Stand by me [Quédate a mi lado]

Capítulo I: Propuesta indecorosa​

Era un día soleado y muy caluroso, todos estaban reunidos para ver el acto apertura del nuevo colegio tecnológico público para todos aquellos que quisieran profundizar en la selección de su carrera. En el lugar se encontraba grandes grupos de chicos, pero había uno en especial que estaba solo, que en su mirada demostraba unos ojos tan negros y vacíos, el solo esperaba que terminara la apertura para irse a casa y encerrarse en su cuarto solo.
El calor era algo insoportable cosa que no le agradaba mucho, cuando ingreso al colegio tecnológico que tanto había esperado ingresar, con un grupo de amigas se encontraba una chica de cabello castaño claro y unos dulce ojos marrones. Ella se encontraba rodeada de un grupo de personas, que luego poco a poco se fueron alejando para conocer mas el lugar, la joven camino un poco mas y caminando se encontró al joven de ojos negros en una esquina y se acerco a el. El al verla solo la ignoro y se alejo sin decirle nada, el no quería socializar con nadie, solo deseaba terminar el año en ese colegio e irse a una universidad con personas de su nivel, pero antes debía sobrevivir el infierno de la adolescencia allí.

Camino hacia el interior de las instalación y observo lo maravilloso del buen trabajo de las estructuras en su interior, aunque cuando se dio vuelta nuevamente la encontró al frente, ella iba a decirle algo, pero el antes de dejarla hablar hizo un gesto de cansancio. Ella quería decirle algo, empezar a hablar con el, sentía algo en el que lo impresionada mucho, que le atraía demasiado, trato de hablarle, pero el se ya se había marchado, luego empezó lenta y tímidamente a seguirlo con la mirada, y decidió con paso firme seguirlo, sin dejar de mirar todo el gran lugar en donde se encontraba.
Al cabo de un tiempo ella logro encontrarlo, le dedico una sonrisa y se dirigió hacia el, pero antes de que pudiera siquiera saludado, el ya se había ido. Mientras ella se quedaba mirando con algo de impresión su actitud. El finalmente se detuvo en el final de un pasillo largo, se dio media vuelta y miro hacia atrás. Era ella quien lo seguía, molesto paso por su lado y siguió caminado hasta llegar con los demás chicos reunidos en grupos, pensó que eso la alejaría pero se equivoco, ella se paro a su lado sin mirarlo, solo mantenía su vista al frente disimulando no estar ya interesada en seguirlo
- ¿Qué pretendes al hacerme esto? – Pregunta sin mirarle, entonces le demuestra una sonrisa maliciosa la cual asustaba a la gente y alejaba, pero ella le respondió con una sonrisa dulce, la cual Dekar sonrojado miro hacia otro lado rápidamente.
Cuando ella vio que le había hablado se sintió feliz, al menos ya podría hablar con el, luego cuando le sonrío de esa forma hostil, no se sintió incomoda, y en vez de eso sintió felicidad, se acerco un poco mas hacia el y le dedico una sonrisa, notando que el había volteado la cara y le hablo con una voz dulce y sencilla
- Nada, no pretendo nada, tan solo conocerte más. ¿No se puede? - Luego de decirle eso con una sonrisa, noto que el joven se había puesto mas serio, haciendo que ella se interesara más en conocerlo
- Déjame no me interesa estar con una niña tonta como tu. – Le responde de forma fría dando varios paso hacia el frente hasta detenerse cerca de otro grupo, entonces mira que ya no estaba y suelta un suspiro diciéndose a si mismo.
- Diablos que le pasa a esa niña le sonreí con malicia para intimidarla, pero en ves de eso ella... - no pudo terminar su pensamiento que comenzó a llover arruinando el día hermoso y dando fin la inauguración por completo, entonces cuando todo se van el aleja caminando antes de que sus guardaespaldas lo encontraran y lo llevaran a casa, ya finalmente lejos del lugar suspira y camina hacia una plaza, por fin estaba solo como el deseaba, unas lagrimas interrumpieron su soledad confundiéndose con la lluvia, se sentó en un banco y dejo que la lluvia mojara su cuerpo por completo
La joven tan solo se quedo observando, su actitud fría con ella, no logro intimidarla ni nada por el estilo, a lo contrario hacia que quisiera saber mas sobre el, saber quien era, deseaba conocerlo mas presentía que el debía estar solo, necesitaba saber porque estaba así. Cuando la lluvia empezó a caer ella busco un sitio para no mojarse, camino aun con la lluvia que caía sobre ella mojándola un lentamente, llego a un parque y de nuevo lo vio ahí. Sintió mucha tristeza al verlo de esa forma sabia que estaba mal y estaba dispuesta a saber que le sucedía, se acerco lo suficiente sin que se diera cuenta de su presencia y cuando estuvo lo suficiente cerca, lo miro con ternura le sonrío.
- Aunque no me quieras ver y no sé porque. Se que te sientes triste... ¿podría saber por que estas así?
