Historia larga Custodes hominum

Tema en 'Historias Abandonadas Originales' iniciado por El fénix ascendiente, 25 Septiembre 2019.

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    El fénix ascendiente

    El fénix ascendiente Entusiasta

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    Custodes hominum
    Clasificación:
    Para niños. 9 años y mayores
    Género:
    Aventura
    Total de capítulos:
    3
     
    Palabras:
    1619
    Prólogo: Nacidos bajo la misma estrella.

    Custodes hominum, es unos de los variados nombres que se conocía de una antigua sociedad, de guerreros exorcista, los cuales se encargaban de luchar contra los demonios y los sobrenatural, que amenazaban a la humanidad, no se sabe bien cuando surgieron, pero ya era reconocidos en la antigua Roma, he incluso muchos de los más connotados generales romanos, fueron partes de su filas, pero como era una sociedad misteriosa, las personas externas, intentaba darle un lugar de origen, muchos lo asociaron con los egipcios, otros le dieron orígenes griego, y achacaba su creación a los tiempos de Alejandro el Grande, rey de Macedonia, y otro más pro romanos, creía que la fundación de esta extraña sociedad, nació con los legendarios fundadores de Roma, Rómulo y Remo, había otros de esta misma línea, que creían que estos guerreros exorcista, fueron creado por el antiguo y desaparecido Reino de Troya, ya que los antiguos romanos, se consideraba en cierta forma descendientes de este reino.

    Los Custodes hominum, fueron bien conocidos tanto en la antigüedad y en la edad media, una de sus tantas extrañezas era que podía juntar gentes de otras religiones o culturas, también habían miembros de religiones olvidas y extintas, entre sus filas estaban incluidos supervivientes de cultura desaparecida.

    Los que mandaban esa sociedad, eran llamados los doces maestros, ellos eran lo más fuertes y experimentados, la mayoría eran algo viejo, pero había ciertas excepciones, ya que había demostrado gran experiencia, ellos podían elegir de dos a tres discípulos, aunque sólo uno de estos era el remplazo de su maestro, aunque los otros también podía hacerlo sí es que el remplazo, muriese, por mientras eran considerados parte de la élite, ya que fueron entrenado por un maestro de gran experiencia, también podía entrenar a futuras generaciones.

    Pero el miembro más respetado, y al cual los doces maestros, pedían consejos, era llamado el heraldo, y el era que lideraba a la organización, tomaba las grandes decisiones, y era la primera y las últimas palabras en las reuniones.

    Nos ubicamos en la edad media, dos bebés nacería con dos años de diferencias, pero bajo una misma estrella, y en dos continentes diferentes. Alessandro, nació en el ducado de Nápoles, el nació bastado, ya que su padre era unos de los noble de aquel ducado, su madre, era una simple campesina, pero que tenia una belleza que difícilmente se podía ignorar, eso es lo que atrajo al noble, a pesar que Alessandre, no fue reconocido por el noble, este se encargo de su tutela.

    Alessandre, era un niño de tez blanca, pelo negro y corto, tenía el corte de razón, y su cuerpo era de contestara delgada, ágil y sus ojos de color castaño claro, ya había pasado unos 5 años el infante Alessandre, demostró su gran habilidad con la espada, esto sorprendió a su padre, que para fortalecer sus habilidades con la espada, hizo que desde esa edad Alessandre, tomase más clases de esgrima, que de otras asignaturas, aunque también logró tener conocimientos de forma autodidacta, pero al año después, su habilidades, para ver demonios que estaba en forma incorpórea, se hicieron presentes, esto alertó a su padre, que primero pensó que eso era cosa del demonio, y envió la carta a un sacerdote amigo, el cual llegó varios días después junto con un sujeto, el cual llevaba puesto una túnica amarilla y una capucha del mismo color.

    —Gracias por venir, padre—El noble, agradeció al presente.
    —De nada, por cierto, este sujeto es de la sociedad de los Custodes hominum—Le respondió el sacerdote y agregó—Bien, para comprobar si es cierto que está poseído o que tal vez, una de las habilidades fundamentales, para entrar a los Custodes hominum.

