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  1. Hoy, en mi primer día de Universidad me acabo de dar cuenta hasta que punto pueden ser crueles las personas.

    Como la mayoría, transborde un camión para llegar a mi hogar, sin embargo por ser horas de la noche, en un lugar donde la gente transita más, los autobuses iban llenos.

    "No me preocupaba ir de pie por dos horas, quizá la gente que esta sentada necesita ese lugar más que yo" Me dije ya que siempre suelo ver el lado positivo de las cosas. Miré a mi alrededor: En efecto, la mayoría de las personas eran ya mayores de edad. Sin embargo, la persona delante de mi solo tenía unos 30 años a lo mucho (a mi parecer estas personas tienen buena resistencia para aguantar un viaje de dos horas a pie), cosa que ignoré en un principio, me preocupaba más que las personas siguieran subiendo considerando que yo iba muy apretada.

    A mí lado, un señor de edad ya avanzada (aproximadamente 60-70 años) miraba de un lado a otro, quizás esperando a que alguien le cediera su lugar.

    Lo miré y le sonreí, el me devolvió la sonrisa y regreso la vista al frente, al hombre de 30 años. Con el tono más amable que se puedan imaginar le preguntó:

    "¿Me puedes dar tu lugar? Vengo de lejos y enserio estoy muy cansado, no creo aguantar"
    Éste le regresó la mirada molesto y el muy cínico contestó:

    "No invente señor, con lo que a uno le cuesta agarrar lugar y usted viene a pedir esto"
    El pobre se quedo callado, yo por mi parte le lancé una mirada de "muérase" que ignoró plácidamente. El camión comenzó a avanzar y el infeliz se quedo dormido a sus anchas, el señor a mi lado se tuvo que recorrer hacia atrás para poder recargarse en la puerta.


    Sí, abrí los ojos.



    Ya sabía yo que la crueldad de la gente era increíble pero esto...esto superó mis límites y aunque sé que me desahogo y hasta cierto punto me quejo, sé que debería hacer algo, pero ¿alguien podría decirme qué?

    ¿Le hubiera gritado al señor?, ¿de qué sirve si iba a seguir con la misma actitud fuese quién fuese?
    ¿Se llevaba el remordimiento en su cabeza? Si dijo algo así a un pobre señor, ¿creen que tenga conciencia?

    Solo puedo decir una cosa. Las personas no dejan de sorprenderme ya sea para bien o para mal.


    Buen@s días, tardes o noches.
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  2. Siempre solemos criticar lo que los demás nos dicen. Ellos nos dan su idea, pensamiento, comentario o nos piden ayuda sobre un tema en especifico y es aquí donde formulamos miles de opiniones acerca de la situación que nos plantean. ¿Cómo responder a lo que me pide, a lo que me dice?​
    En ocasiones, lo que decimos no siempre es correcto o necesario. Las palabras tiene gran poder, con cuestión de pocas podemos lastimar o herir a la otra persona ya sea con intención o sin ella.
    Por eso, antes de decir algo a alguien, tienes que hacerte 3 preguntas:

    1.- ¿Es verdad o no?
    2.- ¿Es necesario decirlo o no?
    3.- ¿Es amable lo que voy a decir o no?
    Con estas tres simples preguntas, podremos comentar de manera pertinente sobre cualquier tema.
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