- Vete no quiero hablar contigo ¿por qué te interesaría conocerme? - El le respondió con una mezcla de cansancio y enfado, entonces se levanta y la mira con ojos llenos de furia los cuales lo cegaron levantando su mano para golpearle la mejilla, pero ella solo le sonreía con dulzura. Entonces Dekar miro sus ojos que eran tan vacíos como los suyos, bajo la mano retrocediendo de ella lentamente.
- ¿Acaso no temes que te haga daño? – Le pregunto normalmente mientras le miraba con odio, luego se alejo un poco con enfado.
- ¿Cuánto quieres? - Mira hacia abajo luego agrega-
- Todos se me acercan por el dinero… eres igual a todas esas personas - Se sienta y comienza a llorar sin consuelo deseando no existir definitivamente.
Su mirada era vacía y eso lograba que se interesara mas en él, cuando le hablo de esa forma no le hizo sentir mal en absoluto ni cuando intento agredirle física y verbalmente, al contrario sintió tristeza por la soledad en la que se encontraba encerrada en su interior, sabia que el estaba mal, y ella que podría hacer algo por el, solo le sonrío para calmarlo un poco, luego de ver en el estado que el se encontraba. Se sentó a su lado tratando de comprenderlo, le hablo con una voz suave y dulce.
- No tengo miedo que me hagas daño, tengo miedo de que tú te hagas daño solo. - Le sigue sonriendo y agrega luego de un momento.
- No quiero nada, ni siquiera se quien eres o que tenias dinero, tan solo quiero conocerte. -Dekar se pone de pie y comienza a caminar dejando atrás aquella misteriosa chica, pensando porque quería acercársele, el únicamente deseaba estar a solas con su soledad, pero luego ve que ella estornuda entonces se detiene y se para en frente de ella.
- Tonta así te resfriaras. - Se saca su abrigo y se lo pone en su espalda caballerosamente.
- Dime ¿tú madre no te espera en casa? - Mira hacia el césped y luego al cielo mientras las gotas golpeaban sus ojos negros, tan pálidos como la luz de una estrella agonizante.
- ¿Cuales son tus verdaderas intenciones o por qué querrías ayudarme?
Luego del gesto de amabilidad que ese joven había tenido con ella, se le quedo mirando, y se perdió en los ojos negros que el tenia tan impresionantes para ella, por un momento no sintió nada mas que el calor que el le brindaba con su abrigo, se paro lentamente y lo volvió a contemplar con mucho mas interés que antes.
- Mi madre sabe que voy a estar bien, no hay nada de que preocuparse. - mientras miraba el césped el cual estaba mojado, para luego quedarse callada por un momento
Luego subió la mirada, miro el cielo y le contesto lo ultimo que el había preguntado tan insistentemente.
- ¿Tu crees que todas las personas han de tener intenciones de algo? tan solo te quiero conocer más ¿qué eso no esta permitido? - Dekar solo observo el cielo confundido por sus palabras
- Dime ¿cómo me ayudarías? - Luego se le forma una sonrisa maquiavélica pensando en una forma de alejarla entonces le pregunta como se llamaba su novio con bastante interés, esperando respuesta se pone de pie y comienza a caminar un poco hacia un árbol, luego se recuesta debajo de el esperando con calma.
Ella observo como se dirigía hacia el árbol, camino algo indecisa hacia ese lugar, quedándose parada por un momento y mirando como el se recostaba.
- La única forma de poder ayudarte, seria conociéndote más ¿no crees?- soltó un suspiro y se sentó a su lado mirando el cielo, finalmente respondió.
- Y no, no tengo novio ¿tu tienes novia? – le mira algo confundida.
- Si tu. – Dekar sonríe con malicia, entonces mira hacia ella y acaricia su rostro dulcemente, acerca sus labios hacia ella solo rozándolos.
- Dime ¿te interesaría hacer un trato conmigo? yo are lo que desees y tu serás mía. -se pone de pie y comienza a caminar dejándola sola.
- Decide. - Dekar pensaba que con eso por fin lo odiaría, ya dejándolo solo y en paz
El logro que ella se sonrojara mucho, que los latidos de su corazón se aceleraran rápidamente, no lograba articular ni una sola palabra, su mente no respondía y cuando le había dicho todo eso, tan solo se quedo observando como empezaba a caminar, para luego reaccionar y se levantarse, lo sujeto del brazo, y miro el piso con un leve sonrojo en sus mejillas, finalmente le hablo en voz baja.
- ¿Qué gano yo si hago ese tipo de tratos? ¿Y que pasaría si le dijera que puedo acceder a su propuesta? - El sonríe triunfal ante su respuesta.
- ¿Cuánto quieres por ser mi pareja?- Le dice con malicia, luego mira hacia otro lado y un latido rápido de su corazón logro lastimarlo, sintiendo aquella molestia solo cerro los ojos sin saber porque sintió aquel dolor y se dirijo a ella.
- Mira tendrías muchos privilegios al aceptar mi trato y quizás logres una meta en donde muchas han fallado. - Entonces sigue caminado hasta llegar a la esquina en donde la espero tomándose su tiempo.