    —¿Cómo probara eso? —Preguntó el noble con curiosidad.

    El tipo de túnica amarilla, sacó de sus ropajes un frasco el cual, estaba un poco quebrado, y le explicó al noble, que si Alejandro podía ver demonio en sí forma incorporea, entonces tenía la habilidad de ver a los seres que difícilmente se ve, y que ese frasco contenía un hada agresiva, que ha tratado de escapar varias ocasiones, pero como estaba en forma incorpórea, los ojos comunes, no podía apreciarlos, solo podían verlo aquellos que había obtenido la habilidad de ver a las criatura en formas incorpórea.

    —Si el niño ve la hada, es que debe ser parte de la sociedad, así que me adelantar y le pediré permiso para poder llevarme al niño—Le comento el sujeto encapuchado al noble.

    Después de pensarlo un poco, el noble aceptó la propuesta del sujeto, así que los tres, fueron a la sala de entrenamiento, en donde se veía al niño Alessandre, practicando con una espada de madera.

    —He muchacho, ¿Qué ves en este frasco? —Preguntó el encapuchado a Alessandre, mientras se iba a acercando, con el frasco en su manos.

    Alessandre, obedeció al encapuchado y observó el frasco, vio con cierta curiosidad y miedo que adentro de aquel recipiente de vidrio, había una extraña criatura, de cuerpo pequeño, y tan delgada que precia un esqueleto, su piel era media grisácea, tenía dos ojos pequeños a cada lado de su cabeza, su boca era la mitad de su cara, tenía unas alas que parecía media rota, dos brazos delgados que daba la sensación de repulsión, dos manos negras que parecía tener solo dos a tres dedos, la criatura tenía cuatro pies, dos adelante y dos atrás

    El niño reaccionó a esa criatura, sin mucho miedo, el sujeto, guardo el frasco y comprobó, que él niño, había desarrollado la habilidad de ver a seres como el hada.

    —Serás un perfecto miembro de la sociedad—El sujeto de la túnica acarició el pelo del muchacho, aprobando su acceso.

    En la misma fecha, pero dos años después de nacimiento de Alessandre, nació en las tierras que antiguamente veneraban al disco solar Ra, y al juez de los muertos y señor del inframundo, Horus, y que ahora veneraban al dios Ala, una pequeña niña, que por alguna extraña razón, fue abandonada en la sabana africana, en donde se esperase que muriese, pero por un milagro, fue rescatada por una banda de leones, los cuales criaron a la niña, como parte de su manada, así estuvo hasta los seis años, cuando fue recogida por un grupo de nómades beduino.
    Los beduinos, la civilizaron un poco, ya que aún que mantenía una actitud salvaje, se comportaba como aquellos felinos de gran tamaño, con que convivió, también aprendió a hablar, a leer y escribir, incluso aprendió a tallar madera, lo cual le sirvió para hacerse una máscara, la cual tenía la forma de la cara de una leona.

    Después de tres años, viviendo con los beduinos, ella se escapó a una de las ciudadelas egipcias, en donde empezó a vivir en la calles, después de algunos meses, ella fue conocida como labiwa, por su comportamiento, además porque siempre ocultaba su rostro con la máscara de leona, el extraño comportamiento de la muchacha consistía en pelearse con los demás animales, atacar a puestos que vendían alimentos, para poder comer y por su máscara de Leona.

    Entonces después de varios meses, una sacerdotisa de viejo culto a Ra y sus dioses, apareció por la ciudad, para comprar víveres, mientras estaba comprando en los mercados, se encontró con, Labiwa, la cual le había quitado su canasta con alimento.

    —Oye, esa es mi canasta—Exclamo la sacerdotisa, molesta con la chica.
    —Ahora esta canasta, ser mía—Labiwa, observó a la sacerdotisa.

    La sacerdotisa, observó fijamente a Labiwa, y le pareció que la muchacha tenía un cierto don, a pesar de ser una salvaje, así que quiso convertirla en una sacerdotisa para su templo escondido.

