Nota: Inspiraste estos pequeños cortos de nuestros bebés. Hace mucho que no escribía de ellos, pero releer lo de tu blog me hizo pensar en esto. Y supongo que también lo de leer After y a Hardín (? Es una mini colección de mini drabbles rhapsodic I. Sus orbes similares al hielo estaban empañados de recuerdos. Recuerdos de sus dedos entre sus cabellos. Recuerdos de su voz arrullandolo molestamente hasta quedarse dormido. Recuerdos de sus labios, de su piel. Recuerdos de sus caprichos y exigencias. Recuerdos de sus gemidos y sus orgasmos. Pero no más que eso, recuerdos. En pasado. La mujer en la que sus ojos estaban clavados era una completa extraña para él. Aunque tuviese el mismo cabello negro y perfecto, aunque sus labios seguían pintados de exótico carmín o que sus piernas estuviesen escasamente cubiertas en esas excitantes falditas, aunque ella también respondiera al nombre de Juliett. Ya no era su Juliett. Había dejado de serlo el día en que el demonio de la ira tomó el control y ella no quiso perdonarlo. Quizás todavía él mismo no se había perdonado.
LO SIENTO PERO TÚ TIENES QUE EXTENDER ESTO OBVIO. Me había olvidado que originalmente Nate tenía problemas de ira. Y aunque estoy segura de que una de las razones por las que Juliett lo encontró irresistible fue precisamente porque Nate es inestable; también estoy segura de que Juliett le pondría un fin a todo si Nate se pasa. Ahora, ¿qué habría hecho Nate para que Juliett se rindiera? Me encantó ♥ quiero más pls.
II. —Sólo aléjate de ella, no me gusta repetir las cosas —gruñó, tomando al chico de su elegante cuello y pegándolo contra la pared. Parecía estar a punto de llorar, ¿acaso un aniñado como ese podría compartir su cama, satisfacerla?— Y si le dices algo de esto, te cortaré en pedacitos. Y si la haces llorar mientras la dejas créeme que te encontraré a donde quieras que vayas y te mataré, mocoso. La amenaza quedó allí en el aire, mientras el chico asentía al borde de las lágrimas. Nate lo soltó y lo observó correr hacia la luz y seguridad de la calle. Sonrió para sí mismo, alguien como él no la merecía. Sabía que él no la merecía, pero los demás tampoco. Así que se encargaría de alejar sus sucias manos de ella. Había sido fácil seguirla, ser su sombra. Protegerla, como un ave en una jaula de cristal. Sabía que Juliett se enojaría un poco cuando se enterara que había corrido a cada hombre detrás de ella durante estos cinco años separados, pero, no podía evitarlo. No estaba aún listo para entregarla, quizás nunca lo estuviera.
¿Qué es lo que pasa con los hombres tuyos y su inhabilidad para expresar sus sentimientos y buscar perdón de una forma sana y beneficiosa para ambas partes, mrc? Sigo con la duda de qué hizo Nate exactamente para que Juliett no quiera ni verlo en pintura. O sea tuvo que ser algo MUY malo y en lo que se entere que Nate ha pasado años espantándole a los pretendientes menos lo va a perdonar... creo. Csm.