Ella se quedo indignada por lo que le había dicho, no deseaba dinero, tan solo conocerlo, tenia que pensar algo rápido, hasta que luego de un buen tiempo de reordenar sus ideas, contemplo el cielo el cual mostraba un sol brillante y un cielo despejado, le sonrío como de costumbre y hablo con delicadeza.
- No quiero nada de eso, el dinero me importa en absoluto, si de esa forma yo puedo conocerte más aceptare. - Dekar le respondió con maldad.
- Recuerde que solo es un juego no me interesa en lo más mínimo sus sentimientos. - La beso con ternura y rápidamente se alejo riéndose de ella con una crueldad extremadamente dañina.
- ¿Por qué te interesa lastimarte a ti misma? - La miro de pie a cabeza recorriendo todo su cuerpo hasta que se detuvo en sus ojos, finalmente agrega.
- ¿Eres masoquista?
El logro que ella se sonroja más, no pudo reaccionar rápidamente ni defenderse, observo como el se alejaba, levanto su mano lentamente y se toco los labios en donde el los había besado suavemente y luego hablo.
- ¿Por qué crees que me lastimaría yo? - Le sonríe con mucha calma.
- Tu también podrías salir lastimado ¿no crees? - Continúa respondiendo con serenidad.
- ¿Crees que me enamoraría de una niña tonta como tu? - Dekar se ríe de ella cruelmente, entonces le abraza con cariño.
- Ahora que eres mía nadie más podrá tenerte niña.
- Uno nunca sabe ¿como estas tan seguro que me voy a enamorada yo de ti?- dice suavemente mientras le da un pequeño beso en la mejilla.
- Yo solo quiero conocerlo más. – agrega finalmente con una simpática sonrisa
Dekar comenzó a caminar pero antes le toma la mano y le sonríe como ella le había enseñado, ya no era el mismo ahora mostraba más ternura hacia ella, aunque no se podía saber si solo jugaba inocentemente haciéndola bailar al sonido de sus garras cortar el aire en un rango en cual no pudiera escapar o realmente se estaba encariñando con aquella niña, pero misteriosamente en el se veía una persona distinta.
- Acompáñame quiero tenerte conmigo un tiempo más. – Le susurra al oído románticamente.
Aunque en el existían muchas dudas y miedos, solo esperaba que al pasar el tiempo pudiera descubrir la felicidad que aun le faltaba.
Ella lo acompaño hacia donde se dirigían, sentía alegría el saber que podría mejorar un poco más, le sonrío como siempre lo había hecho, quería conocerlo mas a fondo, cuando llegaron hacia el lugar en donde el la había dirigido, se quedo observando el lugar, de alguna u otra forma presentía que había cambiado un poco, o esa era la gran imaginaron que ella tenía, se sentó a su lado, y al cabo de un tiempo, lo miro a los ojos y le hablo con sinceridad.
- Le propongo algo ¿si? – Le comenta con alegría.
- Nos haremos preguntas para conocernos más y así sabre más de ti ¿qué opinas?
El hace una mueca y responde desganado.
- ¿Qué lograras con eso? te dije que jugaría contigo a que eres mi compañera de vida, no que me conocerías. - Mira hacia otro lado y se queda callado por varios minutos entonces agrega.
- Mañana te pasare a buscar para ir al colegio así que estate lista ¿de acuerdo? - Suelta su mano y mira la hora preocupado.
- Debo irme mañana a las 7:30 te pasare a buscar ¿oíste?- Camina y comienza a irse sin ni siquiera despedirse.
Ella hizo una mueca de tristeza, por un momento había creído que podría ser diferente, pero fue todo lo contrario, se quedo observándolo como se iba y sin que el lo pudiera escucharla ella le dijo con una voz débil.
- Si, esta bien... - Que ganaba con todo eso, tan solo saber porque era su actitud así, al cabo de un tiempo, y de pensar más las cosas, suspiro para si misma, no se iba a rendir tan fácil, habían muchas otras formas de conocerlo o volverlo dócil.
Luego de quedarse un tiempo en ese lugar, se marcho a su casa para esperar al día siguiente, el cual no sabría que ocurriría al verlo llegar. Al día siguiente Dekar salio sin que se dieran cuentas los sirvientes, tomo la llames del deportivo que nunca había conducido antes por nunca querer ser como su padre, entonces salio del largo jardín y comenzó a conducir por la calle con lentitud hasta llegar a la casa de aquella niña, toca el timbre y sale la madre la cual se sorprende a ver un chico tan elegante y tan sombrío por sus vestimentas negras. No había visto a un chico como el antes por su casa, lo miro con detenimiento.
- ¿Qué desea? - Mientras lo volvía a mirar más con más recelo que antes.
- ¿Busca a alguien o necesita algo? – Sigue interrogándolo desconfiadamente.
Cuando Nagisa escuchó el timbre bajo lo más rápido posible, se había olvidado totalmente de comentarle a su mamá que la iban a recoger, pero para cuando ella bajo las escaleras ya era demasiado tarde, finalmente hablo un poco con timidez.
