La travesía de Pikachu

Hola a todos, este es mi primer escrito aquí así que recibiré gustoso sus comentarios, que lo disfruten. n.n

La travesía de Pikachu ​

Prólogo​

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Recuerdo…

Era una noche realmente lluviosa, los relámpagos y los truenos se hacían notar…Recuerdo, una batalla…Si, una batalla, en un acantilado, pero, ¿Con quién era? Recuerdo que era contra un…Onix, pero no recuerdo quién era mi entrenador, sólo recuerdo su voz…

— ¡Pikachu, utiliza Volteo Rayo! —Recuerdo que me dijo eso, realmente desesperado, entonces yo empecé a cargar mi ataque.

— ¡Eso no funcionará!, ¡Onix, utiliza Excavar! —Gritó el entrenador de aquel Onix, tampoco recuerdo su rostro.

Onix se metió bajo tierra antes de que yo ejecutara mi ataque, luego me golpeó muy fuerte, volé por los aires y me estrellé fuertemente contra el suelo. Empecé a luchar por levantarme, pero estaba perdiendo el conocimiento, sólo escuchaba los gritos de mi entrenador…

Recuerdo que luego de eso, el acantilado empezó a colapsar, haciendo que Onix, mi entrenador y yo cayéramos al agua, y el entrenador de Onix estaba parado en el borde del acantilado, él logró salvarse…Trataba de moverme, pero mi cuerpo no respondía a mis ordenes, después de un rato perdí de vista a mi entrenador, pero escuchaba sus gritos.

— ¡Pikachu!, ¡Pikachu! ¡No te preocupes, te encontraré! —Gritaba él, mientras nos alejábamos más y más el uno del otro…

Luego de eso, perdí el conocimiento, y quedé flotando en el violento mar de esa noche…No recuerdo nada más después de eso…

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Capítulo uno: ¿Dónde estoy?​

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Empezaba a despertar, era de día y el sol brillaba con fuerza…Estaba en una playa, no había Pokemon ni humanos a la vista. ¿Dónde estaba? No recuerdo una playa así en ninguna parte de la región Kanto.

Lentamente, empecé a levantarme, pensando en lo que había pasado la noche anterior, trataba de recordar el rostro de mi entrenador, el por qué estábamos luchando con ese hombre…Y sobre todo, ¿Dónde me encontraba?.

Seguí caminando sin rumbo por la playa hasta que llegué a un tipo de escaleras, rápidamente las subí y llegué a una especie de ciudad. Miré hacia todas las direcciones, estaba realmente desorientado, estaba seguro de que nunca había visto una ciudad como esa en ninguna parte de Kanto, y esos Pokemon…Son extraños, nunca había visto Pokemon como esos…Empecé a caminar por la ciudad sin rumbo alguno, mirando por todos lados, luego sentí que alguien me seguía, miré para atrás y no había nada, tal vez era mi imaginación…O tal vez no.

Continué mi camino y ese ser seguía siguiéndome, ahora si estaba seguro, entonces traté de atraparlo. Me metí por un callejón y ágilmente me trepé por la pared, luego vi a ese ser que me seguía, parecía un Pokemon, pero jamás lo había visto. Me bajé de la pared y lo sorprendí.

— ¿Quién eres? o ¿Qué eres? ¿Por qué me sigues? —Le pregunté, a lo que el se sorprendió y volteó a mirarme.

— ¡Hola! Soy Shinxy, un Shinx, te ví en la playa y te estoy siguiendo desde entonces —Me dijo ella, parecía amistosa. — No eres de por aquí ¿O si? Eres un Pokemon muy raro, nunca te había visto. ¿Quién eres? —Preguntó, mientras me examinaba con la mirada.

—Soy Pikachu, es un gus… ¡Deja de mirarme como si tuviera bichos en la cara! —Le dije, ya que esa mirada me incomodaba.