    —Tranquila, muchacha—La sacerdotisa, se acercó a labiwa, se agachó y le ofreció la mano, pero la muchacha, se la mordió, como naturalmente lo hacía con la persona que quería adoptarla, pero se sorprendió al ver que la sacerdotisa, solo le sonreía, no se alejaban, como otras personas.

    La muchacha, tuvo que dejar de morderla y la observó con cierta curiosidad, se preguntó, ¿quién era esta persona, de sonrisa amable?.

    —Sabes, a pesar de tu comportamiento, eres una buena chica—le sonrío la sacerdotisa a la chica, y luego, sin que Labiwa, lo impidiese, le sacó la máscara, revelando a una pequeña niña, de piel tersa y liza, de color de piel morena y un poco rojiza, pelo lizo y desordenado, que le llegaba hasta el cuello, ojos verdes oscuros, su cara era bella.

    —Sabes, eres bella, ¿quieres ser sacerdotisa? —la mujer, le pregunto a la mucha.

    Sin pensarlo, la muchacha acepto ser parte de las sacerdotisa del culto a los antiguos dioses, entonces ambas, se fueron hasta un templo, la chica, se quedó asombrada por los grandes muros de aquel lugar.

    En aquel templo, le senñaron sobre ser una sacerdotisa, historia y leyenda de los antiguos egipcios, los rituales que debía efectuar, el significado de varios símbolos, a parte de escribir en con jeroglíficos, y entenderlos, entre otras cosas que debía aprender una sacerdotisa, en aquel templo, le enseñaron hablar bien, también ha hacer maquillaje como los antiguos, entre otras variedades de enseñanzas, se iba notando que la chica, progresan a rápido, y que su temperamento salvaje, se había cambiado a uno más controlado, pronto Lawiba, se olvidó de su pasado de salvaje, y le pusieron un nombre más egipcio, entonces fue bautizada como Sacmis.

    La vida de Sacmis, fue tranquila en el templo, hasta que tuvo 15 años, ya para entonces había crecido, su pelo era más largo y lo mantenía ordenado, su cuerpo era esbelto, sus pierna atléticas, y fue en aquellos años, en que conoció a Alessandre y a la orden.
     
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    Hola holas~ Paso a comentar el cap.

    La base de la historia me gustó, me recordó a la leyenda de Van Helsing, aunque la sentí muy apresurada. Creo que fácilmente se podría haber hablado un poco más de cada escena como para conocer mejor la niñez de Alessandre y Sacmis, en vez de solo mencionar algunos episodios de su niñez. Aunque de todas formas, es algo que puede pasar si la idea era dar solo un vistazo rápido y profundizar en otro momento.

    Algunos aspectos de la trama que me llamaron la atención fueron la existencia del heraldo, la habilidad con la espada de Alessandre y la transformación de Labiwa a Sacmis.

    ¿No se suponía que eran los doce maestros quienes mandaban a los Custodes Hominum? Porque si el heraldo es quien tiene la primera y última palabra de lo que hace la sociedad, más que un consejero es el verdadero líder de la sociedad, y los doce maestros en realidad son generales de alto rango, una relación tipo Papa-cardenales o similar.

    La verdad yo también quedaría sorprendido si un infante de contextura delgada y de cinco años demuestra tener habilidades con la espada jaja. Imagino que para alguien con esa apariencia y con clases de esgrima, el tipo de armas con las que tendría mayor afinidad serían los estoques, las espadas cortas, los cuchillos y/o las dagas, porque las espadas convencionales requieren un mínimo de fuerza o contextura robusta para usarlas con destreza.

    Dejando de lado lo poco común que es que una salvaje llegue a ser un perfecto modelo civilizado en poco tiempo, espero que Sacmis no olvide su pasado como Labiwa. Si fue parte de su infancia, es parte de su identidad. De hecho sería muy interesante como desarrollo de personaje ver cómo Sacmis se debate en una lucha interna por no retornar a sus hábitos animales con tal de ser la sacerdotisa que esperan que sea.