- Mamá es para mí… -Pero vio como su madre ya estaba hablando con ese joven y ya no podía hacer nada aunque lo quisiese.
- Discúlpeme pero… ¿quién es usted? - Pregunta con cara de indignación, Nagisa se sonrojo, sabía que a su madre le molestaría mucho su actitud y esta reacciono en un instante.
- ¿Usted jovencito qué pretende? – Siguió preguntando con descaro hacia el extraño presente.
El no respondió solo al verla a ella se inclino ante su hija y beso su mano con formalidad y le sonrío, entonces se fue hasta su vehiculo y le espero pacientemente, claro que esa acción sorprendió mucho a su madre la cual le dijo.
- Mamá espera... - Nagisa miro a su madre tratando de hacer que se callara antes de que la situación empeorara.
Dekar miro a la madre de aquella niña y le sonrío únicamente a su hija como desafiándola.
- ¿Estas lista Nagisa para irnos a clases?- Camina hacia la entrada del jardín de la casa y mira la hora, aunque eso no le preocupaba en nada, el tiempo era lo ultimo, solo quería pasar un día con ella a solas, finalmente suspira y espera tranquilo apoyado afuera del vehiculo.
Nagisa se sonrojo un poco, le dedico otra sonrisa, miro a su madre y le dijo por lo bajo.
- Cuando regrese te explicare todo, te lo prometo. - Le dio un beso en la mejilla y con esto, camino lentamente hacia el vehiculo, le mira dulcemente y le comenta apropósito.
- Hoy te vez bien. - mientras se sonroja un poco para luego volver a hablar.
- ¿Y bien nos vamos? - Pregunta curiosa.
- Vamos- Le abre la puerta del vehiculo formalmente para que subiera, luego sube el y comienza conducir lentamente hasta desaparecer de la vista de la madre de la niña, entonces le dice con una sonrisa.
- Hoy no iremos a clases... quiero pasar el día contigo. - Justo pasa por el colegio y agrega,
- Si no quieres puedes bajarte ahora e ir clases. Mira hacia el otro lado deseando que se quedase.
Ante la propuesta que le había hecho, se sorprendió demasiado, entre asistir a clase o pasar un rato más con el, era algo realmente tentador, se mordió el labio tratando de pensar en que hacer, miro varias veces al colegio y luego paso su mirada hacia la de él, escoger podría ser muy fácil.
Sonrío como tantas veces ya había hecho antes.
- Esta bien, pasare el día contigo, por un día que no vaya clases no creo que pase algo malo.- Luego de esto se quedo pensando un momento y volvió a hablar.
- Y bien… ¿a dónde iremos hoy?
- Iremos a un parque que inauguran hoy dentro de una hora. - Le toma del rostro delicadamente y lo acerca al suyo besándola con ternura en sus labios, noto que ella no respondía, pero se sonrojaba demasiado por un simple beso sin sentimiento, entonces mira su cuerpo y le dice.
- Que bien te queda el uniforme... - finalmente enciende el vehiculo y van al parque en el cual hicieron el trato cambiara un poco su vida.
Ella se sonrojo mucho, era difícil no hacerlo, de cierta forma se sentía feliz poder pasar tanto tiempo con el, eso la mantenía muy alegre, aunque reconoció que le faltaba mucho por conocer de él, volteo un poco sonroja y le dijo en voz baja.
- Gracias... pero mejor vámonos ya antes de que alguien nos vea. - Dekar comienza a conducir hacia el parque mientras observaba el paisaje entonces de golpe se detiene y mira colina en donde pasaba siempre unos momentos disfrutando del aire fresco de la mañana.
Ella se quedo observando hacia donde la llevaba, era maravilloso poder estar a su lado, aunque no quisiera decir nada de él, ella ya vería la forma de como hacerlo sutilmente, de manera tímida, lo tomo de la mano, esperando que no la separara de la de la suya, le dedico otra sonrisa.
- ¿Ya llegamos? – Pregunto alegremente.
- Espera me gustaría parar un momento aquí.- Se baja y le abre la puerta educadamente, luego camina hacia el césped y se recuesta en el, eso demostraba que no era tan diferentes después de todo, cerro los ojos disfrutando el aire fresco, entonces soltó un suspiro y miro a Nagisa a los ojos diciéndole
- Me gusta este sitio, me hace olvidar todos mis problemas… ¿ves aquel gran árbol viejo? – Va hacia el, lo observa cuidadosamente.
- Aquí me encontré por última vez con mi hermana mayor... le extraño mucho, era la única que me comprendía en casa, pero ya nunca volverá. - Sonríe amargamente.
Nagisa al escuchar aquellas palabras, tan solo lo quedo observando, indagando en su mirada tanto como pudo, le dedico una sonrisa y lo abrazo, tan solo esperando que el no lo rechazara y luego de estar un rato de esa forma con él, lo miro y se atrevió a preguntar.
- ¿Y qué paso con tu hermana? ¿Dónde se marcho? – Pregunta inocentemente mientras lo miraba con más curiosidad.
El evita su mirada y suspira suavemente con tristeza mientras se acerca al árbol apoyándose en el mirando hacia el cielo.

