Minato VILLA TOKYO [Disco]

Que Jack se avergonzase por mi movida realmente era lo mínimo que podía esperar por su parte, aunque hasta yo tenía que admitir que el sonrojo que se le plantó en las mejillas fue algo inesperado, y también completamente adorable. Me siguió la conversación en todo momento, aun cuando era obvio que seguía bastante nervioso por lo sucedido, y no dije nada al respecto, pero por dentro estaba disfrutando de ello como nadie.

La aparición de Kat y Joey tuvo que ser como si literalmente se estuviese salvando por la campana, aunque dudaba que esos dos pudiesen contar como salvación de nada en ninguna clase de contexto, y ninguno pareció poner ninguna queja especial por mi propuesta de un brindis, lo que logró sacarme una sonrisa bastante animada. Después del choque de vasos y botellines, le di un trago bastante largo a mi bebida, deslizando la vista hacia Kat mientras tanto.

—¿Cortos de espacio con lo pequeñita que tú eres, Kitty Kat? Qué cosa curiosa~ —comenté, con un tono de voz inocente que claramente estaba impostado, y levanté ligeramente las cejas al recordar algo, dejando la copa sobre la mesilla antes de volver a hablar—. Ah, Jackie Chan aquí presente quería hacer una apuesta sobre quién está más guapo, pero no se nos ocurre cómo demostrarlo. Any idea~? Podéis uniros al juego, si queréis, tho.

 

La gatita no tuvo demasiado reparo en llevarse el jodido dedo a la boca, y mucho menos de sostenerme la mirada en lo que se hacía con los cristales. Le correspondí el gesto, por supuesto, con una satisfacción plantada en el rostro que rozaba lo estúpido, y con cierto disimulo me sequé la mano luego de que terminara el numerito. A ver, si no sería una forma de empezar la noche, ¿verdad?

Prácticamente al instante se incorporó, dispuesta a regresar con los demás, y yo la seguí sin problema cargando las dos bebidas restantes. En cuanto llegamos a la mesa percibí... cierto mood, que le agregó una cuota de diversión a mi sonrisa en lo que dejaba el mojito sobre la mesa y buscaba la mirada de Ali.

—Hope you like it, baby.

Ya luego me acomodé en uno de los asientos libres y me desinflé los pulmones, disimulando la sonrisa tras el botellín al escuchar a Alisha molestando a Kat por el asunto del espacio. Propuso un brindis, luego, me sumé sin más y otro trago. La seguí escuchando, ya de paso, y alcé las cejas. ¿Definir quién estaba más guapo?

—Esa será alguna de las damas, ciertamente —anoté, con los aires de galán pegados en toda la cara—, pero ¿desempatar? ¿Es siquiera posible?

Me eché encima una cuota de inocencia impostada y volví los ojos a Jack, señalándolo con el botellín antes de darle otro trago y mirarlo por encima del cristal; sólo en ese momento dejé que se me colara toda la diversión de mierda.

—¿Y si nos convencen? —sopesé, suspendí una pausa y la sonrisa se me ladeó un poco—. Con alguna demostración o algo~

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*patea la puerta* HEY WHATSSSSSUP vine a revivir esto

 

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Me hubiese hecho bastante gracia saber que tanto Kat como Joey habían notado que alguna movida me había clavado con Jack, incluso sin haber estado presentes en la escena del crimen, aunque si tenía que ser sincera, tampoco había que ser ningún genio para darse cuenta. Eh, no era mi culpa si me dejaban a solas con un chico guapo, era algo que me corría en las venas~

Joey fue el primero en hablar después de mi pregunta, consiguiendo ganarse mi atención por completo, y me fue imposible no rodar los ojos al escuchar su respuesta, aun cuando claramente se notó que no había una pizca de molestia en el gesto. ¿Predecible como la mierda? Quizás, pero tampoco me verían quejarme porque quisiese halagarnos de gratis, vaya. ¿Quién podía culparlo, además? Si ciertamente nos veíamos bien guapas~

Noté que Joey desviaba la mirada hacia Jack, pero yo me quedé con la vista clavada en él, sabiendo perfectamente que lo único que podía salir de su boca en esos momentos iba a ser alguna idea de mierda a la que, por supuesto, no dudaría en unirme si se daba el caso. Ladeé ligeramente la cabeza, ciertamente curiosa, y la sonrisa se me ensanchó apenas al descubrir finalmente lo que se le había ocurrido.

Estiré el brazo para volver a coger mi vaso de mojito, le di un buen trago a la bebida y volví a dejarlo en su sitio aprovechando el impulso al levantarme del sofá, dedicándoles una sonrisa de lo más inocentona a mis compañeros.

—Me pido primera, que soy la más pequeña~ —anuncié, ajustándome el top mientras esperaba a que terminase la canción que estuviese sonando en ese momento en el local.

Mi expresión adoptó el aire felino que tan bien conocía al segundo de empezar la nueva canción y, sin pretender perder ni un segundo, comencé a darle la vuelta a la mesa central, pasando por el lado de Joey a propósito, a pesar de que mi primer objetivo real era Jack. Por supuesto que le eché teatro encima al asunto, deslizando los dedos por el borde de la mesa y moviendo las caderas más de lo necesario al caminar, y una vez alcancé mi objetivo, paseé la mano por las piernas de Jack antes de sentarme de lado sobre las mismas.

Subí los dedos índice y anular por su pecho, calvándole la mirada, y al llegar a su cuello, deslicé la yema de los dedos por su piel hasta poder acunarle la mejilla, inclinándome para dejarle un beso de nada en la mejilla. Podía parecer una movida inocente, pero lo cierto es que me apreté contra su cuerpo un poco más de lo necesario al acercarme y me relamí los labios justo después de separarme, guiñándole el ojo mientras me levantaba.

Me encaminé después hacia Joey, sin esconder una mierda las intenciones de mi sonrisa al dar con su mirada, y ralenticé un poco el paso hacia su posición. Cuando lo alcancé, sin embargo, quise hacer que la espera hubiese merecido la pena, y sobre su regazo me senté a horcajadas, entornando apenas la mirada mientras mi dedo daba con las cadenas de su cuello, tironeando ligeramente de las mismas a la vez que yo me inclinaba hacia delante.

>>Welcome to te playground, follow me~ —canturreé en un susurro cerca de su oído, arrastrando las sílabas, y ladeé la cabeza hasta rozar la piel de su cuello con mis labios.

Me quedé ahí un segundo que se sintió eterno, pero acabé por soltar el aire en una risa floja y me erguí sin más, soltándolo mientras le dedicaba una última sonrisa inocente. Me levanté del sofá después, volviendo a colocarme a una distancia media de todos, e hice una reverencia super teatral sin poder esconder la risilla de diversión casi pueril que se me escapó con ello.

>>A lil' display of my charms~ —anuncié, con cierta cuota de orgullo, antes de dejarme caer de nuevo en mi asiento y mirar a Kat con una ceja alzada—. Your turn, peaches~

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no sé si era lo que joey tenía en mente, pero la guarra me habló y yo que sé, se me fue de las manos como siempre, perdón (?)

 

¿Había sentido la mirada de Alisha encima mientras me enfocaba en Jack? Por supuesto, qué va. Sabía, daría un brazo por que la muy jodida sería capaz de montarse en la idea que se me ocurriera, fuera cual fuera, sin dudarlo un maldito segundo. Y ¿a quién íbamos a mentirle? Era precisamente por eso que nos coordinábamos tan bien. Dejarnos sueltos y juntos tenía que ser ilegal llegados a este punto, y cuando noté de soslayo que se incorporaba con pura convicción pensé, vaya, si no sería demasiado para el pobre Jackie.

Confiaba que no iría a decepcionarme~

Seguí sus movimientos sin distraerme un puto segundo y me cargué los pulmones de aire, tranquilo, al notar que había elegido a su primera víctima. Se sentó sobre una pierna de Jack y su teatro, aunque nada despreciable, digamos que era predecible. No pude evitar deslizar la mirada a la mano de Jack en cuanto alcanzó su cintura, luego tanteó sus caderas casi en un suspiro y una sonrisa cagada revoloteó en mis labios. Bueno, bueno, ¿no tendríamos aquí a un charmer en potencia? La tontería me provocó una satisfacción que siquiera me molesté en analizar, sólo se me ocurrió pensar que, al final del día, nuestra puntería nunca fallaba.

Y si hacía falta, lo íbamos a sacar más que bueno.