— Lo siento…—Me dijo apenada— Pero, es que eres interesante, había oído que los Pikachus son de la región de Kanto, pero eso está muy lejos…¿Cómo llegaste a Sinnoh? —Me preguntó ella, lo cual me sorprendió.

— ¿S-sinnoh? ¿C-como que Sinnoh? Esto es Kanto…¿O no? —Dije balbuceando.

— ¡No! Estás en Ciudad Marina, En la región de Sinnoh —Me dijo ella, y la impresión me hizo desmayarme.

Luego de unas horas desperté en una especie de cama pequeña, no había nadie a mí alrededor, creo que estaba en una casa. Me levante y empecé a recorrer la casa, era muy grande, luego me volví a encontrar con Shinxy

— ¡Despertaste! ¿Por qué te desmayaste? ¿Te sientes mal? —Me preguntó ella, preocupada.

— No, es sólo que estoy confundido. —Le dije— ¿A dónde me trajiste?

— ¡Esta es mi casa! ¡Puedes quedarte aquí cuanto quieras! —Me dijo ella, sonriente.

—Gracias —Respondí — ¿Sabes quién me puede ayudar? Necesito volver a Kanto. —Le dije

—Bueno, podemos hablar con el padre de María, mi entrenadora, maneja un barco que puede llevarte a Hoenn, y de ahí, puedes tomar otro para llegar a Kanto —Me dijo ella, lo cual me hizo poner muy feliz —Pero, el padre de María trabaja en ciudad Puntaneva, y eso queda un poco lejos —Cuando dijo esto, mi sonrisa se borró.

Necesitaba volver a Kanto de cualquier manera, necesitaba recordar y necesitaba encontrar a mi entrenador, para ello, debía embarcarme en la mayor aventura de mi vida.

— Bien, muchas gracias Shinxy, de veras. —Le dije a ella, sonriendo.

— ¡No es nada! Pero, dime… ¿Cómo llegaste aquí, Pikachu? —Me preguntó ella.

Le narré todo lo que ocurrió, o al menos, lo que recordaba, le hablé sobre la batalla, sobre lo del acantilado y ella me ponía atención en cada palabra que decía.

— Valla, debe ser frustrante llegar a un lugar desconocido sin recordar bien lo que sucedió —Me dijo ella — ¡Pero no te preocupes! Yo te ayudaré a volver a Kanto sano y salvo, y te ayudaré a encontrar a tu entrenador —Finalizo ella, a lo cual yo sonreí.

Al día siguiente, Shinxy y yo fuimos al patio, donde siempre se encontraba María, según Shinxy, ella tenía la habilidad de escuchar y hablar con los Pokemon como si se tratara de humanos. María tenía el cabello de un peculiar color azul y largo hasta la espalda, también tenía unos hermosos ojos azules como el cielo.

— ¡María! ¡María!, ¡Tengo un nuevo amigo! —Le dijo Shinxy a María, ella se encontraba sentada en la entrada del patio, parecía deprimida.

— ¿Huh? Un Pikachu, que lindo ¿Qué hace aquí? —Preguntó María, tomándome en sus brazos.

Shinxy le explicó a María todo, cómo llegué hasta aquí, le explicó que yo no recordaba nada y también le dijo que necesitaba volver a Kanto para encontrar a mi entrenador.

— Muy bien, entonces yo los acompañaré en esta aventura, si a ti no te importa, Pikachu —Dijo María, dándome un abrazo.

María entró a la caza y se preparó para ir a Ciudad Puntaneva junto a Shinxy y yo, cuando salió de su casa, nos enseñó un mapa.

— Bien, primero hay que ir por la Ruta Doscientos veintidós y Doscientos catorce, para llegar a Ciudad Rocabelo, ahí descansaremos y luego seguiremos hasta el monte corona, cuando lo crucemos, debemos recorrer el largo trayecto nevado para llegar a Ciudad Puntaneva, donde veremos a mi padre —Nos explicó María, luego guardó el mapa y empezamos nuestro viaje —Debo decir que estoy nerviosa, nunca había salido de aventura —Siguió María, lo cual me sorprendió un poco.

