otra barra de vinos, la figura se podía apreciar muy poco, la poca luz que emitía los candelabros no ayudaban, pero, aun así la rubia podía distinguir perfectamente a está… -¡Hija mía!, no te he dicho miles de veces que no estrés sin avisar… -La silueta se reincorporo, y dejo a relucir dos pares de ojos rojos… Temblando un poco, Neru avanzo hasta llegar cerca de ella, asistiendo levemente, tomo asiento en un sillón, -Oka-sama, me disculpo por esta visita inesperada, pero he venido a verla para esclarecer mis dudas respecto a la forma en que se elegirá a la próxima cabeza de la familia… -La mujer se rió y tomo asiento nuevamente, tras unos instantes un rayo esclareció la escena, una joven mujer de no más de 25 años jugaba con su copa de vino en la mano, la cual tenía una sustancia roja, sonriendo sacudió ligeramente su larga cabellera rubia ceniza –Neru-chan, mi hija mayor, mírate que hermosa te has vuelto, eres la misma imagen del difunto Nero –Neru, gruño por un instante pero fue cortante y la miraba molesta, la mayor rió nuevamente y dejó su copa -¿Y bien se puede saber exactamente que quieres saber?... Neru, comenzó a meditarlo un poco y dijo con simpleza -¿Qué pasa exactamente con Len?... –La mayor se extraño un poco y sacó un poco sus colmillos -¿A que te refieres cariño?, en el informe de Sebastián, puedo deducir, que se están dando cuenta de él, ¿Cierto?... –Neru asistió y tomando una galleta de la mesa giro su cabeza a otro lado -¿Por qué alguna de nosotras será la compañera de un humano tan débil como él? La mayor dejó escapar una risa audible, su hija se extraño nunca había visto que su madre riera antes, controlando sus risas la miro –Hija mía, sólo puedo decirte que Lenny-kun no es del todo lo que ustedes creen, a simple vista parecerá algo indefenso, débil, patético y algo lindo, pero… -Pero –inquirió la menor –Es sólo la mitad de la moneda –Concluyó –Te puedo decir que hasta ahora, ustedes han estado sólo practicando, pero, ahora viene la hora de la verdad, Len no es solo un simple humano más, tiene algo diferente, que para sorpresa del destino, lo he vuelto a ver, no me imagine toparme con él nuevamente, pero ustedes –Moviendo sus dedos –Se están encargando de, ¡Transformarlo!... Neru no entendía en que dirección se estaba yendo la conversación, no podía asimilar las palabras que decía su madre -¿Transformarlo? –Pregunto confundida, Ia se levantó del sillón y camino hacia la ventana, un relámpago ilumino la habitación, mostrando la cara de felicidad de Ia –Hijas mías, ustedes sin que se den cuenta están siendo más fuertes y conseguirán evolucionar más de lo que yo llegué… -¿Fuertes y evolucionar? –Neru se levantó y llegó junto a su madre -¿De que hablas? –Ia la miró con un deje de tristeza –Hija, ¿Me podrías mostrar tu don? –Ia levantó su palma frente a Neru -¿Qué esperas? -la apresuro, Neru se extraño, pero aun así asistió, con un suave movimiento logró golpear la palma de la mano de su madre la cual sonó fuertemente… -¡Bravo! –Sonrió con sadismo su madre, miro a su mano la cual estaba medio centímetro dislocada, Neru estaba asustada, nunca en el pasado había logrado siquiera hacerle un rasguño a su madre, pero… ahora… -¿Eso es lo que hice? –Claro –Asistió su madre –Tu don ha sido aumentado, por si no los has notado, la dulce sangre de Lenny-kun es algo peculiar –Moviendo su mano, está se reacomodo, mientras Neru aun salía de su asombró, la mayor aprovecho y toco su hombro de la menor –Verás, es algo difícil de explicar, pero te aseguro que con el tiempo, lo averiguaran, por ahora, sólo les digo que el límite es hasta 5 semanas y 2 días, aunque… -Mirando un sobre el cual sacó de un cajón –Por lo visto creo que tienen unas 3 semanas a lo mucho, sólo espero que no intente hacer movimientos tan bruscos con él, como lo hizo Meiko-chan, estoy segura que ella tiene la ventaja hasta ahora… Con lo que hizo su despertar aumento, por lo que las visitare muy pronto para verlo… -Neru, se reacomodo y asistió, se puso de acuerdo con su Madre para irse en 2 días de ahí, quería practicar esos días para llegar mejor a su casa, saliendo del recinto camino hacia su habitación, dejando a su Madre sola, en el salón… Ia miraba divertida los cuadros que decoraban el recinto, en los cuales se veía ella, abrazando en cada unos de ellos a sus hijas, con sus respectivos esposos, aun recordaba lo feliz que era en el pasado, cada cosa que hizo para llegar a donde está, aunque las cosas no se dieron de la mejor manera