- Mi hermana era la mejor en toda la familia... inteligente, elegante, amable y sobre todas las cosas alguien de buen corazón a diferencia de mi madre. - Se tomo su tiempo para pensar que decirle para no rebelarle tanto.

- Tenia un gran futuro comprometedor por delante, mientras yo me dedicaba a ser el rebelde y desobedecer a mi padre ella era muy aplicada a sus estudios. - Hace una mueca y en un momento a otro se enfada con sí mismo.

- Ella siempre me protegía ante cualquier problema y nunca me dejaba solo... un día ella en camino de a la universidad tubo un inconveniente fatal y jamás regreso a casa... el automóvil que transportaba mi hermana hacia la universidad fue impactado por otro volcándolo totalmente, dicen que mi hermana no murió en el acto sino cuando el combustible se encendió y fue consumida en llamas. - No pudo evitar dejar escapar una lágrima en su mejilla sintiéndose culpable de lo ocurrido.

- Ya pasaron varios años desde entonces y ya otra persona ocupa el lugar de mi difunta hermana Remilia. - Sonríe pensando en alguien muy especial para él, Nagisa noto el rápido cambio de lágrimas a una sonrisa calidad, supuso que ese alguien era una persona muy especial para él. Sin darse cuenta pensó en voz alta haciendo que Dekar oyera su pregunta curiosa.