Me comí el resto del espectáculo con la idea rondando, y cuando vi a Alisha incorporarse conecté con sus ojos de inmediato. Estiré un brazo en el espaldar, acomodándome a mis anchas, y le sostuve la mirada a todo momento. Mi sonrisa lo dijo por sí sola.

Come here, baby.

Impress me. ​

Lo dicho, de impredecible no tenía nada pero eso no le quitaba el encanto. La imbécil se me sentó encima a horcajadas, mi mano viajó en piloto automático a su cintura y alcanzó las cadenas en mi cuello. Ladeé ligeramente la cabeza, con una sonrisa suave y relajada impresa en el rostro, y su tirón me instó a separar la espalda del asiento unos pocos centímetros. Se acercó a mi oído, mis dedos se afianzaron sobre el top y deslicé las yemas hacia abajo, únicamente lo suficiente para alcanzar el borde de la piel expuesta. La sonrisa se ensanchó, la música rebotó entre mis costillas.

Tell me your nightmares and fantasies, sink into the wasteland underneath.

Stay for the night, I'll sell you a dream.​

Sentí su aliento en mi cuello, la tontería me arrancó una risa floja y repasé apenas mis dientes con la lengua, pestañeando antes de erguir el cuello y poder conectar con sus ojos. La vi alejarse, ejecutar una reverencia y tirarse en su asiento. Deslicé entonces la mirada hasta Kat, sin abrir la boca; ya Alisha se había encargado de eso y, además, mi expresión tenía que decirlo todo.

¿Y bien?

Te estamos esperando, gatita.

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relleno muy rellenoso que mi alma de cerda necesitaba

 

Obviamente a Alisha no se le había pasado la oportunidad de soltar la estupidez de turno relacionada mi estatura para señalar lo que se daba por sentado con mi propio comentario, pero la verdad era que me importaba poco o nada y solo lo dejé correr. Igual sabía que la neurona a la rubita le funcionaba para dos cosas, fastidiar y follar en resumidas cuentas, así que no se le debía dificultar imaginar que habíamos estado haciendo el imbécil un rato también.

Le estaba dando un trago a la botella cuando escuché a la gringa decir lo de que había estado hablando de una apuesta sobre quién estaba más guapo, la sola idea me arrancó una risa baja del centro del pecho porque era una estupidez, pero la verdad quería verlos elaborar un poquito. No iba a faltar la idea de mierda del inglés, por supuesto, que parecía que le pagaban por pensar estupideces.

Me desinflé los pulmones, bebí un poco más y cuando Alisha se levantó ni siquiera me importó cederle en absoluto el podio, siendo que la verdad no me apetecía demasiado iniciar la estupidez. Me acomodé mejor en mi lugar, crucé una pierna sobre la otra y para qué mentir, aproveché para disfrutar el teatro como una cabrona. Me sorprendió que el gigantón reaccionara, es más, la satisfacción de ver que lo había hecho se me debió notar en toda la cara.

Recibí la mirada de Joey casi con pereza, me estiré en mi lugar y dejé la botella medio vacía en la mesa luego de pegarle otro trago antes de levantarme por fin. Honestamente no le puse especial empeño a mi forma de caminar, quería decir, era un jodido corcho de botella y ya para eso andaba con bastantes aires de grandeza, ¿qué falta hacía añadirle más?

Se me ocurrió iniciar con el pobre desgraciado de Jack ya que la neurona podía haberle quedado bien fundida luego del numerito de la rubia, pero decidí tenerle piedad unos instantes. Me acerqué entonces al inglés, encajé una rodilla a su lado y estiré la mano, acuné su rostro con un cuidado que jamás sería capaz de expresar de forma genuina y lo hice encontrar mis ojos para poder dedicarle una sonrisa, fue amplia, oscura a cagar.

Tracé la línea de su mandíbula de un movimiento liviano, alcancé su mentón y me incliné para dejarle un beso en los labios, por la pura gracia, ni siquiera intenté profundizarlo pero al retroceder mordí su labio suavemente. Me incliné hacia un costado para acercarme a su oído, le solté una risa de tono incluso más bajo que la que me había permitido hace un rato y le respiré encima.

—Babe, tú ya tuviste mi demostración —murmuré y canté una única cosa en voz baja antes de dejarlo quieto de una buena vez—. Make me an offer, what will it be?