con cada unos de ellos, pero lo hizo por el futuro de su clan, el nombre Sakamaki, era temible… Aunque sintió algo amor por ellos, eran necesarios para la concepción de sus bellas hijas, las cuales tendrán desastroso futuro en el cual la mejor se quedara con su puesto… Solo los mejores dones ganaran, ahora serían perfeccionados, aunque ya sabía cómo acabaría esto… -Sólo espera que puedan hacerle frente a él… Al llegar a casa, las Sakamaki, se fueron a sus respectivas habitaciones, cada una no se dijo nada, Len venia en brazos de Rin, la cual lo cargaba con sigilo de que nadie los siguiera, con cuidado, lo llevó en su habitación en la cual lo dejo en su cama, todavía no se veía mejor, pero aun así logró tomar algunas medicinas del cuarto de Luka que servirían, con mucho cuidado lo atendió y velo por el gran parte de la mañana, aunque ella no había comido nada, se sentía elativamente bien, su sed estaba aun presente pero no bebería así de la sangre de Len, sentía rabia y molestia por lo que hizo Meiko-nee, pero estaba segura que hoy lo pagaría… Tras unas horas de estar velando por Len, reviso que sus paños estuvieran cambiados y que había administrado las medicinas, se despidió del chico con un beso en la frente y salió de su habitación en busca de venganza… Podía oler perfectamente el aroma de Meiko en el aire, por la dirección podía apostar que se encontraba en el invernadero de la parte sur, no tomaría más de unos 10 segundos el llegar ahí, por lo que en un respiro llegó… La noche ya había caído y estaba segura de que aun teniendo la desventaja, si lograba mirarla, le ganaría… Con rapidez ingresó, el ambiente estaba en penumbras, con muy poca iluminación que ofrecía la luna menguante, aun así podía distinguir muy bien las sombras del lugar, examino los cultivos de la entrada, había frutas tropicales, árboles grandes y exuberantes que llenaban la parte central y frontal del invernadero, meditándolo un poco corrió por los costados, dando vueltas con rapidez, tras unos minutos de haber empezado la búsqueda de Meiko, esta no daba resultados, maldiciendo por debajo, brincó sobre los árboles, pasando entre uno y otro, podía ver mejor el ambiente, pero el olor entre mezclado de Meiko, no ayudaba mucho a localizarla… -¿Me buscabas Rinny? –La voz de Meiko, hizo eco y ella giró, una patada, hizo que la rama del árbol se rompiera, Rin apenas teniendo tiempo de recuperarse saltó a otro manteniendo su semblante sereno… -¿A caso a si saludas? –Rin chasqueo sus dedos y una enorme puerta bañada en luz despejo algo las sombras dejando al descubierto a la peli-café negro, de la puerta salió bañado en luz un ave pequeña que se paró en la mano de Rin… -Meiko, se rio por un momento e imito las acciones de Rin, pero ante ella apareció una puerta negra escarlata, del cual salió oscuridad que trago la luz que emanaba el familiar de Rin -¡Hermanita, tú no podrás hacerme nada! –Ante esto desapareció mezclándose entre las sombras de su familiar, Rin se quedó estática y se concentro en escuchar hasta el más mínimo sonido, podía sentir cada vibración del ambiente, tras unos segundos logró esquivar apenas el golpe de Meiko que pasó de un lado, rasgando parte de su blusa, Rin se reacomodo y concentrando su fuerza en el aire apunto a la masa oscura, pero su golpe fue absorbido por está, y salió disparada hacía atrás, golpeándose contra un árbol, ella se reincorporo rápidamente -¡Fénix del fuego quema todo con tus alas! –El pequeño pajarillo creció envuelto de flamas que emanaban un calor abrazador, tras unos segundos salió volando ágilmente hasta impactarse con la oscuridad de la puerta, pero de esta salió un corcel negro con ojos rojos que embistió al ave y está desapareció, al igual que su puerta… -¡No! –Rin vomitó algo de sangre y se tambaleo hasta caer de rodillas al suelo, Meiko aprovecho y corrió hasta llegar frente a ella y con una fuerte patada logró golpearla haciendo que está se moviera un poco, Meiko se sorprendió e intento regresar a la oscuridad, pero Rin de la nada se había esfumado y la tomo de un brazo -¡No te me escaparas tan fácil! –Tomándola de su brazo la elevo al aire de un salto, y se posiciono bajo a ella golpeando su estomago tras caer al suelo, Meiko sonrió mientras escupía algo de sangre –Eso en el paso me habría dolido, pero… ¡Eso ni cosquillas me dio!... –Sacándosela de un manotazo se reincorporo y se unió a las sombras que emitía su corcel en una forma de armadura, camuflándose con el ambiente desapareció