Al instante se termino arrepintiendo pero de la mejor forma posible le dedico una cálida sonrisa y se acerco a él. Tímidamente tomo su rostro y lo abrazo, esperando a que él la rechazara por completo y la alejara de su lado pero se quedo allí sin decir nada.

- Aunque alguien ocupa el lugar de tu hermana Remilia - dijo Nagisa cuidadosamente - ella nunca dejara de ser tú hermana, nunca dejara de ser lo que significo para ti. De seguro ese alguien debe ser una persona muy especial para ti - le sonrió apartándose un poco -

- Remilia aún vive en ti... deberías de recordar eso siempre. El día en que te olvides de ella. Ese será el día en el que habrá muerto para siempre, por qué no quedará ni en tu propia memoria. Aunque los demás no la quieras recordar tú si lo haces
Después de sus palabras se formo un amplio silencio en donde Nagisa se dedico a observar aquel árbol viejo, luego camino hacia el lado de Dekar y lo tomo de la mano de manera decidida, este se le quedo observando en silencio y no digo nada mas

- ¿Me prestaras este lugar a mi también? Para poder venir aquí a olvidar los problemas que tenga - le sonrió ampliamente observándolo esperando a su respuesta.

El solo se mantuvo en silencio disfrutando su compañía.
- Esa persona es muy especial para mí, no te imaginas cuanto...- Le sonrió dulce besando su mejilla con cariño*

- Este árbol aunque sea mi lugar para escapar de los problemas del mundo no me pertenece, eres libre de venir aquí a buscar paz y calma cuando lo desees.

- Aunque mi hermana Remilia ya no esté conmigo se que de alguna forma una parte de ella ha quedado en mi interior esperando el momento para hacerme entender cosas que en su tiempo cuando me las dijo no supe comprender. - Miro la hora y noto que se ya se había hecho algo tarde para seguir con lo que habían planificado para el resto del día.
- Creo que sería mejor que vuelvas a casa ya terminaron las clases de hoy y seguro tu madre debe estar preocupada porque vuelvas a casa. Sin soltar su mano la guio hasta el automóvil la cual le ayudo a entrar caballerosamente para luego tomar su lugar y marcharse hasta casa de Nagisa.

- ¿Te parece si el sábado vamos al parque a divertimos? según oí hay atracciones nuevas excelentes, además aquella persona que te hable me pidió hace tiempo que la llevara allí, podría conocerse de paso. - Nagisa asintió con la cabeza mientras le sonríe dulcemente, solo le bastaba esperar con ansias el sábado para poder volver a estar con él y conocer aquella persona que Dekar aprecia tanto, al fin sabría más de su vida.


Nota de autores: Sí, buenos días/tardes/noches. Me presento soy Nagisa, y esta historia que decidí compartir en la zona de originales aquí en FFL, hace mucho tiempo que estaba por aquí, hace 5 años atrás creo yo, por eso tengo una ficha amplia, que no me gustaría recordar cuando esto estaba por Cz. Awhh que tiempos aquellos, esta historia fue hecha en compañía de Dekar, por eso es que ambos somos los autores de esta historia, mi compañero inigualable en todo, en las buenas y en las malas, el que me toma de la mano y yo la suya, mi motivo y el que me acelera el corazón descaradamente (tenía que decirlo .w.) y vamos por el mundo con nuestras locuras, aventuras y traumas. Por eso dejamos que nuestra imaginación vuele. Bien pues, esta es una de nuestras historias. Una muy vieja, este capítulo tiene alrededor de 5 años de antigüedad al inicio de su creación tiene muchas modificaciones, y varias partes avanzadas, nada compartirlo y espero que les guste. Fue en nuestros mejores momentos de inspiración en dónde uno saca a flote todo lo que tiene. Por eso, es original. No se basa en ningún anime en especifico ni videojuego, salvo los nombres que no tienen relación entre sí. Espero que les guste y lo disfruten tanto como nosotros lo hicimos al crear esta historia. Ya saben un pequeño tesoro escondido que decidimos sacar a flote. Ya que les di una pequeña explicación de "nosotros" los autores, esperamos seguir con la historia. Nos vemos pronto. Hasta luego