KUAT, EL DIARIO MAGICO.

hola, este es mi primera historia. Esta algo larga, espero k les guste pues soy una escritora en progreso jajaja.​

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DESCUBRIENDO COSAS NUEVAS.​

En Europa hace como unos 200 años en un orfanato viejo, casi se podía.... Más bien no faltaba mucho en derrumbarse en dos. Era un lugar frio, triste, escalofriante, un lugar con pocos recursos, lleno de niños con la viva esperanza de que algún día los adoptaran y tener una vida mejor, pero era casi imposible ya que era un pueblo muy pobre. ​

En ello habitaba una joven de 14 años muy bella. Era una joven de pelo café como la madera, rizado pero no muy largo, tenía una nariz respingada y pequeña, unos labios rosados muy finos , ojos muy grandes muy observadores color miel, pestañas realmente largas, rizadas y negras, un cuerpo delgado y muy alto pero lo que la hacía muy especial es que podía sanar curativamente y emocionalmente y tenía un conocimiento superior al de cualquiera solo que nadie lo sabia solo ella y su mejor amiga Luta.

-¡Lum!- gritaba Luta por el tranquilo bosque ya que sabía que ahí se encontraba su amiga Lum. A Lum le encantaba pasar la tarde en el bosque y si se lograba escapar también la noche , oyendo a los lobosa aullar, a los sapos con su CRACK, ver a los búhos como penetran en el bosque con su mirada observadora ...en fin , ver y oír a los animales y bello follaje que cubre el bosque.

Ahí estaba ella, senada en una rama de un árbol, en dirección al rio.

-Ahí estas- dijo Luta exhausta de buscarla.-Me la he pasado gritándote sin respuesta alguna. ¿Sabes?, cuando alguien te habla o te grita deberías de responder, no está mal ¡eh!

Lum volteo y empezó a bajar de ese gran árbol con las hojas rosadas pastel, un árbol perfecto para la serenidad.

-Lo siento- dijo Lum con su voz suave y ronca, y un toque de suspiros.-¿Que necesitas?.

-Pues resulta que ya casi es la hora de la cena y si no vienes la Sra. Trudi se va a enojar y ¿Qué crees?, nos va a poner trabajos extras por una semana y no sé que más sea capaz de hacer-.

Luta tomo a Lum de la mano y empezaron a correr por el bosque. La brisa les rosaba la cara. Cuando pasaron por el pueblo todo mundo las saludaba, eran unas jóvenes queridas y respetadas.

Lum se acerco a una cabaña, oía que alguien tocia sin parar, era una tos seca y horrorosa. Al acercarse a la ventana, Lum se quedo realmente aturdida, la mirada de tristeza y cansada de la pequeña niña tirada en una cama de madera de cerezo, Lum no podía mas, una lagrima le escurrió. Toco la puerta de madera clara, espero unos segundos, una señora llena de lágrimas le abrió la puerta.

-Hola Lum, ¿Que te trae por aquí?-. Se limpio las lágrimas con el delantal de seda que traía puesto.

-Me gustaría pasar-.

Se encontraba ahí, una niña alrededor de unos 5 años, pálida y sudando, se veía que tenía mucho frio y sin fuerzas.

-Pero ¿Que ha..-. Luta ya no acabo su pregunta, sabía lo que iba a ser su amiga.

Luz se acerco a la niña lentamente, extendió sus manos y las puso lentamente en el pecho, cerró los ojos y espero.

-¿Qué haces?- le pregunto la señora aterrada.

Luta le agarro la mano y le susurro que aguardara, que todo iba a estar bien.

En el pecho de la niña salió una chispa de color anaranjado y de ahí salieron más y más. La señora se quedo en shock no sabía que acababa de pasar. Lum se aparto lentamente, la niña dejo de toser y le cambio el color de la piel de un pálido amarillo a un tenue rosado.

Lum se levanto y camino hacia la puerta y le pregunto a la señora que si le podía hacer un favor. La señora tenía muchas preguntas pero solo asintió.

-No le diga a nadie sobre esto, ya sabe bruja, hoguera....-

La señora no contesto y corrió abrazar a su hija, lloraba y lloraba.

Lum y Luta salieron de la cabaña y continuaron su camino.
Al llegar la S.r Trudi las estaba esperando en la gran puerta color negro.

-¿Saben que les pasa cuando llegan tarde, verdad?- pregunto zapateando fuertemente la duela con los brazos cruzados y una mirada asechadora.

Lum y Luta cruzaron la puerta con la cabeza hacia abajo sin decir nada y se sentaron a esperar la pequeña porción de comida.

Al terminar las mandaron a bañar, pero para eso tenían que cruzar la parte la parte norte del bosque hasta llegar al rio y recoger agua y colocarla en su balde e irlo a calentar a la chimenea del orfanato. Solo que ellas casi nunca se bañaban en el orfanato, preferían bañarse ahí mismo, en el rio, jugando y refrescándose en el agua cristalina oyéndola como fluye, pero este no era el caso. Lum se sentía exhausta y deseaba relajarse con el agua caliente.