dejando a Rin mal herida, ella sabía que el próximo golpe tal vez la dejaría fuera de combate pero, ella se quería vengar, no iba dejar las cosas así, por lo que concentro toda su fuerza en su próximo movimiento, espero con cautela y se reincorporo a duras penas… El sonido de aire se quebró, dándole la ubicación de su hermana, espero y la detuvo con un brazo, con fuerza, azotó contra el suelo y la miro, sus ojos azules se tornaron rojos y los de Meiko cafés de Meiko se ponían poco a poco negros, Rin se rió y se levantó de su lugar, tras un chasquido de dedos, Meiko se cayó al suelo y su corcel oscuro se tiño de negro y comenzó a moverse desesperadamente, sus ojos rojos se tornaron blancos y bajo del aire e invistió a su dueña, dejando un cráter a su alrededor, tras unos segundos su forma fue desapareciendo, hasta que la puerta negra desapareció, Rin logró levantarse y camino con algo de trabajo, dejando tras de ella el cuerpo maltratado de su hermana, la sangre que salía de ella era mucha, pero sabía que no podía acabarla, su madre se molestaría o sería extinguida por sus hermanas, pero… La apuesta por ser la próxima cabeza era muy alta, aun faltaba el despertar de Len, tras esto, la casa se convertiría en un campo de batalla… Una risa hizo que parara su caminar, con algo de miedo se voltio y miro como poco a poco las heridas de su hermana comenzaban a sanar aunque de manera dispareja, Rin se quedo impactada, sus ojos cafés regresaban -¿Pero, cómo? –Dando pequeños pasos, iba retrocediendo, -¡Esto no puede estar pasando!, ¡Mi poder debería darme el control de ti por lo menos 6 horas! –Rin se exaltó, su mirada nunca antes había fallado contra nadie, tenía un límite de tiempo, pero… esto no podría estar pasando… Meiko miro con una sonrisa Rin, su cuerpo aun no estaba recuperado, pero se sentía relativamente bien, con una ademan la puerta negra surgió de nuevo y el corcel oscuro hizo una nueva aparición, Rin se cayó de rodillas, el familiar de su hermana no podía ser llamado dos veces al día, y mucho menos Meiko podía llamarla tan libremente… a no ser… -Sé que estás pensando –Caminando hacía ella el caballo bajo y se acomodo junto a su ama -Me he vuelto muy fuerte, tan fuerte como para enfrentarme a las mayores, no estaré más en tú sombra –Pasando sus manos entre los cabellos de familiar, Rin no quería aceptarlo, pero no tenía oportunidad alguna, con algunas lágrimas en sus ojos estaba a punto de aceptar la derrota, no le quedaban fuerzas para seguir con la pelea, su objetivo fue truncado, aun así… Un rugido inundo el lugar, apareciendo de la nada un enorme dragón negro con escamas cafés apareció, ante el asombro de ambas, este tenía las pupilas vacías, con una ala logró mandar a volar al corcel de la castaña -¿Qué rayos es esto? –Con un además su corcel se envolvió en oscuridad aceleró contra el reptil, pero en pestañeo este se había esfumado reapareciendo tras Meiko y con un cabezazo logró herir a la chica la cual cayó desmayada, aunque su familiar aun seguía en el aire, con un movimiento tomó aire, y miro al mamífero el cual mantenía una pose de combate, abriendo su boca una bola de fuego negra salió disparada hacía el, irradiaba un abrazador calor que le impacto, haciendo que incluso la puerta negra de este se destruyera… -Rin se intento reincorporar, pero el dragón llegó a un lado de ella y la miro, de una de sus mejillas salió una pequeña lágrima que descendió sobre ella, al tacto su aspecto mejoro, y su vitalidad regresó… Tras esto el dragón desapareció del mismo modo que había llegado… Una sombra veía la escena desde lejos, moviendo ligeramente su capa sus cabellos rojos se ondearon con aire, en una brisa desapareció del lugar, hace mucho que no había visto a ese dragón, le hacía agradables recuerdos, sin duda algo estaría por cambiar… Rin camino cansada hacía su alcoba, ya había arreglado las cosas de cierta forma, pero Haku-nee le había regañado por sus acciones contra Meiko-nee, aun así el verla en ese aspecto le encanto, el verla tan demacrada en su habitación la tranquilizo, sabía que sus heridas se curarían en menos de un día gracias a que ella se había vuelto más fuerte, pero había algo que no entendía del todo, que había pasado, un familiar que no conocía la había salvado, pero… Un sonido la sacó de su ensañamiento, el débil sonido de una canción que venía de lo más alto de la mansión… Aun estando cansada sólo le tomo unos segundos llegar frente a la puerta de donde provenía esa voz… ¿De