    Como nota aparte, deberías cuidar los errores ortográficos y el abuso de las comas. Algunas son innecesarias y otras podrían cambiarse por puntos seguidos para volver la lectura mucho más fluida.

    Esop. Nos vemos en otro momento~
     
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    Gracia por tu comentario, y por tus consejos, de hecho esta historia es un recomienzo de una vieja historia que había escrito hacia dos años atrás, así que espero a ver mejorado por lo menos un poco la trama.

    Si me apresure un poco en la historias, fue puesto que más adelante quiero profundizar un poco sobre la infancia de estos dos personajes, los de las comas irrelevantes, siempre he tenido problemas con estos, he tratado de bajar la cantidad coma, leyendo y poniendo las comas en donde me falta el aire, sobre el heraldo y los 12 maestros, la idea es sacada de la biblia, los maestro representa a los apóstol, y el heraldo a Jesús, ademas también representa otras leyendas paganas y también leyendas que surgieron en el medievo, el Rey Arturo y la mesa redonda. Bueno digamos que es como tu lo plantea, o sea el heraldo, hace de líder y los maestros son los generales, estos 13 miembros, son los que dirige la organización, el heraldo, tiene aquella posiciones por sabiduría y antigüedad, por respeto de los maestro hacia el heraldo, es que el primera y ultima palabra, ademas de ser el que da consejo a los maestros.

    Sobre Sacmis, esta basada en una diosa egipcia (Soy fanático de esa civilización civilización y de la Sumiera ) , la hija primogénita de Ra, la cual fue utilizada por el dios que le dio una mascara de Leona, esto para crear un gran masacre entre los humanos, puesto que ellos no respetaban a Ra, cuando el divino se dio cuenta, que su hija ya había causado mucho desastre, la paro y la volvió menos salvaje.

    Sacmis, aunque este más civilizada, aun es algo salvaje, en futuros episodio tratare de describir unos cuantos comportamiento, y que hay veces que habla en tercera persona.

    De nuevo gracias, por tu comentario y consejo.
     
    Última edición: 25 Septiembre 2019
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    El incidente de Alejandría

    En la ciudad de Alejandría, una de la más importante ciudades de Egipto, fundada en los tiempo que Alejandro Magno, se alzaba como faraón de un Egipto que ya siglos atrás, había perdido su esplendor, talvez abandonado por los dioses que los antiguos habitantes , y que había sido conquistado por innumerable civilizaciones las cuales llegaron ser de igual importancia que el reino conquistado para la humanidad.

    Una casa de la ciudad de Alejandro, el conquistador, era sitio de un extraño suceso estaba ocurriendo, unos extraño seres, había irrumpido en la morada, éstas criaturas llevaban puestas unas vendas pútridas en todo su cuerpo, las cuales expulsaban un mal olor que inundaba todo el lugar. La aparición de estas criaturas, asustaron a los habitantes de la casas, los cuales sin saber que hacer, se escondieron en un cuarto de la casa.

    Las momias, iba tras los dueño de aquella pequeña morada. Los dueño, temblaba de miedo en su pequeño escondite, creyendo que esto iba a pasar, pero no sucedió lo que ellos creían, en cambio el grupo de momia, lograron romper la contención de los habitantes de lugar, y entraron al cuarto en donde se encontraba la pareja, que al ver a esas criaturas, y sin escapatoria, rezaron a Ala por la salvación de sus almas.

    A la mañana siguiente la casa estaba vacía, y en una habitación había dos cuerpo en una avanzada descomposición, estos estaban en una posición de rezo. Los curiosos vecinos al ver que había dos cuerpo en aquella casa, y preocupado llamaron a una sacerdotisa de la religión antigua del país.

    Ya era media tarde, cuando apareció en la ciudad la sacerdotisa que había sido llamada para investigar el tema, junto a ella, se encontraba Sarcmis, la cual ya tenía sus 15 años de edad, de cierta forma había dominado su yo del pasado, pero había veces que aquella personalizada, poseía el cuerpo de la joven, pero era controlada por la sacerdotisa superiora.

