Color
Color de fondo
Imagen de fondo
Color del borde
Fuente
Tamaño
  1. [​IMG]


    Hubo una época a escala de la vida humana no tan lejana a la nuestro en la que existió un niño que luego se hizo hombre llamado Angel, niño que jugaba entre los campos con tal libertad que era imposible atraparlo, su curiosidad no tenía limites humanos, sus ojos eran tan grandes que eran capaz de ver enormes campos de muchos cultivos y grandes árboles a distancias exorbitantes. Corría entre la vida y los cultivos sin darse cuenta de que su único enemigo sería el tiempo…

    He aquí la historia de un hombre que no tenía una relación consigo mismo, un hombre que no era capaz de abrasarse a sí mismo y que encontró el mejor escudo contra su soledad que jamás habría existido… mientras todo eso sucedía las águilas volaban tan alto que desde el campo de girasoles nadie las alcanzaba a ver.

    Esta historia comienza con él primer recuerdo del niño, pues desde aquél momento comienza una vida en la conciencia de Angel. Su madre había salido a cazar para los dos, había pasado largo tiempo fuera de la cueva en la que vivían y cuando regresó Angel estaba cerca de un lago jugando con sus amigos. Al verla corrió tanto, tanto y sintió tanta alegría que casi desmayó de la emoción, la abrazó tan fuerte como nunca nadie había abrazado a otra persona.

    Poco a poco entre la vida y la experiencia nuestro pequeño Angel iba construyéndose a sí mismo un montón de cicatrices de los duros golpes que se daba cuando saltaba mal, de las cortadas que le aparecían cuando corría por campos de rosas espinadas, de las veces que los arboles habían dejado caer sus ramas justo en el momento en que el pasaba.

    Se sintió tan abatido que un día pensó en la muerte, ese día cuando pensó en la parca, comprendió que ya no era un niño, comprendió que había crecido, que ya había perdido la posibilidad de hacer que el mundo girara a su alrededor. Ahora pasaban los segundos y él envejecería, los minutos y el maduraría, las horas y él se degeneraría, los días y él se desgastaría, las semanas y él se marchitaría, los meses y el encanecería, los años y el enfermaría, las décadas y él se asfixiaría y finalmente los siglos para morir. Todo esto pensaba nuestro joven Angel para marcar más una esperanza de llegar allá, es decir a la vejez, que una queja por tener encendido el reloj biológico. Todo pasaría tan rápido que sería inevitable sentir cada vez más cerca la muerte…

    Un día mientras estaba en estado meditabundo, veía hacia las nubes, y se percató de que aquellas flores cercanas a él tenían voces propias… hizo tanto silencio que empezó a darse cuenta que cada flor, cada parte de esos enormes campos escondía personalidades tan coloridas como el universo mismo… Era extraño pues, Angel, era el único hombrecito en el mundo capaz de ver las flores pensar, hablar y desear tal como lo hacen los humanos, descubrió sujetos de lenguaje donde nadie más lo ha descubierto.

    Un día como cualquier otro, sucedió lo que debería suceder. Angel vio en un girasol todo lo que él deseaba, es decir, todo lo que le hacía falta, pues deseamos aquello que no tenemos.

    Este girasol visto por los ojos de nuestro joven era perfecto, era inteligente, era amable, era hermoso y escondía una personalidad enigmática. Combinación que era exquisita para dejar a nuestro pequeño enamorado en estados de transe y ensoñación…Él era todo lo que había anhelado para su vida, pero se enfrentaba a un terrible sentimiento que no lo dejaba acercársele y conquistarlo.

    Fue así como pasaron los días y crecía tanto el amor, el deseo, el anhelo y la sensación de falta que él ya no aguantó más y se le acercó… Cuando estaba a pocos metros de él, todo su cuerpo temblaba. El aroma a girasol era más cercano. No fue cuando lo escuchó hablar que quedó flechado para siempre sino justo antes cuando escuchó sus pensamientos: -El mundo se puede cambiar, hacen falta flores capaces de amar de verdad y de escuchar a los otros- Repetía el girasol en su cabeza -Somos seres libres e inútiles que vivimos en un mundo de necesidad y prisión. Míreme a mí, estoy anclado a este tierra fértil pero no puedo ir a recorrer un mundo que pareciera infinito- Nuestro bello girasol salió de sus pensamientos para dejar una voz en el aíre que era imposible no escuchar. Cada cosa que salía de los labios de aquel girasol eran poemas que dejaban las más hermosas enseñanzas que jamás alguien habría podido enseñar a alguien.

