One-shot de Inuyasha - Mi mundo (inuyashaXkagome)

Tema en 'Inuyasha, Ranma y Rinne' iniciado por Emi Ringo, 23 Noviembre 2010.

Estado del tema:
No se permiten más respuestas.
  1.  
    Emi Ringo

    Emi Ringo Guest

    Título:
    Mi mundo (inuyashaXkagome)
    Clasificación:
    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    1558
    Pequeño relato sobre un momento tierno e íntimo entre Inuyasha y Kagome tras su regreso al Japón feudal.

    ~ Mi mundo ~

    El cielo de esa noche estaba repleto de estrellas, estrellas que junto a la luna iluminaban tenuemente los bosques cercanos a una aldea. Parte de esa luz débil y blanquecina caía sobre el gigantesco árbol sagrado donde una vez una chica había encontrado a un chico sellado.

    —El árbol Goshimboku —murmuró Kagome acercándose a éste para tocar su gruesa corteza—… ¿recuerdas el día que nos conocimos?

    — ¿Cómo no recordarlo? Desperté y te vi ahí tirada, completamente indefensa —contestó Inuyasha caminando hacia la joven cruzado de brazos—. Si yo no te hubiera ayudado, no estaríamos hablando en estos momentos.

    —Cierto. —Lanzó una pequeña carcajada reviviendo ese día en su memoria. Ya habían pasado tres años.

    Kagome se sentó en una de las sobresalientes raíces del árbol e invitó a Inuyasha a que la acompañara. Éste, sonriendo, fue con gusto a su lado. Desde ese lugar, ambos alzaron sus rostros y contemplaron el hermoso cielo ante ellos.

    En cierto momento, la joven se acercó más al hanyou y sus brazos se rozaron haciendo que un cálido sentimiento apareciera en el pecho de Kagome. Cómo había extrañado esos momentos durante su estadía en aquel mundo que alguna vez llamó suyo... pero no,ya no. Ese día, horas atrás, había comprendido que su mundo estaba junto a Inuyasha.

    —No te arrepientes de tu decisión, ¿verdad? —preguntó Inuyasha aún de brazos cruzados y con la mirada fija en las estrellas.

    —Claro que no —contestó rápidamente.

    Repentinamente, Kagome se puso de pie y dio una pequeña vuelta mirando la vestimenta que llevaba puesta: una chaqueta de amplias mangas blanca y una hakama roja que entallaba bien su cadera.

    —Hacía tanto tiempo que no usaba esta ropa. Me queda bien, ¿no te parece? —sonrió haciendo una pose de las modelos de su época.

    —Te queda bien, pero deja de hacer cosas extrañas. Pareces idiota.

    —Y pensar que esto en la otra época es considerado sexy… —murmuró mirando para otro lado desilusionada.

    —Cambiando de tema, ahora serás una sacerdotisa, ¿verdad? —preguntó Inuyasha poniéndose de pie mientras se quitaba el polvo de la parte trasera de su hakama.

    —Algo así.

    — ¿Cómo que algo así?

    —Yo tengo pensado ayudar a la anciana Kaede, pero… hay cosas que no podría hacer si soy una verdadera sacerdotisa —habló Kagome poniéndose toda colorada.

    — ¿Qué? No entendí nada, habla claro—exigió acercándose a la joven.

    Cuando Kagome vio a Inuyasha avanzar hacia ella, quiso retroceder un paso para que no notara su expresión ruborizada, pero su pie terminó topándose con otra de las ramificaciones del árbol sagrado provocando que perdiera el equilibrio y cayera al suelo.

    —Auch.

    —Serás tonta —dijo Inuyasha agachándose y ofreciendo su mano para ayudarla.

    Kagome aceptó la ayuda y apoyó su mano sobre la del hanyou. En el instante en que sus pieles se tocaron, la joven se dio cuenta de lo tanto que había extrañado ese contacto con Inuyasha. Volver a sentir esas manos fuertes y cálidas ayudándola y confortándola era algo que provocaba que su corazón palpitara fuertemente. Sí, sin duda su mundo era Inuyasha.

    — ¿Por qué aprietas y desaprietas mi mano? —preguntó Inuyasha aún agachado y mirando confusamente a la muchacha que también seguía sentada en el suelo.

    —Inuyasha… dime, ¿me extrañaste?

    — ¡Pero serás tonta!

    — ¡Oye!

    — ¡Tres años! ¡Fueron tres años, Kagome! Creí que estaba loco cuando sentí tu presencia en el pozo —explicó Inuyasha llevando la mano de Kagome contra su pecho salvajemente —. Yo… yo…

    Las emociones que se juntaron en el pecho del muchacho le impidieron seguir hablando. Él pensó que nunca más la volvería a ver. Pensó que en el instante en que el pozo dejó de funcionar, jamás volvería a ver, a oír y a oler a Kagome. Sintió tanta impotencia, tanta desolación… si no hubiera sido por la compañía de Miroku, Sango y Shippo, quién sabe dónde estaría en esos momentos. La había extrañado tanto.