— ¿En serio? Bueno, yo recuerdo haber recorrido todo Kanto, y también recuerdo algo llamado…Liga Pokemon…De ahí en adelante no recuerdo nada más —Dije yo, algo deprimido.

Seguimos caminando por la ciudad hasta que llegamos a la ruta doscientos veintidós, donde estaba la playa donde desperté, luego empezamos a recorrerla, cuando alguien llamó a María desde la distancia, parecía un chico, era robusto de ojos negros y a su lado tenía un Pokemon.

—Hey, María, veo que tienes un nuevo Pokemon, ¿Es igual de débil a tu Shinx? —Dijo el chico, con una sonrisa burlona.

—Eso no te interesa, por favor, déjame en paz —Respondió María, un poco deprimida.

—Vamos, ¿Tienes miedo de que mi genial Bidoof venza a tu Pikachu como lo hizo con tu Shinx? —Siguió el chico, empezaba a enojarme.

—María, déjame luchar —Le dije cargando electricidad en mis mejillas, a lo cual, ella accedió.

El Bidoof utilizó Tackleada, lo esquivé con facilidad, luego María me dio la orden de utilizar Impactrueno, pero ese ataque lo olvidé hace mucho, así que utilicé rayo, dejando fuera a Bidoof de un solo golpe. El niño agarró a su Pokemon y se fue llorando.

— ¡Eres fuerte! —Dijo María, abrazándome.

— Gracias, entrené mucho para ser así —Le dije yo.

Luego de esto, caminamos hasta la ruta doscientos catorce, ahí luchamos con varios entrenadores, le expliqué que los Pokemon ganan experiencia cada vez que luchan, pero luego, vimos una especie de lago, estaba rodeado por unas personas con atuendo extraño, estaban metiendo algo grande en el lago… ¡Era una bomba! Rápidamente empujé a María hacia unos arbustos y los hombres extraños se alejaron del lago, luego accionaron el botón y la bomba estalló, haciendo que Shinxy, María y yo, saliéramos volando.

 

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Capítulo dos: Equipo Galaxia​

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Estaba aturdido, la explosión de la bomba me mandó a volar y me hizo chocar con un árbol, vi a María, estaba desmallada a unos tres metros de mi posición y Shinxy estaba junto a ella. Me reincorporé y traté de despertar a María y a Shinxy repetidas veces, las moví, las piqué con un palo, salté sobre ellas, pero nada de eso funcionó, así que estaba dispuesto a darles un pequeño choque eléctrico, pero cuando estaba cargando la electricidad en mis mejillas, los tipos de antes volvieron al lago.

Rápidamente arrastré a Shinxy y a María hacia los arbustos para que esos tipos no nos vieran, ellos se dirigían al lago, que después de la gran explosión quedó completamente vacío. En el fondo se podía ver una especie de cueva, esos tipos se dirigían a ella y yo decidí seguirlos.

Al llegar a la cueva, dentro era completamente hermoso, la luz del sol se reflejaba en el agua que había en el suelo y se iluminaba toda la cueva con un brillo muy bello. En el corazón de la cueva había algo flotando, parecía un Pokémon y esos tipos estaban dispuestos a capturarlo.

— Señor Helio, tenemos a Azelf frente a nosotros, esperamos sus órdenes— Dijo uno de ellos por medio de un comunicador.

Luego de esto, Azelf empezó a emitir un brillo azul y huyó de la cueva a toda velocidad, casi instantáneamente, después los tipos del traje estrafalario intentaron seguirlo, pero cuando esto pasó llegaron María y Shinxy.

— ¡Alto ahí, Equipo Galaxia! — Gritó María.

¿Equipo Galaxia? ¿Acaso se refería a esos extraños tipos de peinado en forma de orinal y traje de astronauta? Estaba un poco confundido, no sabía que querían esos tipos con aquel Pokémon, así que intenté preguntarle a María.