    Nuestro joven se sintió atraído, como no hacerlo si el girasol tenía polen de inteligencia, de intelectualidad, de ideas nuevas, no era claro si era un erudita, o psicoanalista o un histérico. Pero todas esas cosas parecían estar en él, por momentos era un sujeto en falta que se hacía preguntas, luego se iba respondiendo hasta llegar a la cima del conocimiento. Y Angel era apenas un ser que no sabía que tenía saberes adentro, no lo sabía desde la razón sino desde el accionar.

    Sentía Angel entonces un estado de equilibrio, se fue acercando cada vez más a girasol y éste a Angel, fueron construyendo una fascinante conexión que con solo hacer gestos Angel y Girasol comprendían un universo entero. No pasó mucho tiempo para que Angel se obsesionara con girasol. Léase bien Angel, no girasol.

    Angel era un ser creativo, y una tarde llegó con un poema para que la flor escuchara.

    -Señora flor, señora flor:

    Tengo un colibrí, le arranco las alas y me queda un pepino.

    Permítame señor Angel que corrija su poema, dijo el girasol.

    Tienes un pepino, le pones las alas y queda un colibrí…

    -El acto poético debe hacer que el mundo y los seres crezcan, nunca denigres en nombre del arte, eso ya lo hizo la religión al decirles a todas estas flores que no vivan su vida en el deseo, en el riesgo, en el juego, en el descubrimiento.-

    Fue aquí cuando se volteó y le preguntó a Angel -¿Podríamos jugar a la inutilidad?...- Angel se quedó pasmado ante semejante propuesta, él estaba atrapado entre el almacenamiento inútil de cosas, coleccionaba comida, coleccionaba agua, coleccionaba animales, coleccionaba, coleccionaba y coleccionaba…

    -¿cómo jugar a la inutilidad entonces? ¿Cómo entender que podemos fugarnos de una realidad que deviene caos? Fue así como poco a poco fue aprendiendo a jugar a la inutilidad, partiendo de la pregunta.

    Un día se levantó y decidió hacer todo al revés. Al terminar el día, fue corriendo donde el girasol y le contó su experiencia. Otro día decidió saludar a todos aquellos seres que no conociera, y descubrió que él mundo y las personas escondían bellezas y verdades más profundas que cualquier otra cosa muerta puesta a disposición, otro día, decidió hacer todo bailando, descubrió que el movimiento era la definición de la palabra vida… La flor fue entendiendo cada día la manera que había encontrado Angel para construir la inutilidad y empezó a dar órdenes y órdenes para que Angel viviera bajo la mirada de una flor que si bien era bella, escondía un fuerte secreto. Un secreto que meses después arruinarían toda la relación que se podría haber construido, perdónenme queridos lectores si me distancio para contar los terribles sucesos que vendrán.

    Otro día de esos extraños dirán las flores cotidianas Angel decidió no hablar, quedarse en silencio y pensar en su estado de soledad. Sintió que estaba vivo, sintió que siempre había estado solo, sintió que nadie le había comprendido de verdad hasta antes de conocer aquel girasol, aquel ser perseguidor de la luz del sol. Sintió que en el silencio se escondía la escucha, sintió que era el rey del mundo pero también sintió que no era nada en un universo infinito.

    Había llegado a la conclusión de que quería compartir con su amada flor la soledad, fue corriendo a buscarla para decírselo, cuando llegó abrió la boca y no fue capaz de decir nada… lloró esa noche, no sabía por qué… pensaba en que era imposible compartir de verdad lo que sentimos, lo que pensamos… pero la flor le llenó la cabeza con ideas que justificaban el hablar, decía:

    -Es necesario aceptar las maneras en que el mundo se comunica, no podemos oponernos al otro, podemos proponer nuestras maneras pero no oponernos- Idea que Angel acepto con amor, era imposible resistirse a tanta sabiduría. La paradoja era que aquella flor con su sabiduría se oponía a los que no pensaban cómo ella.

    Así como esta llegaron mil ideas hechas poesía que Angel no refutó y poco a poco flor, se convirtió en Dios, Angel tenía un Dios y todo lo que Señora girasol decía era una verdad irrefutable.

    No pasó mucho tiempo para que Angel se pusiera en su rostro un montón de pétalos que le hacías perder su esencia de humano y lo convertían cada vez más en una flor. Angel empezó a perder su verdad, su única gran verdad, esa que había encontrado a partir de sus experiencias, eso que nos hace único. Angel soñaba, anhelaba ser Flor.