En un cuarto se encontraban pequeñas casillas de piedras grandes especialmente para bañarse. Lum se encontraba en la casilla de hasta el fondo y Luta una antes. Platicaban acerca de cuánto tiempo calculaban que las adoptarían pero Lum sabía que no pasaría.

-Vamos sabes que ya no es posible, quien va a querer a alguien de 14, casi 15, y menos en este pueblo ,tal vez cruzando el bosque, en el pueblo de los ricos-dijo Lum teniendo que aceptar la trágica idea de nunca tener una familia.

Al día siguiente Lum y Luta fueron a tomar clases a la única "escuela" que había en el pueblo. Ese lugar era el único estable del pueblo, con color y grande, pintado de baba de caracol zeta, un caracol gigante que solo se encuentra en el rio cada primavera. Cada uno tiene un color diferente según su sexo o su estado de ánimo. Bueno eso le había la maestra de historia. La mayoría venia del pueblo de el pueblo de los ricos.

A Lum le encantaba la historia y mas con la profesora Robinson, mientras que a Luta solo le gustaba, prefería bordado.

Ese día las dos salieron tarde. Cuando escuchan un <<Luta, Lum<<, Luta voltea y ve que era la profesora de historia, la señorita Robinson, una señora de apariencia joven con un gran sombrero azul pastel y un vestido largo y abultado del mismo color.

-¿Las puedo acompañar señoritas?-

Más tarde estaban platicando a la orilla del rio, cuando Lum le pregunta qué hay de diferente en el pueblo de los ricos.

La profesora las mira y les ofrece un pan acompañado de una sonrisa un poco sarcástica.

-Pues verán, hay cosas muy grandes hechas de madera y metal, hay dos escuelas iguales a estas solo que con más niños, hay muchas carretas con hermosos y fuertes caballos, hay un lago que es caliente debido que es agua de manantial, como ya les había explicado provienen de pequeños geiser, pero lo mejor o tal vez para mi es que hay una biblioteca con muchos libros de nuestros antepasados.

-Señorita Robinson ¿cree que pueda prestarme alguno de esos libros maravillosos que dice?- le dijo Lum, estaba entusiasmada con la noticia que le acaba de escuchar.

La profesora se limito a contestar y solo asintió, tomo sus lentes de armazón de oro y se levanto.

-Fue un placer haber estado con ustedes-.

Lum y Luta caminaron hacia el orfanato conversando acerco de las maravillas que hay en el pueblo de los ricos. Era su día libre y también lo seria mañana, un sábado un hermoso sábado.

-Te veo al rato estaré en mi rama-.le dijo Lum dirigiéndose hacia el árbol color rosado.

Luta entro al orfanato y se dispuso hacer una flor bordada para Lum.
Lum se quedo dormida en aquella rama grande y ancha, mientras soñaba con un baúl no lograba aclarar las imágenes, pero no logro acabar el sueño ya que un <<Lum<< muy fuerte penetro en sus oídos.

Se bajo del árbol toda adormilada y entro en el orfanato. La Sra. Trudi la recibió con un <<¿puedo hablar contigo?<<.

-Ten es u obsequio-. La Sra. Trudi le dio un hermoso camisón para dormir. Era un camisón viejo pero muy bonito de color azul con unos encajes por debajo.

Al tocar el camisón las pupilas de Lum se hicieron pequeñas y profundas ¿QUE PASO?, Lum vio una visión de una mujer muy bonita , muy parecida a ella viéndose al espejo usando el camisón.

-Pero ¿Que tienes?-. Le grito asustada.-¡contesta!

Lum inhalo y exhalo varias veces, se puso la mano en el pecho tirándose hacia el suelo.

-Nada, lo siento-

Al ver la reacción de Lum, Trudi la sentó y le dio un pan crujiente y leche de cacao caliente para quitarle el susto.

Lum entro a su cuarto y se puso el camisón, quería recordar esa rara visión.
Era un joven alta, delgada, pelo café, rizado y largo, los labios rojizos naturales y su sonrisa muy bella. Era como una sonrisa chica pero notoria, roja pero no tanto y un brillo precioso caso como el de las estrellas que acompañan el cielo por la noche.

Lum cerró los ojos lentamente quedándose dormida y entrando en un profundo sueño. De nuevo fue atacada por el mismo sueño del baúl. <<¿Qué era eso?, ¿qué era lo que invadía sus sueños?<< pensaba cada vez que se despertaba por las noches.

Trudi entro al cuarto por la mañana y despertó a Lum .

-Te hablan allá fuera- le susurro

Lum abrió los ojos y bostezo. Salió del cuarto y abrió la puerta de la entrada.