— Así que nos conoces ¿Eh? —Me interrumpió uno de esos tipos —Es extraño, ¿Quién te habló de nosotros? —Prosiguió él.

—La noticia llegó hasta ciudad Marina — Dijo María — El Equipo Galaxia, un grupo de lunáticos que deseaban ‘’Un mundo perfecto’’ utilizando a los Pokémon como herramientas, por poco logran su objetivo, de no ser por el gran héroe de Sinnoh, León, él detuvo al jefe del equipo Galaxia, Helio, en el Monte Corona, ya que Helio trataba de apoderarse de Dialga y Palkia, pero luego Giratina llegó y luego ambos fueron llevados al mundo distorsión, pero Helio no logró salir…Aunque, al fin y al cabo, lo logró de alguna manera — Finalizó ella.

Estaba sorprendido por lo que acababa de escuchar, si todo lo que había dicho María era cierto, había que detener al equipo Galaxia a toda costa. En ese momento estaba pensando en un millón de cosas, pero los del equipo Galaxia me sacaron de mis pensamientos.

— ¡Muy bien, niña! —Dijo el tipo —Pero sabes demasiado, debemos acabar contigo. —Concluyó él, sacando su Pokébola de la cual salió un Pokémon muy raro, de apariencia metálica y circular.

— ¿Qué es esa cosa? — Le pregunté a María.

— Es un Bronzong, tipo Psíquico/Acero, así que utilizaré a un tipo fuego — Me dijo María, sacando una pokebola. — ¡Ve, Growlithe! —Gritó, arrojando la pokebola de la cual salió Growlithe.

Al fin, un Pokémon que yo conocía, si ese tal Bronzong era tipo Acero, Growlithe tenía mucha ventaja en esta batalla. María le ordenó a Growlithe utilizar Lanzallamas, el cual le dio de lleno a Bronzong y lo debilitó mucho, luego Bronzong utilizó amnesia y confundió a Growlithe un poco, luego de eso utilizó placaje, aunque no le hizo mucho daño a Growlithe. Después, Growlithe salió de los efectos de la amnesia y utilizó Colmillo Ígneo, venciendo a Bronzong por completo.

— ¡Rayos! —Gritó el tipo del equipo Galaxia — Muy bien, veamos si ahora puedes con mi próximo Pokémon —Continuó él, sacando su pokébola.

Al lanzar la pokebola, salió un Pokemon parecido a un globo, María me dijo que su nombre ere Driffblim, ahora la batalla era entre Driffblim y Growlithe.

Growlithe atacó a Driffblim con Ascuas, y le hizo algo de daño, luego Driffblim utilizó Vienaciego y golpeó a Growlithe con golpe crítico. Luego de esto, Growlithe utilizó un Lanzallamas más fuerte de lo normal y le dio a todo el mundo, incluyéndome a mí. Growlithe logró vencer a Driffblim, pero ahora estabamos todos chamuscados.

— Qué lanzallamas tan potente…—Dijo el otro miembro del equipo Galaxia — Nos volveremos a encontrar, niñita, la próxima vez me las pagaras. —Concluyó aquél hombre, para después salir de la cueva con su compañero a toda velocidad, pero a uno de ellos se le calló una especie de roca.

— Una piedra fuego —Dije yo, tomando la piedra en mis patitas.

— ¿Para qué es eso, Pikachu? —Me preguntó María, con Growlithe en sus brazos.

— Con esto, Growlithe puede evolucionar en Arcanine —Dije yo.

— ¿En serio? ¡Eso es genial! — Dijeron Shinxy y María al tiempo.

María puso a Growlithe en el suelo y yo le acerqué la piedra fuego, luego empezó a emitir un brillo cegador.

— ¡Estoy brillando! ¡Voy a explotar! — Gritó Growlithe, angustiado.

— ¡Torpe! ¡Estás evolucionando! — Le grité yo, con una venita en mi frente.