    Cuando Angel se entendía diferente a la señora flor, le costaba porque en su inconsciente señora girasol no era su compañera de vida sino su adversario, porque al pasar el tiempo Angel empezó a sugerir la manera de vivir para ambos, desde sus argumentos y ya quería imponer sus ideas y sus maneras, pasó así mucho tiempo.

    Hasta que llegó el día, el gran día. Era de noche, había frio, Angel y flor estaban mirándose como solían hacerlo, Angel estaba cansado, flor estaba excitada con el cuerpo, los gestos y las maneras de hablar de Angel, pero Angel se quedó dormido… Tuvo pues que pasar la luna por el horizonte, quedarse mucho rato en el senil y luego marcharse para que Angel despertara y se diera cuenta que en vez de su amado girasol había un hueco, una huella mnémica que guardaría en su memoria para siempre. En aquél hueco había una carta que decía más o menos lo siguiente:

    Querido, el tiempo que hemos compartido

    Sin duda alguna ha sido de los mejores, pero

    He comprendido que mi camino con vos ha terminado

    Somos demasiado jóvenes para quedarnos atrapados el uno en el otro

    He conocido a alguien que tiene todo aquello que tú no tienes

    Amaría que ese ser y tu fueran uno solo, pues encontraría todo lo

    Que necesito para mí…

    Con el dolor en el alma, mi más sincero estado de sinceridad.

    Y entonces todo cambió, Angel se sintió solo por mucho tiempo, lloró mucho, todas las otras flores que intentaban entrar en Angel eran espantadas como lo hacen los más terribles espantapájaros con sus adversarios los cuervos.

    Y lloraba y lloraba y seguía llorando, era imposible por esos días, parar las tempestades que sus ojos creaban, se le apretaba el corazón, pero entre lágrimas y lágrimas comprendió que una vida humana era impensable sin estas tempestades, que parte del ser humano era llorar, ver caer las lágrimas al suelo liberando todo lo que tenemos atrapado, cada lagrima redime.

    Para Angel fue imposible entender el mundo, entender que algo tan grande como lo que él sentía, solo estaba en sí mismo y no en los otros, para ser más específicos, que esa grandeza estaba solo en él y no en el girasol.

    Ahora comprendía el mañana, con todas las marañas que traería… La muerte cada vez estaba más cerca.

    Angel podía ver el girasol a lo lejos siendo aplaudido por el mundo, y en la distancia poco a poco se dio cuenta de que este girasol había sido uno de los más egoístas que nunca habían existido, que girasol nunca se había preocupado por Angel, este es el terrible sentimiento y acontecimiento que les había dicho señores lectores, que denigró todo, que hizo que Angel se perdiera en girasol, que no construyera un mundo de acción para él.

    Pero entonces Angel se acordó de sus amigos, lean bien señores lectores, se acordó de sus amigos y no de sus dioses, ya dijo un sabio hace mucho tiempo que a un hombre que no es corriente le quedan sus amigos y no sus dioses. Los buscó, habló con ellos y se sintió en presente, les habló de su tristeza y de su soledad y de nuevo al nombrar estos terribles sentimientos poco a poco se esfumaron. Sus amigos le ofrecieron una cama dura, con sabanas delgadas, lugar en el que se quedó poco tiempo, pues se lo llevó de ahí el deseo de trabajar en sí mismo.

    Dijo otro sabio otro día, los grandes dolores de la vida, son para los grandes hombres, he aquí entonces la explicación del gran dolor de Angel. Y como su búsqueda es ser un hombre grande, ha de encontrar muchos dolores nuevos.

    Entró a estudiar con otras flores en otro tiempo ciencias humanas, lo hizo porque en su condición de ser humano lo podía hacer, las flores a su manera también, pero recordemos que éstas están vivas desde la razón, solo porque Angel les da vida racional. Mientras en un salón hay un jarrón con una flor escuchando la lección Angel estaba sentado haciendo esto mismo. Angel estudió de esas carreras complejas que no pueden estudiar todas las flores por faltas que tienen, pero no las culpemos a ellas, culpemos al mundo por haberles entregado veneno en vez de pinturas, por haberles entregado tierras secas en vez de tierras abonadas, por haberles entregado golpes en vez de educación. Es difícil hacer entender ya que es un poco complejo explicar lo inexplicable.

    ¿Será que ahora Nuestro adulto Angel es quien es o seguirá vagando hasta el fin de su vida buscando eso?
  2. “Aprende a interrogar razonablemente, a escuchar con atención, a responder serenamente y a callar cuando no tengas nada que decir”

    Johann Caspar Lavater


    ¿Para qué tanta palabra muerta?