    Abruptamente, Inuyasha envolvió a Kagome en sus brazos provocando que un gritito de asombro saliera de la boca de la joven. Ese abrazo fue tan intenso o más que el que le había dado cuando la fue a buscar al pozo.

    —Inuyasha… perdón por hacerte una pregunta tan estúpida —se disculpó apretando su cuerpo contra el del muchacho.

    —Estás perdonada —murmuró escondido en el cuello de la joven.

    Después de algunos segundos, Kagome apoyó sus manos sobre los hombros de Inuyasha y lo fue alejando de ella. Él la miró con una expresión imprecisa.

    —Inuyasha… —volvió a murmurar Kagome y antes de que el hanyou pudiera preguntar algo, se acercó al rostro de éste y terminó apoyando sus labios contra los de él.

    Fue un beso cálido, seco y corto. Cuando los dos volvieron a quedar enfrentados, automáticamente sus miradas se dirigieron a los labios del otro. Ese beso tan corto y tan cálido se había sentido demasiado bien. En los cuerpos de ambos, cuando sus labios se tocaron, corrió una especie de cosquilleo tan placentero que al irse separando inmediatamente un sentimiento de ansiedad los abordó. Querían más.

    —Inuyasha… yo-

    El hanyou no la dejó terminar de hablar ya que se abalanzó contra ella e hizo que sus labios volvieran a unirse apasionadamente.

    Acostados contra los pastizales que rodeaban al árbol, los dos jóvenes se besaron continuamente. Ya el beso no era corto, no era seco, no era cálido. Todos esos sentimientos que los dos conocían, pero que nunca habían expresado directamente, estaban siendo expresados en aquel desesperado, fogoso y húmedo beso.

    Más, más, más. Los dos querían más.

    —Espera, Kagome —habló Inuyasha con la respiración entrecortada y subiéndose la manga de su chaqueta de fuego que Kagome había bajado—. No podemos, tú eres una sacerdotisa, tus poderes…

    La joven apoyó delicadamente un dedo sobre los labios de Inuyasha.

    —Por eso te dije que yo seré algo así como una sacerdotisa —explicó ruborizada.

    — ¿Y si pierdes los poderes?

    —El amor jamás me hará perderlos, yo diría que me volverá más fuerte —dijo envolviendo sus brazos alrededor del cuello de Inuyasha—. ¿Seguimos?

    —Por supuesto que sí... —murmuró contra los sabrosos labios de Kagome.

    Los besos, las caricias y los manoseos que se daban eran desesperados y algo torpes, pero estaban llenos de amor. En cada uno de ellos se expresaba desesos, el deseo de jamás volver a separarse y el deseo de ser uno solo.

    En cierto momento, ya desnuda y con Inuyasha explorando su cuerpo, Kagome abrió los ojos y se encontró con el hermoso cielo del mundo feudal. Acostada contra los pastizales, iluminada por la luz blanquecina de la luna y las estrellas, Kagome volvió a comprender que ese mundo feudal era su mundo.

    —Estoy en casa…

    Fin

    ¡Hola! Soy Emi Ringo. Espero que hayan disfrutado este one-shot que escribí hace dos días atrás.

    La idea me vino a la mente cuando volví a releer el último capítulo del manga. En ese capítulo todos sabemos que Kagome le grita a Sesshoumaru "Onii-san", dándonos a entender que ella se había vuelto parte de la familia. Entonces, ahí fue cuando se me ocurrió hacer este one-shot, del momento en que Inuyasha y Kagome se vuelven oficialmente algo más que amigos.

    Bueno, espero que lo hayan disfrutado.

    Emi Ringo
     
  2.  
    Sumi Chan

    Sumi Chan Usuario común

    Cáncer
    Miembro desde:
    11 Junio 2008
    Mensajes:
    379
    Pluma de
    Escritora
    Jo, lindura aunque no sé...xD me sonroje jojo pillina me perviertes xD fue inocente pero me justo y mucho. Que buena expectativa tienes al final del manga yo también me hice esperanzas cuando gritó eso Kagome. Bueno, tu narracion me gustó mucho bastante...Bonita un poco descriptiva de todo aunque siendote sincera cometiste un pco de OoC en Inuaysha pero nada más, a veces nsotros mismas tenemsoq ue poner ciertos retoque es Inuyasha xD
    ;)
     
  3.  
    Kai

    Kai Usuario VIP

    Géminis
    Miembro desde:
    10 Abril 2010
    Mensajes:
    2,466
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    AHHHHHH....
    hola...como te presentar es por se nueva o yo estoy loca - lo mas probable-
    Me encantó...tan lindo...me sonrije a mas no poder....
    La narración me entretuvo mucho me atrapo desde el momento que empezó me emociene mucho....
    Adodro la manera tierna en que pusiste a Inu, es verdad su personalidad en si es muy seca. Concuerdo con Kicsu hay que darle un empujonsito...
    Sin mas me despido. Sayo.
     
Estado del tema:
No se permiten más respuestas.

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso