¡Hola! Gracias por aclararme, leí las normas y decidí re-subirlo incluyendo el prólogo :) La ficha: Nombre: La pulsera de Pandora. Autora: Risitas de Oro. Clasificación: ATP (Apta Para Todo Público). Resumen: Janett Myler es una estudiante de 16 años común y corriente hasta que se demuestre lo contrario... Pero ¿qué pasaría si el destino quisiera demostrarlo? Las constantes visiones de un futuro incierto, los sueños perdidos en su conciencia y la insistencia de un ente desconocido acechándola son rutina diaria para ella desde que encontró esa pulsera. ¿Podría una simple fruslería poner su mundo normal y humano de cabeza? Bueno, ahora empieza :) Prólogo:Enigma.-¡Janny la cena está lista! -gritó mi madre desde el primer piso.-¡Sí! -contesté a mi vez en la segunda planta.Una leve luz amarillenta iluminaba al completo mi nuevo cuarto. Sus paredes eran de un bonito color violeta claro y el piso de madera se lucía bajo mis pies. Ya casi había terminado de desempacar mis cosas, e informaron que papá me ayudaría a acomodar mis muebles mañana.Mañana, pensé con amargura.Por lo que alcanzaron a decirme mis padres empezaría el colegio mañana mismo, y eso me dejaría menos preparación mental.Es que, ¿quienes en estos tiempos te anuncian una mudanza con sólo 5 días de anticipación? Una única respuesta acudía a mi mente: mis padres.¿Quienes sino mis padres anuncian tal noticia a 5 días del evento? Seguro siquiera pensaron que debía explicarle a mis profesores, amigos y vecinos que me mudaba al otro lado de la ciudad. Aveces no sabía qué es lo que se les cruzaba por a cabeza cuando tomaban sus impulsivas decisiones.Caminé hacia el escritorio y me dejé caer sobre la silla. Miré las musarañas del piso un par de segundos, pero algo me distrajo. Una pequeña luz provenía del piso de madera. Moví un poco la cabeza y desapareció, pero volví a mi antigua posición y reapareció otra vez. Un impulso me incitaba a a averiguar qué era ese extraño destello.Y extrañamente, me dejé llevar.Sentí las maderas sobre mis manos desnudas mientras gateaba inconscientemente a través de la habitación.No había razón ni son, mi cuerpo se desconectó de mi mente.Acerqué mi cara para mirar a través de las rendijas del suelo, y como si lo hubiera echo miles de veces, saqué un tablón flojo del piso. Una pequeña parte de mi mente (aún ausente), se preguntaba cómo sabía que la tabla estaba floja, si era la primera vez que pisaba esta casa.Con sumo cuidado, tanteé a ciegas el desnivel del suelo.Lo último que sentí, fue algo de tacto frío contra mi piel.Y todo se oscureció.Planeo dejar la continuación una vez a la semana, extensible a dos. Si me retraso, prometo avisar ^^.¡Nos vemos!