    Las palabras son pronunciadas por los políticos, los profesores, los panaderos, los sacerdotes, los presentadores de televisión, los vendedores, los comunicadores, los secuestradores, los cantantes, los gimnastas, conferencistas, pregoneros… pero no por el hecho de manejar las palabras quiere decir que comuniquen verdades, que sepamos escuchar…

    Me pareció encantador el hecho de saber que el psicoanálisis fue creado a partir de un hombre que empezó a escuchar… escuchar problemas cotidianos, deseos no cumplidos, anhelos, chistes, sueños, actos fallidos. Y entonces me dejé fascinar por mi vida de niño, ese niño que amaba saber, saber que hacían las personas, como lo hacían, porqué lo hacían. Amaba escuchar a las personas cuando lloraban por amor, por angustia e incluso por hambre. Amaba escuchar los motivos del porqué mi tía Marleny rezaba todos los días, porque vivía sola en una casa llena de santos, porqué cocinaba tan tarde, porque iba a hacer oficios en la iglesia; Porque mi primo Carlos nunca fue a la escuela, porqué le gustaban los tatuajes, porqué conseguía novias para sentirse hombre, porqué le gustaba el dinero fácil, porqué robaba cuando iba a una casa ajena, por qué no era capaz de pronunciar la “r”; porqué mi primo Duván imitaba a las personas, por qué no le gustaba usar zapatos, porqué dormía con su madre siendo tan grande, por qué no le daba pena salir a la calle con la ropa rota y sucia; porqué mi tío Francisco (tumba) era tan tímido y hablaba tan pacito que casi nunca decía lo que pensaba, porqué coleccionaba juguetes siendo un señor, porqué cuando se emborrachaba perdía toda la vergüenza y hacía cosas que no haría en su juicio, porqué lo molestaban con la señora que vendía buñuelos, porqué le decían Tumba muros, porqué le gustaba caminar tanto solo, porqué guardaba dinero todo el año para gastárselo en los diciembres, porqué nunca se casó. Amaba escuchar a mis tíos cuando aconsejaban a mis primos acerca de la importancia de estudiar, de no sentir pena. Amaba escuchar a una prima que como loca buscaba el amor, un amor que la sacara de pobre. Porque mi padre buscaba la magia y amaba a Dios como a nada en el mundo.

    Después de terminar de ver la película “Pasión Secreta” fue muy bello en la reflexión darme cuenta que conseguí lo que hoy son mis mejores amigos gracias a mi capacidad de escucha, empecé escuchándolos, al verlos como hacían teatro, y amaba verlos actuar. Me acerqué a ellos de la forma más extraña en el colegio, solo quería estar cerca, así que empecé a perseguirlos con la mirada y luego más y más cerca… hasta que un día tuve la posibilidad de actuar en una obra de teatro con ellos. Años después teníamos citas casi todos los días en un paradero de bus, pasábamos horas y horas después de los ensayos del grupo de teatro hablando de la vida, de los sueños, de las falencias, de las fortalezas, escuchaba historias, quejas, cuentos, dramaturgias, personas… Igual que “Momo” de Michal Ende considero que mi única cualidad era saber escuchar… años después las personas me pedían consejos y mucho tiempo daba mis ideas de cómo solucionar ciertas cosas de la vida, ya no solo escuchaba sino que exponía mis maneras.

    Escuchando encontré mi camino en el arte, conocí lugares, aprendí infinidad de cosas maravillosas que hacen hoy en día lo que soy como persona. Es tanto mi deseo de escuchar que ahora me encuentro aprendiendo a cantar, uno de los retos más grandes y maravillosos que he llevado a mi vida.

    No es que crea que soy de las personas que realmente escuchan o qué es experto escuchando, pues en mi como en todo el mundo deben existir infinidad de paradojas, pero lo que si recato de mi personalidad es que estoy en la búsqueda de eso que llamamos comunicarnos realmente. Ahora me dejo fascinar por la posibilidad que tengo de acercarme al psicoanálisis con la maestra Marina Quintero, un arte que por excelencia trabaja la escucha. ¿Cómo no prestarle atención entonces? ¿Cómo no permitir el juego de la búsqueda del inconsciente?

    En “Pasión Secreta” Froid escucha a sus pacientes a tal punto de sentirse identificado con lo que les pasa, entiende en ellos sus huellas de inconsciente y las traspone en su vida, se genera preguntas a través de lo que les sucede. He sentido esa sensación por ejemplo escuchando a un gran amor que tuve hace ya varios años, sus búsquedas generaban tantas cosas en mi, tantas preguntas, que de alguna manera yo llevaba sus preguntas a mi vida y a través de ellas encontraba verdades para mi, entendí patrones que vengo repitiendo desde niño, ¡qué digo desde niño! Desde las generaciones filiales pasadas.

    Entonces el gran salto de la hipnosis al psicoanálisis se dio justo en el momento en que Froid deja de ser conductista es decir, dar órdenes para conseguir respuestas, y más bien hace preguntas para qué el otro se cuestione y encuentre en sus huellas de personalidad o de vida, respuestas a eso que no quiere, que no necesita para su vida. Es más que maravilloso exaltar esa cualidad de Froid, esa cualidad perdida ya en el hombre del siglo del cemento y la tecnología. Es clara su capacidad de escucha por ejemplo cuando va a exponer sus ideas frente a los otros doctores que como animales parlotean y juzgan al pobre Froid injustamente por atreverse a nombrar lo que nadie hasta esa época había nombrado.

    Es pues para concluir este pequeño escrito bien importante escucharse a sí mismo, y esto lo podemos hacer a través de un guía o acompañante que nos de trazos o pistas, para hallar aquello de lo que no sabemos de nosotros, es claro que nos encontramos frente a un cañón enorme y profundo que esconde los más siniestros secretos sobre nosotros mismos y no está demás permitirnos un poco de profundidad para como fractales entender este universo que es bien sabido esconde enigmas que jamás habríamos sospechado.

    También y bien importante escuchar a los otros, ser guías y turistas en esta experiencia humana para tener una idea un poco más clara sobre lo que hacemos aquí, sobre lo que vivimos aquí y el para dónde vamos.
  3. Hace días, cuando tenía pelo jajaja escribí esta pequeña cosa...
    aquí se las comparto.




  4. Nos unimos, nos desvestimos, nos besamos, hacemos el amor y después somos dos desconocidos. Eso hace el artista con el mundo, abrazarlo para dejar en él un toque de un no sé qué que pueda mover las cotidianidades del abrazado. Como lo nombraba aquella compañera que conocí hoy, a esa a la que aún no le conozco ni el nombre: “el arte es todo erótico, el mundo es explicado y se explica a través de esa palabra tan hermosa, lo erótico” nos sentimos atraídos, nos sentimos dominares y dominantes, somos carnes que abrazan fuertemente lo uno y lo otro, nos estamos guisando por la cantidad de invasión que hay. Y henos aquí sentados compartiendo de la vida, del pensamiento, del deseo, de la música, del miedo, del anhelo, de la locura, del inconsciente y el consciente. Y quien sabe de cuantas cosas más que se escapan a las simples líneas de un escribiente.

    Unos piensan aquello, otros piensan lo otro… aquél es apenas un hombre, no un artista, no le des ese nombre que aún no lo puede portar… El otro se envuelve para si en dos universos paralelos que hablan de cosas diferentes, el arte y la vida cotidiana, dos cosas que se juntan y se alejan en ese lugar de la creación… Es lindo verse en la diferencia de pensamientos, por ejemplo yo diría que para mí no puede existir el arte sin la vida cotidiana, es más pareciera por momentos que la vida cotidiana es el arte.

    Para aquel el arte es la imaginación… ¿es decir aquello que se puede crear y que se aleja de la vida misma? ¿No es acaso un dragón de algodón de azúcar que se puede comer bajo el agua un invento imaginado pero de cosas que ya existen? La imaginación es uno de los lugares donde cabe el infinito, donde las vacas pueden hablar, donde el cielo se puede pintar de verde y donde el niño puede nadar como un tiburón, Pero no es acaso esta posibilidad de generar imágenes surrealistas e ideas digámoslo sobrehumanas, las que nos permiten de alguna manera comparar y entender la vida humana, ¿no es ese el fin de la vida misma, comprendernos hasta el día en que ya no podamos hacerlo?

    Aquel nombra que el arte es innovar, ¿es decir que un programador que crear una aplicación nueva es en esencia un artista? Bueno el arte es tan amplio que seguro tiene que actualizarse y hacer del programador un artista… Sigo pensando que el arte es todo aquello que nos ayuda a ser más humanos, perdónenme si sueno un poco humanista, pero es que siento que es precisamente ese lugar el que hemos perdido, el que ya no sentimos, del que ya ni nos percatamos.