    La vestimenta de las dos sacerdotisa, era la misma ambas vestían con vestía con el uniforme que la representa sentaban como parte de una religión casi extinta, también llevaba un colgante que terminaba en un anj o cruz egipcia, el símbolo que significaba la vida en su antigua religión. La joven Sarcsmis, tenía pintura de ojos de color negro con el estilo egipcio, además su cabello, lo tenía hasta la mitad de su espada, y lo tenía adornado con piedras azules.

    La gente del lugar al ver a las dos sacerdotisa, susurraron rumores erróneos sobre aquellas sacerdotisas. Pará los habitante de la ciudad la religión, practicada por las dos recién llegadas, era pagano y mal encaminado, pero necesitaban de estas personas para resolver ciertos problemas, que ellos no podían.

    Las sacerdotisas, fueron recibidas por la persona que le había llamado, y guio a las chicas hasta el lugar que había sido escenario de una puerta para normal. Cuando la sacerdotisas entraron a la casa, sintieron una fuerte presencia. Sarcsmis, al entrar en la casa se dio cuenta que había algo raro en aquel lugar, la atmósfera del lugar era muy densa y la cabeza de la joven sacerdotisa, daba vuelta, además se sumaba el hecho que sentía cierta inquietud en su interior.

    -Salve, oh señor RA dios de los Rayos de oro-Recitó la joven sacerdotisa, mientras sujetaba el anj de su colgante, para poder tranquilizar la sensación interna que tenían y mirando a su superiora le comento-Sarcsmis, sentir una fuerza oscura en este lugar.

    -Veo que también lo has notado-La sacerdotisa, le dijo a Sarcsmis-Tus habilidades de detección, están progresando.

    -Ser una rara sensación, es un espíritu violento y lleno de una maldad vengativa-Le comento Sarcsmis a su superiora y agrego-Pero a pesar de su fuerte presencia en este sitio, su verdadera presencia se siente en otro sitio.

    La superior, miró a la más joven de su sacerdotisas, ella había hecho grandes progresos en lo referente al sentir la presencia de lo oculto. La joven sacerdotisa, empezó a olfatear el ambiente.

    -Ser una presencia , que molesta a Sarcsmis, no ser agradable-La joven sacerdotisa, olfateo una sala de la casa y agrego-La fuerza, tener mayor presencia en este lugar.

    La superior, entró a la habitación en donde se sentía una fuerte precia y tocó un pedestal de madera, y cerró sus ojos.

    -Veo que el dueño de este sitio, se dedicaba al saqueo de tumbas, y sin saberlo libero un gran mal, que lo terminó matando-comento la sacerdotisa, y agrego-Haré un ritual para calmar los espíritus de este lugar, pero la fuerza mayor es mejor dejarla a cargo de unos antiguos conocidos.

    Alessandre, ya tenía unos 17 años de edad, su cuerpo había cambiado por el paso de los años, era un poco más alto que el promedio de las personas como el, su pelo había crecido hasta llegar a la barbilla, tenía varias cicatrices en su rostro, la más imponente era una que comenzaba debajo de su ojo izquierdo y terminaba cerca de su boca, cuales daba evidencias de las diversas luchas contra entidades que amenazaban a la raza humana, en las cuales el ha participado.

    El joven Alessandre, llevaba puesto una camisa blanca, un pantalón negro, unas bota de cuerno café claro, además traía puesto unos guantes de cuero café oscuro, además de una capa de capa azul, la cual estaba combinada con una capucha del mismo.

    En los campos de entrenamiento del Custodem huminun, el muchacho Alessandre, estaba en un duelo de entrenamiento, su oponente era su maestro, un sujeto de torso plano y rectangular, tez blanca, era pelirrojo, su pelo le tapaba las orejas, la cara del maestro, tenía varias arrugas, también se le notaba rastro de luchas importantes, más profundo que la de su aprendiz, llevaba puesta una armadura plateada y encima llevaba una túnica amarilla.

    -Veo que has mejorado-El maestro, le dijo a su discípulo.

    -Claro, y todo es gracia a usted, maestro-agradeció Alessandre a su maestro, mientras chocaba su gladius con la espada de su maestro.