Me retiré de su espacio con calma, como si no me corriera detrás ningún diablo y volví a sonreírle un segundo para enfocarme en Jack por fin. La verdad fuese dicha, no quería matarlo, no todavía por lo menos así que rodeé su asiento hasta que dar a su espalda y posé las manos en sus hombros. Me quedé allí unos segundos, mi tacto era liviano, y lo deslicé a su pecho con la misma suavidad, con la gracia acabé echándole algo de peso encima de forma que pude aprovechar para acomodarme cerca de su oído.

—Jackie~ —murmuré lo suficientemente cerca para que su mi respiración rebotase hacia mí, alargué un poco su nombre ya de paso. El resto se lo pregunté como si fuese un secreto y todo—. ¿Qué tal? ¿Ya te recuperaste del teatro de Ali?

Me permití una risa otra vez, retrocedí un poco para liberarlo lo suficiente y encontré su mejilla con la mano para hacerlo mirarme como había hecho con Joey. Le sonreí, el gesto fue bastante más inocentón si se quiere, y reparé en su propia heterocromía un momento antes de dejarle un beso en la comisura de los labios. Colé los dedos libres bajo la camisa, apenas para alcanzar a rozar su clavícula.

—Me agradas, gatito. —Alcancé a decirle apenas un momento antes de retroceder.

Me erguí como si nada, hice una reverencia por la pura gracia y regresé a mi lugar donde me dejé caer con cierta pesadez.

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yo: aber si me sale el post con este sueño
also yo: *este medio tochohell en el que kat claramente me poseyó*

 

Había entrado por completo en el papel de zorra y, no iba a mentir al respecto, también me había olvidado por completo de la pierna mala del pobre Jackie. Fue una fortuna que a él sí le quedasen neuronas activas en la cabeza, porque reaccionó con bastante rapidez, y aunque me pilló desprevenida, la prioridad del teatro hizo que no interrumpiese ni movida incluso con ello. Además, ¿cómo podría? Si la sonrisa que me dedicó a modo de disculpa fue tan encantadora~

No había esperado al cien por ciento que Jack hiciese algo en respuesta a mi movida, aunque lo cierto era que una pequeña parte de mí lo había deseado con bastante más ahínco del necesario, y me fue imposible disimular la sonrisa oscurecida que me asomó por los labios al notar su tacto en mi cintura. Había sido sutil as fuck, eso no se lo iba a negar, pero mi cuerpo estaba programado para notar hasta el más mínimo roce, especialmente en aquella posición y situación. Preferí no comentar nada al respecto, porque me daba la sensación de que de por sí le había resultado un esfuerzo hasta eso, y solté una risilla risueña cuando me dejó el beso en el dorso de la mano, como todo un caballero.

Con Joey la historia fue completamente diferente, claro. El cabrón se echó en el sofá a sus anchas nada más verme, como si fuese el puto rey del lugar y pensé que, vaya, muy alejado no estaba tampoco. ¿No era así como nos comportábamos a diario en la escuela? Como los jodidos reyes de la colina. Y ahí estábamos en nuestra salsa, así que no había realmente escapatoria de esa actitud.

Ni siquiera cuando éramos el rey y la reina de puras sombras.

Su mano viajó a mi cintura con mucha más confianza que la de Jack, y en general se acopló a mis movimientos con una facilidad absurda. Siempre era así, no habíamos coordinado estúpidamente bien desde el primer día que nos conocimos, y aunque no había novedad en ninguno de nuestros toques, el roce de sus dedos sobre mi piel me lanzó un chispazo a lo largo de la espalda que no pude controlar. No teníamos ninguna intención de acostarnos en aquella ocasión, eso era algo que podía asegurar incluso sin haber hablado con él, pero eso no nos impediría tentar los límites a lo largo de la noche, ¿verdad?

Y siempre me apetecía estirar la cuerda un poquito demás con él.

Katrina no se hizo de rogar demasiado y yo me hice con mi copa para seguir bebiendo mientras observaba el espectáculo. El mojito estaba bastante suave, aparte de bastante rico también, y para cuando me quise dar cuenta ya había acabado de bebérmelo y había empezado a mordisquear la pajita de manera distraída. Estaba bastante concentrada en la función de Kat, de puro milagro me di cuenta de que ya no andaba bebiendo nada, y ni siquiera aparté la mirada de ella y de Jack cuando me estiré para cambiar el vaso vacío por la otra copa que aun estaba a rebosar.