    Otro compañero nombra la posibilidad de mejorar la cotidianidad es decir, embellecerla. Muy bonita su forma de ver el arte, pues es como una especie de salvador que llega a la oscuridad con su luz, yo agregaría a este pensamiento que aparte de embellecer la cotidianidad porque seguro que lo hace, también es la posibilidad de ver la belleza que hay en esta misma… ¿No es acaso un girasol una flor hermosa y perfecta en esencia? ¿No es acaso una manzana una hazaña del universo creada para que nosotros la apreciemos? ¿No es acaso la respiración de un árbol algo demasiado hermoso, el vuelo de un colibrí y el inflarse de un pez globo ante el peligro?

    Hablemos también por los lados de la técnica, ese lugar que al parecer es necesario y que nos tiene reunidos en un mismo espacio de tiempo. Un hombre técnico es considerado en nuestra cotidianidad como un hombre virtuoso, porque ha logrado ejecutar de unas maneras ya convenidas un instrumento sea: piano, cuerpo, violín, voz, patines, violonchelo, bajo, espadas, guitara… tomemos estos pocos ejemplos de los miles que deben existir. Pienso que hay beneficios y contras en aquellos seres humanos que se han esforzado por ser netamente técnicos; por un lado pueden parecer que son como dioses que logran cosas que los otros seres humanos tendrían que pasar años ensayando para lograr, por el otro, se han olvidado de llegar realmente a lo que es esencial, el otro. No han utilizado su arte para atravesar el alma de si mismos y de quien los veo y/o escucha. Fatal a mis ojos si se quedan en aquel lugar.

    Y están los otros seres humanos que con sus técnicas ya desarrolladas o no, logran llegar al otro, mover sus maneras de percibirse, llevar alguna historia que no solo se quedan en las palabras dichas, movilizar pensamientos, sensibilidades, percepciones, maneras e impulsos, entre las pocas cosas que puedo nombrar aquí de las miles que puede un hombre a través de su ser y su instrumento entregar al mundo.

    Maravilloso escucharlos hablar, compartir de lo que para ellos, para nosotros, son nuestras verdades, nuestras maneras de resistir a un mundo en caos, un mundo que en vez de regalar nos está quitando un todo.
  5. Salgo para allá, dispuesto a besarte y quizá a tener algo más… algo de susto, algo de anhelo, algo de ensueño. Me dejo coger de la tarde por la pereza pero sigue ahí la ansiedad, las ganas de ir, de verte, de vivirte…

    Se acerca la hora, casi las cuatro de la tarde para empezar el rumbo hacia donde estás… por miedo a la noche decido no parar en ninguna parte… 99km de distancia… el viaje empieza muy bien, lleno de esperanza… quería motilarme para que me vieras lindo, no sé dio… el viento golpea fuerte en la moto, mis cabellos se escapan como queriendo volar, apenas estoy comenzando. Saliendo de aquí veo árboles y paisajes de tarde preciosos… pienso en vos, te llamo, ¿Estás aun dispuesto a que vaya? Puedo devolverme, una sonrisa responde que no, que quieres que vaya… El viento sigue golpeando la cara, los paisajes y las carreteras son de película, las montañas son retratos inolvidables, el frio, el calor, el frio el calor, una constante que sube y baja… Ya está más tarde ¿Prendo las luces de mi moto? Aún no, esperemos a ver hasta que deje de ver… ¿Me querrás? ¿Tendrías algo conmigo? ¿Cómo sería verte y vivirte? ¿Qué sientes cuando me ves? ¿te gusta volar? ¿Estaré mirando fuera de la convención a la que me permites llegar? Serpientes, zorros, perros, un pájaro muerto en el camino, gallinazos volando… niños solitarios caminando carreteras solitarias… es de noche… los mosquitos invaden el camino, bajaré mi visera, prenderé las luces. Subidas y bajadas hacia ti… interminables caminos, personas que sueñan y otras que no… el cielo está precioso, estoy solo, atrapado en la inmensidad de la noche, bajo la luz de un farol de motocicleta a 60km por hora. Qué se sentirá llegar a tu casa, a tu pueblo, a tu gente, a tus costumbres, a tus comidas? ¿Qué se sentirá ser parte de tu familia, de tus sueños, de tus deseos?. ¿Qué hacer para conquistarte, para llenar tu alma de libertad, de pasión y aventura? ¿Seré acaso yo un alma falta de aventura, es acaso eso lo que estoy yo persiguiendo en vos? ¿Cómo brindarte lo que al parecer me hace falta? Que me cantes, que me cantes, quiero que me cantes… una cámara escondida en la oscuridad de un maletín… Y si se pinchan las llantas? Y si se cae la cadena? ¿Y si se dañan las luces…? ¿Qué me pasa? ¿Por qué pienso siempre hacia un lado fatalista? No será acaso este un viaje de ensueño?