dónde provengo? ¿Cómo soy? Nadie lo sabe… Incapaz de saber el porqué de mi existencia, Me contamine buscando respuestas… Tras muchas noches siempre pedí una oportunidad de poderme redimir… Contaminado con este poder maldito, me llegué a olvidar de lo que la felicidad… Nunca la he conocido… Acaso no podre regresar, cuando empezara… Cuando la última campanada suene de este dueño voy a despertar… Rin se encontraba encima de un viejo piano mirando a la ventana, en la cual estaba de espaldas una persona, dando un ligero salto, fue aplaudiendo, acercándose a él… -Gran canción, aunque algo interesante si me permite opinar… -Rin le dio la vuelta a la sombra y se sorprendió… Frente a ella se encontraba Len mirándola con una sonrisa, no se había percatado que era él, su olor que emanaba era distinto, los ojos con que la miraba eran cafés. Su cabello era algo ligeramente más rebelde… -¿Qué te ocurre joven Rin? –Len un instante tenía contra su cuerpo a Rin la cual estaba más que en shock -¿Quién eres tú? –Rin con un golpe logró apartarlo, el chico se sobaba ligeramente el pecho donde ella lo había golpeado -¡Que agresiva eres! –Y con una pequeña reverencia se presentó –Soy Len Kagamine, mi Lady –En un instante tomo una de las manos de la chica besándola dulcemente –A lo cual ella lo golpeo, pero el chico logró evadirlo -¿Eres muy fuerte para ser muy linda? –La chica miro con molestia al chico el cual le sonreía -¡Tú no eres Len!, ¡Explícate!, ¿Quién diablos eres tú?... El chico comenzó a dar vueltas por la habitación, parecía pensarlo, tras unos segundo dijo con simpleza -¡Soy alguien a la vez nada!, realmente me vez, pero no estoy, en muy poco tiempo me verás de nuevo y te aseguro que tendré venganza… -Tras un pequeño movimiento logró robarle un beso a Rin, la cual lo empujo apenas sintió el tacto, el cual por alguna razón lo sintió frió… Len cayó en el piso desmayado, a lo cual Rin lo levanto, no comprendió lo que sucedió, ¿Era ese Len?, ¡No!, negó, eso no podría serlo, su olor era distinto, y sus ojos eran completamente distintos, pero… Decidió no darle más vueltas al asunto y lo llevó hacía su habitación, sin duda tenía muchas preguntas, y no lograba pensar racionalmente, aun así no se despegó de Len en toda la noche, mañana llegaría Neru-neesama, y con ella algunas respuestas a esta incógnita… Ya ha terminado el capítulo, pero, quiero decirles que si no les gusto mucho este, es que necesitaba dar a conocer un poco más de el porqué de Len y su importancia aquí, y sé que muchos pensarán lo que le ocurre, pero sólo por el momento les comentare que él no tiene idea, pero la cruda verdad es más profunda de lo que imaginan, por lo que lamento si tiene poco RinXLen, pero el próximo si tendrá más, pues este era un pequeño prologó, de lo que se le avecina al chico, sé que será romántico, sádico y sobretodo noble, un amor que se desencadenara… silent23Espero no haberte decepcionado, la verdad es que trabaje duro en esté y gracias por apoyar desde el principio, se te agradece. sofialexandra15 Lamento que no haya gustado el anterior, es por ello que te doy una disculpa y te invitó a que continues con la historia por favor, gracias, espero que te guste este. Maru-Li Tsukiyomi Ola y gracias por comentar enserio. Posdata: Queridos Lectores ocasionales muchas gracias por leer los Fics que he escrito eso, me hace inmensamente feliz, y espero que estén pasando por una gran etapa en su vida gracias.
Este fic es de Fanfiction net, ahora sería cosa de saber si en verdad eres o no el autor o en realidad copiaste todo, hasta la información del perfil del escritor. Copiaste todo, hasta los mensajes de agradecimiento del autor pero además contiene muchos errores. Discúlpame que dude, pero el hecho es que es muy raro que se entre así y directo a publicar toda la historia.
Sí , es mío pues es de mi pefil de Fanfiction y sólo quería comentarlo aquí aunque este es mí perfil de Fanfiction con mi mismo sobre nombre: Richy Escor: https://www.fanfiction.net/u/3747438/Richy-Escorpy Aunque también e escrito otros que la verdad creo que son muy buenos y prono los escribire aquí
El problema es el hecho de que has publicado cuatro fics ya y aproximádamente 14 capítulos pero no te has tomado ni la molestia de borrar los agradecimientos, comentarias y hasta por ejemplo los 'felices fiestas', todo está tal cual, hasta tu perfil; no estoy diciendo que sea plagio, sino que me resulta extraño y me gustaría hablar contigo por MP para aclarar esta situación.