Cuando la chica volvió finalmente a su sitio, solté el aire por la nariz en una risa floja, y yo misma me relajé en mi posición mientras le daba un trago bastante largo a la bebida. I was pretty confident in myself desde el principio, pero después de las propias demostraciones, era imposible disimular el boost de ego que tuve. Era la primera persona a la que la gatita le atraía y no dudaba que tuviese sus encantos, but c'mon, as a slut no one won me.

Hubiese esperado pacientemente al veredicto de nuestro jurado improvisado, pero era un jodido culo inquieto y una nueva idea se me cruzó por la cabeza, haciendo que me levantase de nuevo como un jodido resorte. Repasé la mesa que teníamos delante con la vista y me sonreí, asintiendo con la cabeza, antes de pasar por encima de la misma y darme media vuelta al borde de la pista de baile.

—¡Ahora vengo! —dije sin más, perdiéndome entre la multitud antes de que ninguno pudiese hacer nada más para evitarlo.

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más relleno y encima en tocho, pero dios no me había dado cuenta de lo mucho que echaba de menos rolear a esta pendeja kjsanda

anyways, al siguiente post vuelve, no la echéis mucho de menos (?)

 

Mi idea había sido mucho más sencilla de lo que hice parecer, pero ya se había visto lo mucho que me gustaba el teatro y tampoco se me podía culpar por querer echarle algo de dramatismo al asunto, ¿verdad? Claro que no~. Pero eso no quitaba la triste realidad de que solo me estaba dirigiendo hacia la barra para pedir más bebidas, aprovechando que había acabado la mía y los demás también se habían hidratado con ganas.

Me hice un hueco entre la gente, pues, y esperé que el camarero se diese cuenta de mi presencia para poder hacer mi pedido, golpeteando la barra con las uñas al ritmo de la nueva canción que estaba resonando por el club. El pobre chico parecía estar hasta arriba de pedidos, y por regla general eso no me hubiese detenido, pero andaba algo blandita entre todo el rollo de que Jackie estuviese ahí, así que decidí comportarme y esperar.

Me distraje echando una vistazo a la pista de baile y, venga, what were even the odds? Di de lleno con el mismo Jack alejándose de la mesa en dirección al patio interior del lugar, siendo bastante difícil que pasase desapercibido con su altura y todo el rollo, y lo seguí con la mirada mientras ladeaba la cabeza con algo de curiosidad. Algo raro le había notado antes de irme, pero no era ninguna experta en preocuparse por los demás y, a decir verdad, simplemente se lo adjudiqué al hecho de que no estaba muy cómodo en presencia de Kat aún o algo por el estilo.

Escuché al camarero a mis espaldas entonces, llamándome, y me giré para pedirle un par de cervezas con la sonrisa encantadora que siempre lograba darme algún que otro trago gratis. Fue por puro instinto, no pretendía ganar nada en aquella ocasión, pero al parecer me sirvió de igual manera para conseguir un dos por uno en el pedido.

Me dirigí al patio sin ninguna clase de vergüenza encima y busqué al chico con la mirada, acercándome a su posición en cuanto di con la misma. Le di un golpecito en el brazo con una de las botellas de cerveza y se la extendí con una sonrisa ligera, justo antes de darle un trago a la que me había quedado.

—Eh, Jackie, sabes que puedes mandarnos a la mierda cuando te apetezca, ¿no? I mean, no nos ofendemos con facilidad y sé que tanto Joey como yo queremos que te lo pases bien esta noche, así que tú córtanos el rollo si te apetece... y te digo que te va a apetecer cuando lleve encima unas cuantas copas más.

Le guiñé el ojo al añadir eso último, soltando una risilla ligera para quitarle cualquier posible peso al asunto, y señalé el interior del club con la cabeza, como si nada.

>>Quería comprar bebidas para los otros dos y una botella de tequila, para jugar a algo con shots, you know. ¿Me ayudas a llevarlo~?

De por sí podía yo sola, así que si me rechazaba no pasaba absolutamente nada, pero digamos que en el pequeño, pequeño, pequeñísimo espacio de bondad que había en mi corazón, me dolía un poco verlo apartado cuando aquella noche se suponía que era para él.