    -Mmm, eres bueno, pero aún te falta conocer los trucos-El maestro, hizo una barrida y esto provocó que Alessandre, cayese al suelo.

    El maestro, apuntó su espada a Alessandre, que estaba caído, el sujeto de la túnica, sonrió y enfundo su espada, luego ofreció su mano para que su discípulo se apoyase en ella, y poder levantarse.

    -Eso fue un poco sucio, maestro-le reclamo Alessandre a su maestro, mientras se paraba.

    -Es supervivencia de batalla, tu sabes por experiencia que en una batalla, nuca hay honor y no se aprecia la justicia, los reyes pelean con otros reyes, sólo por tener más poder, influencia y más tierra, con esas convicciones se formará el nuevo imperio y se formó el imperio Carolingio-le comento el maestro a Alessandre.

    -Entiendo-Alessandre, que enfundo su arma y suspiro hondo, mientras se rascaba su nuca y pensaba, «Aún no puedo ganar a mi maestro»

    En ese momento, se escucho que alguien entraba al cuarto de entrenamiento, tanto maestro como aprendiz, miraron a la persona que había entrado, era el mensajero de la organización.

    -Un mensaje del heraldo-El mensajero, le entregó al maestro un pergamino.

    El mensajero, después de entregar su mensaje, se fue de la habitación. El maestro, abrió el pergamino, para poder leerlo.

    -¿Una reunión de los 12?-pregunto el joven Alessandre a su maestro.

    -No, el heraldo nos necesita, para darnos una misión-el maestro, enrollo el pergamino y miró su discípulo-Bueno, no debemos hacer esperar al heraldo.

    Los dos guardianes, salieron de la habitación y caminaron por los pasillos, el cual era abierto, y se podía observar el jardín y la fuerte lluvia que caía ese día.

    Cuando estaban llegando a la puerta de la habitación, una persona de túnica y capucha verdes, los estaba esperando al lado de la puerta, esa persona, tenía su espalda apoyada en la pared, y sus brazos lo tenía cruzado.

    -Veo que también los citaron -una voz fémina salía de la persona de túnica verde-¿Cómo están, Alano y Alessandre?.

    -Mejor que tu, parece, ¿he, Zafira? -Alano, le contesto a la mujer y le pregunto-¿Aun no estas acostumbrada al clima?.

    -Sabes que vengo del desierto-Zafira, se quito su capucha, revelando a una joven mujer de piel media morena, ojos verdes oscuros, pelo largo de color negro, el cual le llegaba hasta la mitad de su espalda y le tapaba las orejas.

    Zafira, la más joven del círculo, tiene unos 25 años de edad. Cuando la joven tenía 13 años, tuvo que escapar de su casa, cuando supo que había sido comprometida con un rico mercader, que era conocido por tener varias mujeres, y también por tener ciertos deseos carnales inmorales que satisfacía con sus esposas secundarias, en el viaje conoció a un grupo de mercenarios Bereberes, los cuales acogieron a la Zafira, y la trataron como parte de sus tropas y le enseñaron a pelear.

    Unos de los señores de Al-Ándalus, contrato a la tropa mercenaria en la cual estaba en listada Zafira. En el sultanato independiente de aquellas tierra, fue que Zafira, tuvo contacto con los Custodem, y esto fue cuando en una batalla contra unos rebeldes cristianos, los mercenarios, se enfrentaron sin quererlo a un gran demonio, que eliminó a casi todos los combatiente, la única sobreviviente fue Zafira, que se enfrentó al extraño ser , y casi ganó el combate, pero su oponente era más fuerte y la derrotó, pero antes de que la criatura, matase a la chica, fue salvada por unos de los miembros del círculo, que eliminó al demonio, y al ver lo fuerte que era Zafira, decidió tomarla como su pupilo.

    Zafira, impresionó tanto a los guardianes, que después de la muerte de su maestro, formó parte del círculo, remplazando a su maestro, y esto sólo a la edad de 20 años.

    Después de algunas conversaciones, el trío, entraron a la sala para hablar con él heraldo.
     

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