    Te llamo, he llegado, estoy con mis dos pies en tus tierras, o bueno aun no yo, pues quien pisa por mi es la motocicleta. Mi nariz huele tu aire, mis cabellos vuelan con tu viento… te llamo… te llamo… he llegado, estoy cerca a tu casa… doy vueltas antes de llegar a tu casa… he llegado… te he visto… he llegado… me ayudas a entrar en tu casa… todo es raro, tengo frio, un gato me saluda desde lejos, abruma tanta cosa desconocida… es tu casa… es tu casa… son tus sueños… son tus juegos… son tus matas… son tus suculentas… Es tu música la que suena… esta es tu habitación me dices… me entregas a un espacio solitario, un espacio que no huele a ti, que no es tuyo. Estoy parado en un patio lleno de frio, me ofreces un chocolate… es tu sonrisa… es tu mirada… es tu juego hacia la nada que me enciende por dentro… me siento feo… me siento frágil… me siento… eso es… de nuevo después de mucho tiempo me estoy sintiendo… Es tarde, no me siento tan cansado como debería estarlo… ¿Será acaso la extrañeza de verte la que se ha llevado el cansancio? Ahhh ese chocolate, como me sube el calor… Tu abuela es una señora bastante extraña, pero de esas extrañezas bellas, ¡qué raro! Parece que le alegra el verme… Tu gata ahí postrada en el suelo me mira, corre y vuelve a mirarme… qué dirá en su pequeña cabeza… ¿me querrá? ¿Le importaré? Que bobadas pienso... A esa gata no le importa mi existencia. Quizá si fuera esa mariposa podría jugar con ella, el juego del gato y la mariposa, quizá así le importaría más. Ya han pasado varios minutos y la gata juega conmigo.

    Salimos a la calle, conseguimos comida, nos la llevarán a tu casa en un rato, mientras tanto me presentas la Secuoya y dices que solo hay dos en Colombia, me presentas tu escuela de música, afortunado yo de ver el balcón más lindo de Antioquia sólo, a altas horas de la noche. Me gusta ver desde allá la secuoya enferma, esa que necesita ayuda después de un golpe que le dio el cielo al lanzarle un rayo, te preocupa, haces que me preocupe por ella.

    Todos en este pueblo se conocen… todos en este pueblo te conocen… ¡Oye! Eres tan diferente a mi… eso me gusta… ver una película, acostado en tu cama: Fragmentos somos fragmentos, nos dividimos, somos muchos, ese que ama y ese que odia, aquel que mira y aquel que no mira, la que desea el que desea, el que implora, el que detesta, el que se arrepiente, el que se ahoga, el niño, la niña, el padre, el que protege al que ama, sobre todo el que ama, el que no sabe para dónde va, el que sabe para dónde va… el guía, el maestro, el que oye, el que canta, el que vuela.

    La película se a acabado, me hayo acostado en tu cama, abrazandote, recordando el olor de tu cabello, no te beso, pero si te toco, si te abrazo, si siento que quiero estar ahí… Duermo un rato ahí en tu cama, contigo, ¿Contigo? ¿Estás ahí de verdad? Siento como un hueco, como que no quieres estar ahí conmigo… aún tengo mi pantalón, no me he cepillado, necesito ir al baño… el calor del pantalón me hace descobijar… me voy… después de un rato el calor me hace ir…

    Estoy en otro cuarto, me organizo para dormir… me acuesto en esa habitación de casa antigua, solitaria que no te tiene encerrado en sus paredes blancas, en su techo y suelo de madera… en su closet de madera… Me adentro más en la noche… duermo… me despierta un extraño sueño donde el novio de un amigo está terminando un noviazgo conmigo, se arrodilla en mitad de una calle, me alejo, no miro hacia atrás… una directora de coro viaja en un carro aprendiendo a manejarlo y de un golpe lo mata… llega la policía y gente extraña… Aparezco en un velorio, debo cantar una voz metida en la mitad de dos notas, la más compleja de cantar… me asusta no hacerlo bien… me despierto… estoy en una cama sólo, sin frio a pesar de estar en tierra fría… huele a noche… suenan unas campanas de una iglesia cercana… es tan real el sonido que sé que son tocadas de verdad y no una grabación…. Estoy a punto de dormir con una extraña sensación como si algo malo hubiese sucedido en otro lugar… anulo ese sentimiento antes de dormir.