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you can't escape her, she is like a plague (???

 

Si lo estiraba un poco, habría que reconocer que tenía cierto encanto ver a la gatita comportándose como si no pudiera con nuestra estupidez mientras, al mismo tiempo, nos seguía el rollo de inicio a fin. Un poquito contradictorio, ¿no? Lo pensé al detallar su expresión antes de montarse el numerito, la pereza, incluso el resabio de hartazgo y todo lo demás. Esbocé una sonrisa resignada en lo que se acercaba y meneé la cabeza lentamente, suspirando y todo. Tan dramático.

La sentí inclinándose junto a mí, por supuesto, pero no le llevé el apunte hasta que sentí su tacto en el rostro y me instó a girarlo. Parpadeé, entonces, dando de lleno con sus ojos dispares, y deslicé la mirada a su sonrisa. No la reflejé con la misma amplitud pero bueno, digamos que era inevitable. Olía a humo y tormenta y seducía un huevo.

Era mi pequeño gran reinado, después de todo.

Me quedé quieto, recibí su beso y la ligera mordida me lanzó un chispazo sutil a la nuca. Su comentario en mi oído me desinfló el pecho de una risa que acaso llegó a portar sonido alguno. Me encogí de hombros, aceptando los facts, y suavicé la mirada al dedicarme el último vistazo antes de abocarse a Jack. Se había aprovechado de la canción y mira, uno tenía memoria selectiva. ¿Qué iba a hacer un idiota como yo, sino recordar sólo lo importante?

¿Una oferta?

A ver, a ver.​

Luego el show se lo comió Jack. Me estiré para alcanzar el botellín de cerveza pero por el resto seguí ahí echado, como si fuera el puto dueño del lugar. Venía bien, la verdad, me daba a mí que acabaría recibido de voyeur tras esta noche, pero había algo extraño en las reacciones del muchacho que sólo siguió escalando hasta no reaccionar en absoluto. Fruncí el ceño apenas, confundido, y le eché un vistazo a Ali. Fue, digamos, para compartir la extrañeza, si se quiere, pero Ali no era tan afilada con ciertas mini reacciones y bueno, me quedó tragarme las dudas solo. Además, cuando quise acordar tanto ella como Jack se habían excusado y habían desaparecido de escena. Eso nos dejaba a mí y a la gatita.

Ah, qué cosas.

Volví a empinarme el botellín, tranquilo, y lo regresé a la mesa antes de inclinarme en su dirección. Lo hice lo suficiente para llegar a colar el brazo y descansarlo en su espaldar.

—Enjoying the night, kitten? —Me acerqué para que lograra oírme sin problema y las ganas de tocarle los ovarios se me tuvieron que notar desde la otra punta del club incluso antes de abrir la boca—. ¿Te pone eso de espantar a la gente o cómo? Porque diría que te sale bastante bien~

La sonrisa me descubrió la dentadura y me aparté unos centímetros, suspirando dramáticamente al repasar el club con la vista.

—Ah, poor Jackie. Yo creo que mínimo una disculpa se merece, ¿o no?

 

¿Que si me di cuenta de que prácticamente se le había reseteado el cerebro a las opciones de fábrica? Sí, la pregunta era si me importaba en lo más mínimo. El jodido era gigante, si no quería algo o se sentía incómodo con ello más le valía abrir la boca para decirlo, o iba a pasar una noche bastante desagradable si debíamos ser honestos.

Cuando Alisha pasó como un torbellino no me sorprendió que el gatito aquí presente optara por levantarse e irse, si el pobre desgraciado no boqueaba como pez fuera del agua por obra divina. Lo dejé irse, de nuevo, me daba bastante igual, a la larga digamos que Jack era el cachorrito de este par y a mí por rebote me la traía un poco floja.

Eso me dejaba a mí con el inglés, que no sería él si no podía dar por culo, pero de nuevo digamos que era un día excepcional en el que no andaba de malas pulgas como el resto de mi vida. Lo vi inclinarse, percibí su brazo en el espaldar y me dediqué a esperar la estupidez de turno, así se le notaran las ganas de tocar los huevos desde el otro lado del país.

—Tiene su encanto, si te soy sincera —comenté estirando la mano para alcanzar la botella de cerveza, solo para darme cuenta que estaba vacía, así que la dejé donde estaba—. Es un don natural, eso sí~

Noté su sonrisa con el rabillo del ojo, no volteé a mirarlo pero solté una risa baja mientras cruzaba una pierna sobre la otra, balanceándola suavemente. Esperaba que al menos el otro par trajera algo de beber.

—Es un niño grande, me parece a mí que estará perfectamente, ¿o acaso dudas de tu propio cachorro, Joey?

 

Pillé todas las reacciones de Jack al vuelo, pues no estaba tan alcoholizada a pesar de haber estado bebiendo ya un buen rato, y, por raro que pudiese parecer, de alguna manera me alegró ver las mismas. Es decir, no me gustaba que se estuviese sintiendo mal for whatever reason, pero al menos me aliviaba saber que no sentía la necesidad de fingir sus reacciones. No creía que me estuviese diciendo toda la verdad, tampoco era tan estúpida, pero por el momento me bastaba con la respuesta que me había dado.

Asentí un par de veces con la cabeza, dejando salir un sonido de afirmación a la vez, y le sonreí con cierta emoción infantil al recibir su confirmación de que me acompañaría. Aproveché el momento antes de encaminarnos al interior del local para alzarme sobre mis puntillas y dejarle un beso sobre la mejilla, en un gesto que irónicamente podía resultar hasta inocente, y me enganché de su brazo libre mientras nos dirigíamos hacia la barra.

—It's alright~ Perdona si nos pasamos, anyways. No esperaba que Kitty Kat también viniese and well, I can get a lil' competitive sometimes... but I'll behave from now on! Pinky promise!

Ya se me estaban empezando a notar los efectos del alcohol en el cuerpo, con aquello de que se me estaba soltando la lengua y hablaba más en inglés que en japonés como siempre hacía cuando se me desconectaban las neuronas, pero no había mucho que hacerle. Por suerte, todos ahí éramos lo suficientemente internacionales como para que no resultase un gran problema de comunicación, porque de esos había tenido unos cuantos y prefería ni recordarlos.

>>Puedes pagarles las cervezas a esos dos, si quieres, de todas formas la mía me salió prácticamente gratis —contesté una vez llegamos a la barra, soltando el brazo del chico para permitir que se acomodase y hacer yo lo mismo también.

Llamé la atención del camarero en cuanto tuve la oportunidad, que afortunadamente resultó bastante pronto, y le pedí dos botellas más de cerveza aparte de una de tequila, junto a cuatro vasos de chupito. Cuando la orden estuvo realizada, giré de nuevo la cabeza para mirar a Jack y acabé por ladear la misma al caerme una pregunta que hacerle directamente del cielo.

>>¡Oye, Jackie! ¿Tú puedes salir a bailar sin el bastón, aunque sea un poquito? 'Cuz it's kinda a must for me and I wanted to dance with you!

 

Aguardé por la respuesta de Kat con la sonrisa pegada al rostro, y mentiría si dijera que no seguí cada uno de sus movimientos con una atención absoluta. A ver, era un tipo simple y ya llevaba algo de alcohol encima, no sentía particular interés por disimular la intensidad de mi mirada. Por otro lado, si ella reconocía sus dones o no era algo que me daba bastante igual. Tras regresar unos pocos centímetros la vi cruzarse de piernas, mi sonrisa se estiró apenas y volví a sus ojos. ¿Cachorro?

—Aprende rápido, así que no —resolví en un murmullo, alzando la cabeza para echar un vistazo más allá de Kat y regresar a ella—. Digo, si sobrevive a nosotros ¿por qué no sobreviviría a ti?

Aún no había quitado el brazo de su espaldar y honestamente dudaba hacerlo a menos que me dieran una muy, muy buena razón. Solté el aire por la nariz, notando que nos habíamos quedado sin alcohol, y la repasé de soslayo. ¿Esta loca no me había chupado el dedo para mandarse los cristales? Unos cuantos, para colmo. ¿Debería seguir sus pasos o esperar a... comprobar si el producto estaba en condiciones?

Eh, I wonder~

—Así que una oferta —retomé como si nada, removiéndome apenas, y con el brazo libre me arrastré el cabello hacia atrás junto a una respiración pesada que me cambió todo el aire de los pulmones. Suavicé la mirada, ladeando apenas la cabeza—. Hard to choose, Kitty Kat, es demasiado amplio. ¿Te gustaría recortar las opciones?

 

Su respuesta me aflojó una risa, no fue demasiado fuerte ni nada y comencé a balancear suavemente la pierna cruzada sobre la otra. Si había reparado en la forma en que me había referido a Jack poco importaba, además de que ya empezaba a sentir el cuerpo inquieto así que esas cosas me importaban todavía menos. Nada me detenía de decirlas, claro.

Me encogí de hombros cuando dijo lo de que si sobrevivía a ellos, por qué no sobrevivía a mí y digamos que llevaba cierta razón. Con todo podía decir que este par de estúpidos se metía a la gente al bolsillo con algo más de facilidad o, más bien, de forma algo más sutil de primera entrada. Sus personalidades eran igual de abrasivas una vez encontraban las sombras, pero a plena luz del día podían revolverse un poco mejor por alguna razón que escapa a mi comprensión.

—¿Recortar las opciones? Babe, ¿no te parece que es demasiado temprano para recortar opciones? —pregunté y esta vez sí me resbaló una risa algo más sonora, me descubrió los dientes de paso—. Todavía no estoy segura ni de qué se me antoja~

Ya estaba visto que andaba medio estúpida esa noche, así que solo le eché algo de mi peso encima aprovechando que el otro había pasado el brazo sobre el espaldar. Su cuerpo me resultó tibio, la realización de eso tan simple me amplió la sonrisa que había permanecido en mi rostro y mi mano encontró su muslo, nada muy loco todavía. Qué va, solo estaba haciendo el tonto.

 

La ilusión que se me plantó en el rostro tras escuchar la afirmativa de Jack tuvo que pecar un poco de infantil, pero sinceramente no podía importarme menos. Qué sabía yo, lo cierto era que hacía mucho que no salía con el simple objetivo de... salir a pasármelo bien, ¿y por qué no aprovecharlo ya que estábamos? Eso no implicaba que fuese a bajarle la intensidad al zorreo, pero hey, me venía de fábrica, no había mucho que pudiese hacer al respecto.

—Nonsense! Además, ni que estuviésemos en una competición, it's just for the funsies~

Y con eso quedaba decidido, pues. Más le valía no retractarse luego de sus palabras, ¡porque Alisha no olvidaba una promesa de baile! Solo le perdonaría si usaba alguna excusa con su pierna malita... o bueno, para qué mentirnos, seguramente le perdonaría sin más, solo porque a estas alturas parecía obvio que me sería muy difícil molestarme de verdad con un buenito como Jackie.

Asentí con la cabeza cuando mencionó lo de las bebidas y lo seguí, habiendo cogido por mi parte los cuatro vasitos de chupito. Dejé los mismos sobre la mesa, ignorando por completo la situación entre Kat y Joey, y cogí una de las botellas de cerveza de las manos de Jack, guiñándole el ojo con aire divertido. Me giré hacia el par de tortolitos y me incliné sobre la figura del moreno hasta alcanzar su oreja con mis labios, usando de excusa barata el botellín.

>>He's alright~ —le susurré, antes de erguirme como si nada—. Uy, ¿interrumpo algo? My bad~ —exclamé, con el arrepentimiento más falso que pude formular, y me dejé caer en el sofá contiguo con una sonrisa divertida.

Ya había dicho que era terrible para notar según qué reacciones ajenas, aquellas que no me interesaban especialmente para ser más concretos, pero había algo que era imposible que pasase desapercibido a mi atención, y eso era Joey. Pillé al vuelo su mirada, justo antes de haberme perdido entre la gente, y quizás no hubiese sido completamente planeado, pero no me costaba nada tranquilizarlo teniendo en cuenta que había podido hablar un poco con Jack, ¿verdad?

Y además, esos dos estaban tan cerca y sin mí, qué malos~

Le eché un vistazo a la zona de entrada mientras le daba un trago a la cerveza, con una especie de mal presentimiento lingering over me, y acabé por fruncir el ceño antes de centrarme de nuevo en mis acompañantes. Seguramente sería una estupidez a la que sería mejor no hacerle caso, síp.

>>I thought we could play something later... o beberlo así tal cual —informé, señalando el tequila con la punta de mi zapato—. I'm fine with both, honestly.