Mientras aquel brillo lo cubría, Growlithe empezó a cambiar de forma y tamaño, para finalmente convertirse en un Arcanine.

— ¡Wow! ¡Ahora eres enorme! —Dijo María, abrazando a Arcanine.

— Bueno, creo que es momento de irnos. — Dije yo — Hay que llegar a ciudad Rocabelo, y de ahí partir al monte corona, para finalmente llegar a ciudad Puntaneva. —Concluí yo, mientras salíamos de aquella cueva del lago Valor.

Al salir del lago Valor que se encontraba vacío, el extraño Pokemon, Azelf, volvió a entrar a la cueva y el lago empezó a llenarse de nuevo.

Le pregunté a María quién era ese Pokémon Azelf, a lo cual ella me respondió que, cuando Azelf nació, el valor empezó a florecer en las personas, me dijo también que era un Pokemon legendario y que si era capturado, todo en Sinnoh cambiaría. Después de irnos de el lago, empezamos a recorrer la ruta doscientos catorce, había un par de entrenadores, pero fueron vencidos por mi y por Arcanine, luego llegamos a ciudad Rocabelo, pero parecía que algo estaba ocurriendo frente al centro Pokémon.

Continuara…

 

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Capítulo tres: Un nuevo amigo​

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Al llegar a ciudad Rocabelo, pudimos notar que algo ocurría en el centro Pokémon, había mucha gente mirando por las ventanas, pensamos que se trataba del equipo Galaxia, pero no era así, se trataba de un chico con cabello negro y ojos azules, tenía a un Eevee en brazos, se notaba que estaba desesperado, sentimos curiosidad, así que entramos al centro Pokémon.

— ¡Por favor, ayúdenme!, ¡Este pequeño Eevee fue víctima de los experimentos del equipo Galaxia, está muy mal! — Le dijo aquel chico a la enfermera Joy, con un tono desesperado.

— Haremos lo que podamos, por favor mantén la calma y toma asiento. — Le respondió la enfermera al chico, mientras tomaba a Eevee en brazos.

Él obedeció y se sentó en una de las sillas que había ahí, con ambas manos apoyadas en su rostro, así que María decidió acercarse a él para hablarle un poco.

— Hola, mi nombre es María, ¿Qué le pasó a tu Eevee? — Preguntó María, con una cara preocupada.

— El equipo Galaxia…— Pronunció él — Ellos estaban experimentando con Eevee, querían unir todas las piedras evolutivas para crear una única piedra, cuando se la dieron a Eevee, él reaccionó negativamente y calló inconciente. —Prosiguió él.

— ¿Tú estabas ahí? — Volvió a preguntar María.

— Si, lo ví todo, cuando notaron mi presencia tuve una batalla Pokémon con ellos y gané, luego tomé a Eevee y lo traje aquí — Dijo aquel chico.

— Pobre Eevee — Dije yo, a lo cual el chico me volteó a mirar.

— Lo sé, ese equipo Galaxia es muy cruel — Dijo el chico de cabello negro, sorprendiendo a María y a mi.

— ¡Tú! ¿Puedes entenderme? — Pregunté, desconcertado.
— Claro, puedo hablar con los Pokémon desde que era un pequeño — Dijo él — Mi nombre es Luke, soy de ciudad Jubileo, es un gusto conocerlos — Prosiguió Luke.

— Bueno, yo soy María, como te dije antes, y el es Pikachu, lo estoy ayudando a llegar a ciudad Puntaneva, necesita ir a Hoenn y de ahí partir a Kanto. — Dijo María, levantándome en sus brazos.

— ¿Cómo llegaste a Sinnoh, pequeño? — Preguntó Luke.

Le conté toda la historia, o al menos lo que recordaba de ella, le hablé sobre mi batalla contra aquel entrenador en ese risco, sobre mi llegada a Sinnoh y todo lo que había pasado hasta ahora, a lo cual él se sorprendió.