    Es temprano... me levanto mucho más temprano que el despertador… son las 6:50 duermo otro rato… quedé de levantarte tipo 7 u 8 se llegan las 10 de la mañana y aun sigues durmiendo… jamás te desperté… sentí pena levantarme e ir a verte…

    Pasadas las diez de la mañana pasas cerca de la habitación y dices que abra la puerta, que deje la pena… te bañas antes de que pueda verte… me baño antes de que puedas verme… vamos a subir a tierra caliente… salimos… manejas mi motocicleta en una carretera destapada… tengo frio… tengo miedo… los paisajes son aún más hermosos… me presentas el mortiño, las yarumas blancas, pienso, que hermosura de árbol… señalas muchos lugares y hablas de tus experiencias en ellos… Me hablas de los cultivos de igo, le pides aun campesino uno para mi, el señor campesino con sus manos negras, astilladas y entierradas parte el igo con la técnica que sólo el tiene y me lo da… sabe muy rico… me robas una mordida… avanzamos… nos encontramos con tu amigo, ese que parece que está más allá que aquí, ese que sueña y tiene deseos, ese que es valiente, ese que monta tu bicicleta en vez de una moto, ese que está a punto de graduarse de abogado… ese que ama el aire, la naturaleza, la comida, el dinero, el descanso, el sol… Vas manejando, no frenes dice tu amigo, estamos en un pantano… frenas… nos resbalamos… caemos… se te encalambra la mano, el pie, no pasa nada… tu amigo, ese que no se mete al agua del lugar en donde estamos, arma un cigarrillo de marihuana… donde estamos hay comida… cerveza…hay una Ceiba.. Ese lugar se va llenando de gente, por momentos huimos de ella, se hace más tarde… almorzamos… te de limoncillo después de almuerzo… una conversación con un señor de avanzada edad sobre la vida… sobre la riqueza… sobre las perdidas, sobre los cocos, los mangos, las cañas, la panela…

    Avanza la tarde, tu amigo se va primero que nosotros, él tiene una tarea mucho más dura que la nuestra, subirá una montaña a carretera destapada en tu bicicleta. Nosotros subimos, avanzamos, lo alcanzamos. Decides ayudarle un poco, avanzas, me quedo con él un tiempo dándote ventaja… 1km y 10 Mtr son tu ayuda… mientras yo manejo llevo a tu amigo atrás… te recojo, te veo cari rojo… varias paradas esperándolo… aparece otra persona… un locutor de radio, no me cae tan bien… paramos, comemos empanadas con cerveza… paramos, coges mortiño para hacer jugo.. paramos, coges mortiño para hacer jugo… paramos coges mortiño para hacer jugo… hace frio, estamos ya cerca al pueblo… llegamos… te duele la cabeza… te bañas… te duela la cabeza… salimos a comprar comida… te duele la cabeza… llegamos me pides el favor de hacer la comida… te duele la cabeza… te acuestas… te duele la cabeza… te llevo la comida a la cama y dices que comerás conmigo en la cocina… intentas comer… te duele la cabeza… no comes nada… te duele la cabeza… te acuestas… me baño… me organizo… organizo mi cama… me dices que te abrace un rato… te abrazo… solo te abrazo y te acaricio… no te beso… no te beso… no te beso… dos horas en tu calor… con el calor de tu gato… me voy… me acuesto en la otra habitación… duermo mejor que la noche anterior… no recuerdo sueños… me despierta el despertador… te llamo… me levanto, uso el baño, te levantas, salgo del baño. De nuevo no te veo sin bañarte, vas a mi habitación recién bañado, no te miro. ¿Tienes cara de dormido?... no te miro… corro al baño… me baño e inicia nuestro viaje, te llevaré… te llevaré… hace frio… hace mucho frio… conoces la carretera y sus curvas… hace frio… hablamos… cantas…. Cantas… cantas… hablamos…. Cantas… cantas… Mira una araucaria, otra araucaria y otra y otra y otra… que rápido se hace este viaje de regreso contigo... Llegamos a la Unión… comemos… hace frio… un tinto… un café con leche… bueñuelos… pastel de pollo… seguimos… hace frio…. Hace frio… te siento ahí atrás… por momentos pareciera que me abrazas… pero todo sucede en mi cabeza… hace frio… Otra araucaria… 60km 70Km 80Km 90Km llegamos… te vas, con tu energía y tu belleza, me das un beso en el cuello y me agradeces mi energía y mi presencia…

    ¡Te vas!
    a Mabruna RA, Zereffu, InunoTaisho y 2 más les gusta esto.