-Espero no molestar, pensé que querrías dar un paseo- le dijo la señorita Robinson.

-Claro que si-le contesto.- A ¿dónde iremos?.

La profesora le ayudo a subir a un caballo de pelaje negro brillante.

Al llegar, Lum ve que era el pueblo de los ricos y era tal como le había dicho la profesora, solo que había omitido la parte de que los hombres vestían de trajes y unos sombreros de copa, las mujeres vestidos largos, abultados con sombreros.

Para Lum era el paraíso, un mundo sin pobreza, un mundo con niños que tenían familia. Eso hizo que Lum se pusiera triste pero se le quito al instalarte al ver un gran letrero de mármol que decía "Biblioteca Robinson".

-¿Por qué nunca me mencionaste que la biblioteca era tuya?- le pregunto a la señorita Robinson con una mirada un tanto desconcertante.

-No es mía, es de mis abuelos-.

Lum miraba con asombro esos grandes estantes que tocaban el techo, lleno de libros. Lum nunca se esperaba que existieran tantos libros.

-Escoge el que quieras, seguramente a mi abuela no le molestara que te regale uno-le susurro

-¿Regalarme uno?-le dijo Lum asombrada, para ella ese podría ser el mejor obsequio de todos.<< ¡oh!, hay tantos<< se dijo a sí misma.
Pero por alguna razón, Lum se dejo llevar por un libro de el ultimo estante.<<¿por que querrá un libro abandonado?, es que hay tantos y escoge ese<< se preguntaba la señorita Robinson. Y si, estaba abandonado, tenia polvo mucho polvo.

Al llegar al orfanato escondió al caballo en una parte del bosque, lo amarro y se detuvo a verlo. El caballo tenía algo especial y lo sabia pero ¿que era?. ¿Era su cabello color negro brillante?, ¿su altura? NO, claro su personalidad. Lum podía sentir su amor, su paz, su todo, pero por muy enamorada que estuviera de ese caballo sabía que no le pertenecía.

Lum se sentó a lado del caballo y empezó a leer. Esas maravillosas redacciones se le hicieron fascinantes. Lum nunca había leído algo como eso. Hubo una parte en especial que le dio lastima, sin embargo ya no podía hacer nada era el pasado o por lo menos en algunas partes del mundo.
No podía creer como discriminaban a las brujas, hechiceras, curanderos, magos solo porque creían que lo que hacían estas personas con otros dones eran personas del mal, del diablo. En Europa y parte del mundo si eran encontradas haciendo alguna pociones curativas ( tal vez) o hablando en otra lengua eran acecinados en la hoguera, ahorcados o ahogados.

En la otra parte del mundo eran consideradas buenas personas y muy pocas iban hacia la muerte. Hubo un tiempo que fueron acecinados personas de esta clase por una enfermedad que se desato como "la peste" y pensaron que era obra suya.
Lum siguió leyendo y tan fascinante se le hizo el libro que lo acabo esa misma tarde.

Al despertar hizo sus deberes en el orfanato y al acabar salió y se fue al bosque a darle de comer al caballo sus manzanas y lo desamarro, se subió a él y los dos se dirigieron hacia el pueblo de los ricos, en realidad a la biblioteca pero estaba cerrada. Así mismo Lum regreso al orfanato desilusionada de no poder leer otro libro y que se tenía que esperar al la mañana siguiente.

El sol estaba metiéndose, ya se hacía de noche y Lum no tenia sueño. Mientras jugaba con los demás niños del orfanato a las escondidas, ve una puerta vieja y desgastada. Al abrirla se encuentra con las cosas de limpieza de la señora Adali. A Lum le pareció un lugar perfecto para esconderse pero mientras quitaba algunas cosas como la escoba y unos trapos sucios ve una escalera en forma de caracol y atraída por esta, la sube haciendo su teoría de lo que habría ahí, de lo que se encontraría ahí.

Al estar arriba ve todo oscuro así que bajo cuidadosamente por una vela. Ya estando ahí la prende y ve un cuarto grande lleno de cosas cubiertas de una manta gris, bueno solía ser blanca pero el polvo la cubrió.

Luz tenía una gran curiosidad por las cosas y nunca tenía miedo por lo que fuera a ocurrir o lo que hubiera, pero esta vez sí, al ver grandes cosas cubiertas por la manta la hacia estremecerse. Intimidaban a Lum , pero eso no la detuvo, cuidadosamente deslizo la manta más cercana a las escaleras.

Al deslizarla se encuentra con un ropero muy grande, una cama muy cómoda con cobijas acogedoras, una mesa, una pequeña chimenea con un caldero dentro y todo eso con acabados hermosos acabados de de madera de cerezo.

Lum asombrada por lo que veía, escucho la campana de la hora de la cena así que tuvo que salir del lugar porque la podrían descubrir y por algo tenían oculto ese lugar.