— ¿Puedo acompañarlos? — Se ofreció él — Me dirigía a Hoenn a visitar a mis tios, pero cuando pasaba por el bosque Vetusto, vi que el equipo Galaxia capturó a ese Eevee y se lo llevó a su base, yo los seguí todo el trayecto y, pues, el resto ya lo dije, entonces, ¿Puedo ir con ustedes? —Terminó Luke.

Le dimos un si, tal vez nos serviría de ayuda más adelante. Continuamos hablando y al rato llegó la enfermera Joy, Eevee ya estaba a salvo y no corría ningún riesgo, así que fuimos a verlo rápidamente. Al llegar, Eevee estaba como nuevo, nada comparado con el que habíamos visto al llegar a ciudad Rocabelo.

— ¿Estás bien, amigo? — Le preguntó Luke, preocupado.

— Si, pero… ¿Quién eres tú? — Dijo Eevee, confundido.

— Soy Luke, yo te salvé del equipo Galaxia, y ellos son mis amigos, María y Pikachu. — Dijo Luke, sonriente.

— ¿Tú me salvaste? ¡Gracias! Como agradecimiento, dejaré que seas mi entrenador, te acompañaré en tus viajes. — Dijo el Eevee, con cara de felicidad.

Luke estaba contento, así que sacó una Pokebola y metió a Eevee en ella, finalizando su captura, y después de un rato, lo sacó y Eevee se subió a su cabeza. Salimos del centro Pokémon y empezamos a recorrer la ciudad Rocabelo, pasamos por la gran tienda que había allí y compramos unas provisiones, después pasamos por el casino y jugamos un rato, y luego empezamos a entrenar en un campo abierto, Luke quería tener una batalla Pokémon con María, así que nos preparamos. Ella me eligió a mí para la batalla y Luke sacó una de sus Pokebolas.

— Bien, Pikachu, veamos de que eres capaz. —Dijo Luke, preparando su Pokebola. — ¡Luxio, yo te elijo! —Gritó, lanzando su Pokebola, de la cual salió un Pokémon parecido a Shinxy, pero este era más grande y tenía un pelaje negro como melena, seguramente era la evolución de un Shinx, jamás lo había visto.

— ¡Oh, tienes un Luxio! — Dijo María, sorprendida — Esta batalla será interesante, ¿Estás listo, Pikachu? — Me preguntó, a lo cual yo asentí.

Luxio atacó primero, utilizó mordisco, yo lo esquivé y usé cola de acero, lo golpeé en el lomo y él retrocedió, después empezó a cargar electricidad, estaba utilizando carga para potenciar sus ataques eléctricos, mientras él hacía eso, yo usé Tackleada de Volteos, dándole directamente, luego Luxio utilizó Rayo y me hizo algo de daño, después yo usé cola de acero y tomé impulso hacia arriba, para finalizar con Impactrueno, dejando a Luxio fuera de combate.

— En efecto, eres fuerte. —Dijo Luke, guardando a Luxio — Te felicito, María, eres buena coordinando a tus Pokémon. —Finalizó él.

— Gracias, Luke, pero el que hace todo es Pikachu —Dijo María, levantándome en sus brazos.

Volvimos al centro Pokémon para pasar la noche, descansaríamos ahí para al otro día partir al Monte Corona. Ya era tarde en la noche y yo no podía dormir, estaba pensando en todo lo que había pasado, y estaba frustrado al no recordar nada, así que decidí levantarme y dar una vuelta nocturna.

Salí del centro Pokémon y empecé a caminar, luego de caminar un rato, sentí que alguien me observaba, y luego, percibí que un ataque se dirigía hacia mí, entonces lo esquivé.

— ¿Quién es? ¡Responda! — Dije yo, con cara seria.

Entonces vi, que de las sombras salía un Charmander, estaba lleno de rasguños, y sus ojos eran rojos, me sorprendí al verlo así, traté de preguntar que le pasaba, pero el me atacó con un lanzallamas.

Continuará…